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Actas notariales

Según el artículo 198 del Reglamento Notarial, “los notarios, previa instancia de parte (…)
extenderán y autorizarán actas en que se consignen los hechos y circunstancias que presencien
o les consten y que por su naturaleza no sean materia de contrato”.

El objeto del acta notarial son, por tanto, los hechos, a diferencia de otros documentos
notariales, como las escrituras públicas y las pólizas, en las que se recogen contratos.  “Las
actas notariales tienen como contenido la constatación de hechos o la percepción que de los
mismos tenga el notario, siempre que por su índole no puedan calificarse de actos y contratos,
así como sus juicios y calificaciones” (artículo 144 del Reglamento Notarial).

Ello significa que el notario en las actas se limita a dar fe de hechos que percibe por sus
sentidos, aunque también de otros que no se perciben directamente por los sentidos pero que el
notario puede considerar acreditados previas las pruebas pertinentes, como en las actas de
notoriedad. Pero, en todo caso, las actas no pueden recoger contratos, propios de escrituras y
pólizas, en las que la intervención notarial es mucho más amplia.

El valor de un acta notarial reside en que prueba de manera incontestable el hecho que
constituye su objeto, sin que sea discutible ni siquiera en sede judicial, salvo querella de
falsedad. Su utilidad es grande pues permite al ciudadano pre-constituir pruebas de hechos que
probablemente habrán de ser alegados posteriormente en el ámbito judicial, administrativo o
privado, cuando quizá esos hechos ya no puedan reiterarse o probarse por haber desaparecido
sus efectos, ya se trate de manifestaciones, notificaciones, existencia de objetos, documentos –
incluso electrónicos- o personas.

Ahora bien, aunque la autorización de estos documentos es más flexible que la de las de
escrituras o pólizas, tiene también unos límites. Así, será necesario: un interés legítimo por parte
de quien inste el acta (alguna razón suficiente para inmiscuirse en la esfera jurídica de los
demás); que la conducta que se pide al notario sea legal en sí misma (que no viole la intimidad,
la propia imagen o el domicilio de los demás, por ejemplo); que no se invadan esferas judiciales
o administrativas (no cabe, por ejemplo, requerir a la Administración, que ya tiene sus canales
para este objetivo, ni recoger manifestaciones que pertenezcan al ámbito penal); que la
actuación notarial no sea sorpresiva (vgr., el notario deberá hacer saber al requerido su calidad
de notario, el objeto de su presencia, así como su derecho a contestar); que el acta no recoja
consideraciones que requieran conocimientos periciales que el notario no tiene por qué tener. En
todo caso, la actuación del notario ha de ser imparcial, pues si bien debe recoger el interés
particular del que le requiere, no puede obviar parte de la verdad que constate ni recoger
realidades que induzcan claramente a  confusión.

El acta, como documento público que es, queda custodiada en el protocolo del notario que lo
autorizó, y de ella pueden pedir copias no sólo el que la instó, sino también cualquier persona
que pueda tener interés legítimo en conocer su contenido y, por supuesto, la autoridad judicial
cuando de alguna manera incida en materia penal.

1. Actas de presencia

Las actas notariales de presencia acreditan la realidad o verdad del hecho que motiva su
autorización.
El contenido del acta se reduce a lo presenciado por el notario sin que se exijan por su parte
conocimientos técnicos propios de una prueba pericial. Dentro de este tipo de actas existen
subespecies como las de exhibición de objetos, las de entrega o de existencia de una
persona…

2. Actas de manifestaciones o de referencia

En este tipo de actas, el notario recoge las manifestaciones de una persona. Evidentemente, el acta no
acredita la veracidad de dichas declaraciones, sino el hecho de que una determinada persona hace esas
declaraciones en un determinado momento. Lo que se acredita por tanto en este tipo de actas, no es el
contenido de la declaración, sino la declaración como tal (el hecho del dicho), debiendo el declarante
asumir los efectos de su declaración, de lo que el notario le advertirá convenientemente.

3. Actas de remisión de documentos por correo

Según el artículo 201 del Reglamento Notarial: El simple hecho del envío de cartas u otros
documentos por correo ordinario, procedimiento telemático, telefax o cualquier otro medio
idóneo podrá hacerse constar mediante acta, que acreditará el contenido de la carta o
documento, y según el medio utilizado la fecha de su entrega, o su remisión por procedimiento
técnico adecuado y, en su caso, la expedición del correspondiente resguardo de imposición
como certificado, entrega o remisión, así como la recepción por el notario del aviso de recibo, o
del documento o comunicación de recepción.

Permiten acreditar el contenido y fecha de entrega de cartas u otros documentos.

4. Actas de notificación y requerimiento

El artículo 202 del Reglamento Notarial: Las actas de notificación tienen por objeto transmitir a
una persona una información o una decisión del que solicita la intervención notarial, y las de
requerimiento, además, intimar al requerido para que adopte una determinada conducta.

Las de notificación comunican a una persona una información o decisión por parte del
solicitante de los servicios del notario; mientras que las de requerimiento transmiten al
destinatario que debe adoptar una determinada conducta, como por ejemplo, pagar una
determinada deuda.  El notario puede realizar la notificación o requerimiento de dos formas:
bien  mediante el envío de la cédula de notificación o requerimiento por correo certificado con
acuse de recibo; o bien personándose en el domicilio que se le haya indicado. Este acta permite
dejar constancia de que una persona ha recibido una información o solicitud por parte de otra.

5. Actas de exhibición de cosas o documentos

El artículo 207 del Reglamento Notarial: En las actas de exhibición de cosas, el notario
describirá o relacionará las circunstancias que las identifiquen, diferenciando lo que resulte de
su percepción de lo que manifiesten peritos u otras personas presentes en el acto, y podrá
completar la descripción mediante planos, diseños, certificaciones, fotografías o fotocopias que
incorporará a la matriz. En las actas de exhibición de documentos, además, transcribirá o
relacionará aquéllos o concretará su narración a determinados extremos de los mismos,
indicados por el requirente.

El notario describe e identifica en el acta un determinado objeto en un momento puntual.


Planos, diseños, fotografías, fotocopias o declaraciones personales pueden ser objeto de la
misma. Si es un acta de exhibición de documentos, el notario debe transcribir o resumir el
contenido.

6. Actas de notoriedad

El artículo 209 del Reglamento Notarial: Las actas de notoriedad tienen por objeto la
comprobación y fijación de hechos notorios sobre los cuales pueden ser fundados y declarados
derechos y legitimadas situaciones personales o patrimoniales, con trascendencia jurídica.

Permiten constatar determinados hechos que no son directamente perceptibles pero sí notorios
y que pueden fundamentar derechos. El notario realizará las pruebas pertinentes que acrediten
la veracidad de los hechos y emitirá un juicio sobre la notoriedad o no de la situación interesada:
la fe pública cubre los hechos consignados en el acta, pero no el juicio del notario, que puede
ser equivocado. No obstante, estas actas son útiles porque crean una presunción de veracidad.

Un ejemplo, son las actas de declaración de herederos abintestato, en las que el notario


identifica a los herederos de una persona que ha fallecido sin dejar testamento.

7. Actas de protocolización

El artículo 211 del Reglamento Notarial: Las actas de protocolización tendrán las características
generales de las de presencia, pero el texto hará relación al hecho de haber sido examinado por
el notario el documento que deba ser protocolado, a la declaración de la voluntad del requirente
para protocolización o cumplimiento de la providencia que la ordene, al de quedar unido el
expediente al protocolo, expresando el número de folios que contenga y los reintegros que lleve
unidos.

Documentos públicos o privados se incorporan con estas actas al protocolo notarial, con el fin
de impedir su extravío, demostrar su existencia o su fecha o conseguir copias futuras. Si se trata
de contratos, deben haberse cumplido los requisitos fiscales, para evitar que con la
presentación al notario se inicie la prescripción del pago de impuestos; además se hará constar
que no produce la protocolización los efectos de la escritura.

8. Actas de depósito ante notario

El artículo 216 del Reglamento Notarial: Los notarios pueden recibir en depósito los objetos,
valores, documentos y cantidades que se les confíen, bien como prenda de contratos, bien para
su custodia.

El notario recibe en depósito objetos, valores, archivos informáticos, documentos o cantidades


de efectivo. El depósito puede ser confiado para su custodia o como garantía de un contrato y
debe fijar las condiciones de restitución. Cualquier depósito deberá ser examinado previamente
por el notario, para verificar que el depósito no constituye infracción de norma alguna

9. Actas de subastas

En el caso de una subasta pública, los organizadores presentan al notario las condiciones lícitas que
consideren oportunas: descripción del bien o derecho a subastar; el tipo de subasta; depósito necesario
para participar; procedimiento; plazos; lugar, día y fecha y hora de celebración; lugares dónde se
anunciará; duración…

10. Actas de sorteo

En ellas constan los ganadores de un premio, conforme a una selección aleatoria y a las normas de la
convocatoria previa. La página web del Consejo General del Notariado permite a las empresas hacer
públicas las bases de sus concursos en el Archivo Ábaco

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DOCUMENTOS NOTARIALES
Conforme a la Ley del Notariado del Estado de México, los documentos o
instrumentos que formula el notario se clasifican en escritura pública y acta notarial.
La escritura pública es el instrumento original que el notario asienta en el protocolo
físico o electrónico para hacer constar uno o más actos jurídicos, autorizados con su
firma autógrafa o electrónica y sello. Por su parte, el acta notarial es el instrumento
original que el notario a solicitud de parte, asienta en el protocolo para hacer constar
uno o varios hechos presenciados por él, autorizados con su firma y sello. A
continuación se mencionan algunos instrumentos específicos en los que interviene el
notario.

TESTAMENTO

El testamento se regula fundamentalmente en el libro sexto del Código Civil del


Estado de México, que lo define como un acto personalísimo, revocable, libre y
solemne, por el cual una persona dispone de sus bienes y derechos, y declara o
cumple deberes para después de su muerte. Cualquier persona puede otorgar
testamento, excepto los menores de dieciséis años y los que no disfruten de su pleno
juicio. Los bienes hereditarios son las propiedades que tiene el testador al momento
de su muerte, como por ejemplo los inmuebles, muebles, acciones de sociedades,
inversiones a plazo, cuentas de cheques y derechos. No solamente el cónyuge, hijos
o parientes pueden ser herederos o legatarios del testador, sino que toda persona
tiene capacidad para heredar; pero con relación a ciertas personas y a determinados
bienes, son incapaces para heredar por las causas previstas en la ley.

Respecto a la forma del testamento, el más recomendable es el testamento público


abierto, porque se otorga ante un notario, sea con la comparecencia o no de dos
testigos, según lo decida el testador; necesariamente intervendrán dos testigos,
cuando el testamento se otorgue por persona que no sabe o no pueda firmar, que es
sorda, invidente o esté incapacitada para leer. Contrariamente a lo que mucha gente
piensa, el costo del testamento público abierto es muy económico, ya que está al
alcance de cualquier persona. El testamento es uno de los actos más importantes en
la vida del individuo, que sólo surte efectos hasta después de su muerte, por lo que el
testador puede disponer de sus bienes y celebrar todos los actos jurídicos que quiera
realizar durante su vida, aun modificar totalmente la composición de su patrimonio. Es
un error pensar que el testamento debe hacerse cuando se ve cercana la muerte;
ocurre con frecuencia que la muerte, ya sea por accidente o enfermedad, sorprende a
muchos en forma intempestiva.

COMPRAVENTA DE INMUEBLES

Toda persona es libre de disponer de sus bienes, a través de diversos actos jurídicos,
dentro de los que se encuentra el contrato de compraventa, que básicamente se rige
por el título segundo de la tercera parte del libro séptimo del Código Civil del Estado.
Hay compraventa cuando uno de los contratantes se obliga a transferir la propiedad
de un bien o de un derecho, y el otro, a su vez se obliga a pagar por ello un precio
cierto y en dinero. Tratándose de bienes inmuebles, la venta debe otorgarse en
escritura pública. Los notarios públicos tienen la obligación de asesorar a los
interesados para dar forma legal a la compraventa de inmuebles, incluyendo las
operaciones que lleven a cabo desarrolladores, constructores o lotificadores.

PODERES GENERALES Y ESPECIALES

A través de un poder notarial se permite a una persona física o jurídica colectiva


designar a otra como su representante para que actúe en su nombre en determinados
actos jurídicos, de manera general o especial. Según el artículo 7.771 del Código Civil
del Estado de México, en todos los poderes generales para pleitos y cobranzas
bastará que se diga que se otorgan con todas las facultades generales y las
especiales que requieran clausulas especiales conforme a la ley, para que se
entiendan conferidos sin limitación alguna. Por lo que respecta a poderes generales
para administrar bienes, bastará expresar que se dan con ese carácter, para que el
apoderado tenga toda clase de facultades administrativas. Tocante a poderes
generales para ejercer actos de dominio, bastará que se den con ese carácter para
que el apoderado tenga todas las facultades de dueño, tanto en lo relativo a los
bienes, como para hacer toda clase de gestiones a fin de defenderlos.

Por medio de los poderes especiales sólo se otorgan determinadas facultades a los
apoderados. En relación con dichos poderes especiales, el numeral 7.806 del mismo
Código Civil indica que el procurador necesita poder o clausula especial para
desistirse, transigir, comprometer en árbitros, absolver posiciones, hacer cesión de
bienes en beneficio del mandante, recusar, recibir pagos y los demás actos que
determine la ley.

ASOCIACIONES Y SOCIEDADES CIVILES

Los artículos 7.885 y 7.886 del Código Civil de la entidad disponen que la asociación
civil es un contrato por el cual se reúnen de manera que no sea enteramente
transitoria, dos o más personas, para realizar un fin común y que no tenga carácter
preponderantemente económico; y que cuando se constituya o modifique una
asociación debe constar en escritura pública e inscribirse en el Registro Público de la
Propiedad.

Referente a la sociedad civil, las normas 7.909 y 7.911 del citado Código Civil señalan
que la misma se constituye a través de un contrato por el cual los socios se obligan a
combinar sus recursos o sus esfuerzos para la realización de un fin común de
carácter preponderantemente económico, que no constituya una especulación
comercial, mediante la aportación de sus bienes o industria, o de ambos, para dividir
entre si las ganancias y pérdidas; y que el acto constitutivo o modificatorio de una
sociedad debe constar en escritura pública, la que se inscribirá en el Registro Público
de la Propiedad.

SOCIEDADES MERCANTILES

En aplicación de la Ley General de Sociedades Mercantiles, estas personas morales


podrán realizar todos los actos de comercio necesarios para el cumplimiento de su
objeto social; las sociedades mercantiles se constituirán ante fedatario público y en la
misma forma se harán constar sus modificaciones; las sociedades inscritas en el
Registro Público de Comercio tienen personalidad distinta de los socios; y que la
escritura constitutiva de una sociedad mercantil, deberá contener los requisitos que
prevé el citado ordenamiento federal. Dentro de las sociedades mercantiles que
regula la indicada Ley se encuentran las sociedades anónimas, las que existen bajo
una denominación y se componen exclusivamente de un mínimo de dos socios cuya
obligación se limita a sus acciones; las cuales pueden constituirse por la
comparecencia ante fedatario público, de las personas que otorgan la escritura
correspondiente.

HIPOTECA

La hipoteca es un derecho real constituido sobre bienes que no se entregan al


acreedor y que da derecho a éste, en caso de incumplimiento de la obligación
garantizada, a ser pagado por el valor de los bienes, en el grado de preferencia
establecido por la ley, según dispone el artículo 7.1097 del Código Civil del Estado de
México. Los siguientes tres preceptos del consultado cuerpo legal precisan que la
hipoteca debe otorgarse en escritura pública; los bienes hipotecados quedan sujetos
al gravamen impuesto, aunque pasen a poder de tercero; y que la hipoteca sólo pude
ser constituida sobre bienes inmuebles o derechos reales, o sobre un conjunto de
bienes muebles e inmuebles que formen una misma unidad industrial, comercial, de
servicios, agrícola o ganadera.

ACTAS NOTARIALES

Diversas disposiciones sobre las actas notariales se incluyen a detalle en el capítulo


segundo del título tercero de la Ley del Notariado del Estado, en el entendido de que
entre los hechos que debe consignar el notario en actas se encuentran los siguientes:
notificaciones, interpelaciones y protestos de documentos mercantiles; existencia de
identidad de personas; reconocimiento de firmas en documentos por personas
identificadas por el notario; hechos materiales; entrega, protocolización o existencia
de documentos; declaraciones de una o más personas que bajo protesta de decir
verdad efectúen respecto de hechos que les consten, propios o de quien solicite la
diligencia; reconocimiento de firmas y ratificación del contenido de documentos; y en
general, toda clase de hechos, abstenciones, estados y situaciones que guarden las
personas y cosas que puedan ser apreciadas objetivamente.
PROCEDIMIENTOS SUCESORIOS

El notario mexiquense también tiene la función de tramitar los procedimientos


sucesorios testamentarios e intestamentarios, siempre que exista el acuerdo entre los
solicitantes, en términos de distintos artículos de la Ley del Notariado del Estado de
México y su Reglamento. Cuando en un testamento, todos los herederos instituidos
sean personas con capacidad de ejercicio, el procedimiento sucesorio testamentario
podrá tramitarse ante notario. De igual manera, si todos los herederos son mayores
de edad y no existe conflicto de intereses entre éstos, el procedimiento sucesorio
intestamentario también podrá tramitarse ante notario.

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 ¿QUÉ ES UN NOTARIO?
La Ley del Notariado del Distrito Federal, en su artículo 42 se define al notario como “el profesional del Derecho
investido de fe pública por el Estado, y que tiene a su cargo recibir, interpretar, redactar y dar forma legal a la voluntad de
las personas que ante él acuden, y conferir autenticidad y certeza jurídicas a los actos y hechos pasados ante su fe,
mediante la consignación de los mismos en instrumentos públicos de su autoría … El notario conserva los instrumentos en
el protocolo a su cargo, los reproduce y da fe de ellos. Actúa también como auxiliar de la administración de justicia, como
consejero, árbitro o asesor internacional, en los términos que señalen las disposiciones legales relativas.”
Aunado a lo anterior, en esta misma Ley en su artículo 11, se señala que el Notario es un auxiliar “en la administración de
justicia”.

De acuerdo con Rafael de Pina, un notario es el “titular de la función pública consistente de manera esencial en dar fe de
los actos jurídicos que ante él se celebren.”
(Rafael de Pina Vara. Diccionario de Derecho. Editorial Porrúa. Año 2006. Página 383)

 ¿QUÉ ES UN HECHO JURÍDICO?


Son acontecimientos que surgen con independencia de la voluntad del ser humano, sin embargo, dada su naturaleza, los
mismos pueden producir efectos jurídicos.

 ¿QUÉ ES UN ACTA NOTARIAL?


De acuerdo con lo dispuesto por la Ley del Notariado para el Distrito Federal o L.N.D.F., en específico el artículo 125,
un acta notarial es “el instrumento público original en el que el Notario, a solicitud de parte interesada, relaciona, para
hacer constar bajo su fe, uno o varios hechos presenciados por él o que le consten, y que asienta en los folios del protocolo
a su cargo con la autorización de su firma y sello.”
Por otra parte, de acuerdo con Rafael de Pina, el acta notarial es el “instrumento original autorizado, en el que se
relaciona un hecho o acto jurídico que el notario asienta en el protocolo, bajo su fe, a solicitud de la parte interesada”.
(Rafael de Pina Vara. Diccionario Jurídico. Editorial Porrúa. Año 2006. Página 46)

Por su parte, en el Diccionario Jurídico Mexicano, se le define al acta notarial como “el instrumento original autorizado,
en el que se relacione un hecho o acto jurídico que el notario asiente en el protocolo bajo su fe, a solicitud de la parte
interesada.”
(Diccionario Jurídico Mexicano, Tomo I A-B. Editorial Instituto de Investigaciones Jurídicas de la UNAM. Año 1982.
Página 23)

 ¿PUEDE UN NOTARIO ASENTAR EN UNA SOLA ACTA, LOS HECHOS QUE SUCEDAN EN
DIFERENTES LUGARES?
Quizá podrías pensar que la respuesta es que sí, sin embargo, el notario puede asentar en una misma acta los hechos que
tengan lugar en diversos sitios y momentos, únicamente si los mismos hechos están relacionados entre sí. (Artículo 127
de la L.N.D.F.)
 ¿CUÁLES SON LOS PRINCIPALES HECHOS QUE EL NOTARIO DEBE ASENTAR EN UN ACTA
NOTARIAL?
Dentro de los principales hechos que un notario puede asentar en un acta notarial se encuentran:

I.- Notificaciones, protestos, entrega de documentos y diligencias en las que el Notario haya intervenido.
II.- La existencia, identidad, capacidad legal y puesta de firmas en documentos de personas que ya se han identificado ante
el Notario Público.
III.- Hechos materiales.
IV.- La existencia de planos, fotografías y cualquier tipo de documento.
V.- La protocolización de documentos.
VI.- Declaraciones que han una o más personas de hechos que les consten, sean propios o que solicite la diligencia.
VII.- Toda clase de hechos positivos o negativos, estados y situaciones (lícitos o ilícitos) que guarden las personas y cosas
que puedan ser apreciados objetivamente y relacionados por el notariado.
Entre otros que podrás observar en el artículo 128 de la L.N.D.F.)

 ¿QUÉ REQUISITOS DEBERÁ DE CUMPLIR UN ACTA NOTARIAL CUANDO SE DEBAN ASENTAR


HECHOS COMO NOTIFICACIONES, PROTESTOS, ENTREGA DE DOCUMENTOS Y DILIGENCIAS
EN LAS QUE EL NOTARIO HAYA INTERVENIDO?
Sólo en el presente caso, deberán asentarse los siguientes requisitos:

I.- Mencionar el nombre y apellidos de la persona que realice la actuación con el notario.


II.- La persona que sea destinataria del objeto de la diligencia podrá concurrir a la oficina del Notario en un plazo no
mayor a 5 días hábiles, a partir del siguiente de la fecha del acta relativa, para conocer el contenido del acta y conforme
con ella, deberá firmarla o hacer por escrito las observaciones convenientes.
III.- Cuando el destinatario de la diligencia haga observaciones al acta notarial (señaladas en el punto anterior) deberá
señalar el notario esta circunstancia en el testimonio o copia certificada que se trate. (Art. 129 L.N.D.F.)
 ¿QUÉ DEBERÁ HACER UN NOTARIO CUANDO EN EL DOMICILIO QUE LA PERSONA SEÑALÓ
PARA SER NOTIFICADO NO LA ENCUENTRA?
El notario podrá practicar la notificación mediante instructivo que entregue a la persona que se encuentre en el lugar o
preste sus servicios para el edificio o conjunto del que forme parte del inmueble en su caso. (Art. 130 L.N.D.F.)

 ¿QUÉ PASA SI EL NOTARIO NO ENCUENTRA A NINGUNA PERSONA PARA PRACTICAR LA


NOTIFICACIÓN?
El Notario podrá practicar la notificación mediante la fijación del instructivo en la puerta o un lugar visible del domicilio,
o depositando de ser posible el instructivo en el interior del inmueble indicado. (Art. 131 L.N.D.F.)

 ¿CUÁL ES EL PROCEDIMIENTO QUE LLEVARÁ A CABO EL NOTARIO PARA PROTOCOLIZAR


UN ACTA NOTARIAL?
El notario deberá transcribir la parte relativa del acto que se asienta o agregará al apéndice en el legajo marcado con el
número del acta y bajo la letra o número que le corresponda. (Art. 136 L.N.D.F.)

SI TE INTERESA SABER ¿QUÉ ES UNA PROTOCOLIZACIÓN NOTARIAL? DA CLIC AQUÍ.


 ¿QUÉ ACTAS NOTARIALES NO PODRÁN PROTOCOLIZARSE?
Aquellas que su contenido vaya en contra de las leyes del orden público o las buenas costumbres, las que contengan algún
acto que conforme a las leyes deba constar en una escritura pública o por acuerdo de las partes. (Art. 137 L.N.D.F.)

 ¿EN QUÉ CASOS PODRÁN PROTOCOLIZARSE LAS ACTAS NOTARIALES OTORGADAS EN EL


EXTRANJERO?
Una vez que éstas sean apostilladas (legalizadas) y traducidas por perito, y solamente podrán protocolizarse a petición de
la parte interesada. (Art. 139 L.N.D.F.)
REFERENCIAS

https://www.notariado.org/portal/actas-notariales

https://colegiodenotariosedomex.org.mx/?articulo=16

https://tareasjuridicas.com/2016/11/27/que-es-un-acta-notarial/

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