acciones para la participación ciudadana

Domingo 24 de enero de 2021

Año 10 / Número 107
Prohibida su venta por separado

En Argentina, hay más de 16.000 y,

aunque una ley los protege desde
hace 10 años, según la Auditoría
General de la Nación existen
falencias en su aplicación. Su
preservación choca contra
os intereses de los proyectos
megamineros.

Glaciares
2. ACCIONES | DOMINGO 24 DE ENERO DE 2021
EDITORIAL
La punta del
iceberg
Por Paz Míguez
Fundación Éforo
No es novedad que el calenta-
miento global está ocasionando da-
ños irreparables sobre el ambiente
y la biodiversidad. Así como en las
mejores películas de ficción, asisti-
mos a fenómenos meteorológicos
cada vez más intensos, más extre-
mos, más frecuentes.
Pero la emergencia climática no
es solo un problema ambiental. In-
fluye en las condiciones sociales de
la salud, como la disponibilidad de
agua dulce, aire limpio, alimentos
suficientes y vivienda digna. Según
la ONU, si no se adoptan medidas
urgentes, “podría subsumir en la
pobreza a otras 100 millones de per-
sonas para 2030”.
En Argentina, los glaciares son
bienes ambientales de carácter
público. Esta definición consiguió
fuerza de Ley (N° 26.639) en 2010.
Así, nuestro país se convirtió en el
primero de la Región en sancionar
una Ley de Glaciares que reconozca
su importancia estratégica y prohi-
bir cualquier actividad que afecte su
condición natural.
Hoy sabemos que existen 16.968
glaciares (8.484 kilómetros cuadra-
dos de hielo) que se distribuyen
principalmente a lo largo de Los
Andes. “Esto representa una gran
responsabilidad ya que ubica a la
Argentina entre los países con ma-
yor superficie englazada del mun-
do”, según el Inventario Nacional
de Glaciares publicado en 2018.
Sin embargo, este logro no fue sin
tensiones ni resistencias. El proceso
involucra un veto del Ejecutivo en
2008, activismo, intereses multina-
cionales, apelaciones a la Justicia,
Inventario demorado y hasta un de-
rrame de sustancias tóxicas en San
Juan. La historia continúa.
Glaciares. Aunque hay
una ley que los protege,
continúan en peligro
En Argentina, hay más de 16.000.
Hace 10 años, una norma
los resguarda, pero según la
Auditoría General de la Nación
existen distintas falencias en su
aplicación. Estas geoformas son
una importante fuente de agua
dulce y clave para combatir el
calentamiento global.
¿Quién no fue o, al menos, soñó con ver
alguno de los glaciares del país? ¿Cuántos
se quedaron un rato largo esperando un
desprendimiento con su inconfundible
sonido? ¿Alguien se puso a pensar alguna
vez que no todos los países tienen seme-
jantes estructuras heladas? Con más de 16
mil glaciares, Argentina es el segundo país
de Latinoamérica con más cuerpos de
hielo. De norte a sur, ubicados al oeste a
lo largo de toda la Cordillera de los Andes,
representan una reserva hídrica estratégi-
ca que alimenta a 39 cuencas y es el agua
dulce del futuro. En 2020, la Ley de Pre-
supuestos Mínimos para su conservación
cumplió 10 años desde su sanción.
Aprobada el 30 de septiembre de 2010
en el Congreso Nacional, la normativa
busca la conservación de estas reservas
hídricas estratégicas y estableció, entre
otras cosas, la realización de un Inven-
tario Nacional de Glaciares (ING), que
comenzó a realizarse en 2011. Desde en-
tonces, Laura Zalazar trabaja junto a otros
profesionales del Instituto Argentino de
Nivología, Glaciología y Ciencias Ambien-
tales (IANIGLA) en la tarea. “Al principio,
lo hicimos a través de imágenes digitales,
identificábamos glaciares en el traba-
jo de gabinete durante el invierno. En el
verano, hacíamos el trabajo de campo,
íbamos a diferentes lugares del país para
comparar lo encontrado. Así, trabajamos
hasta que terminamos el Inventario en
2018. Hoy, estamos abordando su actua-
lización, que se realiza cada cinco años”,
cuenta Zalazar.
Al norte, en los Andes Desérticos, las
condiciones de aridez hacen que las for-
maciones de hielo y nieve se encuentren
en los picos más altos, como el Monte
Pissis, a más de 6 mil metros de altura.
En los Andes Centrales se encuentra la
mayor densidad de glaciares de escom-
bros en el mundo. Luego, en los Andes del
Norte Patagónico disminuye la altura de
la cordillera y son pocos los glaciares de
cráter. Más al sur, comienza el desarrollo
del Campo de Hielo Patagónico, con una
superficie de 12 mil kilómetros cuadrados
llena de grandes glaciares de valle y de
montaña, donde se asienta el más famoso
de todos, el Perito Moreno. Por último, en
los Andes Fueguinos aparecen los glacia-
res de pequeño tamaño.
“La gran mayoría es inaccesible, lo cual
implicaba una gran logística con camina-
tas de hasta dos o tres días. Recorrimos
desde Jujuy a Tierra del Fuego, fue un tra-
bajo muy grande. Los glaciares del norte
son muy diferentes a los del centro y to-
talmente distintos a los que se encuentran
en la Patagonia, con ambientes más ami-
gables. En San Juan, una zona más árida,
los cuerpos de hielo son mucho más altos,
muy bonitos, pero más demandantes des-
de el punto físico”, agrega Zalazar.
Según el Inventario, la provincia con
mayor superfice de glaciares en el país
es Santa Cruz, con 2.420 unidades que
cubren 3.421 kilómetros cuadrados. En
segundo lugar, aparece Mendoza con
una superficie de 1.239 kilómetros cua-
drados y 4.172 cuerpos inventariados.
San Juan ocupa el tercer lugar, con más
de 4.572 formaciones. Las provincias con
menos superficie englazada son Jujuy y
Tucumán, que cuentan con 10 kilómetros
cuadrados cada una. “En Argentina, te-
nemos los glaciares más lindos del mun-
do”, asegura Luciano Bernacchi, director
de Glaciarium, un centro de interpreta-
ción glaciológico, ubicado en El Calafate.
Santa Cruz. “En la provincia, del Campo
Hidrosur que compartimos con Chile, se
desprenden los grandes glaciares que se
conocen. Este campo representa la mayor
masa de hielo glaciar del hemisferio sur
después de la Antártida”, señala.
Los glaciares de la Patagonia Austral se
clasifican como templados y están ubica-
dos a una latitud relativamente baja, lo
cual los vuelve más visitables y atractivos
para el turismo. “Al estar a menor altura,
se derriten todo el año y más en verano.
Tienen alta tasa de pérdida y muchos des-
prendimientos que generan témpanos,
pero también hay mucha producción,
porque el factor climático hace que exis-
tan nevadas muy frecuentes en el centro
de las montañas donde nacen. El viento
sur del Pacifico genera precipitaciones y
esa nieve alimenta a los glaciares”, plan-
tea Bernacchi.
Hace 20 mil años se produjo la última
glaciación. “De todas formas, la edad del
glaciar no es la misma que la del hielo.
Al ser templados, el hielo no está quieto
y va cambiando. Hubo momentos en que
toda la Patagonia estaba cubierta por hie-
lo, pero no es el mismo que hoy. Al viajar,
vemos que hay un montón de huellas de
cómo los glaciares fueron transformando
los paisajes a lo largo de los siglos”, enfati-
za el director de Glaciarium. Hoy, mucho
tiempo después, “por el cambio global se
están achicando los glaciares. La situa-
ción es muy dramática en comparación
con la que había hace cinco años”, alerta.
“En 2018, terminamos de hacer
el Inventario. Ya trabajamos en
su actualización, que se hace
cada cinco años”, contó Laura
Salazar, del IANIGLA.
En esta misma línea, Zalazar aporta:
“Todos los años monitoreamos los gla-
ciares. Elegimos cuatro y medimos la
acumulación de hielo a fin del invierno y
la pérdida cuando termina el verano para
saber el estado de salud. Lo más común
es notar que los glaciares están perdiendo
masa”. Pero no solo el cambio climático y
las temperaturas cada vez más elevadas
son un factor de riesgo para la vida de
estos cuerpos de hielo. “Distintas accio-
nes colaboran. La más impactante y con
la que más conflictos hay es la minería,
pero también puede afectarlos el trazado
de una ruta, algunas actividades turísticas
excesivas, construcciones o infraestructu-
ras”, enumera la integrante del IANIGLA.
Pía Marchegiani es la directora de Polí-
tica Ambiental de la Fundación Ambiente
y Recursos Naturales (FARN), una ONG
que trabaja en el tema desde antes de la
sanción de la norma. “La Ley de glaciares
siempre tuvo mucha resistencia de apli-
cación por parte de las provincias que
tienen una matriz productiva dependien-
te de la minería y desde el inicio de la ley
buscaron formas para trabar su imple-
mentación y el Inventario”, cuenta.
En junio de 2019, un fallo de la Corte
Suprema de Justicia rechazó un pedido
de inconstitucionalidad de la Ley 26.639
planteado por Barrick Exploraciones Ar-
gentinas S.A. y por Exploraciones Mineras
Argentinas S.A., empresas concesionarias
del emprendimiento Pascua Lama, com-
partido con Chile y cerrado actualmente.
“Hay que dejar de promover la minería,
realizar los controles pertinentes en los
proyectos en funcionamiento, dejar de
autorizar nuevos emprendimientos en las
zonas de periglaciares”, describe la inte-
grante de FARN.
Auditada. A raíz de un pedido por
parte de ONGs, en 2016 la Auditoría Ge-
neral de la Nación (AGN) analizó la im-
plementación de la Ley 26.639. “El primer
informe abarcó el periodo que va de 2011
a diciembre de 2015. En 2018, hicimos
un seguimiento de las recomendacio-
nes y auditamos la gestión durante 2016
y 2017”, explica Sol Klas, supervisora del
Departamento de Control de Gestión Am-
biental de la AGN.
Entre las principales observaciones, se
destacó que el Ministerio de Ambiente y
Desarrollo Sostenible debía monitorear
y fiscalizar estas reservas hídricas, pero
no coordinó acciones de protección con
las provincias, así como tampoco brindó
asistencia técnica a las jurisdicciones y el
financiamiento para la elaboración del In-
ventario fue escaso. Asimismo, se resaltó
la insuficiente participación ciudadana.
“En el segundo informe encontramos
que, del total de las observaciones y reco-
mendaciones realizadas por AGN, el Mi-
nisterio de Ambiente solo había regulari-
zado un 9%, un 33% de forma parcial y un
55 % quedó sin regularizar”, agrega Klas.
Entre otra de las falencias encontradas
por el ente de control figura la falta de
identificación de los lagos proglaciares,
formaciones de agua que se encuentran
en el extremo inferior de algunos cuerpos
de hielo. “Al día de hoy no están identifica-
dos y las inundaciones por derretimiento
o desprendimiento contemplan un riesgo
catastrófico. Estos lagos son considerados
uno de los peligros más importantes por
su cercanía a las poblaciones y las zonas
no están identificadas”, advierte la secre-
taria nacional de Ambiente y Desarrollo
Sostenible de la Asociación del Personal
de Organismos de Control (APOC).
DOMINGO 24 DE ENERO DE 2021 | 3. ACCIONES
“La Ley de Glaciares siempre
tuvo resistencia en provincias
con matriz productiva
dependiente de la minería”,
dijo Pía Marchegiani, de FARN.
En esta misma línea, Klas insiste en la
necesidad del control provincial. “Los gla-
ciares en Argentina están inventariados,
sabemos cuántos hay, de qué tipo son y
dónde están. Pero no podemos decir que
estén efectivamente protegidos, porque
está pendiente la Evaluación Ambiental
Estratégica. Esto lo debía impulsar el Mi-
nisterio de Ambiente, junto con el Con-
sejo Federal de Medio Ambiente (COFE-
MA) y estaba previsto en la Ley, pero no
se hizo. Hoy, las provincias cuentan con
el Inventario Nacional y, al ser las dueñas
de sus recursos naturales, deben velar por
que se cumpla la ley en su territorio”.
El riesgo del derretimiento. El au-
mento de las temperaturas producto del
incremento de dióxido de carbono y las
emisiones de gases de efecto invernade-
ro son las principales causas del derreti-
miento, que es más rápido de lo que se
cree. “Va a causar distintas cosas, como
la suba del nivel del mar, que traerá mu-
chas inundaciones en las próximas déca-
das”, explica Jorge Taillant, director Eje-
cutivo del Centro de Derechos Humanos
y Ambiente. “El hielo, además, funciona
como reflector del calor y los glaciares
-agrega- reflejan la luz solar y eso ayuda
a evitar el calentamiento global”, explica
Taillant, autor del libro Glaciares: la polí-
tica del hielo.
¿Por qué es importante conservarlos?
“También aportan agua dulce, muy im-
portante para todos los países de los An-
des Centrales, donde su desaparición ya
está causando problemas con el abasteci-
miento. Los ciclos van cambiando y desa-
parece el agua en momentos clave, esto va
a alterar los patrones de cultivo”, apunta.
Por último, menciona “las inundaciones y
crecidas de los ríos por desprendimiento
de porciones enormes de hielo que im-
pactan en los lagos glaciares y eso causa
tsunamis que bajan de las montañas y
pueden arrasar con pueblos enteros. Esto
va a ser un problema para Argentina y
otras partes del mundo”.
Los glaciares son solo un ejemplo de lo
poco o nada que se protegen los recursos
más importantes, así como de la dificul-
tad para desarrollar una política más sus-
tentable, que aborde el cambio climático.
“Tenemos que dejar de fomentar el petró-
leo, nuestro país tiene enormes posibili-
dades de desarrollar energía eólica, solar,
de hidrógeno u otros recursos renovables,
pero insistimos con la explotación de las
energías fósiles. Podríamos redirigir mu-
chas de nuestras industrias a la fabrica-
ción de tecnologías de energías renova-
bles”, resume Taillant.
Para Marchegiani, la necesidad de pro-
tegerlos se vuelve imperiosa. “Esta fuen-
te de agua nutre el 70% de la economía
nacional. Es un recurso físico para la ac-
tividad económica, porque viaja desde
la cordillera río abajo, atravesando las
distintas provincias. Los glaciares son un
importante reservorio hídrico, que no
pueden ser pensados como propiedad
de una provincia. Es importante que se
tomen decisiones colectivas. Es necesa-
ria la participación ciudadana a la hora
de llevar adelante leyes ambientales. La
ciudadanía es el motor para que estos te-
mas lleguen a la agenda y se queden. Es
un recurso estratégico y hay que cuidarlo
colectivamente”, concluye.
Funcionarios
al banquillo
El desencadenante fue el derra-
me de metales pesados del 12 y 13
de septiembre de 2015 en la mina
Veladero, que Barrick Gold explota
en el norte de San Juan. Allí se inició
la causa que podría terminar con la
condena de distintos funcionarios
públicos. El juicio oral debió ha-
berse hecho el año pasado, pero la
pandemia obligó a postergarlo. ¿De
qué se trata?
Los abogados de la Asamblea Já-
chal No Se Toca pidieron que inves-
tiguen la posible violación de la Ley
de Glaciares. De haberse cumplido,
se hubiera evitado la contamina-
ción.
En agosto de 2017, los ex secre-
tarios de Ambiente de la Nación
Omar Vicente Judis, Sergio Gustavo
Lorusso y Juan José Mussi fueron
citados a declarar. Los procesaron
en noviembre del mismo año y en
2018, la Sala II de la Cámara confir-
mó los procesamientos, que habían
sido apelados por sus abogados.
Así, los jueces federales Martín Irur-
zun y Eduardo Farah confirmaron
la decisión de Sebastián Casanello,
magistrado que intervino en prime-
ra instancia.
Si bien las penas no son altas, los
denunciantes entienden que una
eventual condena podría tener un
valor simbólico.
4. ACCIONES | DOMINGO 24 DE ENERO DE 2021
ENTREVISTA A ENRIQUE VIALE
“Hay leyes ambientales
muy interesantes”
Según el abogado, el
problema no es la falta de
normas, sino la dificultad
para que sean aplicadas.
Además, hace hincapié en
los intereses encontrados
entre el cuidado de los
glaciares y el desarrollo de
proyectos de megaminería,
que cuestiona fuertemente.
Enrique Viale es un abogado con estu-
dios de posgrado en Derecho Ambiental
y miembro fundador de la Asociación
Argentina de Abogados Ambientalistas
(AAdeAA), creada en 2004. Desde allí, fue
litigante en numerosas causas. Además,
resultó un activo impulsor de la Ley Na-
cional de Glaciares durante su trámite
parlamentario participando en el debate
de las comisiones en las cámaras del Con-
greso de la Nación.
A 10 años de su sanción, ¿hay
algo particularmente destacable
de la Ley o es la existencia de la
norma en sí misma?
La sanción de la ley fue fundamental. Se
trata de uno de los grandes hitos socioam-
bientales del país. Si Argentina tiene algu-
nos hitos como Famatina y Esquel, uno de
ellos es la sanción de la Ley de Glaciares por
los escandalosos y poderosos lobbies que
tuvo que enfrentar. Sancionarla ya fue un
gran triunfo. Otros de los hitos que tiene es
proteger glaciares que están en la alta mon-
taña, que sin la ley estarían destruidos.
¿Tiene defectos?
No le encuentro déficits. Estas leyes
enfrentan, tanto en el momento de su
sanción como para su aplicación, lobbies
muy grandes. El tema es la falta de aplica-
ción efectiva por parte de las autoridades
nacionales y provinciales. La norma es
“La sanción de la Ley es, en sí
misma, uno de los grandes
hitos socioambientales del
país, por los lobbies que debió
enfrentar”, dijo Enrique Viale.
muy interesante.
¿Por qué cuesta tanto su aplica-
ción?
Como toda ley ambiental, enfrente hay
modelos de mal desarrollo muy ligados a
grandes poderes económicos concentra-
dos que van corriendo la línea de llegada
permanentemente. Cuando logramos la
sanción, volvieron atrás con un veto. Lue-
go, no la reglamentaron. Ahora, no pue-
den inventariar los glaciares de menos de
una hectárea.
¿Qué pasó con el borrador que
planteaba modificarla por decreto
en 2016?
Nunca salió por suerte. Pero hay una protegida por la Ley de Glaciares. climático). Siempre digo que el derecho
interpretación del Instituto Argentino de ¿Qué debería ocurrir con esos ambiental es como una flecha prendida
Nivología, Glaciología y Ciencias Ambien- proyectos mineros? fuego que atraviesa todo el ordenamiento
tales (IANIGLA) que llevó a que no pusie- Los emprendimientos mineros no pue- jurídico y lo va transformando a su paso.
ran dentro del Inventario los glaciares de den avanzar en zonas que estén prohibi- A veces, no se entiende cómo el princi-
menos de una hectárea. Creemos que que- das por la Ley. Emprendimientos como pio precautorio, por ejemplo, invierte la
dó un Inventario incompleto y en el nuevo Veladero (en San Juan) son ilegales por- carga de la prueba. Los jueces que tienen
deben estar todos, como establece la Ley. que incumplen la norma, que dice que 50 años en Tribunales no quieren saber
¿En dónde colisiona la protec- tienen que cesar en su actividad inmedia- nada. Por eso, las demandas ambientales
ción de los glaciares y el desarrollo tamente, no pueden seguir. son muy largas.
de la megaminería? ¿Cómo está Argentina en materia ¿Pasa como en otros ámbitos,
Nos encontramos con una especie de de leyes ambientales? donde los especialistas coinciden
confesión de las grandes mineras como Dentro de todo, tiene leyes interesantes. en que las normas son buenas, pero
Barrick Gold u otras. No entendíamos por Por ejemplo, la Ley General de Ambien- el problema es su aplicación?
qué se metían si es una ley de protección te tiene principios muy buenos, al igual En derecho ambiental se da especial-
de glaciares. Si decían que no destruían que la de Bosques y Glaciares. Quisiéra- mente. Hay una gran impunidad ambien-
glaciares en su proceso, la norma no tiene mos un capítulo penal ambiental, avan- tal. El año pasado, por ejemplo, se quemó
afectación a su actividad. Encontramos zar en otras cosas que intentamos en su un millón de hectáreas, entre bosques y
que, en realidad, las grandes mineras ar- momento. Pero Argentina no está mal. El humedales, pero no hay una sola persona
gentinas están en zonas de glaciares y problema es la aplicación efectiva de las presa. Si rompo la ventanilla de un auto,
ambientes periglaciares que necesitan normas. Ojalá que la Ley Yolanda, apro- seguro voy a tener que enfrentar una cau-
destruirlos para acceder a esos minera- bada recientemente, sirva para capacitar sa judicial y hasta puedo terminar pre-
les. Quedó expreso en un documento que a los funcionarios de los tres poderes del so. Si quemo un millón de hectáreas, no
tuvo el Gobierno nacional en su momento Estado para que entiendan su alcance (la pasa nada. En materia ambiental hay una
que hablaba de al menos 44 emprendi- capacitación debe ser con perspectiva de gran impunidad en Argentina y en todo el
mientos mineros que estaban en la zona desarrollo sostenible y énfasis en cambio mundo.