DEPORTE Y DIABETES TIPO 1:

BENEFICIOS, CONSEJOS Y ESTILO DE VIDA

ÍNDICE:

LA IMPORTANCIA DEL DEPORTE EN LA DIABETES TIPO 1 3

EL DÍA A DÍA DE UNA PERSONA CON DIABETES TIPO 1 5

CAMBIOS DE RUTINA SEGÚN LA EDAD 7

BENEFICIOS DEL DEPORTE EN PERSONAS CON DIABETES TIPO 1 8

CÓMO ADAPTAR EL DEPORTE A TU DÍA A DÍA CON DIABETES TIPO 1 10

LA IMPORTANCIA DE CREAR HÁBITOS 12

ENTENDER MI DIABETES EN CADA MOMENTO 12

FORMACIÓN Y APRENDIZAJE SOBRE LA COMBINACIÓN

DE DEPORTE AERÓBICO Y ANAERÓBICO 13

FIJÁNDOSE METAS SMART (ALCANZABLES) 14

SIEMPRE REGULANDO LOS VALORES DE INSULINA MIENTRAS

PRACTICAMOS DEPORTE 15

NO BUSQUES EXCUSAS, BUSCA MOTIVACIÓN 16

FACTORES CLAVE DEL DÍA A DÍA PARA HACER

DEPORTE CON DIABETES 17

ALIMENTACIÓN 19

TECNOLOGÍA Y DEPORTE 20

ANÁLISIS DE DATOS Y TRATAMIENTOS 21

LA IMPORTANCIA DE LA COMUNIDAD EN LA DIABETES 22

BIBLIOGRAFÍA 23
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LA IMPORTANCIA DEL
DEPORTE EN LA DIABETES
TIPO 1
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LA IMPORTANCIA DEL DEPORTE EN LA DIABETES

TIPO 1
El ejercicio físico y el deporte han ido, cada vez más, haciéndose hueco en la vida de muchas personas hasta que

hoy en día se ha convertido en uno de los principales hobbies. Por sus beneficios, por el bienestar que causa, por

el ocio que implica… Hay muchos motivos por los que cada persona práctica deporte, y una cosa está clara: los

beneficios del ejercicio físico son innumerables y son para todo el mundo.

De forma coloquial, se suelen utilizar indistintamente los términos actividad física, ejercicio físico y deporte pero

existen algunas diferencias entre sus definiciones. La actividad física implica cualquier movimiento corporal mús-

culoesquelético que exija un gasto de energía, por ejemplo, caminar a paso rápido, bailar, realizar tareas domés-

ticas, trabajos físicos… Abarca el ejercicio físico en su definición. El ejercicio físico es un tipo de actividad física

planificada, estructurada, repetitiva y con el objetivo de mejora o mantenimiento de la aptitud física, por ejemplo,

correr, hacer bicicleta, aeróbic, natación, juegos de equipo... Por otro lado, el deporte es una actividad física sujeta

a reglas o normas concretas, requiriendo en general un programa de ejercicio concreto, puede ser más recreativo

y/o de competición.

Independientemente de si se padece o no diabetes, es recomendable realizar actividad física regularmente así

como ejercicio físico de forma habitual junto con una buena alimentación dentro de un estilo de vida saludable y

una rutina organizada. Un nivel de actividad física regular reduce el riesgo de distintas patologías entre ellas patolo-

gía de tipo cardiovascular, produce una mejora en la salud ósea y funcionalidad y ayuda a controlar el peso.

Para una persona con diabetes practicar ejercicio físico representa un gran reto ya que es imprescindible un

control minucioso de los niveles de glucemia antes, durante y después de su realización. En este sentido, hay que

organizarse, tener conocimientos acerca de la diabetes y conocerse muy bien. Por este motivo, para las personas

con diabetes, así como en muchos casos de personas sin diabetes, puede resultar mucho más sencillo caer en un

estilo de vida sedentario. Sin embargo, es importante entender que, aunque cueste y pueda no resultar cómodo

sobre todo al principio, el ejercicio físico, el deporte y la diabetes no están contrapuestos y es muy beneficioso

aprender a integrarlos y complementarlos.

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EL DÍA A DÍA DE UNA

PERSONA CON DIABETES
TIPO 1
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EL DÍA A DÍA DE UNA PERSONA CON DIABETES TIPO 1

Cuando una persona es diagnosticada con diabetes tipo 1, puede que lo primero que le venga a su mente sea la

cantidad de cambios que esto puede suponer en su rutina. Ciertamente, tras el diagnóstico de diabetes tipo 1 se

abre todo un proceso de cambio y adaptación a la nueva situación, pasando por distintas etapas y siendo funda-

mental el aprendizaje de conceptos teóricos y prácticos para integrar la diabetes en las distintas situaciones de la

vida. Una vez se va produciendo esta adaptación, el día a día de una persona con diabetes no tiene por qué suponer

renunciar o modificar en exceso lo que realizaba habitualmente previo al diagnóstico. Sí que es cierto que existen

una serie de cuidados que todos aquellos que padecen diabetes y están en tratamiento con insulina, deben tener

en cuenta. Es fundamental realizar controles de los niveles de glucosa periódicamente, establecer rutinas y realizar

una alimentación equilibrada.

Estos cuidados no deberían suponer barreras o limitaciones. Es cuestión de tener los conocimientos necesarios

para gestionar adecuadamente las situaciones tanto cotidianas como más extraordinarias que puedan ir surgiendo.

Para ello, es fundamental el papel de la Educación Diabetológica, por un lado, y, por otro, es fundamental intentar

crear hábitos saludables tanto en relación con la alimentación como en relación con la práctica de actividad física.
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CAMBIOS DE RUTINA SEGÚN LA EDAD

A día de hoy, la OMS (Organización Mundial de la Salud) para obtener los beneficios ligados a la práctica de acti-

vidad física y ejercicio, recomienda en adultos la realización de al menos 150 minutos semanales de actividad física

moderada asociada a la realización de dos o tres veces por semana ejercicio de fortalecimiento de grandes grupos

musculares.

En niños y adolescentes, la recomendación es realizar al menos 60 minutos de actividad física moderada diaria,

aeróbica y, al menos, tres veces por semana la realización de alguna actividad centrada en reforzar el sistema mús-

culoesquelético.

En edad infantil, son los padres o los tutores legales los responsables de controlar los niveles de glucemia de los

niños y quienes llevan el control de sus rutinas. A medida que va creciendo el niño, cada persona debe ir tomando

el control de su propia diabetes y tiene que adaptarla al estilo de vida que quiera tener.

Una vez se entra en la edad adulta, las rutinas se van modificando según los diferentes estilos de vida, las responsa-

bilidades van aumentando y, con los años, cada uno se va adaptando a todos los cambios que esto supone. Algunas

veces, en el caso de la diabetes, al ser una enfermedad crónica, las personas que la padecen acaban adaptando su

vida a la diabetes, en lugar de buscar el equilibrio para lograr encajar la diabetes y todos los cuidados que implica

en el estilo de vida propio que desean tener.

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BENEFICIOS DEL DEPORTE

EN PERSONAS CON
DIABETES TIPO 1
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BENEFICIOS DEL DEPORTE EN PERSONAS CON

DIABETES TIPO 1
El ejercicio físico y la práctica de algún deporte se han ido haciendo, cada vez más, un hueco en la vida de mucha

gente, sobre todo en la actualidad. Esto es porque los beneficios que aporta son innumerables independientemen-

te de que se tenga o no diabetes.

Actualmente la práctica de ejercicio físico como parte del manejo integral de la diabetes está ampliamente reco-

mendada. Llevar una vida poco activa y sedentaria no es nada beneficioso, e incrementa el riesgo cardiovascular

y la mortalidad, aunque muchas veces pueda ser la opción más cómoda. Por tanto, practicar ejercicio de forma

habitual e idealmente asesorado por un especialista, puede mejorar considerablemente no solo la forma física

sino a nivel de salud y bienestar.

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CÓMO ADAPTAR EL DEPORTE

A TU DÍA A DÍA CON DIABETES
TIPO 1
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CÓMO ADAPTAR EL DEPORTE A TU DÍA A DÍA CON

DIABETES TIPO 1
Introducir cambios en la vida diaria de cada uno siempre es algo que lleva un proceso de adaptación, se padezca o no

diabetes. Cuando empezamos, por ejemplo, a hacer deporte, a comer diferente, en un trabajo nuevo con un hora-

rio distinto… Al principio, siempre cuesta un poco adaptarse a los nuevos horarios, a preparar la comida con ante-

lación o a prescindir del postre. En resumen, introducir cualquier cambio siempre es difícil y lleva tiempo asimilarlo.

En el caso de la diabetes y el ejercicio, no es diferente. Comenzar a practicar deporte y llevar una vida saludable es

algo más que recomendable y necesario como hemos visto.

En aquellos en tratamiento con insulina, comenzar a realizar ejercicio físico supone además un factor a tener en

cuenta de cara a la fluctuación en los niveles de glucemia y el riesgo de hipoglucemia. Para saber preveer y actuar

adecuadamente en este aspecto, es fundamental disponer de información y formación adecuada de cara a la prác-

tica segura de ejercicio físico y el manejo de la diabetes durante el mismo.

Si dicha práctica se lleva a cabo de una manera eficaz y responsable, los beneficios que se obtendrán serán muchos:

una mejor forma física, prevención de ciertas enfermedades, ayuda en la pérdida de peso, menor nivel de ansiedad

e incluso mayor sensibilidad a la insulina. En resumen, la salud en general se verá muy beneficiada y enseguida se

notará cómo el ejercicio mejora considerablemente la calidad de vida de quien lo practica.

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LA IMPORTANCIA DE CREAR HÁBITOS

Para adaptar una rutina a nuevos cambios, lo más importante es ser capaces de crear hábitos. Un hábito solamen-

te se puede forjar cumpliendo día a día, por lo que es muy importante que se respete y se tome en serio. Cuando

se empieza a hacer ejercicio, muchas veces, se tiene en mente la esperanza de que en una semana los cambios ya

serán notables, y cuando llega el momento y no se notan nada, se termina por desistir.

Por eso, aunque cueste un poco, la clave para conseguir una rutina llena de hábitos saludables es aguantar el es-

fuerzo que supone al principio y acostumbrarse a llevar esos hábitos día tras día. Al final llegará un momento en el

que todo esto se convertirá en un hábito que ni se note y ¡todo habrá merecido la pena!

Si se controlan y se respetan los hábitos y las rutinas de cara al manejo de la diabetes durante la práctica de cual-

quier deporte, estas acabarán integrándose en el mismo, logrando una buena adaptación y adherencia, aumentan-

do de esta forma sus beneficios.

ENTENDER MI DIABETES EN CADA MOMENTO

Cuando una persona va creciendo y su vida va cambiando, la diabetes se va viendo afectada. En los momentos

de estrés, en épocas de cambios, nuevos trabajos, tener hijos o incluso a lo largo del mes durante los cambios del

ciclo menstrual, se producen variaciones añadidas en las cifras de glucemia con su consecuente repercusión en la

gestión de la diabetes.

Por eso, es importante prestar atención a los cambios que cada cosa supone para el cuerpo, observando los niveles

de glucosa y entendiendo por qué varían en momentos determinados. La clave para poder adaptarse a cada nuevo

paso que se da en la vida es entender las reacciones que se producen en el propio cuerpo y, en el caso de la dia-

betes, en el control de la misma. Ir conociendo estos cambios poco a poco facilitará el saber actuar en cada nueva

situación.

Con el deporte, en este caso, sucede lo mismo. Probablemente supondrá varios cambios en la rutina que, de una

manera u otra, afectarán a la diabetes, pero si se lleva un control adecuado no debería haber ningún problema.
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FORMACIÓN Y APRENDIZAJE SOBRE LA COMBINACIÓN DE

DEPORTE AERÓBICO Y ANAERÓBICO

Si la persona que empieza a practicar ejercicio físico no es experta en el deporte, puede que al principio todo sea

un poco confuso. Tendrá dudas sobre los ejercicios, la intensidad, el tiempo, la correcta ejecución de los mismos de

cara a evitar lesiones y en cuanto a la alimentación más recomendada. Además, en el caso de la diabetes, se añaden

las dudas acerca de cuándo medir las cifras de glucosa, qué interpretación darle a las mismas de cara a practicar

ejercicio, cuándo y cuántos hidratos tomar y cómo ajustar la insulina entre otros factores. Por eso, contar con pro-

fesionales que ayuden a adaptarse, puede ser clave en el proceso.

Dichos profesionales ayudarán a establecer rutinas e incluso a crear una rutina especializada que se adapte a cada

persona. Hoy en día, también existe la opción de seguir video tutoriales en internet para la práctica de ejercicio,

pero no se hace de una forma individualizada ni supervisada.

Por un lado, los profesionales del deporte tendrán en cuenta la diabetes e individualizarán las recomendaciones más

adecuadas de cara a qué combinación de ejercicios, con qué duración e intensidad pueden ser los más apropiados.

Por otro lado, los profesionales sanitarios (Endocrinología, Nutrición y enfermería especialista en Educación Dia-

betológica) darán la indicación de cómo realizar la práctica de ejercicio de forma segura en personas con diabetes

en tratamiento con insulina.

Finalmente, hay que recordar que es fundamental conocerse a sí mismo, en base a la experiencia que haya ido

acumulando durante la práctica de ejercicio y siempre tras un adecuado asesoramiento tanto para llevar a cabo el

ejercicio como en el ajuste de la diabetes durante el mismo. Aunque en la diabetes 2+2 no son siempre 4, es pro-

bable que de esta forma cada vez más se logre mantener mejor bajo control la diabetes en relación con el ejercicio.
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FIJÁNDOSE METAS SMART (ALCANZABLES)

Las características que debería tener una buena meta son las siguientes: eSpecífica (Specific), Medible, Alcanza-

ble, Relevante y en un Tiempo adecuado. Juntas forman el acrónimo SMART.

Teniendo en cuenta lo anterior, establecer hábitos en la rutina es un factor clave para ir acostumbrando el cuerpo a

los nuevos cambios. Para eso, lo más importante es ser realista y no exigirse a uno mismo más de lo que se pueda

dar desde el primer día.

Como le puede pasar a cualquier persona que empieza a hacer deporte, las expectativas, a veces, superan la rea-

lidad. Muchas veces se quiere ver resultados el primer día o notar una gran mejoría el segundo, pero el deporte no

funciona así, hay que ser constantes y formar una rutina fija que se pueda cumplir.

Pero ¿qué significa “que se pueda cumplir”? Pues esto quiere decir que no se deben marcar metas imposibles, sino

empezar poco a poco, observando cómo reacciona el cuerpo a cada paso y sin forzar demasiado. Si se quiere es-

tablecer una rutina que dure mucho tiempo lo más importante es no tirar la toalla nada más empezar, y para ello,

la clave es ponerse a uno mismo objetivos realistas que se puedan seguir sin problema. Hay que recordar que los

hábitos son algo cotidiano, que se debe cumplir cada día.

Para proponerse objetivos adecuados, hay que ser sincero con uno mismo, tener en cuenta la forma física y la can-

tidad de tiempo que se quiere dedicar al ejercicio físico cada semana. Esto también es un factor muy importante,

ya que, si alguien se propone hacer ejercicio tantas horas que apenas le quede tiempo para hacer nada más, puede

acabar por saltarse días para cumplir con otras obligaciones. El primer paso para llegar lejos es empezar despacio,

con constancia y con mucha motivación, y aún más si hablamos de deporte.

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SIEMPRE REGULANDO LOS VALORES DE INSULINA MIENTRAS

PRACTICAMOS DEPORTE

El momento en el que se empieza a hacer ejercicio físico, es cuando más se toma consciencia de todo lo que su-

pone para la diabetes. Por eso, es el momento en el que más cuidado se debe tener con los niveles de glucosa para

poder ir conociendo cómo reacciona el cuerpo en cada situación y en cada persona, de forma individual, y para

aprender a actuar correctamente en los momentos clave.

Durante el ejercicio aeróbico, aumenta la captación de glucosa por parte del músculo. Esta acción puede durar

hasta 48 horas tras la realización del ejercicio, aumentando la sensibilidad en la acción de la insulina y haciendo

necesario disminuir los requerimientos de insulina que hay que administrar en muchos casos. En el ejercicio de

resistencia, de elevada intensidad, se puede producir una tendencia a la hiperglucemia inicialmente, siendo esta

transitoria y posteriormente pudiendo continuarse con una tendencia a la hipoglucemia.

En los pacientes con diabetes tratada con insulina -o algunos fármacos como las sulfonilureas usados en diabetes

tipo 2- existe un riesgo de hipoglucemia en relación con el ejercicio.

Además, es importante tener en cuenta varios factores que afectan a los niveles de glucemia a la hora de empezar

a hacer ejercicio. El tipo de ejercicio físico (más aeróbico tipo cardio, de resistencia, mixto, ejercicios de alta in-

tensidad por intervalos (HIIT)…), la intensidad y la duración del mismo se deben planificar y controlar preferible-

mente con la ayuda de un especialista para asegurarse que son las adecuadas. De igual forma, se deben controlar

de forma periódica las cifras de glucosa, fundamentalmente antes del inicio del ejercicio, durante y después de

cara a valorar la necesidad de ingerir hidratos junto con realizar ajustes en la dosis de insulina. Igualmente, es im-

portante planificar en qué horario es más adecuado practicar ejercicio, intentando evitar las 2-3 horas posteriores

a la administración de insulina rápida o, en caso de usar bomba de insulina, intentando ajustar la dosis de insulina en

las horas previas al ejercicio.

Generalmente, si las cifras de glucosa previas al inicio del ejercicio son menores a 90mg/dl, se debería tomar algo de

hidratos de acción rápida (15-30gramos) y esperar un poco para iniciar el ejercicio. Con cifras entre 90-250mg/

dl se podría iniciar el ejercicio de forma segura. Por encima de 250mg/dl, en la diabetes tipo 1, sería recomendable

medir cuerpos cetónicos para excluir cetosis, en dicho caso habría que posponerlo y corregir adecuadamente la
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presencia de cetosis. Respecto a la necesidad de tomar o no hidratos durante la realización del ejercicio y en qué

cantidad, dependerá de la intensidad y duración del mismo entre otros factores.

De cualquier manera, hay que dejarse siempre aconsejar y ayudar por un profesional sanitario que analice cada

caso en particular, cada diabetes es un mundo, y cada cuerpo también.

A medida que el ejercicio físico se vaya convirtiendo en una rutina frecuente, se irá tomando el control y se sabrá

en qué momento hay que parar para actuar de la forma más conveniente.

NO BUSQUES EXCUSAS, BUSCA MOTIVACIÓN

A la hora de empezar a hacer deporte, a todo el mundo se le pueden pasar mil excusas por la cabeza para dejarlo

de lado. Para que esto no pase, es imprescindible que se trate de un ejercicio que guste de tal manera que motive

constantemente a mejorar y sobre todo a seguir practicándolo.

Por eso, antes de empezar, puede que lo mejor sea informarse sobre todos aquellos deportes que le pueden gustar

a cada uno y decantarse por aquel que más te motive. Llevando un control adecuado de la diabetes, un adecuado

asesoramiento y sabiendo cómo manejar la diabetes durante el ejercicio, no tiene por qué excluirse ningún depor-

te ni ejercicio, así que simplemente es cuestión de elegir el que más motive y… ¡Dedicarse a ello en cuerpo y alma!
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FACTORES CLAVE DEL DÍA A

DÍA PARA HACER DEPORTE
CON DIABETES
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FACTORES CLAVE DEL DÍA A DÍA PARA HACER

DEPORTE CON DIABETES
Para cualquier persona, el ejercicio físico y el deporte son algo básico para un estilo de vida saludable, y no por

padecer diabetes es una excepción. Por lo que, para conseguir un ritmo con el que cada uno se sienta bien e ir

superando cada meta, hay que tener en cuenta unos factores clave para conciliar a la perfección una vida activa

con la diabetes.

Puede que al principio resulte difícil adaptarse a la nueva rutina, que dé pereza o que incluso parezca que no me-

rezca la pena. Es cierto que hay que llevar un control adecuado para poder practicar deporte si se padece diabetes,

pero la evolución y los cambios que se notarán harán que resulte satisfactorio.

Como en muchos otros aspectos, todo es cuestión de dejar las excusas a un lado y buscar fuentes de motivación.
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ALIMENTACIÓN

La alimentación es un factor clave para mantenerse saludables y controlar tanto el peso como la glucosa en el

cuerpo.

Ya sabemos que no existe una dieta específica para personas con diabetes, esto quiere decir que pueden comer

de todo siempre que se sigan las recomendaciones extensibles a la población general acerca de dieta equilibrada.

Existen distintas formas de alimentación equilibrada, un buen ejemplo de la misma, es la dieta mediterránea. En

ella, el aceite de oliva es la principal fuente de grasa, se caracteriza también por un elevado consumo de frutas, ver-

duras, hortalizas, legumbres, frutos secos y cereales integrales, un consumo moderado de carne (sobre todo aves),

pescado, huevos y lácteos, junto con un bajo consumo de carne roja y alimentos procesados.

Cuando se empieza a realizar ejercicio físico, por tanto, es muy importante establecer qué ajustes en la alimen-

tación son necesarios hacer y planificar cuándo y en qué cantidad se deben ingerir hidratos de carbono. Hay que

tener en cuenta que el consumo de hidratos de carbono va a conllevar en mayor o menor medida una elevación

en las cifras de glucemia. La cantidad exacta de hidratos de carbono que debe tomar una persona con diabetes no

está establecida. Dependerá de varios factores como las características propias de cada persona (edad, peso…), sus

preferencias, y también de los niveles de actividad física, entre otros.

En las personas con diabetes en tratamiento con insulina es importante conocer la cantidad de hidratos (raciones

de hidratos) que se van a consumir de cara a poder ajustar la cantidad de insulina que se va a administrar.

Mantener una alimentación adecuada no solo es algo altamente recomendable en la diabetes, sino que también

hará que los beneficios del deporte se multipliquen y se noten muchísimo más.

Muchas veces, las personas con diabetes están más acostumbradas a controlar su alimentación, no tener excesos y

sobre todo no abusar de ciertos alimentos que, en exceso, pueden suponer un problema, por lo que generalmente

no habrá que hacer grandes cambios en la dieta para complementar la alimentación con el deporte. Se debe man-

tener una dieta equilibrada, adaptada a los gustos y preferencias de cada uno y los beneficios vendrán solos.
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TECNOLOGÍA Y DEPORTE

Hace un tiempo, hacer deporte teniendo diabetes podía ser algo que muy poca gente considerarse. Actualmente,

sin embargo, el deporte está cada vez más presente en el día a día y la tecnología no se queda atrás.

Existen cada día más métodos tecnológicos que se han ido perfeccionando y adaptando con el tiempo hasta llegar

a cumplir con distintas tareas para facilitar el control de la diabetes.

Por un lado, hay dispositivos que monitorizan las niveles de glucosa mediante un pequeño sensor que se aplica

en la piel y que sustituye los controles de glucosa capilar, exceptuando cuando los síntomas no coincidan con los

resultados del escaneo. Dicha información se transmite en distintos programas que permiten analizar en cada mo-

mento y de forma retrospectiva la información de las cifras de glucosa. También informan en cuanto a la tendencia

de la glucemia e, incorporan alarmas que alertan de una posible hipoglucemia o hiperglucemia. De esta forma, se

dispone de más información para realizar mejores ajustes en cuanto a la ingesta y dosis de insulina, facilitando el

control sobre la diabetes.

Por otro lado, existen las llamadas bombas de insulina que administran de forma continua insulina de forma subcu-

tánea, pudiendo realizar un ajuste casi inmediato y muy fino en cuanto a la cantidad de insulina que debe ir pasando

en cada momento concreto, permitiendo ajustes de cara a la práctica de ejercicio físico.

Por último, existen herramientas que integran la información del sensor de glucosa con el ajuste de la bomba de

insulina, pudiéndose modificar los parámetros en cuanto a la dosis de insulina en función de cómo está siendo la

tendencia de la glucosa en un determinado momento.

Todo ello facilita cada vez más el control de la diabetes en los distintos aspectos de la vida, incluida la práctica de

ejercicio físico y deporte.

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ANÁLISIS DE DATOS Y TRATAMIENTOS

Ir conociendo cómo funciona cada entrenamiento, controlando los niveles de glucosa y teniendo todos los datos

posibles en una App para estudiar y entender la propia diabetes, es un paso fundamental para poder continuar con

un estilo de vida activo. Como hemos dicho, cada diabetes es un mundo y es muy importante que cada uno en-

tienda su cuerpo, siempre de la mano de un profesional sanitario.

Además, cuando se empieza a hacer deporte, llegarán un montón de sensaciones a las que puede que no se esté

acostumbrado: cansancio, extenuación, falta de aire, palpitaciones si el ejercicio es intenso, etc. Por eso mismo,

es necesario que se vaya ajustando constantemente el deporte al ritmo de la persona que lo practica, siempre mi-

diendo además los niveles de glucosa. Es importante no basarse únicamente en sensaciones porque pueden ser

confusas, por lo que antes de proceder al suministro de insulina antes de las ingestas, primero hay que conocer los

niveles de glucosa de ese momento y la tendencia global a lo largo de ese día, así como considerar si se ha realizado

ejercicio – puede favorecer una tendencia a la hipoglucemia aún horas después- de cara a asegurarse de qué se

debe hacer en cuanto al tratamiento con insulina en cada situación.

No olvidemos que, si se busca crear nuevos hábitos saludables que se quieran mantener, llevar un control de las

características del ejercicio que se practica será muy útil. Gracias a esto se podrá ir asimilando cada sensación y

conocer el cuerpo hasta que se sepa exactamente qué hacer y cuándo en cada paso del entrenamiento.
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LA IMPORTANCIA DE LA COMUNIDAD EN LA DIABETES

Una de las mejores maneras para mantener la motivación una vez se empieza a practicar deporte, es a través de

grupos de personas que estén en la misma situación.

Hay muchísima gente que se ha planteado introducir el deporte en su vida teniendo diabetes y que, después de

un tiempo, pueden aportar, no solo grandes consejos, sino también apoyo y motivación. Compartir con ellos las

vivencias, las dudas y todo lo que va pasando en el proceso, puede resultar muy liberador y, a la vez, ser una fuente

constante de aprendizaje.

Pero no solo eso, contar con una comunidad de personas con diabetes que llevan una vida saludable y activa tam-

bién puede ayudar a mantener los hábitos de una forma más fácil. Siempre se puede encontrar a gente con la

que ir a practicar deporte y que puede que lleve un ritmo parecido. Cuando una persona practica deporte con más

gente, se obliga a sí misma a seguir adelante y no dejarlo, sobre todo al principio, lo cual es bastante útil si el objetivo

es conseguir hacer del deporte un hábito.

Además, siempre resulta mucho más motivador compartir la evolución con la gente que te ha acompañado durante

todo el proceso que quedárselo para uno mismo.

Finalmente, cabe recordar que para cualquier duda sobre diabetes, es importante consultar siempre con profesio-

nales sanitarios.

Fuente y autor:

Mª Ángeles Vélez Romero

Médico especialista en Endocrinología y Nutrición

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BIBLIOGRAFÍA:
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