Está en la página 1de 10

Acta Colomb Cuid Intensivo.

2015;15(1):35-44
,661

Acta Colombiana de
Cuidado Intensivo
 

Acta Colombiana de
9ROXPHQ1~PHUR 0DU]R

▶'HVFRQWDPLQDFLyQGHODRURIDULQJHHQSDFLHQWHVYHQWLODGRV&RPSDUDFLyQ
GHODHIHFWLYLGDGGHODYDGREXFDOFRQFORUKH[LGLQDYVFUHPDGHQWDO

▶,QIHFFLRQHVGHOVLVWHPDQHUYLRVRFHQWUDOHQSDFLHQWHVFUtWLFRVFRQOHVLyQFHUHEUDO
FRQ\VLQDQWHFHGHQWHGHPDQHMRQHXURTXLU~UJLFR

▶(VWXGLRGHVFULSWLYRGHOXVRGHKHOLR[HQSDFLHQWHVGHOD8QLGDGGH&XLGDGR
,QWHQVLYR3HGLiWULFRGHO,QVWLWXWRGH2UWRSHGLD,QIDQWLO5RRVHYHOW

Cuidado Intensivo
▶3UHYDOHQFLDGHOXVRGHDODUPDVHQPRQLWRUHRQRLQYDVLYRHQXQDXQLGDG
GHFXLGDGRLQWHQVLYRHQ&RORPELDUHVSHFWRDODUHDOLGDGLQWHUQDFLRQDO

▶3ODVPDIpUHVLVHQHOSDFLHQWHFUtWLFDPHQWHHQIHUPR

▶)LHEUHGHRULJHQFHQWUDOKLSHUWHUPLDQHXURJpQLFD5HYLVLyQGHODOLWHUDWXUD

▶(OHQIHUPRFUyQLFRHQODIDVHÀQDOGHVXHQIHUPHGDGHQ&XLGDGR,QWHQVLYR
UHTXLHUHODWUDQVLFLyQGHOFXLGDGRFXUDWLYRDOFXLGDGRSDOLDWLYR5HYLVLyQ
GHODOLWHUDWXUD

▶$OWHUDFLRQHVRFXODUHVHQHOSDFLHQWHFUtWLFR

▶'LVIXQFLyQRUJiQLFDP~OWLSOHVHFXQGDULDDVtQGURPHGH&KXUJ6WUDXVVUHSRUWH
GHFDVR\UHYLVLyQGHODOLWHUDWXUD

▶,QWR[LFDFLyQDJXGDSRUFDUEDPDWRVGXUDQWHHOHPEDUD]R

▶9HQWLODFLyQPHFiQLFDHQSRVLFLyQSURQRHQSDFLHQWHVFRQOHVLyQFHUHEUDODJXGD

www.elsevier.es/acci 3XEOLFDFLyQ2ÀFLDOGHOD$VRFLDFLyQ
&RORPELDQDGH0HGLFLQD&UtWLFD
\&XLGDGR,QWHQVLYR
Asociación Colombiana
de Medicina Crítica
y Cuidado Intensivo

REVISIÓN

Fiebre de origen central/hipertermia neurogénica.


Revisión de la literatura

Jose Gabriel Charria Mejíaa, Rosa Natalia Martínez Tejeirob, Carolina Guarín Villabónc,
Carlos Velezc, Adulkarin Patiñoc, Hugo Ramirezc y Francisco Cuervo Millánd,*

a
Médico especialista en Epidemiología Clínica, residente segundo año programa de Medicina Interna, Universidad de
La Sabana, Bogotá, Colombia
b
Médica General, Universidad de La Sabana, Bogotá, Colombia
c
Médico especialista en Medicina Interna, docente asociado de Cuidado Intensivo, Universidad de La Sabana y Clínica
Universidad de La Sabana, Bogotá, Colombia
d
Médico especialista en Medicina Interna y Neumología, jefe unidad de Cuidado Intensivo, docente asociado de Cuidado
Intensivo, Medicina Interna y Neumología, Universidad de La Sabana y Clínica Universidad de La Sabana, Bogotá,
Colombia

Recibido el 15 de agosto de 2014; aceptado el 25 de noviembre de 2014

PALABRAS CLAVE Resumen /DÀHEUHGHRULJHQFHQWUDOHVXQDFRQGLFLyQSRFRIUHFXHQWHTXHVHSUHVHQWDHQ


Fiebre; el paciente hospitalizado en la unidad de cuidado intensivo por cuadros relacionados con
Fiebre de origen OHVLRQHVHVWUXFWXUDOHVDQLYHOGHOVLVWHPDQHUYLRVRFHQWUDOFRQGLFLyQTXHVHUHODFLRQD
central; con la pérdida de la capacidad de regulación térmica secundaria a múltiples noxas. En el
Cuidado intensivo presente artículo se pretende realizar una revisión de la literatura en relación al tema
DEDUFDQGRHOFRQFHSWRGHÀHEUHODUHJXODFLyQÀVLROyJLFDQRUPDOODDSUR[LPDFLyQGHO
SDFLHQWHIHEULOHQODXQLGDGGHFXLGDGRLQWHQVLYRODVEDVHVÀVLRSDWROyJLFDVGHODÀHEUHGH
RULJHQFHQWUDOVXVPDQLIHVWDFLRQHVFOtQLFDV\ÀQDOPHQWHVXWUDWDPLHQWR&DEHDQRWDUTXH
se considera un tema relevante de investigación pues a nivel de la literatura existe escasez
en cuanto a artículos de revisión relacionados con el tema.
© 2015 Asociación Colombiana de Medicina Crítica y Cuidado lntensivo. Publicado por Elsevier Espa-
ña, S.L.U. Todos los derechos reservados.

KEYWORDS Fever of central origin / neurogenic hyperthermia: A literature review


Fever;
Central origin fever; Abstract Central origin fever is a rare condition that is presented in the patient who is
Intensive care hospitalized in the intensive care unit due to conditions related with structural alterations
within the central nervous system; this condition is related with the loss of the capacity of

* Autor para correspondencia.


Correo electrónico: franciscocm@clinicaunisabana.edu.co (F. Cuervo Millán).

0122-7262/© 2015 Asociación Colombiana de Medicina Crítica y Cuidado lntensivo. Publicado por ELSEVIER ESPAÑA, S.L.U. Todos los derechos reservados.
36 J.G. Charria Mejía et al

thermal regulation secondary to multiple injuries. In the present article a literature


review is pretended to be done underlining the concept of fever, its normal physiological
regulation, the initial approach to the febrile patient in the intensive care unit, the
SK\VLRSDWRORJLFDOEDVLVRIWKHFHQWUDORULJLQIHYHULWVFOLQLFDOPDQLIHVWDWLRQVDQGÀQDOO\
the treatment. It’s important to mention that it is considered a relevant research
subject because of the lack of review articles related to on the literature.
© 2015 Asociación Colombiana de Medicina Crítica y Cuidado lntensivo. Published by Elsevier Espa-
ña, S.L.U. All rights reserved.

Introducción un rol fundamental en la producción de la elevación de la


temperatura por su efecto a nivel de los centros reguladores
/DÀHEUHGHRULJHQFHQWUDOHVXQDFRQGLFLyQHQUHODFLyQFRQ de la temperatura localizados a nivel del sistema nervioso
el desarrollo de un estado febril en pacientes con patología central y a nivel de otros tejidos periféricos con la genera-
de origen central (trauma cráneo encefálico, eventos cere- ción de reacciones vaso activas relacionadas con la pérdida/
EURYDVFXODUHV HQTXLHQHVVHGHVFDUWDQODVHWLRORJtDVLQIHF- SURGXFFLyQGHFDORU\SRUHQGHFRQODJHQHUDFLyQGHODÀH-
FLRVDVGHODÀHEUH(VXQDFRQGLFLyQSRFRIUHFXHQWHSDUDOR bre.
TXHVHKDQGHVDUUROODGRGLIHUHQWHVHVWXGLRVREVHUYDFLRQDOHV /DÀHEUHVHGHÀQHGHDFXHUGRFRQHO&ROHJLR$PHULFDQR
enfocados en conocer se frecuencia de presentación clíni- de Medicina de cuidado crítico y con la Sociedad América de
ca1. En la generación de esta condición se han planteado de Enfermedades Infecciosas por sus siglas en inglés (IDSA)
manera tradicional algunos conceptos relacionados con su como la elevación de la temperatura corporal central por
JHQHUDFLyQHQWUHORVTXHVHLQFOX\HQORVDVRFLDGRVDFRQGL- encima de los 38 grados centígrados o dos mediciones de la
FLRQHVSURLQÁDPDWRULDVQRLQIHFFLRVDVTXHFRQGLFLRQDQOD temperatura por encima de 38,3 grados centígrados4. Adi-
generación de sustancias pirógenas y por ende la generación cionalmente en el paciente con diagnóstico de neutropenia
GHÀHEUHVLQHPEDUJRGHVGHDOJ~QWLHPSRVHSODQWHDODWHR- IHEULOODÀHEUHVHGHÀQHFRPRODHOHYDFLyQGHODWHPSHUDWX-
UtDTXHVHHQIRFDHQODSpUGLGDGHODFDSDFLGDGUHJXODWRULD ra medida a nivel dela cavidad oral por encima de 38,3 gra-
térmica central en relación con alteraciones hipotalámicas dos centígrados en ausencia de condiciones ambientales o la
VHFXQGDULDVTXHFRQGLFLRQDQODHOHYDFLyQGHOXPEUDOGHUH- elevación de la temperatura por encima de 38 grados centí-
gulación de la temperatura corporal y consecuentemente la JUDGRVTXHSHUGXUDSRUPiVGHXQDKRUD5. En términos gene-
DSDULFLyQGHÀHEUH1&DEHPHQFLRQDUTXHODVDOWHUDFLRQHVR UDOHVFXDOTXLHUSDFLHQWHKRVSLWDOL]DGRHQODXQLGDGGH
el compromiso hipotalámico en general, puede relacionarse cuidado intensivo con elevación de la temperatura por enci-
FRQOHVLRQHVHVWUXFWXUDOHVROHVLRQHVHQODVTXHODFLUFXOD- ma de los 38,3 grados centígrados se ha de considerar como
ción sanguínea hipotalámica se encuentran comprometidas XQSDFLHQWHFRQXQFDVRFRQÀUPDGRGHÀHEUH4 y los estudios
SRUORTXHHVIUHFXHQWHHQFRQWUDUODÀHEUHGHRULJHQFHQWUDO ulteriores han de ser realizados enfocados en la determina-
en pacientes con lesiones traumáticas cerebrales y pacien- ción de la causa de la misma.
tes con patologías vasculares cerebrales. $SHVDUGHTXHH[LVWHXQDGHÀQLFLyQHVWDEOHFLGDSRUXQ
6HGHEHPHQFLRQDUTXHHOGLDJQyVWLFRGHODFRQGLFLyQGH parámetro numérico de valoración, bien sea por escalas de
LQWHUpVHQODDFWXDOLGDGVHFRQÀJXUDFRPRXQGLDJQyVWLFR temperatura en grados centígrados o en otro tipo de grados,
de exclusión el cual se ha de sospechar después de haber VHGHEHPHQFLRQDUTXHHQHOPRPHQWRGHUHDOL]DUHOSURFH-
GHVFDUWDGRWRGDVODVFDXVDVTXHVHUHODFLRQDQFRQODJHQHUD- so de aproximación diagnostica del paciente febril y por
FLyQGHÀHEUHHQHOSDFLHQWHKRVSLWDOL]DGRHQODXQLGDGGH HQGHFRQÀHEUHGHRULJHQFHQWUDOVHGHEHWHQHUHQPHQWH
cuidado intensivo1 adicionalmente en el proceso de aproxi- las variaciones normales de temperatura del cuerpo humano
PDFLyQGLDJQRVWLFDDOJXQDVFRQGLFLRQHVSUHH[LVWHQWHVTXH LQÁXHQFLDGDVSRUHOULWPRFLUFDGLDQRODDFWLYLGDGFRWLGLDQD
se manifiestan en el paciente con lesiones cerebrales se del individuo y factores ambientales. Estos últimos, de gran
pueden hacer manifiestas (diabetes insípida, estados de interés en el paciente hospitalizado en las unidades de cui-
FRPDSURORQJDGRV TXHSXHGHOOHJDUDJHQHUDUODVRVSHFKD GDGRFULWLFR\DTXHYDULDFLRQHVWpUPLFDVVHKDQORJUDGRYHU
GHODÀHEUHGHRULJHQFHQWUDOFRPRPDQLIHVWDFLyQFOtQLFD1. LQÁXHQFLDGDVSRUFDPELRVDPELHQWDOHVFRPRODYHQWLODFLyQ
el número de cobijas y frazadas utilizadas, la exposición a la
OX]VRODUFRQGLFLRQHVHQUHODFLyQFRQSURFHVRVTXLU~UJLFRV
'HÀQLFLyQGHÀHEUH como lavados peritoneales, procesos de hemodiálisis y he-
PRGLDÀOWUDFLyQHQWUHRWURV6-8. Por tal razón, al realizar la
En los pacientes hospitalizados en la unidad de cuidado in- aproximación del paciente febril en general, las variables
WHQVLYR\HQODVDODJHQHUDOGHKRVSLWDOL]DFLyQTXLHQHVVH de confusión deben ser minuciosamente evaluadas para de-
encuentran cursando con estados críticos de patologías de terminar si la elevación de la temperatura es dependiente
diferente índole2ODÀHEUHVHSUHVHQWDFRPRXQDPDQLIHVWD- de un proceso fisiológico de variación normal o en reali-
ción en la cual el componente generalmente infeccioso/in- dad de un estado fisiopatológico desencadenado por una
flamatorio está presente, dicho componente infeccioso/ condición deletérea para el paciente.
LQÁDPDWRULDFRQGLFLRQDODDFWLYDFLyQGHGLIHUHQWHVOtQHDV 2WURVGHORVIDFWRUHVGHFRQIXVLyQTXHUHTXLHUHGHDWHQ-
FHOXODUHV QHXWUyÀORVPDFUyIDJRVHQGRWHOLR \ODSURGXF- FLyQHVHOTXHVHUHODFLRQDFRQORVPHGLFDPHQWRVGDGDOD
FLyQ\JHQHUDFLyQGHGLIHUHQWHVVXVWDQFLDVSURLQÁDPDWRULDV condición crítica del paciente hospitalizado en la unidad
conocidas como pirógenos endógenos3, en la tabla 1 se plan- de cuidado intensivo, es frecuente encontrar la prescripción de
tean algunos ejemplos. Dichos pirógenos endógenos juegan XQJUDQQ~PHURGHPHGLFDPHQWRVTXHSXHGHQHMHUFHUXQ
Fiebre de origen central/hipertermia neurogénica. Revisión de la literatura 37

HOSDFLHQWHHQODXQLGDGGHFXLGDGRLQWHQVLYRTXLHQHVJHQH-
Tabla 1 (MHPSORVGHSLUyJHQRVHQGyJHQRVTXHVHDVRFLDQ
ralmente están bajo efecto de sedación y por lo general con
FRQODSURGXFFLyQGHÀHEUH
UHTXHULPLHQWRGHYHQWLODFLyQPHFiQLFDLQYDVLYDDWUDYpVGH
Pirógenos endógenos WXERVRURWUDTXHDOHVVHSUHVHQWDXQDGLÀFXOWDGDGLFLRQDO
,QWHUOHXTXLQDV\ para la medición21.
3URWHtQDVLQÁDPDWRULDVGHOPDFUyIDJR 0,3 Se han desarrollado otros métodos menos utilizados en la
unidad de cuidado intensivo como la medición a nivel tim-
Interferón gamma (INF gamma)
pánico o con dispositivos infrarrojos, mediciones a nivel de
Factor de necrosis tumoral alfa (TNF alfa) ODDUWHULDWHPSRUDOD[LODVRPpWRGRVTXtPLFRVHQWpUPLQRV
generales son menos deseables dada la alta variabilidad de
la medición.
En la tabla 2 se plantean las recomendaciones propuestas
por las guías del Colegio Americano de Medicina de cuidado
efecto sobre la producción de térmica y con las valoraciones crítico y con la Sociedad América de Enfermedades Infeccio-
realizadas por el personal encargado de la atención. Algunos sas para la adecuada medición de la temperatura.
medicamentos utilizados en muchas ocasiones enfocados en
el control de otros síntomas como puede ser el dolor, gene-
ran un efecto en la regulación mediada por procesos celula- %DVHVÀVLROyJLFDVGHODÀHEUH
res y moleculares, por ejemplo, la administración rutinaria
GHDFHWDPLQRIpQRDQWLLQÁDPDWRULRVQRHVWHURLGHRVSDUD 3DUDODDGHFXDGDFRPSUHQVLyQGHODVEDVHVÀVLROyJLFDV\À-
control del dolor pueden generar una represión en la expre- VLRSDWROyJLFDVGHODÀHEUHVHGHEHHQWHQGHUODSURGXFFLyQ
VLyQGHVXVWDQFLDVSURLQÁDPDWRULDV\HQPDVFDUDUXQYHUGD- GHODPLVPDFRPRODUHVSXHVWDDXQDVHULHGHHYHQWRVTXH
dero cuadro febril. Por tal motivo se debe evaluar de forma generan interacción orgánica y tisular con sustancias capa-
LQGLYLGXDOL]DGDFDGDFDVR\GHWHUPLQDUTXHDQWHODSUHVHQ- FHVGHJHQHUDUXQDUHVSXHVWDTXHJHQHUDOPHQWHHVWDPHGLD-
FLDGHRWURVVtQWRPDV\VLJQRVFOtQLFRVTXHVXJLHUDQXQFXD- da por la producción de sustancias endógenas conocidas
GURLQIHFFLRVRFRPRSRUHMHPSORWDTXLFDUGLDOHXFRFLWRVLV como pirógenos endógenos los cuales se generan por la in-
QHXWURÀOLDKLSRWHQVLyQHQDXVHQFLDGHÀHEUHGHEHREOLJDU ÁXHQFLDGHVXVWDQFLDVH[yJHQDVFRQRFLGDVFRPRSLUyJHQRV
a la revisión de las prescripciones para no pasar por alto un exógenos22.
posible cuadro febril enmascarado como componente sin-
dromático de una determinada condición4.
En cuanto al método de estimación de la temperatura se
GHEHPHQFLRQDUTXHGHEHVHUXQPpWRGRGHIiFLODSOLFDFLyQ
preciso y reproducible. Existen un sin número de dispositi-
Tabla 2 Recomendaciones
vos para la medición, según algunos autores el método de
oro para la evaluación de la temperatura corporal central Según las circunstancias clínicas del paciente seleccionar
debe ser un catéter de arteria pulmonar con un dispositivo el método más preciso y aplicable
de evaluación9-13VLQHPEDUJRQRWRGRVORVSDFLHQWHVTXH &XDOTXLHUGLVSRVLWLYRGHPHGLFLyQKDGHVHU
ingresan a la unidad de cuidado intensivo serán invadidos adecuadamente calibrado, según recomendaciones
con catéter de arteria pulmonar por consiguiente es impor- del fabricante
tante buscar otra serie de métodos de evaluación de la tem- &XDOTXLHUGLVSRVLWLYRGHPHGLFLyQTXHVHXWLOLFHGHEHVHU
peratura. Otros autores proponen la medición a nivel de la XVDGRDVHJXUDQGRTXHHOSDFLHQWHRHORSHUDGRUQR
vejiga con catéteres con dispositivos de medición, plantean tengan el menor riesgo de diseminación de patógenos
TXHIDYRUHFHQXQDPHGLFLyQFRQWLQXDVRQPHQRVLQYDVLYRV El lugar de medición y el resultado debe ser registrado
\PiVPHGLFLRQHVVRQSUiFWLFDPHQWHLGpQWLFDVDODVTXHXQ adecuadamente en una tabla
catéter de arteria pulmonar pueda proporcionar14,15.
La aparición de temperatura por encima de los 38 grados
/DPD\RUGLÀFXOWDGGHODPHGLFLyQDQLYHOGHODYHMLJDR FHQWtJUDGRVUHTXLHUHGHXQDHYDOXDFLyQFOtQLFD
de otras mediciones como pueden ser las esofágicas con ca- minuciosa, no necesariamente evaluación de laboratorio
téteres similares es el costo de los dispositivos, los cuales o de imágenes
suelen ser elevados y la factibilidad de obtener uno de estos
La aparición de temperatura por debajo de los 36 grados
es difícil generalmente.
centígrados en ausencia de causas claras de hipotermia
Por tal motivo, otra serie de métodos menos invasivos y UHTXLHUHGHXQDHYDOXDFLyQFOtQLFDPLQXFLRVDQR
menos costos se pueden utilizar con mediciones relativa- necesariamente evaluación de laboratorio o de imágenes
PHQWHSUHFLVDVTXHSXHGHQIDFLOLWDUHOSURFHVRGHWRPDGH
Las unidades de cuidado intensivo pueden disminuir el
decisiones en el momento de realizar la aproximación diag-
FRVWRGHOHVWXGLRGHODÀHEUHFRQODERUDWRULRVHLPiJHQHV
nostica. Entre los métodos más comúnmente utilizados se
no útiles y por el contrario las evaluaciones clínicas
puede mencionar la medición a nivel del recto con termó- minuciosas deben prevalecer, el estudio con métodos
metros de mercurio con limitantes como la incomodidad adicionales debe depender de los hallazgos derivados
para el paciente, el riesgo de perforación intestinal y el de la evaluación clínica
riesgo de infección por entero patógenos16-20. Otros métodos
incluyen la medición de la temperatura oral el cual es fácil Tomado y adaptado de las guías del Colegio Americano de Medicina
de cuidado crítico y con la Sociedad América de Enfermedades
de realizar y generalmente los pacientes sin alteración del
Infecciosas4.
estado de conciencia están familiarizados con el método, en
38 J.G. Charria Mejía et al

En términos generales la interacción de los pirógenos exó-


Tabla 3 Receptores celulares relacionados con el factor
genos con las sustancias propias del cuerpo humano se inicia
de transcripción nuclear kappa beta y el signalosoma
cuando dichas sustancias pirógenas entran en contacto mo-
OHFXODU\TXtPLFRFRQFpOXODV\VXVWDQFLDVHQGyJHQDVHOPR- Receptor tipo 1 del factor de necrosis tumoral (TNFR 1)
delo más sencillo para la adecuada compresión se relaciona 5HFHSWRUWLSRGHODLQWHUOHXTXLQD ,/5
con las patologías infecciosas las cuales a través de algunas
sustancias propias de su estructura (pared bacteriana, lípi- Receptor similar a Toll (TLR)
dos de membrana, sustancias secretadas) interacciona con Receptor de células B (BCR)
ORVHOHPHQWRVFHOXODUHV\TXtPLFRVDWUDYpVGHUHFHSWRUHV
Receptor de células T (TCR)
PROHFXODUHVGHVHQFDGHQDQGRODUHVSXHVWDLQÁDPDWRULD\OD
SURGXFFLyQGHVHxDOHVLQWHUQDVTXHYDQDJHQHUDUODSURGXF- Receptor de linfotoxina beta
FLyQGHVXVWDQFLDVHQGyJHQDVTXHDFW~DQFRPRSLUyJHQRV\ Factor activador de células B (BAFFR)
causan el desarrollo de la elevación de la temperatura y por
Clúster de diferenciación 40 (CD40)
FRQVLJXLHQWHODÀHEUH23.
En cuanto al proceso de interacción entre las sustancias Tomado y adaptado de Echeverry y Mockus24.
externas o pirógenos exógenos y las células y moléculas en-
dógenas se debe mencionar la importancia de la activación
del sistema inmune el cual a través de diferentes vías tanto teracción del factor de transcripción nuclear kappa beta y
humorales como celulares genera una serie de respuestas el signalosoma y otras vías la acción de estas sustancias ac-
moleculares encaminadas a la producción de sustancias pi- tivas se relacionan con la generación de efectos sistémicas
UyJHQDVHQGyJHQDVTXHVHHQFDUJDUDQSRVWHULRUPHQWHGHO HQWUHORVTXHVHLQFOX\HQDXPHQWRGHODTXLPLRWD[LV\GLD-
ensamblaje de la respuesta de inducción febril y la genera- pédesis de células del sistema retículo endotelial fagocíti-
FLyQXOWHULRUGHODÀHEUHFRPRPDQLIHVWDFLyQGHXQSURFHVR co, amento de los procesos de la actividad de oxidación
En los últimos años se han logrado describir un sin número celular (metabólica), activación o inhibición de vías meta-
GHLQWHUDFFLRQHVOLJDQGRUHFHSWRUHQHOGHVDUUROORÀVLRSDWR- bólicas de diferentes líneas celulares, producción de anti-
lógico de la infección/sepsis y el cáncer, sin embargo, entre FXHUSRV\FLWRTXLQDV\SRWHQFLDFLyQGHODFDSDFLGDGFLWR
HVWDVVHULHVGHLQWHUDFFLRQHVH[LVWHXQDTXHVHKDSODQWHDGR WR[LFDGHORVOLQIRFLWRVDVtVHSXHGHHQWHQGHUTXHODÀHEUH
FRPRPRGHORGHLQGXFFLyQGHSURGXFFLyQGHFLWRTXLQDV\HV y el efecto de los pirógenos endógenos actúan como induc-
la vía de factor de transcripción nuclear kappa beta y el tores y propagadores de la respuesta inmune.
signalosoma. Dicho factor se describió inicialmente hace &DEHDQRWDUTXHHQODDFWXDOLGDGH[LVWHQDOJXQDVWHRUtDV
20 años como un proteína intracelular y citoplasmática la HQODVTXHVHSODQWHDQTXHORVSLUyJHQRVHQGyJHQRVSH-
FXDOHQFRQGLFLRQHVQRUPDOHVVHHQFXHQWUDUHSULPLGD\TXH netran la barreara hemato encefálica pero otras vertientes
puede llegar a activarse por una serie de procesos de inter- DVHJXUDQTXHQRSRUHQGHD~QH[LVWHXQYDFtRWHyULFRHQHO
acción celular, a saber a nivel de los linfocitos existen re- modelo de activación de sistema nervioso central principal-
FHSWRUHVSDUDGHWHUPLQDQWHVHStWRSHVDQWLJpQLFRVTXHD PHQWHDFWLYDFLyQKLSRWDOiPLFD\UHJXODFLyQGHODÀHEUH6LQ
través de las células presentadoras de antígenos son activa- importar cuál sea la vía por la cual la actividad de los piró-
dos con la subsecuente activación de procesos de señaliza- genos endógenos logran generar el estímulo sobre el sistema
ción a nivel intracelular, en la tabla 3 se plantean algunos QHUYLRVRFHQWUDOODSURGXFFLyQÀQDO\GHWHUPLQDQWHGHOD
de los receptores y la activación o des inhibición de las ele- regulación térmica esta mediada por la activación de la ci-
PHQWRVTXHQRUPDOPHQWHLQKLEHQHOIDFWRUGHWUDQVFULSFLyQ FORR[LJHQDVD\ODSURGXFFLyQGHSURVWDJODQGLQDHVSHFtÀFD-
nuclear kappa beta, una vez se logra esta des inhibición a mente prostaglandina E2.
WUDYpVGHGLIHUHQWHVSURFHVRVTXtPLFRVLQWUDFHOXODUHVHOIDF- Una vez los pirógenos endógenos generan el estímulo de
tor de transcripción nuclear kappa beta es activado y su la producción dela prostaglandina E2 esta, genera un es-
efecto se dirige hacia el núcleo celular donde genera una tímulo a nivel de la región pre óptica localizada en el hipo-
serie de interacciones genómicas activando o inhibiendo la tálamo anterior generando la producción de otra serie de
expresión génica con la subsecuente producción de señales LQWHUOHXTXLQDVTXHPHGLDUDQODSURGXFFLyQGHODUHVSXHVWD
HQIRFDGDVHQODSURGXFFLyQGHGLIHUHQWHVLQWHUOHXTXLQDVSUR febril25.
LQÁDPDWRULDVHQWUHODVTXHVHLQFOX\HQOD,/OD,/\OD,/ Las interacciones y mecanismos de las sustancias piróge-
12 entre otras, las cuales actúan como elementos pirógenos nas generadas y su interacción con el hipotálamo no están
HQGyJHQRV\VHDVRFLDQFRQODSURGXFFLyQGHODÀHEUHSRU DXQFRPSOHWDPHQWHGLOXFLGDGRORTXHVHFRQRFHHVHOHIHFWR
interacciones posteriores24. TXHJHQHUDQHVWDV\ODSURVWDJODQGLQD(HQHOSXQWRSUHÀ-
$GLFLRQDOPHQWHFDEHPHQFLRQDUTXHODVPRGLÀFDFLRQHV MDGRGHFRQWUROWpUPLFRKLSRWDOiPLFRHOHYDQGRHVWHORTXH
génicas producidas por el factor de transcripción nuclear genera una adaptación para lograr un nivel más alto de tem-
kappa beta también se relacionan con la activación de mo- peratura con la generación de las manifestaciones clínicas
léculas de adhesión y con las generación de proteínas de como el tremor, el aumento del metabolismo celular, los
membrana a nivel de las células del sistema retículo endo- alambres musculares y la vasoconstricción antes de generar
WHOLDOIDJRFtWLFRTXHIDFLOLWDQODPLJUDFLyQ\GLDSpGHVLVGH la respuesta contra reguladora.
HVWDVDGLIHUHQWHVyUJDQRV\VLVWHPDVHQWUHORVTXHVHLQFOX- La respuesta de contra regulación se generara una vez los
yen el sistema nervioso central a través de la barrera hema- mecanismos de generación de calor y el metabolismo acele-
to encefálica. UDGRORJUHQDOFDQ]DUHVHSXQWRSUHÀMDGRGHWHPSHUDWXUD
Una vez se genera la producción de pirógenos endógenos DQRUPDOPHQWHDMXVWDGR(QODÀHEUHGHRULJHQFHQWUDOHO
mediante las diferentes vía de señalización celular y la in- GDxRDQLYHOKLSRWDOiPLFRJHQHUDXQSUHÀMDPLHQWRGHOSXQ-
Fiebre de origen central/hipertermia neurogénica. Revisión de la literatura 39

WRHQQLYHOHVPiVDOWRVSRUORTXHHORUJDQLVPRXWLOL]DUDGH GHORVGLIHUHQWHVVLVWHPDVHVFHQDULRTXHHVIUHFXHQWHHQ
manera constante la producción de calor como método cuidado intensivo puede explicar las variaciones en la tem-
GHORJURGHODWHPSHUDWXUD'DGRTXHDOSDUHFHUODILH- SHUDWXUD&XDGURVFUyQLFRVTXHQRUHVXHOYHQ\TXHFXPSOHQ
EUHGHRULJHQFHQWUDOQRHVWiPHGLDGDSRULQÁDPDFLyQVLQR ODVGHÀQLFLRQHVGHÀHEUHSRVWHULRUPHQWHGHVFULWDVGHEHQ
por un daño temporal permanente a nivel hipotalámico, el ser estudiadas de forma exhaustiva dado el riesgo y la carga
XVRGHPHGLFDPHQWRVFRPRDFHWDPLQRIpQ\DQWLLQÁDPDWR- de enfermedad derivada de los procesos infecciosos los cua-
rios no esteroideos no son efectivos en el control de la tem- les son los más frecuentemente encontrados en la unidad de
peratura como se mencionara más adelante. cuidado intensivo26.
(QODÀJXUDVHSODQWHDXQHMHPSORJUiÀFRGHORTXHVX- Aproximadamente 30% de los pacientes hospitalizados de-
FHGHFRQHOSXQWRSUHÀMDGRGHWHPSHUDWXUD\VXUHODFLyQ VDUUROODQÀHEUH\GHHVWRVHOGHORVSDFLHQWHVODSUHVHQ-
con los mecanismos de regulación de la temperatura corpo- tan en relación con procesos de etiología infecciosa2.
UDOHQXQVXMHWRQRUPDO\XQVXMHWRFRQÀHEUH /DDSUR[LPDFLyQGHOSDFLHQWHFRQÀHEUHHQODXQLGDGGH
(QODÀJXUDVHSODQWHDXQHVTXHPDHQFXDQWRDODSUR- cuidado intensivo plantea dos escenarios, el paciente con
ducción de pirógenos endógenos como respuesta a los piró- ÀHEUHGHRULJHQLQIHFFLRVR\HOSDFLHQWHTXHSUHVHQWDÀHEUH
genos exógenos y la producción de fiebre a través de su de origen no infeccioso. En términos generales la aproxima-
efecto sobre el hipotálamo. ción diagnostica se ha de realizar de forma similar enfocada
en primer lugar en realizar una revisión exhaustiva de la
historia clínica y de la forma de presentación del cuadro
Aproximación del paciente febril en cuidado febril, en segundo lugar la realización de un examen físico
intensivo minucioso permitirá determinar si existe o no un foco deter-
minado y esto podrá enfocar en cierta medida el tratamien-
A nivel de la unidad de cuidado intensivo es frecuente en- to inicial. En tercer lugar es relevante determinar cuáles
contrar el paciente en estado crítico cursando con un cua- son las características de la fiebre, se relaciona con una
dro febril. Generalmente dadas las características de estos condición particular (hemodiálisis, cateterismos vesicales,
SDFLHQWHVORVHVWDGRVSRVWWUDXPiWLFRVSRVWTXLU~UJLFRV\ etc.), duración del episodio, relación con cambios hemodi-
los estados sépticos son frecuentes. Dado esto, las causas námicos, tiempo de presentación. Todos estos factores pue-
más frecuentemente asociadas con los mismos y relaciona- den ayudar a determinar el origen de la misma. Cabe anotar
das con infección siempre deben ser tenidas en considera- TXHSDUDHOWHPDGHLQWHUpVHQODSUHVHQWHUHYLVLyQWRGDV
ción y deben ser descartadas. las causas de fiebre deben ser descartadas pues como se
Se encuentra de manera frecuente la elevación transito-
ria de la temperatura, sin embargo generalmente dichas
HOHYDFLRQHVGHIRUPDWUDQVLWRULDFDUHFHUGHVLJQLÀFDQFLDFOt-
nica, adicionalmente el proceso de manipulación invasiva
03
03
4HJY}MHNVZ 7PY}NLUVZ ;5-
4VUVJP[VZ ,UK}NLUVZ
‡* 0-5
0UK\J[VYLZ 7,
KLWPY}NLUVZ 704(SMH
LUK}NLUVZ
 3PUMVJP[VZ
-PIYHZWYL}W[PJHZ
KLSOPWV[mSHTVHU[LYPVY
 76/(

 :xU[LZPZKLWYVZ[HNSHUKPUHZ,
:\KVY

 (. *HTIPVKLW\U[VWYLMPQHKV
*
;LTISVY 9
 0
:
=HZVJVU[YPJJP}U
7PSVLYLJJP}U 0

:LJYLJP}UKLHKYLUHSPUH :
5VYTHS -PLIYL ,ZJHSVMYxVZ :\KVY
=HZVKPSH[HJP}U
*HSLU[HTPLU[VKLWPLS

;LTWLYH[\YHWYLMPQHKH ;LTWLYH[\YHJVYWVYHS

;LTWLYH[\YHYLHS ;LTWLYH[\YHJVYWVYHS

Figura 1 3XQWRSUHÀMDGRGHWHPSHUDWXUDHQHOSDFLHQWHVLQ\ Figura 2 0RGHORÀVLRSDWROyJLFRGHODÀHEUH\ORVSLUyJHQRV


FRQÀHEUH endógenos y su relación con el hipotálamo.
Tomado y adaptado de Alpizar y Medina39. Tomado y adaptado de Alpizar y Medina39.
40 J.G. Charria Mejía et al

PHQFLRQyDQWHULRUPHQWHODÀHEUHGHRULJHQFHQWUDOVHGH- KRVSLWDOL]DGRHQODXQLGDGGHFXLGDGRLQWHQVLYR\TXLHQJH-
termina como diagnóstico de exclusión27. neralmente cursa con patologías de otra índole, el riesgo de
(QFDVRGHQRH[LVWLUXQIRFRFODURGHODÀHEUHVHGHEHQ desarrollo de infección es mayor y por esto la diferenciación
tomar cultivos inicialmente según recomendaciones de las H[KDXVWLYDGHORULJHQGHODÀHEUHMXHJDXQSDSHOIXQGDPHQ-
guías, antes de iniciar antibiótico terapia empírica. Se de- WDOTXHVHUHODFLRQDFRQGHVHQODFHVIXHUWHVHQWUHORVTXHVH
ben descartar todas las posibles causas como pueden ser incluye la morbilidad y mortalidad y otra serie de desenlaces
causas respiratorias, urinarias, a nivel de tracto respiratorio QRPHQRVLPSRUWDQWHVHQWUHORVTXHVHLQFOX\HQORVFRVWRV
alto, abdominales y gasto intestinales, óseo articulares, directos e indirectos derivados del estado patológico.
odontogénicas, de los órganos de los sentidos, de piel y teji- Como se mencionó en la regulación central de la tempera-
dos blandos e inclusive del sistema nervioso central. Una tura a nivel de hipotálamo existen los centros reguladores
vez se descarten estas causas consideradas como las más de la temperatura orgánica, en los procesos de lesión del
frecuentes se deben retirar los accesos vasculares y las son- sistema nervioso central puede existir compromiso hipotalá-
GDVELHQVHDQXULQDULDVJDVWURLQWHVWLQDOHVRGHGUHQDMHTXL- PLFRGLVUXSFLyQHVWUXFWXUDO\PDOIXQFLRQDPLHQWRORTXH
U~UJLFR(QFDVRGHSHUVLVWLUODÀHEUH\VLGXUDQWHRGHVSXpV FRQGLFLRQDODDSDULFLyQGHXQQXHYRSXQWRSUHÀMDGRGHWHP-
GHOSURFHVRGHE~VTXHGDDFWLYDHOSDFLHQWHSUHVHQWDVLJQRV SHUDWXUD\SRUFRQVLJXLHQWHODDSDULFLyQGHPHFDQLVPRVÀ-
FOtQLFRV\SDUDFOtQLFRVTXHGHWHUPLQHQXQSURFHVRVpSWLFR siológicos implicados en la conservación del calor y pérdida
se debe iniciar de manera empírica antibióticos de amplio progresiva de los mecanismos autorreguladores de pérdida
espectro los cuales serán re direccionados con los resultados GHOPLVPR&DEHPHQFLRQDUTXHSDUDDOJXQRVDXWRUHVHOWpU-
obtenidos de las muestras de cultivo de diferentes lugares PLQRÀHEUHHKLSHUWHUPLDVHFRQIXQGHQ\VHXWLOL]DQGHPD-
bien sean hematológicos, urinarios, abdominales, gastroin- nera errónea. Para explicar esta diferencia se debe analizar
testinales, sistema nervioso, etc.286LODÀHEUHSHUVLVWH\HO TXHSDUDKDEODUGHÀHEUHVHGHEHWHQHUHQFRQVLGHUDFLyQ
SDFLHQWHGDDOJ~QGDWRFOtQLFRTXHSXHGDVXJHULUHOOXJDUGH WRGRVORVSURFHVRVÀVLRSDWROyJLFRVH[SOLFDGRVSDUDODJHQH-
la infección, se debe asumir toda la responsabilidad y direc- UDFLyQGHODPLVPDHQORVTXHVHLQFOX\HQODJHQHUDFLyQGH
FLRQDUHOPDQHMRDOUHWLURGHOIRFRLQIHFFLRVR/DE~VTXHGD productos pirógenos exógenos, endógenos y sus interaccio-
activa del mismo es una práctica frecuente y no es deleté- QHV'LIHUHQWHSDUDORTXHVHSODQWHDHOFRQFHSWRGHKLSHU-
reo hacerlo siempre y cuando se evalúe de manera detalla- termia el cual se relaciona con un aumento del punto
GDFXDOHVHOULHVJREHQHÀFLRGHKDFHUORPHGLDQWHWpFQLFDV SUHÀMDGRGHWHPSHUDWXUDSHURQRVHFXQGDULRDXQSURFHVR
GHGLDJQyVWLFRTXHSXHGHQVHULQYDVLYDV\TXHSXHGDQVRPH- de pirógenos endógenos, exógenos y su interacción sino a un
ter al paciente a sustancias toxicas como por ejemplo los daño estructural y funcional a nivel del centro termorregu-
medios de contraste en tomografía o resonancia magnética lador localizado en el hipotálamo anterior en el área pre
nuclear. ySWLFD%DMRHVWHRUGHQGHLGHDVVHSXHGHGHWHUPLQDUTXHHO
Adicionalmente a estudio con paraclínicos convencionales PHMRUWHUPLQRSDUDODÀHEUHGHRULJHQFHQWUDOVHULDKLSHU-
cada vez es más frecuente y de más fácil acceso el uso de termia de origen central o hipertermia neurogénica. En to-
HOHPHQWRVFRPRELRPDUFDGRUHVTXtPLFRVFRQORVTXHVH das las fiebres existe hipertermia pero no todas las
SXHGHGHWHUPLQDUHORULJHQGHODÀHEUH(VWRVGHEHQVHU KLSHUWHUPLDVVRQÀHEUH32.
utilizados como herramientas de ayuda pero nunca deben A pesar de las diferencia de conceptos planteado en cuan-
sustituir el juicio clínico ni el proceso de evaluación del mé- to al uso de los términos cabe mencionar una premisa de
GLFR'HORVELRPDUFDGRUHVGHVDUUROODGRVWDOYH]HOTXH importancia relevante. Sin importar cuál sea la causa de le-
cuenta con más evidencia es la procalcitonina, el cual es sión sobre el sistema nervioso central, generalmente la vía
una herramienta útil y si se encuentra disponible debería ÀQDOFRP~QHVHOGHVDUUROORGHXQHYHQWRLQÁDPDWRULRHO
ser siempre utilizada29-31. cual esta mediado por el determinado síndrome de respues-
Una vez se descarte la presencia de infecciones como de- WDLQÁDPDWRULDVLVWpPLFDHQHOTXHVHJHQHUDODSURGXFFLyQ
WHUPLQDQWHVGHODÀHEUHVLQLPSRUWDUHODJHQWHHWLROyJLFR GHVXVWDQFLDVSURLQÁDPDWRULDVTXHGHFLHUWRPRGRJHQHUD-
FDXVDO\ODÀHEUHFRQWLQ~HVHSXHGHHPSH]DUDGHWHUPLQDU UDQDOJ~QHIHFWRVREUHODSURGXFFLyQGHLQWHUOHXTXLQDV\
FRPRFDXVDGHÀHEUHODGHRULJHQFHQWUDORHQRWURVFDVRV SURVWDJODQGLQD(SRUFRQVLJXLHQWHODÀVLRSDWRORJtDGHOD
VHJ~QODVFDUDFWHUtVWLFDVFOtQLFDVGHOSDFLHQWHODÀHEUHGH ÀHEUHH[SOLFDGDHQFRQMXQWRFRQODSpUGLGDGHOFRQWUROGHO
origen tumoral. FHQWURWHUPRUUHJXODGRUKLSRWDOiPLFRSXHGHQVHUODYtDÀVLR-
(QODILJXUDVHSODQWHDXQHVTXHPDGHDSUR[LPDFLyQ SDWROyJLFDÀQDOFRP~QTXHH[SOLTXHODÀHEUHRKLSHUWHUPLD
GLDJQyVWLFDGHOSDFLHQWHFRQÀHEUH de origen central.
6HGHEHPHQFLRQDUTXHODKLSHUWHUPLDRÀHEUHGHRULJHQ
central se relaciona con la aparición de una serie de altera-
Fiebre de origen central FLRQHVTXHDOWHUDQHOIXQFLRQDPLHQWRQHXURQDO$OSDUHFHU
todos los efectos derivados de la hipertermia se producen
&RPRVHPHQFLRQyDQWHULRUPHQWHDÀHEUHGHRULJHQFHQWUDO por la generación de una serie de proteínas conocidas por
está determinada por la instauración de un cuadro febril en HVWXGLRVDGHODQWDGRVHQPXULQRVFRPRSURWHtQDVGHOFKRTXH
HOSDFLHQWHTXHVHHQFXHQWUDHQHVWDGRFUtWLFR\JHQHUDO- térmico las cuales generan efectos celulares como migra-
PHQWHHQUHODFLyQFRQXQHYHQWRTXHJHQHUDDOWHUDFLyQD ción de glóbulos blancos, activación de los mismos y genera-
nivel del sistema nervioso central. Generalmente se ha des- FLyQGHDFWLYDFLyQGHFDVFDGDVLQWUDFHOXODUHVTXHWHUPLQDQ
crito en el escenario del paciente con trauma cráneo encefá- HQODSURGXFFLyQÀQDOGHFLWRTXLQDVSURLQÁDPDWRULDV32.
lico o en los pacientes con evento cerebrovascular. Se /DPLJUDFLyQFHOXODUODSURGXFFLyQGHFLWRTXLQDV\ODPLV-
FRQVWLWX\HHQXQUHWRGLDJQRVWLFRGHELGRTXHHQHOPRPHQWR ma elevación de temperatura según modelos de trauma crá-
GHOGHVDUUROORGHODÀHEUHHQXQSDFLHQWHTXHVHHQFXHQWUD neo encefálico también genera la alteración del metabolismo
Fiebre de origen central/hipertermia neurogénica. Revisión de la literatura 41

ZL[Z
-PLIYL[LTWLYH[\YH%‡*
KLOLTVJ\S[P]VZ
VYPUH`LZW\[V

:P[PVKL
:P[PVKLPUMLJJP}U PUMLJJP}U
5VVI]PV

,_mTLULZ
KPHNU}Z[PJVZ
()LTWxYPJV
*VUZPKLYL
JH\ZHUV 3xULHZJLU[YHSLZ%OVYHZYLT\L]H`J\S[P]L
PUMLJJPVZH :VUKHUHZVNmZ[YPJHYLT\L]H`;(*KLZLUVZ
+PHYYLHJ\S[P]VKLOLJLZ`[YH[HTPLU[V()LTWxYPJV

6IZLY]L
OVYHZ
6IZLY]L
OVYHZ

:PSHMPLIYL
WLYZPZ[L ;YH[HTPLU[VHU[PM‚UNPJV
:PSHMPLIYL
WLYZPZ[L =LUVNYHMxH
0TmNLULZHIKVTPUHSLZLUI‚ZX\LKH
KLPUMLJJP}U

Figura 3 $SUR[LPDFLyQGLDJQRVWLFDGHOSDFLHQWHFRQÀHEUHHQODXQLGDGGHFXLGDGRLQWHQVLYR
Tomado y adaptado de Dimopoulos y Falagas26.

del óxido nítrico el cual interfiere con el funcionamiento


neuronal pues altera la producción proteica de estas y la al-
teración en la producción de sustancias neurotransmisoras 3PILYHJP}U
TXHJHQHUDQXQGHWHULRURPD\RUHQHOIXQFLRQDPLHQWRQHX- ;*,
KLJP[VX\PUHZ
rológico. La producción de óxido nítrico está directamente
relacionado con el aumento de temperatura orgánica y con
el desarrollo de estrés oxidativo.
/RVHVWDGRVGHKLSHUWHUPLDFHQWUDOWDPELpQLQÁXHQFLDQHO
SHUÀOKHPRGLQiPLFRFHUHEUDOVHKDORJUDGRGHWHUPLQDUTXH
ORVSDFLHQWHVTXHSUHVHQWDQWUDXPDFUiQHRHQFHIiOLFR\HQ
TXLHQHVVHGHVDUUROODODKLSHUWHUPLDFRPRFRQVHFXHQFLDGHO /PWLY[LYTPH
daño neuronal, el riesgo de presentar aumento en la presión
LQWUDFUDQHDQDHVPD\RUSXHVDPHGLGDTXHDXPHQWDOD
temperatura el aporte sanguíneo cerebral tiende a aumen-
tar y por consiguiente el riesgo de desarrollo de edema ce-
rebral aumenta facilitando así el deterioro neurológico
progresivo32. (\TLU[VKLLZ[YtZV_PKH[P]V
3PILYHJP}UKLNS\[HTH[V
(QODÀJXUDVHSODQWHDODDVRFLDFLyQHQWUHKLSHUWHUPLD
.HZ[VTL[HI}SPJV
LQÁDPDFLyQ\WUDXPDFUiQHRHQFHIiOLFR\VXVHIHFWRVVREUH (\TLU[VKLJVUZ\TVKLV_xNLUV
el metabolismo neurológico. (\TLU[VKLWLYTLHIPSPKHK
KLIHYYLYH/, +H|VUL\YVUHS
,KLTHJLYLIYHS
(\TLU[VKLSH7*
Manifestaciones clínicas

(QFXDQWRDODVPDQLIHVWDFLRQHVFOtQLFDVFDEHDQRWDUTXHOD Figura 4 $VRFLDFLyQHQWUHWUDXPDFUiQHRHQFHIiOLFRLQÁD-


IUHFXHQFLDGHSUHVHQWDFLyQGHODÀHEUHRKLSHUWHUPLDGH mación e hipertermia.
origen central es variable según las diferentes series publi- Tomado y adaptado de Thompson et al.32.
42 J.G. Charria Mejía et al

cadas, evidencia en su mayoría en relación con estudios ob- SHFWLYRV\HVWXGLRVREVHUYDFLRQDOHVQRDQDOtWLFRVORTXHGD


servacionales con diseños de series de casos y reportes de la opción de desarrollar en el futuro estudios observaciona-
caso. Entre los más frecuentemente publicados se relaciona les del tipo analítico como estudios de casos y controles y
ODPDQLIHVWDFLyQFOtQLFDGHODÀHEUHFRQHVWDGRVSRVWWUDX- HVWXGLRVGHFRKRUWHV(QODDFWXDOLGDGHVFODURTXHVHFDUH-
PiWLFRV\FRQHYHQWRVFHUHEURYDVFXODUHVGHHWLRORJtDLVTXp- ce de evidencia en relación con el tema.
PLFD DXQTXH OD FRQGLFLyQ VH SXHGH SUHVHQWDU HQ ORV 'DGRHOWLSRGHSDFLHQWHHQHOTXHVHVXHOHSUHVHQWDUOD
hemorrágicos. ÀHEUHGHRULJHQFHQWUDOVHGHEHHQWHQGHUTXHDQWHHOFRQ-
Las series publicadas en relación con trauma cráneo ence- texto crítico del compromiso generalmente la afección se
IiOLFRHVWLPDXQDIUHFXHQFLDGHSUHVHQWDFLyQTXHVHHQ- YHHQSDFLHQWHYHQWLODGRVHQTXLHQHVHOHVWDGRGHFRQFLHQ-
cuentran entre el rango de 4-37%; frecuencia variable por el cia está plenamente alterado, se ha logrado evidenciar en
tipo de trauma33-36. los diferentes estudios publicados la presencia de signos clí-
En cuanto a la frecuencia de presentación en los pacien- nicos en relación con bradicardia, hipertensión arterial, los
WHVFRQHYHQWRVFHUHEURYDVFXODUHVLVTXpPLFRVODIUHFXHQFLD FXDOHVFRQÀJXUDQHOVtQGURPHGHKLSHUWHQVLyQLQWUDFUDQHDQD
de presentación es también variable pero se estima alrede- aunado a la presencia de diabetes insípida; adicionalmente
dor del 20-30% derivado de diferentes estudios37. ODYDULDFLyQWpUPLFDHVEDMD\ODLQÁXHQFLDGHORVFDPELRV
En la tabla 4 abstraída de forma directa de la referencia ÀVLROyJLFRVGHWHUPLQDGRVSRUHOULWPRFLUFDGLDQRJHQHUDO-
se plantean los diferentes tipos de estudios, los hallazgos PHQWHHVWiDXVHQWHVHKDORJUDGRHYLGHQFLDUTXHHQORV
más frecuentes y algunos comentarios. Como se puede ob- SDFLHQWHVFRQÀHEUHGHRULJHQFHQWUDOVHPDQWLHQHXQDWHP-
servar los estudios están relacionados con diseños retros- SHUDWXUDHQIDVHGHPHVHWD\HQHOPRPHQWRHQTXHVHHOH-

Tabla 4 Comparación de estudios observacionales en cuanto a número de pacientes y hallazgos encontrados en cada uno de ellos

Estudio Poblacion Hallazgos Comentarios


Benedek Población Mixta: Trauma Línea media prosencefálica comprometida en Las 24 primeras horas
y cols. Craneano (n=6) y Cirugía todos los casos. La Indometacina disminuyó la postinjuria. Probablemente
de Cerebro (n=5) ÀHEUHHQFDVRV secundaria a liberación de
,/QRÀHEUHQHXURJpQLFD
Meythaler Trauma Craneoencefálico *ODVJRZ,QLFLDO”FRPDSURORQJDGRHQWRGRVORV Reporte de casos.
y Stinson Severo (n=3) casos. Había hemorragia intraventricular presente Propranolol fue usado con
en 2/3 casos. éxito para el tratamiento
Whyte Trauma Craneoencefálico Paciente con daño neurológico conocido en la fase Reporte de Caso
y cols. Severo (n=1) DJXGDSRVWHULRUDODLQMXULDTXLHQWXYRGpÀFLW
termorregulatorio crónico por 3 años posterior a
la injuria. Fractura de la base de cráneo, injuria
del tallo cerebral y como prolongado
Childers Pacientes con Trauma Incidencia: 4% en esta población. Estudio retrospectivo
y cols. Craneoencefálico enfocado en la incidencia.
admitidos a la unidad de Algoritmo de aproximación
rehabilitación dentro usado para determinar la
de los primeros 45 días presencia de daño
posterior al trauma (n=84) neurológico
Clinchot Población Mixta con Injuria Fiebre inexplicada ocurrió en 7% de los pacientes Estudio retrospectivo
y cols. Cerebral (n=286) en una en Trauma Craneoencefálico durante el periodo enfocado en la incidencia de
unidad de Rehabilitación, de rehabilitación ODÀHEUH\GHWHUPLQDFLyQ
Trauma Craneoencefálico de la etiología
(n=226)
Sazbon y Pacientes con Trauma Presencia de daño cerebral dentro de la primera Estudio Retrospectivo
Grosswasser Craneoencefálico en VHPDQDGHOWUDXPDIXHVXÀFLHQWHSDUDSUHGHFLU
como Prolongado (> 1 mes) pobre recuperación
(n=134)
Heindl Población mixta de Niños: La Fiebre de Origen Central fue correlacionada Enrolamiento Retrospectivo
y Laub Trauma Craneoencefálico con un Indice de Barthel Bajo a los 19 meses
(n=82) e injuria cerebral de seguimiento
hipóxica (n=45)
Thompson Pacientes con Trauma Daño Axonal Difuso y Daño del Lóbulo Frontal so Estudio Retrospectivo.
y cols. Craneoencefálico (n=76). factores predictivos independientes, fractura Desarrollo de un modelo
de cráneo y Glasgow bajo son factores predictivos Predictivo
individuales de daño cerebral
Tomado de Thompsom et al.1.
Fiebre de origen central/hipertermia neurogénica. Revisión de la literatura 43

Tabla 5 9DULDEOHVSUHGLFWRUDVGHÀHEUHGHRULJHQFHQWUDOHQSDFLHQWHVFRQWUDXPDFUiQHRHQFHIiOLFR

Variable &RHÀFLHQWHGHUHJUHVLyQ Error estándar Valor de p OR 95% CI para OR


Daño axonal difuso 2,208 1,129 0,0508 9 0,9921 a 82,7234
Lesiona del lóbulo frontal 18,998 0,9037 0,0355 6,6 1,1371 a 39,2936
Tomado y adaptado de Thompsom HJ, Pino–Martin J, Bullock MR. Neurogenic fever after traumatic brain injury: an epidemiological
study. J Neurol Neurosurg Psychiatry 2003;74:614–619.

va generalmente se aproxima a los 39 grados centígrados o inadecuado control dela temperatura se asocia de manera
más, la duración puede ser de varios días a semanas. Otra LQGHSHQGLHQWHFRQDXPHQWRGHOiUHDGHLVTXHPLDSRUWUDQV-
GHODVFDUDFWHUtVWLFDV\HQUHODFLyQFRQVXÀVLRSDWRORJtDHV formación de las zonas de penumbra, deterioro neurológico
la ausencia de respuesta a los medicamentos antipiréticos1 progresivo y mayores tasas de morbilidad y mortalidad38. En
HQWUHORVTXHVHLQFOX\HQHODFHWDPLQRIpQ\ORVDQWLLQÁDPD- la misma referencia se estudia la relación entre el tiempo
torios no esteroideos. de instauración de la elevación de la temperatura y el de-
&RPRVHKDPHQFLRQDGRDQWHULRUPHQWHODÀHEUHRKLSHU- VHQODFH6HGHWHUPLQDHQWRQFHVTXHHOHYDFLRQHVHQODVSUL-
termia de origen central es un diagnóstico de exclusión o meras 24 horas posteriores al evento se asocian con peores
descarte, solo se debe pensar en la presencia de esta cuan- GHVHQODFHV(VWRHVGHYLWDOLPSRUWDQFLDSXHVKDFHTXHORV
GRWRGDVODVRWUDVFDXVDVGHÀHEUHKD\DQH[FOXLGR esfuerzos en el momento de la aproximación diagnostica del
En una de las referencias revisadas se realiza un análisis SDFLHQWHFRQÀHEUHHQODXQLGDGGHFXLGDGRLQWHQVLYRVHDQ
GHYDULDEOHVGHSUHVHQWDFLyQTXHSXHGHQOOHJDUDHVWDUHQ mayores enfocados en determinar de manera temprana si la
UHODFLyQFRQHOGHVDUUROORGHODÀHEUHGHRULJHQFHQWUDOHQ alteración en la temperatura corresponde a los procesos in-
dicha referencia se realiza la evaluación en 76 pacientes fecciosos, más frecuentes en presentación, o si por el con-
FRQWUDXPDFUiQHRHQFHIiOLFRORJUDQGRGHWHUPLQDUTXH WUDULRFRUUHVSRQGHQHQUHDOLGDGDÀHEUHGHRULJHQFHQWUDO
existen dos variables de predicción de posible desarrollo de 'DGDHVWDGLÀFXOWDGVHFRQVLGHUDTXHVHGHEHHYDOXDUODSR-
XQFXDGURGHÀHEUHGHRULJHQFHQWUDOODVFXDOHVVRQHVWDGtV- sibilidad de realizar estudios enfocados en el uso de biomar-
WLFDPHQWHVLJQLÀFDWLYDV\GHHVWLPDPHGLDQWHODYDORUDFLyQ cadores tempranos para la diferenciación diagnostica, se
de OR la relación con la probabilidad de desarrollo de la considera este puede ser un campo interesante de desarro-
condición. En la tabla 5 se plantean las variables con sus OORHQHOSDFLHQWHTXHLQJUHVDDODXQLGDGGHFXLGDGRLQWHQ-
respectivos OR; las dos condiciones son el trauma cráneo sivo con lesiones neurológicas post traumáticas o vasculares,
encefálico de localización frontal y las lesiones neurológicas LVTXpPLFDVRKHPRUUiJLFDV
asociadas con daño axonal difuso postraumático1. En cuanto a la aproximación terapéutica se deben evaluar
$SHVDUTXHODHYLGHQFLDUHYLVDGDDUURMDHVWRVUHVXOWDGRV ORVFRQFHSWRVÀVLRSDWROyJLFRVGHODÀHEUHGHRULJHQFHQWUDO
QRTXLHUHGHFLUTXHRWURVIDFWRUHVWDPELpQVHUHODFLRQHQ o hipertermia neurogénica; a saber, la utilización de medi-
con la aparición de la condición, para esclarecer esto como GDVItVLFDVFRPRIUD]DGDVIUtDVÁXLGRVIUtRVSDTXHWHVGH
se mencionó anteriormente, se considera relevante evaluar hielo pueden en cierta forma ser útiles para el control1.
la posibilidad de realizar estudios con diseños analíticos en- En cuanto a la aproximación terapéutica farmacológica
IRFDGRVHQFRQÀUPDU\FRQRFHUQXHYDVYDULDEOHVSUHGLFWRUDV VHKDORJUDGRHVWDEOHFHUTXHHOXVRGHPHGLFDPHQWRVDQWL-
TXHIDFLOLWHQHOSURFHVRGLDJQyVWLFR\SRUHQGHWHUDSpXWLFR SLUpWLFRVWUDGLFLRQDOHVFRPRHODFHWDPLQRIpQDQWLLQÁD-
HQHOPRPHQWRGHHQIUHQWDUVHDXQFDVRSRVLEOHGHÀHEUHGH matorios no esteroides y aspirina no es útil, o la respuesta
origen central o hipertermia neurogénica. es escasa1.
En el momento se carece de información conclusiva en
cuanto al tratamiento con agentes fríos intravasculares, al-
Tratamiento gunos estudios han mostrado adecuados resultados, otros
no; en términos generales se considera relevante el desarro-
Consideración especial debe recibir el concepto del control llo de nuevos medicamentos y moléculas enfocadas en el
GHODÀHEUHGHRULJHQFHQWUDOPHGLDQWHODUHYLVLyQGHGLIH- control térmico para detener la progresión del daño neuro-
rentes publicaciones se ha logrado establecer sin importar OyJLFRLQGXFLGRSRUODÀHEUHGHRULJHQFHQWUDO
FXiOVHDODOHVLyQQHXUROyJLFDLQLFLDOTXHHOLQDGHFXDGRFRQ-
trol de la temperatura se asocia con desenlaces peores. En
términos generales la hipertermia aumenta la tasa metabó- &RQÁLFWRGHLQWHUHVHV
lica basal en el sistema nervioso central, aumenta el consu-
mo de oxigeno e incrementa la producción de radicales /RVDXWRUHVGHFODUDQQRWHQHUQLQJ~QFRQÁLFWRGHLQWHUHVHV
libres de oxígeno, todos estos factores en conjunto generan
un efecto deletéreo en la restauración de la función neuro-
lógica y por ende se asocian con desenlaces negativos a cor- Bibliografía
to y mediano plazo.
En uno de los estudios revisados para la construcción de 1. Thompsom HJ, Pino-Martin J, Bullock MR. Neurogenic fever af-
HVWDUHYLVLyQVHGHWHUPLQDTXHHQORVSDFLHQWHVFRQFXDGURV ter traumatic brain injury: an epidemiological study. J Neurol
UHODFLRQDGRVFRQHYHQWRVFHUHEURYDVFXODUHVLVTXpPLFRVHO Neurosurg Psychiatry. 2003;74:614-9.
44 J.G. Charria Mejía et al

2. Cunha BA, Shea KW. Fever in the intensive care unit. Infect Dis rococcus faecium transmitted by electronic thermometers. Ann
Clin North Am. 1996;10:185-209. Intern Med. 1992;117:112-6.
3. Dimopoulos G. Approach to the febril patient in the intensive 20. Gerding DN, Johnson S, Peterson LR, Mulligan ME, Silva J Jr.
care unit. En: Rello J, Kollef M, Diaz E, Rodriguez A, editores. &ORVWULGLXPGLIÀFLOHDVVRFLDWHGGLDUUKHDDQGFROLWLV,QIHFW&RQ-
Infectious disease in critical care. 2.ª ed. Berlin: Heidelberg; trol Hosp Epidemiol. 1995;16:459-77.
2007. p. 1-9. 21. Cranston WI, Gerbrandy J, Snell ES. Oral, rectal and esophageal
4. O’Grady NP, Barie PS, Barlett JG, Bleck T, Carroll K, Kalil AC, et temperatures and some factors affecting them in man. J Phy-
al.; American College of Critical Care Medicine; Infectious Di- siol. 1954;126:347-58.
seases Society of America. Guidelines for evaluation of new fe- 22. Baraff LJ. Management of the febrile child: a survey of pedia-
ver critically ill adult patients: 2008 update from the America tric and emergency medicine residency directors. Pediatr Infect
College of Critical Care Medicine and the Infectious Disease So- Dis J. 1991;10:795-800.
ciety of America. Crit Care Med. 2008;36:1330-49. 23. Lifshitz A. Fever: friend or foe? Arch Med Res 1994;25:283-6.
5. Hughes WT, Armstrong D, Bodey GP, Bow EJ, Brown AE, Calandra 24. Echeverry N, Mockus I. Factor nuclear kB (NF-kB): signalosoma y
T, et al. 2002 guidelines for the use of antimicrobial agents in VXLPSRUWDQFLDHQHQIHUPHGDGHVLQÁDPDWRULDV\FiQFHU5HY
neutropenic patients with cancer. Clin Infect Dis. 2002;34:730- Fac Med. 2008;56:133-46.
51. 25. Saper CB, Breder CD. Endogenous pyrogens in the CNS: role in
6. Insler SR, Sessler DI. Perioperative thermoregulation and tem- the febrile response. Prog Brain Res. 1992;93:419-29.
perature montoring. Anesthesiol Clin. 2006;24:823-37. 26. Dimopoulos G, Falagas M. Approach to the febrile patient in the
7. Van der Sande FM, Kooman JP, Leunissen KM. Hemodialysis and ICU. Infect Dis Clin N Am. 2009;23:471-84.
thermoregulation. Nephrol Dial Transplant 2006;21:1450-1. 27. 3URQRYRVW3-+RO]PXHOOHU&*3DUWQHULQJIRUTXDOLW\-&ULW
8. Van der Sande FM, Rosales LM, Brener Z, Kooman JP, Kuhlmann M, Care. 2004;19:121-9.
+DQGHOPDQ*HWDO(IIHFWRIXOWUDÀOWUDWLRQRQWHUPDOYDULDEOHV 28. Marik PE. Fever in the ICU. Chest. 2000;117:855-69.
VNLQWHPSHUDWXUHVNLQEORRGÁRZDQGHQHUJ\H[SHQGLWXUHGXULQJ 29. Selberg O, Hecker H, Martin M, Klos A, Bautsch W, Köhl J. Dis-
ultrapure hemodialysis. J Am Soc Nephrol. 2005;16:1824-31. FULPLQDWLRQRIVHSVLVDQGV\VWHPLFLQÁDPPDWRU\UHVSRQVHV\Q-
9. Erickson RS, Kirklin SK. Comparison of ear–based, bladder, oral, drome by determination of circulating plasma concentrations of
and axillary methods for core temperature measurement. Crit procalcitonina, protein 3a and interleukin-6. Crit Care Med.
Care Med. 1993;21:1528-34. 2008;28:2793-8.
10. Erickson RS, Meyer LT. Accuracy of infrared ear thermometry 30. Marshall JC, Walker PM, Foster DM, Harris D, Ribeiro M, Paice J,
and other temperature methods in adults. Am J Crit Care. 1994; et al. Measurement of endotoxin activity in the critically ill pa-
3:40-54. tient using whole blood neutrophil dependent chemilumines-
11. Schmitz T, Bair N, Kalk M, Levine C. A comparison of five cence. Crit Care. 2002;6:342-8.
methods of temperature measurement in febrile intensive care 31. Cohen J. The detection and interpretation of endotoxaemia.
paients. Am J Crit Care. 1995;4:286-92. Intensive Care Med. 2000;26:S51-6.
12. Milewski A, Ferguson KL, Terndrup TE. Comparison of pulmonary ar- 32. Thompson H, Tkacs N, Saatman K, Raghupathi R, McIntosh TK.
tery, rectal, and tympanic membrane temperatures in adult intensi- Hyperthermia following traumatic brain injury: a critical eva-
ve care unit patients. Clin Pediatr (Phila). 1991;30 (4 suppl):13-6. luation. Neurobiol Dis 2003;12:163-73.
13. Nierman DM. Core temperature measurement in the intensive 33. Meythaler JM, Stinson AM. Fever of central origin in traumatic
care unit. Crit Care Med. 1991;19:818-23. brain injury controlled with propranolol. Arch Phys Med Reha-
14. )DOOLV:07KHHIIHFWRIXULQHÁRZUDWHRQXULQDU\EODGGHUWHP- bil. 1994;75:816-8.
perature incritically ill adults. Heart Lung. 2005;34:209-16. 34. Childers MK, Rupright J, Smith DW. Post-traumatic hyperther-
15. Moran JL, Peter JV, Solomon PJ, Grealy B, Smith T, Ashforth W, mia in acute brain injury. Brain Inj. 1994;8:335-43.
et al. Tympanic temperature measurements: are they reliable 35. Clinchot DM, Otis S, Colachis SC. Incidence of fever in the reha-
in the critically ill? A clinical study of measures of agreement. bilitation phase following brain injury. Am J Phys Rehabil.
Crit Care Med. 2007;35:155-64. 1997;76:323-7.
16. Eichna LW, Berger AR, Rader B, Becker WH. Comparison of in- 36. Sazbon L, Grosswaser Z. Outcomes in 134 patients with pro-
tracardiac and intravascular temperatures with rectal tempera- longed posttraumatic unawareness. J Neurosurg. 1990;72:75-
tures in man. J Clin Invest. 1951;30:353-9. 80.
17. Isley AH, Rutten AJ, Runciman WB. An evaluation of body tem- 37. Morales-Ortiz A, Jimenez-Pascual M, Perez Vicente JA, Monge-
perature measurement. Anesth Intensive Care. 1983;11:31-9. Arguiles A, Bautista-Prados J. Fever of central origin durng
18. %URRNV6.KDQ$6WRLFD'*ULIÀWK-)ULHGHPDQ/0XNKHUML5 stroke. Rev Neurol. 2001;32:1111-4.
et al. Reduction in vancomicyn-resistant Enterococcus and Clos- 38. Castillo J, Dávalos A, Marrugat J, Noya M. Timing for fever-rela-
WULGLXPGLIÀFLOHLQIHFWLRQVIROORZLQJFKDQJHWRW\PSDQLFWKHU- ted brain damage in acute ischemic stroke. Stroke. 1998;
mometers. Infect Control Hosp Epidemiol. 1998;19:333-6. 29:2455-60.
19. Livornese LL, Dias S, Samel C, Romanowski B, Taylor S, May P, et 39. $OSL]DU/0HGLQD()LVLRSDWRORJtDGHODÀHEUH5HY&XEDQD0HG
DO+RVSLWDODFTXLHUHGLQIHFWLRQZLWKYDFRP\FLQUHVLVWDQW(QWH- Mil. 1999;28:49-54.

También podría gustarte