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Juicios, Afirmaciones, Paradigmas, acuerdos

Cesar Giovanny Moreno Rodriguez

Servicio Nacional de Aprendizaje Sena


SENA

Promover

Bogota
2020
 Qué es Juicio ético:

Un juicio ético es la facultad de razonar y determinar qué acción, conducta o


actitud es la más adecuada, de entre un conjunto de alternativas, en función
del sistema de valores que compartimos con la sociedad donde vivimos.
En este sentido, el juicio ético es aquel que nos permite identificar, en una
situación o circunstancia determinada, cuál es el dilema ético que se nos plantea,
y, en consecuencia, nos ayuda a analizar cuál de las opciones con que contamos
es la que más se ajusta a nuestra situación, siempre teniendo en consideración el
marco del sistema de valores morales en que nos encontramos.

Ejemplos de juicios éticos los encontramos a lo largo de nuestras vidas. Por


ejemplo, en la escuela nos forman para hacer juicios éticos en relación con
aquellas acciones que convengan mejor a nuestros propósitos de ser personas
honradas y honestas. De allí que hacer carrera en el mundo del crimen o del
narcotráfico sean opciones frente a las cuales nos enseñan a reflexionar sobre las
consecuencias que acarrean. En ese sentido, un juicio ético establecería que el
crimen tiene consecuencias atroces en nuestras vidas y las vidas de nuestros
seres queridos y, en consecuencia, por nuestro bien y el de nuestros más
cercanos, no debemos contemplar esa opción.

Diferencias entre juicio ético y juicio moral


El juicio ético y el juicio moral son cosas diferentes. Mientras que el juicio
ético supone la consideración razonada de las consecuencias éticas de una
acción, determinación o conducta, en relación con el sistema de valores y reglas
que una sociedad comparte; el juicio moral se refiere más bien a la facultad de
juzgar y valorar una acción, determinación o conducta, en función de si es correcta
o incorrecta y de si sus consecuencias son buenas o malas. En este sentido,
el juicio ético se enfoca en el raciocinio, en la capacidad para reconocer un dilema
ético y para determinar cuál es la manera más correcta de actuar en relación con
nuestro sistema de valores y con las alternativas que poseemos, mientras que
el juicio moral se limita a hacer valoraciones positivas o negativas en torno a
acciones o conductas.

Afirmaciones, es la acción y efecto de afirmar o afirmarse. Es habitual que el


término se use en referencia al acto que permite a una persona expresar
su asentimiento a un enunciado o a una causa. Por ejemplo: “Con un gesto de
afirmación, el interrogado reconoció que conocía al sospechoso”, “La afirmación
de la mujer sorprendió a los vecinos”, “No puedo estar de acuerdo con una
afirmación semejante”.

Las afirmaciones pueden asociarse, en cierto modo, a todo lo dicho por una
persona. Después de todo, lo que se pone en palabras supone una extensión de
aquello que piensa el sujeto. Expresiones como “En mi opinión, el candidato
opositor debe renunciar a su candidatura”, “El pollo al ajillo es mi comida
favorita” y “Salí de mi casa a las ocho de la mañana y recién pude subir al tren a
las once menos cuarto” son afirmaciones pronunciadas por un individuo.
Las afirmaciones: son frases positivas que tienen como propósito cambiar
nuestras creencias, patrones de pensamiento, etc. Ya hemos visto con
anterioridad que la manera que tenemos de considerarnos a nosotros mismos, o el
tipo de pensamientos que tenemos hacia otras personas determina de forma
contundente la manera en que vivimos.

Por medio de las afirmaciones podemos cambiar estos aspectos de nuestra vida
de una manera fácil y eficaz. Utilizando las afirmaciones positivas podemos borrar
un patrón mental destructivo e introducir otro constructivo.

¿Qué es un paradigma?

El concepto de paradigma es complejo, ya que el uso del término a menudo


depende del área del saber desde el cual se lo mire. Sin embargo, en general se
lo entiende como sinónimo de “modelo” o de “ejemplo”. Ése es el significado
original de la palabra, proveniente del griego parádeigma, o sea, “molde” o
“patrón”.

En general, hablar de un paradigma es hablar de algo ejemplar, o sea, de algo


característico de una visión o perspectiva, o bien algo que resume un sistema
de pensamiento o de hacer las cosas. Dicho muy a grandes rasgos, un paradigma
es un modelo. Es por ello que se suele hablar de paradigmas filosóficos,
matemáticos, políticos, etcétera.

Los 4 acuerdos:

PRIMER ACUERDO:  SÉ IMPECABLE CON TUS PALABRAS

Las palabras crean estados de consciencia; y éstos, determinan tus


pensamientos, que, a su vez, se manifiestan en los resultados. Más allá de tu
idioma, cultura y experiencias, es el lenguaje que utilizas lo que conforma tu
manera de representarte el mundo. Tus ideas, anhelos, metas, propósitos; tus
relaciones, vínculos y dones. Todo se manifiesta a través de la palabra.

Como sabes, pueden construir enormes sueños y beneficios para la Humanidad; o


destruir con su carga de miedo, rencor, frustración, enojo y opiniones mal
intencionadas. Esto significa que las palabras no son inocentes y están cargadas
de significado.

La palabra “impecabilidad” significa que no hagas cosas que vayan en contra


tuya. Ser impecable es asumir tu responsabilidad personal; cumplir todos y cada
uno de los compromisos asumidos (empezando los que asumís con vos mismo, y
luego con los demás); y, a la vez, canalizar el don de la palabra en forma
constructiva y positiva.

CÓMO INCOPORAR ESTE ACUERDO

 Habla menos y hace más.
 Sobrepasa tus propias expectativas respecto al cumplimiento de tus
compromisos.
 cuida Tus pensamientos.
 Evalúa antes de hablar.
 Escucha el 70% y habla sólo el 30%.
 Busca tener más precisión en tu lenguaje para expresar adecuadamente
todas tus ideas.
 Evita herir y enfócate en elevar y aportar valor en tus interacciones con los
demás.
 Descarta toda comunicación agresiva de tu vida.

SEGUNDO ACUERDO: NO TOMES NADA COMO PERSONAL


La mayoría de las personas asumen que cada cosa que pasa está diseñada para
ellos: a favor o en contra. En las cuestiones a favor no hay mayor problema: todo
encaja. El asunto empieza cuando la gente siente que todo lo que les pasa,
sucede, los hechos del mundo y de su entorno, son “en su contra”.

¿Te imaginas entonces lo que sucede? Efectivamente: aparentemente el mundo


empieza a disparar munición gruesa sobre dicha persona. Sin embargo, es el ego
el que produce enojo, frustración, y un gran desgaste emocional al intentar luchar
contra las opiniones y situaciones del mundo que pueden envenenar tu vida.

Este segundo acuerdo es el que provoca gran parte del sufrimiento en la vida, ya


que, por lo general, te muestras demasiado susceptible a todo lo que digan o
hagan alrededor tuyo. Ahora ya sabes: asumiendo una perspectiva mayor de las
situaciones y cuestiones -incluso las que te involucran directamente-, podrás no
engancharte emocionalmente y respetar las posiciones de los demás, que no es
necesariamente justificarlas, aunque sí entenderlas desde una mirada
completamente diferente e integradora para tu bienestar. Desde este lugar
irradiarás lo mismo a tu alrededor.

CÓMO INCORPORAR ESTE ACUERDO

 Aprende de las diferencias con los demás; integra y respeta las decisiones


de otros.
 Entiende que el otro es “un otro” con sus propios problemas, creencias y
dificultades.
 Si algo te molesta, busca el espacio apropiado y exprésalo claramente
desde tu perspectiva (apoderándote de tu comunicación, no echando culpas a
los demás).
 No busques imponer tus deseos por sobre las opiniones de los demás.
 Considera siempre el bien mayor de todos en cualquier situación.
 Evita vivir desde el ego: aprende acerca de la compasión, la humildad, la
escucha consciente, la apertura mental para vivir mejores experiencias. Esto te
ayudará a tener más paz en todos los aspectos.

TERCER ACUERDO: NO ADIVINES NI SUPONGAS

Otra fuente de malestar interior, emocionalidad extrema, destrucción de tu


autoestima y valor, y deterioro de tu poder personal es vivir haciendo
suposiciones. ¿Cuántas veces has pasado días, meses o años elucubrando
cuestiones que nada tenían que ver con la realidad de las cosas?

Todo esto sucede porque supones más de lo que te permitís vivir las experiencias
para confirmarte tu percepción formada y sustentada. Suponer algo, en términos
de tener un pálpito o corazonada, no es el problema: el asunto es cuando crees
que eso que supones es verdadero, incluso sin haberlo chequeado ni observado
en perspectiva, ni cotejada información alguna. Cuando supones algo partís de
una base incorrecta, porque de antemano asumís que tienes la verdad absoluta
sobre algo. Es más: dejas de distinguir qué es una presunción, hasta el punto de
darlo por hecho como que algo es real… sin siquiera haberlo comprobado o
experimentado.

CÓMO INCOPRORAR ESTE ACUERDO

 Hace más preguntas, sé paciente, reflexiona, conecta mejor con las demás


personas.
 Evita suponer aplicando la escucha activa y la comunicación asertiva.
 Releva los hechos, enfría tus emociones durante al menos tres días antes
de actuar compulsivamente.
CUARTO ACUERDO: HACÉ SIEMPRE LO MÁXIMO, LO MEJOR QUE
PUEDAS”

Cuando hablamos de “ser la mejor versión de uno mismo”, significa que


empezarás a vivir tu vida de una manera que tenga sentido para vos, y que, a su
vez, puedas transformar tu entorno a partir de tus acciones. Este acuerdo propone
que te muevas hacia el rasgo de la excelencia. Muchas personas buscan la
perfección en sí mismas y en el mundo: eso no existe. Por lo que sí podemos
aspirar a ser excelentes. En el trabajo, por ejemplo, se habla mucho de “tener que
ser perfectos”.

Ser una persona excelente es más que ser impecable; significa expresar
continuamente y en todos los aspectos de la vida tu mayor compromiso hacia la
calidad total de tus pensamientos, palabras y acciones. Hacer el máximo esfuerzo
es salir de tu zona conocida, para expandirte un poco más allá, alimentándote de
energía para alcanzar un nivel superior de excelencia en todo lo que
realices. Hacer lo mejor que puedas es dar siempre tu 100%.

CÓMO INCORPORAR ESTE ACUERDO:

 Practica dar un poco más cada día; esforzarte en aquellos aspectos que


necesitas mejorar.
 Inspírate en personas que ya lo hicieron: hay millones de fuentes de
información disponibles.
 Conversa con personas que sean ejemplares según tu perspectiva.
 Aprende de las biografías, películas que te eleven y experiencias donde
aprendas. Ante el fracaso, revalorízalo con el aprendizaje que te ha dejado.
 Descubrí la fuente inagotable de tu poder personal para ser más excelente
cada vez en todos los planos de tu vida.

El QUINTO ACUERDO:
Tú estás programado para ser tú, seas lo que seas, y lo que tu mente piense
que eres no afecta en lo más mínimo al programa. El programa no está en la
mente pensante. Está en el cuerpo, en lo que denominamos el ADN, y al
principio instintivamente sigues su sabiduría. Cuando eras un niño pequeño.
Sigues lo que te gusta y tratas de evitar lo que no te gusta. Una vez que
aprendemos a hablar, los seres humanos que se ocupan de cuidarnos nos
enseñan lo que saben y esto significa que nos programan con conocimientos.
Aprendamos cómo ser un hombre o una mujer según la sociedad en la que
nacemos. Aprendamos cómo comportarnos “correctamente” en nuestra
sociedad, lo que significa cómo ser un “buen” ser humano. Por miedo a ser
castigado o por miedo a no recibir una recompensa empezamos a tratar de
complacer a otras personas. Intentamos ser buenos porque la gente mala no
recibe recompensas y se la castiga. No tenemos la oportunidad de escoger
nuestras creencias; se nos dice qué creer y qué no creer. Todo el mundo tiene
una opinión sobre nosotros y nos dice lo que somos. El único modo en el que
podemos vernos a nosotros mismos es a través de un espejo, y la gente
desempeña el papel de ese espejo. Vemos nuestra imagen en esos espejos,
estamos de acuerdo en que eso es lo que somos, y tan pronto como estamos
de acuerdo, esa opinión pasa a formar parte de nuestro sistema de creencias.
Poco a poco todas esas opiniones modifican nuestro comportamiento, y en
nuestra mente formamos una imagen de nosotros mismos según lo que otra
gente dice que somos. Y como no está bien para nosotros ser lo que somos
empezamos a fingir que somos lo que no somos. Tras la documentación,
intentamos ser suficientemente buenos para los demás, pero ya no somos lo
bastante buenos para nosotros mismos, porque nunca podremos cumplir con
nuestra imagen de perfección.

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