1.

Título del documental: “Los hijos del Fuego – Otros pueblos”

Dirigido por: Luis Pancorbo
Fecha: 1983
Duración: 49:43 minutos
Nacionalidad: Española

2.1 La heterogeneidad del ser en la cual reafirma su identidad, diferenciándose el “uno” de los
otros. Esta percepción está muy vinculada al “relativismo cultural”, que no sólo conforma la
humanidad en su completa esencia, lejos de fórmulas generales, sino que nos ayuda a valorar
lo ajeno a nuestra propia cultura. Los “hijos del Fuego” es un título que inicialmente perteneció
a los pigmeos, pero hace referencia a “los elegidos”. Es así como cada grupo étnico, como los
toros de Etiopía o los mexicanos, por ejemplo, sienten que son sus propias creencias las que
prevalecen como definitivas. No sólo sus creencias, sino también sus hábitos, su dialecto, su
política. La verdadera riqueza reside, no obstante, en valorar lo ajeno así como lo propio, lo
“de los otros” como lo “de uno mismo”. Es de esta forma como se supera el etnocentrismo, a
través del estudio antropológico de los diferentes grupos étnicos y del reconocimiento de
estos como igual de válidos.

2.2 El documental habla de las diferentes costumbres, creencias y formas de vida propias de
diferentes tribus (lapones, mexicanos, toros, pigmeos). Se tratan temas desde la organización
social de las mismas hasta la base de su alimentación. El ocio, los rituales, la historia, el
lenguaje (los diferentes matices que términos parecidos adquieren según el grupo étnico que
los utilice), las actividades que se practican y en qué lugares, y la evolución de algunos de estos
aspectos a lo largo del tiempo. El concepto del etnocentrismo se repite a menudo a lo largo del
documental, definido como la idea de que es una etnia, la propia, que predomina sobre el
resto, como si sus creencias tuvieran un mayor valor. El “relativismo cultural” como antítesis al
etnocentrismo se presenta a través de las descripciones de las diferentes sociedades étnicas.

2.3 Desde mi punto de vista, el documental no sólo resulta interesante a nivel informativo,
sino que arrastra a una posterior reflexión antropológica acerca del pensamiento casi instintivo
sobre la prevalencia de la cultura propia. Además, opino que este etnocentrismo no sólo
ocurre en tribus como las mencionadas, sino que el ser humano actual continúa pecando de
esto a través de los llamados estereotipos. El miedo inherente al ser humano frente al “otro”, a
lo desconocido, también ocurre en los colegios cuando se incorpora un compañero nuevo, por
ejemplo. Al fin y al cabo, el componente antropológico del “yo”centrismo frente a lo
perteneciente a otro núcleo social/familiar o étnico es común a la humanidad.

Iria López Costas, grupo 1 A, Grado en Filosofía