Está en la página 1de 20

Los estudios del liderazgo en las ciencias sociales: Una revisión de la literatura

Lucio Ordoñez Huerta1

En el ámbito de las ciencias sociales, el estudio del liderazgo ha constituído un tema toral para
diversas disciplinas, desde la Psicología, la Sociología o la Ciencia Política, la discusión teórica y
práctica sobre este fenómeno ha abonado, tanto a la comprensión del mismo, como al carácter
ambiguo de su conceptualización que aun hoy día sigue representando el abordar un objeto de
investigación de esta índole. El objetivo de esta revisión de la literatura es dilucidar los
conceptos, autores, enfoques y categorías que giran en torno a esta temática, a efecto de conocer
las cualidades del fenómeno de la manera más profunda posible, determinar si es una aptitud,
conducta o proceso de influencia recíproca.

El liderazgo como objeto de estudio de las ciencias sociales

El liderazgo es un objeto analizado desde una multitud de ángulos, sobre el que se ha


profundizado desde diversas perspectivas, su análisis es una cuestión recurrente y siempre
vigente en las ciencias sociales (Ruiloba, 2013: 143), un tema de largo alcance para los
investigadores, que ha suscitado una preocupación central de las teorías.

Los métodos y técnicas de estudio en el acercamiento al liderazgo han sido, preponderante y no


limitativamente, estudios biográficos, sistemáticos y comparativos de las carácterísticas de los
líderes, através de la aplicación de encuestas, cuasi experimentos de laboratorio y de campo, y
estudios descriptivos (Pariente, 2009: 177-179; Delgado, 2004: 12-20).

Por su naturaleza es un tema de investigación atractivo y, al mismo tiempo, difícilmente


sometible a un único esquema de análisis académico-científico (Delgado, 2004: 12), por sus

1
Estudiante de la Promoción 2015-2018 del Doctorado en Ciencias Sociales de la Facultad de Ciencias Políticos y
Sociales de la UAEM, correo electrónico: lordonezh@gmail.com. Tutor Académico: Dr. Ramiro Medrano González.
implicaciones en lo social y en lo político, configura un fenómeno en el que estan insertos
diversos conceptos.

Interacción, poder, carisma, rasgo, cualidad, atributo, conducta, colaboración, conflicto,


participación, autoridad, dominación, elite, producción social, entre otros, son conceptos-objeto
de disciplinas que a continuación se mencionan.

Psicología y Liderazgo: Estilos y Categorías

La investigación en el ámbito de la Psicología se propuso analizar los rasgos, características,


cualidades, habilidades y comportamiento del líder. En sus inicios, se planteó la interrogante ¿los
líderes nacen o se hacen?, pregunta que hallaría respuesta en la configuración de tres visiones que
agruparon diversos enfoques: la subjetivista 2, la objetivista3 y las visiones conciliadoras4
(Chatman y Kennedy, 2010: 2; López y Leal 2005: 28-29; Jiménez, 2008: 189-191).

El estudio del liderazgo desde la psicología encontró un nicho de oportunidad en el ámbito de las
organizaciones, en tanto sus teorías se incorporaron al desarrollo de la vertiente de la Psicología
Organizacional, cuyos enfoques, categorías y conceptos desde la década de los 40´s del siglo XX
han constituído una veta que ha aportado perspectivas varias.

Entre las instituciones pioneras, Ralph Stogdill en la Universidad Estatal de Ohio en 1945 (Ganga
y Navarrete, 2013: 59) patrocinaría los primeros atisbos del enfoque conductual al tratar de
identificar las conductas observables de los líderes en lugar de los rasgos de personalidad,
diseñando el instrumento “Leaders Behavior Description Questionnaire”. Rensis Likert, en la
Universidad de Michigan en 1950 (Méndez, 2009: 1), identificaría los estilos de liderazgo que

2
Comprende los escritos de grandes pensadores clásicos en los que se realzaban las dimensiones subjetivo-
personales del líder (Platón y el Rey filosofo, Nicolás Maquiavelo y el Príncipe, Thomas Carlyle y el Héroe,
Nietzsche y el Superhombre).
3
En esta destacan las condiciones objetivo-personales en las que se producen los líderes (Adam Smith y la mano
invisible, Herbert Spencer y el Darwinismo social, Carlos Marx y la lucha de clases).
4
Intentan conciliar los enfoques previos, que aparentemente se presentaban irreconciliables (Teorías de la
interacción, atribución, transformacional, carismático, del líder servidor y adaptativo).
inciden en los resultados de la relación productividad-satisfacción de los trabajadores, uno
orientado a la tarea y el otro a las relaciones (liderazgo participativo).

Para 1951, Fred Fiedler formularía la Teoría del Último Compañero de Trabajo Preferido, en la
que solicitó a los líderes clasificar a las personas con quienes no desearían trabajar mediante
factores negativos y positivos, identificando grado de confianza mútua, estructura de la tarea y la
autoridad del líder (Pariente, 2009: 165-166). Katz y Mann, en 1955, se centraron en las
habilidades de los líderes, generando tres categorías: habilidades técnicas 5, conceptuales6 e
interpersonales7 (Ganga y Navarrete, 2013: 58). La aportación del Liderazgo por Contingencia en
1958 de Tannenbaum y Schmidt, estableció la posibilidad del líder de escoger entre los estilos de
liderazgo y las orientaciones que formuló Likert (Ganga y Navarrete, 2013: 58).

1960, enmarcaría la Teoría X y Teoría Y, en la que Douglas McGregor, recogería dos culturas
organizacionales contrapuestas, la X que consideraba que los trabajadores evitan
responsabilidades, les disgusta el trabajo y debían ser controlados; y la Y, que estableció el
trabajo como algo normal, la autodirección, autocontrol y toma de decisiones innovadoras por
parte del trabajador (Vargas, 2010: 15; Amorós, 2007: 85). Hersey y Blanchard, en 1969,
propusieron la Teoría del Ciclo de la Vida del Liderazgo, el cuál dependería de la efectividad del
líder, su grado de madurez y sus métodos de liderazgo (Pariente, 2009: 163-164).

Fiedler, en 1970 inaugura el enfoque situacional, en el que se centra en la selección de variables


que indican el estilo de liderazgo más apropiado ante circunstancias cambiantes (Delgado, 2004:
11). House y Evans, en la Teoría de las Metas o Camino-Meta, establecen cuatro estilos en la
conducta del líder: el directivo8, colaborativo9, participativo10 y orientado al logro11 (Lupano y
Castro, 2013: 110-111; Cideal, 2009: 1).

5
Incluyen el conocimiento de productos y servicios, el conocimiento de las operaciones, procedimientos y
equipamiento del trabajo y el conocimiento de mercados, clientes y competidores.
6
Representan la capacidad de analizar eventos complejos y percibir tendencias, reconocer cambios, e identificar
problemas y oportunidades.
7
Son el entendimiento de procesos interpersonales y de grupo; la capacidad de entender motivos, sentimientos y
actitudes de las personas desde lo que ellos dicen y hacen (empatía, sensibilidad social).
8
Dando instrucciones claras, completas y específicas sobre cómo realizar las tareas y comunicando lo que se espera
de cada individuo.
9
Mostrando su apoyo y preocupación por la situación y necesidades de los individuos.
10
Consultando con el grupo y escuchando sus sugerencias a la hora de tomar decisiones.
11
Marcando metas ambiciosas, esperando que los individuos rindan al máximo nivel y mostrando confianza en que
asuman la responsabilidad.
Vroom y Yetton en 1973, desarrollan la Teoría de la decisión normativa, un modelo de corte
normativo centrado en la participación del líder, con objeto de relacionar el liderazgo y la
participación en la toma de decisiones (Pariente, 2009: 164; UO. S.f.: 1-2). En 1977 Zaleznik,
establece la diferenciación entre líderes y gestores, delegando a los administradores los papeles
más mecánicos y rutinarios del proceso al afirmar que los líderes se ocupan de la visión y la
dirección de los cambios (Zaleznik, 1992: 1). Kerr y Jermier, con su Teoría de los Sustitutos del
liderazgo, hacen evidentes los factores contextuales en los que el liderazgo es innecesario, tales
como la experiencia y capacidad de los subordinados, claridad en las tareas y estructuración de la
organización (Lupano y Castro, 2013: 111).

Dando continuidad a la diferenciación de Zaleznik, en 1985 Bennis y Nanus afirman que los
administradores hacen correctas las cosas, mientras que los líderes hacen las cosas correctas
(Bennis and Nanus, 1985, pág. 21). Yukl, en su Modelo de Vinculos Múltiples, asume que el
desempeño de una unidad de trabajo depende principalmente de seis variables explicativas
(Vargas, 2010: 32): el esfuerzo de los subordinados, su capacidad, la organización del trabajo, el
equipo de trabajo y cooperación, la accesibilidad a recursos esenciales y la coordinación externa
de las unidades de trabajo con otras partes de la organización.

Es en esta decada que el liderazgo transformacional surge basado en la ideas de House y Burns,
en el que Bass, considera que los líderes transformacionales permiten a sus seguidores afrontar
con éxito situaciones de conflicto o estrés brindando seguridad y tolerancia ante la incertidumbre.
Este estilo es de especial utilidad en situaciones de cambio (Lupano y Castro, 2013: 113).

Finalizarían esta etapa Meindl y Ehrlich, quienes en el romance del liderazgo, concluyen que éste
ha asumido una cualidad heroica, alejada de la realidad y creada en las mentes de las personas
(Álvarez, 2009: 37); y Jhon Kotter, quien en 1988, continuaría la tradición de Zaleznik y Bennis
al mencionar: la Gestión se ocupa de enfrentar la complejidad. El liderazgo, por el contrario, trata
de hacer frente al cambio (Kotter, 2001: 4).

Dentro de las perspectivas más actuales, a través del desarrollo del instrumento The Leadership
Practices Inventory, Kouzes y Posner (2013: 7-8) se determinarían las cinco prácticas del
liderazgo ejemplar: la determinación de los valores, inspirar una visión compartida, el desafío del
proceso, el habilitar a otros para actuar y estimular las contribuciones. Por su parte Hackman y
Wageman (2005: 269-278), con su Teoría del Coaching de Equipos señalarían las funciones
motivadoras12, consultivas13 y educativas14 del líder. Hanges y Dickson (2004: 122-151), sobre la
base de los estudios internacionales, transculturales proponen cuatro dimensiones del liderazgo
(Castro, 2006: 92):

1) Liderazgo Carismático o basado en valores.

Definición: Es una dimensión del liderazgo basada en sólidos principios morales (valores). Por lo
tanto el líder obtiene sus objetivos inspirando, motivando y esperando un alto desempeño de sus
seguidores.

Adjetivos: Digno de confianza, entusiasta, generador de confianza, hábil para anticiparse a las
situaciones, honesto, inteligente, intuitivo, justo, lógico, motivador, orientado a la excelencia,
positivo, previsor, sincero, visionario, voluntarioso.

2) Liderazgo orientado al grupo.

Definición: Es una dimensión que consiste en el diseño y gerenciamiento de los grupos de trabajo,
tratando de implementar cohesión grupal para el logro de los objetivos.

Adjetivos: Administrador efectivo, comunicativo, confiable, evita conflictos en el grupo, gerencia


los grupos de forma adecuada, informado, ingenioso, negociador efectivo, ordenado, resuelve
problemas.

3) Liderazgo orientado hacia si mismo .

Definición: Es una dimensión del liderazgo de connotaciones negativas que enfatiza la seguridad y
la protección del que lidera.

Adjetivos: Compite con los miembros de su grupo, egocéntrico, evasivo, poco cooperativo, poco
explícito, poco sociable, solitario

4) Liderazgo Participativo.

Definición: Es una dimensión clásica del liderazgo que consiste en involucrar a los seguidores para
la toma de decisiones.

Adjetivos: Autoritario, dictatorial, dominante, elitista.

12
Para familiarizarse.
13
Sobre estrategías de tarea.
14
Orientadas a la reflexión.
Esta clasificación vino a significar para la Psicología un estudio que permitió tener una
perspectiva amplia del liderazgo desde contextos transculturales, concatenando en sí otras
clasificaciones que se han denominado estilos de liderazgo que se mencionarán a continuación.

Estilos del Liderazgo desde la Psicología

El estilo es un rasgo del carácter y del temperamento del individuo que difícilmente se puede
moldear. El carácter es: “Todo lo aprendido después del nacimiento” por su parte el
temperamento es “Todo lo innato, es decir el comportamiento que se hereda”. Nuestra
personalidad en la edad adulta va a representar repetitivamente ciertos comportamientos, entre
ellos, el estilo de ejercer la autoridad y de comunicarnos (Castillo, Organista, Pozos y Zarazua,
2004: 52).

Según Lussier & Achua, el estilo de liderazgo es la combinación de rasgos, destrezas y


comportamientos que los líderes usan cuando interactúan con sus seguidores (Díaz, s.f.: 2), en el
ámbito de las Ciencias Sociales y, preponderantemente desde la psicología, se ofrecen las
principales clasificaciones de estilos atendiendo a los criterios para su elaboración:

Autor, Año y Clasificación Criterio


Hanges y Dickinson 2004 (122-151). Es un listado de 60 adjetivos cuya utilidad se probó
en estudios transculturales para evaluar las
concepciones implícitas de los líderes efectivos
1) Liderazgo Carismático o basado en valores. (Hanges & Dickson, 2004). El evaluado tenía que
responder sobre la base de su experiencia personal
Adjetivos: Digno de confianza, entusiasta, generador de confianza, hábil para anticiparse a el grado en que cada uno de los adjetivos
las situaciones, honesto, inteligente, intuitivo, justo, lógico, motivador, orientado a la (atributos) obstaculiza o facilita el desempeño de
excelencia, positivo, previsor, sincero, visionario, voluntarioso. un líder efectivo en la organización en la que
trabaja. Las respuestas tienen 7 opciones en
Definición: Es una dimensión del liderazgo basada en sólidos principios morales (valores). formato Likert
Por lo tanto el líder obtiene sus objetivos inspirando, motivando y esperando alta
performance de sus seguidores Sobre la base de los estudios internacionales,
transculturales, los adjetivos se agrupan en 6
2) Liderazgo orientado al grupo. dimensiones:

Adjetivos: Administrador efectivo, comunicativo, confiable, evita conflictos en el grupo, 1) Liderazgo carismático o basado en valores;
gerencia los grupos de forma adecuada, informado, ingenioso, negociador efectivo, 2) Liderazgo orientado hacia si mismo;
ordenado, resuelve problemas. 3) Liderazgo con orientación humana;
4) Liderazgo orientado hacia el grupo;
Definición: Es una dimensión que consiste en el diseño y gerenciamiento de los grupos de 5) Liderazgo participativo y
trabajo, tratando de implementar cohesión grupal para el logro de los objetivos. 6) Liderazgo autónomo.

3) Liderazgo orientado hacia si mismo . Estas dimensiones adaptadas para la comparación


de organizaciones y aplicado tanto a civiles y
Adjetivos: Compite con los miembros de su grupo, egocéntrico, evasivo, poco cooperativo, militares, se redujeron a 4.
poco explícito, poco sociable, solitario

Definición: Es una dimensión del liderazgo de connotaciones negativas que enfatiza la


seguridad y la protección del que lidera.

4) Liderazgo Participativo.

Adjetivos: Autoritario, dictatorial, dominante, elitista.

Definición: Es una dimensión clásica del liderazgo que consiste en involucrar a los
seguidores para la toma de decisiones.
Vroom y Yetton 1973 (UO, s.f.: 1)
Víctor Vroom y Phillip Yetton desarrollaron este
• Autocrático 1. Usted mismo soluciona el problema o toma una decisión usando diversos modelo que relacionaba el comportamiento y la
y variados hechos que tenga a la mano. participación del liderazgo en la toma de
decisiones, estos investigadores sostenían que el
• Autocrático 2. Usted obtiene la información necesaria de los subordinados y comportamiento del líder debía ser ajustado para
entonces decide de la solución al problema. que reflejara la estructura de la tarea. El modelo era
normativo, es decir proporcionaba una serie de
• Consultivo 1. Usted comparte en forma individual el problema con los reglas que debían respetarse para determinar la
subordinados relevantes, obtiene sus ideas y sugerencias la decisión final es suya. cantidad de participación deseable en la toma de
decisiones, según era dictada por diferentes tipos de
• Consultivo 2. Usted comparte el problema con sus subordinados como un grupo, situaciones.
obteniendo colectivamente sus ideas y sugerencias. Usted toma la decisión que
podría o no reflejar la influencia de sus subordinados.

• Grupo 1. Usted comparte el problema con sus subordinados como grupo. Su meta
es ayudarlos a coincidir en una decisión. Sus ideas no tienen un peso mayor que las de los
demás.
House, 1971 (Cideal, 2009: 1-2; Álvarez, 2009: 33) (Cideal, 2009: 1)

El líder puede adoptar uno de los siguientes estilos de liderazgo: Un líder puede influenciar la motivación y el
rendimiento de un grupo a través de: otorgar
a) Liderazgo Directivo: dando instrucciones claras, completas y específicas sobre cómo recompensas por el logro de objetivos, clarificar el
realizar las tareas y comunicando lo que se espera de cada individuo. Efectivo cuando las camino hacia los objetivos y eliminando los
tareas son poco claras o ambiguas y los miembros del grupo aceptan la autoridad sin obstáculos al desempeño.
contestación.
(Lupano y Castro, 2013: 110-111).
b) Liderazgo Colaborativo: mostrando su apoyo y preocupación por la situación y
necesidades de los individuos. Apropiado para tareas poco gratificantes y muy Los líderes son capaces de motivar a sus seguidores
estructuradas en las que es necesario reforzar el comportamiento del equipo para su convenciéndolos de que mediante la realización de
motivación. un considerable esfuerzo se pueden lograr
resultados valiosos. Los líderes por lo tanto,
c) Liderazgo Participativo: consultando con el grupo y escuchando sus sugerencias a la tendrían la capacidad de guiar a sus subordinados
hora de tomar decisiones. Está indicado cuando los subordinados consideran que el hacia la consecución de estas metas.
resultado de una tarea o decisión particular se reflejará en sí mismos, o cuando las
expectativas sobre su desempeño son ambiguas.
d) Liderazgo orientado al Logro: marcando metas ambiciosas, esperando que los
individuos rindan al máximo nivel y mostrando confianza en que asuman la
responsabilidad. Efectivo cuando las tareas no están claramente definidas. Este tipo de
liderazgo demuestra confianza en los individuos y en que su esfuerzo finalmente obtendrá
los resultados esperados.
Hersey y Blanchard 1969 (Vargas, 2010: 27-29) El Liderazgo Situacional de Hersey y Blanchard, es
la teoría que señala la importancia de la flexibilidad
Tipos de comportamiento de un líder en el estilo de liderazgo, teniendo en cuenta el
comportamiento del líder y el nivel de desarrollo de
Comportamiento directivo: los colaboradores. El liderazgo eficaz dependerá
 Define las funciones y tareas de los subordinados. del nivel de desarrollo de los colaboradores.
 Señala qué, cómo y cuándo deben realizarlas.
 Controla los resultados. En todos los equipos de trabajo se producen
cambios debido a las distintas fases de desarrollo
Comportamiento de apoyo: por las que atraviesan los miembros del grupo. Por
 Centrado en el desarrollo del grupo. ello, el estilo de liderazgo más eficaz es aquel que
 Fomenta la participación en la toma de decisiones. se adapta a los colaboradores en cada situación, es
 Da cohesión, apoya y motiva al grupo. decir, ejerce un liderazgo adecuado a las
necesidades del equipo.
El líder puede utilizar los dos tipos de comportamiento en mayor o menor medida dando
como resultado cuatro estilos de liderazgo: El liderazgo situacional se basa en mantener un
equilibrio entre dos tipos de comportamiento que
 Estilo control. Se caracteriza por un alto nivel de comportamiento directivo y un bajo ejerce un líder para adaptarse al nivel de desarrollo
nivel de comportamiento de apoyo. de su equipo de trabajo.

 Estilo supervisión. Caracterizado por altos niveles de comportamiento directivo y de


apoyo y reconoce los avances y mejoras en el rendimiento.

 Estilo asesoramiento. Mantiene un nivel alto de comportamiento de apoyo y bajo en


comportamiento directivo. Las decisiones las toma conjuntamente con los colaboradores.
Refuerza y apoya.

 Estilo delegación. Bajos niveles en ambos comportamientos debido a que delega la


toma de decisiones en sus colaboradores.
Robert Blake y Jane Mouton 1960 (Díaz, s.f.: 9) Estas investigaciones se realizaron a inicios de la
decada de los sesentas en la Universidad de Texas
Líder empobrecido bajo la dirección de Robert Blake y Jane Mouton,
con sus estudios concibieron la Rejilla Gerencial
El líder se interesa poco por la producción y la gente. El líder hace lo mínimo exigido para (Managerial Grid©), una técnica para mejorar la
permanecer en el puesto. eficiencia de los ejecutivos. Posteriormente en 1991
se convirtió en la Rejilla de Liderazgo (Leadership
Líder de autoridad y obediencia Grid©). La rejilla o matriz del liderazgo se basa
tanto en los estudios de la Universidad Estatal de
El líder muestra gran intéres por la producción y poco por la gente. El líder se concentra en Ohio como en los de Michigan, y tienen las dos
lograr que las labores se realicen y trata a las personas como si fueran máquinas. dimensiones, la de interés por la producción e
interés por la gente, que cuando se muestra un alto
Líder de club campestre interés por la gente y un alto interés por la
El líder tiene alto interés en la gente y bajo en la producción. El líder se esfuerza en producción nos conduce a los líderes de equipos.
mantener una atmósfera amigable sin considerar lo sificiente la producción.

Líder de medio camino


El líder mantiene un interés equilibrado e intermedio entre la produción y la gente. El líder
hace esfuerzos por mantener un desempeño y una moral satisfactorios.

Líder de equipo
El líder muestra gran interés por la producción y la gente. El líder se esfuerza por lograr el
desempeño y la satisfacción máximos de los empleados. De acuerdo con Blake, Mouton y
McCanse, en general, el estilo de liderazgo más adecuado en todas las situaciones es el
liderazgo en equipo.
Likert, 1950 (Ganga y Navarrete, 2013: 59) Una serie bien conocida de los estudios de
liderazgo que se iniciaron en la Universidad de
Likert identificó cuatro estilos principales de Liderazgo alrededor de la toma de decisiones Michigan en la década de 1950 por Rensis Likert,
y el grado en el cual la gente se ve envuelta en la decisión. con el objetivo de identificar los principios y tipos
de estilos de liderazgo que condujeron a una mayor
1) Autoridad Explotadora: En este estilo, el líder tiene un bajo interés por las personas y productividad y satisfacción en el trabajo mejorado
utiliza métodos como las amenazas y la de inyectar temor para lograr la obediencia. La entre los trabajadores.
comunicación es siempre baja y psicológicamente distante de la gente, la cual es ignorada.
El modelo de la Universidad de Michigan identifica
2) Autoridad Benevolente: Cuando el líder añade interés por la gente y una posición de dos estilos de liderazgo (Díaz, s.f.: 6):
autoridad, un “dictador benevolente” es conformado. El líder utiliza recompensas para
motivar el desenvolvimiento del persona y escucha más atentamente para interesarse en los 1.- El estilo centrado en el trabajo:
niveles más bajos de la organización, a pesar de que los niveles bajos de la organización
les pintan todo color de rosa, a menudo están limitados a decir lo que sus jefes quieren La conducta centrada en el trabajo o en la tarea se
escuchar, aunque puede haber mucha delegación de decisiones, casi siempre las mejores refiere a la medida en que el líder asume la
decisiones son aún tomas centralmente. responsabilidad de hacer que el trabajo se lleve a
cabo. El líder dirige de cerca a sus subordinados en
3) Autoridad Consultiva: El ascendente flujo de información es aquí circunspecto y el cumplimiento de funciones y metas claras,
precavido y pintado color de rosa en algún grado, el líder desarrolla genuinos esfuerzos por mientras que el administrador les indica qué deben
escuchar cuidadosamente las ideas. Con todo, las mejores decisiones son aún largamente hacer y cómo tienen que hacerlo a medida que
centralizadas. trabajan en la consecución de la meta. Cumplir con
los estándares es una función importante.
4: Autoridad Participativa: En este nivel, el líder utiliza diversos métodos de participación,
comprometiendo a la gente de los bajos niveles de la organización a tomar decisiones. El 2.- El estilo centrado en los empleados La conducta
personal “cruza” la organización y están psicológicamente más cerca, juntos y trabajan en centrada en el empleado, en las personas o en la
todos los niveles. gente, en cambio, se refiere a la medida en que el
líder se concentra en la satisfacción de las
Los estudios de la Universidad de Michigan, en los que se distinguieron dos dimensiones necesidades de los empleados y al mismo tiempo
de la conducta del líder: Centrados en el empleado y centrados en la producción fomenta las relaciones interpersonales. El líder se
muestra sensible a los subordinados y se comunica
con ellos para cultivar la confianza, apoyo y
respeto, y al mismo tiempo busca su bienestar.
(Castillo, Organista, Pozos y Zarazua, 2004: 21-22)
Kurt Lewin, 1945 (Castillo, Organista, Pozos y Zarazua, 2004: 53)
Lewin clasificó los estilos de liderazgo para
El estilo autoritario es de dominación, de imposición. estudiar su efectividad en la consecución de
objetivos organizacionales.
El democrático es participativo, involucrador e incluyente. El líder democrático llega a
permitir ante ciertas circunstancias que la toma de decisiones se de por votación; sin Consideró que el problema para entender el
embargo, ésta no es útil para efectos administrativos y directivos, porque el líder funcionamiento de los grupos radicaba en asuntos
democrático es quien busca el consenso general y la satisfacción máxima posible de todas específicos como el liderazgo, la comunicación, las
las opciones y posiciones. normas sociales, el estatus, la atmósfera grupal así
como en las relaciones entre los miembros.
El estilo laissez faire ( dejar hacer, dejar pasar) es de libertad, responsabilidad individual y
grupal, y deja al individuo tomar decisiones que a su criterio sean las mas útiles para el fin Kurt Lewin es autor de La teoría del campo de
colectivo. Este estilo requiere de la total madurez de los colaboradores y un fuerzas. En ella sostiene como tesis fundamental
comportamiento basado en valores compartidos sólidos. Se ha mal interpretado como un que “la conducta humana es el resultado del
estilo anárquico, es decir, totalmente permisivo. espacio social o espacio vital del individuo; es
decir, de la influencia psicológica que el individuo
recibe del entorno en que se desenvuelve”.
Stogdill 1940 (Díaz, s.f.: 7-8) A mediados de la década de los cuarenta en la
Universidad Estatal de Ohio bajo la dirección de
En virtud de que el líder puede contar con una estructura inicial o de consideración alta o Ralph Stogdill, se realizaron investigaciones cuyo
baja, se concibieron cuatro estilos de liderazgo: objetivo fue determinar cuáles son los estilos de
liderazgo efectivos. Dicha investigación fue
Estructura baja y consideración alta realizada con un instrumento conocido como:
Cuestionario de Descripción del Comportamiento
Los líderes recurren a la cumunicación bidireccional y suelen compartir la toma de del Líder (LBDQ).
decisiones. Sin embargo, ponen poca atención al cumplimiento de los objetivos y pueden
ser poco eficientes en este sentido. Los estudios llevaron a encontrar dos estilos de
liderazgo distintos, que fueron llamados:
Estructura y consideración altas
1. Estructura de inicio. Este estilo de liderazgo es,
Los líderes recurren a una actividad participativa, teniendo siempre en la perspectiva la en esencia, sinónimo del estilo centrado en el
consecusión de los objetivos de la organización. De este modo, motivan a sus seguidores y trabajo, pues se enfoca en hacer que se cumpla la
extraen lo mejor de ellos, sin descuidar el cumplimiento de las metas. tarea.

Estructura y consideración bajas 2. Comportamiento de consideración. Este estilo de


liderazgo es, en esencia, idéntico al estilo de
Los líderes no presentan una actividad participativa y tampoco dan un seguimiento liderazgo centrado en los empleados, pues procura
cuidadoso y efectivo al cumplimiento de las metas y objetivos de la organización. satisfacer las necesidades de los individuos y
fomentar las relaciones interpersonales.
Estructura alta y consideración baja

Los líderes recurren a la comunicación unidireccional y toman las decisiones de forma


unilateral, sin consultar a sus seguidores o empleados. Por otro lado, son efectivos en el
cumplimento de las tareas que tienen asignadas.
El Estudio del Liderazgo desde un Enfoque Sociológico

El fenómeno del liderazgo es uno de los más difundidos en la sociedad. Se puede decir que casi
no hay relación social en la cual no esté presente, de algún modo, la capacidad de liderar de un
individuo o grupo sobre la conducta de otro individuo o grupo (Labourdette y Scaricabarozzi,
2010: 12). Particularmente este enfoque es del que da cuenta éste apartado de la revisión de la
literatura, es decir, de aquel que ha pretendido estudiar los procesos de interacción entre líder y
seguidores y su influencia mútua.
Desde la Sociología, estos estudios del liderazgo encuentran su primera expresión en el marco de
una de las Visiones Conciliadoras de la Psicología, la Teoría Transaccional de Hollander, la cual
combina la aproximación situacional con un componente de intercambio social centrado en las
influencias reciprocas entre el líder y los seguidores (López y Leal 2005: 28-29; Jiménez, 2008:
189-191). Se ha visto en el liderazgo el ejercicio del poder o de influencia en colectividades
sociales tales como grupos, organizaciones, comunidades o naciones… por lo que es un proceso
dinámico de construcción del líder” (Jiménez, 2008), lo que permite definir al liderazgo como
una construcción social acorde con el enfoque que lo explica en función de las características de
los seguidores que determinan su surgimiento.

Desde ésta disciplina, se han identificado estudios, que cumplen con las caracterústucas
mencionadas, principalmente desde dos vertientes:

I.- Existe un denominado liderazgo social que, según Carreras (2009: 14-32) está asociado a la
trayectoria de personas impulsoras de organizaciones de la sociedad civil que actúan con una
vocación de transformación social, este tipo de liderazgo tiene los siguientes cuatro elementos:

a) Es un proceso: tiene claro su destino y los objetivos generales.

b) Que conlleva influencia: es decir, debe ser transformador focalizado, identificando su parcela
de actuación.

c) Que se realiza en el contexto de un grupo: en una vertiente interna (es decir hacia adentro de la
organización), en al ámbito de otras organizaciones que comparten actuaciones y, la interacción
con el componente más público del liderazgo social (potenciales donantes, medios de
comunicación, administraciones públicas, empresas y con la sociedad en general).

d) Que pretende conseguir un objetivo en común: debe ser aglutinador e inclusivo, promover
causas sociales y fomentar los valores de su organización.

II.- Particularmente en el ámbito de lo sociológico, hablar de liderazgo, remite a diversas


consideraciones, entre las cuáles la teoría de Bourdieu, viene a significar el enfoque que mejor
incorpora integralmente las concepciones históricas sobre el liderazgo, entendiendo a este como
construcción social.

Se propone una lectura constructivista del liderazgo porque destaca la importancia del líder
(sujeto del liderazgo), que actúa con el propósito de que unas personas se comprometan en la
resolución de sus problemas (comunidad social), empleando un instrumento mediador (canales)
para relacionarse con otras personas (comunidad social) en una situación concreta (contexto).
Para construir este nuevo modelo de liderazgo es útil utilizar el punto de vista de las teorías de la
construcción social de la realidad (constructivismo), más que los análisis científicos del trabajo o
de los comportamientos (positivismo o realismo) (López & Leal, 2005).

Es en ese orden de ideas, en el marco del habitus y del campo, que el liderazgo encuentra una
explicación desde el ámbito de la sociología que es integradora, la que permite, acorde con los
cánones del estudio de lo social, observar en esa realidad el resultado de una construcción social
que interioriza y exterioriza, individual y colectivamente, los aspectos relacionales del objeto de
estudio.

¿Por qué el liderazgo es un objeto de estudio de la Ciencia Política?

La Ciencia Política, ha encontrado particularmente en el liderazgo una vinculación con los


pensadores clásicos y las modernas aportaciones a la cuestión (Delgado, 2004: 12-13). Dentro de
los primeros, Max Weber ocupa un lugar innegable, al subordinar el liderazgo al poder 15
(Zamorano, 2008: 24), a traves de conceptos como el de dominación y legitimación, de la cual
plantea tres tipos (Weber, 2002: 172-173):

1. La dominación racional-legal, que existe cuando un sistema de reglas, aplicadas jurídica y


administrativamente según principios verificables, es válido para todos los miembros de la

15
La posibilidad de imponer la voluntad propia al comportamiento ajeno.
comunidad. Aquí. Quienes ejercen el poder de manda serán designados o elegidos mediante
procedimientos sancionados legalmente.

2. La dominación tradicional, fundada en la creencia del carácter legítimo de una autoridad que ha
existido siempre y cuyos mandatos son legítimos en tanto están de acuerdo al uso, pero poseen
también la prerrogativa de la decisión personal libre, de modo que este tipo de gobierno se
caracteriza por la conformidad con la costumbre y por la arbitrariedad personal del dominador.

3. La dominación carismática, donde la autoridad personal puede emanar del polo opuesto a la
tradición. El poder de mando puede ser ejercido por un líder (profeta, héroe, demagogo) capaz de
probar que posee carisma por medio de poderes mágicos, revelaciones, heroísmo u otros dones
extraordinarios.

En el ámbito de la ciencia política, a menudo se vincula el liderazgo con conceptos que giran en
torno a él. La legitimidad es el concepto clave en el ejercicio del liderazgo. Se requiere hacer un
uso constructivo del mismo, más complejo y amplio que el simple ejercicio de influencia y poder
político (Bassols, et al., 2008; Vargas, 2010; Méndez, 2013).

El liderazgo político refiere la conducta de una persona en la posición de autoridad política, sus
competidores, y estos en interacción con otros miembros de la sociedad que se manifiesten en el
pasado, presente y probable futuro en todo el mundo. No solamente en posiciones de alto nivel,
también de intermedio y bajo, no solo personalidades en lo individual, también el liderazgo
colectivo de cuerpos agregados, y estos no en aislamiento sino en interacción con sus seguidores.
Esto significa que el liderazgo no está presente solo en un tipo de institución (partido, legislatura
o burocracia) o proceso (decisión politica, elección o revolución), los atravieza a todos (Paige,
1977:1).

Blondel, a la hora de pensar el fenómeno del liderazgo, remite a la cuestión del ambiente en el
cual el líder opera, y en particular, al tipo de condicionamiento que pueden ejercer los
marcos institucionales. De esta forma, sin descartar el papel que pueden cumplir los
atributos personales en este proceso, la apuesta del autor es más bien atender a las restricciones
de carácter contextual imperantes sobre los líderes destacando la importancia de avanzar en la
operacionalización de la categoría de liderazgo (Rodríguez, 2014: 13-15)
Existen dos Esquemas de Análisis del Liderazgo Político como Proceso, lo que implica la
existencia de diversas fases y la intermediación de variados factores que ejercen influencia para
el inicio del proceso y para su posterior desarrollo (Delgado, 2004: 21), mismos que a
continuación se desarrollan:

Natera Peral (2009: 4) afirma que el liderazgo debe concebirse como un proceso interactivo líder-
dominio y que los procesos de liderazgo son, asimismo, el resultado de las relaciones entre el
particular modelo de comportamiento del líder y sus ámbitos de dominio político, en los que se
requiere atender cinco factores (Delgado, 2004: 21-22):

1. La ecuación personal del liderazgo.

2. El comportamiento efectivo de los líderes.

3. La red de apoyo que utilizan.

4. El entorno del liderazgo y,

5. La percepción e impacto que produce el liderazgo.

Ballart y Ramió, por su parte, teniendo presente como criterio de partida la necesidad de
distinguir el cargo que ocupa el líder, la persona y el contexto, han sintetizado cinco categorías
para el análisis de los líderes (Delgado, 2004: 22-24):

1) La visión política del líder;

2) Sus habilidades políticas;

3) La capacidad para la toma de decisiones en situaciones críticas;

4) La bondad del contexto histórico en que actúan y,

5) La influencia sobre sus sucesores.


En el contexto sociopolítico, al hablar de liderazgo estamos históricamente hablando de las claves
dirigentes y de los partidos políticos, de modo más sustantivo, estamos problematizando el
fenómeno del poder político y las formas en las cuales este se (re) produce y ejercita, alcanza y
mantiene, busca conocer su sentido y justificación (Bassols, et al., 2008; Méndez, 2013).

El liderazgo se puede definir como un proceso interactivo entre el que ejerce el control del poder
político (el líder) y los que son los destinatarios de ese poder (los seguidores), creando un
impacto coherente y visible en la orientación y el funcionamiento del grupo. Esta definición
presenta una serie de variables (Jiménez, 2005; Jiménez, 2013):

A) Es el resultado de la relación y la interacción entre los miembros de un grupo;

B) Se mide y determina por el efecto creado por las políticas del líder sobre la estructura y la
actividad del grupo y por la capacidad del líder para que sus políticas sean una realidad; y

C) Se define como un "proceso" que permite el estudio de poder ejercido por un líder de una
manera consistente.

Jean Blondel (1987), distingue dos dimensiones del liderazgo en función del impacto que
producen los líderes en el sistema político. Por un lado la extensión o alcance del liderazgo. Por
otro, la profundidad o intensidad del mismo, conforme a la siguiente tabla:

Teorías de las élites que explican el liderazgo desde la ciencia política


Una parte fundamental en el estudio del liderazgo refiere su relación con algunas de las teorías
que explican el surgimiento y funcionamiento de ciertos grupos que procuran mantenerse en el
poder, a quienes se ha denominado élites, entre estas, particularmente las de Mosca (1984) y
Michels (2003), contribuyen a explicar la dinámica del liderazgo en relación con el poder.

Gaetano Mosca (1984: 106) en su libro “La clase política”, parte de la afirmación de que, como
una tendencia o hecho constante en los organismos políticos, en todas las sociedades existen dos
clases de personas: los gobernantes y los gobernados. Una clase política o clase dirigente, una
minoría de personas influyentes en la dirección de la cosa pública.

De esta afirmación se desprende, en principio, la importancia de la explicación del liderazgo con


respecto a la élite que coincidiría con la clase política gobernante y, en la que por lo menos, en su
vertiente política, el liderazgo encuentra una de sus principales expresiones. Asimismo, el hablar
de una minoría influyente, tiene inmersos dos elementos del liderazgo que ya se han mencionado,
la posibilidad de influir en los seguidores y la naturaleza unipersonal o minoritaria del liderazgo.

Ha quedado establecido en el texto referido que el hombre que es jefe de Estado no podría por
cierto gobernar sin el apoyo de una clase dirigente que hiciera cumplir y respetar sus órdenes
(Mosca, 1984: 107), esa clase gobernante es, en el ámbito de lo político, el grupo en cuyo seno
emerge el liderazgo, por lo que sin el respaldo de esa clase dirigente no podría acceder ni
mantenerse liderazgo político alguno.

Todas las clases políticas tienen la tendencia a volverse hereditarias, sino de derecho al menos de
hecho. Así, todas las fuerzas políticas poseen esa cualidad que en física se llama fuerza de
inercia; esto es, la tendencia a permanecer en el punto y en el estado en que se encuentran
(Mosca, 1984: 120). Esta tendencia vendría a explicar como, en ciertos casos, el líder político ya
tiene una historia de vida ligada al poder, una conexión que le ha caracterizado por la pertenencia
al núcleo de ciertas familias que han logrado permanecer en ese medio.

Las minorías gobernantes están constituídas por individuos con ciertas cualidades, que les
otorgan cierta superioridad material e intelectual, y hasta moral; o bien son los herederos de
quienes poseían estas cualidades. En otras palabras, deben poseer algún requisito verdadero o
aparente, que sea altamente apreciado y se valore mucho en la sociedad donde viven (Mosca,
1984: 110), lo que es coincidente con la idea del líder poseedor de ciertos dotes personales,
habilidades y capacidades, aunque no se constriñe a estas.

El autor hace mención de las calidades que en épocas históricas permiten a los hombres acceder a
la clase política, desde el valor militar en las sociedades primitivas, la riqueza, la ley, los grados
académicos en algunas otras, la gran cultura, los conocimientos especializados, hasta la jerarquía
eclesiástica o administrativa, hallando como común denominador el adquirir todos ellos más
facilmente con base en la riqueza, por lo que, en ese sentido, habría que reflexionar sobre el
grado de influencia que tiene el poseer medios económicos en la consolidación de un líderazgo
político.

Las clases políticas declinan inexorablemente cuando ya no pueden ejercer las cualidades
mediante las que llegaron al poder, o cuando no pueden prestar más el servicio social que
prestaban, o cuando sus cualidades y los servicios que prestaban pierden importancia en el
ambiente social donde viven (Mosca, 1984: 126), de esta manera, entendemos entonces que el
liderazgo puede tener vigencia, que ciertas condiciones son determinantes en el ejercicio del
poder, como las cualidades y el servicio que prestan, los cuáles según el tiempo pueden variar y
perder el valor que tenían.

Por otra parte, Michels (2003), realiza un estudio sobre las tendencias oligárquicas de la
democracia moderna, derivando de este conclusiones similares a las de Michels, pero desde el
punto de vista de la democracia en el seno de los partidos políticos.

En teoría, la meta principal de los partidos socialistas y democráticos es la lucha contra la


oligarquía en todas sus formas. Surge, por eso, la cuestión de cómo hemos de explicar el
desarrollo de esas mismas tendencias a las que han declarado la guerra, dentro de esos partidos
(Michels, 2003: 56), lo que hace evidente la presencia de una minoría que busca permanecer en el
poder, a la que el liderazgo, o una forma de éste, pertenecería.

Lo más probable es que el grupo social que haya conquistado el control de los instrumentos del
poder colectivo haga todo lo que esté a su alcance para conservar ese dominio (Michels, 2003:
172), por lo que el liderazgo pudiera tener esa connotación de carácter conservador en el seno de
los partidos políticos.
La competencia entre las diversas camarillas de las clases dominantes termina en una
reconciliación que obedece a la tendencia instintiva de conservar el dominio sobre las masas
compartiéndolo entre ellas (Michels, 2003: 166), dinámica en la que el liderazgo podría constituir
un acuerdo entre camarillas, un convenio por medio del cual se negocia la ascención al poder.

Finalmente, un estudio del liderazgo político, debe necesariamente considerar estas dimensiones
que tienen relación directa con el poder, la representación y las organizaciones, como llama
Michels a los partidos políticos desconociendo su calidad de partidos.

FUENTES

Álvarez, J., 2009. Estilos de liderazgo en la policía local de la comunidad valenciana (Tesis
Doctoral). Valencia: Universitat de Valencia.

Amorós, E., 2007. Comportamiento Organizacional: en Busca del Desarrollo de Ventajas


Competitivas. Perú: USAT Universidad Católica Santo Toribio de Mogrovejo.

Bennis, W. & Nanus, B., 1985. Leaders: The strategies for taking charge. New York: Harper &
Row.

Blondel, J., 1987. Political Leadership, Towards a General Analysis. California: Sage.

Carreras, I. Et. al, 2009. Líderes para el cambio social: Características y competencias del
liderazgo en las ONG. Barcelona: Instituto de Innovación Social de ESADE.

Castillo, M., Organista, E., Pozos, L. & Zarazua, E., 2004. Los Estilos de Liderazgo,
Comunicación y Manejo de Conflictos (Tesina de Licenciatura). México D.F.: Universidad
Autónoma Metropolitana.

Castro, A., 2006. Teorías implícitas del liderazgo, contexto y capacidad de conducción. Anales
de

Chatman, J. & Kennedy, J., 2010. Psychological Perspectives on Leadership en Handbook of


Leadership Theory and Practice. Boston: Harvard Business Press.
Cideal (Fundación Cideal), 2009. ¿Qué estilo de liderazgo es más adecuado en cada situación?.
[En línea] Available at:
http://fortalecimiento.cideal.org/sitefiles/adjuntos/6201c11863a4d1db4fe88029181b108f.pdf
[Último acceso: 31 Marzo 2016].

Delgado, S., 2004. Sobre el Concepto y Estudio del Liderazgo Político. Psicología Política,
Volumen 29, pp. 1-29.

Díaz, A., s.f. Estilos de Liderazgo. [En línea] Available at:


http://arodi.yolasite.com/resources/Liderazgo-Estilos.pdf [Último acceso: 31 Marzo 2016].

Ganga, F. & Navarrete, E, 2013. Enfoques Asociados al Liderazgo Eficaz para la Organización.
Gaceta Laboral, Volumen 19 (1), pp. 52-77.

Hackman, J. & Wageman, R, 2005. A theory of team coaching. Academy of Management


Review, Volumen 30 (2), pp. 269-287.

Hanges, P. & Dickson, M., 2004. The Development and Validation of the GLOBE Culture and
Leadership Scales. (pp. 122-151). En House, P., Hanges, M. Javidan, P., Dorfman, & Gupta, V.
(Eds.), Leadership, Culture, and Organizations: The GLOBE Study of 62 Societies. Thousand
Oaks, CA: SAGE.

Jiménez, E., 2005. Understanding Modern Charismatic Leadership: Hugo Chávez and the
'Peaceful Revolution' in Contemporary Venezuelan Politics. Japón: Waseda University.

Jiménez, J., 2013. Los liderazgos de Adolfo Suárez y Felipe González en la Transición a la
democracia en España (1976-1982). [En línea] Available at:
http://webcache.googleusercontent.com/search?q=cache:aJIW5he-
BnAJ:docenti.unimc.it/armando.francesconi/teaching/2013/11540/files/pdf-del-seminario-del-
prof.-jose-francisco-jimenez/at_download/file+&cd=1&hl=es-419&ct=clnk&gl=mx
[Último acceso: 19 Septiembre 2015].

Jiménez, J., 2008. Enfoque Sociológico para el Estudio del Liderazgo. Barataria, Revista
Cantellano-Manchega de Ciencias Sociales, Issue 9, pp. 189-203.
Kouzes, J. & Posner, B., 2013. The Leadership Practices Inventory (LPI): Leadership
Development Planner (4th edition). California: Pfeiffer.

Kotter, J., 2001. What Leaders Really Do. Boston: Harvard Business Press.

Labourdette, S., Scaricabarozzi, R., 2010. Hacia un nuevo concepto de liderazgo. [En línea]
Available at: http://www.fuentesmemoria.fahce.unlp.edu.ar/art_revistas/pr.4755/pr.4755.pdf
[Último acceso: 19 Septiembre 2015].

López, J. & Leal, I., 2005. Liderazgo Político. Barcelona: Paidós.

Lupano, M. & Castro, A., 2013. Estudios sobre el Liderazgo. Teorías y Evaluación. Revista
Psicodebate, Psicología, Cultura y Sociedad, (6), pp. 107-122.

Méndez, J., 2013. Liderazgo Político. México D. F.: Grupo Editorial Siglo XXI.

Méndez, R., 2009. Estilos de Liderazgo Participativo de Likert. [En línea] Available at:
http://www.conselldemallorca.net/media/13993/LIDERAZGO_GOBERNANZA_PODER_LOC
AL__CURSO_UIB[1].pdf [Último acceso: 18 Abril 2016].

Michels, R., 2003. Los partidos políticos II: Un estudio sociológico de las tendencias
oligárquicas de la democracia moderna. Buenos Aires: Amorrortu.

Mosca, G., 1984. La clase política. México: Fonde de Cultura Económica.

Natera, A., 2009. Liderazgo, gobernanza y poder local. [En línea] Available at:
http://rogermendezbenavides.blogspot.mx/2009/10/estilos-de-liderazgo-participativo-de_03.html
[Último acceso: 31 Marzo 2016].

Paige, G., 1977. The Scientific Study of Political Leadership. New York: The Free Press.

Pariente, J., 2009. Algunas reflexiones en torno al concepto del liderazgo en: Mendoza, J. &
Garza, L. (coordinadoras). Procesos de Cambio y Desarrollo Organizacional. Aguascalientes:
Universidad Autónoma de Aguascalientes.

Rodríguez, D., 2014. El Liderazgo y las Nuevas Formas Políticas: Balance Teórico y Lente
Conceptual. España: Universidad de Salamanca.
Ruiloba, J., 2013. Liderazgo y Género en el Siglo XXI, Revista Entramado, (1), 142-155.

UO (Universidad de Oriente), s.f.. Modelo de la Participación del Líder. [En línea] Available at:
http://www.uovirtual.com.mx/licenciatura/lecturas/direc/28.pdf [Último acceso: 31 Marzo 2016].

Vargas, L., 2010. Liderazgo y Competencias en una Unidad de Servicios Compartidos (Tesis de
Maestría). Querétaro: Universidad Autónoma de Querétaro.

Weber, M., 2002. Economía y Sociedad. Esbozo de Sociología Comprensiva. México: Fondo de
Cultura Económica.

Zaleznik, A., 1992. Managers and leaders: Are they different?. Harvard Business Review, pp. 1-
11.

Zamorano, R., 2008. Poder, Liderazgo y Democracia, En Liderazgo Político, Teoría y Procesos
en el México de Hoy. México D. F. : Universidad Autónoma Metropolitana.

También podría gustarte