Está en la página 1de 3

La modernidad

El concepto modernidad pareciera responder a todas las cuestiones que se generan a


partir de la innovación, de lo distinto, alejando su mirada de lo tradicional e
imponiéndose en el lenguaje y en la cultura como algo que es necesario y debe asumirse
en el mundo occidental. La cuestión de lo moderno trae consigo muchos interrogantes y
situaciones que a mi parecer debemos entender y sobre todo poder determinar con
mayor precisión.
En su obra ¿què es la modernidad?, Bolívar Echeverría1 relaciona a la modernidad
con un conjunto de comportamientos enmarcados en un contexto y parecieran ser las
nuevas aptitudes a asumir, con las cuales se busca sustituir lo tradicional, haciendo ver
nuestras costumbres y acciones como algo pasado de moda. Otra forma de relacionarnos
con la modernidad son los hechos, los cuales están en oposición a lo establecido, estos
hechos buscan ante todo afirmar la necesidad de transformar el mundo. Teniendo
presente muchos factores tratare de analizar un poco las siguientes notas:
“Para precisar un poco más el asunto voy a mencionar tres fenómenos en los que se manifiesta esta
característica de lo moderno o en los que se muestra en acción esta “lógica” nueva, moderna: la
técnica científica, la secularización de lo político y el individualismo.[CITATION Bol09 \l
3082 ]

A partir de los tres elementos mencionados anteriormente es importante describir las


implicaciones que trae para la historia y para la vida personal. Pero, en primer lugar,
quiero presentar a la modernidad en su sentido más primigenio; históricamente la
modernidad nace como una respuesta a lo que históricamente se ha llamado el periodo
de oscurantismo del mundo occidental, tener una fecha exacta es bastante difícil, pero
nos podemos aproximar a los años finales del siglo XV, más profundamente al periodo
de grandes cambios conocido como el Renacimiento.
El Renacimiento como movimiento surgido en un periodo de tiempo trajo consigo
grandes trasformaciones en la forma de pensar del hombre y de situarse ante el mundo y
ante la realidad, fue allí cuando en ese deseo de descubrir e innovar se abrió la puerta a
la denominada Edad moderna. La modernidad no nace e inmediatamente se
autoproclama, por el contrario, se fue construyendo paso a paso.

1
Bolívar Vinicio Echeverría Andrade (Riobamba, Ecuador, 2 de febrero de 1941 – Ciudad de
México, México, 5 de junio de 2010) fue un filósofo latinoamericano, de origen ecuatoriano, y
naturalizado mexicano. Fue profesor emérito de la Facultad de Filosofía y Letras de la Universidad Nacional
Autónoma de México (UNAM).
Es Kant quien relaciona a la modernidad con las diferentes manifestaciones culturales, y
sociales, debido a su gran influencia en el movimiento ilustrado del siglo XVIII. En este
sentido la modernidad identificada como ilustración comienza a poner sus bases en los
grandes cambios.
“la salida del hombre de su minoría de edad. El mismo es culpable de ella. La minoría de
edad estriba en la incapacidad de servirse del propio entendimiento, sin la dirección de otro…La
mayoría de los hombres, a pesar de que la naturaleza los ha librado desde tiempo atrás de
conducción ajena, permanecen con gusto bajo ella a lo largo de la vida, debido a la pereza y a la
cobardía” (Kant 1965).

Los cambios deben generarse en primer lugar de forma personal, es el individuo quien
tiene la libertad de poder realizarlos. Es la libertad y el poder auto conducirse el inicio
de los nuevos conceptos que fortalecen el gran discurso de la modernidad, por tal
motivo, es casi imposible separar ilustración de modernidad.
En segundo lugar, es a Hegel a quien se le atribuye la observación sobre otra
herramienta tan importante como la libertad, la subjetividad, otro principio inseparable
de la modernidad. En este sentido es el sujeto quien se descubre así mismo y por
consiguiente hace uso de la libertad como herramienta, de esta forma logra cambios
haciendo uso de su reflexión individual. En los inicios de la edad moderna se resaltaba
el papel del hombre y su necesidad de emancipación ante lo religioso, su finalidad
primera era volver a un humanismo centrado en la investigación y en el descubrimiento
de las potencialidades del hombre.
No es fácil tener metodológicamente consignado los grandes cambios que ha
presentado una nueva visión, una nueva época; por tal motivo es en el lenguaje y en la
razón en donde se empieza a ver de forma más clara ese profundo deseo de superar la
tradición o costumbres para observar desde la terraza de lo moderno un nuevo cambio,
un nuevo horizonte.

Volviendo a los planteamientos de Bolívar Echavarría es la técnica, la secularización


de lo político y el individualismo los elementos más complejos que nacieron con la
modernidad; la técnica no es nueva, por el contrario, ha sido el perfeccionamiento de las
capacidades humanas que unidas a las tecnologías han brindado desarrollo económico, y
de igual forma ha nacido, un nuevo modo de esclavitud.
La llamada secularización de lo político está fuertemente influenciada por el espíritu
liberal de una economía que es capaz de satisfacer todas las necesidades humanas, en
este punto es importante resaltar al materialismo, que cada vez coge más fuerza en el
mundo occidental. Ese materialismo no esta sujeto ya a luchas de clases expuesta por
Marx, por el contrario, nace es una lucha por defender la institucionalidad y con ella la
libre economía que fortalece el capital de la clase burguesa, generando abismos de
desigualdad, que solo son neutralizados con la falsa creencia del derecho que se tiene a
la acumulación de riquezas; expresión que es asumida en sentido endiosado, dejando la
cultura y lo social en un segundo plano.
Completando la triada de la modernidad nos encontramos con el individualismo ya
mencionado por Hegel anteriormente; Echavarría por su parte trata de introducir otro
matiz partiendo de la nueva concepción de individuo libre e igual ante la sociedad,
capaz de participar de las decisiones a las que tiene deber por ser ciudadano. De manera
general pareciera no haber ningún problema, pero, cuando vamos al fondo del asunto
ese individualismo coge más fuerza cuando se opone al comunitarismo, planteándose
problemas en relación con la jerarquía social y las capacidades que tienen unos
individuos frente a otros.
En conclusión, no hay que negar lo beneficioso que ha sido para la humanidad
muchas posturas y acciones de la modernidad, pero no debemos olvidarnos de igual
forma, que los cambios de lo tradicional a lo que se dice ser moderno, debe llevar a
conservar la dignidad humana, la verdad, la libertad y sobre todo buscar lo que se
planteó desde el inicio de este periodo de tiempo, la perfección de las costumbres y
tradiciones, no el aniquilamiento de las mismas.

También podría gustarte