Está en la página 1de 4

Adaptación, adaptabilidad e investigación multidisciplinaria - Little

La adaptabilidad consiste en la flexibilidad básica de las poblaciones, por la cual éstas se adaptan a
su medio.
EL CONCEPTO DE ADAPTACIÓN
La adaptación es identificada como una propiedad fundamental de la vida. Un organismo debe tener
la capacidad de responder a las condiciones cambiantes que caracterizan su medio. La selección
natural también produce cambio al preservar individuos con determinados genotipos favorables. Esta
forma de adaptación transgeneracional contribuye a lo que se conoce como evolución. Adaptación,
como la capacidad de un organismo para ajustarse al cambio ambiental, favoreciendo la supervivencia
y la reproducción, no es solo una de las propiedades fundamentales de la vida, sino un requerimiento
esencial para la vida.
A pesar de su complejo comportamiento, sociedad, cultura, y capacidad para manipular y –en un
grado limitado, controlar su ambiente‐ los seres humanos están sujetos a la adaptación durante cada
momento de su vida.
ADAPTACIÓN Y ADAPTABILIDAD HUMANA
Adaptación es un concepto fundamental en la teoría evolutiva, relacionada con los conceptos de
selección y éxito reproductor. Pero mientras el éxito reproductor o fitness es medida por la
performance reproductiva, la adaptación es vista como la forma que el organismo es “diseñado” para
estar en armonía con el ambiente. Pero la adaptación puede ser también pensada como un estado de
bienestar relativo del organismo. Adaptabilidad significa literalmente “capacidad para adaptarse”. La
adaptación ha sido vista como:

 Algo que posee el individuo, tal como una adaptación al calor


 Como un estado de existencia, tal como una población adaptada a la alta altitud
 Como un proceso, tal como los ajustes graduales a un ambiente que conduce a mayores
“estados de adaptación” en cada nivel del tiempo
La adaptación es un proceso en el cual el tiempo y la interacción con el ambiente son necesarios para
que los organismos y las poblaciones se ajusten a los desafíos ambientales. Sin embargo, su
evaluación debe hacerse en cortes transversales. ¿Cuál es la unidad de adaptación? ¿Es el individuo,
la familia, la sociedad, la población, el ecosistema, o todo eso y otros niveles también? Mazess postuló
9 dominios adaptativos para evaluar la adaptación a nivel individual:

 Reproducción
 Salud
 Nutrición
 Sistema nervioso
 Crecimiento y desarrollo
 Resistencia y tolerancia cruzada
 Performance física
 Función afectiva
 Capacidad intelectual.
La naturaleza interactiva de estos dominios se torna clara si observamos la reproducción. Todos los
demás dominios deben estar en un estado relativamente saludable para facilitar una reproducción
normal.
ENFOQUES PARA EL ESTUDIO DE LA ADAPTACIÓN HUMANA (3 niveles)
La fisiología humana y la antropología biológica intentaron definir patrones de adaptación: genética,
de desarrollo (adaptación ontogenética), y de corto plazo, reversible, estacional, o flexible
(aclimatización). Un punto importante que concierne a las influencias ambientales sobre los cambios
que se producen en el crecimiento y el desarrollo, es que muchos de estos no son reversibles y
establecen límites para las respuestas adaptativas de corto plazo, que pueden ocurrir durante la
adultez.
ADAPTACIÓN Y CRECIMIENTO
El crecimiento y desarrollo humano desde el huevo fertilizado hasta el adulto sexualmente maduro y
más allá, es un proceso adaptativo que requiere un constante feedback ambiental. La influencia del
ambiente externo sobre el crecimiento intrauterino es amortiguada por el sistema materno, mientras el
sistema inmune materno es suprimido temporariamente mientras un feto genéticamente extraño es
llevado a término. La salud materna ejerce una poderosa influencia sobre la salud del feto durante la
gestación y la salud del niño durante la lactancia. La infancia y la niñez son periodos precarios por la
inmadurez motora, cognitiva e inmunitaria, y los humanos necesitan considerable soporte durante este
periodo de vida.
Durante la infancia y la niñez el crecimiento puede ser retrasado o incluso detenido debido a
enfermedad o inadecuada ingesta alimentaria. Bajo estas condiciones los limitados recursos
corporales son utilizados para sobrevivir y no para crecer. Puesto que el crecimiento es un proceso
dirigido, si el infante o niño sobrevive y es bien nutrido nuevamente, entonces el crecimiento se acelera
más allá de la velocidad normal para la edad, lo que se conoce como “catch‐up” de crecimiento. El
efecto opuesto, “slow‐down” puede ocurrir, por ejemplo, en un feto genéticamente grande durante las
últimas semanas postnatales tal que pueda parirse exitosamente si la madre es pequeña.
Schell discutió un problema fundamental en la teoría de la adaptación donde dos modelos
contrastantes pueden ser usados para medir la adaptación en el crecimiento humano. Identificó el
“modelo de adaptabilidad” en el cual el crecimiento facilita o es un medio de adaptación al ambiente,
mientras en el “modelo médico” el crecimiento es una medida de la adaptación. Según esta
estructura, un niño que crece lentamente (retardo de crecimiento) estaría pobremente adaptado para
el modelo médico, pero respondiendo adaptativamente a la enfermedad u otro estrés de acuerdo al
modelo de adaptabilidad. Este último modelo parece más consistente con la teoría evolutiva, mientras
que el modelo medico parece demasiado rígido al establecer estrictas normas para crecer. Hay una
multiplicidad de posibles patrones de crecimiento para un organismo, el cual sigue aquel patrón más
apropiado para las circunstancias ambientales. Si todos los niños miden 1,20 m., y uno mide 1,10 m.,
ese niño no está adaptado según el modelo médico, pero según el modelo de adaptabilidad, si está
adaptado a pesar de la diferencia.
El lapso de vida desde la concepción hasta la muerte es contexto temporal de la adaptación, con
influencias ambientales variantes a través del lapso de vida. Luego de la concepción se establece el
rango genético de la adaptación (para cualquier estímulo dado), que entonces se va modificando como
procede la vida. Los individuos manifiestan variación en sus genotipos, en sus experiencias
intrauterinas, y durante el crecimiento y la maduración. La adaptación de desarrollo durante el
crecimiento intrauterino y extrauterino, modifica el rango de adaptación y probablemente lo reduce.
La capacidad de adaptación o adaptabilidad adulta entonces es un estrecho rango del potencial
genético original, y este rango de adaptabilidad se torna aún más limitado durante el envejecimiento o
senescencia.
Uno de los primeros estudios para demostrar la adaptación de desarrollo a través de la plasticidad. El
fitness es equivalente a salud y bienestar, es decir, homeostasis (equilibrio). Cuando los individuos se
mueven desde un ambiente familiar o habitual a uno adverso, ellos sufren una inmediata declinación
del fitness que recuperan en grados variables.
Debe aclararse que fitness ha sido usado en muchas formas. Primero, el fitness darwiniano refiere al
éxito reproductivo en un contexto evolutivo, y por lo tanto es una medida de la adaptación genética.
Segundo, lo que podría llamarse fitness bio‐comportamental que refiere al estado de salud y bienestar
que define Harrison, y que está ligado a la adaptación de desarrollo y de corto plazo. Hay al menos
un tercer uso del término, fitness físico o fisiológico, que refiere a la capacidad de ejecutar trabajo o
ejercicio físico sostenido (Baker).
Contribución al concepto de antropología biológica - Pucciarelli
El termino antropología biológica define una instancia cualitativamente superior de la antropología
física, cuyo inicio data de la segunda mitad del siglo. No hay unicidad de criterios con respecto a su
utilización. Textos y tratados de formación tradicional conceptualizan a la antropología física como
ciencia dedicada a la evolución y sistematización humanas.
La disciplina surge no a través de la antigua historia, sino como consecuencia de la expansión
imperialista europea de los siglos XV a XVIII, sustentada por la tríada de la ciencia biológica: Linneo,
Buffon y Blumenbach. Esta relación está dada por la necesidad de estudiar y comprender el
comportamiento y características bio-culturales de las poblaciones “exóticas”. Así surge un criterio
esencialmente taxonomista.
A mediados del siglo XIX se opera un cambio fundamental con la irrupción del evolucionismo
darwiniano. Se preocupación central concierne a la causa y forma en que el hombre evoluciona.
A mediados del siglo XX se produce la incorporación de la teoría genética en antropología, dando
lugar a un nuevo cambio, fundamentalmente con el reemplazo del concepto tipológico predominante
por el de población antropológica. El concepto de población por si mismo no introdujo cambios
respecto de la caracterización disciplinaria. Si bien se produjeron cambios en la metódica, no los hubo
en la metodología no en la posición del antropólogo respecto de su realidad de estudio.
Un ejemplo dramático de conceptualización tipológica en tiempos modernos es proporcionado por la
evolución humana. Existe una crisis interpretativa en lo filetico, provocada por las frecuentes
relaciones unilineales que fueron y son establecidas entre formas individuales o en el mejor de los
casos, entre tipos morfológicos pertenecientes a distintos periodos, sin tener en consideración que
formas o tipos diferentes pueden integrar una misma población evolucionante a través del espacio-
tiempo.
Raza como concepto científico está permitido por su alto grado de imprecisión y por su pesada carga
ideológica. Este término implica en muchos aspectos ser instrumentado por el racismo con fines extra-
científicos. El concepto de biología poblacional permite pensar en procesos adaptativos de las
poblaciones humanas en su constante interacción de las condiciones impuestas por el medio.
El nuevo concepto implica un devenir histórico-cultural que puede ser arbitrariamente dividido por
planos ideales transversos, los cuales permiten estudiar el estadio evolutivo del momento, a través del
“despliegue adaptativo” que puede ser observado. Toda diversidad adaptativa actual no es otra cosa
que la expresión de un proceso histórico-evolutivo, por cuanto la dimensión temporal es fundamental
para entender cualquier contenido antropobiológico estimable como no carente de sentido.
DEFINICIÓN Y CONCEPTUALIZACIÓN
No podría hablarse de definición, por cuanto pareciera resultar imposible la demarcación de esta
disciplina por límites rígidos y concretes. Si se admite que la antropología estudia procesos en vez de
cosas, entonces deben delimitarse sólo conceptos centrales o "núcleos temáticos" que reflejen los
objetivos buscados en cada estamento disciplinario. Los núcleos temáticos pueden dar los elementos
esenciales que, en tanto comunes a diferentes disciplinas, permiten globalizar un contenido teórico de
la antropología biológica.
Según el concepto de núcleo temático, pueden ser definidos centros de interés específicos, pero sus
límites, en tanto difusos, connotan superposiciones con núcleo de otras ciencias. Estos verdaderos
“bordes temáticos” serían el equivalente a lo comúnmente conocido por “ciencia afín”.
En la medida que no existan objetivos de alguna manera centralizados – como los propuestos por
núcleos temáticos – cabe preguntarse si la base conceptual para inferir, por ejemplo, que un estudio
de crecimiento y desarrollo corresponde al campo antropobiológico.
La antropología biológica estudia todo proceso de diferenciación entre poblaciones humanas, producto
de la interacción dinámico-sistémica entre su propia variabilidad intragrupal y el contexto de factores
de su particular medio ambiente. Pueden ser definidos 4 grandes núcleos temáticos:

 Evolución: proceso de transformación de las especies a través de cambios producidos en


sucesivas generaciones. Descendencia con modificaciones y selección natural.
 Adaptación: capacidad de responder a las exigencias del ambiente. Ocurre en los individuos.
 Filogenia: historia evolutiva. Origen, formación y desarrollo evolutivo general de una especie
biológica.
 Ontogenia: crecimiento y desarrollo de un individuo desde la fecundación hasta la senescencia.
La evolución filogenética abarca todo lo referente a la evolución homínida en su aspecto biológica y
a los criterios necesarios para su comprensión.
La evolución ontogénica comprende el estudio del crecimiento y desarrollo individual – como parte
de la intravariación – y sus diferencias entre poblaciones.
La adaptación filogenética comprende al conjunto de procesos genético-adaptativos sobre
poblaciones actuales y extintas.
La adaptación ontogénica se diferencia de la anterior ya que las modificaciones fenotípicas a
estudiar no son transmisibles a la descendencia por no afectar la constitución genética individual.
El crecimiento y el desarrollo constituyen un núcleo evolutivo que se diferencia de la denominada
evolución humana por constituir un proceso “actual”.
CRITERIOS DE INTEGRACIÓN ANTROPOLÓGICA
Se puede suponer que mientras las especies no homínidas evolucionan adaptándose al medio
ambiente en diferente forma y grado de especializaci6n biológica, el hombre presenta como tendencia
fundamental, la adaptación ambiental a sus propios requerimientos de supervivencia. Este "medio
ambiente transformado" pasa a integrar el concepto de cultura en antropología, el cual no puede estar
ausente en ningún intento de conceptualizaci6n disciplinaria.
Durante el trascurso del proceso evolutivo humano se desarrolla una relación inversa entre el grado de
adaptación biológica y la intensificación de la complejidad cultural. Consecuentemente, lo dicho sobre
la particularidad del hombre que evoluciona modificando su medio, es correcto pero incompleto. Como
todo proceso real, esta interrelación es secuencial, implicando que con el incremento cultural la
adaptación biológica decrece en significación.
Las diferencias interdisciplinarias de una antropología global son de orden estrictamente metodológico,
pero sus objetivos siguen siendo esencialmente los mismos, aunque difiera hasta el lenguaje por el
cual fueran formulados desde cada disciplina. Si se acepta que la antropología moderna estudia
"procesos en lugar de cosas" debe admitirse una posible variación subyacente al objetivo central. Este
último podría ser concebido en principio como "el proceso bio-social (o biocultural) de la existencia".
Tal criterio puede cumplir todos los requerimientos especificados para un concepto globalizador:
enfoca todo estudio antropológico como un proceso, se adapta a la posición ideológica del observador
y al polo de la interacci6n bio-social donde este se ubique, substrae al fenómeno cultural de cualquier
matiz puntual, separa cualitativamente la sociedad humana de toda forma de interacción poblacional
no homínida.

También podría gustarte