Está en la página 1de 16

LAS CAÍDAS EN EL ANCIANO DESDE EL PUNTO DE VISTA MÉDICO

Marín Carmona, JM; López Trigo, JA.


Geriatras. Exmo. Ayuntamiento de Málaga

INTRODUCCIÓN. GENERALIDADES SOBRE LAS FACTORES QUE ESTABLECEN MAL PRONÓSTICO


CAÍDAS EN EL ANCIANO QUE SUFRE UNA CAÍDA
La Organización Mundial de la Salud define la caída Son factores de mal pronóstico la edad avanzada, la
como la consecuencia de cualquier acontecimiento que permanencia durante tiempo prolongado en el suelo, el
precipita al paciente al suelo en contra de su voluntad. sexo femenino, la pluripatología, la polimedicación, y el
Esta precipitación suele ser repentina e involuntaria. Pue- deterioro cognitivo.
de ser referida por el paciente o por un testigo.
Junto a la mortalidad directa ( con tendencia a dismi-
Las caídas forman parte de lo que denominamos Gran- nuir por la mejora en las condiciones de atención a las
des Síndromes Geriátricos o Gigantes de la Geriatría. Como lesiones agudas ), las caídas condicionan una gran
todos ellos, son muy frecuentes ( aunque a menudo no morbilidad, de forma que hasta un 47 % de los pacientes
son considerados como “ problema “ ), afectan a los mayo- hospitalizados a causa de una caída requerirán cuidados
res más vulnerables, y tienen importantes repercusiones sociosanitarios continuados.
sobre la mortalidad y morbilidad de nuestros pacientes
mayores. Como veremos, su etiología es multifactorial y
requieren un abordaje geriátrico, tanto en la evaluación
REPERCUSIONES y CONSECUENCIAS DE LAS
multidimensional y multidisciplinar del mayor que cae como
CAÍDAS
en la adopción de medidas preventivas y rehabilitadoras.
Las consecuencias de las caídas en el mayor pueden
Quizás sea el Síndrome Geriátrico del que más se co-
ser físicas, psicológicas, sociofamiliares, económicas, etc,
noce sobre la existencia de factores de riesgo específicos
y en mayor o menor medida, aparecen todas imbricadas.
y , por tanto, donde más rentable resultarán las diferentes
Junto a la mortalidad directa inducida por ellas quizás el
estrategias preventivas.
aspecto más relevante sea el de la puesta en marcha de
una cascada de complicaciones que determinarán la inca-
pacidad funcional del mayor en muchas ocasiones.
EPIDEMIOLOGÍA
Repasaremos , someramente, las consecuencias más
Las cifras de caídas tienden a minusvalorarse. A me- frecuentes y de mayor impacto funcional.
nudo existe cierta pasividad ante el anciano que cae repe-
tidamente, tanto en el entorno familiar como en ámbitos a. Consecuencias físicas :
profesionales. Así se reportan, fundamentalmente, aque-
- Fracturas:
llas que han provocado lesiones físicas , quedando sin
referenciar las que no han requerido atención sanitaria ur- Entre un 5-8 % de las personas mayores resi-
gente. dentes en la comunidad que caen van a sufrir
una fractura. Las cifras son superiores en el me-
Los datos de prevalencia de caídas varían en función
dio residencial. Por otro lado, en el 90% de las
de la edad del paciente, su fragilidad, y su ubicación ( en-
fracturas de cadera, antebrazo, húmero, y pelvis
torno familiar o no ). Se considera que una tercera parte
del mayor ( las más frecuentes ) es posible en-
de los mayores que viven en la comunidad han caído, al
contrar el antecedente de caída, generalmente
menos, una vez al año. La mitad de los que caen lo hacen
de bajo impacto traumático.
de forma reiterada. Si consideramos al subgrupo de los
mayores de 80 años que viven en sus domicilios, el 50 % El índice de fracturabilidad aumenta exponencial-
sufren al menos una caída al año. En algunos estudios la mente con la edad y el sexo femenino, de forma
prevalencia es mayor en mujeres, seguramente ligada a que en mayores de 75 años el 40% de las muje-
su mayor esperanza de vida. En ambientes institucionales res que sufren caídas se fracturan frente al 27%
( Residencias, hospitales ) la prevalencia de caídas es de los hombres.
mayor. Así se considera que el 45 % de los mayores ingre-
sados en Residencias han caído al menos una vez, y has- La fractura de cadera es de las más frecuentes,
ta un 20 % de los mayores hospitalizados por cualquier y la que acarrea una mayor morbimortalidad. La
causa caen durante el periodo de hospitalización. incidencia de la misma en nuestro país es de 130-
200 casos/ 100000 habitantes / año. Ocasionan
Las caídas no suelen aparecer como causa de muerte mortalidad directa en el 15-20% de los casos, y
en los certificados de defunción en nuestro medio ( por una elevada morbilidad. Se estima que los ma-
temor a las implicaciones jurídico-administrativas ) por lo yores ingresados en el hospital por fractura de
que es difícil aportar datos fiables de tasas de mortalidad. cadera generan unas estancias medias dobles
GEROSAGG 2004 Vol. 2 Num. 3 Caídas en el anciano 3
que por cualquier otra causa de ingreso y , lo que sas, modifican la mecánica ventilatoria y pue-
es más relevante, en el 30-45 % de los casos den condicionar complicaciones infecciosas res-
quedarán con una dependencia funcional impor- piratorias graves.
tante para su desenvolvimiento cotidiano. Las
localizaciones más frecuentes son la - Permanencia prolongada en el suelo:
pertrocantérea (50-60% ), cervical (30-45%), y
Aproximadamente el 50% de los mayores que
subtrocantérea (5-10% ).
se caen necesitan ayuda para levantarse, y un
Entre sus factores de riesgo aparecen claramen- 10% permanecen en el suelo durante largo tiem-
te definidos la disminución de la masa ósea aso- po. Los factores de riesgo relacionados con la
ciada a la osteoporosis y, lógicamente, las caí- permanencia en el suelo son la edad superior a
das de repetición con traumatismos de bajo im- 80 años, la dependencia funcional, disminución
pacto. El ejercicio físico ha demostrado ser un de fuerzas en MMII, trastornos del equilibrio, etc.
factor protector, mientras que la vida sedentaria Lógicamente incidirán en mayores que viven
se asocia en mayor medida a la fractura de ca- solos, o con un nivel de supervisión y cuidados
dera. Otros muchos factores aducidos en diver- sociofamiliares escasos.
sos estudios ( ingesta de alcohol o café, taba-
La permanencia en el suelo durante largo tiem-
quismo, fármacos diversos, alteraciones senso-
po puede provocar deshidratación ( ayuno, vó-
riales o cognitivas,etc.) ejercen su influencia a
mitos, diarreas, taquipnea, etc ), rabdomiolísis (
través de aumentar el riesgo de osteoporosis o
necrosis muscular, liberación de mioglobina, ries-
caídas.
go de insuficiencia renal aguda), infecciones (
La fractura de antebrazo se suele producir por neumonía, ITU ). Un comentario específico me-
caídas con la mano extendida, en flexión dorsal. rece la posible aparición de hipotermia, ya que
Representa la sexta causa de fractura de las aten- es un cuadro de frecuencia superior a lo que pen-
didas en servicios de urgencias. samos, y graves complicaciones. Se define por
una temperatura corporal central (rectal) inferior
Las fracturas pélvicas tienen casi siempre un an- a 35º C. Los mecanismos de control de la
tecedente de caída. Ocasionan una mortalidad termorregulación están menoscabados en el
del 5% en el primer mes , ligada a las complica- mayor. Si unimos factores de riesgo como
ciones derivadas de la inmovilización. malnutrición, disminución del tejido adiposo, ayu-
no, hipoglucemia, etc., la permanencia del ma-
- Traumatismos craneoencefálicos: yor inmovilizado en el suelo no requiere de tem-
Son frecuentes en las caídas de los ancianos, peraturas extremas para provocar
por ineficacia de algunos de los mecanismos de- hipotermia(basta con unos grados por debajo de
fensivos frente a las caídas ( extensión de los la temperatura corporal). La clínica cursa con frial-
brazos, por ejemplo ). Por otro lado, la posibili- dad, disminución de fuerza muscular, somnolen-
dad de que ocasionen lesiones graves es mucho cia, etc. Son frecuentes las complicaciones
mayor que en jóvenes. Pueden ocasionar desde cardiovasculares ( arritmias, fundamentalmente)
conmociones cerebrales a lesiones ocupantes de e infecciosas ( neumonías ).
espacio que requieren intervención quirúrgica ( - Síndrome de Inmovilidad:
hematoma epidural, subdural agudo o crónico ).
Comentario especial merece el hematoma El inmovilismo es, a menudo, consecuencia di-
subdural subagudo o crónico, que puede apare- recta de la caída y sus consecuencias físicas.
cer ante traumatismos mínimos, y cursar con En otras ocasiones, como veremos, es provoca-
sintomatología poco específica ( Sd. confusional, do por las complicaciones psicológicas, o
deterioro cognitivo, somnolencia, etc.) y fluctuan- sociofamiliares de las caídas. Solo citaremos , a
te. El tiempo transcurrido entre la caída y la apa- modo de recordatorio, las más frecuentes : pér-
rición de la sintomatología ( 15-30 o más días ) dida de fuerza y masa muscular, contracturas ar-
dificulta el diagnóstico. Son los más frecuentes ticulares, riesgo de úlceras por presión, trombo-
en los pacientes mayores. sis venosa profunda, alteraciones respiratorias,
digestivas, etc.
- Lesiones de partes blandas:
b. Consecuencias psicológicas. Síndrome post-
Las lesiones de partes blandas ( contusiones, he- caída (Sdme de Kennedy):
ridas, desgarros musculares, etc.) aparecen
aproximadamente en la mitad de las caídas. Al Está bien documentado que prácticamente el
no requerir, generalmente, atención sanitaria ur- 25% de los mayores que han sufrido una caída
gente suelen pasar desapercibidas, minimizán- reconocen haber restringido su movilidad y te-
dose el impacto funcional que pueden tener al ner dificultades para mantener una independen-
restringir la movilidad del mayor. Las contusio- cia en el desarrollo de las actividades instrumen-
nes costales, aún sin fractura, son muy doloro- tales y ordinarias de la vida diaria. No es posible
4 GEROSAGG 2004; Vol. 2 Num.3 Caídas en el anciano
explicar este fenómeno solo por la aparición de nor medida. Por otro lado, no todos los mayores caen por
lesiones físicas. A este cambio de comportamien- los mismos motivos, por lo que la investigación etiológica
to y de actitud del mayor que ha sufrido una caí- individualizada es fundamental en la adopción de medi-
da se le denomina síndrome post-caída o sín- das preventivas eficaces.
drome de Kennedy. Entre sus características
destacan la restricción de la movilidad ( alenta- De forma operativa podemos clasificar a los factores
da, en muchas ocasiones, por la familia y profe- de riesgo en intrínsecos y extrínsecos. Los factores intrín-
sionales sanitarios ) y el miedo a volver a caer. secos hacen referencia a las circunstancias propias del
El miedo a caer provoca introversión, pérdida de individuo (envejecimiento, enfermedades concomitantes,
relaciones, cuadros depresivos y , en resumen, tratamientos farmacológicos) y los extrínsecos al entorno
declive acelerado del mayor. Son factores de ries- del mayor o la actividad que realizaba en el momento de
go para desarrollar un síndrome post-caída la la caída.
edad avanzada, el sexo femenino, las alteracio-
La suma de factores de riesgo en un mismo individuo
nes de movilidad y equilibrio, y el antecedente
aumenta linealmente el riesgo de caer.
de caídas con permanencia prolongada en el
suelo. La confianza en las propias posibilidades 1. Factores intrínsecos :
es un factor fundamental a recuperar en la reha-
bilitación del mayor que ha caído. a.Cambios producidos por el envejecimiento:

c. Consecuencias familiares y socioeconómicas El envejecimiento condiciona una serie de modi-


ficaciones en el organismo que suponen un
Las implicaciones que sobre los hábitos de vida sustrato abonado para la aparición de caídas,
de los mayores y sus familias ocasionan las caí- cuando se suman otros factores.
das son fácilmente imaginables. La pérdida de
capacidad funcional del mayor ha de ser suplida Entre las modificaciones por el paso del tiempo,
por los cuidadores familiares, que deben adop- tienen especial relevancia aquellas que afectan
tar un papel para el que , a menudo, no están a los mecanismos de control del equilibrio en
capacitados, sensibilizados o dispuestos. La es- estática y marcha, y a la capacidad de respuesta
casez de recursos sociosanitarios específicos rápida ante el desequilibrio.
para atender adecuadamente a estos pacientes,
En el mantenimiento del equilibrio intervienen nu-
y apoyar a sus cuidadores, no ayuda en la solu-
merosas estructuras (vías aferentes, de integra-
ción del problema.
ción central y eferentes). Las aferencias senso-
La familia suele reaccionar ante las caídas de riales dependen de los sistemas visual,
sus mayores con ansiedad y desarrollando una neurosensorial periférico, y vestíbulolaberíntico.
actitud sobreprotectora. Por un lado no se inves- A nivel visual, junto a la pérdida de agudeza,
tigan las causas y condicionantes de la caída, y parecen tener mayor importancia la disminución
por otro se menoscaba la confianza del mayor de la tolerancia al deslumbramiento y la dismi-
abocándole a la inmovilidad. Es comprensible nución de la capacidad de adaptación a la oscu-
que, en este contexto, las caídas de repetición ridad. La eficacia del sistema neurosensorial pe-
sean un factor predictor de institucionalización. riférico está mermada, y así es frecuente obser-
Hasta un 40% de los mayores de 70 años que var en el mayor una disminución de la sensibili-
caen serán ingresados en residencias. dad táctil, de la sensibilidad propioceptiva (sobre
todo en miembros inferiores o situaciones de
Desde el punto de vista económico las repercu- carga), de la sensibilidad vibratoria, y de la de
siones son muy importantes. Como datos orien- los mecanorreceptores cervicales. La frecuente
tativos podemos citar que el coste medio de aten- aparición de angioesclerosis de oído interno, atro-
ción hospitalaria aguda a un mayor con fractura fia de células sensoriales, etc., dificultan las
de cadera supera ampliamente el millón de pe- aferencias sensoriales vestibulares periféricas.
setas. Difícilmente cuantificable sería el costo de
la dependencia funcional inducida (rehabilitación, Los mecanismos eferentes correctores de peque-
cuidadores, residencias, etc.) pero, en todo caso, ños desequilibrios, a menudo, ven también mer-
de magnitud suficiente como para avalar la adop- mada su eficacia. La conocida pérdida de masa
ción de programas preventivos generalizados (si muscular que se produce en el envejecimiento
es que la mejora en la calidad de vida del pa- (hasta un 20-40%), y que afecta fundamental-
ciente no fuera razón suficiente). mente a las fibras musculares tipo II o de con-
tracción rápida, dificulta la realización de movi-
mientos rápidos de corrección. Asimismo el tiem-
po de reacción frente a un estímulo se encuen-
FACTORES DE RIESGO DE CAÍDAS. ETIOLOGÍA.
tran alargado. A nivel osteoarticular frecuente-
En la génesis de una caída en un mayor es habitual mente encontramos alteraciones biomecánicas
encontrar diversos factores incriminados en mayor o me- que predisponen a la aparición de caídas. Existe
GEROSAGG 2004 Vol. 2 Num. 3 Caídas en el anciano 5
tendencia a desplazar el centro de gravedad cia de presentación atípica en el mayor, ha de
como compensación del aumento de la cifosis ser descartado en caso de caídas. Asimismo los
dorsal. Las articulaciones de carga ( cadera, ro- cuadros de arritmias, con o sin pérdida de cono-
dilla, pie ) sufren modificaciones de evidente cimiento, precedidas o no de mareos o palpita-
repercusión funcional. ciones (bloqueos de alto grado, enfermedad del
seno, bradicardias por drogas como digital o
No todas las modificaciones expresadas van a betabloqueantes, etc.).
estar presentes en todos los mayores, ni en la
misma intensidad. Sí es posible identificar un La patología degenerativa articular contribuye a
grupo de ellos, hasta un 15% que presentan lo la aparición de caídas mediante mecanismos
que se denomina “ marcha senil “, fruto de las como el dolor, posturas articulares viciosas, e
modificaciones reseñadas, y fronteriza entre lo inestabilidad y modificación de las estática arti-
que consideraríamos fisiológico o patológico, y cular.
con características parkinsonianas ( actitud en
flexión, bradicinesia, pasos cortos e irregulares, Los trastornos podológicos son muy frecuentes
con problemas de inicio y cambio de sentido ). y una de las patologías ocultas descritas por
Williamson. Las causas de dolor y marcha inse-
b.Procesos patológicos: gura son numerosas (juanetes, metatarsalgias,
problemas ungueales,etc), acrecentadas por el
Son infinidad los procesos patológicos que, inci- uso de calzado inadecuado.
diendo sobre organismos envejecidos, pueden
contribuir a causar caídas. Por otro lado, no de- La patología gastrointestinal puede contribuir a
bemos olvidar que las caídas, como el resto de la aparición de caídas mediante la bajada de la
los Síndromes geriátricos, son una forma frecuen- tensión arterial (diarreas, hemorragias, síncope
te de presentación atípica de enfermedad en el vasovagal postdefecación, etc.). No es infrecuen-
mayor ( infartos, neumonías, ACVs, etc.). te la aparición del Sd. Postpandrial. Hasta 1/3 de
los mayores presentan una disminución de la
A nivel neurológico numerosos procesos, agu- Presión arterial media de 25 mmHg tras la comi-
dos o crónicos, pueden afectar al equilibrio y mar- da principal. Pueden aparecer episodios
cha. Entre los más frecuentemente incriminados sincopales, fundamentalmente en hipertensos
aparecen la enfermedad de Parkinson, acciden- que toman su medicación hipotensora antes de
tes vasculocerebrales, cuadros convulsivos, hi- la comida .
drocefalia a presión normal, etc. Especial men-
ción merecen los trastornos cognitivos agudos ( La incontinencia urinaria (urgencia en el despla-
Sds. confusionales agudos ) o crónicos estable- zamiento, dispositivos,etc.) puede predisponer a
cidos ( Demencias ). Las Demencias pueden caer.
ocasionar caídas por mecanismos diversos, como
son las alteraciones de la percepción Numerosos trastornos endocrinometabólicos apa-
visuespacial, orientación, comprensión, desco- recen referidos como factores contribuyentes en
nocimiento de las propias limitaciones, actitud de las caídas de los mayores. Entre ellos destacan
vagabundeo, etc. la deshidratación, hipoglucemia y trastornos
tiroideos.
Alteraciones psiquiátricas frecuentes en el ma-
yor, como la depresión, ansiedad, insomnio, etc. Procesos infecciosos, como la neumonía y las
aparecen frecuentemente entre las causas de caí- infecciones urinarias, a menudo se presentan en
das ( bien por ellas mismas o por los tratamien- el mayor en forma de disminución de la movili-
tos farmacológicos con los que se las pretende dad y caídas.
aliviar.) c.Fármacos:
Los problemas cardiovasculares deben ser ex- Existe una correlación directa entre el número
plorados en todo mayor que ha sufrido una caí- de fármacos que toma un mayor y la predisposi-
da. La hipotensión ortostática ( disminución de ción a caer. A partir de cuatro fármacos el riesgo
20 mmHg de la P. Sistólica y/o de 10mmHg en la se considera alto.
diastólica al pasar de decúbito a bipedastación )
aparece entre el 5 y el 25 % de los mayores que Junto a los fármacos ya citados (hipotensores,
viven en la comunidad. Es más frecuente por las diuréticos,antiarrítmicos), son los psicofármacos
mañanas. Aparece incriminada en el 3% de las los más frecuentemente encontrados como res-
caídas, casi siempre en mayores con predisposi- ponsables. Las benzodiazepinas, fundamental-
ción al ortostatismo por padecer enfermedades mente las de vida media larga, son las más
con afectación autonómica ( Diabetes, enf. de incriminadas. Los neurolépticos, principalmente
Parkinson, etc ) o toma de fármacos (hipoten- los clásicos, pueden condicionar caídas por la
sores, antidepresivos tricíclicos, vasodilatado- producción de parkinsonismo farmacológico,
res,etc). La cardiopatía isquémica, con frecuen- efectos anticolinérgicos cardiovasculares, o se-
6 GEROSAGG 2004; Vol. 2 Num.3 Caídas en el anciano
dación excesiva. Los antidepresivos tricíclicos EVALUACIÓN DEL ANCIANO QUE SUFRE CAÍDAS
pueden también presentar efectos secundarios
anticolinérgicos. En relación a lo anterior, la apa- Ante un mayor que consulta por caídas será necesario
rición de nuevas moléculas antidepresivas valorar las consecuencias de las mismas (a corto y largo
(inhibidores de la recaptación de Serotonina, plazo), e identificar los factores incriminados (intrínsecos
Venlafexina, etc.), y neurolépticos atípicos y extrínsecos) afín de poder establecer medidas preventi-
(risperidona, olanzapina, quetiapina,etc) han su- vas eficaces. Aún cuando existen factores de riesgo difícil-
puesto un significativo avance en cuanto al nivel mente modificables, sabemos que el riesgo de caída au-
de seguridad de uso en pacientes mayores. De menta linealmente con la acumulación de factores, y que la
hecho, hoy en día parece poco justificado el uso eliminación de alguno de ellos será rentable. No debemos
de neurolépticos clásicos o antidepresivos de olvidar que el 50% de los mayores que caen lo hacen de
tricíclicos en mayores. forma reiterada. Por tanto, junto a una adecuada atención a
las consecuencias agudas de la caída, la investigación y
Los antinflamatorios no esteroideos (AINEs), am- corrección de factores de riesgo es obligada.
pliamente utilizados en este segmento de pobla-
ción, pueden condicionar caídas por sangrado La evaluación del mayor que cae debe incluir los si-
digestivo, insuficiencia renal, o cuadros confu- guientes apartados :
sionales.
1.Anamnesis:
Para terminar este apartado, no podemos obviar
Nos interesa conocer las circunstancias de la caída
el papel del alcohol como factor precipitante de
(número, lugar, sintomatología acompañante, me-
caídas (implicado en el 2-13% de las caídas).
canismo de producción, tiempo de permanencia en
Aún cuando la capacidad de metabolización he-
el suelo,etc.) y sus repercusiones físicas, psicológi-
pática del alcohol se mantiene con la edad, dis-
cas, funcionales, etc. En numerosas ocasiones de-
minuye el volumen de distribución, con lo que
beremos apoyarnos en cuidadores o testigos para
ante ingestas similares los mayores alcanzan
documentar la anamnesis. Es importante conocer
niveles superiores de alcoholemia. Además la
las circunstancias previas del mayor , ya que pue-
ataxia propiciada por la intoxicación etílica se ve
den orientar la búsqueda etiológica de factores de
potenciada en casos de deterioro sensorial, o
riesgo incriminados.
propioceptivo
2.Valoración geriátrica integral:
2.Factores extrínsecos.
Las caídas representan un condicionante de fragili-
Hacen referencia a la actividad que desarrollaba dad en el mayor. El abordaje de la problemática de
el mayor en el momento de la caída, y el entorno los mayores frágiles exige una aproximación
en el que se desarrollaba la misma. multidimensional, en aras a determinar las capaci-
La mayoría de las caídas acontecen durante las dades y déficits de los mismos, y de establecer un
actividades cotidianas habituales. Sólo en un 5% plan de tratamiento y seguimiento. Esta valoración
de los casos podemos encontrar actividades poco integral incluye:
habituales (subirse a una silla, hacer deporte,etc.). - Valoración biomédica:
En cuanto al entorno del mayor, son bien conoci- Junto a la identificación de posibles consecuen-
dos los factores que con mayor frecuencia inter- cia físicas agudas de la caída, nos interesa in-
vienen. En la vivienda se citan suelos irregula- vestigar factores intrínsecos (efectos del enveje-
res, deslizantes, muy pulidos, alfombras no fijas, cimiento, enfermedades, fármacos) que hayan
iluminación pobre o deslumbrante, cables u ob- podido contribuir a la caída. Por tanto es obliga-
jetos no fijos, escaleras sin pasamanos, escalo- do evaluar la situación cardiovascular,
nes altos, cocinas con mobiliario a altura inade- neurológica, musculoesquelética, sensorial, etc.,
cuada, aseos con suelo resbaladizo, sin aside- así como la historia farmacológica del paciente,
ros, sin superficie antideslizante en ducha o ba- incluyendo posibles automedicaciones
ñera, dormitorios con camas altas y estrechas,etc. (hipnóticos, laxantes, antihistamínicos) y consu-
mo de alcohol.
Al referirnos a los espacios públicos fácilmente
entenderemos que ,a veces, parecen auténticas La exploración física se dirigirá especialmente al
trampas para favorecer caídas. La mala conser- aparato cardiovascular (despistaje de arritmias,
vación de pavimentos y aceras, los obstáculos hipotensión ortostática, cardiopatía isquémica,
en las mismas, etc., no facilitan especialmente etc.), sistema nervioso (éficits focales,
la movilidad peatonal. El transporte público no parkinsonismos, alteraciones sensitivas,etc.),
adaptado contribuye ,en numerosas ocasiones, aparato locomotor (alteraciones articulares, atro-
a caídas en mayores (escalerillas excesivamen- fias musculares, trastornos podológicos, etc.) y
te altas, escaso tiempo de subida y bajada , au- órganos de los sentidos. La valoración del esta-
sencia de asideros,etc.). do nutricional nos orientará sobre la fuerza y masa
GEROSAGG 2004 Vol. 2 Num. 3 Caídas en el anciano 7
muscular. La exploración del equilibrio y la mar- y 10 veces. Se repite con la otra pierna. La fuerza
cha la trataremos en un apartado específico. de los extensores de la cadera se explora con el
paciente en decúbito prono, pidiéndole que levante
- Valoración mental: una pierna entre 5 y 10 veces. Se repite con la otra
pierna. La prueba de los abductores se realiza con
Hemos reseñado la importancia del deterioro
el paciente de pies, apoyando suavemente sus ma-
cognitivo y los trastornos afectivos en la génesis
nos sobre el respaldo de una silla. Se la pide que
y complicaciones de las caídas. Junto a los da-
levante lateralmente la pierna, manteniéndola du-
tos obtenidos en la anamnesis, utilizaremos tests
rante 5 segundos. Si la pelvis bascula hacia el lado
o escalas de despistaje. Entre los más común-
que no apoya indica debilidad muscular importante.
mente utilizados citaremos el Miniexamen
cognoscitivo de Lobo y la Geriatric Depresión Entre los tests que informan sobre el mantenimien-
Scale de Yesavage (ver módulo de valoración to del equilibrio en estática y marcha citaremos los
geriátrica). siguientes:
- Valoración funcional: - Test de Romberg : En bipedastación, con los ojos
cerrados durante 30 segundos. Se valoran des-
Existen numerosas evidencias de que los pro- viaciones , rápidas o lentas, hacia los lados.
blemas de dependencia funcional predisponen a
la aparición de caídas. Como se ha reseñado en - Test de la estación unipodal : Consiste en man-
otros módulos del curso, y más extensamente tener el equilibrio sobre una sola pierna, con la
en el de valoración geriátrica, diferenciamos en- otra flexionada. Se estima un tiempo mínimo de
tre actividades instrumentales y básicas de la vida permanencia de 5 segundos. Tiempos inferiores
diaria. Las primeras son más complejas, y hacen orientan hacia un mayor riesgo de sufrir lesiones
referencia a la capacidad del mayor para desen- durante la caída.
volverse autónomamente en el entorno en el que
vive. La escala de actividades instrumentales - Prueba de alcance funcional: Con los pies fijos
más usada es el Índice de Lawton y Brody, que en el suelo y el brazo extendido, se mide la dis-
tancia hacia delante que el paciente puede al-
recoge entre sus ítems la capacidad para usar el
canzar sin mover los pies. Distancias inferiores
transporte, manejar dinero, cocinar, cuidar la
a 10 cm son predictoras de caídas.
casa,etc. Las actividades básicas u ordinarias de
la vida diaria hacen referencia a la capacidad de - Timed get up and go : Se la pide al paciente que
autocuidado del mayor y valoran la independen- se levante de la silla, camine 3 metros, dé la
cia en movilidad, aseo, vestido, evacuación y vuelta y se siente de nuevo. Se cronometra el
alimentación. Entre las escalas básicas más uti- tiempo empleado. Tiempos superiores a 20 se-
lizadas se encuentran el Índice de Katz, el I. de gundos aconsejan valoraciones más intensivas.
Barthel y la escala de Cruz Roja. ( Ver módulo
de Valoración Geriátrica). - Test de Tinetti de Equilibrio y Marcha: Ha demos-
trado su eficacia en la detección de mayores en
- Valoración sociofamiliar: riesgo de caer. Tiene una subescala de equilibrio
y otra de marcha. Existe también una versión
Debe incluir datos sobre la vivienda del mayor,
reducida.
cuidador habitual, y otros posibles apoyos socia-
les. La exploración de la marcha nos debe permitir co-
nocer su velocidad, características del paso ( longi-
3.Valoración del equilibrio y la marcha:
tud, frecuencia, simetría, etc.), movimientos
Primordial en la evaluación del mayor que sufre caí- acompañantes,etc. Existen patrones de marcha ca-
das de repetición. Existen numerosas pruebas o racterísticos de determinados procesos patológicos
tests, más o menos sofisticados. Citaremos algunos ( Parkinson, enf. vasculocerebral, mielopatías, etc.).
de los más simples. Se pueden realizar en cualquier
consulta de Atención Primaria, y ayudan tanto a 4.Exploraciones complementarias:
detectar factores de riesgo de caídas como a No existe un protocolo rutinario cerrado de explora-
monitorizar la evolución y eficacia de las medidas ciones complementarias a realizar. Las pruebas ven-
preventivas establecidas. Lógicamente las pruebas drán condicionadas por los hallazgos de la
se adaptarán al nivel de movilidad y funcionalidad anamnesis y la valoración efectuada. En general
del mayor. suele ser útil la realización de un hemograma
Entre las pruebas que exploran la fuerza muscular completo, glucemia, función renal, iones, perfil
en miembros inferiores reseñaremos la de los tiroideo, vit. B12, electrocardiograma, etC.
flexores plantares, extensores de la cadera y
5.Valoración del entorno:
abductores. La prueba de los flexores plantares con-
siste en colocar al paciente de pie, sobre una sola En aras a determinar posibles obstáculos ambienta-
pierna, pidiéndole que se ponga de puntillas entre 5 les y sus posibles correcciones.
8 GEROSAGG 2004; Vol. 2 Num.3 Caídas en el anciano
5.Plan de Tratamiento y seguimiento: terminante de los factores extrínsecos. La elimi-
nación de barreras arquitectónicas en la vía pú-
La realización de una valoración geriátrica exhaus- blica, y la accesibilidad en el transporte son me-
tiva no es un proceso únicamente diagnóstico. Su didas eficaces de las que no solo se beneficiarán
fin último será el de establecer un plan de tratamiento las personas mayores. Especial importancia tie-
y seguimiento a corto y medio plazo, multidisciplinar ne la realización de las modificaciones ambien-
y multidimensional. Así deben contemplarse todas tales necesarias en el propio domicilio del ma-
aquellas recomendaciones que mejoren los déficits yor.
detectados en la esfera médica ( enfermedades agu-
das o crónicas, manejo farmacológico adecuado ), 2.Prevención secundaria:
psicológica ( Sd. poscaída ), funcional ( rehabilita-
ción en actividades básicas de la vida diaria, ayu- Dirigida al mayor que ha caído en alguna ocasión.
das técnicas ) y sociofamiliar ( información a fami- Incluirá una adecuada valoración del anciano en aras
liares, telealarma, adaptaciones en el hogar,etc). a identificar los factores de riesgo incriminados, y a
establecer las medidas correctoras multidisciplinares
Es importante monitorizar la evolución del mayor consecuentes de forma precoz.
que ha caído, a fín de evaluar la eficacia de las
medidas adoptadas. 3.Prevención terciaria:

Aún cuando, por desgracia, en nuestro medio care- Su objetivo es minimizar las consecuencias funcio-
cemos de recursos geriátricos especializados, no por nales de la caída, una vez producida. Entre sus ob-
ello podemos obviar que allí donde están desarro- jetivos concretos se incluyen enseñar a levantarse
llados han demostrado su eficacia y eficiencia en la al anciano, rehabilitar su estabilidad, reeducar la mar-
valoración y manejo de Sds. Geriátricos, y en con- cha, tratar el Sd. poscaída, etc. Las medidas
creto del mayor que sufre caídas de repetición. La rehabilitadoras específicas sobrepasan el conteni-
existencia de diferentes niveles asistenciales ( Uni- do de este módulo. Quizás si sea interesante recor-
dades geriátricas de agudos, Media estancia o dar las recomendaciones para que el anciano que
Rehabilitadoras, Hospital de Día,etc) permite ubicar ha caído en alguna ocasión pudiera levantarse solo,
al paciente en el lugar adecuado a sus necesidades en caso de necesidad. Se debe explicar que intente
en cada momento. Existen Unidades de Caídas di- girar en el suelo hasta colocarse en decúbito prono,
rigidas a la valoración global del mayor que cae , y apoye las rodillas hasta la posición de gateo, de for-
al establecimiento de medidas preventivas a diver- ma que pueda buscar el apoyo de algún mueble y
sos niveles. Entre los criterios de acceso a estas trepe hasta levantarse.
unidades se encuentran las caídas de repetición, la
fragilidad con trastorno de la marcha, los pacientes 4.Grupos de riesgo:
con Sd. Poscaída, etc. Se excluyen a aquellos pa-
cientes con Síndrome de inmovilidad crónico, o con Aún cuando la valoración e identificación de facto-
deterioros cognitivos severos. res de riesgo ha de ser individualizada, sabemos
que las caídas están causadas por la suma de va-
rios factores y , por tanto, es posible identificar gru-
pos con especial riesgo de caer. En este sentido po-
PREVENCIÓN demos hablar de ancianos de bajo riesgo y de alto
El objetivo general de las medidas preventivas será el riesgo. Entre los primeros se incluyen a los total-
de minimizar el riesgo de caídas, sin que la movilidad y la mente inmovilizados y a los más jóvenes con buena
independencia funcional del mayor se vea restringida. En salud y movilidad. Entre los de riesgo alto se inclu-
el caso de que esto no sea posible, se habrán de minimi- yen a los mayores frágiles, los que presentan tras-
zar las consecuencias de las caídas. tornos de equilibrio y marcha (enf. de Parkinson,
ACVs, alteraciones sensoriales,etc.), y a los vigoro-
1.Prevención primaria: sos que viven en entornos ambientales peligrosos.
Medidas tendentes a evitar la aparición de caídas.
Irán dirigidas al conjunto de la población mayor. Se
incluyen medidas a dos niveles: BIBLIOGRAFÍA RECOMENDADA

a. Campañas de educación para la salud y promo- 1. Evaluación del Anciano con Caídas de repetición. Gru-
ción de hábitos saludables. Dirigidas a los mayo- po de trabajo de Caídas de la Sociedad Española de
res y a sus familiares y cuidadores. Los equipos Geriatría y Gerontología. Fundación Mapfre Medicina.
comunitarios de salud y servicios sociales son 1997.
los responsables de poner en marcha programas
en este sentido. 2. Evaluación del Anciano con Caídas de repetición. Gru-
po de Trabajo de caídas de la Sociedad Española de
b. Medidas de seguridad en el entorno. Hasta un Geriatría y Gerontología. Fundación Mapfre Medicina.
22% de las caídas ocurren con participación de- 2ª Edición. 2001.
GEROSAGG 2004 Vol. 2 Num. 3 Caídas en el anciano 9
3. Guillén Llera,F y cols. Sds y Cuidados en el paciente 5. Manual Merck de Geriatría. 2ª Edición. 2001.
geriátrico. Masson,1994.
6. Osteoporosis y Caídas en el anciano. Fahoemo. 1994.
4. Lázaro del Nogal, M. Coordinadora del Grupo de Tra-
bajo de Caídas de la S.E.E.G. Curso de Experto en 6. Ribera Casado, JM y cols. Geriatría en Atención Pri-
geriatría. Colegio Oficial de Médicos de Málaga. 2001 maria. 2ª Edición.
(no publicado).

ENFERMERÍA ANTE LAS CAÍDAS EN EL ANCIANO


Aragón Ramos J; Montilla Rodríguez D; Varo Ruz R.
Diplomados Universitarios en Enfermería. Residencia asistida de Montequinto.Sevilla

INTRODUCCIÓN · Derivados del entorno (ambientales) .

La OMS define la caída como la consecuencia de cual-


quier acontecimiento que precipite a la persona al suelo PREVENCIÓN
en contra de su voluntad.
La multicausalidad de las caídas conlleva que la ac-
Constituye uno de los síndromes geriátricos más im- ción preventiva acoja factores ambientales o del entorno y
portantes por su elevada incidencia y por las repercusio- aquellos propios del anciano. La valoración de enfermería
nes en la calidad de vida del anciano, estimándose que un deberá recoger ambos factores para la puesta en marcha
tercio de las personas mayores de 65 años sufren una caí- de las medidas preventivas dirigidas al anciano de riesgo.
da anual y este porcentaje asciende al 50% en los mayo- Entre las que destacamos:
res de 80 años.
- Evitar suelos resbaladizos, irregulares o mojados.
Debemos tener en cuenta la multicausalidad de la caí-
da para adoptar medidas de prevención sobre los indivi- - Buena iluminación en todas las estancias donde cir-
duos de riesgo elevado, llegándose a reducir hasta un 40% culan los ancianos.
la incidencia de la misma.
- Entorno sin obstáculos y ordenado (evitar cables
La mayoría de las caídas no producen lesiones o inca- sueltos, alfombras,mantener la misma distribu-
pacidad. ción,…)

Cuando se produce una caída en el anciano pueden - Uso de dispositivos de seguridad:


aparecer consecuencias físicas (la más importante fractu- - Inmovilizadores: como sujeciones de seguridad
ra de cadera), psicológicas (síndrome post-caída), y so- en ancianos (cinturón abdominal, chaleco de su-
ciales (aislamiento y dependencia para las AVD). jeción y sábanas de fijación). Dichos mecanis-
mos serán usados siempre en situaciones muy
concretas y con el consenso de todo el equipo,
INDICADORES DE ALARMA. RIESGO ELEVADO para evitar así, el mal uso y/o abuso de las mis-
mas (síndrome de inmovilidad, contención)
Dentro de la población anciana debemos hacer espe-
cial hincapié en aquellos factores de riesgo que van a fa- - Barandillas laterales en cama o bajar la cama al
vorecer la aparición de la caída, considerados como sig- máximo posible (en los “Hospice” los colchones
nos de alarma en la valoración de enfermería. a veces son colocados directamente sobre el
suelo para evitar al riesgo de caídas).
Los principales desencadenantes son:
- Colocar asideros de manos en baños y barandi-
· Debilidad muscular. llas en escaleras y pasillos.
· Déficit de la marcha y equilibrio. - Uso de medidas de apoyo: andadores, bastones,
muletas para tener mayor base de sustentación.
· Deterioro cognitivo (confusión mental).
- Informar sobre prácticas seguras y percepción del
· Polimedicación.
riesgo:
· Disminución de la visión.
- Ayudar al anciano a reconocer los peligros como
· Patologías crónicas (osteoporosis), agudas no subir a una silla,.
(hipoglucemia, hipotensión ortostática...).
- Adecuar el entorno para aquellos que pueden
· Antecedentes de caídas. acceder al water durante la noche solos: luz ade-
10 GEROSAGG 2004; Vol. 2 Num.3 Caídas en el anciano
cuada, baño cercano,.. e incluso el uso de bote- mos ante la sospecha de una posible fractura de
lla o de cuña encima de una silla al lado de la cadera, si la persona no puede caminar, presenta
cama. intenso dolor inguinal al mover el miembro inferior
afectado y éste toma una posición de acortamiento
- Enseñar y reforzar la información sobre el uso y rotación externa, deberá ser valorada por un mé-
del timbre de llamadas. dico y trasladado a un centro asistencial para verifi-
- Si se utilizan sillas de ruedas, hay que dejarlas car el diagnóstico con una radiografía u otro método
frenadas al detenerse. que el traumatólogo estime conveniente.

- Dejar al alcance de la mano todo lo que el resi- - Realizar tratamiento de cura y observación según
dente pueda necesitar, especialmente el tipo de lesión producida.
encamado: pañuelos, agua, timbre...

- Durante la realización de la higiene, traslado o CONSECUENCIAS DE LAS CAÍDAS


movilizaciones, no dejar nunca sólo al residente
Cuando se produce una caída van a aparecer unas
con riesgo.
consecuencias en el anciano, no sólo físicas sino también
- Uso de ropa cómoda, holgada y con el largo ade- a nivel psicológico y social.
cuado. Calzado apropiado con tacón bajo, suela
A nivel físico las consecuencias van a ser desde sim-
antideslizante y que recoja el talón.
ples lesiones de tejidos blandos como contusiones,
- Mantener un buen nivel de forma física, mediante hematomas hasta las más graves como son las fracturas,
ejercicio regular como la gimnasia de mantenimien- entre las más comunes, las de Colles y las fracturas de
to y la realización de paseos controlados para forta- cadera.
lecer los músculos. Está demostrado que se redu-
cen las caídas entre un 14% y un 27% En un estudio realizado en nuestra residencia se mani-
festó que un 73% de los ancianos no presentaron lesiones
- Cuidados podológicos. aparentes tras las caídas, un 25% presentaron lesiones de
tejidos blandos y un 2% presentó fracturas de cadera y
- Control del resto de las patologías.
húmero. También se pudo apreciar que un 23% de los an-
cianos que se cayeron caminaban solos sin ayuda, un 14%
utilizaba andador como dispositivo auxiliar y un 63% su-
ACTUACIÓN FRENTE UNA CAÍDA frían caídas desde la silla de ruedas o cama.
Si tras la aplicación de las medidas de prevención se Respecto a las fracturas hay que tener en cuenta que
produce una caída, la actuación debe ser lo más rápida va a ser un factor de mortalidad importante, al igual que
posible y disminuir el tiempo de espera del anciano en el va a ser causa de incapacidad física, ya que un alto por-
suelo, para disminuir el riesgo de morbimortalidad. Las centaje de enfermos que sufren una fractura no van a re-
medidas de actuación son las siguientes: cuperar el nivel funcional que tenían antes. La fractura de
cadera a su vez puede provocar consecuencias indirectas
- Valoración del estado del anciano y posibles lesio-
nes. sobre el anciano derivadas de la inmovilidad: aparición de
úlceras por presión, aumento de riesgo de presentar
- Avisar al médico o al servicio de urgencia si es pre- tromboembolismo pulmonar, deshidratación, alteración del
ciso. patrón miccional etc; consecuencias que podrían implicar
la calidad de vida del anciano.
- No movilizar o incorporar al anciano si se sospecha
que puede presentar una fractura; o en todo caso Los planes de cuidados de enfermería específicos y
realizar una movilización correcta, utilizando una protocolizados permiten que los ancianos afronten el pro-
sábana fuerte a manera de camilla y realizándola al blema en las mejores condiciones físicas y psíquicas posi-
menos entre dos personas, manteniendo las pier- bles.
nas del paciente juntas, para tratar de evitar así,
más daño y más dolor. Es muy aconsejable el colo- A nivel psíquico y social. La principal consecuencia a
car debajo del anciano una tabla de cama, desde la nivel psicológico es el síndrome post-caída. Esto va a pro-
espalda hasta mas allá de sus pies, envolviendo a vocar una disminución de la movilidad y pérdida de la ca-
ambos con una sábana, impidiendo con esto la pacidad para realizar las actividades básicas de la vida
flexión de piernas y evitar más daño como ocasio- diaria, primero por el dolor de las contusiones que actúa
nar una ruptura de arteria o vena con los bordes del como elemento limitante de la movilidad y posteriormente
hueso fracturado, provocando una inmediata pérdi- por la ansiedad y miedo a presentar una nueva caída. Tam-
da de sangre o rasgado de tejidos cercanos, convir- bién generan pérdida de confianza en sí mismo y aisla-
tiendo una fractura cerrada en una abierta. Estare- miento social.
GEROSAGG 2004 Vol. 2 Num. 3 Caídas en el anciano 11
DIAGNÓSTICOS DE ENFERMERÍA RELACIONADOS TABLA II
CON LAS CAÍDAS. Deterioro de la movilidad física r/c disminución de la
fuerza, presencia de dolor, miedo a una nueva caída m/p
Cuidados enfermeros (Tabla I): dificultad para cambiar de posición en la cama, cambios en
la marcha.
- Reconocer la presencia de dolor.
La NIC establece como inter- La NOC establece como resul-
- Manipular con suavidad la extremidad afectada, apo- venciones para este diagnós- tados para este diagnóstico las
yándola con almohadas, tico las siguientes: siguientes:
- Administrar analgesia prescrita, colocar al paciente (1800) Ayuda en los autocui- (0206) Movimiento articular
en posiciones cómodas y funcionales. La alineación dados. activo.
corporal correcta aumenta la comodidad del ancia- (0200) Fomento del ejercicio. (0208) Nivel de movilidad.
no. (5612) Enseñanza: activi- (0300) Cuidados personales:
dad/ejercicio prescri- AVD.
- Ayudar en los cambios frecuentes de posición que to. (2102) Nivel del dolor.
alivian la presión y molestias afines. (0226) Terapia de ejercicios: (0200) Deambulación: cami-
control muscular. nata.
TABLA I (0221) Terapia de ejercicios:
deambulación.
Dolor r/c la fractura m/p una comunicación verbal de
(0222) Terapia de ejercicios:
disconfort equilibrio.
La NIC establece como inter- La NOC establece como resul- (6490) Prevención de cai-
venciones para este diagnós- tados para este diagnóstico las das.
tico las siguientes: siguientes:
Criterios de resultados: lograr una cadera funcional y estable.
(6482) Actuación ambiental: (1605) Control del dolor.
comodidad. (2100) Nivel de comodidad. - Enseñar al paciente el uso correcto del andador con
(1400) Actuación ante el do- (1402) Control de la ansie- apoyo de ambas piernas o sin apoyar la extremidad
lor. dad.
intervenida según la fractura.
(2210) Administración de (1300) Aceptación: estado
analgésicos. de salud. - Explicar que la deambulación exige un calzado que
(5820) Disminución de la se ajuste al pie, de suela antideslizante y cómodo.
ansiedad.
- Permanecer junto al paciente cuando se levante de
Criterios de resultados: aliviar el dolor. la cama y deambule hasta que sea capaz de hacer-
lo sin ayuda.
Cuidados enfermeros (Tabla II):
TABLA III
- Instruir al anciano y ayudarlo en los cambios de po- Riesgo de traumatismo r/c falta de educación para la
sición y actividades de transferencia. seguridad, déficit fisiológico o de percepción.
- Enseñar al paciente a practicar ejercicios isométricos La NIC establece como inter- La NOC establece como resul-
del cuadriceps y glúteos, y de flexión y extensión de venciones para este diagnós- tados para este diagnóstico las
las extremidades no afectadas, fortaleciendo así los tico las siguientes: siguientes:
músculos necesarios para la marcha. (6940) Prevención de caí- (1911) Control de seguridad:
das. personal.
- Iniciar la deambulación con paseos cortos y frecuen- (6580) Sujeción física. (1909) Control de seguridad:
tes, e ir aumentando progresivamente la distancia (6654) Vigilancia: seguridad. prevención de caídas.
según la tolerancia del paciente a la actividad. (1902) Control de riesgo.
(1908) Detección del riesgo.
- Instruir sobre el uso seguro de los dispositivos auxi- (1912) Estado de seguridad:
liares de la marcha y supervisarlos. caídas.
(1913) Estado de seguridad:
Cuidados enfermeros (Tabla III): lesión física.
Criterios de resultados: no sufrir caídas accidentales ni
- Colocar barandillas en la cama si el paciente está lesiones que puedan evitarse con cuidados de prevención.
confuso o desorientado, (siempre que no intente sal-
tar por encima). Valorar la indicación de utilizar sis- Cuidados enfermeros (Tabla IV):
temas de seguridad: sábanas de fijación, cinturones
abdominales etc... - Valorar la piel del paciente y anotar si existen áreas
de enrojecimiento.
- Mantener la rodilla en extensión cuando el paciente
- Fomentar el máximo grado de movilidad para evitar
esté en cama y flexionada a 90º cuando se encuen-
periodos prolongados de presión, enseñando ejerci-
tre sentado.
cios que pueda realizar en la cama o en la silla.
12 GEROSAGG 2004; Vol. 2 Num.3 Caídas en el anciano
- Realizar cambios posturales de forma periódica (mí- TABLA V
nimo cada 2 horas, e incluso menos si la piel del Déficit de autocuidado: aseo-higiene, baño, vestido y uso
paciente no tolera ese intervalo de tiempo). del water r/c con la inmovilidad m/p incapacidad para
realizar estas actividades.
- Mantener la ropa de la cama seca y sin arrugas.
La NIC establece como inter- La NOC establece como resul-
- Mantener al paciente limpio y seco, con una adecua- venciones para este diagnós- tados para este diagnóstico las
tico las siguientes: siguientes:
da hidratación de la piel.
(1801) Ayuda en los autocui- (0300) Cuidados personales
- Proporcionar colchones especiales, almohadillas, pro- dados: baño/higiene. AVD.
tectores de espuma según sean necesarios. (1804) Ayuda en los autocui- (0301) Cuidados personales
dados: aseo. AVD: baño.
- Colocar protección de talones hasta que el paciente (1802) Ayuda en los autocui- (0305) Cuidados personales
movilice por sí sólo las extremidades inferiores, re- dados: vestido/arre- AVD: higiene.
visando el estado de la piel diariamente. glo personal. (0310) Cuidados personales
(0450) Actuación ante el es- AVD: uso del inodoro.
- Realizar una valoración del estado nutricional y eva- treñimiento. (0304) Cuidados personales
luar el aporte de nutrientes oportuno. (0590) Actuación ante la AVD: peinado.
evacuación de la ve- (0302) Cuidados personales
- Aportar ingesta de líquidos suficientes para una co- jiga. AVD: vestir.
rrecta hidratación (2 litros como mínimo si no existe
contraindicación). Criterios de resultados: el paciente realizará el mayor número
de tareas de autocuidado de una forma independiente, el
- Identificar al paciente de riesgo. mayor tiempo posible.

Cuidados enfermeros (Tabla VI):


TABLA IV
Riesgo de deterioro de la integridad cutánea r/c la inmovi- - Proporcionar al paciente oportunidades para que ex-
lidad física. prese sus dudas y temores.
La NIC establece como inter- La NOC establece como resul- - Explicar el proceso de recuperación post-operatoria
venciones para este diagnós- tados para este diagnóstico las y las posibilidades de alcanzar nuevamente el nivel
tico las siguientes: siguientes: de autonomía para realizar las AVD, previo a la frac-
(0840) Cambios de posición. (1902) Control de riesgo. tura.
(3500) Control de presiones. (1101) Integridad tisular: piel
(3584) Cuidados de la piel: y membranas muco- - Reforzar las conductas del paciente que demues-
tratamiento tópico. sas. tren voluntad de superar la situación y vencer el
(0940) Cuidados de tracción/ (1908) Detección del riesgo. miedo, para que progresivamente aumente la con-
inmovilización. fianza en sus capacidades.
(3540) Prevención de la
UPP.
(3590) Vigilancia de la piel.
TABLA VI
(1100) Control de la nutri-
Temor r/c miedo a una nueva caída m/p inseguridad en la
ción.
deambulación.
Criterios de resultados: el paciente mantendrá su integridad
cutánea. La NIC establece como inter- La NOC establece como resul-
venciones para este diagnós- tados para este diagnóstico las
tico las siguientes: siguientes:
Cuidados enfermeros (Tabla V):
(5240) Asesoramiento. (1404) Control del miedo
- Evaluar la capacidad del paciente para realizar las (6480) Control del medio
actividades de autocuidado. ambiente.
(5380) Potenciación de la se-
- Consensuar su nivel de participación a fin de no so- guridad.
licitar de él mayor participación de la que es capaz.
Criterios de resultados: el paciente demostrará seguridad en la
- Crear las condiciones de intimidad y temperatura ade- deambulación.
cuadas para la realización de las actividades de
autocuidados.

- Colocar el timbre de llamada en un lugar accesible.


CONCLUSIONES
- Proporcionar los útiles para la alimentación, aseo
personal y la ayuda necesaria para lavarse y vestir- La prevención de las caídas debe ser una prioridad en
se. la atención del paciente anciano, por sus graves conse-
cuencias que merman su calidad de vida haciéndolo más
- Facilitar
GERO SAGG 2004botella de micción.
Vol. 2 Num. 3 Caídas en el anciano 13
dependiente de los demás para realizar las actividades co- 3. Fractura de fémur, Revista de Enfermería Rol nº 225 -
tidianas más elementales. 1997

El personal sanitario y familiares deben estar 4. Protocolo de caídas, www. geriátricos.org


concienciados de que un elevado porcentaje de caídas son
evitables, debiéndose controlar la multicausalidad que 5. Kenneth, K; Steinweg,M.D.: Caídas en las personas
puede provocarla y desarrollar acciones de prevención ante mayors. Am Fam Physician 1998, 5 206-215
los indicadores de alarma. 6. Vellas, B; Lafont, C.: Transtornos de la postura y ries-
gos de caída. Ed Glosa, Barcelona 1996

7. Residencias para personas mayores, manual de orien-


BIBLIOGRAFÍA
tación, S.E.G.G. Barcelona 1995
1. Enfermería Médico-Quirúrgica L.S. Brunner – D.S.
8. Atención integral al enfermo de Alzheimer, Ed. Consul-
Suddarth, Interamericana
ting Dovall 1998
2. Geriatría en atención primaria, Edit. Médica Jims S.L.
9. Memoria de la Unidad de Servicios Sanitarios 1998,
1999 Residencia Asistida de Mayores -Montequinto, Sevilla.

LA FISIOTERAPIA EN LA PREVENCIÓN Y TRATAMIENTO


DE LA FRACTURA DE CADERA DEL ANCIANO
Ildefonso J. Collado Barranco IJ*, Navarro Moreno C**, Rivera Gorjón J.***
* Fisioterapéuta, ** Médico, *** DUE. Residencia de mayores. Junta de Andalucía. Algeciras (Cádiz)

FISIOTERAPIA EN LA PREVENCIÓN una evaluación del individuo realizando un análisis


minucioso de la marcha.
El abordaje preventivo de la caída en el anciano debe
constituir un elemento fundamental con el objetivo de dis-
minuir la elevada frecuencia de fractura de cadera, así
como sus complicaciones. También es obligado indicar que EXPLORACIÓN DE LA MARCHA
en personas ancianas la relación entre traumatismo y frac- Esta deberá incluir la exploración general, articular y
tura habitual no está totalmente clara. En las personas de neurológica. Además es conveniente realizar una valora-
edad avanzada se pueden mezclar diversos factores, como ción funcional para documentar la repercusión del trastor-
osteoporosis, anomalías dietéticas, consumo de alcohol y no.
tabaco, agentes farmacológicos, alteraciones neurológicas
o vasculares cerebrales y déficit sensitivos o motores. De Sintomatología:
hecho la suma de todos estos factores es la responsable
de la importante incidencia de fracturas en este grupo de Los síntomas referidos por los pacientes pueden ser,
edad. de forma aislada o combinada, algunos de los siguientes:
debilidad de las piernas cansancio fácil o fatigabilidad al
El primer paso en la prevención es identificar a los an- caminar, sensación de inestabilidad, desviación a un lado
cianos con riesgo de sufrir caídas. Estos ancianos serán al caminar, tendencia a tropezar, caídas, lentitud, rigidez,
aquellos que presentan los siguientes factores de riesgo: pérdida de sensibilidad o sensaciones anómalas en las
extremidades inferiores (pesadez, adormecimiento), calam-
- Caídas previas, sin consecuencias físicas, pueden bres, dolor, dificultad para levantarse de la silla o para su-
provocar la aparición del síndrome de postcaida. El bir o bajar escaleras.
miedo trae consigo una disminución de la movilidad
y favorece el sedentarismo en sofá o cama con el Aclarar el tipo de manifestación cuando el paciente
consiguiente deterioro funcional. expresa las alteraciones como mareo, no notar las piernas
o fallos en las mismas.
- Aparición de enfermedad aguda o traumatismo, la
reducción de la actividad y la inmovilización que Exploración neurológica
provoca, es una circunstancia para la
descompensación funcional y aumento del riesgo Con objeto de obtener información del sistema motor:
de caídas. masa muscular, movilidad, fuerza, tono muscular, reflejos
osteotendinosos y superficiales; de la sensibilidad: super-
- Alteraciones de la marcha y equilibrio. El ficial y profunda; y de la coordinación: pruebas cerebelosas
fisioterapeuta que debe contribuir al mantenimiento y del estado mental. En esta fase deberán identificarse las
de una persona en el limite de la dependencia y para parálisis amiotróficas, alteraciones de los reflejos y del tono
ello deberá conocer el estado del anciano mediante muscular, los movimientos involuntarios, la pérdida de
14 GEROSAGG 2004; Vol. 2 Num.3 Caídas en el anciano
sensibilidad propioceptiva, la ataxia cerebelosa y otros El fisioterapeuta con ayuda de la exploración, los tests
datos necesarios para la interpretación del cuadro clínico. funcionales y la información del resto de profesionales
sanitarios establece un programa de actuación para iden-
Es fundamental realizar una exploración específica del tificar y tratar precozmente los trastornos funcionales y cir-
equilibrio y la marcha. Para ello se solicita al paciente que cunstancias que pueden desembocar en una caída.
camine libremente, de forma natural, a lo largo de un tra-
yecto predeterminado. Es aconsejable disponer de un es- Los programas de ejercicios deberán adaptarse a las
pacio apropiado con longitud, iluminación y característi- capacidades aeróbicas, musculares y articulares del an-
cas del suelo idóneas para poder apreciar claramente los ciano, con una intensidad que no debe superar el 70-80%
hechos más importantes. Una sala o pasillo libre de obstá- de la frecuencia cardiaca máxima. Estos programas de
culos, de 5 a 10 metros de longitud, bien iluminado y con ejercicios pueden prevenir las caídas y las lesiones deri-
suelo liso no resbaladizo puede ser suficiente. Se le pedi- vadas de estas, fortaleciendo los músculos, aumentando
rá al paciente que ejecute el trayecto, varias veces si es la resistencia, mejorando la postura, movilidad articular y
necesario, mientras se aprecian datos fundamentales, competencia cardiovascular y mejorando el estado de alerta
como el ritmo, la velocidad, longitud y simetría del paso, del anciano. No obstante el ejercicio aeróbico y ejercicios
elevación del talón, amplitud de la base de sustentación, de baja intensidad, tal como caminar, pueden ser insufi-
características del giro, el braceo, la postura del tronco y cientes sobre la fuerza muscular, equilibrio y otros facto-
la presencia de fenómenos patológicos, como espasticidad, res de riesgo de caídas. Por ello ciertas alteraciones de-
rigidez, taloneo, ataxia, movimientos anormales, inicio de ben ser tratadas con técnicas especificas de fortalecimiento
la marcha. muscular, reeducación motriz como ejercicios de
propiocepción y coordinación, ejercicios para la habitua-
Exploración dinámica ción a problemas vestibulares y entrenamiento especifico
de la marcha a distintas velocidades, en zigzag, cambios
Se completa con un examen de equilibrio y movilidad,
de dirección, modificación de la frecuencia y longitud del
que comprende exámenes en relación con la sedestación,
paso, marcha en escaleras y terrenos ascendentes y
bipedestación, la locomoción y el decúbito.
descendentes.
Se observará la acción de sentarse, la posición senta-
Es fundamental realizar un programa adaptado a
da y la capacidad para levantarse.
cada individuo, para optimizar los resultados y disminuir
En bipedestación se explorará la capacidad de mante- los riesgos derivados del ejercicio. Estas actividades per-
nerse de forma natural y en situaciones forzadas (dismi- miten:
nución de la base de sustentación, test de Romberg, test
- Retrasar el proceso de involución debido al enveje-
del empujón).
cimiento
A continuación se procederá a la exploración de la lo-
- Mantener y desarrollar las capacidades físicas y por
comoción. El sujeto iniciará la marcha a lo largo de un
tanto, disminuir la posibilidad de caída.
trayecto predeterminado. Se analizará la velocidad, ca-
dencia, simetría y amplitud de los pasos, permanencia del - Conservar y mejorar las capacidades funcionales
doble apoyo, postura del tronco y extremidades, equilibrio introduciendo ejercicios que faciliten las actividades
dinámico y braceo. de la vida diaria.
La exploración de los giros aportará información adi- Son también destacables, como intervenciones preven-
cional acerca del mantenimiento del equilibrio, la movili- tivas para facilitar la marcha, así como para disminuir el
dad axial y la continuidad del movimiento. riesgo de caídas y sus consecuencias, la reducción de los
Por último explorar la capacidad del paciente para ad- fármacos administrados, especialmente los psicotropos y
quirir los diferentes decúbito. las modificaciones del entorno dirigido a eliminar obstácu-
los o riesgos (Ej: Mala iluminación, defectos del pavimen-
En los últimos años ha aparecido una tendencia a de- to, calzado inadecuado, superficies resbaladizas). También
sarrollar perfiles de actividad de la movilidad general, in- las mejoras funcionales estructurales: barras para agarrar-
cluso tareas instrumentales de la vida diaria, algunas de se, suelo antideslizante, diseño adecuado del mobiliario.
estas son: Todas estas mejoras facilitan la movilidad, disminuyen la
dependencia y previenen las caídas.
- Test Get Up and Go.

- Test Get Up and Go cronometrado.


HOSPITALIZACIÓN
- Functional reach test.
Una vez producida la fractura, la hospitalización cons-
- Escala de equilibrio y movilidad de Tinetti. tituye un peligro importante en la aparición fácil y rápida
de consecuencias graves, en el plano social, funcional e
- Escala de equilibrio de Berg.
incluso vital. Es una labor que requiere la participación de
- Indice de ambulación de Hauser. un equipo multidisciplinar.
GEROSAGG 2004 Vol. 2 Num. 3 Caídas en el anciano 15
En primer lugar expondremos las medidas físicas a te- No debemos olvidar la importancia no solo de la aten-
ner en cuenta ante un enfermo encamado de edad avan- ción a la articulación intervenida, sino también la impor-
zada: tancia del trabajo de la musculatura del tronco y de las
cinturas escapular y pélvica y de la motricidad del raquis
- Fisioterapia respiratoria: Cuyo fin es conservar las cervical que desempeña un papel de iniciador a los movi-
vías respiratorias libres y mantener las capacidades
mientos del anciano encamado.
respiratorias, favorece igualmente el retorno veno-
so, desempeñando un papel de bomba vascular, y En cuanto a la cadera operada, en el postoperatorio
el tránsito intestinal por movilización abdominal. inmediato se realizará un trabajo muscular periarticular
precoz con objeto de mejorar la vasomotricidad y la
- Postura adecuada: Colocación de las articulaciones
en posición anatómica evitando la rigidez en posi- troficidad consistente en:
ción viciosa. El empleo de un arco para evitar el pie - Isométricos de cuadriceps, glúteos y tríceps sural.
equino, inducido por el peso de las mantas, debe
ser sistemático. - Ejercicios de irradiación de energía mediante con-
tracciones sinérgicas del miembro contralateral.
- Cinesiterapia pasiva y activa suave y completa de
las articulaciones, respetando las etapas de actua- − Asociación de abduccción y rotación interna con
ción sobre la cadera afecta, tiene efectos tróficos, extensión que favorecerá la contracción de los
sensitivomotores y vasculares. flexores internos contralaterales (psoas, sartorio,
pectineo y adductor medio y menor).
- Masoterapia: Mejora el trofismo cutáneo y muscu-
lar, provoca una estimulación sensorial y ayuda al − Combinación de adducción y rotación externa con
mantenimiento del esquema corporal destacando la extensión lo que provocará la contracción de
también su efecto relacional. los flexores externos contralaterales (Tensor de
- Mantenimiento de sus AVD en la medida de lo posi- la fascia lata y glúteo medio).
ble:
− Solicitación de addución y rotación externa con
- Aseo, aunque solo sea lavarse la cara y pei- flexión que contrae el glúteo medio, mayor y
narse. menor, fundamental a la estabilización lateral de
la cadera en carga.
- Alimentación.
− Asociación de abducción y rotación interna con
- Moverse en la cama. flexión que provoca la contracción de la porción
interna del glúteo mayor, pelvitrocantereos y el
adductor mayor.
REEDUCACIÓN POSTOPERATORIA
Gracias a la sinergia de imitación la contracción de
Los fisioterapeutas somos conscientes de que la abductores y adductores se consigue mediante la contrac-
fisioterapia postoperatoria es desechada por gran número ción contra resistencia de la musculatura contralateral. Esto
de cirujanos, pero a nuestros departamentos llegan pa- también ocurre para los pelvitrocantereos.
cientes que, por distintas razones necesitan ayuda para la
reintegración, desgraciadamente no el número de pacien- En el fortalecimiento de la musculatura glútea, espe-
tes que se deberían beneficiar. De hecho son muchos los cialmente el glúteo medio se recomienda la realización de
ancianos que realizan vida cama-sillón después de una contracciones musculares de hasta 6 segundos con objeto
fractura de cadera y sin haber recibido ningún tipo de tra- de trabajar específicamente el papel de esta musculatura
tamiento de fisioterapia. De ahí la importancia de en el equilibrio lateral de la pelvis de gran importancia en
protocolizar un tratamiento precoz y adecuado al anciano la futura bipedestación y marcha.
que repercuta en un mejor pronóstico funcional.
- Cinesiterapia precoz para conservar la elasticidad
La reeducación tras la intervención quirúrgica debe rea- capsulo-ligamentosa y la vasomotricidad periarticular
lizarse con gran prudencia, ya que se trata de personas de los miembros inferiores.
mayores a la vez que, mecánicamente, nos encontramos
ante un gran brazo de palanca constituido por el miembro - Ejercicios de anteversión-retroversión pélvica que
inferior en su totalidad. permiten la movilidad de la cadera en flexo-exten-
sión. A su vez la contracción alternativa de los cua-
Cualquiera que sea el método de osteosintesis escogi- drados lumbares permite la realización de abduc-
do, lo más importante en el postoperatorio será la movili- ción y adducción sin riesgos.
zación inmediata del paciente recomendando la posición
de decúbito supino con cojín triangular entre las piernas Además de la actuación especifica sobre la cadera in-
para que estas permanezcan separadas. A su vez es acon- tervenida el tratamiento de fisioterapia irá encaminado a
sejable 2 veces al día permanecer acostado completa- la reeducación motora del anciano y dependerá del estado
mente a fin de evitar el flexo de cadera por retracción de la funcional del mismo. Esta reeducación irá progresando a
musculatura flexora de la misma. lo largo de los siguientes pasos:
16 GEROSAGG 2004; Vol. 2 Num.3 Caídas en el anciano
1. Adquisición de la capacidad para elevar la pelvis. del miembro inferior oscilante. Descomposición de
los diferentes pasos contra-resistencia.
2. Aprendizaje de los giros: Iniciados por la pelvis o
por la cintura escapular. Utilización de poleoterapia para el trabajo de las ca-
deras en las cuatro cadenas cinéticas funcionales
3. Reeducación del equilibrio en sedestación. agonistas-antagonistas.
4. Paso del decúbito a la sedestación previa adopción 4. La rotación cruzada de las cinturas: La inmoviliza-
del decúbito lateral. ción más o menos prolongada consecutiva a una
5. Bipedestación y marcha sin carga. En este periodo intervención quirúrgica de la cadera puede inducir a
se continuará con la tonificación y búsqueda de los una pérdida del giro cruzado de las cinturas pelviana
arcos articulares de movilidad completa. y escapular, provocando una marcha donde el tron-
co se desplaza en bloque en torno al miembro infe-
El apoyo de la extremidad solo podrá ser autorizado rior portante. La reeducación se realiza con el pa-
por el cirujano tratante y dependerá de las condiciones del ciente en decúbito lateral contralateral y más tarde
paciente, del tipo de fractura, de los hallazgos quirúrgicos, del lado homolateral a la intervención, instruyendo
del material de osteosintesis empleado, de la estabiliza- al paciente para realizar un movimiento hacia de-
ción lograda y del estado de consolidación. lante con la cintura escapular, siendo este resistido
y un movimiento a la vez, de la cintura pelviana
En el inicio del apoyo y progresión en el incremento de hacia atrás, provocando una disociación de las dos
la carga la balneoterapia constituye un medio excelente cinturas. Posteriormente se invierte el sentido del
de realizarla cómodamente y de una forma segura para el movimiento efectuado.
anciano.
A continuación en carga, se le pedirá que realice
movimientos exagerados con una cintura escapular
BIPEDESTACIÓN a la marcha a la vez que el fisioterapeuta resiste
alternativamente la cintura pelviana por apoyo de
Las dificultades del anciano a la bipedestación son de- sus manos sobre ambas EIAS. (espina ilíaca
bidas a un desequilibrio posterior. La patogenia es debida anterosuperior).
por una parte a la desorganización del esquema motor y
por otra, a un componente psicológico, con miedo al vacío Reeducación del paso de la bipedestación-sedes-
anterior. La corrección del desequilibrio posterior se logra tación-bipedestación.
mediante un apoyo anterior, por ejemplo, apoyado sobre
Esta acción requiere un acondicionamiento muscu-
la pared o sobre el fisioterapeuta, que permite al sujeto
adoptar una posición de desequilibrio anterior, o también lar adecuado, especialmente glúteos y cuadriceps,
mediante un desplazamiento posterior inducido por el así como un funcionamiento correcto de los reflejos
fisioterapeuta y contrariado mediante un agarre anterior de enderezamiento.
del sujeto, por ejemplo, una barandilla.

Una vez conseguida la bipedestación se realizará un MARCHA


programa de ejercicios en apoyo bipodal y más tarde en
apoyo monopodal, este caso si el estado del paciente lo La deambulación precoz, cuando el estado de la cade-
permite, realizándose de la siguiente forma: ra lo permita, se iniciará en paralelas y se pasará a conti-
nuación a los bastones o al andador según la estabilidad y
1. Trabajo cinético contra resistencia de la pelvis por
seguridad del anciano. Sin embargo, el criterio en la utili-
colocación fija del pie en el suelo:
zación de estas ayudas debe ser riguroso en la medida
- Avance y retroceso de la pelvis contra-resisten- que la prolongación excesiva en las paralelas o el andador
cia manual aplicada respectivamente a nivel de puede desembocar en una dependencia y llevar a un es-
la espina ilíaca anterosuperior y la parte inferior tancamiento en la evolución en el proceso de restauración
de los glúteos. de la marcha presente antes de la caída.

- Desplazamiento lateral contra-resistencia aplica- Se iniciará en terreno llano y a continuación se introdu-


da a nivel de la cresta iliaca. cirán obstáculos propios de la vida cotidiana, subida y ba-
jada de escaleras e incluso deambulación por terreno irre-
- Avance y retroceso de la hemipelvis contra-re- gular si el estado del paciente y su capacidad funcional lo
sistencia aplicada a nivel de la espina ilíaca permiten.
anterosuperior y la parte inferior del glúteo de
forma alternante.

2. Estabilización rítmica de los músculos que actúan OTRAS MEDIDAS FISIOTERÁPICAS


sobre la articulación coxofemoral.
Técnicas encaminadas a luchar contra los trastornos
3. Estabilización dinámica de la cadera operada en circulatorios generados o agravados por la intervención
carga, demandando movimientos contraresistencia quirúrgica y el encamamiento:

GEROSAGG 2004 Vol. 2 Num. 3 Caídas en el anciano 17


- Masaje depletivo silla y de ahí comienza su trabajo, habiéndose perdido un
tiempo que no ha hecho posible la principal premisa en el
- Masaje de drenaje linfático campo de la recuperación funcional, que no es otra que la
- Ejercicios respiratorios con objeto de facilitar el re- precocidad, siempre y cuando no existan contraindicacio-
torno venoso. nes al tratamiento fisioterápico.

Cinesiterapia sobre la cicatriz con objeto de evitar Por otro lado las características del anciano hacen que
adherencias y estímulos nociceptivos procedentes de la su potencial de mejora sea menor y más lento que en per-
vía de abordaje en la intervención. sonas jóvenes. Esto último debe ser tenido en cuenta en
los centros hospitalarios donde la masificación reduce los
Técnicas de inhibición de la musculatura espasmada tiempos de tratamiento considerando que se ha estancado
que interviene en las acciones de la articulación de la ca- la evolución del paciente. Cuando en nuestro centro ob-
dera. Por ejemplo, el espasmo del psoas, con objeto de servamos como ancianos recuperan la marcha después
mantener la cadera en un rango no doloroso de movimien- de 6 meses hasta un año después de haberse producido la
to, puede provocar un desequilibrio pélvico y lumbar con fractura. Por ello, no debemos despreciar la capacidad de
la consiguiente repercusión en la marcha del sujeto y en la recuperación del anciano, de manera que el alta hospita-
aparición de descompensaciones que pueden provocar laria no constituirá una solución más barata, si no que el
patologías en otros elementos del aparato locomotor. coste se trasladará a otro ámbito como puede ser el fami-
Reeducación de todos los aspectos biomecánicos de la liar, con las consiguientes repercusiones socioeconómicas
marcha encaminados a una mayor eficacia funcional y con y de calidad de vida del anciano.
el menor gasto posible, de gran importancia en el paciente
anciano.
BIBLIOGRAFÍA
- Poleoterapia.
1. Serafina Alcántara, Miguel A. Hernández, Eugenia
- Balneoterapia.
Ortega.Fundamentos de Fisioterapia Editorial Síntesis
. 1995

PRECAUCIONES ESPECIALES EN CASO DE REEM- 2. Dorothy E. Voss, Marjorie K Ionta. Facilitación


PLAZO DE LA ARTICULACIÓN DE LA CADERA. neuromuscular propioceptiva. Editorial Panamericana.
1987.
La nueva articulación tiene un rango de movimiento
limitado, por lo que es necesario tomar precauciones es- 3. González Mas, Rafael. Rehabilitación médica de an-
peciales para evitar su desplazamiento. Estas precaucio- cianos. Editorial Masson, S.A. 1995.
nes son:
4. Juliet E Compston, Clifford J. Rosen. Osteoporosis. J&C
- Evitar cruzar las piernas o los tobillos aún cuando Ediciones médicas. S.L..2001
se está sentado, parado o acostado.
5. Eric Viel. Diagnóstico fisioterápico. Editorial
- Mantener los pies separados aproximadamente 15 Masson.1999
cm mientras se permanece sentado.
6. Parreño Rodriguez, Juan R.. Rehabilitación en geria-
- Evitar al sentarse de manera que las rodillas que- tría. Editores médicos, S.A.. 1994.
den a una altura superior a las caderas.
7. Fisioterapia de centros asistenciales. Temario oposicio-
- Colocar un cojín entre las piernas para mantener la nes al S.A.S. Editorial Kronos. 1998.
articulación en la alineación apropiada cuando se
está acostado. 8. C. Menéndez Pascual. Protocolo para prótesis totales
de cadera. Revista Fisioterapia. Volumen 19. Número
- Evitar inclinarse sobre la cintura. 1. Enero-Marzo. Editorial Masson S.A.. 1994.
- Asiento de inodoro elevado. 9. A. Thevenon, B. Pollez. Rehabilitación en geriatría. Edi-
torial Masson.1994.
La progresión en el desarrollo de las fases de
reeducación motora tras la intervención del anciano con 10.P. Martínez Martín, O. Frach Ubía. Trastornos de la mar-
fractura de cadera es muy variable para cada persona. En cha. Formación continuada Sociedad Española de Neu-
la práctica el fisioterapeuta encuentra al paciente en la rología. 2002.

18 GEROSAGG 2004; Vol. 2 Num.3 Caídas en el anciano

También podría gustarte