Plan de Reestructuraciñn:
Aprobaciân, Ejecuciân
elilcumplimiento
L Introduccidn
Los procedimientos concursales existen para
alcanzar una solucion optima y colectiva de la crisis
enapresarial que afccta al deudor comun. De hecho, los
beneficios que otorga la legislacion concursal a los
insolventes —traducidos en la facultad de suspender
sus pagos por un periodo de tiempo y en la proteccifin
casi irrestricta de su patrimonio contra la ejecucion de
sus acreedores— conlleva una carga para aquéllos: la
aprobacion, ejecucion y cumplimiento de un instrumento
concursal. En ese sentido, los instrumentos concursales
se coloc an en el partidor para brindar una salida
concursado al problems de la empresa, y son el resultado
final y consensuado de las pocas o muchas reuniones
de acreedores.
En la Ley General del Sistema Concursal (en
ade1ante, LGS C) ide ntificamos tres ins trume ntos
concursales, a saber: (i) el Plan de Reestructuracion,
c uan do nos ub ic amos en e1 esque ma de una
re es tructuracion patrimonial; (ii) el Convenio de
Liquidacion, st es que la alternativa de los acreedores
apunto a una disolucion y liquidacion del patrimonio
en crisis; y (iii) el Acuerdo Global de
Refinanciacion, s ieinpre que se trate de un proceso de
naturaleza preventiva a una eventua1 inso lvencia, esto
es, en palabras de la LGSC, un Procedimiento
Concursal Pres entivo.
Sea el que fuerc, los insnmnientos concursales
referidos tienen cinco caracteristicas comunes, que los
distinpuen con claridad de cualquier otro instrumento
de refinanciacion o pago de obligaciones: (i) deben ser
Paolo del Aguila Ruiz de Somocurcio*
Secre/ar/o General del Oentro de Oonciliacion y Arbitraje i acional e
International de la Oâmara de Comerc/o de Lima.
aprobados por mayorias calificadas de acreedores
concursales; (ii) e1 deudor concursado no interviene en
la formacion del acuerdo, pese a que es libre de
proponer sus términos y condiciones, e impugnarlo;
(iii) sus efectos son oponibles a todas las partes
involucradas en el acuerdo, hayan o no manifestado su
voluntad de adoptarlo o, incluso, habiendo expresado
una opinifin contraria a1 respecto; (iv) requieren de
contenidos minimos y formalidades cuya
inobservancia, en ciertos casos, se sanciona con
nulidad, conforme a la LGSC; y
(v) su ejecucion y cumplimiento es seguido y
controlado por un cuerpo colegiado: la Junta de
Acreedores’.
Dicho esto, nos detendremos en observar el
Plan de Reestructuracion, en concreto, las
consecuencias de su aprobacion, ejecucion e
incumplimiento. En efecto, no es obj eto de este
trabajo abor dar a spectos sumamente relevantes del
Plan de Reestructuracifin — como puede ser su
naturaleza contractual, formacifin, contenido material
y formal, entre otros aspectos— porque ello excederia
los limites de estas paginas, sino focalizarnos en los
aspectos apuntados lineas arriba, para lo cual haremos
un analisis detallado del articulo 67° de la LGSC. A
través de ello, apuntaremos los alcances y
problematica que trae la disposicifin en cuestion, para
terminar esbozando algunas conclusiones de interés
general.
IL Analisis del Articulo 67° de la LGSC
Consideramos la disposition bajo analisis,
como
una de las mas interesantes de la LGSC. Cada uno de los
numerales que la comprenden, bien podrian ser objeto
de sendos trabajos de investigacion, en tanto la riqueza
ñ‹›fnrc cl |aa i lieu far. |›u«dc c‹›nStil large el s i ri icn ie artic kilo del aulor: «Vic +do mas al I ñ de lo c ‘idclJtc: E I C”c\\cursu P re venti vo y su aplicac io‹J par la
 Paolo del Aguila Ruiz de Somocurcio
de sus enunciados asi lo amerita. No obstante ello, por e1 cual la Junta define los niecanismos para llevar
para los fines del presente articulo, vamos a ver por a cab o la reestructuracion ec onorn ieo financiera del
separado SuS aspectos mas relevantes' deudor, con la finalidad de extinpuii las obligaciones
comprendidas en el procedimiento y superar la crisis
2.1 Oponibilidad Concursal patruuonial que origino el inicio del mismo, en
funcion a las particularidades y caracteristlcas propias
«El Plan de Reestructuraciñn aprobado por la del deudor en reestructuracion.»
Junta obliga al deudor y a todos sus acreedores
coniprendidos en eI procedimiento, aun cuando se Es la primera vez que la lc3islacion concursal
hayan opuesto a los acuerdos, no hayan asistido a la peruana se anima por dar una aproximacion conceptual
Junta por cualquier motivo, o no hayan solicitado a esta institucifin. Pese a ello, las dudas sipucn a flote.
oportunamente eI reconocimiento de sus créditos.» En ese sentido, advertimos als unas inquiemdes:

Este enunc iado des ta ca una de las cinc o (i) ¿En el Plan de Reestructuracion convergen dos
caracteristicas que referimos como tip icas de todo o mas partes? Partiendo de la idea que no es
instrumento concursal: la oponibilidad. El campo de valido identificar el concepto de persona con el
accion del Plan de Reestructuracion embarga al de parte, podriamos entender el Plan como el
deudor y a todos sus acreedores concursales’, sin negocio al que concurren dos partes (deudora y
importar el coniportamiento que tuvieron en la acreedora), pero una pluralidad de sujetos.
formacion del acuerdo. Por esta razon, este primer Como acertadamente señala Manuel de la
numeral del articulo 67” de la LGSC es lo Puente «... si bien generalmente coinciden el
suficientemente claro a1 establecer la obligatoriedad concepto de sujeto y el concepto de parte,
en e1 cumplimiento de los términos y condiciones del porque en la gran mayoria de los contratos cada
Plan de Reestructuracion, para todos los acreedores parte esta formada por un solo sujeto (.. . ) no
del concurso, en cualquier supuesto. se des carta la posibilidad de que una parte esté
constituida por dos o mas sujetos que tengan un
En otras palabras, el Plan de Reestructuracion mismo interés (...) y, en tal caso, la parte
es de cumplimiento obligatorio para los acreedores contracmal es el centro de interés que agrupa a
que: (i) votaron a favor del Plan; (ii) se abstuvieron de los sujetos»’ De esta manera, tenemos que en
emitir pos icion al respecto; (iii) v otaron en contra; la formacion del negocio intervienen varios
(iv) estuvieron ausentes al momento de adoptar dicho sujetos unidos por un solo interés.6
acuerdo; (v) no habian obtenido aun su
reconocimiento de créditos por parte del INDECOPI; (ii) Sin perjuicio de lo anterior, (,interviene e1
y (vi) teman la calidad de contingentes.‘ deudor como parte del Plan de
Reestructuracifin? Aparentemente no, toda vez
No es nuestro proposito determinar en este que éste se forma con la voluntad mayot‘itat’ia
trabajo la naturaleza juridica del Plan de de los acreedores. Del mismo modo, la oferta
Reestructuracifin. Sin embargo, es conveniente advertir del Plan no proviene del deudor, sino del
que e1 articulo 6 €›.I’ de la LGSC lo define como «...el administrador que propone
negocio juridico

I’ran este flu. nos ocuparerHos dc cuatro grandes ternas. todos rel acionados con el Plan de Reestructuraciñn y que gene ra n efectos irnportantes en s u
aprobacit5n, cjecucion y cuiuipliijiiento: la opon ilii li dad concursal, los privilegios de la acreencia tributaria, las garantias coustituidas por terceros y el
incun ip liniiento del P lan. lratados en l‹is nuiaicra les I. 2. 3 y 4 del citado articulo 67*, respectivan ente. Dejarenios de la do en esta oportuni dad —no
por ser un as unto de njenor iiiaportancia, si no por escapar alto de nuestro objeto de estudio— el ultinio numeral de la noniia en cuestion, referido a las
acciones de acreedores que gozan de arautias sobre laieues del concursado, producto de obligacioues nianteiiidas por terceros.
1. os acreedorc s concurso les son aq ué llos q uc i4iantienen créditos devengados liasta la fecHa de publicidad del acog iiiiien to del deudor at
procedimiento cone ursal. c‹ nforiaie In dispone cl artic kilo 1 .1 ". cc›nc ordado con el articulo 32" de la LGSC. Nfitese que el criterio asuini do por la 1-
G S€’ para cousi derar a un acrecdor coiiio c one ursal cs la fee ma de de 'euro u ori Men del crédito, rnas no la feclia de vencinaiento del rrnsiiio. km tal
scin i do, un acreedor concursal es aqucl cuya rclac ioii juridico con cl de nd or se ccl eb rñ a rites de la feclia de publicidad del concurso, a pesa r que el
venci iiiieijto sea posterior a diclia tech a de corte». Un acreedor post-come ursal, por el contrario, es aqué1 cuya acreencia se origina con posterioridad a
la feclia en iiienc i ñii, y a1 que, por
tanto, no se apl icau los efectos del P1 an de Reesiructuraciñn.
/\d› cttcuc ia: cl Pla n dc lleestructuraci‹'in rcq uicrc una ma yoria ca lificada de acreedores para su aprobaci on. Con tonne al a rtic ulo 53. I " de la LG SC
«No.s nr'i«•/ r/r.\ dc' la .Mutton /›/ ‹ r/.‹h.s ‹' ‹ / ///c / ri/ /7 dr•/ ai /i6i//o 5,'. /. r•/ ariie/'do be ap/'ofin6ioo de/ Plum be Reestrii elm ‹I c ion, r/c / Com i'‹• i/o r/e
£iyiii‹/nr/rri I' r/c'/ N r ii r•rdo C'/y/›y/ r/c A‹'//iirin r‘/r/r'ir›ii. i › «s moii fic‹t c’io ii cs, /s i co/no II g it éllos pa i’a los pie /ri Let' C/c'ncrr/ 1 dc' .(ocicdr:Jc•.r
yet/ri tuft i’oricis

/‹›/ri / ‹/r /n› c/ cr/loos i cr o/i ‹› c/r/as /a'9 /« é t›iir /.\/o n. ñ'Ji sc it ii d‹i con vo cr/fo /-ia los ri ci/e/'dos se ado/ifn r-ñ /i c‹› ii c/ re la /ri i o ab/c cfc oc/‘ccJr›J c.‹
i'c'/ r‹'.‹cii /r/r /cs dt* t/ri /inyc› fc* .‹iiJ7 c i‹» ri / fi 6, 6?., cfc/ fo /ri / r/c los ci‘éilitos nsisley tcs.»
14c 1 a P die lits y L ava1.1 c, Ma n uel. k I C’ontrato cii Ge me ra1. Coiiie ntari os a la Seccifin Prim iera del Libro VI I del Cñd igo C ivi1. To mo 1. L i rna, 2003. Pa .
5 G.
(› Sobrc el c on ce pto dc «ce ntro dc i u terés› pucde con su1 tarsc a M essineo. F rancesc o. Man tial de Derecho Ci vi1 y C“onicrcia 1. Edi nitrite s .I uri di cas E
uropa - A rrléri ca. B ue nos A ires, 19.7.1 . To mo 1.
 Plan de Reestructuraciñn: Aprobaciñn...
un proyecto de Plan que, luego de la discusion
y analisis de la Junta de Acreedores, recibira la
aprobacion o rechazo de ésta. Entonces, ¿es el
Plan de Reestructuracion, al menos, un negocio
juridico bilateral‘?
(ii) Un paso mas atras nos induce a preguntar lo
siguiente: (, El Plan de Reestructuracion es un
contrato? Si bien el Codigo Civil peruano
re conoce la figura del contrato plurilateral,
entendido como aquél formado por mas de dos
partes; tanto si éstas tienen intereses y fines
comunes, cuanto st sus intereses y finalidades
son distintos’. ¿Ese es el caso del Plan? maxime
cuando en la formacion de este instrumento no
concurr e e1 acuerdo de todos los sujetos
comprometidos con el Plan, sino el de la mayoria
legal.
Siguiendo con la tesis contractualista del Plan,
i,cumple éste la Duncton de cualquier contrato,
en el sentido de crear, regular, modificar y
extinguir una relacion juridica patrimonial?'
Estimamos que cumple todas estas funciones, e
incluso algunas adicionales, como veremos en
e1 siguiente punto. En tal sentido,
consideramos la definiciñn del articulo 66.1° de
la LGSC limitante acerca de los alcances del
Plan de Reestructuracion cuando lo e n fo ca
exc lus ivame nte a la extinc iñ n de
obligaciones comprendidas en el
procedimiento’.
Definitivamente, en el Plan se crean nuevas
relaciones juridicas patrimoniales para
satisfacer los diversos intereses de los
participes del contrato. Conjuntamente, se
regulan estas nuevas relaciones juridicas, con el
objeto de precisar sus alcances, modos y
cuniplimientos; y, adicionalmente, se
niodifican relaciones juridicas pre-existentes, lo
que implica que la estructura de la relacifin
permanece idéntica.
(v) Finalmente, nos llama la atencion el caracter
patrimonial del Plan de Reestructuraciñn. De
acuerdo al articulo 1351° del Cñdigo Civil, la
relacion juridica creada por el contrato debe ser
patrimonial. Sobre este concepto, Diez-Picazo
De la P rich tc v I -a val Ie. M an ue I . Up. C i l. Pay. 62.
De com foiaiii dad con el articulo 125 i " del Codigo Ci vi1 «El con tra to es el ac uerdo dc dos o ml s [sa rtes para c rear. red ill a r. rnodi fi ca r o ex ti
tit u ir relac ioll juridico tJatrimonial».
parte add ei tir que +JicI\o cl unciado colisio Ja con cl a 'ticttlc 17“ de la
io
11
Granada. 1999. Pay. 1 63.
A rticulo VI.- P roporciona I idad.- 1.os acreedores participan proporcionalniente en el resul tado econñiaiico de los procediiiii entos concilrsa les. ante |a
irnpo sitailidad del deudor de satisfacer con sit patriiiionio los créditos existentes. sat \ o los r›rdcncs dc preference a estataleci dos cx|3resaiaiciitc en
señala que una rel acion juridica es patrimonial
«... cuando versa sobre bienes e intereses que
poseen una naturaleza economic a (... ) cuando
pueden s er obj eto de val orac io n .» ' '". L a
experiencia nos demuestra que el contenido del
Plan de Reestructuracion excede la sola relacion
juridico patrimonial entre deudor y acreedores,
incluso a las medidas e instrumentos de caracter
financiero que se aplicaran para conseguir e1
pago de los créditos. En efecto, e1 Plan establece
diversos parametros mas all a de lo meramente
patrimonial: en la administracion del negocio, el
conaportamiento de sus directivos y gerentes, la
rendicion de cuentas, la aprobacion de estados
financ ieros, las fa cu1tade s de1 comité de
acreedores, la politica laboral, la elaboraciñn de
estrategias empresariales, entre otros. A decir de
Candelario Masias, «... e1 convenio no debe
limitarse a regular relaciones entre deudor y
acreedores en orden al pago de las deudas sino
que debe inc luir adem as las cues ti one s
relacionadas con la continuidad de la actividad
empresarial».’ '
Dejando de lado todas estas observaciones
como señalamos, materia de un trabajo posterior— la
oponibilidad del P lan de Reestructuracion es una
mani fes ta c to n de1 pr inc ipi o del «par conditio
creditorum», consagrado en el articulo VI del Titulo
Preliminar de la LGSC’ 2.
Segun este precepto, los acreedores participan
proporcionalmente del resultado economico de los
procedimientos concursales ante la imposibilidad del
deudor de satisfacer con su patrimonio los créditos
contraidos. Se pres enta aqui la idea de la
proporcionalidad del concurso, en funcion de la cual
los acreedores deben internalizar la crisis del deudor y
redistribuir, en la mayoria de casos, 1as pérdidas del
concursado de manera eficiente.
Esto implica que a los acreedores se les debe
dispensar un trato igualitario en la distribucion de las
pe rdidas y s it Il a ncias del negocio, principio de igualdad
conocido con la aludida expresifin latina «par conditio
creditoruin», el que se contrapone con el principio
comun
presente I.ey.
 Paolo del Aguila Ruiz de Somocurcio
de quien Hey a primero cobra antes —»prior in tempore
potior in iure»—, aplicable en el derecho civil.
No obstante lo anterior, conviene mencionar que
el principio de proporcionalidad o igualdad se flexibiliza
en nues tra leg is lac ion conc urs al a trav és de las
preferencias establecidas por la LGSC”
Pese a esto ultimo, la oponibilidad concursal
resulta un rasgo distintivo e in4prescindible del Plan
de Reestructuracion, sin e1 cual éste carec eria de toda
efic acia. P iénsese, por ejemplo, si no ex istiera la
inoponibilidad, en lo inseguro que serf an los acuerdos
al interior de las Juntas de Acreedores, cuando la masa
concursal y la consiguiente reestructuracion
econoniico financiera de la empresa, puedan quedar a
merced de las acciones unilaterales de aquellos
acreedores que no se presentaron al concurso o que,
siendo minoritarios, tuvieron una opcion diferente a la
aprobacion del Plan.
Bajo tales circunstanc ias,
no habr ia inc entiv o a1guno de
reducir los costos de coordinacion “(...) la opoaibilidad
entre acreedores y deudor con el
animo de arribar a sol uciones coiicursal
un
colectivas de la crisis. Salvo que
exista unanimidad de opiniones F058 distintivo
D iclia participacion trae una serie de aristas y
cuestionairientos que no son el caso analizar. ni
siquiera rnencionar, en el presente trabajo. Sin
embargo, para explicar lo enunciado en el parralo
precedente, vamos a ocupamos tan solo de tres
privilegios que otorga la lepislacion concursal al
tratarriiento del crcdito tributario en e1 Plan de
Reestructuracion, a saber .
(i) La oponibilidad «favorable»: Nos referiinos al
precepto General del articulo 48.3‘ de la LGSC
en virtud del c ua1 «Los acuerdos adoptados
por la Junta son oponibles a los créditos de
origen tributario en las mismas condiciones
aplicables a la mayoria de los acreedores
incluidos en el orden de preferencia en el cual
exista el mayor monto de créditos
reconocidos». Dado que los acuerdos de Junta
se forman sobre la base del sistema de
mayorias, es facil suponer que las decisiones
mas ventajosas —o menos onerosas, si
queremos verlas por ese lado— seran aquéllas
que afecten
a los acreedores mayoritarios'‘. En
to do amb ito de acuerdo de las
Juntas, estas decisiones se
extienden al acreedor tributario. A
resulta tales efectos, se establece un
doble
filtro a su favor, cuando se señala
que a éste se le aplican las mismas

entre todos los acreedores —cosa
i mpro b ab le, ate n diendo a la
divers idad de inte reses que
convergen en el procedimiento
concursal— el acuerdo y ejecucion
de I P lan de Ree s truc tui-ac ion
estarian condenados al fracaso.
• e
condiciones que: (a) alcanzan a los
itnprescindible del acreedores mayoritarios; y (b) que
representen el orden de prelacion
con mayor cantidad de créditos
sin el cual éste reconocidos.
careceria de toda En ese sentido, no cabe duda que

eficacia.”
e1 acreedor tributario se ubicara en
el s rupo de acreedores «menos
2.2 El Caso Particular del Acreedor Tributario 14

«La oponibilidad del Plan de

Reestructuracion al Estado, en su condicion de
acreedor tributario, se regira por las disposiciones
contenidas en el articulo 48".»

El principio de proporcionalidad o igualdad

concursal al que nos referimos en el numeral anterior
se res iente ostens iblemente con la partic ipac ion del
acreedor tributario en el procedimiento concursal.
afectados» con las decisiones del grupo, al que se
opondra tal acuerdo. Incl uso, en el supuesto de
dudas o discrepancias acerca de los alcances y
pertinencias de tales privilegios, éstas seran resueltas
por el INDECOPI, es decir, se ofrece al acreedor
tributario una via «ad-hoc» y expeditiva para la
solucion de las controversias derivadas de las
condiciones de sus priviles' oS, cosa que no
tienen, al menos de esa forma, el resto de
acreedores dcl concurso. A proposito de esto
ultinio, una duda que salta a la vista en la
norrna
 Plan de Reestructuraciñn: Aprobacifin...
en cuestion es a qué «mayoria» de acreedores se
reliere. ( A una mayoria noininativa? es decir, si
se trata de 5 acreedores reconocidos ¿,la mayoria
es de 3‘? i O a una mayoria porcentual? es decir
(,en funcion a la cantidad o porcentaje de créditos
que detenta cada uno de los 5 acreedores'! La
respuesta a esta inquietud, la reservamos para
un trabajo posterior.
(ii) La tes is de la menor afectacion: Sobre la base
del priviles io anterior, se construye esta tesis
con la finalidad de afectar, del men or modo
posible, al acreedor tributario cuando en el Plan
se fijen las condiciones especificas de las tasas
de interés comp ensatori o ap1icab1es y el pla
zo de repro g ramac i on de pagos de la a cr
eenc ia
conc urs al. Nuevame nte la rent is ion a este
privilegio la encontramos en el articulo 48° de
la LGSC1’
Para graficar mejor este privilegio vamos a
plantear el siguiente ejercicio: asumanios que
en el Plan de Reestructuracifin de la Empresa
«X» se establece una tasa de interés
compensatorio diferenciada para acreedores
garantizados (tercer rango de prelacion) y
acreedores quirografarios (quinto rango de
prelacion) del orden del 10% TEA y 5% TEA,
respectivamente. Dentro del primer grupo
(acreedores garantizados), la tasa del 10%
TEA, se incrementa al 12% TEA al cabo del
segundo año de la reestructuracion, en vista del
financiamiento de capital de trabajo que
efectuaran el 75’Zo de acreedores
pertenecientes a ese S rupo I n ese momento; en
tanto el 25% de acreedores restantes conservan
su tasa de interés sin variacion durante todo el
plazo del proceso, dado que no h ar an n in gun
ap orte de es a naturaleza.
¿,Qué tasa de interés de tipo conipensatorio
cor i esponde al acreedor tributario‘? La
respuesta nos la da e1 prec itado articulo 48°:
la que corresponde a la mayoria de los
acreedores incluidos en el orden de preferencia
en el cual exista el mayor monto de créditos
reconocidos. En el caso concreto, la tasa para el
acreedor tributario serta del orden del 10%
TEA por los prinieios dos afios del proceso de
iiicluiJos c» c| ‹›:’dc« dc )i’cl%tcn ia cn ul cu.l cxista ct «iey0’ monto Je c eUitos ’eco n,cidos l.os czsos do disc cpa«cia acctca dc cua|cs
sp‹i osos
reestructuracion, increnientandose a l 2% TEA
luego del segundo aiio, de cumplida la
condicion. Al respecto, podemos señalar que:
(a) e1 acreedor tributario se beneficia en el s
rado mayor del
acuerdo de la Junta, por Rons ideracion a la
persona que detenta el crédito: el Estado; (b) su
beneficio se increnienta acorde al compron4iso
de financiamiento de otros acreedores, pese a
que e1 acreedor tributario no contribuyo con el
financiamiento; y (c) se limita la voluntad de la
Junta de Acreedores para, sobre la base de
consideraciones objetivas, asignar al acreedor
tr ib utar io una tas a de interés de t ipo
compensatorio acorde a su exposicion y lu s ar
dentro del concurso. Todo lo dicho anteriormente,
también es ap licable en e1 supuesto de la
r epr s rama cion de pag os de 1as deu das
concursales de origen tributario.
«No perdono y no me arriesgo»: Estas podrian
ser perfectamente las palabras que, en cualquier
Junta de Acreedores, dira el acreedor tributario;
y no necesariamente porque asi lo desee en e1
supuesto conc reto —en todo caso, e so es
subjetivo—, sino porque el tercer privilegio que
nos ocupa asi se lo impone, cuando en el literal
d) del articulo 48.3° se señala que los créditos
tributarios «no seran capitalizados ni
condonados». De esta manera, la carga fiscal
de la empresa se mantiene intacta. Mecanismos
importantes de reorganizacion de la sociedad
en crisis, como puede ser el canje de deuda
concursal por acciones de la empresa, lo que
supone una c ap ita 1iza c io n y mej ora de
sus Es tado s Financieros; asi como la
extincifin rapida de obligaciones via el acuerdo
de condonacion de acreencias, lo que supone
ademas, una menor exposicion financiera del
negocio facilitando su acceso al crédito, son
desechados por el Estado cuando éste es el
implicado.
Como una suerte de paliativo, la disposicion en
cuestion prevé que «pasara a1 quinto orden de
preferencia la parte de los créditos de origen
tributario que, encontrandose en e1 cuarto
orden de preferencia, sea equivalente al
porcentaje promedio capitalizado o condonado
por los acreedores incluidos en el orden de
preferencia
 Paolo del Aguila Ruiz de Somocurcio
en el cual exista el mayor monto de créditos
rec onoc idos». Pal i ativ o insit fi c ie rite
desde nuestro optica, por cuanto mantiene la
carga tributaria de la empresa y no ofrece a la
Junta de Acreedores alternatives
adecuadas de t r atami e nto para al c an zar
su re du cc ion o refinanciamiento provechoso.
Entonces, ;,la participacion del acreedor tributario
y I os priv ileg ios coneedidos por la LG SC
distorsionan las re alas del concurso'* Por los
argun4entos expuestos, pensairios que st, pero
no solo distorsiona, también repercute, de manera
proporcional al crédito que e1 Estado mantiene
en el procedimiento, en la ejecucion del Plan de
Reestructuracion y en la viabilidad futura del
deudor en crisis.
2.3 Garantias Otorgadas por Terceros a Favor de
Deudores Concursados
«Los ei’ectos de la aprobaciñn del Plan no
liberun a los terceros garantes del deudor, salvo que el
acreedor beneficiario de las garantias constituidas
por éstos hubiera votado a favor de la aprobaciñn del
Plan o que dichos garantes hubiesen previsto e1
levantamiento de las garantias otorgadas por ef’ecto de
la aprobaciñn del Plan.»
En un ordenam iento ju ridic o que busca la
protcccion del crédito y la celebracion, sin barreras ni
obstaculos permanentes, de transacciones comerciales,
el sistema de garantias debe funcionat sin
contratiempos, constituyendo una verdadera «valvula
de escape» a favor del acreedor que se cuido de
revestir de garantias sus contratos, frente a eventuales
incumplimientos de su deudor. En ese sentido,
nuestro sistema legal pone
«so bre la mesa» las cartas de las garantias reales y
personales a disposicion de los contratantes para que
las usen de acuerdo a su conveniencia.
Ahora bien, ¿, qué pasa con las garantias del
acreedor cuando su deudor ingresa a un procedimiento
concursal‘? Para responder esta pregunta, conviene
hacer notar, en primer lugar, que el estado concursado
de una persona supone una situacion excepcional y
temporal, que conlleva intervenciones legales
profundas en las rel aciones jur idi c as, privadas y
pub lica s, prccslablecidas por el deudor frente a
terceros; pero que sr›n —tales intervencioiies——,
necesarisinias si es
‹juc se quiere alcanzar una solitcion optima a la crisis
Act 3e rdbi‘. De esta lornia. la declaration de concurso
i es es t i i a d e co nte n i do c spe c i al 1 a ej ec ri ci
on y
cump1 imiento de las oblis• ones del concursado,
conforms a la ley de la naateria.
Sobre este particular, la LGSC establece dos
efectos de suma relevanc ia sobre las deudas y masa
concursal, los que breven4ente pasainos a explicar:
(i) La suspe ns ion de 1 a e x i ib i1 i clad de las
oblis aciones del deudor de vcnuadas hasta
la
«fecha de corte», esto es, la tccha de difusion
del procedimiento. Como dijirnos lineas arriba,
este efecto implica una intervencion legal en las
relaciones juridicas del deudor con e1 objeto de
fortalecer su patrimonio y hacer efectivas las
decisiones que la Junta de Acreedores que se
insta le tome respecto de1 mis mo . L as
co nsec uenc ias so n: (a) I a su spe ns ion de
cualquier pago adeudado por el concursado; (b)
el no devengo de intereses moratorios; y (c) la
no capitalizacion de créditos.
La suspension de pagos aludida no es perpetua,
sino que tiene efectos hasta que sea aprobado el
instrumento concursal correspondiente. En
efecto, como quiera que la suspe ns iñn es
necesaria para fortalecer el patrimonio de la
empres a concursada y ev itar con e llo las
exigencias inmediatas de pago que podrian
lesionar decisiones eficientes de la Junta, una
vez que se ha logrado este proposito se torna
inneces ario continuar co n dic ha me dida,
sobretodo si se tiene en consideracion que los
acuerdos establecidos en cualquier a de los
ins trume ntos conc urs ale s re lativ os a la
exigibilidad de obligaciones seran oponibles a
to dos los ac re edo res coinpr end i dos en el
cone urso y, por lo tanto, de ob li gatorio
cumplimiento.
(u) La intangibilidad del patrimonio del deudor. Ello
busca evitar acciones ejecutivas individuales una
vez descubierta la situacion de crisis del deudor,
con lo que el desincentivo para la adopcion de
acuerdos cole cti vos s en a mani fies to. La
intangibilidad del patrimonio trae consigo su
fortalecimiento efectivo y elirnina la
incertidumbre de los acreedores acerca de la
bondad de la opcisn colectiva como mecanismo
para enfrentar la crisis del deudor. Lo anterior,
evita la degradacion o detrimento del patrimonio.
Este efecto nos trae la suspension de todo
procedimiento seguido conti‘a el concursado,
en su etapa de ejecucion, justaiuente con la
finalidad de evitar el rnenoscabo de su
patrimonio, lo que favoreceria a un acreedor
respecto del resto de acreedores del concurso.
 Plan de Reestructuraciñn: Aprobaciñn...
Con la explicacion precedente, la respuesta a la
pregunta tornaulada lineas arriba es que, frente a las
p a rantias c ons titui has p or el deu dor, el ac ree dor
garantizado debe: ( i) apersonarse y participar en el
procedimiento concursal; (ii) solicitor el reconocimiento
de s us créditos, incluyendo la garantia que detenta a su
favor; y (iii) ajustar sus pretensiones ‹te cobro a lo que
la mayoria de acreedores decida en Junta, con la salvedad
que, de adoptarse la liquidacion como destino del deudor,
tendra una prelacion mayor, dada sus Sarantias, frente a
otros acreedores, basicamente e1 acreedor tributario y
los quirografarios.’
P uede re su I tar co nip lic ado ac eptar e sta
sub ord ina cion del ré g inte n de s arantias a las
consecuencias o resultas del efecto concursal. Sin
embargo, el sustento de lo antes dicho esta en los
principios de colectiv idad e igualdad propios del
Derecho Concursal, dirigidos a superponer el interés
colectivo de la masa frente al interés individual de
cobro
de un acreedor y a dejar en las
mismas condiciones a todos los
acreedores frente a los resultados “(...)los efectos
del
—provechosos
concurso se circunscriben
o desventajosos— de1
concurso, respectivamente'’.
Como bien s eñala José
Manuel Finez, «con la apermra de
un procedimiento de insolvencia
que la
suspensiân
entran en juego el principio de no puede extenderse
equidad, que arbitra los intereses
de las partes en el contrato, y la al patrimonio
sat is fac c ifin colectiva de los
acreedores ante un patrimonio
de
«irre sponsable» . F re nte a la
resolucifin como garantia del particular acreedor esta la
pat conditio como garantia del crédito. La autonomia
de la voluntad, norma de autoregulaciñn de intereses,
ha de quedar limitada por el ordenamiento concursal...»'
En resumen, las garantias del acreedor ceden
terreno al concurso emergente, por lo que el acreedor
garantizado no puede exigir el pago contra su deudor ni
afectar su pati’imonio, a través de las garantias que
posee; solamente puede/debe participar del concurso
como un acreedor de tercer rango de prelacion, y
sujetarse las
16
consideraciones y decisiones mayoritarios de la Junta
de Acreedores.
Efectuadas estas explicaciones —necesarias para
entender los alcances del articulo 67.3*— veamos qué
sucede con las Sarantias constituidas por terceros a
favor de acreedores de un deudor concursado.
Segun lo expuesto. los efectos del concurso se
circunscriben a1 patrimonio del concursado, por lo que
la suspension no puede extenderse al patrimonio de
terceros. En efecto, de acuerdo al articulo 17.3° de la
LGSC «La inexigib ilidad de las obligaciones dcl
Jeudoi no iinpi le que los acre clot cs puedan dirigirsc
coo//-n el patrimonio ale los tercet os que hubiernn
constitui‹lo garantias renles’ o personales a su favor
los que se suhroga rait de pleno derecho en la pos
iciân Tel acreedor original (...). En el caso de
concurso de una sucui sal la inexigihilidad be sus
obligacion es' no afecta la posihili Ind be que lo›
acreeJores pucdan
cli I igirs e por las vias le ga les
pertin en tes contra el patrimonio
de la prin cipal si tu‹i da e n
[C rrf[ o Ki o ext ranJe ro.»
En ese sentido, los
acreedores pueden dirig ir e1
cump limiento de ob lig a ciones
contra la empresa principal (de
tratars e del concur so de una
sucursal) o contra a quell as
personas que constituyeron
sarantias reales o personales a su
favor para
obligaciones
respaldar las
del concurs ado. En este ultimo
caso, se respeta e1 régimen de
garantias constituido y se premia el comportamiento
diligente de ciertos acreedores que se protegieron
mejor ante e1 riest o que implica el incump limiento de
obligaciones y posible concurso de su deudor.
En ese orden de ideas, e1 primer enunciado del
articulo 67.3° es consecuente con lo antes dicho,
cuando señala que ‹Los efectos be la aprobacion del
Plan no liberan a los tcrccro.s garantes dccl ‹leudor».
Asi como los efectos del concurso no se extienden a
patrimonios distintos del deudor, los términos y
condiciones de los
17 A rticulo \’.- Colectividad.- Los procedi iiiie ntos cone ursales b uscau la parti ci pu c i on y hen cii ci‹› de la to ta I idad de 1 os acreedc res i i1\ of uc ra dos ci i In
crisis del deudor. El i n tei’és co lecti o de la masa de acreedores se superpone al i ntercs i udi 'id us I dc cobro de cada acreedor.

Articulo V I.- Proporcionalidad.- Los acreedores participan proporciona Intents en el resul tado ec onoiiiico de 1os proccdirnientos concursales. an te

IS k i nex. .losé Man uel . 1.os cfectos dc la declaraciou de quiebra en los contratos bi lateru lcs. ñdi toria 1 C“ivitas S.A. Madrid, 1992. Pag. 70.
 Paolo del Aguila Ruiz de Somocurcio
instrumento s concurs ales aprobados en Junta de
Acreedores tampoco deben «tocar» a personas
distintos dcl concursado.
Sobre el particular, la Exposicion de Motivos del
proyecto de LGSC del INDECOPI senalo:
«El cotic ui .s o in c irl‹ en ti n pati ini on to
r/cfe/-vi in w‹fo, yo i la q rie .s i‹.s spec /rs n o ti er/en
‹•xteti dc I‘sc• al pufrin?o rite r/e /c cc /-os. En eve
seiifirfo, la.s aci cc dores ptic clen iii i gif el cuinpliin
ten to dc• ol›lignciones a a quellas personas qtie const it
liver on gurntiticis I eales o per sona let i en favor fi c
rite a ol›ligticiones clef caucui sado. De e›a %rina se
logra
(a) i-e.spetar el régimen cfc goran tin.s y (b) premium el
coinportamic nto diligymte rle civrtos cicreedores qme
.s c cub I iero n mejor an tc el riesgo quc im plica el
incumplimiento de• obligaciones.»'
Aqui encontramos una situacion peculiar, toda
vez que el principio cJe accesoriedad de las garantias
cede el paso al principio de especialidad que embarga a
todo e1 Sistema Concursal. Nos explicamos mejor: de
acuerdo a la doctrina y legislacion civil, las garantias
reales y las personales son accesorias a la obligacion
principal; en otras palabras, siguen su suerte, por lo qll e
las circunstancias que recais it n sobre la obligation
principal, también afectaran a las Sarantias ofrecidas para
su cumplimiento. A modo de ejemplo, tenemos el
numeral
1 del articulo 1090‘ y el numeral 1 del articulo 1122° del
Codigo Civil que preceptuan la extincion de la prenda e
hipoteca, respectivamente, cuando se extingue la
obligacion que garantizan.
Otro ejemplo de esto lo venios en el articulo
1901°
del Cod s Civil”, por medio del cual la prorroga de la
obligacion afianzada a favor del deudor extingue la
fianza, st es que el fiador no presto su consentimiento.
De esta
manera, se busca evitar una situacion incierta en la
persona que presto una fianza, de extender su gai antia
personal a la sola voluntad de tcrceros. Sin perjuicio
de ello, preceptos del ordenamiento civil, como los
rcferidos, no operan en el ordenamiento concursal.
l')
La preeminencia del Sistema Concursal, ademas
de l os p ri nc ipi os de col ect i v i dad e i g It a1dad
niencionados, esta avalada por la aplicacion preference
de las normas concursales sobre cualquier oti‘a que
contenga dispos ic iones dist in tas, inc lu yendo, por
cierto, las del Codipo Civil."'
En consecuencia, el acreedor garantizado tiene
expedita la posibilidad de ejecucion inmediata de los
terceros garantes —reales o personales— dcl deuclor
concursado. N o obstante, para que esto ocurra es
requisito previo que la obl ls acion principal se halle
venc ida, o que esté es tipulado en e1 contrato su
resolucion por eI ins reso del deudor a un procedimiento
concursal, lo que faculte al acreedor a ejecutar al s
arante. Al respecto, coincidimos con la opinion de
Guillermo Puelles en el sentido de que la mera existencia
del procedimiento e inexig ibil idad de obligaciones del
deudor, no facultan per .sc al acreedor a llevar ade lante
la ejecucion de las Sarantias.”
De haberse apr obado el Plan de
Reestructuracion, e1 acreedor garantizado tiene, por
tanto, dos opciones:
(i) sepuir la ejecucion del Plan y, de acuerdo a los
nuevos términos pactados, esperar el cumplimiento del
deudor concursado, es decir, el obl's ado principal; o
(ii) ejecutar sin mayor preambulo las Sarantias
constituidas por terceros a su favor, siempre que la
obligacion principal se encuentre vencida.
Lo anterior, nos presenta otra situacion peculiar
en esta vision dicotomica entre la especialidad concursal
versus la accesoriedad del régimen de Sarantias. Por un
lado, tenemos que el acreedor garantizado puede
ejecutar de inmediato a1 Sarante, pese a que los términos
de la obligacion principal se han niodificado en el Plan
(asuniainos, por ejemplo, que se reprogramo la
obligacion del concursado por 10 años); y por otro lado,
el acreedor garantizado puede desistir de su intencion
inrnediata de ejecucion, en tanto el Plan se ejecuta,
siendo su potestad, una ejecucion futura del Sarante, pese
a lo pueda estar hac ie ndo e l deu dor pr inc ipa 1 al inte
ri or de su procedimiento concursal. Como dice Puelles,
«... e/
 Plan de Reestructuraciñn: Aprobaciñn...
Sobre esto ultimo, cabe advertir que, confoure a
la leg islacion concursal peruana, el insreso a un proceso
concursal y la aprobacion de instiumentos concursales,
no supone la novacion de las obligaciones del deudor.
Este aspecto no innovativo del Plan de Reestructuracifin,
busca evitar la pérdida por parte de los acreedores de
las garantias otorgadas por terceros y termina siendo
una atadura de los garantes a los avatares del obligado
principal, lo que trae innumerables cuestionamientos,
cuyo analisis excede los margenes del presente trabajo."
En sintesis, conforme al articulo 67.3° de la
LGSC, los términos y condiciones del Plan de
Reestrucmracifin aprobado por la Junta de Acreedores,
no se extienden a personas distintas de1 concurs ado,
por lo que los terceros garantes de éste, no se liberan
en modo alguno por la aprobacion de dicho
instrumento, sino que, pese a los rnecanismos de
reprograniacifin, refinanciacion u otros dados a favor
del concursado, las relaciones de caracter real o
personal entre el acreedor y los garantes se mantienen
inalterables; como si el procedimiento concursal para e
llos, no tuv iese ningun efecto ni existencia.
Sin embargo, esta regla general se relaja con
dos excepciones contenipladas en e1 mismo articulo
bajo comentario:
(i) Por prevision contractual: Mencionado en la
parte final del texto del articulo 67.3°, esta
disposicion perniite la liberacifin de los
garantes del deudor como consecuencia de la
aprobacion del Plan, de existir una prevision
en el contrato de constitucion de garantia en
ese sentido. En otras palabras, se produciria el
levantamiento de las Sarantias personales y
reales por efecto de la aprobac ion de1 P1 an,
s i es que 1as partes implic ad as —deudor
concursado, acreedor concursal y Sarante—
asi I o establecieron en el acto juridico
correspondiente, de manera previa al inicio del
concurso. De estc modo, se restringe
contractualmcnte los alcances de la
responsabilidad del tercero Sarante ante el riesgo
de un eventual concurso del dertdor.
Al respecto, siendo ésta una manifestacion de
voluntad de las partes, no tenemos nada que
re fu tar, e n tanto nac e de un acuerdo de
voluntades que la legislacion concursal respeta.
No obstante, en la practica, es poco usual obs
er var una pr ev is ion contractua1 de esa
naturaleza, maxime cuando lo que cualquier
acreedor busca es proteger su crédito, por
medio de Sarantias de terceros, frente a todo
tipo de incumplimiento de obligaciones del
deudor, sobretodo si éste entra en falencia o
insuficiencia patrimonial.
(ii) Por «voluntad» tacita del acreedor garantizado:
De acuerdo a este extremo, el acreedor
garantizado propiciaria la liberacion de los
terceros garantes, siempre que haya votado a
favor de la aprobacion del Plan de
Reestructuracion de su deudor.
Esta p arte de la no rma es abso lu tame nte
desafortunada por cinco razones centrales:
a. Asume una voluntad liberatoria de los garantes
por parte de los acreedores, que no fue
declarada ni prevista contractualmente, ni antes
ni después de la aprobacifin del Plan. Asi, la
LGSC se sustituye indebidamente en la
voluntad de los acreedores garantizados, pese al
principio de autonomia privada que el Titulo
Preliminar de la propia ley proclama."
b. Pareciera ser que la LGSC le da un caracter
extintivo a las obligaciones concursales cuando
sucede la aprobacion del Plan de
Reestructuracion; caso contrario, no
entendemos porqué libera gratuitamente a los
garantes del cumplimiento que les corresponde.
C. El voto a favor de la aprobacion de un Plan, es
resultado del analisis economico-financiero que,
acerca de la viabilidad de la empresa deudora,
realizan sus acreedores luego de observar las
variables endogenas y exogenas del negocio,
planteadas y discutidas en el seno de la Junta.
Notese que todo esto se encuentra en funcion
 H oroclxo &s cci edad Paolo del Aguila Ruiz de Somocurcio
de la realidad y mayor valor del negocio en
reestructuracion, razon por la que no encontramos
ninguna cattsalidad entre la aprobacion del Plan
y la liberacion de garantes su jetos con masas
activas y pasivas distintas a las del concursado.

ci. Se genera un desincentivo a la aprobacion de los

Planes de Reestructuracion, ante e1 riesgo de
pérdida de las Sarantias. Si el acreedor
garantizado vota a favor pierde autoniaticamente
la obligacion del Sarante, y siempre cxiste el
riesgo de perder también la obligacion del
principal, si es que la reestructuracion no resulta
como lo trazado. Frente a la disyuntiva de perder
«soga y cabra», mejor es asegurarse un cobro La Ley de ReesEvcturacion Patrimonial, colaboro
directo, aunque sea parcial, para lo cual e1 con la reduccifin de costos de coordinacifin entre las
acreedor con garantias, o vota en contra del Plan, partes para procurar ac uerdos e n e1 marc o del
o se abstiene de emitir pronunciamiento, pese a procedimiento concursal, sean éstos de naturaleza
las bondades que dicho instrumento pueda tener. reorganizativa o liquidatoria. Empero, el problema se
presentaba cuando dichos acuerdos, alcanzados en la
e. Como colofon, la norrna comentada debilita el generalidad de veces con sumo esfuerzo, no eran
régimen de Sarantias cn s eneral, pero peor aun,
cumplidos por los deudores. Frente a esta hipotesis, las
pone mas trabas a las empresas que, con acciones del INDECOPI eran inexistentes, por cuanto
seriedad
sus atribuciones para declarar la nulidad del Plan no
y transparencia, desean ingresar a un proceso
estaban orientadas al incumplimiento del mismo, sino
de reestructuracion, que pudo haber st do
que regulaba situaciones no deseadas, atentatorias
optimo para la mayoria de sus acreedores y
contra el ordenamiento juridico, la normativa concursal
para ella misma.
o el ejercicio abusivo de un derecho.
Por todos los argume ntos expues tos, este
Pero, st el caso trataba de la inejecucion del
cxtremo del articulo 67.3° de la LGSC deberia ser
Plan de Reestructuracion, los acreedores perdian su
derogado, circunscribiendo de manera exceptional la
tiempo si acudian a la autoridad concursal. (,Que les
liberacion de 1os garantes, como consecuencia de la
quedaba? D irig ir sus fuerz as a ac c iones ju dic iale s
aprobacion del Plan, a una prevision contractual
de incumplimiento de contrato, procesos de
expresa y previa entre las partes.
conocimiento largos, tediosos y, casi siempre,
improductivos. Claro que la Junta de Acreedores, ante
2.4 E fectos del Incumplimi en to del Plan de
el incumplimiento del Plan, podia cambiar el destino
Reestructuracion
de la empresa a una liquidacion, pero igualmente sus
expectativas de cobro via una reorganizacion
«El in cu mp li mi e nto de los ter min os o
corporativa se vieron burladas y, lo que es peor, no
condiciones establecidos en el Plan determina la
amparadas por el Sistema Concursal.
declaraciñn de disolucion y liquidaciñn del deudor por
parte de la Comisiñn, siempre que tal declaracion haya
Ante este supuesto, la peor carga la recibian los
sido solicitada por un acreedor a la autoridad
acreedores con mejores expe ctativas de cobro
concursal.»
acreedor-es laborales y acreedores garantizados—,
pero sin mayoria en la Junta, quienes quedaban a
Si ya de po r s i so n alto s 1os cos to s de
merced de la decision de los acreedores mayot itarios
coordinacion entre acreedores y deudor antes del estado
de baja prelacion, que preferian seguir firmando
d c i n sol venc ia, s urg ido éste, la c ues ti on es mas
«cheques en blanco» a favor del deudor, en vista que
coiiiplcja: y no deja de serl o, a pesar de contar con un
para ellos mejor negoc io res u ltaba una r ees tru c tu
pi irncr compromiso de curnplimiento de obligaciones y
rac ion de poca expectativa —pero que perniitia
buen pcrfil empresai ial, c‹arno puede ser e1 Plan de
seguir «disfrazando» sus estados financieros— que
R eestructuracion. A ctccir ale A lan Schwartz:
una liquidacion con una segura pérdida total de sus
acreencias.
 Plan de Reestructuracion: Aprobaciñn...
El precitado articulo 67.4° de la LGSC intenta concursada: (a) en razon de un incumplimiento
cambiar esta perspectiva sombria y poco efectiva que propio; o (b) cuando sustente su pedido en un
dejo la derogada Ley de Reestructuracion Patrimonial incumplimiento del Plan que no le produce
en lo relativo a la inejecucion del Plan. En tal sentido, afectacion directa.
ante el incumplimiento de los términos y condiciones
del Plan de Reestructuracion aprobado —supuesto de La elaboracion de un Plan de Reesovcturacion no
hecho— acontecera la dec larac ion de disolucion y implica solamente el tratamiento de un ciiinulo de
liquidacion del deudor por parte de la Comision obligaciones pecuniarias del deudor frente a sus
consecuencia juridica—. Como senalfi el INDECOPI «de acreedores concursales, sino que, por el contrario,
c. ta to i-in a, s c h tis ca ‹la i- ma vo r seri cola d n 1 supone también, por parte de éstos,
ctun f›liin iento de ln ejccticion cfc Planes, asi como responsabilidades
gni antia a los uct‘c c‹lot es clvl cumplinl iento oyot tiino y cais as que voluntariamente asumen con el
o v ia s able c uada s a s ei u t ilix oin.s an te c 1
prop0sito de hacer viable la reestructuracifin del
i/icmnplin1ivnto ‹lv licho iilstt tuuento».” deudor. Justamente, la base del éxito de un Plan
reposa, en buena medida, en las facilidades y
En ese orden de ideas, mas que una sancion compromisos que
contra el deudor o la solucion a los males del sistema asumen los acreedores del deudor interesados en
conc urs al, como se ha cre ido que apunta e sta su reflotamiento, conio via factible para la
disposicion", la liquidacifin por incumplimiento del recuperacion de sus acreencias.
Plan es un mecanismo de protecc ion e fe c tiv o de
1os acreedores ante la eventual inejecuc ion de dicho En ese sentido, no serta razonable que un
acreedor que, por ejemplo, se comprometio a
otorgar un financiamiento a largo plazo al deudor,
solicite la
instrumento. liquidacion de este ultimo
producto de la inejecucion de un
Sin perjuicio de lo anterior, Plan de Ree s truc turacton que
no se
e1 articulo 67.4° presentaba algunas materializo, precisamente porque el
grietas en su regulacion que, por incumplimiento del deudor carecio de capital de
fortuna, fuer on tratadas por e I trabajo que iba a obtener del
IND ECOPI, a través de la Plan es un mecanismo financiamiento prometido. Por
Directiva N° 002-2003/CCO- esta razon, liace bien la Directiva
INDECOPI” de proiecciâii efectiro del INDECOPI en restar
Sobre este particular, nos legitimidad a estos acreedores
detendremos en tres asuntos que de los para pedir la liquidacion del
nos parecen los mas relevantes deudor.
para comprender plenainente los
acreedores ante la
alcances y efectos de la norrna Mayor po lé mica produce la
bajo analisis:
eventual iaejecuciâa de segunda causal de exclusion, esto
es, del acreedor que sustento su
(i) Supue stos de fa lt a de
dicho instrumento.” pedido en un incumplimiento del
legitimidad activa: El ultimo extremo del articulo Plan que no ie produce afectacifin directa. Ello,
67.4° establece que la acttiacion de la Coniision porque el Plan de Reestructuracion no es la
se producira «...siempre que tal declaracion haya niate ri a liz aci on de re laci ones j uri die as
sido solicitada por un acreedor a la autoridad ind iv idua 1es a c re e do r- de u do r, a is
concur sa1» . Para s aber qué acr eedores se ladas e independientes del resto de acreedores;
encuentran Ie8 iti mados para solic itar esa el Plan, contemp1a una comp lej a red de
declaracion, es menester precisar quiénes no relaciones patrimoniales y comerciales, de
tienen esta prerrogativa. Al respecto, la ejecucion y organizacion o gestion, que
Directiva N° 002-2003/CCO-INDECOPI, involucra a multiples s u j eto s —como son l
seitala que un acreedor no podr5 pedir la os admin is tra dor es, gerentes, accionistas y
liquidacion de la garantes de la empresa
 Paolo del Aguila Ruiz de Somocurcio
co nc u rs ada—. E n e se o rde n de ideas, e1
incump limiento de algun extremo del Plan,
cons i d er am os , si a fec ta a1 co nj unto de
participantes en el mismo.

Dejando de lado la discusion formulada al

inicio del prescnte trabajo. acerca de la
naturaleza contractual del Plan, este
De este modo, la declaracii›n de liquidacion no
instrumento, coiro cualquier otro acuerdo entre
inip lica una r eso1uc i on «i/›.s’s Each» de la
partes, debe ser respetado y c u nipli do a caba
Comision una vez informada del incumplimiento
lidad". En ta1 sentido, serta indistinto que e1
del deudor. Por el contrario, a través de la norma
incumplimiento afecte a1 acreedor «A» o a1
acotada, se sigue un proceso incidental, debiendo
acreedor «B» para aplicar la disposicion
el ac ree dor c urs ar pr imero a1 deu dor una
contenida en el articulo 67.4°; lo trascendente
comunicacion fehaciente por la que se le solicita
es que un extremo del Plan se inejecuto por
el cumplimiento en un plazo no menor de 15 dras
causa imputable al deudor, por lo que, desde un
habiles; o, en segundo lugar, otorgando a éste la
punto de vista conceptual, hay un
posibilidad de formular sus descargos, pudiendo
incumplimiento negocial; y desde un punto de
asi contradecir lo señalado por el solicitante y
vista practico, ese hecho puede desencadenar
demostrar que el supuesto incumplimiento no
incumplimientos progresivos del deudor sobre
ocurrio, o encontrar los medios adecuados para
e1 resto de términos del Plan aprobado.
subsanar tal incumplimiento. Todo lo anterior,
bajo una logica elemental del debido proceso que
Siendo la liquidacion por incumplimiento del debe asistir siempre a cualquier persona.
Plan un mecanismo de proteccion efectivo de los
acreedores ante la evenmal inejecuciñn de dicho
(ui) Alcances de la liquidacion por incumplimiento:
instrumento, no resulta consecuente restringirlo
Tema referido a la posibilidad de revertir la
a los acreedores «directainente afe ctados»,
decision de la Comisifin acerca de la
maxime cuando el Plan de Reestructuracion —
liquidacion como destino de1 concursado
como hemos visto— es un programa bastante
debido al incumplimiento del Plan, asunto que
complejo de obligaciones plurilaterales y
inicialmente presentfi varias dudas en la
acciones de organizacion de la concursada que no
autoridad concursal.
puede circunscribirse a la prestacion del deudor
para con un solo acreedor.
Como cuestion preliininar, es pertinente
advertir que la LGSC presenta tres categorias
En conclusion, pensamos que cualquier tipo de acerca de las causales de disolucion y
incumplimiento del Plan, sea de sus liquidacion: (a) las causales legales, supuestos
obligaciones pecuniarias o de pago en él previstos en la LGSC, por los cuales opera la
consignadas, o en los deberes de ges ti on de disolucion y liquidacion del deudor sin requerir
1os Srg a nos de administracion frente a uno o el pronunciamiento previo de la Junta de
mas acreedores; conllevara a que cualquiera de Acreedores; (b) las causales oficiosas,
ellos tenga law legitimidad suficiente para reguladas en el articulo 96° de la LGSC, son
solicitar ante el INDECOP I la declaracion de aquéllas que american el pronunciamiento de
liquidacion del citado deudor. oficio de la Comision, en vista de la falta de
impulso o incapacidad de la Junta de
Defensa del deudor: La Directiva N° 002-2003/ Acreedores para reunirse o adoptar acuerdos
CCO-INDECOPI establece con acierto que «... a sobre el futuro del deudor; y (c) las causales
M/n ‹lc no get r / n/ la r/efensiñn cii c / rleudo r voluntarias, estas son, nacidas por vo luntad
concur s mo, .sc r/e/ac concer/e/‘ a ñs/r' ti/ia de la Junta de Acreedores, conforme a las
iiltima facultades que le otorga la legislacion
concursal.’'

t 'odig‹i € i i’il A rtic u1o 1.3.6.1 “.- O bligato ried ad d cl co ntrato

1. os co n tia too son o[ I i'_ s t‹i r toe en c uai j to sc ljav a ex prcsad‹ en e1.1 os.
be t› res un i c q die I u fl eclu ra c i ‹» i e x}3 resa da res pot i de a 1 a \ o I rim tad comun de 1 as partes ' q uien nie ue esa coi nci denc i a detic p ro ba rla.
P i ra uu u c Jn1 i c u ‹: iñii rna.s dcl a11 u dii sob re e.etc tciiia sc p ilcde con su I tar cl sig tribute arti en1 o de1 a utoi . t I n fi ii. dos ca n4 in os: E n c ticn tros y dcscnc
uentros entre la I iq if i daci‹) n soc iclu ria \ I a I iq ui da ci on con c air sa 1. L n: ks medios de Derecli o Soc ieta rio: 1.i bro I tc› iueil aje a E n riq uc E I ia s Laro za .
1:di tora Norn ia s

i; iK w dc los
s»p«cstws
convocatoria. 1.u
l«tz
 Plan de Reestructuracion: Aprobaciñn...
Conlorn4e a lo preceptuado en la LG SC, las
causalcs legales pueden ser revertidas por la
Junta dc Acreedores, en tanto ésta logre salvar
la s ituacion patrimonial del concursado que lo
Her o a ese cstado”- las causales oficiosas no se
puccJen revertir, en tanto hay norma expresa en
ese sentido’’; mientras que las causales de
1 i qu idac to n vo luntarias, s i e mpr e pu e
den re ve rt irs e, to da vez que obedec e n a las
atribuciones que la normativa concursal
confiere a los acreedores para decidir acerca del
destino de su deudor.
;,Donde se ubica la liquidacion por
incumplimiento del Plan? Aparenteniente no
en c aj a e n n in guna de las c aus a les antes
mencionadas, es mas, la Directiva N° 002-
2003/ CCO-INDECOPI objeto de comentario
en el presente acapite, crea una categoria
especial para este supuesto de liquidacion. No
obstante, consideramos que la liquidacion por
incumplimiento del Plan de Reestructuracion,
es un supuesto nsas de las causales legales
previstas en la LGSC.
Las razones son tres: (a) opera de manera
directa
—lo que no implica «saltarse» el cumplimiento
de las reglas del debido proceso referidas
precedenternente— frente a un supuesto de
hecho concreto y comprobable; (b) no requiere
ni involucra pronunciamiento alguno de la
Junta de Acreedores, tan es asi que no se le
convoca ni pide opinifin previa; y (c) puede
revertirse ese estado por parte de la Junta en
cualquier momento, siempre que, a través de la
negociacisn y acuerdos que desarrolle este
colegiado, el deudor deje su situacifin de
incumplimiento por medio de las acciones
correctivas pet‘tinentes o la reforinulacisn
parcial o total del Plan de Reestructuracion.
Finalmente, cabe señalar que la regulacion del
articulo 67.4° tiene caracter supletorio a lo que la
Junta de Acreedores pueda decidir oportunamente
cuando apruebe el Plan de ReestructuraciSn. in ese
sentido, las soluciones primarias al incumplimiento del
Plan, estan reguladas en e1 mismo instrumento, con lo
cual se dan cauces consensuados para resolved este
irnpase y se evita también el impacto de la aplicacion
del articul‹a 67.4" de la L.GSC.
Lo expresado precedentemente es lo que dota
de contenido al articulo 73* de la LGSC", por cuanto
permite a las Juntas de Acreedores establecer en el
Plan. el fuero
—judicial o arbitral— a ser usados para la solucion cfc
controversias derivadas de la ejecucion o
interpretacion de dicho instrumento concursal. De ser
este el caso, los efectos de la regla prevista en el
articulo 67.4° se tornan casi inaplicables.
HL Conclusiones
1. La oponibilidad concursal es un rasgo
distintivo y necesario del Plan de
Reestructuracion, sin el cual éste careceria de
eficacia. Como todo instrumento concursal, el
Plan brinda una salida conc urs ada al prob
lema de la empres a y constituye el resultado
final alcanzado por la Junta de Acreedores a
través de un sistema de mayorias en la toma de
acuerdos, de obligatorio cumplimiento para
todos los acreedores y el propio deudor. De no
contar con el caracter de inoponible, no habria
incentivo para reducir los costos de
coordinacion entre acreedores y deudor con el
animo de arribar a soluciones colectivas de la
crisis, y e1 acuerdo y ejecucion de1 P lan de Re
es truc tura cio n e star ian condenados al
fracaso. Cabe advertir que la for mac ion y
naturaleza de1 P lan genera n inquietudes
pendientes de resolver.

50. 6 in los supuestos descritos en el parra fo precedente, en |a reunion de iustalaci on la .Junla podra clepir a sus autoridades. dcsi Friar a 1.1 iquidador,
aprobar el Uonvenio de Liquidacion, asi conio adoptar I a decision a que se refiere el litera1 c) del cuarto pan afo del presente articulo. La .lunta no [Podra
acordar la niodificacifin del destino del deudor o de su patrimonio, salvo que efectue las acciones necesa rias para dejar el estado de i iisuliciencio
patri rnonial o de cesacion de pa,•os previstos en la Ley corrio causales de 1 iqui dacion di rccta. La .1 unta debera demostrar a la € omisioli la rev'crsir n dc
tal situaciñn.
Articulo SO".- I nstal aciñn de la J u nta de Acreedores. (... )
50.5 Em caso la disol uc iñn y liquidacion del deudor se lia ya in iciado en ap licacion del Articulo 703 del Cñdi*o Procesa I Ci vil, o de los sripues toe
prev’istos en el 1 itcral b) del articulo 24.2 y en el articulo 28. 4, la I unta se desarrollai‘a en el | u*ar, dia y liora scñ a lados en un ica con› ocatoria. La .1
unta se podra instalar com la sofa asistencia de cualquier acreedor recouocido.
50.6 2n los supuestos descritos en el p3rrafo precedente, en la re uniñn de in sta lacion I a .1 rim ta podra ele*ir a sus autori dades. desk gijar n | 1 jq ui dador.
aprobar el Conven io de 1.iquidaciñn. asi conio adoptar la decisi fin a que se refiere el literal e) del c uarto parra fo del presente a rtic ulo. La .1 nuta rim
podra acordar la iaiodificaci on del desti no del de udor o de su patri icion io. salt o q ue ct cctue 1 a s ac ciouc s necesarias para dejar el estado dc ins

uficicncia

3.3 Articulo 96".- Dis of uciñn y liq uid acifin iniciad a por la Comisi fin (...) 96. 2
La di sol uc ion y liquidacion i n iciada por la Cornisi fin no puede 5ei revertida por dcci st in de 1 a .1 un ta.
A rtic ulo 73".-Sol uci fin d e controv ersias rel ativas al Pl an d e Iteestructuraciñn
73. 1 La .1 unta debera establecer en cl P I an de Reestructuracidn, el fuero jurisdicci‹ina1, sea cl judo cial o cl a rbitra1, para la sol uc ri dc cut lq ri ie
controversia que pudiera surg ir sobre su ejecuci fin o i nterpretaciñn. en defccto dc i ridic aci on. se cutcndcra q ue es e1 fuero j udic ial .
 Paolo del Aguila Ruiz de Somocurcio
2. El principio de proporcionalidad o igualdad
concursal se resiente ostensiblemente con la
participacion del acreedor tributario en el
procedimiento concursal, por cuanto la
legislation le atribuye privilegios especiales
que constituyen factores desequilibrantes para
la efectiva ejecucisn del Plan de
ReestructuraciSn. La eliniinacion de estos
privilegios, asi como la participacion del Estado
como acreedor tributario, deberia ser repensada
dentro del esquema concursal.
3. Las Sarantias del acreedor ceden terreno al
concurso emergente, por lo que el acreedor
garantizado no puede exigir el pago contra su
deudor ni afectar su patrimonio a través de las
Sarantias que posee, solamente puede/debe
participar del concurso como un acreedor de
tercer rango de prelaciñn, sujetandose a las
consideraciones y decisiones mayoritarias de la
Junta de Acreedores. Sin perjuicio de ello, el
acreedor garantizado tiene expedita la
posibilidad de ejecucion inmediata de los
terceros garantes
—reales o personales— del deudor concursado,
toda vez que la apro b acifin de1 Plan de
Reestrucmracion no los libera del
cumplimiento frente al acreedor. El efecto no
liberatorio de los garantes reviste dos
excepciones: la prevision contracmal y la
«voluntad» tacita del acreedor beneficiado, esta
ultima sumamente inadecuada.
4. Las consecuencias del incumplimiento del Plan
de Reestructuracion supone un mecanismo de
proteccion de los acreedores, mas que de
sancion del deudor. Siendo un supuesto de
causal legal de liquidacifin opera de manera
directa, no requiere ni involucra
pronunciamiento alguno de la Junta de
Acreedores y puede ser revertida por ella en
cualquier momento, siempre que el deudor deje
su situacion de incumplimiento. Conviene
apuntar que este mecanismo tiene caracter
supletorio a lo que la Junta de Acreedores
pueda decidir en su oportunidad, por lo que las
soluciones primat’ias al incumplimiento del
Plan seran reguladas en e1 mismo instrumento
concursal