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Recurso 2 PDF
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Recurso 1:
Mis emociones y consecuencias
Después la revisión que hicimos piensa en dos situaciones en las que hayas sentido emociones fuertes y
difíciles de manejar para ti. Luego, describe la situación, qué emoción estabas sintiendo, qué hiciste en ese
momento o cómo reaccionaste y qué pasó después (qué consecuencias tuvieron tus acciones o reacciones),
finalmente que reflexión tuviste después o ahora que hiciste la actividad. Puedes guiarte del ejemplo que
está en la primera columna
Consecuencia(s) Reflexión
Acción(es)
Situación Situación (qué pasó después (De qué me di
(cómo reaccioné,
(qué sentí) Emoción(es) a causa de mis cuenta después o
qué hice) acciones) ahora)
Mi hermana/o
Ejemplo: estaba triste y
Él/ella dejó de preocupada/o
Mi hermana/o Le reclamé su hablarme, me porque no sabía si
no ayuda en los Cólera. actitud y le grité en dio vergüenza papá seguiría con
quehaceres de la frente de mi familia. disculparme y no trabajo, si dejaría de
casa y para todo el supe qué le pasa. estudiar o si alguien
día en su cuarto. de la familia se
enferma.
Situación 1
Situación 2
Después de hacer ello puedes responder a la pregunta: ¿Qué mensaje tenían para ti las emociones que
identificaste en las 2 situaciones? Es decir, ¿cuál o cuáles eran sus funciones?
Recurso 2:
Mis emociones y consecuencias
Esta actividad es una adaptación de la propuesta realizada por Rojas , Escalante, Bermúdez , y Amaíz
(2017), quienes elaboraron una programa de alfabetización emocional como estrategia para el desarrollo de
competencias socio-emocionales de docentes en formación, para ello, tomando en cuenta las competencias
emocionales propuestas por Bisquerra, elaboraron una serie de preguntas con le objetivo de hacer un
diagnóstico de la situación emocional de las y los estudiantes. A partir de ello, realiza lo siguiente:
Primero: responde las preguntas que te permitirán reconocer de manera cualitativa tus emociones.
Segundo: Pregunta a personas que vivan el día a día contigo o que consideres que te conocen, sobre algunas
preguntas que quizá tengas dudas sobre ti o que no sabes cómo responder.
Tercero: Utiliza estas respuestas para tener otra perspectiva sobre ti, eso te ayudará a saber cómo proyectas
tus emociones y cómo te percibe la otra persona. Toma en cuenta que lo que te diga la otra persona, es solo
una perspectiva más, no es de definitivo.
Recurso 2:
Mis emociones y consecuencias
AUTONOMÍA
pensar eso?
EMOCIONAL
COMPETENCIA
clase y en tu comunidad?
SOCIAL
en el aula y en tu comunidad?
COMPETENCIA
PARA LA
VIDA Y EL
BIENESTAR
Recurso 3:
Mi mejor aliada: mi voz interior
Ahora que sabemos la estrecha relación entre nuestras emociones, pensamientos y acciones; tomemos en cuenta
que conocer cómo nos sentimos puede ayudarnos a ver cómo gestionamos nuestras emociones, algunas veces
intentamos ocultarlas, pero nuestras emociones se expresan a través del cuerpo, la mente y nuestras acciones, por
lo que es complejo esconderlas. Entonces, lo que sí podemos hacer es fortalecer nuestra capacidad de regularlas
para sentirnos bien y relacionarnos de manera saludable con las y los demás.
Esta actividad busca promover el manejo de nuestras emociones usando nuestra voz interior. actividad, vamos
a responder algunas preguntas y reflexionar, de acuerdo con las indicaciones que se señalan en la siguiente ficha:
2. Practica hablar contigo mismo (a) en voz alta. ¿Sobre qué tema sería? Puedes elegir el que desees. Tienes 1
minutos para hacerlo:
*Hasta aquí recuerda lo siguiente: Todos tenemos una “voz interior” que nos guía, son como pensamientos,
y puede ayudarnos a manejar nuestras emociones cuando sea necesario.
3. Ahora, imagina que estás en las situaciones siguientes y complétalas cambiando el pensamiento descrito
al lado izquierdo por uno que pueda ayudarte a controlar la emoción que podrías estar sintiendo. Toma en
cuenta el siguiente ejemplo:
Alejandro tiene mucho miedo de perder un examen. Se dice a sí mismo: “Voy a perder el examen.
El examen va a estar muy difícil. ¡No voy a poder!”. En este caso, Alejandro podría cambiar
sus pensamientos y decirse a sí mismo algo que le sirva para calmar su miedo, como: “Oye, no
te preocupes, nada más tienes que organizarte y estudiar. Te has esforzado, lo puedes lograr.
Tranquilízate, no te preocupes, no te preocupes”.
UNIDAD 2
1 : GESTIÓN
REENCUENTRO
DE EMOCIONES
PERSONAL
Sesión 3: Gestionando
Conectando con
mismi
emociones
entorno
Recurso 3:
Mi mejor aliada: mi voz interior
SITUACIÓN 1
Discutiste con tu hermano o hermana y estás ¿Cómo podrias cambiar tu pensamiento por
tan enojado que quieres pegarte. uno que te ayude a controlar la rabia?
Piensas:
Mi hermano es un
idiota.
¡Quiero pegarle! Me
las va a pagar por lo
que hizo.
SITUACIÓN 2
Estás triste porque no te invitaron a una ¿Cómo podrías cambiar tu pensamiento por
fiesta. uno que te ayude a sentirte menos triste?
Piensas:
Recurso 3:
Mi mejor aliada: mi voz interior
SITUACIÓN 3
Estás ansioso porque tienes que ir a un lugar ¿Cómo podrias cambiar tu pensamiento por
donde no conoces a nadie. uno que te ayude a controlar la ansiedad?
Piensas:
No conozco a nadie.
Nadie me va hablar.
Voy a estar solo todo
el tiempo ¡¿Qué voy
a hacer?!
SITUACIÓN 4
No quiero ir al
colegio.
Quiero quedarme
en mi casa.
No quiero ir al
colegio...
UNIDAD 2
1 : GESTIÓN
REENCUENTRO
DE EMOCIONES
PERSONAL
Sesión 3: Gestionando
Conectando con
mismi
emociones
entorno
Recurso 3:
Mi mejor aliada: mi voz interior
¿En qué situaciones crees que tendrás que usar tu voz interior?
*Recuerda que nuestra voz interior nos puede ayudar a generar pensamientos que medien entre las
emociones y las acciones que podríamos realizar de manera impulsiva. Nuestra voz interior “retarda” esas
acciones y ayuda a que podamos parar, entender mejor la situación y, por lo tanto, tener reacciones más
reguladas y saludables.
5. ¿Qué otras estrategias crees que podrían funcionar? Y que ayuden a controlar tus emociones de manera
constructiva y que no impliquen hacerse daño o hacerles daño a otras personas
• Algunas pueden ser respirar profundo, cerrar los ojos y contar hasta 10, hacer algo que te relaje como
salir a correr, cantar o tomar agua, hablar de la situación con un amigo, entre otras.
Después de realizar la actividad, quizá podamos notar en nosotros (as) que hay algunas
emociones que son más intensas que otras, así como temas o situaciones que nos afectan más
que a otros (as). En esos casos, es importante recordar que no hay problema en sentir que
a veces no podemos controlarnos, recuerda que siempre que podamos identificar cómo nos
sentimos y comprender qué situaciones nos afectan más, podremos aceptarnos y reconocer
que hay situaciones en las que necesitaremos de estrategias específicas o, incluso, requerir
ayuda profesional para sentirnos mejor; y si es así, no hay problema, pedir ayuda es una manera
de gestionar nuestras emociones y hacernos cargo de ellas