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CICLOS ATMOSFÉRICOS

Son aquellos que son regulados por los movimientos atmosféricos y reacciones químicas que se
dan en ella

En la biosfera la materia es limitada, de manera que su reciclaje es un punto clave del


mantenimiento de la vida en la tierra, de otro modo los nutrientes se agotarían y la vida
desaparecería.

Los movimientos de sustancias inorgánicas se conocen como ciclos biogeoquímicos. Porque


implican componentes biológicos, así como geológicos del ecosistema.

Los componentes del entorno geológicos son la atmósfera constituida fundamentalmente por
gases, que incluyen el vapor de agua.

La litosfera la corteza sólida de la tierra.

Y la hidrosfera que componen los océanos, lagos y ríos que cubren ¾ partes de la superficie
terrestre.

Los componentes biológicos de los ciclos biogeoquímicos incluyen los productores, consumidores
y degradadores.

CICLO DEL CARBONO:

• El carbono es un elemento esencial en los cuerpos de los seres vivos. También es


económicamente importante para los humanos modernos, en la forma de combustibles fósiles.

• Los procesos geológicos lentos, entre los que están la formación de rocas sedimentarias y
combustibles fósiles, contribuyen al ciclo del carbono a lo largo de escalas prolongadas de tiempo.

El carbono es el cuarto elemento más abundante en el universo y es fundamental para la vida, ya


que cada célula de cada ser vivo en el planeta contiene Carbono. Existen básicamente dos formas
de carbono, en su forma inorgánica está presente en la materia no viva, dentro del manto de la
tierra, disuelto en el agua del mar, en las rocas, en la tierra y en el aire. En su forma orgánica está
presente en los organismos vivos. El carbono de la tierra pasa constantemente de una de estas
formas a otra en un proceso conocido como ciclo del carbono, que es fundamental para la
regulación del clima y para las necesidades básicas que sostienen la vida en el planeta. Este ciclo es
un proceso biogeoquímico en el que el carbono se intercambia entre la atmosfera, la litósfera y la
hidrósfera de la tierra.

En la atmósfera se presenta en la forma del Bióxido de Carbono al combinarse con el oxígeno, en


la hidrósfera en forma de ácido carbónico y en la litósfera en forma de rocas carbonatadas,
petróleo y carbón.

Mediante las cadenas alimenticias los animales herbívoros toman el carbono de las plantas que
consumen, y los carnívoros lo toman de otros animales que le sirven de alimento, además, los
animales agregan bióxido de carbono a la atmósfera cuando respiran. Las plantas absorben el
carbono del agua, aire o suelo y luego devuelven una pequeña parte de carbono a través de la
respiración vegetal, los árboles son considerados como sumideros de carbono, porque obtienen
más carbono de la atmósfera que el que generan, los océanos también son sumideros de carbono,
porque la vida marina absorbe más carbono que el que liberan.

Cuando los seres vivos en el planeta mueren, el carbono que está en su cuerpo es absorbido por la
tierra hacia la corteza terrestre, reteniendo durante millones de años, y con el tiempo es devuelto
a la atmósfera por medio de erupciones volcánicas.

Otras fuentes que agregan carbono a la atmósfera se dan por la explotación de combustibles
fósiles como el petróleo que sirven para sostener las actividades industriales y de transporte, pero
es una emisión de carbono contaminado que representa una fuerte agresión para el planeta. El
ciclo del carbono es un proceso se repite de forma ininterrumpida y es fundamental para la vida
del planeta.

Ininterrumpido: Que no ha sido interrumpido, que es continuo.

Sumideros: En la lucha contra el cambio climático, no sólo el ser humano trata de


contrarrestar los efectos del calentamiento global con medidas de mitigación y
adaptación, sino que la propia naturaleza tiene sus armas para intentar que la
temperatura media del planeta no siga aumentando.
Para ello existen los sumideros de carbono, depósitos naturales (océanos y bosques)
y artificiales (ciertas tecnologías y productos químicos) que absorben y capturan el
dióxido de carbono (CO2) de la atmósfera reduciendo así su concentración en el aire.
Los océanos, principales sumideros de carbono
Los océanos son considerados los principales sumideros de carbono naturales, ya
que son capaces de absorber alrededor del 50 % del carbono emitido a la atmósfera.
En concreto, el plancton, los corales, los peces, las algas y otras bacterias fotosintéticas
son los organismos encargados de esta captura.
Los océanos son los principales sumideros de carbono y absorben hasta el 50 % del CO2
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En el caso de los bosques y otras áreas forestales, el secuestro de carbono se realiza
mediante la fotosíntesis. Las especies vegetales absorben CO2 de la atmósfera,
almacenan una parte del carbono y devuelven oxígeno a la atmósfera.
El problema de los sumideros de carbono naturales es que tienen un límite, provocando
la acidificación de los océanos cuando se sobrepasa. Esta acidificación consiste en
un descenso del pH provocado por la absorción de dióxido de carbono.
La acidificación de los océanos impacta negativamente en especies como corales,
algas, mariscos y moluscos, que se ven debilitados y en muchos casos enferman y
mueren.
Técnicas artificiales para realizar el secuestro de carbono
Para apoyar y acelerar el proceso natural de secuestro de carbono existen técnicas
artificiales que permiten extraer carbono de la atmósfera y almacenarlo en la corteza
terrestre.
Sin embargo, estas tecnologías aún no han adquirido la eficiencia ni la madurez
necesaria para afrontar los cambios radicales que exige el cambio climático,
llegando incluso a producirse fugas de carbono en los casos más críticos.
En conclusión, los sumideros de carbono representan una ayuda importante para
frenar el cambio climático, pero no lo solucionan. Es imprescindible el abandono de la
dependencia de los combustibles fósiles y la apuesta firme  por las energías renovables.

Ciclo del agua:


Agua en tres estados: Líquido, sólido y gaseoso.
El ciclo del agua comienza con la evaporación, cuan el sol calienta mucho el agua se
evapora, pasa de líquido a gas, a vapor de agua. Este vapor sube hacia la atmósfera
hasta que se enfría y se condensa, convirtiéndose en líquido nuevamente y formando
nubes. Las nubes viajan por el aire acumulando más gotas de agua, aumentando su
tamaño y peso, hasta que llega la siguiente fase del ciclo del agua: La precipitación, se
presenta en forma de lluvia, granizo o nieve. Luego llega el retorno, como última fase. El
agua ahora se encuentra en la superficie de la tierra, en ríos, mares y lagos. Y así
comienza su evaporación de nuevo.

HUMANISTICA

El término Moral se deriva del vocablo latino "mor, moris" derivada de "modus"(que quiere
decir medida, tasa, de donde proviene 'mesura'), y ciertamente significa costumbre. Los
griegos, por su parte, usaban el término "ethos"para referirse a la reflexión(domina más la
idea de ciencia), sobre las costumbres(como reglas o principios). Sin embargo, en ambos
casos no se refieren a las costumbres pasajeras, temporales, cambiantes(Vgr.: modo de
comer, de vestirse, de bailar, etc.), sino a las costumbres duraderas, intemporales, que se
dan o repiten en todas las culturas como: decir la verdad, respetar a las personas y sus
bienes(no robar), pagar las deudas, etc. Las definiciones de ética y moral ya han sido dadas
por el maestro. Entonces, ¿de dónde surge la diferencia entre ética y moral? De sus mismos
usos históricos originales. La moral es la práctica de los valores, sean buenos o malos(Vgr.:
'decir la verdad' es un acto o hecho moralmente bueno, como 'mentir' es un acto o hecho
moralmente malo, etc.) La ética, en cambio, es el estudio filosófico de la moral; es decir,
trata sobre los actos buenos y malos y explica por qué un un acto es moralmente bueno o
moralmente malo. Vgr.: "Decir la verdad", es un acto moralmente bueno porque fortalece la
fe y confianza en las personas, evita el daño que se puede causar a sí mismo y a los demás,
ayuda a corregir conductas y errores, etc. De manera que son términos diferentes.
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