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DIPLOMADO EDUCACIÓN FINANCIERA.

Tema I. Antecedentes de la Educación Financiera.

I.I ¿Qué es Educación Financiera?

La Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE) define a


la Educación Financiera como “el proceso mediante el cual, tanto los
consumidores como los inversionistas financieros logran un mejor
conocimiento de los diferentes productos financieros, sus riesgos y
beneficios, y mediante la información, desarrollan habilidades que les
permiten la toma de decisiones de manera informada, lo que deriva en un
mayor bienestar económico”.

La Comisión Nacional del Mercado de Valores de España la define de la siguiente


manera: “La educación financiera permite a los individuos mejorar la comprensión
de conceptos y productos financieros, prevenir el fraude, tomar decisiones
adecuadas a sus circunstancias y necesidades y evitar situaciones indeseables
derivadas bien de un endeudamiento excesivo o de posiciones de riesgo
inadecuadas”.

La Estrategia Nacional de Educación Financiera (ENEF) define a la Educación


Financiera como “el conjunto de acciones necesarias para que la población
adquiera aptitudes, habilidades y conocimientos que le permitan administrar y
planear sus finanzas personales, así como usar de manera óptima los productos y
servicios que ofrece el sistema financiero en beneficio de sus intereses
personales, familiares, laborales, profesionales, y de su negocio”.

Para definir a la Educación Financiera, es útil analizar a los dos conceptos que la
integran, “Educación” y “Financiera”. Por un lado la Educación se refiere a la
transmisión de conocimientos, habilidades, valores y hábitos para formar un
aprendizaje determinado. Por otro lado, Financiera se refiere al uso de las
finanzas, es decir, el intercambio de bienes de capital, ya sea entre individuos,
entre empresas o entre estos y gobiernos. De esta manera, podemos decir que
hablamos de transmisión de conocimientos financieros para tener un aprendizaje
en esta materia. 

Para fines del presente diplomado, se entenderá a la Educación Financiera,


como el conjunto de conocimientos, habilidades y prácticas, útiles para
comprender mejor los conceptos y productos financieros con la correcta
administración de los ingresos que se obtienen, a fin de tomar de tomar
decisiones mejor informadas.

Es necesario que las familias tengan una correcta educación financiera para una
mejorar su situación económica, tanto en lo personal como en lo familiar, de ahí la
importancia de esta materia. En todas las dimensiones se debe de buscar un sólo
fin, lograr una mejor situación financiera a la que se tenía en el pasado, es decir,
una transformación en el bienestar económico.

Como se ha citado, la finalidad de la educación financiera es tomar decisiones


informadas con relación a los productos y servicios que ofrecen las entidades
financieras para transformar nuestras vidas. En el plano individual, el buen manejo
que tiene una persona sobre sus finanzas, impacta positivamente en su calidad de
vida y en la de su familia, ya que:

• Promueve la cultura del ahorro.

• Genera conciencia sobre cuándo y cómo es conveniente endeudarse.

• Permite comparar productos financieros.

• Otorga protección a los consumidores que al estar informados, demandan


mayor transparencia en los servicios financieros.

II. Panorama actual de la Educación Financiera.

En los últimos años se han intensificado, a nivel mundial, los esfuerzos para que
las personas obtengan una Educación Financiera adecuada, con las concuentes
habilidades y conocimientos para una eficiente planeacion y administración de sus
finanzas.

El tema cobra relevancia día a día por el sofisticado desarrollo de servicios y


productos financieros; un ejemplo son los novedosos Finance Technology o
FinTech, término utilizado para denominar a las empresas que ofrecen productos y
servicios financieros, haciendo uso de tecnologías de la información y
comunicación, como páginas de internet, redes sociales y aplicaciones para
celulares, que de no ser bien comprendidos, pueden significar, más que una
oportunidad, un riesgo para el consumidor.

Desde la visión gubernamental existen instancias de control como el Consejo


Nacional de Inclusión Financiera (CNIF), organismo de consulta, asesoría y
coordinación entre las autoridades financieras del país que tiene como objetivo,
formular, poner en marcha y dar seguimiento a la Política Nacional de Inclusión
Financiera (PNIF). https://bit.ly/2RqPqEf

El Comité de Educación Financiera (CEF), es la instancia de coordinación


responsable del desarrollo e implementación de la ENEF. Por iniciativa de la
Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP), dicho Comité se crea el 30 de
mayo de 2011, como grupo de coordinación de las políticas públicas en materia de
Educación Financiera.
El 9 de enero de 2014, con la promulgación de la Reforma Financiera, el CEF se
eleva a rango de ley, incluyéndola en la Ley para Regular las Agrupaciones
Financieras (LRAF).

En dicha ley se establece que una de las funciones del CEF es definir las políticas
de educación financiera y preparar la Estrategia Nacional de Educación
Financiera.

El 30 de mayo de 2011, se crea el Comité de Educación Financiera (CEF),


instancia de coordinación responsable del desarrollo e implementación de la
ENEF. Es el 9 de enero de 2014, con la promulgación de la Reforma Financiera
que el CEF se incluye a nivel de ley, en la Ley para Regular las Agrupaciones
Financieras (LRAF), como quien debe definir las políticas de educación financiera
y encargarse de promover la Estrategia Nacional de Educación Financiera.

Estrategia Nacional de Educación Financiera (ENEF):

La ENEF, es una herramienta de política pública diseñada por el CEF, con el


objetivo de guiar los esfuerzos del país y fomentar el bienestar financiero de la
población a través de un enfoque multidisciplinario, de colaboración entre
instituciones gubernamentales, del sector privado, organizaciones no
gubernamentales y organismos internacionales.

La visión de dicha estrategia es que “todos los mexicanos, cuenten con las
herramientas necesarias para lograr un correcto manejo y planeación de sus
finanzas personales y en su caso, las de su negocio, a partir del conocimiento de
los beneficios y riesgos de los distintos productos y servicios financieros existentes
en el mercado”.

Una de las acciones más importantes del Comité de Educación Financiera (CEF)
fue promover la introducción de contenidos de educación financiera en el currículo
obligatorio de la educación básica, al considerarlo como un eje fundamental.

La ENEF cuenta con seis líneas de acción del CEF que consideran las diferentes
etapas de la vida y las circunstancias personales de la población y de las
empresas, así como el contexto y las condiciones sociodemográficas de
segmentos específicos que permitan maximizar el impacto de la estrategia. Las
líneas de acción de la ENEF se complementan y refuerzan entre ellas para incluir
a toda la población y lograr un ecosistema integral en el que la educación
financiera sirva como motor para incrementar el bienestar de la sociedad en su
conjunto.

• Fomentar el desarrollo de competencias financieras en la educación


obligatoria, desde edades tempranas.
• Desarrollar, en coordinación con la iniciativa privada y no gubernamental,
programas de educación financiera que atiendan las necesidades específicas de
cada segmento de la población y de las empresas.
· Acompañar los esfuerzos de protección al consumidor con acciones de
educación financiera que promuevan una cultura de consumo financiero, para que
la población compare efectivamente la oferta de productos y servicios financieros
antes de contratarlos.

· Introducir nuevos canales de acercamiento y difusión para lograr que la


población se familiarice con el uso de productos, servicios y canales financieros
más eficientemente.

· Explotar el uso de innovaciones tecnológicas en el sector financiero


(sector FinTech y servicios financieros digitales) para identificar sinergias que
promuevan la Educación Financiera en la población.

· Generar datos, información y mediciones para evaluar y en su caso,


modificar y mejorar, los esfuerzos de educación financiera.

La ENEF, fue desarrollada por el CEF y constituye una herramienta de política


pública útil para guiar los esfuerzos y promover el bienestar financiero a través de
un enfoque multidisciplinario y de colaboración entre instituciones
gubernamentales, del sector privado, de organizaciones no gubernamentales y de
organismos internacionales.

La visión de dicha estrategia es que “todos los mexicanos, independientemente


de su contexto, cuenten con las herramientas necesarias para lograr un
correcto manejo y planeación de sus finanzas personales y las de su
negocio, a partir del conocimiento de los beneficios y riesgos de los
distintos productos y servicios financieros existentes en el mercado”. En ese
sentido, la ENEF sienta las bases de las acciones para acercar a los individuos la
información y las herramientas necesarias para que administren y planeen
correctamente sus finanzas, así como las de los negocios. Además, es necesario
trabajar en la conectividad e infraestructura financiera, así como en disminuir la
desconfianza de la población hacia el sistema financiero.

El Consejo Nacional de Inclusión Financiera (CONAIF) fue creado por Acuerdo


Presidencial e incorporado a la Ley para Regular las Agrupaciones Financieras,
(Capítulo III, Artículo 183 al 187).

Los miembros del CONAIF son:

· El Secretario de Hacienda y Crédito Público.


· El Gobernador del Banco de México, así como un Subgobernador del
propio Banco.
· El Subsecretario de Hacienda y Crédito Público.
· El Presidente de la Comisión Nacional de Protección y Defensa de los
Usuarios de Servicios Financieros (CONDUSEF).
· El Presidente de la Comisión Nacional Bancaria y de Valores (CNBV).
· El Presidente de la Comisión Nacional de Seguros y Fianzas (CNSF).
· El Presidente de la Comisión Nacional del Sistema de Ahorro para el Retiro
(CONSAR).
· El Secretario Ejecutivo del Instituto para la Protección al Ahorro Bancario
(IPAB).
· El Tesorero de la Federación.
· La CNBV, funge como Secretario Ejecutivo del CONAIF.

Tema II. La inclusion financiera.

La inclusión financiera se refiere al acceso que las personas pueden tener al


sistema financiero formal, así como al uso adecuado de productos y
servicios financieros como lo es el ahorro, el crédito, los seguros y las
cuentas de ahorro para el retiro, entre otros.

La Inclusión Financiera propicia un mejor manejo de los recursos y acceso a


productos y servicios financieros; una más pronta recuperación ante situaciones
de inestabilidad de la economía, así como la inclusión social de los individuos; de
las micro, pequeñas y medianas empresas (MiPyMEs) y de otro tipo de
organizaciones.

De acuerdo con la CNBV, la inclusión financiera es necesaria porque propicia una


menor pobreza y desigualdad y un mayor crecimiento económico. El acceso al
crédito permite que los individuos y hogares adquieran patrimonio —como una
casa o un vehículo—, bienes duraderos; que emprendan alguna actividad
productiva que genere ingresos; que estén financieramente protegidos ante
emergencias o imprevistos, y que cuenten con los recursos suficientes para vivir
tranquilos durante su jubilación. Además, en el caso de las empresas, las acerca a
mejores posibilidades de crecimiento al permitirles comprar maquinaria, invertir en
inventario y mejorar sus instalaciones, entre otros beneficios.

Un individuo será incluido financieramente cuando tenga acceso a un servicio


financiero formal (de instituciones reguladas) de manera transparente (protección
al consumidor), a la vez que tenga la posibilidad de adquirir la habilidad de
seleccionar los productos y los servicios que más le convengan. La Inclusión
Financiera es un importante mecanismo que permite incrementar el bienestar de la
población, al poder desplazar los flujos de ingreso y consumo por medio del ahorro
y el crédito, así como la acumulación de activos y la creación de un fondo para la
vejez.

No obstante a esta situación, 54 millones de personas de 18 a 70 años (68%)


tienen al menos un producto financiero, lo que representa sólo 2 millones más de
personas con respecto a 2015, es decir un incremento de 2 millones en tres años.
Sólo el 47 por ciento de los adultos en México tienen una cuenta en un banco o
institución financiera. (Tercera Encuesta Nacional de Inclusión Financiera 2018).

La vulnerabilidad de las personas que no tienen acceso al mercado financiero


formal es amplia, y se observa es que se debe incrementar la inclusión
financiera.  Cabe señalar que la falta de inclusión financiera se atribuye a distintos
factores, entre otros, los relacionados con la demanda y oferta de servicios
financieros.

Una mayor inclusión financiera es de interés para todos los agentes que se
desempeñan en el sector financiero. Pero para alcanzar este fin, es necesario que
los intermediarios públicos, privados y sociales se den a la tarea de proporcionar
las bases de Educación Financiera para que los usuarios busquen y utilicen
acertadamente los productos y servicios que les resulten más convenientes.

Podemos decir que las políticas y programas de inclusión financiera giran en torno
a cuatro pilares:

· El acceso al sistema financiero


· El uso de productos  y servicios financieros
· La Educación Financiera
· La protección al usuario de servicios financieros

Estos cuatro pilares se sustentan en datos precisos, objetivos y oportunos, para


lograr los resultados esperados. Esto implica que debe existir una adecuada
medición para, en una primera instancia, tener un diagnóstico inicial y
posteriormente evaluar el impacto de las acciones emprendidas y, en su caso,
hacer los cambios necesarios y lograr el objeto de dichas acciones.

La educación es un elemento clave para la inclusión financiera, que permite hacer


un uso eficiente y consciente de los productos y servicios financieros. Cuando las
personas tienen acceso al Sistema Financiero tienen mayores oportunidades de
escoger las opciones que favorezcan su desarrollo, como invertir en su educación,
en un negocio, en su salud o ahorrar para su retiro.

Tanto la Educación Financiera, como la Inclusión Financiera, son un fuerte soporte


del proceso de bancarización. El término bancarización es utilizado con frecuencia
para hacer referencia a la incorporación al sistema financiero de grupos de
escasos recursos del sector informal de la economía, que tradicionalmente han
sido desatendidos por la banca comercial.

II.II. Medición de la Inclusión Financiera

Con la colaboración y participación de las entidades que conforman el Consejo


Nacional de Inclusión Financiera, la CNBV y el Instituto Nacional de Estadística y
Geografía (INEGI), a partir de 2012 se lleva a cabo cada tres años la Encuesta
Nacional de Inclusión Financiera (ENIF). Esta encuesta permite generar datos de
acceso y de uso de productos y servicios financieros, así como de protección al
usuario de servicios financieros y también de Educación Financiera.

Una de las nuevas características de la ENIF 2018 fue responder tanto al mandato
de la Política Nacional de Inclusión Financiera, como al de la Estrategia Nacional
de Educación Financiera.

En este sentido, el objetivo de la línea de acción 6 de la Política es generar datos y


mediciones para evaluar los esfuerzos e identificar áreas de oportunidad que
contribuyan al diseño de programas de Educación Financiera. Por su parte, dicha
estrategia indica que se deben generar datos, información y mediciones sobre
Educación Financiera y que se incorporarán a la ENIF la medición de
comportamientos y capacidades financiera, esa sería su importancia para la
Educación Financiera.

Es evidente que la inclusión financiera es un elemento clave para reducir la


pobreza e impulsar la prosperidad económica y social. Por ello, es importante que
los esfuerzos en promover mayor acceso y uso de servicios financieros vaya
acompañada de una regulación propicia que garantice que los proveedores de
servicios quieran un trato justo y un servicio con calidad a sus usuarios; también
es necesario contar con programas de educación financiera que faciliten las
herramientas necesarias para que las personas tomen decisiones informadas
sobre sus recursos financieros.

También, una infraestructura adecuada, es fundamental para permitir el acceso a


los servicios financieros, con lo cual se cierra la brecha de oferta y demanda de
servicios financieros.

Por ello, este capítulo presenta los principales indicadores sobre la infraestructura
física financiera y la cobertura financiera en el país, asociados a la dimensión de
acceso de la inclusión financiera. Si bien los canales tradicionales (sucursales y
cajeros) han tenido un incremento en cuanto a la cobertura que ofrecen, no han
logrado expandirse por todo el territorio mexicano dado que los costos asociados a
ello son significativos para las instituciones financieras y éstas han migrado a
modelos de negocio más rentables como son los corresponsales; no obstante,
México presenta un reto en materia de infraestructura tecnológica para lograr
conectividad en la totalidad del territorio del país; ante esto, es necesario compartir
recursos para lograr no solo conectividad en todas las comunidades del país, sino
también la provisión de servicios financieros a través de modelos de negocio
donde varias instituciones compartan los costos operativos y financieros que esto
representa.

Dados los avances tecnológicos y las brechas generacionales, el uso de servicios


financieros digitales va tomando relevancia y los proveedores van migrando a
ofrecer servicios tales como la banca electrónica, que ha permitido que se puedan
llegar a realizar algunas operaciones financieras a través de los celulares o
computadoras. Por ello, se vislumbra que en un futuro los servicios y productos
financieros se ofrezcan cada vez más a través de canales diferentes a los
tradicionales.

II.III  Comportamiento Financiero.

En cuanto a la infraestructura, para finales de 2018, había 17,290 sucursales, un


aumento del 1 por ciento con respecto al año anterior. Un total de 54,514 cajeros,
con un incremento del 7.5%. En la captación de cuentas, se incrementó en un 6%
para alcanzar la cifra de 101’358,270 de cuentas, los créditos incrementaron en un
3.4% con 54’574,428. Las cuentas de Ahorro para el Retiro, alcanzaron
62’879,959 lo que significó un aumento del 4.8%.

La Inclusión Financiera es un elemento más para reducir la pobreza e impulsar


la prosperidad económica y social.

Es importante que los esfuerzos en promover mayor acceso y uso de servicios


financieros vayan acompañados de una regulación que garantice que los
proveedores de servicios proporcionen un trato justo y un servicio de calidad a sus
usuarios, que facilite a las personas la toma decisiones informadas sobre sus
recursos financieros.

Tomado como base la información de sucursales registradas, la cobertura


municipal está en el orden de los 51%, con una cobertura demográfica de 92%.

El aumento de las sucursales bancarias, permitió el incremento de cobertura en


municipios ubicados en los estados de Chiapas, Guerrero, Estado de México,
Michoacán, Oaxaca, Puebla, Veracruz y Yucatán, por ejemplo.

La Ciudad de México es la entidad con el mayor número de sucursales, con 1,942;


por su parte, el municipio con más sucursales es Guadalajara con 417.

El porcentaje de la población con acceso a al menos a una sucursal a una


distancia de 4 kilómetros en promedio, fue de 76.1% y el del acceso de
localidades con más de 20 habitantes del 18.9%.

Banca multiple.

La CNBV y  la SHCP reportan que en 2019 los activos totales del sector de Banca
Múltiple alcanzaron los $9,679 miles de millones de pesos (mmdp), lo que
representó un incremento anual real de 1.5%.

La cartera total de crédito del sector de Banca Múltiple alcanzó un saldo de


$5,336 mmdp al cierre de julio, con un crecimiento anual real de 3.6% respecto al
mismo mes de 2018.
La captación total de recursos sumó $5,887 mmdp, lo que significó un aumento
anual real de 4.1%. De este monto, 57.2% corresponde a depósitos de exigibilidad
inmediata, los cuales presentaron un crecimiento anual real de 2.0%.
El resultado neto del sector fue de $96 mmdp, 4.1% mayor, en términos reales,
respecto a julio de 2018; contribuyendo a un rendimiento sobre activos (ROA) de
1.72% y un rendimiento sobre capital contable (ROE) de
16.04%. https://www.gob.mx/cms/uploads/attachment/file/489470/Comunicado_de
_Prensa_BM_julio_2019.pdf

La Banca de Desarrollo
De acuerdo a la CNBV, todas las instituciones de banca de desarrollo obtuvieron
resultados positivos al cierre del año de 2018. El sector de la banca de
desarrollo se compone de 6 instituciones: Banco del Ahorro Nacional y
Servicios Financieros S.N.C. (Bansefi), hoy Banco del Bienestar; Banco
Nacional de Comercio Exterior S.N.C (Bancomext); Banco Nacional de Obras
y Servicios Públicos S.N.C (Banobras); Banco Nacional del Ejército, Fuerza
Aérea y Armada S.N.C (Banjército); Nacional Financiera S.N.C. (Nafin); y
Sociedad Hipotecaria Federal S.N.C. (SHF).

Las instituciones de este sector apoyan con crédito a empresas, instituciones


financieras y a entidades públicas. Los pasivos del sector se ubicaron en
$1,905 mmdp, lo que significó un aumento de $117 mmdp, es decir, 6.6% más con
respecto a 2017. Dicho monto representó 91.9% de los activos totales. El capital
contable se ubicó en $167 mmdp, presentando un incremento de
$19 mmdp (12.8%) con relación al año anterior. Dicho crecimiento se explica por
la acumulación de utilidades y las aportaciones de capital.

En cuanto a resultados, todas las Instituciones de Banca de Desarrollo (IBD)


obtuvieron utilidades netas positivas al cierre de 2018. Los resultados se debieron,
principalmente, al incremento en el margen financiero y disminución en la
constitución de estimaciones preventivas para riesgos crediticios, así como en los
gastos de administración y promoción.

En este periodo, los créditos comerciales crecieron 10.8%, que lo convierte en el


portafolio más importante al representar el 94.6% de la cartera total, con un monto
de $1,001 mmdp. Banobras cuenta con una participación en este rubro de 43.3%,
seguido de Nafin con 25.9% y Bancomext con 23%.

La Banca de Desarrollo,está integrada por las instituciones del sector financiero


que apoyan con crédito a empresas, instituciones financieras y a entidades
públicas.

Sociedades cooperativas de ahorro y préstamo


La Comisión Nacional Bancaria y de Valores en su información financiera de 2019,
reportó que en el sector de Sociedades Cooperativas de Ahorro y Préstamo
(SOCAPs), se encuentra integrado por 157 entidades autorizadas y en operación.

Durante el ejercicio 2018, se revocaron las autorizaciones de dos SOCAP, y se


dejaron sin efecto las autorizaciones de dos más, debido a que culminó el proceso
de fusión con otras sociedades autorizadas.

Asimismo, se otorgó la autorización a cuatro sociedades, para continuar


realizando operaciones de ahorro y préstamo en términos de la LRASCAP.
Únicamente, las SOCAPs autorizadas y supervisadas por la CNBV cuentan con la
cobertura del seguro de depósito del Fondo de Protección (Focoop) hasta por una
cantidad equivalente a 25,000 UDIS por ahorrador, como se establece en la Ley
para Regular las Actividades de las Sociedades Cooperativas de Ahorro y
Préstamo (LRASCAP).

El Comité Técnico del Focoop se integra por representantes del sector y sus


recursos provienen principalmente de aportaciones de las
mismas SOCAPs autorizadas. (http://focoop.com.mx/)

Canales de acceso

En materia de Inclusión Financiera, se da a conocer el avance a nivel estatal, en


los siguientes aspectos:

Acceso:
 Canales por cada 10 mil adultos, incluye sucursales, corresponsales,
cajeros y terminales punto de venta.

 Cobertura por tipo de municipio, urbano y rural: sin sucursal (ni


corresponsal), con sucursal, y sin sucursal pero con al menos un
corresponsal.
 
Uso:
 Captación: número total de cuentas de depósito y ahorro por cada 10 mil
adultos de las instituciones financieras y número de cuentas ligadas a un
celular por cada 10 mil adultos.

 Crédito: número total de contratos de crédito por cada 10 mil adultos


(incluye los sectores de banca y ahorro y crédito popular).

 Distribución de contratos de crédito, por producto y de acuerdo al sector al


que pertenecen las instituciones (banca y entidades de ahorro y crédito
popular).
Para conocer la distribución de la información se puede consultar la siguiente base
de datos: https://www.gob.mx/cnbv/acciones-y-programas/bases-de-datos-de-
inclusion-financiera

Indicadores de infraestructura financiera a nivel nacional:

En cuanto a la evolución de los puntos o canales de acceso al sistema financiero


el Reporte Nacional de Inclusión Financiera 2019 reporta lo siguiente:

El 85% de la población adulta habita en localidades que se encuentran a menos


de 2 km de un punto de acceso. Esta proporción crece a 90% al considerar un
radio de 4 km, 95% si el radio se amplía a 7 km y 98% si se trata de municipios.

Ahorro o captación. Referente al número de cuentas de captación, en México, hay,


en promedio, 1.2 cuentas por cada adulto. La participación de las entidades de
ahorro y crédito popular es del 13% del total de cuentas y las cuentas de
expediente simplificado representan el 21% del total de contratos.

II.IV  Economía de Género

La economía de género bien puede tener varios enfoques, sin embargo, la


intención del presente apartado es visibilizar un poco la situación actual que se
tiene entre la Educación Financiera tanto en hombres como en mujeres. De esta
manera tenemos que llamar la situación, nuestro país coloca en una posición de
desventaja a las mujeres no por no contar con normativas de protección, sino por
un atraso en la utilización de los beneficios para acceder a la Educación
Financiera, principalmente.

Desde la perspectiva de economía de género, es importante que se reconozcan


las distintas necesidades, privilegios, derechos y obligaciones de mujeres y
hombres en la sociedad; reconociendo también las diferentes contribuciones de
mujeres y hombres en la producción de bienes y servicios, así como su distinta
participación en los diferentes trabajos necesarios para la reproducción social.

La responsabilidad social de crear programas sensibles al género ayuda a mostrar


y hacer más transparente la relación existente entre los objetivos políticos y los
ingresos y el gasto público, así como, entre la política y la distribución del gasto en
todas las actividades del gobierno. Incorporar entonces el enfoque de género en
los programas y en general todas las acciones que el gobierno despliegue,
requiere unir el conocimiento sobre los roles y las relaciones de género y el
conocimiento sobre el sector público y la economía.

Otra característica que deben de tener los esfuerzos de economía de género es


que deben ser trasversales, es decir, que deben de estar contemplados en todos
los programas sociales de todas las dependencias para que tengan un resultado
significativo y no sea esfuerzo de una sola dependencia o sector. Hay veces que
la perspectiva viene sugerida en algunos programas, pero ésta debe de ser
explícita para ser efectiva. La EF con perspectiva de género podría resultar una
herramienta con profundas implicaciones, no sólo en términos de equidad social y
económica sino también en la consecución de determinados estándares de vida.

La perspectiva de los estándares de vida que visibiliza y sitúa los trabajos de


cuidados como elemento central del desarrollo humano, va mucho más allá de la
idea de igualdad de oportunidades, ya que permite plantear las responsabilidades
reproductivas como un tema social y político de primer orden y no como un
aspecto privado (de responsabilidad femenina).
La forma cómo se diseña e implementan las políticas públicas y cómo se otorguen
las transferencias monetarias, estará configurando una organización específica de
distribución del tiempo y del trabajo mercantil y familiar doméstico.

La importancia de estos enfoques es interpelar a la sociedad en general con


relación directa con los estándares de vida de la población, destacando la
importancia del trabajo de cuidados. De esta manera, se está asumiendo que
existe una tensión histórica entre el bienestar de la población y el beneficio privado
que exige la participación del sector público para la organización y redistribución
de los recursos, en función de los estándares de vida generalizados.

El Panorama Anual de Inclusión Financiera de la CNBV 2019 revela que la


tenencia de productos y servicios financieros continúa siendo desfavorable para
las mujeres. La brecha en posesión de cuentas de captación fue de -3.2%, en
créditos hipotecarios de -26.4%, en tarjetas de crédito de -5.5%, en cuentas de
captación de las SOFIPO de -1.0% y en créditos de las entidades de ahorro y
crédito popular (EACP) de 6.7%.

La brecha de género ENIF 2018,muestra que las mujeres también tienen un


rezago en materia de acceso a los seguros y las Afores. Acuden menos a utilizar
la infraestructura financiera, usan menos su tarjeta de débito, sus expectativas
para cubrir los gastos asociados a su vejez, recae en otras personas.

Asimismo, las brechas de género reveladas por la Encuesta Nacional de Inclusión


Financiera 2018 (datos de la demanda) muestran que las mujeres también tienen
un rezago en materia de acceso a los seguros y las Afores. Asimismo, las mujeres
acuden menos a utilizar la infraestructura financiera, usan menos su tarjeta de
débito, y sus expectativas para cubrir los gastos asociados a su vejez, recae en
personas externas a ellas (gobierno y familia), en mayor medida que los hombres. 

III.I EDUCACIÓN FINANCIERA PARA LOS JÓVENES

En México, sólo el 16% de los jóvenes ha intentado emprender su propio negocio.

A través de distintos programas del gobierno hacia este sector, resulta estratégico
poner a su disposición contenidos de Educación Financiera, de esto modo, la
CONDUSEF impulsado el tema por diversos medios, destacando los esfuerzos
por fomentar la Educación Financiera, en los que se cuenta con la Semana
Nacional de la Educación Financiera (SNEF), en donde se le otorga a partir de su
edición de 2019, una importancia significativa al sector de jóvenes.

La CONDUSEF ha recomendado algunas líneas con la intención de fomentar una


mayor cultura financiera entre la población joven de México, entre ellas pueden
citarse las siguientes:

-No gastes lo que no tienes; si se cuenta con un trabajo, se sugiere ahorrar


mensualmente el 10% de lo que se obtiene. El ahorro permite tener un mayor
control del dinero y da la posibilidad de gastarlo cuando se decida, ya sea en
compras o bien para dar respuesta a situaciones de emergencia, etc.

-Elabora un presupuesto; realizarlo te permitirá saber cómo gastas y así poder


eliminar gastos innecesarios y detectar fugas de dinero o los famosos gastos
hormiga.

-Busca oportunidades de ahorro; encuentra actividades en casa donde se pueda


ayudar a reducir gastos, por ejemplo: apagar las luces que no se utilicen, no
desperdiciar agua, etc., esto no solo beneficiará la economía de tu familia, también
se podrá obtener algunos beneficios.

-Genera ingresos extra; aunque se tenga un trabajo fijo, considera la posibilidad


de tener un segundo ingreso. Analiza tus habilidades, seguro de ahí es posible
obtener algo.

-Evitar solicitar créditos de manera indiscriminada: es muy sencillo caer en la


tentación de comprar cosas a crédito, pero lo más recomendable es esperar a
ahorrar el dinero necesario para comprar al contado eso que tanto se quiere y
preguntarse si realmente es necesario o si será útil.

-La educación financiera bajo un enfoque integral contiene diversos elementos


como el presupuesto de gastos, el ahorro, la inversión, el crédito y los seguros.

Asimismo, la educación financiera permite mejorar las capacidades financieras en


todos los segmentos de la población. A partir de esto, se infiere que la EF no sólo
es para los adultos, si bien son la población que cuenta con un mayor porcentaje
de ingresos, es deseable que la educación en este tema se extienda a los jóvenes
para que puedan tener un mejor conocimiento de lo que significa el mejor uso de
los productos y servicios financieros. De hecho, la propia regulación debe
promover el aumento de las capacidades financieras para lograr una inclusión
financiera con usos y acceso de servicios financieros de calidad en los jóvenes.

Cuando las personas comprenden la finalidad de determinados servicios e


instrumentos financieros se percatan de la utilidad que pudieran tener en su propia
vida y, por ende, se convierten en clientes potenciales de casas de cambio,
instituciones de fianzas, instituciones de seguros, casas de bolsa, instituciones de
banca múltiple, administradoras de fondos para el retiro, sociedades financieras,
entre otras. Es decir, la educación financiera beneficia tanto a las personas que
directamente adquieren los conocimientos en su vida y planeación financiera,
como a las dependencias gubernamentales y al sector privado del Sistema
Financiero Mexicano.

La adquisición de los conocimientos respecto del sector financiero, no se limita a


la población adulta, sino que beneficia a jóvenes y a niñas y niños “preparándolos
para vivir el día de mañana de manera independiente”. Por ello es por lo que las
políticas públicas enfocadas a la educación financiera deben abarcar como
población objetivo no únicamente a los adultos o a jóvenes, sino también a la
población infantil.

La incorporación de la Educación Financiera en el currículo en el nivel básico y en


media superior es una medida más que necesaria para tener un impacto
significativo en la población joven. Los esfuerzos iniciados para impulsar esta
estrategia tardarán en cristalizar, empero, mientras esta medida toma forma, se
deben de reforzar las acciones que ya se están desarrollando; más adelante se
retomara este tema.

La CONDUSEF fomenta la cultura financiera entre la población joven de México:

· No gastes lo que no tienes

· Ahorrar mensualmente el 10%

· Elabora un presupuesto

· Busca oportunidades de ahorro

· Genera ingresos extras

· Evitar solicitar créditos de manera indiscriminada

Una acción relevante es la Semana Nacional de Educación Financiera (SNEF) que


año con año, en el mes de octubre, se lleva a cabo para “acercar a la población
del país conceptos fundamentales de la educación financiera y crear una
conciencia ciudadana sobre el tema”. Las actividades en esa Semana están
enfocadas al público en general, mexicanos que son usuarios de productos o
servicios financieros o que, en un futuro, lo serán. Las actividades se relacionan
con presupuesto, ahorro, crédito, inversión, seguro y retiro.

Aunado a la SNEF, la CONDUSEF cuenta con una revista electrónica que incluye
secciones para leer sobre temas financieros, eventos o lugares donde se puede
asistir para incrementar conocimientos sobre temas financieros como los cursos
que se ofrecen en los centros de la propia CONDUSEF o el micrositio de
Educación Financiera “Educa tu cartera” (https://bit.ly/2vrro3s); o bien, noticias de
México y del mundo relacionadas al sector financiero.

La CONDUSEF, difunde los conocimientos sobre educación financiera y pone en


marcha actividades para que la población se informe en temas como presupuesto,
ahorro, crédito, inversión, seguros y retiro; también organiza la SNEF, publica la
revista mensual Proteja su Dinero, también en versión electrónica, además de
guías y materiales con contenidos para toda la familia.

Visita nuestro micro sitio “Educa tu cartera” (https://bit.ly/2vrro3s);

El Banco del Bienestar, antes Banco del Ahorro Nacional y Servicios Financieros
(BANSEFI) también incentiva la educación financiera a través de cursos básicos,
intermedios o avanzados en línea (BANSEFI, 2018). Asimismo, tiene disponibles
materiales para brindar cursos de Educación Financiera. Incluso, ofrece una
certificación para capacitadores en Educación Financiera.

La Asociación de Bancos de México (ABM), por su parte, agrupa a diversas


entidades bancarias que cuentan con programas o proyectos de educación
financiera como el Centro de Educación Financiera de Actinver, el Programa
Gremial de Educación Financiera de Asociación de Bancos de México, Aprende y
Crece de Banco Azteca, entre otros. Dichos programas tienen el objetivo de
brindar información clara a los usuarios de distintas edades, sobre temas
financieros que van desde cómo hacer un presupuesto, ahorrar, invertir hasta las
comparaciones necesarias en la adquisición de productos como seguros y
créditos.

En ese sentido, desarrollan acciones para incentivar a las personas a recibir


Educación Financiera. Entre las acciones emprendidas, destacan cursos online,
talleres físicos para personas de distintas edades (desde niñas y niños hasta
adultos), revistas físicas y electrónicas, concursos o convocatorias para desarrollar
cuentos, juegos de mesa, entre otros.

Como se observa, existen esfuerzos provenientes tanto de instituciones del sector


privado como del sector público que forman parte del Sistema Financiero
Mexicano, los cuales desarrollan programas y proyectos para educar
financieramente a la población mexicana con miras a incrementar la inclusión e
incentivar la toma de decisiones informada en el ámbito de las finanzas
personales.

III.II Indicadores que reflejan la escasa Educación Financiera

La medición de la alfabetización financiera es importante para tener evidencia que


muestre las áreas de oportunidad en la generación de política pública, que
solucione el problema de la inclusión y la escasa Educación Financiera. Desde el
2013, de acuerdo con el Índice de Capacidades Financieras de la OCDE/INFE
(Encuesta internacional de competencias de alfabetización financiera de adultos
por sus siglas en inglés), México aparecía en el lugar número 13 de 17 países
participantes, obteniendo una calificación menor a la del promedio de los países
del G20 y menor a la de economías similares como Turquía.

En cuanto a los conocimientos financieros en América Latina y el Caribe, menos


de la mitad de la población comprende el término “tasa de interés”, y es capaz de
realizar cálculos básicos respecto a la tasa de interés simple o compuesto.

Poco más del 50% comprende relación entre riesgo y rentabilidad. Menos de la
mitad tienen entendimiento de relación riesgo y diversificación del portafolio. Por
otro lado, las mujeres tienen menor nivel de conocimientos financieros que los
hombres.

Fuente: La educación financiera en América Latina y el Caribe, Situación Actual y


Perspectivas. Serie Políticas Públicas y Transformación Productiva, No. 12

México ocupa el lugar 11 de 14, en relación a los países que “no tiende a vivir al
día”. De hecho 36% de los adultos no tienden a vivir al día en México, mientras
que 64% sí lo hacen. Noruega, por ejemplo, ocupa el primer lugar con 78% de
adultos que no tienden a vivir al día.

En México, ocho de cada 10 personas ahorra, ya sea de manera formal, informal o


ambas, pero menos del 1 por ciento invierte sus recursos en algún instrumento
financiero, esto según la plataforma digital La Tasa.

La ENIF 2018 reporta que:

-De 2015 a 2018 hay avances en tenencia de productos financieros en México,


pero sin incrementos relevantes.

-Las cuentas de nómina, tarjetas de crédito y seguros de vida son los productos
financieros más populares.

-En 2018, 47.1% de la población entre 18 y 70 años tiene al menos una cuenta
bancaria o de una institución financiera, 31.1% tiene crédito o tarjeta de crédito,
25.4% al menos un seguro y 39.5% tiene cuenta de ahorro para el retiro o Afore.

-Rezago en la tenencia de productos y servicios financieros en las regiones Centro


sur y oriente, y Sur de México.

-Ahorro informal: 63.2% de la población expone el total o parte de sus ahorros al


no resguardarlos en instituciones financieras reguladas.

-70.2% de los usuarios de créditos en México se financió total o parcialmente de


manera informal.
-Crece el acceso a la banca por celular, 7.9 millones de personas en México
tenían contratado este servicio en 2018.(MI028)

La ENIF es el instrumento que mide variables relacionadas con la inclusión


financiera en México. Desde el año 2009, ya se publicaba el Reporte de Inclusión
Financiera por la CNBV; sin embargo, este reporte sólo captaba la perspectiva de
la oferta de servicios financieros y no la de la población usuaria. Por ello, a partir
de 2012 se ha realizado el levantamiento de la ENIF para conocer sobre gasto,
ahorro, retiro, remesas, entre otros temas financieros en México.

Ahora bien, contrario a lo que podría parecer, al contar con un registro de los
gastos de aquellas personas que sí tienen un control en sus gastos, únicamente
8.5% lo lleva en la computadora, mientras que 27.7% lo hacen en papel y 63.8% lo
hace mentalmente. (MI028)

En cuanto a compras que no se tienen planeadas o que se salen del presupuesto,


23.8% nunca lo hace, 26.2% rara vez se sale del presupuesto, 36.4% algunas
veces se sale del presupuesto o de su planeación, 8.2% casi siempre se sale de
su presupuesto y 5.4% siempre se sale de su presupuesto. Además 89.5% podría
afrontar una urgencia económica igual a lo que gana o recibe en un mes ya sea
con adelanto de sueldo, venta o empeño de algún bien, préstamos de familiares o
amigos, tarjeta de crédito o trabajo temporal; pero sólo 44.4% puede afrontar un
imprevisto con sus ahorros.

Además, si bien a casi todos les enseñaron a ahorrar, sólo 44.4% tiene ahorros
para afrontar una emergencia equivalente a un mes de ingresos. Por último, 9 de
cada 10 mexicanos siguen utilizando efectivo y pocos utilizan tarjeta de débito o
crédito. (MI028)

Datos sobre el ahorro informal y formal

Respecto al ahorro, 8 de cada 10 mexicanos lo practican. Sin embargo, sólo


15.1% de los mexicanos lo hacen de manera formal, mientras que 32.4% lo hace
de manera informal; y 3 de cada 10 combinan un ahorro formal e informal. Por otro
lado, los hombres ahorran más que las mujeres, ya que del total de mujeres
encuestadas 75.9% sí ahorra, mientras que 77.2% de los hombres lo hace. Ahora
bien, a pesar de que los mexicanos que sí ahorran, en realidad 65% ahorra en su
casa, por lo que su dinero se devalúa al paso del tiempo debido a que, entre otros
factores, las tasas de inflación afectan no sólo a la economía general sino también
personal. (MI029)

Por otro lado, un poco más de la mitad de los mexicanos encuestados (51.5%) no
sabe que hay cuentas que no cobran comisiones en donde puede ahorrar dinero.
Además, la mayoría (55.9%) no tiene una cuenta en algún banco o institución
financiera. De hecho, 5 de cada 10 mexicanos que no tienen una cuenta es
porque no les alcanza o sus ingresos son insuficientes o variables. Por su parte,
de los mexicanos que tienen una cuenta únicamente 17.2% compararon con otros
productos en otras instituciones financieras. De hecho, más de la mitad (52.7%) no
conoce las comisiones que le cobran por esa cuenta y 71.7% de los mexicanos
que tiene cuenta de nómina o pensión no usó la misma para depositar u ahorrar
dinero.

La población mexicana, además, prefiere pagar en efectivo, aún y cuando tengan


tarjeta de nómina. De hecho, más de la mitad (50.6%) no utilizó su tarjeta para
hacer compras en los últimos tres meses. Además, la tecnología en el sector
financiero tampoco es atractiva para los mexicanos, ya que de los que tienen
cuentas, sólo 16.2% tiene contratado servicio de banca por Internet; porque tienen
desconfianza, no saben dónde contratarlo, es complicado, no lo necesita, no tiene
computadora o no tiene Internet. Por último, sólo 1 de cada 10 mexicanos que
tienen cuenta, tiene contratado el servicio de banca por celular; lo anterior porque
se tiene desconfianza, no sabe dónde contratarla, es complicado, no lo necesita,
no tiene celular o no tiene Internet. La mayoría de los mexicanos no sabe que los
ahorros que se encuentran en bancos o instituciones financieras están protegidos
por el IPAB (75.1%). (MI030)

Lo anterior demuestra que, si bien los mexicanos ahorran, no lo hacen a través de


instituciones financieras formales, no saben cómo utilizar las cuentas bancarias (si
las tienen) o la tecnología en aprovechamiento de sus propias finanzas o incluso,
no conocen que sus ahorros estarían protegidos en caso de cierre o quiebre del
banco. En ese sentido, la educación financiera en cuanto al ahorro formal y a los
medios para ahorrar y para generar más valor por el dinero ahorrado y en cuanto
al uso de la tecnología, no forma parte de los conocimientos de la gran mayoría de
mexicanos.

III.III Uso de productos y servicios financieros

Datos crédito informal y formal

La gran mayoría de los mexicanos no tienen crédito formal. De hecho, 45.6% de


los mexicanos no tienen crédito, mientras que 16.4% tienen crédito formal y 25.4%
informal, sólo 12.6% tienen ambos tipos de crédito. Casi 40% de los mexicanos
han solicitado algún préstamo, obteniéndolo de familiares, amigos, caja de ahorro
o casa de empeño. Además, el crédito o préstamo se utilizó, en mayor medida,
para gastos de comida, servicios, personales o de salud.

Cabe señalar que únicamente 34.3% de los mexicanos tienen crédito bancario,
tarjeta de crédito bancaria, departamental, de tienda de autoservicio o con alguna
otra institución financiera (Infonavit, Fovissste, Fonacot).

Por otro lado, más de 70% de los mexicanos no comparó los productos de crédito
al contratarlo; además, del 30% que sí comparó, más de 73% acudieron a las
sucursales para realizar dicha acción. En cuanto al conocimiento sobre los
intereses, de la población que tiene tarjeta de crédito departamental o de
autoservicio, 6% no sabe si le cobran intereses de los que tienen tarjeta de crédito
bancaria, 3.4% desconoce si le cobran intereses, de los que tienen tarjeta de
nómina 3.8% no sabe si le cobran intereses, de crédito personal 1.2% no sabe si
le cobran intereses, de crédito hipotecario 5.9% no sabe si le cobran intereses y
de un crédito grupal 2.8% no sabe si le cobran intereses.

Por último, la mayoría de los mexicanos no se atrasó (de julio 2017 a la fecha de
levantamiento julio 2018) en el pago de sus tarjetas de crédito, departamentales o
de servicios: 6 de cada 10 mexicanos pagan sus tarjetas departamentales o de
autoservicio en tiempo y 7 de cada 10 pagan su tarjeta de crédito bancaria en
tiempo, cuándo es crédito de nómina, 9 de cada 10 lo pagan en tiempo, en crédito
grupal, 8 de cada 10 mexicanos paga en tiempo.

Ahora bien, aproximadamente 4 de cada diez mexicanos hace el pago requerido al


corte, mientras que 2 de cada 10 hace el pago mínimo, sólo 1 de cada diez hace
el pago total, 2 de cada diez mexicanos paga más del mínimo.

Por último, de los mexicanos que tienen crédito más de 58% lo utilizó para
comprar, remodelar, ampliar una casa, comprar terrenos, vehículos, joyas, etc., o
para gastos de comida, personales o pago de servicios.

Datos sobre seguros

La mayoría de los mexicanos no tienen seguro de ningún tipo (73.1%) porque son
muy caros, no saben cómo funcionan, no los necesita o no le interesan, no se los
han ofrecido, no confía en las aseguradoras, o no tiene dinero o trabajo. Además,
de los Usuarios que cuentan con seguro, sólo 27.6% comparó el producto con
diversas aseguradoras.

De los que tienen seguro, la gran mayoría (74.5%) tienen seguro de vida, 27.5%
de gastos médicos, 36.6% de auto, 14.4% contra accidentes, 12.3% de casa,
2.8% de educación, 2.8% de plan privado de retiro (no AFORE) y 1.2% de
negocios o empresa. A pesar de contar con un seguro, los mexicanos no siempre
saben cuál es el costo de la prima, de hecho, los que menos saben cuál es el
costo de la prima son los que tienen seguro de casa (46.5% sí saben), y los que
más saben cuánto cuesta la prima son los que tienen seguro de auto (77.5% sí
saben.)

Datos sobre cuenta de ahorro para el retiro

La mayoría de los mexicanos no tiene una cuenta de ahorro para el retiro o


AFORE (52.4%) y las razones de mayor a menor porcentaje son:

-Porque no trabaja

-No sabe cómo tramitarla


-Porque no sabe qué es una cuenta de ahorro para el retiro

-No le interesa

-Piensa que no le conviene

-No tiene dinero suficiente

-Las Afore le dan desconfianza

La mayoría de los que tienen AFORE saben cuál es (80.1%). De hecho, de los
que saben, la mayor parte está registrado con Banorte-Siglo XXI y los menos
están registrados en PensionISSSTE. A pesar de lo anterior, la mayoría de los
mexicanos no hacen aportaciones voluntarias a la cuenta de su AFORE, ya sea
porque no le queda dinero para ahorrar, porque no sabe cómo hacerlo, o porque
ahorra de otra forma. La gran parte de los registrados en AFORE recibe sus
estados de cuenta (64.8%).

Por tanto, en el manejo de las AFORES y las cuentas de ahorro para el retiro se
evidencia de que tampoco hay suficiente Educación Financiera, ya que muchos
mexicanos no tienen una cuenta de ahorro para el retiro, o si la tienen, no siempre
reciben sus estados de cuenta que les indique cuánto tienen ahorrado y cuáles
son los intereses reales que han generado a lo largo de los años.

Datos sobre remesas internacionales (MI036)

Casi la mitad de los mexicanos encuestados (49.1%) tiene conocidos o familiares


que viven en otro país. De dicho porcentaje, 17.3% ha recibido dinero de aquellos,
es decir, 6 millones 488 mil 872 mexicanos. La forma por el que la gente recibe
dinero de sus familiares o conocidos que viven en el extranjero es a través
empresas, “remesadoras”, cuentas bancarias, sucursales bancarias, familiares o
conocidos, Telecom o Servicio Postal Mexicano, supermercado o transferencia
electrónica y el dinero lo utiliza para gastos de comida, personales o pago de
servicios, atender una enfermedad, emergencia o imprevisto, educación de los
hijos, entre otros. Además, el dinero que recibe lo manejan casi siempre en
efectivo (94.1%).

Datos sobre uso de canales financieros

De los mexicanos encuestados más de 60% no utilizó en un año ninguna sucursal


bancaria o institución financiera, la mayor parte debido a que no tienen tarjeta
(61.8%). Por su parte, 56.9% de los mexicanos no utilizó cajeros automáticos en
un año, en su mayoría por el mismo motivo de no tener cuenta o tarjeta (72.8%).
De los que utilizan cajeros de su banco, lo prefiere así porque conoce que si utiliza
cajeros de otros bancos las comisiones serán muy altas (73.2%).
Por otro lado 34.4 % de la población utilizó algún comercio para retirar dinero,
depositar en efectivo o pagar servicios (luz, agua, predial, etc.). De los que no han
utilizado este servicio, 11% no lo hace porque no sabía que se podía.

Los mexicanos no siempre acuden a sucursal porque no tienen cuenta o no


utilizan cajeros porque prefieren ir a sucursal o no siempre saben cómo se utiliza.
La educación financiera en este rubro generaría ahorro de tiempo y haría más
eficiente el servicio de las instituciones financieras.

Datos sobre protección a usuarios de servicios financieros

Respecto a la protección a usuarios de servicios financieros, 5 de cada 10


mexicanos no saben a qué institución acudir para presentar una queja si tuviera
problemas con créditos, tarjetas, ahorros o productos financieros; 2 de cada diez
irían con el propio banco o institución financiera a presentar la queja y 1 de cada
10 iría a la CONDUSEF. De hecho 8 de cada diez mexicanos no han presentado
alguna queja, reclamo o demanda a alguna institución financiera, ya sea bancos,
CONDUSEF, PROFECO, Hacienda o autoridad judicial.

La Educación Financiera es de vital importancia para que los mexicanos, como


usuarios de servicios y clientes de productos financieros estén seguros de que
existen instituciones que los protegen y apoyan en momentos de duda o
insatisfacción del sector.

Datos sobre propiedad de activos

La propiedad de activos es el último tema que se puede analizar en la ENIF, de


hecho, este tema se relaciona con las propiedades con las que cuentan los
mexicanos. De los mexicanos encuestados, 88.1% no tiene que pedirle permiso a
nadie para disponer de su propio dinero; sin embargo, 11.9% equivalente a más
de 9 millones de mexicanos que sí deben pedir permiso ya sea a su pareja
(75.8%) o a algún familiar (23.9%).

Por otro lado, poco más de 51% de los mexicanos tienen al menos algún terreno,
auto, vivienda, local u oficina, puesto fijo, o algún otro tipo de sociedad. Casi 27
millones de mexicanos son propietarios de la propiedad que habitan. A pesar de
ello, no siempre están en posición de venderla o rentarla en caso de emergencia
(46.4%) ya sea porque está a nombre de otra persona, está hipotecada, porque
tiene que pedir autorización a otra persona, porque está en litigio, o por otras
razones. Así, de los mexicanos que dicen ser propietarios de la vivienda en la que
habitan, 4 de cada 10 no pueden utilizar dicha propiedad como un activo que
genere utilidad (mediante venta o renta).

Las respuestas en esta sección demuestran que no siempre hay educación


financiera, incluso de bienes y propiedades, puesto que en muchos casos, los
mexicanos dicen ser propietarios de “activos” pero, en realidad, no son los
propietarios (legalmente) o bien, no pueden aprovechar ese activo para generar
flujo de efectivo (por ejemplo), sino que, lejos de ello, podría considerarse un
pasivo porque al paso del tiempo disminuye su valor (como un auto-móvil) o
porque a pesar de que pudiera aumentar su precio (como un bien inmueble) hay
que hacer reparaciones o mantenimiento, lo que generaría un gasto.

La Educación Financiera, al aumentar las capacidades de los mexicanos de tomar


decisiones en este sector, mejoraría su bienestar familiar presente y futuro, e
incrementaría la inclusión financiera, ya que la exigencia y demanda de servicios y
productos financieros de calidad (ya sea dado por organismos públicos o privados)
sería, claramente, mayor. (Información de Banxico)

III.IV Derechos y obligaciones de los Usuarios

La Educación Financiera en México es fomentada por distintas instituciones


pertenecientes al Sistema Financiero Mexicano a través de programas y proyectos
dirigidos a la población. Además, la Encuesta Nacional de Inclusión Financiera
emite resultados representativos sobre los conocimientos y capacidades
financieras de las y los mexicanos. Asimismo, la Estrategia Nacional de Educación
Financiera ha fomentado, a lo largo de los años, que organismos e instituciones se
enfoquen en conocer los resultados de la ENIF y promuevan cursos, talleres,
eventos, entre otros, que tengan como objetivo solventar las necesidades o
resolver los problemas detectados en aquella Encuesta.

Justamente, existe un marco legal que responde a la necesidad de que la


población mexicana esté mejor informada en temas financieros para que haga un
buen uso de sus recursos, incentivando un mejor desarrollo y bienestar tanto en lo
individual como en lo familiar, en el presente y en el futuro.

El artículo 25 constitucional señala que el Estado Mexicano velará tanto por la


estabilidad de las finanzas públicas como por el sistema financiero para coadyuvar
a generar condiciones favorables para el crecimiento económico y el empleo;
además, en el numeral 28 párrafo sexto y séptimo se otorga al banco central la
facultad de regular cambios tanto de intermediación como de servicios financieros.
Por tanto, el numeral 25 y el 28 constitucional se relacionan con la regulación del
Sistema Financiero Mexicano y sus integrantes

Ahora bien, concretamente es la Ley para Regular las Agrupaciones Financieras


(LRAF), publicada en el año 2014, la que contempla específicamente los temas de
Educación Financiera. En ese sentido, se le asignan, al Consejo Nacional de
Inclusión Financiera diversas funciones entre la que se encuentra:

“Coordinar con el Comité de Educación Financiera, presidido por la Subsecretaría


de Hacienda y Crédito Público, las acciones y esfuerzos en materia de educación
financiera”. (Artículo 184 fracción V).

El Capítulo IV de la LRAF regula lo relativo al Comité de Educación Financiera que


es la instancia que coordina “esfuerzos, acciones y programas en materia de
educación financiera de los integrantes que lo conforman, con el fin de alcanzar
una Estrategia Nacional de Educación Financiera, evitando duplicidad de
esfuerzos y propiciando la maximización de los recursos” (Artículo 188).

Este Comité tiene catorce funciones relacionadas con la difusión, creación de


metodologías, aportaciones, planes de trabajo y actividades de la educación
financiera. Es decir, que se encarga tanto de definir prioridades de la política de
educación financiera como de la preparación de la Estrategia Nacional de
Educación Financiera. El Comité es presidido por la Secretaría de Hacienda y
Crédito Público e integrado por diversas autoridades e instituciones financieras
(Artículo 191).

Por otro lado, la Estrategia Nacional de Educación Financiera también forma parte
del marco normativo (administrativo) de la educación financiera en nuestro país,
ya que es producto de un mandato legal dado directamente al Comité de
Educación Financiera.

III.V Escolarización de la Educación Financiera

Una de las líneas de acción del CEF es justamente fomentar el desarrollo de


competencias financieras desde la educación obligatoria, de ahí que en 2019, la
Reforma Educativa que crea la Nueva Escuela Mexicana estableció un conjunto
de reformas Constitucionales y Legales, destacando de manera señalada la
reforma a la Ley General de Educación promulgada en septiembre de 2019, que
al definir los contenidos de Planes y Programas de Estudio en los tipos educativos
Básico y Medio Superior señala, con toda claridad, en el artículo 30 fracción 14, la
obligación de incluir temas de “…emprendimiento, fomento al ahorro y educación
financiera” con el objetivo de establecer que la educación dentro de sus objetivos
fomente de actitudes sociales de solidaridad, ahorro, bienestar y esfuerzo hacia el
trabajo e impartir educación financiera, incentivando habilidades de manejo de
economía personal.

Se tiene planeado que a partir del ciclo escolar 2021-2022 la impartición de


contenidos de Educación Financiera en las primarias y secundarias del Sistema
Educativo Nacional sea una realidad. Un paso sin lugar a dudas determinante en
el cambio de actitudes y prácticas financieras en nuestro país.

TEMA IV. EL SISTEMA FINANCIERO MEXICANO

IV.I Antecedentes

Los primeros antecedentes del Sistema Financiero Mexicano (SFM) se ubican en


1775, cuando se creó la primera institución de crédito prendario en México, el
Monte de Piedad de Ánimas (antecesor del actual Nacional Monte de Piedad),
décadas más tarde, en 1849 se dio la creación de la Caja de Ahorros del Monte de
Piedad y en 1897 se expidió la Ley General de Instituciones de Crédito, en esta
ley se le impusieron limitaciones a los bancos en cuanto a reservas, emisión de
billetes y apertura de sucursales. En aquel entonces, las instituciones de crédito se
clasificaron de la siguiente manera:

Bancos de emisión

Bancos hipotecarios

Bancos refaccionarios

Almacenes generales de depósito

La Bolsa Mexicana de Valores se inauguró en 1895 como Sociedad Anónima, sin


embargo, sus operaciones bursátiles se realizaban desde 1880 en la Compañía
Mexicana de Gas. Para 1925 existían 25 bancos de emisión, hipotecarios tres,
siete refaccionarios y la bolsa de valores. Desde entonces y hasta 1976, el SFM
no sufrió grandes modificaciones.

A partir de 1931, el Banco de México funcionó como el único banco de emisión de


billetes y control de efectivo circulante. Se promulgó la Ley General de Títulos y
Operaciones de Crédito para promover el uso de instrumentos de crédito en vez
de dinero.

La banca dejó de ser especializada en 1976, y desde entonces se convirtió en


banca múltiple, al contar con la concesión del gobierno federal para realizar
operaciones de banca de depósito, financiera e hipotecaria, además de otras
operaciones previstas por la ley, con lo que se sentaron las bases legales para la
concentración del capital bancario y con el tiempo ocurrieron varias fusiones de
instituciones de crédito, con lo que para 1981 sólo quedaban 36 multibancos,
siendo los bancos más fuertes en ese momento: Bancomer, Banamex, Serfin,
Banobras, Banco Mexicano Somex y Multibanco Comermex.

Para el año de 1982, a finales del sexenio del presidente José López Portillo, se
decretó la nacionalización de la banca y el Banco de México dejó de ser sociedad
anónima. En 1983, derivado de lo anterior, se publicó la Ley Reglamentaria del
Servicio Público de Banca y Crédito, con lo que se ordenaba convertir en
Sociedades Nacionales de Crédito a las instituciones nacionalizadas el 1° de
septiembre de 1982, abriendo la posibilidad a los particulares de participar hasta
con el 34% del capital de la banca.

En 1984, se separó a las Sociedades Nacionales de Crédito en instituciones de


banca múltiple e instituciones de banca de desarrollo. En la Ley General de
Organizaciones y Actividades Auxiliares de Crédito se elimina a las instituciones
de fianzas como organizaciones auxiliares de crédito y se autoriza a las casas de
cambio como actividad auxiliar de crédito. En la Ley del Mercado de Valores
destaca la creación de casas de bolsa nacionales y la autorización para que las
casas de bolsa administraran pensiones y jubilaciones. La Ley de Sociedades de
Inversión las clasifica a éstas en tres tipos: comunes, de renta fija y de capital de
riesgo.

En 1990, se modificaron los artículos 28 y 123 constitucionales, para ampliar la


participación de los sectores privado y social en el capital de los bancos. Se
publicó la Ley de Instituciones de Crédito y la Ley para Regular las Agrupaciones
Financieras. La primera ley señalaba que el servicio de banca y crédito solo podía
ser prestado por las instituciones de crédito, las cuales podían ser banca múltiple y
banca de desarrollo. Desde entonces, la participación máxima que se le permitió al
capital extranjero fue del 30%. La segunda ley permitió la formación oficial de
grupos financieros que se esperaba fuera el antecedente de la creación de la
banca universal en México.

En 1991 se normaron las Sociedades de Ahorro y Préstamo (Cajas de ahorro) y


se inició el proceso de reprivatización de la banca, mismo que culminó en 1992, el
cual pretendía los siguientes objetivos:

· Conformar un sistema financiero más eficiente y competitivo

· Garantizar una participación diversificada y plural en el capital

· Buscar la descentralización y el arraigo regional de las instituciones

· Propiciar las sanas prácticas financieras y bancarias

En 1993, surgen las Sociedades Financieras de Objeto Limitado (Sofoles) y se le


otorga la autonomía al Banco de México. En este año, la Ley de Inversiones
Extranjeras abre la participación del capital extranjero en los bancos en cualquier
proporción.

A partir de la crisis financiera de 1995, se aceleró el proceso de extranjerización


de la banca, debido a que los bancos extranjeros adquirieron a los bancos
nacionales.

Actualmente el 90% del sector bancario está en manos de los extranjeros, siendo
los únicos 100% mexicanos Banorte-IXE, Banco Azteca, Banco Inbursa y Banco
Afirme.

IV.II Estructura del Sistema Financiero Mexicano (SFM)

El SFM se entiende en términos generales como el conjunto de autoridades que lo


regulan y supervisan, las instituciones financieras de las que forman parte la
banca múltiple y de desarrollo, las sociedades financieras de objeto múltiple
(SOFOMES); las Casas de Bolsa, las Bolsas de Valores, las Casas de Cambio,
las Aseguradoras, las Administradoras de Fondos para el Retiro (AFORES), las
Sociedades Financieras de Ahorro y Crédito Popular (SOFIPOS), las Cajas de
Ahorro Popular, las Uniones de Crédito y Ahorro, por citar las más relevantes. Por
otra parte las entidades financieras conocidas como FinTech que ofrecerán una
cartera de productos y servicios financieros de vanguardia tecnológica.

También se puede definir al SFM, como el conjunto de instituciones que tienen por
objeto el otorgamiento de créditos o financiamientos a los diferentes sectores de
nuestra economía y la captación de recursos de manera profesional, bajo la
supervisión y vigilancia de las autoridades del sistema financiero en un marco
jurídico establecido.

Son entidades financieras las que intervienen generando, captando,


administrando, orientando y dirigiendo tanto el ahorro como la inversión;
instituciones de servicios complementarios; auxiliares o de apoyo a dichas
entidades; de agrupaciones financieras que prestan servicios integrados; así como
otras entidades que limitan sus actividades a información sobre operaciones
activas o prestan servicios bancarios con residentes en el extranjero.

Durante el Diplomado de Educación Financiera por SFM se entenderá: el conjunto


de personas y organizaciones, tanto públicas como privadas, por medio de las
cuales se captan, administran, regulan y dirigen los recursos financieros que se
negocian entre los diversos agentes económicos, dentro del marco de la
legislación aplicable.

La importancia del SFM, radica en que permita llevar a cabo la captación de


recursos económicos de personas u organizaciones para ponerlo a disposición de
otras organizaciones, empresas o instituciones gubernamentales, privadas o
sociales que lo requieren para invertirlo. Éstas últimas harán negocios y
devolverán el dinero que obtuvieron además de una cantidad extra (rendimiento),
como pago, lo cual genera una dinámica en la que el capital es el motor principal
del movimiento dentro del sistema. Esto conlleva a que se pueda alcanzar un
mayor desarrollo y crecimiento económico, lo cual se refleja en la generación de
un mayor número de empleos, derivado de la inversión productiva que realizan las
empresas o instituciones gubernamentales con el financiamiento obtenido a través
del sistema financiero.

A través del Sistema Financiero, se realizan toda clase de actividades financieras,


tales como transferir recursos entre sectores y regiones por lo que esta función
permite que las inversiones se dediquen a usos más productivos y pertinentes.

En la actualidad el Sistema Financiero Mexicano regulado y supervisado por las


autoridades del gobierno mexicano, está integrado de la siguiente manera
(información que se encuentra disponible en el Buró de Entidades Financieras al
3er trimestre del 2019):

1. 2,992 Instituciones Financieras reguladas por las autoridades mexicanas


como: Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP), Banco de México
(BANXICO), Comisión Nacional para la Protección y Defensa de los Usuarios de
Servicios Financieros (CONDUSEF), Comisión Nacional Bancaria y de Valores
(CNBV), Comisión Nacional de Seguros y Fianzas (CNSF), Comisión Nacional del
Sistema de Ahorro para el Retiro (CONSAR), entre otras.

2. 12,980 Productos y Servicios Financieros disponibles en el SFM. Los


productos de colocación con mayor presencia en el Catálogo Nacional de
Productos y Servicios Financieros del Buró de Entidades Financieras son el
crédito simple, crédito personal y crédito en cuenta corriente. A su vez, los
productos de captación más populares son el de cuenta de nómina, cuenta de
ahorro y los instrumentos de inversión.

3. 25 Sectores diferentes de los cuales los 5 más representativos por su número


son: Sociedades Financieras de Objeto Múltiple Entidades No Reguladas (SOFOM
E.N.R), Fondos de Inversión, Sociedades Cooperativas de Ahorro y Préstamo
(SOCAP) e Instituciones de Seguros y las Uniones de Crédito.

La finalidad prioritaria del sistema financiero (SF), es llevar a cabo las funciones de
captación de las unidades económicas con superávit y canalizarlo a unidades
económicas deficitarias, lo que significa que el sistema financiero se ocupa de
captar el dinero ahorrado y canalizarlo a quien lo necesita. Se trata de una función
de intermediación pertinente y necesaria en cualquier contexto o agregado social.
Así, por ejemplo, los bancos son capaces de prestar dinero a algún usuario porque
hay otras personas que a su vez depositaron sus ahorros en la institución
financiera.

(Video Cuidando al Sistema Financiero https://youtu.be/E3jmbbQbDBQ)

Dentro de cualquier SF es importante contar con un marco legal. Por ello existen
entidades encargadas de su regulación, algunas de éstas son la SHCP, Banxico o
la CNBV. El SFM se integra por dos componentes. En el primero están los
organismos encargados de poner las reglas del juego y aplicarlas. Éstos son,
principalmente la SHCP y Banxico. Aunque también hay otros, como la Comisión
Nacional Bancaria y de Valores (CNBV); la Comisión Nacional de Seguros y
Fianzas (CNSF) el Instituto de Protección al Ahorro Bancario (IPAB) o la Comisión
Nacional para la Protección y Defensa de los Usuarios de Servicios Financieros
(CONDUSEF).

En el segundo componente están las Instituciones que ofrecen productos o


prestan servicios financieros en distintos sectores de operación, como la banca
comercial, la banca de desarrollo, las instituciones de seguros y fianzas, así como
el mercado de valores. El SF también está integrado por diferentes intermediarios
y mercados financieros, a través de los cuales una variedad de instrumentos
moviliza el ahorro hacia usos productivos. Los bancos son quizá los intermediarios
financieros más conocidos, puesto que ofrecen directamente sus servicios al
público y forman parte medular del sistema de pagos. Sin embargo, en el sistema
financiero participan muchos otros intermediarios y organizaciones que ofrecen
servicios de gran utilidad para la sociedad.
Un sistema financiero estable, eficiente, competitivo e innovador contribuye a
elevar el crecimiento económico sostenido y al bienestar de la población. Para
lograr dichos objetivos, es indispensable contar con un marco institucional sólido,
con capacidades suficientes para llevar a cabo la regulación y supervisión
financiera que salvaguarde la integridad del mismo sistema y proteja los intereses
del público usuario. Por lo anterior, el Banco de México tiene entre sus objetivos, e
promover el sano desarrollo del sistema financiero.

La CONDUSEF, cuenta con una página en donde se pude ir conociendo cada una
de estas instituciones de manera didáctica, para su consulta, ingrese a la siguiente
liga:

https://webappsos.condusef.gob.mx/EducaTuCartera/SistemaFinanciero.html

IV.III Autoridades Reguladoras del Sistema Financiero

Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP).- Con fundamento en las:


fracciones VI, VII y VIII del Artículo 31 de la Ley Orgánica de la Administración
Pública Federal, a la SHCP le corresponde realizar o autorizar todas las
operaciones en que se haga uso del crédito público; planear, coordinar, evaluar y
vigilar el sistema bancario del país que comprende al Banco Central, a la Banca
Nacional de Desarrollo y las demás instituciones encargadas de prestar el servicio
de banca y crédito; y ejercer las atribuciones que le señalen las Leyes en materia
de seguros, fianzas, valores y de organizaciones y actividades auxiliares del
crédito.

(SHyCP https://youtu.be/UR6l1ytHFlE)

Comisión Nacional Bancaria y de Valores (CNBV).- De acuerdo al Artículo 2 de la


Ley de la Comisión Nacional Bancaria y de Valores, la CNBV tendrá por objeto
supervisar y regular en el ámbito de su competencia a las entidades integrantes
del sistema financiero mexicano que esta Ley señala, a fin de procurar su
estabilidad y correcto funcionamiento, así como mantener y fomentar el sano y
equilibrado desarrollo de dicho sistema en su conjunto, en protección de los
intereses del público.

Comisión Nacional de Seguros y Fianzas (CNSF).- Con fundamento en el Artículo


108 de la Ley General de Instituciones y Sociedades Mutualistas de Seguros y en
los Artículos 68 y 69 de Ley Federal de Instituciones de Fianzas, la CNSF está
encargada de supervisar que la operación de los sectores asegurador y afianzador
se apegue al marco normativo, preservando la solvencia y estabilidad financiera
de las instituciones de Seguros y Fianzas, para garantizar los intereses del público
usuario, así como promover el sano desarrollo de estos sectores con el propósito
de extender la cobertura de sus servicios a la mayor parte posible de la población.

Comisión Nacional del Sistema de Ahorro para el Retiro (CONSAR).- Con


fundamento en el Artículo 2 de la Ley de los Sistemas de Ahorro para el Retiro, la
coordinación, regulación, supervisión y vigilancia de los sistemas de ahorro para el
retiro están a cargo de la CONSAR.

Instituto para la Protección al Ahorro Bancario (IPAB).- De conformidad con el


Artículo 67 de la Ley de Protección al Ahorro Bancario, el IPAB tiene por objeto
garantizar los depósitos bancarios de los pequeños y medianos ahorradores, y
resolver al menor costo posible bancos con problemas de solvencia,
contribuyendo a la estabilidad del sistema bancario y a la salvaguarda del sistema
nacional de pagos.

IV.IV Banco de México

El Banco de México, es la Banca Central del SFM y la máxima autoridad


monetaria. De conformidad con el Artículo 2 de la Ley del Banco de México el
Banco de México tendrá por finalidad proveer a la economía del país de moneda
nacional, procurar la estabilidad macroeconómica y conservar el poder adquisitivo
de dicha moneda. Serán también finalidades del Banco promover el sano
desarrollo del SF y propiciar el buen funcionamiento de los sistemas de pagos.

Una de las tareas del Banxico, es promover el desarrollo del sistema financiero
para garantizar que funcione en favor del desarrollo económico, que sea accesible
para los usuarios y que opere en un ambiente competitivo y eficiente. Cuando el
SF cumple estos criterios, facilita el cumplimiento de otras tareas del banco
central, como la provisión de moneda nacional a la sociedad -a través de la banca
comercial- y la ejecución de las políticas monetarias y cambiarias. Cualquier
cambio que se haga en dichas políticas, tendrá un efecto en los precios que se
pactan en los mercados financieros, como las tasas de interés (costo de los
créditos, rendimientos, etc.) o el tipo de cambio. Es a través de este sistema, que
el banco central lleva a cabo sus labores para cumplir con su objetivo prioritario,
que es cuidar que el dinero en la economía no pierda su valor (capacidad de
compra) a lo largo del tiempo.

También se encarga de la emisión de instrumentos de crediticios y la regulación


monetaria gubernamental, la fijación de criterios generales a los que deben
sujetarse los participantes en el mercado de dinero, así como también propiciar el
buen funcionamiento de los sistemas de pago.

(Video El Banco de México https://youtu.be/S95sko8V48w)

IV.V Organismos Financieros Multilaterales

Los Organismos Financieros Multilaterales (OFM) son organizaciones que están


conformadas por tres o más naciones, y su principal objetivo será el trabajar en
conjunto en las problemáticas que afectan los países que integran la organización
en cuestión. Al final de la Primera Guerra Mundial, surgió la necesidad de crear
organismos internacionales multilaterales que previnieran las confrontaciones
bélicas a través de la creación de mecanismos para la solución pacífica de
controversias, los cuales fracasaron tras el comienzo de la Segunda Guerra
Mundial dos décadas más tarde, la crisis económica y social que impactaba a
numerosas naciones al término de la guerra, generó el interés internacional por
crear organismos que garantizarán la estabilidad económica internacional.

La meta de los organismos multilaterales es conseguir acuerdos globales o


regionales. A través de ellos ha sido posible lograr consensos para implementar
acciones multilaterales concretas en relación a temas económico-financieros y así
mantener el equilibrio de intereses entre las naciones, a través, del
establecimiento de marcos regulatorios que ayuden a la prevención y a la
resolución de conflictos. La Organización de Naciones Unidas, El Fondo Monetario
Internacional, el Banco Mundial y la Organización Mundial del Comercio, entre
otros, son algunos de los organismos multilaterales más conocidos e importantes
del mundo.

El Fondo Monetario Internacional (FMI), por ejemplo, nació en el marco de una


convención de las Naciones Unidas, en el año 1945, tiene como objetivos
primordiales, evitar las crisis financieras en los sistemas monetarios de sus
estados miembros, la promoción de políticas cambiarias sostenibles y de
cooperación a nivel internacional, la apertura del comercio internacional y la
reducción de la pobreza de todos aquellos países partes. El FMI es uno de los
organismos multilaterales y especializados y actualmente tiene 185 países
miembros y su sede se encuentra en Washington.

El multilateralismo de este organismo queda fielmente expresado, en la


metodología multilateral de pagos que facilita y por otro lado, por el otorgamiento
temporal de recursos financieros a aquellos miembros que presentan problemas
en sus balanzas de pagos, por ejemplo, un país inscrito al FMI tendrá el acceso
automático al 25% de su cuota.

El FMI actúa como fondo al cual los países miembros podrán recurrir en caso de
necesidades de financiamiento de algunos de sus proyectos.

Banco Mundial (BM) se crea en contexto de los acuerdos de Bretton Woods


(1944) con la misión específica de impulsar la reconstrucción europea en la
postguerra; una vez cumplido el cometido original el Banco Mundial se ha
concentrado en otorgar financiamientos y asesoría en proyectos para el desarrollo
a las naciones más pobres del mundo. www.wb.org

Organización Mundial del Comercio (OMC) originalmente llamada Acuerdo


General de Aranceles y Tarifas, (GATT) es la Organización Internacional que tiene
como objetivo liberalizar de aranceles y cuotas el comercio internacional para
favorecer el libre intercambio de mercancías entre las economías del orbe.
https://www.wto.org/

IV.VI Reforma Financiera de 2014

La Reforma Financiera realizada en México en 2014 se impulsó y se aprobó para


lograr los siguientes objetivos:

-Incrementar la competencia en el sector financiero.

-Fomentar el crédito a través de la Banca de Desarrollo.

-Ampliar el crédito a través de las instituciones financieras privadas.

-Mantener un sistema financiero sólido y prudente.

-Hacer más eficaces a las instituciones financieras y el actuar de las autoridades


en la materia.

-Impulsar mecanismos de transparencia hacia el público usuario

Pilares de la Reforma Financiera

A. Incrementar la competencia en el sector financiero.

La competencia en el sector financiero en México todavía es limitada, un ejemplo


emblemático de esta situación es que tan sólo siete instituciones financieras
concentran el 73% del otorgamiento de créditos, lo que limita el acceso, la
cobertura y la expansión de su oferta.

Cabe resaltar que el financiamiento ha sido particularmente escaso para las Micro,
Pequeñas y Medianas Empresas (MiPyMEs), las cuales generan cerca del 74%
del empleo en el país. La mayoría de las MiPyMEs han podido financiarse a través
de canales informales, los cuales se caracterizan por su alto costo.

La Reforma Financiera establece un conjunto de medidas para fomentar la


competencia dentro del sistema financiero y con ello abrir nuevos canales de
oportunidad para las empresas y los diversos demandantes de financiamientos,
así como para inhibir prácticas anticompetitivas. A continuación se describen
algunas de estas medidas:
-Fortalecimiento de la Comisión Nacional para la Protección y Defensa de los
Usuarios de Servicios Financieros (CONDUSEF).

-Medidas contra ventas atadas.

-Regulación de Redes de Medios de Disposición.

-Investigación de la Comisión Federal de Competencia Económica sobre nivel de


competencia del sector financiero.

-Movilidad de garantías y de operaciones (potabilidad de créditos).

-Mayor número de corresponsales de Ahorro y Crédito Popular.

-Creación del Buró de Entidades Financieras.

B. Fomentar el crédito a través de la Banca de Desarrollo.

En los últimos años, la Banca de Desarrollo había mantenido una política


conservadora en el otorgamiento de crédito, toda vez que se había enfocado en
mantener niveles de capitalización altos y una cartera de clientes con bajo índice
de morosidad, inclusive mejores que la banca comercial. La Banca de Desarrollo
debe otorgar crédito a quienes, por fallas de mercado, las instituciones privadas no
atienden o complementar los productos que dichas instituciones ofrecen.

Con la Reforma Financiera, se apuntala a la Banca de Desarrollo con un marco


normativo que, le permita instrumentar políticas que sumen tanto a la creación
como a la preservación de los empleos e inversiones. La Banca de Desarrollo
debe contribuir, de manera eficaz, con la actividad productiva del país, la creación
de valor y el crecimiento del campo y, a su vez, permitir y respaldar el ahorro
popular en beneficio del bienestar de las familias mexicanas.

Entre las modificaciones legales implementadas destacan:

-El Fortalecimiento de la Banca de Desarrollo se refleja al definir con claridad el


mandato de sus instituciones, y el fomento de la economía a través de la atención
de sectores estratégicos que enfrentan limitantes para tener acceso a alternativas
de financiamiento.

-La flexibilización del marco normativo de las instituciones, eliminando


restricciones innecesarias para su desarrollo

-La obligación de crear programas de inclusión financiera para las micro,


pequeñas y medianas empresas, así como para los pequeños productores del
campo.
-Acorde con las mejores prácticas bancarias, se da mayor claridad acerca del
control y vigilancia de las instituciones para evitar duplicidad de funciones y cargas
administrativas innecesarias.

-La regulación y supervisión bancaria queda a cargo de la Comisión Nacional


Bancaria y de Valores, el Banco de México y la Secretaría de Hacienda y Crédito
Público en el ámbito de competencia que corresponda a cada una.

-Se refuerza la obligación de prestar asistencia técnica y capacitación,


particularmente en los servicios y productos financieros de innovación, creación de
patentes y demás derechos de propiedad industrial.

-La Banca de Desarrollo deberá promover la inclusión financiera de la población,


particularmente, la de mujeres, niños y jóvenes, así como la promoción del ahorro
e inversión en comunidades indígenas.

-Las instituciones también deberán implementar programas y productos


específicos con perspectiva de género, para fomentar la igualdad de hombres y
mujeres en materia de acceso a servicios financieros.

-Cada institución financiera de desarrollo podrá allegarse de los recursos


requeridos para el cumplimiento de su mandato, principalmente capital humano;
fortaleciendo a sus órganos de gobierno para que determinen, haciendo uso de
recursos propios, la estructura organizacional y necesidades de recursos humanos
a fin de poder llevar a cabo sus actividades sustantivas de forma más efectiva.

-Las instituciones deberán promover la sustentabilidad ambiental en sus


programas operativos y financieros, así como incentivar la responsabilidad
ambiental corporativa en ellas mismas, en los términos que establezca su Consejo
Directivo.

-Las instituciones de Banca de Desarrollo podrán realizar funciones de banca


social

-La Financiera Rural se transforma en la “Financiera Nacional de Desarrollo


Agropecuario, Rural, Forestal y Pesquero”. Dentro del rediseño estructural se
encuentra la flexibilización de su regulación para que pueda mejorar su esquema
operativo e incrementar el crédito que otorga.

C. Ampliar el crédito a través de las instituciones financieras privadas.

El financiamiento al sector privado es de tan sólo el 28% del Producto Interno


Bruto, esto contrasta con el promedio de América Latina, que es de 47.9%, o del
promedio de 57.3% de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo
Económico (OCDE).
La Reforma Financiera contempla elementos y herramientas para acelerar e incidir
en el otorgamiento de crédito vía las instituciones financieras privadas. Algunos de
ellos son:

-Mejorar el régimen de garantías.

-Mejorar el régimen de concursos mercantiles.

-Resolución de controversias en Tribunales especializados.

-Evaluación periódica a los bancos.

-Otorgamiento de mayores facultades a la Comisión Nacional Bancaria y de


Valores.

-Fortalecimiento del mercado de las Sociedades Anónimas Promotoras de


Inversión Bursátil.

-Ampliación de obligaciones sobre información crediticia.

D. Mantener un sistema financiero sólido y prudente.

La Reforma Financiera integró, entre otros, las siguientes medidas que


contribuyen al fortalecimiento del sector para mantener su solidez:

-Fortalecimiento de medidas prudenciales.

-Fortalecimiento del procedimiento de liquidación Bancaria.

-Coordinación en Materia de Estabilidad Financiera.

Adicionalmente, la reforma hace más eficaces a las instituciones financieras y el


actuar de las autoridades en la materia. La eficacia en la operación de las
entidades que integran el Sistema Financiero, así como en el actuar de las
autoridades.

La Reforma Financiera moderniza la legislación en este sentido a través de


algunas de las siguientes medidas:
-Flexibilización del régimen corporativo de los fondos de Inversión para hacerlos
accesibles al pequeño inversionista

-Fortalecimiento del Régimen del Mercado de Valores.

-Se eleva a rango de ley el Consejo Nacional de Inclusión Financiera.

-Se eleva a rango de ley el Comité de Educación Financiera.

-Se mejora y fortalece el Esquema de Sanciones y Autocorrección.

La Reforma Financiera sienta bases sólidas para que el sector financiero


contribuya en mayor medida al desarrollo económico incluyente y hará del crédito
un mayor detonador de crecimiento económico en favor de las familias mexicanas.

Con la Reforma Financiera se establece un marco jurídico que promueve la


competencia, multiplicando y mejorando las opciones de crédito para los
mexicanos. Asimismo fortalece la regulación, la coordinación y el sano desarrollo
del sector.

El propósito de la Reforma Financiera es claro: que haya más crédito y más


barato.

TEMA V. EMPRENDIENDO EN MÉXICO

V.I MICRO, PEQUEÑAS Y MEDIANAS EMPRESAS (MIPYMES)

Las micro, pequeñas y medianas empresas o por sus siglas (MiPyMEs)


constituyen un sector muy importante por su número en la economía nacional, no
solo por su aportación a la producción y distribución de bienes y servicios, sino
también por el impulso que representan para el desarrollo económico del país.
Estas generan un impacto grande en la generación de empleos y la producción
nacional. A partir del 2006 hubo alrededor de 4 millones de empresas en México.
Fuera de los 4 millones, un 99,8 % eran pequeñas y medianas empresas.
También una contribución significativa al PIB de México, proviene de pequeñas y
medianas empresas. Y de manera más relevante aún, las pequeñas y medianas
empresas contribuyen con el 72% del empleo formal en México.

Los gobiernos de países en desarrollo reconocen la importancia de las mipymes


por su contribución al crecimiento económico y sobretodo a la generación de
empleos, así como al desarrollo regional y local.

Algunas fortalezas de las MiPymes:

-Son un importante motor de desarrollo para el país


-Cuentan con una gran movilidad permitiéndoles ampliar o disminuir el tamaño de
la planta

-Cambiar el tipo de proceso técnico gracias al dinamismo

-Pueden llegar a convertirse en una empresa grande

-Absorben una porción importante de la población económicamente activa

-Tienen gran capacidad para generar empleos

-Adaptan y asimilan nuevas tecnologías de la información para poder mejorar su


producción

-Establecen diversas políticas y contribuyen al desarrollo local y regional

Algunas de las debilidades de las PYMES son:

-No tienen la capacidad para mejorar el equipo y las técnicas de producción

-En ocasiones es difícil contratar personal con capacitación por no poder pagar
salarios competitivos

-No hay controles de calidad generalizados o son mínimos

-No todas pueden financiar los gastos de capacitación

Otros problemas derivan de la falta de organización y se expresan en ventas


insuficientes, mal servicio, precios altos o calidad mala, mala atención al público,
etc.

Las Pymes han sido una parte importante del desarrollo del país, especialmente
en el área de las exportaciones. Debido a su pequeño tamaño, son versátiles,
dinámicas y tienen el potencial de crecimiento. Este potencial también incluye la
entrada en mercados internacionales.

Ellos son una fuente importante de creación de empleo en el país y son los más
aptos para implementar nuevas tecnologías. Puesto que muchas se encuentran en
diferentes regiones del país, fomentan el desarrollo regional. La principal
contribución al crecimiento de las empresas se encuentra en las MiPymes. La
importancia de las pequeñas y medianas empresas en México ha crecido a través
del tiempo debido al efecto positivo que estas empresas han tenido sobre la
economía de México.

Por otra parte, también tienen algunas debilidades. En general, las MiPyMEs no
tienen el hábito de la reinversión para mejorar la producción o renovar sus
equipos. Carecen de recursos suficientes para contratar empleados
especializados y para entrenar a los actuales. Esto y la falta de previsión pueden
provocar ventas insuficientes, falta de competitividad, servicio al cliente
inadecuado, baja calidad y precios más altos.

Ante esta situación, lo que hace falta es potenciar los esquemas de negocios de
las diferentes PyMEs, brindando más y mejores productos financieros ágiles que
se adapten a sus necesidades, por sectores.

El tema de las FinTech, tiene mucho que ver para esa potenciación, ya que
pueden brindar productos flexibles para cubrir las necesidades que la banca
tradicional no suele contemplar.

Las FinTech ofrecen servicios que los bancos no pueden otorgar y que sí pueden
disputar una porción de sus clientes, ya que existe descontento con los servicios
financieros de la banca tradicional.

V.II Créditos e incentivos

Una empresa o negocio puede generar suficientes ingresos para sus gastos
habituales, sin embargo existen otras opciones de apoyo para su estabilidad y
crecimiento, como créditos que pueden ayudar a solventar otros gastos que
implican contar con mayor capital para imprevistos, inversiones para el
crecimiento, la compra de maquinaria, entre otros. Pongamos en contexto estos
temas:

Las instituciones financieras ofrecen distintos tipos de crédito para ajustarse a las
necesidades de los clientes. Estos créditos se orientan al consumo y a las
actividades productivas. Las instituciones financieras ofrecen crédito a los hogares
a través de tarjetas de crédito, créditos hipotecarios, créditos para la adquisición
de bienes de consumo duradero y créditos automotrices. En tanto, las empresas
solicitan créditos pyme, microcréditos, de habilitación y avío, refaccionarios,
quirografarios, prendarios, e interbancarios y refaccionarios, entre otros.

El deudor puede pagar el crédito a plazos previamente establecidos o bien puede


hacer un solo pago al final del periodo por el total del crédito, adicionando el
interés que se haya pactado entre el deudor y el acreedor. Por lo general, una vez
que se utiliza el crédito no se puede volver a disponer del dinero, aunque el
deudor ya lo haya pagado. La excepción a esta regla son los créditos revolventes
o renovables, como los que se otorgan mediante tarjetas de crédito, en los que el
tarjetahabiente puede volver a hacer uso de la parte de la línea de crédito utilizada
una vez que la haya liquidado. En algunos casos las instituciones financieras
piden a los deudores que otorguen garantías por el dinero que están recibiendo en
préstamo. Estas garantías pueden constituirse a través de hipotecas, prendas o
fideicomisos.
Si un deudor no paga el dinero que se le prestó en el plazo establecido vulnera la
confianza de la institución que lo otorgó y posiblemente éste dejará de prestarle
dinero. Existen empresas cuyo propósito es llevar un historial del pago de los
créditos, a través del cual se sabe qué personas han cumplido con sus
obligaciones de pagar y quiénes han dejado de hacerlo. A estas empresas se les
denomina Burós de Crédito.

Las instituciones financieras deben ser muy cuidadosas al momento de otorgar


créditos porque al hacerlo utilizan el dinero que las personas han depositado en
sus cuentas. Es por ello que deben realizar un buen análisis de la calidad crediticia
de los deudores, utilizando los datos de los historiales de crédito de las personas,
proporcionados por los Burós de Crédito.

Recomendaciones al contratar un crédito

-Entender que quien firma un contrato de crédito asume en ese momento


obligaciones de pago.

-Leer y entender el contrato de crédito antes de fírmalo. Preguntar si no entiende


el significado de algún término legal o financiero.

-Firmar cada hoja del contrato para así evitar que las puedan cambiar. Una vez
firmado el contrato exigir una copia de éste ya que es obligación legal del acreedor
entregarla.

-Evaluar el plazo del crédito más adecuado. Un crédito a corto plazo normalmente
implica pagos más elevados y uno a largo plazo implica pagos más pequeños pero
por un tiempo mayor.

-Comparar entre las diversas opciones de crédito que ofrecen las instituciones,
para verificar cuál de ellas ofrece los términos más baratos y más convenientes
para las necesidades de cada persona.

-Verificar cuidadosamente la tasa de interés que se va a contratar, así como las


comisiones que se tengan que pagar. En particular, comparar el Costo Anual Total
(CAT) que deben proporcionar las distintas instituciones que otorgan créditos.

-Verificar las fechas límite de pago para no incurrir en falta de pago o mora.

-Revisar los estados de cuenta para verificar que se hayan contabilizado en forma
correcta todos los pagos y que no se está realizando algún cargo que no
corresponda. En caso de notar alguna anomalía, reportarla de inmediato a la
institución que otorgó el crédito. Conservar todos los comprobantes de pago del
crédito.

Conceptos relacionados con el crédito que hay que tomar en cuenta


Tasa de interés:

Conocida también como costo del dinero. Cualquier persona puede preguntarse:
“¿Cuánto me cuesta pedir prestado dinero?”, “¿Cuánto ingreso puedo obtener al
prestar mi dinero?” Una buena guía es la tasa de interés. La tasa de interés es lo
que se paga al pedir prestado dinero y es lo que se cobra al prestar dinero. Para
una persona que pide prestado dinero a un banco, la tasa de interés será el costo
principal de ese préstamo.

La tasa de interés se expresa como porcentaje en un periodo determinado. Si la


institución financiera ofrece una tasa del 10% anual por otorgar dinero en
préstamo, querrá decir que la persona que recibió ese préstamo deberá pagar la
suma de dinero que la institución le prestó más el equivalente a un 10% del dinero
prestado por cada año transcurrido del préstamo. En otras palabras, si la persona
recibió 1,000 pesos en préstamo por un año, entonces tendrá que pagar esos
1,000 pesos más 100 pesos de intereses, ya que la tasa de interés es del 10%
anual.

Continuando con el ejemplo anterior, si los 1,000 pesos que le prestaron a la


persona fueron a un plazo de dos años, entonces el primer año la persona tendrá
que pagar 100 pesos de intereses y el segundo año tendrá que pagar otros 100
pesos de intereses. Al final del periodo de dos años, esa persona habrá pagado
los 1,000 pesos que le prestaron más 200 pesos de intereses por los dos años
que duró el préstamo. De manera similar, si el préstamo fue por seis meses,
entonces la persona tendrá que devolver al vencimiento de dicho plazo los 1,000
pesos que recibió en préstamo más la cantidad de 50 pesos por los intereses que
ese préstamo generó, a la tasa anual del 10%, durante los seis meses que duró el
préstamo.

Aunque el ejemplo señalado en el párrafo anterior es muy sencillo, el cálculo de


intereses no lo es tanto. Cualquier persona que pida un préstamo tiene que tener
mucho cuidado con los intereses que le vayan a cobrar. Por ejemplo, la tasa de
interés puede no estar expresada en términos anuales sino mensuales o
semanales o hasta diarios. Por ejemplo, si una persona recibe 1,000 pesos a una
tasa de interés mensual del 10%, entonces esa persona tendrá que pagar por el
préstamo la cantidad de $100 pesos ¡cada mes! Si la tasa de interés es diaria
entonces tendrá que pagar $100 pesos en forma diaria, o sea, ¡cada día! Por eso,
se deberá poner mucha atención a la tasa de interés que se cobra y a su
periodicidad (es decir si es una tasa anual, mensual, semanal o diaria).

Adicionalmente, puede haber préstamos en los que la tasa de interés no pagada


puede irse capitalizando. Es decir, los intereses no pagados pueden pasar a
formar parte del capital. Cuando los intereses se capitalizan el saldo deudor crece
geométricamente con el paso del tiempo si el deudor no los liquida por completo
antes de que concluya el plazo para hacerlo.
Un préstamo puede tener distintos tipos de tasas de interés. Por ejemplo, el
préstamo tiene la tasa de interés ordinaria, la cual es la que se cobra por el solo
hecho de que se está prestando dinero. El crédito puede también tener una tasa
de interés moratoria que es la tasa de interés que la institución financiera cobra en
caso de que no se pague una mensualidad o el crédito a tiempo.

Ventajas y desventajas entre tasas fijas y variables:

Quien solicita un crédito tiene la opción de contratarlo con una tasa de interés fija
o una tasa de interés variable o bien una combinación de ambas. Por ejemplo, al
inicio del crédito puede cargarse una tasa fija y después de unos años la tasa
puede convertirse en variable. ¿Cuál es la mejor opción? La decisión dependerá
de las necesidades de financiamiento, del monto del crédito, del plazo del crédito y
de los ingresos presentes y futuros del solicitante del crédito. Entre las ventajas y
desventajas de una tasa y otra están las siguientes:

-La principal ventaja de la tasa de interés fija es conocerla de antemano y tener la


certeza de que se mantendrá constante a lo largo de la vida del crédito, por lo que
lo más probable es que los pagos también sean por una cantidad fija. Es decir, los
pagos no se incrementarán durante el plazo del crédito. Por el otro lado, una tasa
de interés variable puede estar sujeta a que si las tasas de interés en el mercado
suben, también suba la tasa de interés del crédito, por lo que lo más probable es
que los pagos mensuales o periódicos también suban.

-La principal ventaja de la tasa de interés variable es que si las tasas de interés en
el mercado bajan, a tasa de interés del crédito también lo hará, por lo que los
pagos mensuales o periódicos podrían bajar. Por otro lado, contratar un crédito a
una tasa fija que sea alta podría ocasionar que en algún momento durante la vida
del crédito el deudor pague una tasa de interés elevada en comparación con la
que podría obtener si obtuviera un nuevo crédito; aunque en este caso tendría la
opción de contratar ese nuevo crédito a una tasa de interés menor y con ese
dinero pagar y cancelar el primer crédito.

Monto del crédito:

El monto se refiere a la cantidad de dinero a prestar. Tener en cuenta que la


cantidad a pagar es mayor que el monto del crédito principalmente por el pago de
los intereses. En las tarjetas de crédito, el monto se denomina línea de crédito, es
decir, el monto máximo de dinero que el banco está dispuesto a prestar al
tarjetahabiente a través del uso de la tarjeta.

Denominación del crédito:

Los créditos que se otorgan en México, por lo general, se denominan en pesos ya


que esa es la moneda de curso legal en el país. Sin embargo, puede haber
ocasiones en que se otorguen créditos en una moneda diferente, como el dólar
estadounidense. Estos últimos créditos se otorgan a empresas que por sus
actividades reciben ingresos en dicha moneda, por ejemplo, empresas
exportadoras de bienes o servicios. Normalmente, un crédito que se otorga en
dólares debe ser pagado en esa misma moneda, aunque existen excepciones.

Comisiones:

Las comisiones son cobros distintos a las tasas de interés que carga el banco por
el crédito que está otorgando las cuales tienen el propósito de cubrir los costos
directos y los gastos administrativos relacionados con el crédito. Estas comisiones
pueden generarse por la apertura del crédito, la disposición del crédito, los pagos
anticipados o los realizados fuera de tiempo, entre otros conceptos. Para evitar
abusos, el Banco de México ha emitido diversas circulares mediante las cuales
obliga a los bancos y demás entidades financieras a informar a los clientes sobre
el monto y las comisiones que cobran por los créditos, así como sobre los demás
servicios que ofrecen al público antes de que se contrate el crédito o el servicio.

Vencimiento anticipado:

Algunos contratos de crédito tienen contemplado que en caso de existir


incumplimiento de algún pago o que éste se haya hecho fuera de tiempo, el
crédito otorgado vencerá en forma anticipada. Esto quiere decir que si un crédito
tiene un determinado plazo de vida (por ejemplo 24 meses) puede terminar antes
de que venza ese plazo en caso de que el deudor deje de realizar un pago o lo
haya hecho fuera de tiempo. En estos casos, el banco podrá cobrar lo que falta de
pagar del crédito antes de lo previsto.

Pagos anticipados:

Los pagos anticipados son los pagos que realiza el deudor en adición a los pagos
mensuales periódicos previstos. Es decir, además de los pagos que el deudor
realiza en forma periódica, éste puede hacer otros pagos que no está obligado a
realizar y que, por lo general, se abonan al capital que todavía falta por pagar.
Estos pagos anticipados pueden tener dos efectos distintos sobre los pagos
restantes del crédito. Uno es que disminuya el monto de los pagos mensuales, si
se mantiene el plazo del crédito; el otro es que disminuya el plazo del crédito, si
los pagos mensuales se mantienen iguales. Se debe tener cuidado con los pagos
anticipados porque algunas veces los bancos cobran comisiones por efectuar
dichos pagos.

Para mayor información sobre pagos anticipados véase la Circular 16/2007 del
Banco de México.

Diferencias entre crédito revolvente y a plazo:

-En el crédito a plazo el deudor no puede volver a usar el monto del crédito una
vez que se haya pagado o vencido el plazo. Para volver a utilizarlo tendría que
nuevamente solicitar el crédito. En los créditos revolventes, el deudor puede volver
a disponer de la parte de la línea de crédito utilizada después de que la haya
liquidado.

-En el crédito a plazo los pagos periódicos por lo general son por una cantidad fija
que incluye capital e intereses. Los pagos periódicos de los créditos revolventes
no son por la misma cantidad cada periodo ya que el monto de pago cambia
según los abonos y cargos que se hayan hecho a la línea de crédito.

-En los créditos a plazo, éste es fijo y, por lo general, no se puede cambiar a
menos de que el crédito se reestructure para cambiar dicho plazo. Los créditos
revolventes no tienen un plazo fijado.

-En los créditos a plazo por lo general se cobra una comisión por los pagos
anticipados adicionales a los pagos periódicos que el deudor esté obligado a
realizar.

V.III Instrumentos de fomento

Intermediarios financieros de fomento

Los intermediarios financieros, principalmente los bancos privados, facilitan la


transferencia de dinero de los ahorradores (que por lo general tienen sus cuentas
a plazos cortos) a los usuarios de crédito (que por lo general lo requieren a plazos
mayores). Los intermediarios financieros no siempre están dispuestos a prestar
dichos recursos a plazos largos o lo hacen a tasas de interés muy altas.

Lo anterior se presenta, por ejemplo, cuando la persona o empresa que solicita el


préstamo no posee un historial crediticio, tiene ingresos limitados, no cuenta con
una garantía o realiza una actividad en la que los ingresos pueden ser muy
variables y, por lo tanto, es más probable que tenga dificultades para pagar
oportunamente el préstamo. Los intermediarios financieros pueden no otorgar
crédito para realizar proyectos de inversión si los consideran demasiado riesgosos
o de larga maduración, es decir, si los ingresos que dichos proyectos generan
ocurren en el mediano y largo plazos, o si requieren una inversión inicial
cuantiosa.

Los intermediarios financieros, principalmente la banca múltiple, facilitan la


transferencia de dinero de los ahorradores

La dificultad para obtener un crédito es más común para empresas pequeñas o


que realizan actividades relacionadas con los sectores agropecuario, rural o
pesquero. Por citar un caso, quien realiza una actividad agrícola (por ejemplo, un
productor de maíz) se encuentra sujeto a fenómenos climatológicos (inundaciones,
sequías, heladas, entre otros) que pueden provocarle pérdidas de ingresos y
disminuir su capacidad de pago. Así, para atender a personas y empresas que
requieren crédito, pero que no pueden acceder a los préstamos otorgados por los
bancos u otros intermediarios financieros privados, el Gobierno de México creó
instituciones dedicadas a apoyar a individuos y a sus negocios clasificadas como
“intermediarios financieros de fomento”.

Además de inducir a los intermediarios financieros privados a facilitar el crédito a


personas y empresas en mejores condiciones, los intermediarios financieros de
fomento tienen como objetivo canalizar el crédito hacia actividades y sectores
prioritarios para el Gobierno, que tienen un efecto favorable sobre la población, en
particular la de menores ingresos. Tal es el caso del sector agropecuario, del
sector de la vivienda de interés social y del sector de desarrollo de infraestructura.

A diferencia de los bancos y otros intermediarios financieros privados, los


intermediarios financieros de fomento no sólo buscan obtener un beneficio
económico, sino social. Aun así, el objetivo de recuperación de créditos es
fundamental para el sostenimiento financiero de estas instituciones.

¿Cómo funcionan los intermediarios financieros de fomento?

Los intermediarios financieros de fomento pueden otorgar créditos directamente a


personas o empresas, en cuyo caso se denominan operaciones de “primer piso”, o
a través de otros intermediarios financieros privados y públicos, denominadas
operaciones de “segundo piso”.

En la siguiente figura se presenta el caso de Ana, quien requiere recursos para


realizar un proyecto. Ella puede obtener el préstamo directamente de un banco o
de un intermediario financiero privado si cumple las condiciones que éste le
solicita, por ejemplo, tener un determinado nivel de ingresos, contar con historial
crediticio, gozar de un empleo formal, ofrecer algún recurso que garantice el pago
del crédito, etc. En caso de que el banco decida no prestarle a Ana, quizá porque
estima que podría incumplir con el pago oportuno del crédito, ella podría obtener el
apoyo de un intermediario de fomento.

En dicha situación existen dos posibilidades: a) que Ana obtenga el crédito


directamente del intermediario de fomento (“primer piso”); o b) que Ana obtenga el
crédito de un banco o intermediario financiero privado, el cual, a su vez, puede
obtener el apoyo de un intermediario de fomento (en este caso, de “segundo
piso”).

¿Cómo participa el Banco de México en los Intermediarios Financieros de


Fomento?

El Banco de México ha sido un importante promotor de los intermediarios


financieros de fomento. Ha sido fiduciario de fideicomisos relacionados con el
turismo, vivienda, equipamiento industrial y comercio exterior. Un fideicomiso es
un acuerdo mediante el cual una persona o institución, llamada fideicomitente,
entrega recursos (bienes, dinero, derechos, entre otros) a otra persona o
institución bancaria, llamada fiduciario, para que ésta lo administre con o para un
fin determinado. Hoy en día, por mandato de sus respectivas leyes orgánicas,
Banco de México participa activamente como miembro de los órganos de gobierno
de los fideicomisos públicos de fomento, la banca de desarrollo y la Financiera
Rural.

Un fideicomiso es un acuerdo mediante el cual una persona o institución, llamada


fideicomitente, entrega recursos (bienes, dinero, derechos, entre otros) a otra
persona o institución bancaria, llamada fiduciario, quien se encarga de administrar
estos recursos y entregarlos, en su momento, a su legítimo propietario.

Dentro de los principales fideicomisos públicos de fomento destacan los


agrupados en los Fideicomisos Instituidos en Relación con la Agricultura, mejor
conocidos como FIRA (www.fira.gob.mx), cuyo objetivo es otorgar diversos apoyos
(crédito, garantías, capacitación, asistencia técnica y transferencia de tecnología)
a los sectores agropecuario, rural y pesquero del país. Además de participar en los
órganos de gobierno de FIRA, el Banco de México es su fiduciario y, como tal, es
el encargado de cuidar de su patrimonio.

La banca de desarrollo, por su parte, está conformada por:

-Nacional Financiera (Nafin, www.nafin.com), cuyo objetivo es canalizar apoyos


técnicos y financieros al fomento industrial.

-Banco Nacional de Obras y Servicios Públicos (Banobras,


www.banobras.gob.mx), dirigido principalmente a financiar proyectos de inversión
pública o privada en infraestructura.

-Banco Nacional de Comercio Exterior (Bancomext, www.bancomext.com),


orientado a financiar el comercio externo del país.

-Banco del Bienestar que surge a partir de la extinción del BANSEFI y tiene como
principal misión fomentar el ahorro popular y constituir un importante instrumento
de inclusión al ser el principal agente de dispersión de los apoyos e incentivos
provenientes de los programas sociales de la actual administración
(https://www.gob.mx/bancodelbienestar)

-Banco Nacional del Ejército, Fuerza Aérea y Armada (Banjército,


www.banjercito.com.mx), que otorga créditos y financiamiento a miembros del
Ejército, Armada de México y Fuerza Aérea; y,

-Sociedad Hipotecaria Federal (SHF, www.shf.gob.mx) que brinda crédito y


garantías para la construcción, adquisición y mejora de vivienda, preferentemente
de interés social.

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