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DIPLOMADO EN EDUCACIÓN FINANCIERA

MÓDULO 1

I. Contexto de la Educación Financiera


I.I ¿Qué es Educación Financiera?
Algunas definiciones:

La Organización para "Una combinación de conciencia, conocimiento, habilidad,


la Cooperación y el actitud y comportamiento necesarios para tomar decisiones
Desarrollo financieras acertadas y, en última instancia, lograr el bienestar
Económicos (OCDE) financiero individual”
"La Educación Financiera permite a los individuos mejorar la
comprensión de conceptos y productos financieros, prevenir el
La Comisión Nacional fraude, tomar decisiones adecuadas a sus circunstancias y
del Mercado de necesidades y evitar situaciones indeseables derivadas bien de
Valores de España un endeudamiento excesivo o de posiciones de riesgo
inadecuadas"

"Conjunto de acciones necesarias para que la población


adquiera aptitudes, habilidades y conocimientos que le
La Estrategia permitan administrar y planear sus finanzas personales, así
Nacional de como usar de manera óptima los productos y servicios que
Educación Financiera ofrece el sistema financiero en beneficio de sus intereses
(ENEF) personales, familiares, laborales, profesionales, y de su
negocio"

La Educación Financiera consiste en "proveer la información y


Comisión de los conocimientos, así como ayudar a desarrollar las
Educación Financiera habilidades necesarias para evaluar las opciones y tomar las
de Estados Unidos mejores decisiones financieras".

La Educación Financiera consiste en el desarrollo de "la


Autoridad de capacidad para administrar tu dinero, dar seguimiento a tus
Servicios Financieros finanzas, planear para el futuro, elegir productos financieros y
del Reino Unido mantenerte informado sobre asuntos financieros".

Análisis del concepto de Educación Financiera


Educación Financiera
Se refiere a la transmisión de Se refiere al uso de las finanzas, es decir, el
conocimientos, habilidades, valores y intercambio de bienes de capital, ya sea entre
hábitos para formar un aprendizaje individuos, entre empresas o entre estos y
determinado. gobiernos.
De esta manera, podemos decir que hablamos de transmisión de conocimientos
financieros para tener un aprendizaje en esta materia.
Para fines del presente diplomado, se entenderá a la Educación Financiera, como el
conjunto de conocimientos, habilidades y prácticas, para comprender mejor los
conceptos, productos y servicios financieros con la correcta administración de los
recursos para tomar decisiones informadas.

La Educación Financiera permite que las personas adquieran conocimientos y


habilidades básicas para administrar mejor sus recursos, incrementar y proteger su
patrimonio, con la ayuda del uso adecuado y responsable de los productos y servicios
financieros.

La Comisión Nacional para la Protección y Defensa de los Usuarios de Servicios


Financieros (Condusef) organiza la Semana Nacional de Educación Financiera
(SNEF), iniciativa que tiene como fin concientizar a la población en general sobre la
importancia que ésta tiene para mejorar su bienestar. Se han llevado a cabo catorce
ediciones de la SNEF, (doce presenciales y dos virtuales) en las que se realizaron un
total de 1 mil 72 actividades impartidas; 1 millón 30 mil 961 personas impactadas; 39
mil 470 actividades realizadas; 3 millones 63 mil 35 asistentes en todos los estados del
país.

La complejidad para entender los productos y servicios financieros ha hecho prioritario


desarrollar información amigable y sencilla, que permita a las personas un mejor
entendimiento y una mayor comparación entre productos y servicios financieros.
Difundir la educación financiera hacia diferentes puntos del país ha sido de especial
interés para instituciones como la Condusef.
La finalidad de la Educación Financiera es tomar decisiones informadas con relación a
los productos y servicios que ofrecen las instituciones financieras, para mejorar nuestras
vidas. De manera personal, el buen manejo de las finanzas, impacta positivamente en la
calidad de vida y en la de su familia. De manera social incrementa el desarrollo
económico a través del manejo financiero responsable.
I.II Panorama actual de la Educación Financiera
La Educación Financiera constituye un elemento fundamental que, pese a su
importancia, tiene un alcance limitado en el número de usuarios, pero sobre todo
de productos financieros de instituciones bancarias y financieras.
En nuestro país, el nivel de Educación Financiera tiene una relación directa con el nivel
de ingresos y estudios de la gente. Una persona con mayor grado académico y mayor
sueldo, es más probable que tenga mayor conocimiento sobre los diversos productos
financieros, mientras una persona con menos escolaridad y niveles de ingreso, tendrá
menores conocimientos en la materia.
Sin embargo, ello no implica que sepa administrarlos y que tenga un razonable control
de sus finanzas personales. En tal sentido, existe una correlación directa entre la
salud financiera y la salud emocional, ya que las finanzas personales son un tema muy
delicado e importante, pues se trata del patrimonio y bienestar futuro de una persona o
de toda una familia; no obstante, sabemos que para muchas personas es prácticamente
imposible llegar a fin de mes con números positivos.

La Educación Financiera en México es insuficiente. Sin embargo, este fenómeno no


corresponde necesariamente a la falta de elementos y herramientas para desarrollar estos
conocimientos, sino a la falta de divulgación y a la desigualdad social del país, lo que ha
limitado significativamente su alcance.
Actualmente, existen programas de Educación Financiera, tanto por parte del
gobierno como de instituciones privadas, no obstante, no han sido lo
suficientemente efectivos para llegar a toda la población.
El Banco de México, por ejemplo, tiene un programa y un portal de educación
financiera, con videos y contenidos, incluso para diferentes edades. Por su parte,
algunas instituciones financieras del país también poseen programas de Educación
Financiera, aunque, en la mayoría de los casos, pareciera que los tienen solo por cumplir
con un mero requisito y no les brindan la difusión necesaria.
La Educación Financiera es un tema clave en el bienestar económico de la
población, como elemento de desarrollo que debería ser inculcado desde la
educación básica. Cuanto antes se obtenga información sobre estos temas, será
mejor para la persona, pues irá desarrollando desde pequeño una cultura del
ahorro y del manejo del dinero que será relevante en su vida adulta.
Al contar con mayor información respecto a los productos y servicios financieros que
existen en el mercado, los usuarios tienen la capacidad de elegir el que más les
favorezca, accediendo a mejores condiciones, ya sea en sus créditos o en sus
inversiones, lo que al final se verá reflejado en sus ingresos y en su bienestar.
Si se incrementa la participación de la sociedad a una correcta Educación Financiera, se
ensancha la cultura financiera de un país. Las personas podrán seleccionar los mejores
productos y serán cada vez más conscientes de la importancia de utilizar de una manera
responsable estos servicios.
Las Instituciones Financieras tendrán usuarios más responsables y los usuarios podrán
evaluarlos mejor y así estarán obligados a ofrecer más y mejores productos y servicios,
lo que enriquecerá su calidad e incrementará el nivel de competencia entre ellos.
Es importante tomar en cuenta que la Educación Financiera no es un tema que abarque,
únicamente, cuestiones como los productos de crédito, ahorro o de seguros de las
instituciones financieras. Es un tema que va más allá de estos instrumentos, es saber
cómo manejar el dinero, cómo ahorrar y cómo hacer un presupuesto o cómo protegerse
ante ciertos riesgos. Es, al final de cuentas, una forma de vida.
Algunos datos del Informe Panorama Anual de Inclusión Financiera 2021, que
corresponde a datos a nivel nacional al cierre de 2020, señalan lo siguiente:
I.III Importancia de la Educación Financiera en México

En nuestro país, despertar el interés por la Educación Financiera es una tarea urgente y
necesaria. Sobre todo, porque hay grandes lagunas en los conocimientos financieros de
la sociedad en general. Lo anterior, tiene una serie de consecuencias adversas para las
personas, como el endeudamiento excesivo, la falta de ahorro para el futuro, el uso
improductivo de las remesas y la poca claridad sobre los beneficios que ofrece la
inversión en actividades productivas, la adquisición de activos, o la educación de
los hijos.
Del mismo modo, la falta de información, aunada a la escasa penetración del sistema
financiero, fomentan el uso de servicios financieros informales (tandas, ahorro bajo el
colchón, ahorro en animales, solicitud de crédito a prestamistas), con frecuencia
desventajosos y a costos elevados. También, el número y la complejidad de los
productos financieros han aumentado notablemente en años recientes, lo que dificulta
que las personas tomen decisiones informadas que sirvan a sus propósitos.

I.IV Beneficios de la educación financiera

Los beneficios que ofrece la Educación Financiera son considerables, tanto para la
economía de cada individuo como para la economía nacional. En el plano individual,
la Educación Financiera contribuye a mejorar las condiciones de vida de las
personas, ya que proporciona herramientas para la toma de decisiones adecuadas
relativas a la planeación financiera y a la administración de los recursos, así como
información pertinente y clara que da lugar a un mayor y mejor uso de los
productos y servicios financieros. Así, los usuarios con mayores niveles de Educación
Financiera tienden a ahorrar más, lo que normalmente se traduce en mayores niveles de
inversión y crecimiento de la economía en su conjunto.
Adicionalmente, la Educación Financiera, más allá de contribuir a mejorar el
desempeño de las instituciones debido a una clientela más responsable e
informada, puede generar un intercambio de información de mayor calidad entre
las instituciones financieras y sus clientes. Gracias a la educación financiera los
usuarios demandan servicios adecuados a sus necesidades y los intermediarios
financieros tienen mayor conocimiento de las necesidades de los usuarios, lo que da
lugar a una mayor y mejor diversificada oferta de productos y servicios financieros
novedosos, aumentando la competitividad e innovación en el sistema financiero.

Actualmente, la Educación Financiera carece de espacios en los programas


universitarios y materias especializadas en posgrados de alta dirección, sin embargo, en
años recientes este tema ha cobrado un interés significativo porque las finanzas
personales afectan al sistema económico ya que ahora a través de las redes sociales
muchas personas a edad temprana tienen acceso a productos financieros.

La importancia de la Educación Financiera en lo personal y familiar radica en su


capacidad para mejorar:

La finalidad de la Educación Financiera es contribuir a tomar decisiones informadas


con relación a los productos y servicios que ofrecen las entidades financieras para
transformar nuestras vidas. En el plano individual, el buen manejo que tiene una
persona sobre sus finanzas, impacta positivamente en su calidad de vida y en la de su
familia, ya que:

Promueve la cultura del ahorro para el corto y largo plazo.


 Planea sus ingresos y gastos a través de un presupuesto.
 Considera si puede pagar algo antes de comprarlo.
 Genera conciencia sobre cuándo y cómo es conveniente endeudarse.
 Permite comparar productos financieros.
 Otorga protección a los consumidores que, al estar informados, demandan mayor
transparencia en los servicios financieros.
 Evita el estrés financiero.

En este sentido, es un hecho que las emociones influyen en las decisiones financieras, y
si no se tiene un buen control de los gastos, en el futuro no sólo se tendrán problemas de
liquidez, sino también de estabilidad emocional.
Con la Educación Financiera se toman decisiones informadas de los productos y
servicios financieros, para transformar nuestras vidas. En el plano individual, el buen
manejo que tiene una persona y que impacta positivamente en su calidad de vida y en la
de su familia.
II. La inclusión financiera
II.I Concepto
La inclusión financiera se define como el acceso al uso de servicios financieros
formales bajo una regulación apropiada que garantice esquemas de protección a
las personas usuarias y promueva la educación financiera para mejorar la
capacidad financiera de todos los segmentos de la población.
De acuerdo con la Comisión Nacional Bancaria y de Valores (CNBV), la inclusión
financiera, a través del acceso al uso de servicios y productos financieros, ha sido una
herramienta para que la población pueda obtener recursos, satisfacer sus necesidades
financieras y expandir sus posibilidades de consumo; así como para que las empresas
puedan incrementar sus capacidades de financiamiento y administración financiera, que
trasciendan en una mayor productividad.
De acuerdo con un análisis realizado a diversos estudios que han mostrado y
demostrado los efectos positivos de la inclusión financiera, se han identificado cinco
impactos directos de la inclusión financiera en la población, tales como resiliencia
financiera, aprovechamiento de oportunidades, inversión de activos, incremento del
bienestar social y empoderamiento de las mujeres; los cuales contribuyen a lograr una
mejor salud financiera tanto de la población como de las empresas. Asimismo, se han
detectado algunos efectos indirectos en la población a niveles micro y
macroeconómicos como son crecimiento económico, disminución de la corrupción e
informalidad, y ahorros en el gobierno (CNBV, 2020, Impactos de la inclusión
financiera).

También la Inclusión Financiera propicia menor pobreza y desigualdad entre de la


población. El acceso al crédito permite que las personas y hogares adquieran
patrimonio —como una casa o un vehículo— o bienes duraderos; que emprendan
alguna actividad productiva que genere ingresos; que estén financieramente
protegidas ante emergencias o imprevistos, y que cuenten con los recursos suficientes
para vivir tranquilas durante su jubilación. Además, en el caso de las empresas, las
acerca a mejores posibilidades de crecimiento al permitirles comprar maquinaria,
invertir en inventario y mejorar sus instalaciones, entre otros beneficios.
La Inclusión Financiera se define como el acceso al uso de productos y servicios
financieros formales bajo una regulación apropiada que garantice esquemas de
protección a las personas usuarias y promueva la educación financiera para mejorar la
capacidad financiera de todos los segmentos de la población
Una persona será incluida financieramente cuando tenga acceso al menos a un servicio
financiero formal (de instituciones reguladas) de manera transparente (protección a las
personas usuarias), a la vez que tenga la posibilidad de adquirir la habilidad de
seleccionar los productos y los servicios que más le convengan (educación
financiera). La Inclusión Financiera es un importante mecanismo que permite
incrementar el bienestar de la población, al poder desplazar los flujos de ingreso y
consumo por medio del ahorro y el crédito, así como la acumulación de activos y la
creación de un fondo para la vejez.
Solamente 57 millones de personas de 18 a 70 años (68%) tienen al menos un producto
financiero, lo que representa sólo 3 millones más de personas con respecto a 2018. En el
mismo sentido, solo el 49 por ciento de la población adulta en México tiene una cuenta
en un banco o institución financiera. (CNBV-INEGI, 2021, Encuesta Nacional de
Inclusión Financiera 2021).

Una mayor Inclusión Financiera es de interés para todos los agentes que se desempeñan
en el sector financiero. Pero para alcanzar este fin, es necesario que los intermediarios
públicos, privados y sociales se den a la tarea de proporcionar las bases de Educación
Financiera para que las personas usuarias busquen y utilicen acertadamente los
productos y servicios que les resulten más convenientes o se ajusten a sus necesidades.
La Educación Financiera es un elemento clave para la Inclusión Financiera, que permite
hacer un uso eficiente y consciente de los productos y servicios financieros. Cuando las
personas tienen acceso al sistema financiero tienen mayores oportunidades de escoger
las opciones que favorezcan su desarrollo, como invertir en su educación, en un
negocio, en su salud o ahorrar para su retiro.
Las políticas y programas de Inclusión Financiera giran, principalmente, en torno a
cuatro pilares: acceso, uso, protección a las personas usuarias y Educación Económico-
Financiera.
Estos cuatro pilares deben sustentarse en datos precisos, objetivos y oportunos, para
lograr los resultados esperados. Esto implica que debe existir una adecuada medición
para, en primera instancia, tener un diagnóstico y, posteriormente, evaluar el impacto de
las acciones emprendidas y, en su caso, hacer los cambios necesarios y lograr el objeto
de dichas acciones. De ahí, la importancia de contar con indicadores que permitan medir
los avances que se van obteniendo.
Frecuentemente el concepto “bancarización” es utilizado para hacer referencia a la
incorporación al sistema financiero de personas en situaciones de vulnerabilidad, como
personas de escasos recursos o trabajadoras en el sector informal, que tradicionalmente
han sido desatendidos por la banca; sin embargo, esta bancarización puede ser tanto a
través de la banca comercial, como a través de otras instituciones financieras no
bancarias reguladas, como la banca de desarrollo o las entidades de ahorro y crédito
popular, por lo que se ha tendido a utilizar el término Inclusión Financiera en su lugar.

II.II Medición de la inclusión financiera

La CNBV y el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI), desde el año 2012


llevan a cabo, cada tres años, la Encuesta Nacional de Inclusión Financiera (ENIF). Esta
encuesta está enfocada en la medición del acceso, uso y barreras de productos y
servicios financieros, uso y destino de instrumentos financieros informales; uso de
pagos digitales, recepción de remesas, posesión de activos, conocimientos,
comportamientos y actitudes financieras, entre otros temas de la población adulta en
México.

Con los resultados obtenidos de las ediciones de la ENIF, ha sido posible generar un
diagnóstico robusto sobre la situación del país en materia de Inclusión Financiera, así
como identificar las principales barreras y problemas que obstaculizan que las personas
se beneficien del sistema financiero formal. A partir de este, se pudo formular la Política
Nacional de Inclusión Financiera (PNIF) de 2016 y, posteriormente, actualizarla en el
2020.
Dicho diagnóstico fue la base para la PNIF 2020, la cual por primera vez consideró un
proceso consultivo y de apropiación entre personas relevantes del sector financiero
público y privado, academia, personas expertas y organismos internacionales. Su
objetivo general es fortalecer la salud financiera de la población mexicana, a través del
incremento en el acceso y uso eficiente del sistema financiero, del desarrollo de las
competencias económico-financieras, y del empoderamiento de la persona usuaria.
La PNIF 2020 contiene una estrategia transversal que busca generar información e
investigación para identificar las barreras y áreas de oportunidad en la Inclusión
Financiera de la población, siendo una de sus principales herramientas la ENIF.
Asimismo, cuenta con seis objetivos, donde cada uno de los cuales despliega estrategias
y líneas de acción para impulsar la inclusión y las competencias económico-financieras,
así como la protección al usuario de productos y servicios financieros en México.
Para cada uno de estos objetivos se establecieron indicadores y metas para monitorear y
evaluar el desarrollo e implementación de la PNIF. Adicionalmente, para cada estrategia
se establecieron indicadores de seguimiento, los cuales servirán para monitorear la
evolución de la Inclusión Financiera en el país. Estos indicadores de seguimiento,
medidos a través de la ENIF, son los siguientes:

Fuente: PNIF 2020, solo se reportan los indicadores de los objetivos, medidos a través
de la ENIF.
pP= puntos porcentuales
Es evidente que la Inclusión Financiera es un elemento clave para reducir la pobreza e
impulsar la prosperidad económica y social del país. Por ello, es importante fortalecer la
infraestructura, física o digital para facilitar el acceso y provisión de productos y
servicios financieros.
Los canales tradicionales (sucursales y cajeros automáticos) son insuficientes para
lograr una cobertura de todo el territorio mexicano, dados los costos asociados a ello;
sin embargo, la regulación permite modelos de negocio más rentables como son los
corresponsales (tiendas de conveniencia, farmacias o de servicios), dan la posibilidad de
realizar pagos, retirar efectivo o abrir una cuenta, entre otros.

México presenta un reto en materia de infraestructura tecnológica para lograr


conectividad en la totalidad del territorio del país, principalmente en las zonas rurales,
donde, de acuerdo con la Encuesta Nacional sobre Disponibilidad y Uso de Tecnologías
de la Información en los Hogares (ENDUTIH) 2020, solamente 37% de los hogares del
país en localidades rurales cuentan con servicios de internet.
Por lo tanto, es necesario compartir recursos para lograr no solo conectividad en todas
las comunidades del país, sino también provisión de servicios financieros a través de
modelos de negocio donde varias instituciones compartan los costos operativos y
financieros involucrados.
En México es un reto en materia de infraestructura tecnológica, lograr conectividad en
la totalidad del territorio nacional, principalmente en las zonas rurales.
Dados los avances tecnológicos y las brechas generacionales, el uso de servicios
financieros digitales va tomando relevancia y los proveedores van migrando a ofrecer
servicios tales como la banca electrónica, que ha permitido que se puedan llegar a
realizar algunas operaciones financieras a través de los celulares o computadoras. Por
ello, se vislumbra que en un futuro los servicios y productos financieros se ofrezcan
cada vez más a través de canales diferentes a los tradicionales. Conforme a la ENIF
2021, más de la mitad de las personas con cuenta realiza sus operaciones, como
consultas de saldo o transferencias, a través de la aplicación móvil.
A continuación, se presenta un panorama sobre la Inclusión Financiera de México.
II.III Panorama de la inclusión financiera en México
En cuanto a la infraestructura, al cierre de septiembre de 2021, había 15 mil 779
sucursales, una disminución del 6.5 por ciento con respecto al cierre de 2019. Un total
de 60 mil 294 cajeros automáticos, con un incremento del 4.0 por ciento con respecto al
cierre 2019. En la captación de cuentas, se incrementó en un 2.2 por ciento, en relación
con el cierre de 2019 para alcanzar la cifra de 107 millones 204 mil 770 cuentas, los
créditos incrementaron en un 4.1 por ciento con lo cual se sitúan en una cartera de 54
millones 296 mil 536 contratos.
Es importante que los esfuerzos en promover mayor acceso y uso de servicios
financieros vayan acompañados de una regulación que garantice que los proveedores
de servicios proporcionen un trato justo y un servicio de calidad a sus usuarias y
usuarios, que facilite la toma decisiones informadas sobre sus recursos financieros.

Tomando como base la información de sucursales registradas al cierre de septiembre de


2021, la cobertura municipal fue de 50.2 por ciento, con una cobertura demográfica de
92.4 por ciento. Mientras que, para el caso de cajeros automáticos, la cobertura
municipal fue de 59.9 por ciento, con una cobertura demográfica de 95.3 por ciento.
Para los corresponsales registrados se tuvo una cobertura municipal de 74.2 por ciento,
con una cobertura demográfica de 97.7 por ciento. Por lo que, la cobertura municipal
del país con al menos un punto de acceso (sucursal, cajero automático y corresponsal) al
cierre de septiembre de 2021 fue de 78.4 por ciento.

Cobertura municipal de los puntos de acceso físicos (sucursal, cajero automático o


corresponsal)

Fuente: CNBV, mes de septiembre 2021


Particularmente, la Ciudad de México fue la entidad con el mayor número de
sucursales, con 1,793; por su parte, el municipio con más sucursales fue Guadalajara
con 369.
De acuerdo con el Panorama Anual de Inclusión Financiera 2021, el 82.7 por ciento de
la población adulta habita en localidades con más de 20 habitantes que se encuentran a
menos de 2 km de un punto de acceso. Esta proporción crece a 88.6 por ciento al
considerar un radio de 4 km y 94.2 por ciento, si el radio se amplía a 7 km. La cobertura
municipal con al menos un punto de acceso fue de 77.6 por ciento para el cierre de
2020.

En específico, el porcentaje de la población con acceso a al menos a una sucursal a una


distancia de 4 kilómetros, en promedio, fue de 77.0 por ciento y el del acceso de
localidades con más de 20 habitantes del 19.6 por ciento. El porcentaje de la población
con acceso a al menos a un cajero automático a una distancia de 4 kilómetros, en
promedio, fue de 80.4 por ciento y el del acceso de localidades con más de 20 habitantes
del 25.0 por ciento. Finalmente, el porcentaje de la población con acceso a al menos a
un corresponsal a una distancia de 4 kilómetros, en promedio, fue de 87.5 por ciento y
el del acceso de localidades con más de 20 habitantes del 41.2 por ciento.
De acuerdo con los resultados de la ENIF 2021, respecto a la tenencia de productos
financieros, se obtuvo que el 78 por ciento de la población adulta del país cuenta o ha
contado con al menos uno de los cuatro instrumentos financieros, como son cuenta,
crédito, seguro o cuenta de ahorro para el retiro, lo que representa un crecimiento de 2
puntos porcentuales (pp) con respecto a lo reportado en 2018. La población que cuenta
actualmente con un producto financiero se ha ubicado en 68 por ciento desde el 2015, lo
que sugiere que el porcentaje de la población potencialmente activa en el sistema
financiero se ha mantenido estable en los últimos años.
De manera particular, alrededor de 49 por ciento de la población reportó tener al menos
una cuenta, lo que representa un crecimiento de 5 pp con respecto a 2015. Alrededor del
65 por ciento de la población ha reportado tener o haber tenido una cuenta, mayor al 59
por ciento reportado en 2018.

La penetración del crédito formal se ha incrementado de 29 por ciento en 2015 a 33 por


ciento en 2021. La población que tiene o ha tenido al menos un crédito formal se ubicó
en 47 por ciento en 2021, mayor en 4 pp a lo reportado en 2015 y 3 pp más a lo
reportado en 2018. Entre los productos de crédito formal, el más común son las tarjetas
de crédito departamentales, representando el 20 por ciento de la totalidad del crédito
formal.

Por otro lado, en 2021, la población que ha tenido seguro en algún momento se ubicó en
32 por ciento, cifra menor a la reportada en 2018 y menor a la reportada en 2015. Solo
21 por ciento de la población reportó tener un seguro al momento del último
levantamiento de la ENIF, porcentaje 4 pp menor al reportado en 2018 y en 2015.

Respecto a las cuentas de ahorro para el retiro o Afores, que son cuentas individuales a
las cuales contribuye la persona trabajadora, el patrón y el Gobierno Federal, donde los
recursos se van acumulando a lo largo de la vida laboral, y le dan derecho a la persona
trabajadora a una pensión al momento de su retiro, se obtuvo que el 39 por ciento de la
población adulta reportó tener una de ellas. Este porcentaje fue marginalmente menor al
reportado en 2018.
Un sistema financiero no puede operar de forma eficiente sin la confianza de su
población usuaria, puesto que si las personas perciben que sus recursos no están seguros
o que las instituciones financieras no velan por sus intereses, estarán menos dispuestas a
participar en el sistema financiero a través de la contratación de productos o de la
utilización de sus canales de acceso físicos o digitales.
Una forma de fortalecer la confianza en las instituciones financieras es a través del
establecimiento de políticas para la protección de la población usuaria. Esto incluye
medidas como establecer canales adecuados para recibir y resolver quejas y
reclamaciones en caso de problemas con productos e instituciones financieras, así como
mecanismos como el seguro de depósito, que protege los ahorros de la población
usuaria en caso de cierre o quiebra de una institución.
Por ello, la ENIF 2021 incluyó preguntas relacionadas con el nivel de confianza por
parte de la población en las instituciones financieras resultando que 65 por ciento de la
población con al menos un producto financiero considera que su dinero estaría seguro
en un banco o cualquier otra institución financiera. Este porcentaje es incluso menor al
preguntar si considera que la institución resguardaría sus datos personales (61 por
ciento) o si la institución resolvería sus quejas y reclamaciones (56 por ciento).

Con relación a medios de pago, gracias a la ENIF 2021, se pudo notar que, aunque la
mayor parte de la población usa de forma recurrente el efectivo para realizar compras y
pagos de servicios, con instituciones financieras o incluso negocios, otros medios están
siendo utilizados para realizar estas acciones, como son las tarjetas de crédito y débito.
Durante el periodo de 2018 a 2021, la población que tiene una tarjeta de débito o crédito
se incrementó. En particular, el porcentaje de la población adulta con una tarjeta de
crédito, bancaria o departamental, se incrementó únicamente en un punto porcentual
para ubicarse en 25 por ciento, la proporción que cuenta con al menos una tarjeta de
débito se incrementó en 12 pp, alcanzando el 46 por ciento.
De igual manera, para 2021, los medios digitales también han ganado terreno,
particularmente, dentro de los medios de pago en supermercados, tiendas
departamentales y en pagos de servicios públicos y privados.

En referencia a los comportamientos financieros, los cuales se refieren a las acciones


que toman las personas al momento de manejar sus recursos financieros y que pueden
estar relacionados con la forma en que las personas controlan sus gastos, adquieren
información sobre los productos que consumen y la forma en que responden a choques
financieros, los resultados de la ENIF 2021 sugieren que estos comportamientos no
están tan ampliamente extendidos entre la población del país. Solo 2 de cada 10
personas reportaron que llevan un presupuesto, 4 de cada 10 llevan un registro de sus
deudas pendientes y el 50 por ciento dijo separar su dinero entre deudas y gastos.
Asimismo, existe una relación positiva entre el nivel académico y el reportar haber
realizado este tipo de comportamientos.

De acuerdo con la información generada por la CNBV, al cierre de septiembre de 2021,


se reportó que el sector de la banca múltiple está conformado por 51 instituciones, el de
la banca de desarrollo por 6, el de las sociedades cooperativas de ahorro y préstamo
(Socap) por 155 y el de las sociedades financieras populares (Sofipo) por 39.
Al cierre de septiembre de 2021, los activos totales de estos sectores ascendieron a 13
mil 561 miles de millones de pesos. De este monto, el 81.7 por ciento correspondió a la
banca múltiple, el 16.5 por ciento a la banca de desarrollo, el 1.5 por ciento a las Socap
y el 0.3 por ciento a las Sofipo.

En tanto, la cartera total de crédito de estos sectores alcanzó un saldo de 6 mil 561 miles
de millones de pesos al cierre de septiembre de 2021, donde el 82.0 por ciento fue de la
banca múltiple.

La captación total de recursos de estos sectores se ubicó en 8 mil 043 miles de millones
de pesos. De este monto, 83.1 por ciento correspondió a la banca múltiple y 14.5 por
ciento a la banca de desarrollo.
Fuente: CNBV, Boletín Estadístico Banca Múltiple, Banca de Desarrollo, SOCAP y
SOFIPO, mes de septiembre 2021
Padrón de Entidades Supervisadas[1]
La Comisión Nacional Bancaria y de Valores tiene a disposición del público el Padrón
de Entidades Supervisadas, conocido como PES, que es una herramienta que brinda
información sobre las entidades financieras en el país que se encuentran en operación.
En el PES se puede encontrar la lista de entidades autorizadas, reguladas y supervisadas
La información se puede buscar por: razón social, nombre corto y sector financiero
La información disponible sobre las entidades financieras es la siguiente: denominación
o razón social; domicilio de la oficina principal o corporativo; teléfonos y otros medios
de contacto; sectores del sistema financiero en los que operan; y el área administrativa
de la CNBV responsable de su supervisión.
[1]Fuente:
https://www.cnbv.gob.mx/Paginas/PADR%C3%93N-DE-ENTIDADES-
SUPERVISADAS.aspx
Nota: La CONDUSEF también cuenta con padrón de instituciones financieras
denominado “Sistema de Registro de Prestadores de Servicios Financieros”
(SIPRES), que se aborda en otra sección y el cual define su marco de actuación.
Existen tres fondos de protección de los ahorros de los clientes o socios dependiendo del
sector a que se refiere, esto es:
Existen tres fondos de protección de los ahorros de los clientes o socios dependiendo del
sector a que se refiere, esto es:
1. Los ahorros de los clientes de la banca están protegidos por un seguro de depósito, bajo
la administración del Instituto para la Protección al Ahorro Bancario (IPAB), que cubre
un monto de hasta 400,000 UDIs.
2. Los ahorros de los socios de las SOCAP están protegidos por un seguro de depósito,
bajo la administración del Fideicomiso Fondo de Supervisión Auxiliar de Sociedades
Cooperativas de Ahorro y Préstamo y de Protección a sus Ahorradores (FOCOOP), que
cubre un monto de hasta 25,000 UDIs.
3. Los ahorros de clientes y socios de las SOFIPO y Sociedades Financieras Comunitarias
(SOFINCO) están protegidos por un seguro de depósito, bajo la administración del
Fondo de Protección de Sociedades Financieras Populares y de Protección a sus
Ahorradores (PROSOFIPO), que cubre un monto de hasta 25,000 UDIs.

Para conocer la información relacionada con temas de inclusión financiera.


Consulta la página https://www.gob.mx/cnbv/acciones-y-programas/inclusion-
financiera-25319

II.IV Inclusión y educación financiera con perspectiva de género

Uno de los principales retos que enfrenta México es garantizar el desarrollo económico
y reducir las brechas económicas y sociales. Hacia este objetivo se encamina el trabajo
que, a través de programas y proyectos, emprende cada uno de los sectores de la
administración pública conforme a sus facultades y atribuciones.[2]
Mujeres y hombres tienen los mismos derechos y deberían tener las mismas
oportunidades también. Sin embargo, durante muchos años, ellas han enfrentado una
situación de desventaja en diversos aspectos. En reconocimiento a esta situación, se ha
hecho indispensable que las políticas públicas incluyan la perspectiva de género en su
planeación, diseño, ejecución y seguimiento.
Particularmente, la división sexual del trabajo no favorece a las mujeres. Para ellas,
incorporarse a la vida económica es un hecho condicionado por factores como el estado
conyugal o tener a su cuidado infantes o personas adultas mayores, personas enfermas y
personas con discapacidad, lo cual les impide compaginar un trabajo remunerado con
los deberes familiares que les son asignados culturalmente, o bien, a obligarse a ejercer
su carrera profesional de manera interrumpida o aceptar empleos de menor calidad. Las
responsabilidades familiares, entonces, llegan a convertirse en barreras para su
participación equitativa en el trabajo remunerado, pues su inserción sucede de forma
restringida y en condiciones de desventaja. Eso se ve reflejado en la participación de las
mujeres en el mercado laboral, la cual es de menos de la mitad de las mujeres adultas.
La responsabilidad social de crear programas sensibles al género ayuda a mostrar y
hacer más transparente la relación existente entre los objetivos políticos y los ingresos y
el gasto público, así como, entre la política y la distribución del gasto en todas las
actividades del gobierno. Incorporar entonces el enfoque de género en los programas y,
en general, en todas las acciones que el gobierno despliegue, requiere unir el
conocimiento sobre los roles y las relaciones de género y el conocimiento sobre el
sector público y la economía.

Otra característica que deben de tener estos esfuerzos es que deben ser trasversales, es
decir, que deben de estar contemplados en todos los programas sociales de todas las
dependencias para que tengan un resultado significativo y no sea esfuerzo de una sola
dependencia o sector.
La Educación Financiera con perspectiva de género podría resultar una herramienta con
profundas implicaciones, no solo en términos de igualdad social y económica, sino
también en la consecución de determinados estándares de vida.
En específico, la CNBV ha realizado y continúa realizando diversas acciones en materia
de inclusión financiera con perspectiva de género, lo que facilita la medición de brechas
de género[3].
Las actividades con perspectiva de género en materia de medición se pueden resumir
en:
 Desde 2012 y de manera trienal, la CNBV, en colaboración con el INEGI, ha realizado
el levantamiento de la ENIF, que recopila información sobre el acceso, tenencia y uso
de productos financieros, así como de alfabetización y bienestar financiero; de la cual
todos los datos son desagregados por sexo, por tipo de localidad de residencia (urbano y
rural), y adicionalmente se pueden obtener otras desagregaciones como edad, nivel
académico, estado civil, situación laboral, ingreso mensual, y —a partir de la edición de
2021— de las personas hablantes de lenguas indígenas, receptoras de programas
sociales y receptoras de remesas.
 Desde 2016 se incorporó la desagregación por sexo en los reportes regulatorios de la
CNBV, particularmente en los datos de cuentas y créditos, de la banca y las entidades
de ahorro y crédito popular. Con esta información, a partir de 2017, se incluye un
apartado de inclusión financiera con perspectiva de género en los reportes o panoramas
anuales de inclusión financiera; y desde 2018, se pone a disposición del público estos
datos de manera trimestral en sus bases de datos.
 En 2022 se incorporó dentro de los reportes públicos del Portafolio de información de la
banca múltiple el "Reporte por tipo de cartera y sexo de la persona acreditada", en el
cual se desglosa por sexo toda la cartera de créditos de vivienda, consumo y
empresarial.

Asimismo, la CNBV tiene a su cargo la Secretaría Ejecutiva del Consejo Nacional de


Inclusión Financiera (CONAIF), bajo el cual se diseñó la PNIF de 2020. Dentro de la
PNIF, la estrategia 6.4 está enfocada en “Realizar acciones dentro de las instituciones
financieras privadas y públicas para fomentar la inclusión financiera de las mujeres”, las
cuales están enfocadas en dos grandes rubros, en el diseño de productos y servicios
financieros con perspectiva de género y en la representación de las mujeres en puestos
directivos y de alta decisión en las instituciones financieras y órganos reguladores.
En junio de 2021, la CNBV publicó una reforma a la regulación en materia de reservas
de capital de las instituciones bancarias. Esta regulación establece un factor de ajuste a
la baja en los créditos otorgados a las mujeres, con el cual se busca mejorar la tasa de
interés que les es otorgada.
Por otro lado, en marzo de 2022 se firmó un Convenio de Coordinación y Colaboración
Interinstitucional Público-Privado en materia de igualdad de género en el sistema
financiero mexicano que, entre otros, creó el “Comité Interinstitucional para la
Igualdad de Género en las Entidades Financieras” (CIIGEF).
Este comité buscará desarrollar propuestas y compartir experiencias entre las
instituciones financieras para lograr un mayor equilibrio en la representación de puestos
de toma de decisión, impulsar la educación e inclusión financiera de las mujeres y
prevenir y erradicar la discriminación, el hostigamiento y acoso sexuales, así como otras
formas de violencia de género. Además, contará con un sistema de auto- monitoreo con
el que, a través de indicadores clave, medirá el avance de las instituciones en materia de
igualdad de género. Asimismo, se diseñó un sistema de gobernanza para asegurar la
participación de personas de alto nivel, así como la presencia de ambos sexos.
El comité está integrado por la Asociación de Bancos de México, la Asociación
Mexicana de Capital Privado, la Asociación Mexicana de Instituciones de Seguros., la
Asociación Mexicana de Administradoras de Fondos para el Retiro, el Banco de
México, la Comisión Nacional para la Protección y Defensa de los Usuarios de
Servicios Financieros, la Comisión Nacional del Sistema de Ahorro para el Retiro, la
Comisión Nacional Bancaria y de Valores, la Comisión Nacional de Seguros y Fianzas,
el Fideicomisos Instituidos en Relación con la Agricultura, la Secretaría de Hacienda y
Crédito Público y el Instituto Nacional de las Mujeres.
En el marco de las actividades del CIIGEF, en mayo de 2022 se publicó el “Diagnóstico
de la incorporación de la perspectiva de género en el quehacer de las entidades
financieras en México”, el cual presenta un panorama descriptivo de la incorporación
de la perspectiva de género en las entidades financieras en México, a partir de tres
aspectos:
1. La adopción de diversas políticas y prácticas que fomenten la igualdad al interior de sus
centros laborales
2. Las brechas de género en posiciones de liderazgo
3. La oferta de productos y servicios financieros enfocados a las mujeres.

El estudio concentra las respuestas de una muestra de más de 220 entidades y


autoridades financieras, lo que significó que 6 de cada 10 entidades financieras de los
sectores encuestados y la totalidad de las autoridades que conforman el Consejo
Nacional de Inclusión Financiera (CONAIF), brindaron su información.
Los sectores financieros encuestados fueron: banca múltiple, banca de desarrollo,
organismos de fomento, sociedades cooperativas de ahorro y préstamo, sociedades
financieras populares, casas de bolsa, fondos de inversión, administradoras de fondos
para el retiro e instituciones de seguros.
Entre los hallazgos que contiene el diagnóstico en sus tres secciones, destacan los
siguientes:
a) Desde la perspectiva de género en las políticas y prácticas de las entidades
financieras.

 El 68% contó con una política o práctica de igualdad de género; sin embargo, solo el
27% contó con una que contenga indicadores para medir su avance.

 El 54% contó con un comité encargado de la atención de asuntos relativos a la igualdad


y no discriminación.

 El 55% realizó algún cuestionario de clima laboral que contemplo aspectos sobre
igualdad y no discriminación.

 El 44% realizó campañas de sensibilización en materia de igualdad laboral y no


discriminación.

 El 50% contó con programas de capacitación sobre igualdad laboral y no discriminación

 1 de cada 4 ofreció días de incapacidad o permisos de maternidad o paternidad


superiores a los marcados por la ley.

b) Sobre la representación de las mujeres en posiciones de liderazgo en la entidad


u organismo.
 Del total de personas contratadas en 2020, el 48% fueron mujeres, asimismo, del total
de personas que dejaron de laborar en la entidad o autoridad financiera, el 47% fueron
mujeres.

 Del total de personas que obtuvieron un ascenso, la mitad fueron mujeres, mientras que
del total que recibieron una capacitación en temáticas gerenciales, el 51% fueron
mujeres.

 Del total de personas que laboraron en las entidades y autoridades financieras, el 51%
fueron mujeres (tercer y cuarto nivel). Sin embargo, esta proporción disminuyó a 26%
tanto en los puestos directivos, como en los puestos de alta dirección (primer o segundo
nivel).

c) De la oferta de productos y servicios enfocados en las mujeres por parte de las


entidades financieras.

 El 14% de las entidades declaró tener al menos un producto financiero diseñado para las
mujeres.

 El 60% consideró que las mujeres suelen tener mejor comportamiento de pago que los
hombres, en términos del cumplimiento en los periodos establecidos.

 El 44% consideró que las mujeres necesitan productos financieros con características
distintas que los ofrecidos a los hombres; sin embargo, de las entidades que
respondieron afirmativamente, solamente 1 de cada 5 contó con un producto o servicio
con tales características.

 Los factores que consideraron que podrían fomentar un aumento en el acceso y uso de
productos y servicios financieros de las mujeres fueron:
 Brindar beneficios diferenciados para las mujeres, por el 44% como una tasa de interés
más baja con respecto a los hombres para un producto crediticio similar.
 Ampliar el número de tipos de garantía viables para adquisición de financiamiento por
el 46%.
 Utilizar estrategias de mercadotecnia enfocadas a las mujeres, por el 77% de las
entidades.

 Del total de personas que laboraron en las entidades y autoridades financieras al cierre
de 2020, el 51% son mujeres. Sin embargo, esta proporción disminuyó a 26% tanto en
los puestos directivos, como en los de alta decisión.

 El 68% de las entidades financieras encuestadas cuenta con una política o práctica de
igualdad de género. En tanto, el 27% dispone de una que incluye indicadores para medir
su avance.

 El 44% de las entidades encuestadas consideró que las mujeres necesitan productos
financieros con características diferentes a las ofrecidas a los hombres; no obstante, de
las entidades que respondieron afirmativamente, solamente 1 de cada 5 refirió contar
con un producto o servicio con tales características.

En este sentido, la encuesta también identificó que alrededor de 2 de cada 5 entidades


financieras encuestadas consideraron que otorgar beneficios diferenciados con respecto
a los hombres, específicamente una tasa de interés más baja con respecto a los hombres
para un producto similar sería necesario.

Ahora bien, y de conformidad con la ENIF 2021, se registran las siguientes brechas de
género en la tenencia de productos o servicios financieros.
Cuentas de captación:
Durante el periodo de 2015 a 2021, la población que tiene una cuenta tuvo un
crecimiento de cinco puntos porcentuales (pp), al pasar de 44 a 49 por ciento. Si se
considera a la población que en algún momento tuvo una cuenta, el porcentaje total de
la población que ha tenido una cuenta —es decir que tiene o tuvo una cuenta— en este
lapso pasó de 59 a 65 por ciento.
Como se puede observar en la siguiente gráfica, la población que ha tenido cuenta
presentó brechas a favor de los hombres, principalmente en el 2021 con 11 pp a favor de
ellos.
Crédito:
Los resultados referentes a la población adulta que ha tenido crédito —es decir que tiene
o tuvo un crédito—se incrementaron cuatro pp de 2015 a 2021; en específico, el
porcentaje de personas que tiene un crédito fue lo que provocó dicho aumento.
En este periodo, se observaron brechas a favor de los hombres en la población que ha
tenido crédito. Particularmente para 2015 se tuvo una brecha de cero pp, mientras en
2018 la brecha fue de 7 pp, que fue la mayor brecha existente en el periodo de análisis;
finalmente, en 2021 se presentó una brecha de 3 pp a favor de los hombres.

Seguro:
En lo que se refiere al porcentaje de la población que ha tenido seguro —es decir que
tiene o tuvo un seguro—, este se redujo de 37 a 32 por ciento de 2015 a 2021,
principalmente en el bloque de las personas que actualmente disponen de algún tipo de
seguro.

Cuenta de ahorro para el retiro:


Durante el periodo de 2015 a 2021, el porcentaje de la población que tiene una cuenta
de ahorro para el retiro o Afore disminuyó de 41 a 39 por ciento[4].
Por otro lado, se observaron brechas a favor de los hombres para cada año reportado.
Las brechas de género ENIF 2021 muestran que las mujeres tienen un rezago en
materia de tenencia de cuentas, créditos, seguros y cuentas de ahorro pare el retiro
a Afores.

III. El Sistema Financiero Mexicano


III.I. Estructura del Sistema Financiero
El Sistema Financiero Mexicano (SFM) se entiende, en términos generales, como el
conjunto de autoridades que lo regulan y supervisan, los bancos múltiples y de
desarrollo, las sociedades financieras de objeto múltiple (SOFOMES); las Casas de
Bolsa, las Bolsas de Valores, las Casas de Cambio, las Aseguradoras, las
Administradoras de Fondos para el Retiro (AFORES), las Sociedades Financieras
de Ahorro y Crédito Popular (SOFIPOS), las Cajas de Ahorro Popular, Uniones
de Crédito, y las recientes Instituciones de Tecnología Financiera (IFT), por citar
las más relevantes.

Los avances tecnológicos que acompañan a los nuevos desarrollos financieros, abren
nuevos horizontes y posibilidades de desarrollo y negocios en el sector, lo que obliga a
considerar e incluir nuevas experiencias como las FinTech que constituyen un horizonte
reciente tanto de nuevos productos y servicios financieros, como de otros servicios
complementarios no financieros de vanguardia tecnológica.
También se puede definir al SFM, como el conjunto de instituciones que tienen por
objeto el otorgamiento de créditos o financiamientos a los diferentes sectores de nuestra
economía y la captación de recursos de manera profesional, bajo la supervisión y
vigilancia de las autoridades del sistema financiero en un marco jurídico establecido,
para impulsar el desarrollo del país.
Son entidades financieras las que intervienen generando, captando, administrando,
orientando y dirigiendo tanto el ahorro como la inversión; instituciones de servicios
complementarios; auxiliares o de apoyo a dichas entidades; de agrupaciones financieras
que prestan servicios integrados; así como otras entidades que limitan sus actividades a
información sobre operaciones activas o prestan servicios bancarios con residentes en el
extranjero.
Para el Diplomado de Educación Financiera,por SFM se entenderá: el conjunto de
instituciones, dependencias y organizaciones, tanto públicas como privadas, por
medio de las cuales se captan, administran, regulan y dirigen los recursos
financieros que se negocian entre los diversos agentes económicos, dentro del
marco de la legislación aplicable.

La importancia del SFM, radica en que permita llevar a cabo la captación de


recursos económicos de personas u organizaciones para ponerlo a disposición de
otras organizaciones, empresas o instituciones gubernamentales, privadas o
sociales que lo requieren para invertirlo.
En términos sencillos es todo lo referente al mercado (compra venta, uso y depósito,
entre otros) del dinero, y en donde estas últimas harán negocios y devolverán el dinero
que obtuvieron además de una cantidad extra (rendimiento), como pago, lo cual genera
una dinámica en la que el capital es el motor principal del movimiento dentro del
sistema. Esto conlleva a que se pueda alcanzar un mayor desarrollo y crecimiento
económico, lo cual se refleja en la generación de un mayor número de empleos,
derivado de la inversión productiva que realizan las empresas, las personas o
instituciones gubernamentales con el financiamiento obtenido a través del sistema
financiero.
A través del Sistema Financiero, se realizan toda clase de actividades financieras, tales
como transferir recursos entre sectores y regiones por lo que esta función permite que
las inversiones se dediquen a usos más productivos y pertinentes.
En la actualidad el Sistema Financiero Mexicano regulado y supervisado por las
autoridades del gobierno mexicano, está integrado de la siguiente
manera (información que se encuentra disponible en el Buró de Entidades Financieras
al 4er trimestre del 2021):
a. 2,992 Instituciones Financieras reguladas por las autoridades mexicanas como:
Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP), Banco de México (BANXICO),
Comisión Nacional para la Protección y Defensa de los Usuarios de Servicios
Financieros (CONDUSEF), Comisión Nacional Bancaria y de Valores (CNBV),
Comisión Nacional de Seguros y Fianzas (CNSF), Comisión Nacional del Sistema de
Ahorro para el Retiro (CONSAR), entre otras.
b. 12,980 Productos y Servicios Financieros disponibles en el SFM. Los productos de
colocación con mayor presencia en el Catálogo Nacional de Productos y Servicios
Financieros del Buró de Entidades Financieras son el crédito simple, crédito personal y
crédito en cuenta corriente. A su vez, los productos de captación más populares son el
de cuenta de nómina, cuenta de ahorro y los instrumentos de inversión.
c. 25 Sectores diferentes de los cuales los 5 más representativos por su número son:
Sociedades Financieras de Objeto Múltiple Entidades No Reguladas (SOFOM E.N.R),
Fondos de Inversión, Sociedades Cooperativas de Ahorro y Préstamo (SOCAP) e
Instituciones de Seguros y las Uniones de Crédito.
La finalidad prioritaria del sistema financiero (SF), es llevar a cabo las funciones
de captación de las unidades económicas con superávit y canalizarlo a unidades
económicas deficitarias, lo que significa que el sistema financiero se ocupa de
captar el dinero ahorrado y canalizarlo a quien lo necesita. Se trata de una función
de intermediación pertinente y necesaria en cualquier contexto o agregado social. Así,
por ejemplo, los bancos son capaces de prestar dinero a algún usuario porque hay
otras personas que a su vez depositaron sus ahorros en la institución financiera.
Dentro de cualquier SF es importante contar con un marco legal. Por ello existen
entidades encargadas de su regulación, algunas de éstas son la SHCP, Banxico o la
CNBV.
El SFM se integra por dos componentes. En el primero están los organismos encargados
de poner las reglas del juego y aplicarlas. Éstos son, principalmente la SHCP y Banxico.
Aunque también hay otros, como la Comisión Nacional Bancaria y de Valores (CNBV);
la Comisión Nacional de Seguros y Fianzas (CNSF) el Instituto de Protección al Ahorro
Bancario (IPAB) o la Comisión Nacional para la Protección y Defensa de los Usuarios
de Servicios Financieros (CONDUSEF).
En el segundo componente están las Instituciones que ofrecen productos o prestan
servicios financieros en distintos sectores de operación, como la banca comercial, la
banca de desarrollo, las instituciones de seguros y fianzas, así como el mercado de
valores, con todos sus integrantes.

El SF también está integrado por diferentes intermediarios y mercados financieros, a


través de los cuales y de una variedad de instrumentos, moviliza el ahorro hacia usos
productivos. Los bancos son quizá los intermediarios financieros más conocidos, puesto
que ofrecen directamente sus servicios al público y forman parte medular del sistema de
pagos. Sin embargo, en el sistema financiero participan muchos otros intermediarios y
organizaciones que ofrecen servicios de gran utilidad para la sociedad.
Un sistema financiero estable, eficiente, competitivo e innovador contribuye a elevar el
crecimiento económico sostenido y al bienestar de la población. Para lograr dichos
objetivos, es indispensable contar con un marco institucional sólido, con
capacidades suficientes para llevar a cabo la regulación y supervisión financiera
que salvaguarde la integridad del mismo sistema y proteja los intereses del público
usuario. Por lo anterior, el Banco de México tiene entre sus objetivos, el promover el
sano desarrollo del sistema financiero y, en particular, de los sistemas de pagos.
La CONDUSEF, cuenta con una página en donde se puede ir conociendo cada una de
estas instituciones de manera didáctica, para su consulta, revisa la siguiente liga:
https://webappsos.condusef.gob.mx/EducaTuCartera/SistemaFinanciero.html
III.II. Autoridades Reguladoras del Sistema Financiero
La Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP), con fundamento en las: fracciones
VI, VII y VIII del Artículo 31 de la Ley Orgánica de la Administración Pública
Federal, le corresponde realizar o autorizar todas las operaciones en que se haga
uso del crédito público; planear, coordinar, evaluar y vigilar el sistema bancario
del país que comprende al Banco Central, a la Banca Nacional de Desarrollo y las
demás instituciones encargadas de prestar el servicio de banca y crédito; y ejercer
las atribuciones que le señalen las Leyes en materia de seguros, fianzas, valores y
de organizaciones y actividades auxiliares del crédito.

La Comisión Nacional Bancaria y de Valores (CNBV), de acuerdo al Artículo 2 de la


Ley de la Comisión Nacional Bancaria y de Valores, tiene por objeto supervisar y
regular en el ámbito de su competencia a las entidades integrantes del sistema
financiero mexicano que esta Ley le señala, a fin de procurar su estabilidad y correcto
funcionamiento, así como mantener y fomentar el sano y equilibrado desarrollo de
dicho sistema en su conjunto, en protección de los intereses del público.
La Comisión Nacional de Seguros y Fianzas (CNSF), con fundamento en el Artículo
108 de la Ley General de Instituciones y Sociedades Mutualistas de Seguros y en los
Artículos 68 y 69 de Ley Federal de Instituciones de Fianzas, está encargada de
supervisar que la operación de los sectores asegurador y afianzador se apegue al marco
normativo, preservando la solvencia y estabilidad financiera de las instituciones de
Seguros y Fianzas, para garantizar los intereses del público usuario, así como promover
el sano desarrollo de estos sectores con el propósito de extender la cobertura de sus
servicios a la mayor parte posible de la población.
La Comisión Nacional del Sistema de Ahorro para el Retiro (CONSAR), con
fundamento en el Artículo 2 de la Ley de los Sistemas de Ahorro para el Retiro, le
corresponde la coordinación, regulación, supervisión y vigilancia de los sistemas de
ahorro para el retiro.
El Instituto para la Protección al Ahorro Bancario (IPAB), de conformidad con el
Artículo 67 de la Ley de Protección al Ahorro Bancario, tiene por objeto garantizar los
depósitos bancarios de los pequeños y medianos ahorradores, y resolver al menor costo
posible bancos con problemas de solvencia, contribuyendo a la estabilidad del sistema
bancario y a la salvaguarda del sistema nacional de pagos.
III.III. Banco de México

El Banco de México (Banxico), es la Banca Central del SFM y la máxima


autoridad monetaria. De conformidad con el Artículo 2 de la Ley del Banco de
México, esta institución central tendrá por finalidad proveer a la economía del país
de moneda nacional, procurar la estabilidad macroeconómica y conservar el poder
adquisitivo de dicha moneda. Serán también finalidades del Banco promover el sano
desarrollo del SF y propiciar el buen funcionamiento de los sistemas de pagos.
Una de las tareas del Banxico, es promover el desarrollo del sistema financiero para
garantizar que funcione en favor del desarrollo económico, que sea accesible para los
usuarios y que opere en un ambiente competitivo y eficiente. Cuando el SFM cumple
estos criterios, facilita el cumplimiento de otras tareas del banco central, como la
provisión de moneda nacional a la sociedad -a través de la banca comercial- y la
ejecución de las políticas monetarias y cambiarias. Cualquier cambio que se haga
en dichas políticas, tendrá un efecto en los precios que se pactan en los mercados
financieros, como las tasas de interés (costo de los créditos, rendimientos, etc.) o el
tipo de cambio. Es a través de este sistema, que el banco central lleva a cabo sus labores
para cumplir con su objetivo prioritario, que es cuidar que el dinero en la economía no
pierda su valor (capacidad de compra) a lo largo del tiempo.
También se encarga de la emisión de instrumentos de crediticios y la regulación
monetaria gubernamental, la fijación de criterios generales a los que deben sujetarse los
participantes en el mercado de dinero, así como también propiciar el buen
funcionamiento de los sistemas de pago.
III.IV. Organismos Financieros Multilaterales
Los Organismos Financieros Multilaterales (OFM), son organizaciones que están
conformadas por tres o más naciones, y su principal objetivo será el trabajar en conjunto
en las problemáticas que afectan los países que integran la organización en cuestión.
La meta de los organismos multilaterales es conseguir acuerdos globales o regionales. A
través de ellos ha sido posible lograr consensos para implementar acciones
multilaterales concretas en relación a temas económico-financieros, incluyendo el
Desarrollo Sostenible y así mantener el equilibrio de intereses entre las naciones, a
través, del establecimiento de marcos regulatorios que ayuden a la prevención y a la
resolución de conflictos.
La Organización de Naciones Unidas, El Fondo Monetario Internacional, el Banco
Mundial y la Organización Mundial del Comercio, entre otros, son algunos de los
organismos multilaterales más conocidos e importantes del mundo.

El Fondo Monetario Internacional (FMI), por ejemplo, nació en el marco de las


Naciones Unidas, en el año 1945, tiene como objetivos primordiales, evitar las crisis
financieras en los sistemas monetarios de sus estados miembros, la promoción de
políticas cambiarias sostenibles y de cooperación a nivel internacional, la apertura del
comercio internacional y la reducción de la pobreza de todos aquellos países partes. El
FMI es uno de los organismos multilaterales y especializados y actualmente tiene 185
países miembros y su sede se encuentra en Washington.
El multilateralismo de este organismo queda fielmente expresado, en la metodología
multilateral de pagos que facilita y, por otro lado, por el otorgamiento temporal de
recursos financieros a aquellos miembros que presentan problemas en sus balanzas de
pagos, por ejemplo, un país inscrito al FMI tendrá el acceso automático al 25% de su
cuota.
El FMI actúa como fondo al cual los países miembros podrán recurrir en caso de
necesidades de financiamiento de algunos de sus proyectos.
El Banco Mundial (BM), se crea en contexto de los acuerdos de Bretton Woods (1944)
con la misión específica de impulsar la reconstrucción europea en la postguerra; una vez
cumplido el cometido original el Banco Mundial se ha concentrado en otorgar
financiamientos y asesoría en proyectos para el desarrollo a las naciones más pobres del
mundo. https://www.bancomundial.org
La Organización Mundial del Comercio (OMC), originalmente llamada Acuerdo
General de Aranceles y Tarifas, (GATT), es la organización internacional que tiene
como objetivo liberalizar de aranceles y cuotas el comercio internacional para favorecer
el libre intercambio de mercancías entre las economías del orbe. https://www.wto.org/

III.V. Reforma Financiera de 2014


La Reforma Financiera realizada en México en 2014 se impulsó y se aprobó para lograr
los siguientes objetivos:
 Incrementar la competencia en el sector financiero.
 Fomentar el crédito a través de la Banca de Desarrollo.
 Ampliar el crédito a través de las instituciones financieras privadas.
 Mantener un sistema financiero sólido y prudente.
 Hacer más eficaces a las instituciones financieras y el actuar de las autoridades en la
materia.
 Impulsar mecanismos de transparencia hacia el público usuario
Pilares de la Reforma Financiera
A. Incrementar la competencia en el sector financiero.
La Reforma Financiera establece un conjunto de medidas para fomentar la
competencia dentro del sistema financiero y con ello abrir nuevos canales de
oportunidad para las empresas y los diversos demandantes de financiamientos, así
como para inhibir prácticas anticompetitivas. A continuación, se describen algunas de
estas medidas:
 Fortalecimiento de la Comisión Nacional para la Protección y Defensa de los Usuarios
de Servicios Financieros (CONDUSEF).
 Medidas contra ventas atadas.
 Regulación de Redes de Medios de Disposición.
 Investigación de la Comisión Federal de Competencia Económica sobre nivel de
competencia del sector financiero.
 Movilidad de garantías y de operaciones (potabilidad de créditos).
 Mayor número de corresponsales de Ahorro y Crédito Popular.
 Creación del Buró de Entidades Financieras.
B. Fomentar el crédito a través de la Banca de Desarrollo.

La Banca de Desarrollo debe otorgar crédito a quienes, por fallas de mercado, no


son atendidos por las instituciones privadas, o bien complementar los productos
que dichas instituciones ofrecen.
Con la Reforma Financiera, se apuntala a la Banca de Desarrollo con un marco
normativo que, le permita instrumentar políticas que sumen tanto a la creación como a
la preservación de los empleos e inversiones.
La Banca de Desarrollo debe contribuir, de manera eficaz, con la actividad
productiva del país, la creación de valor y el desarrollo del campo y, a su vez,
permitir y respaldar el ahorro popular en beneficio del bienestar de las familias
mexicanas.
Entre las modificaciones legales implementadas destacan:
 El Fortalecimiento de la Banca de Desarrollo se refleja al definir con claridad el
mandato de sus instituciones, y el fomento de la economía a través de la atención de
sectores estratégicos que enfrentan limitantes para tener acceso a alternativas de
financiamiento.
 La flexibilización del marco normativo de las instituciones, eliminando restricciones
innecesarias para su desarrollo
 La obligación de crear programas de inclusión financiera para las micro, pequeñas y
medianas empresas, así como para los pequeños productores del campo.
 Acorde con las mejores prácticas bancarias, se da mayor claridad acerca del control y
vigilancia de las instituciones para evitar duplicidad de funciones y cargas
administrativas innecesarias.
 La regulación y supervisión bancaria queda a cargo de la Comisión Nacional Bancaria y
de Valores, el Banco de México y la Secretaría de Hacienda y Crédito Público en el
ámbito de competencia que corresponda a cada una.
 Se refuerza la obligación de prestar asistencia técnica y capacitación, particularmente en
los servicios y productos financieros de innovación, creación de patentes y demás
derechos de propiedad industrial.
 La Banca de Desarrollo deberá promover la inclusión financiera de la población,
particularmente, la de mujeres, niños y jóvenes, así como la promoción del ahorro e
inversión en comunidades indígenas.
 Las instituciones también deberán implementar programas y productos específicos con
perspectiva de género, para fomentar la igualdad de hombres y mujeres en materia de
acceso a servicios financieros.
 Cada institución financiera de desarrollo podrá allegarse de los recursos requeridos para
el cumplimiento de su mandato, principalmente capital humano; fortaleciendo a sus
órganos de gobierno para que determinen, haciendo uso de recursos propios, la
estructura organizacional y necesidades de recursos humanos a fin de poder llevar a
cabo sus actividades sustantivas de forma más efectiva.
 Las instituciones deberán promover la sustentabilidad ambiental en sus programas
operativos y financieros, así como incentivar la responsabilidad ambiental corporativa
en ellas mismas, en los términos que establezca su Consejo Directivo.
 Las instituciones de Banca de Desarrollo podrán realizar funciones de banca social
 La Financiera Rural se transforma en la “Financiera Nacional de Desarrollo
Agropecuario, Rural, Forestal y Pesquero”. Dentro del rediseño estructural se encuentra
la flexibilización de su regulación para que pueda mejorar su esquema operativo e
incrementar el crédito que otorga.
C. Ampliar el crédito a través de las instituciones financieras privadas
La Reforma Financiera contempla elementos y herramientas para acelerar e incidir en el
otorgamiento de crédito vía las instituciones financieras privadas. Algunos de ellos son:

 Mejorar el régimen de garantías.


 Mejorar el régimen de concursos mercantiles.
 Resolución de controversias en Tribunales especializados.
 Evaluación periódica a los bancos.
 Otorgamiento de mayores facultades a la Comisión Nacional Bancaria y de Valores.
 Fortalecimiento del mercado de las Sociedades Anónimas Promotoras de Inversión
Bursátil.
 Ampliación de obligaciones sobre información crediticia.
D. Mantener un sistema financiero sólido y prudente.
 La Reforma Financiera integró, entre otros, las siguientes medidas que contribuyen al
fortalecimiento del sector para mantener su solidez:
 Fortalecimiento de medidas prudenciales.
 Fortalecimiento del procedimiento de liquidación Bancaria.
 Coordinación en Materia de Estabilidad Financiera.
Adicionalmente, la reforma hace más eficaces a las instituciones financieras y el actuar
de las autoridades en la materia.
La Reforma Financiera moderniza la legislación en este sentido a través de algunas de
las siguientes medidas:
 Flexibilización del régimen corporativo de los fondos de Inversión para hacerlos
accesibles al pequeño inversionista
 Fortalecimiento del Régimen del Mercado de Valores.
 Se eleva a rango de ley el Consejo Nacional de Inclusión Financiera.
 Se eleva a rango de ley el Comité de Educación Financiera.
 Se mejora y fortalece el Esquema de Sanciones y Autocorrección.
La Reforma Financiera sienta bases sólidas para que el sector financiero contribuya en
mayor medida al desarrollo económico incluyente y hará del crédito un mayor
detonador de crecimiento económico en favor de las familias mexicanas.
Se establece un marco jurídico que promueve la competencia, multiplicando y
mejorando las opciones de crédito para los mexicanos. Así mismo fortalece la
regulación, la coordinación y el sano desarrollo del sector.
El propósito de la Reforma Financiera es claro: que haya más crédito y más barato.

IV. Emprendiendo en México


IV.I Definición
Emprendedores se les llama a las mujeres y hombres que se encuentran en el proceso de
crear, desarrollar o consolidar una empresa a partir de una idea. Por lo general, en este
proceso no se cuenta con la experiencia empresarial suficiente, o con la tecnología y
financiamiento para materializarla.
El emprendimiento se inicia con el proyecto empresarial a partir de la identificación de
un negocio, de la detección de alguna necesidad de un producto o servicio o
simplemente porque tienen el entusiasmo para iniciar una empresa.
Los emprendedores constituyen la base de la pirámide empresarial y para materializar
sus iniciativas en negocios rentables, requieren estructurar un esquema completo de
apoyos que facilite la constitución de empresas, la permanencia de estas y su
crecimiento en el mercado.
El término emprendimiento proviene del francés “entrepreneur”, que significa
“pionero”, y se refiere etimológicamente a la capacidad de una persona de realizar
un esfuerzo adicional para alcanzar una meta, aunque en la actualidad se limita su
uso para referirse a una nueva empresa o proyecto que inicia una persona o grupo
de personas.
El emprendimiento es esencial en las sociedades, pues permite a las empresas buscar
innovaciones, y transformar conocimientos en nuevos productos.

IV.II Tipos de empresas


En el ámbito económico, dependiendo de su tamaño, las empresas se clasifican en
cuatro rubros: Microempresas, pequeñas empresas, medianas empresas y grandes
empresas.
 Las microempresas son todos aquellos negocios que tienen menos de 10 trabajadores,
generan anualmente ventas hasta por 4 millones de pesos y representan el 95 por ciento
del total de las empresas y el 40 por ciento del empleo en el país; además, generan el 15
por ciento del Producto Interno Bruto.

 Las pequeñas empresas son aquellos negocios dedicados principalmente al comercio,


que tiene entre 11 y 30 trabajadores o generan ventas anuales superiores a los 4 millones
y hasta 100 millones de pesos. Son entidades independientes, creadas para ser rentables,
cuyo objetivo es dedicarse a la producción, transformación y/o prestación de servicios
para satisfacer determinadas necesidades y deseos existentes en la sociedad.
Representan más del 3 por ciento del total de las empresas y casi el 15 por ciento del
empleo en el país, asimismo aportan más del 14 por ciento del Producto Interno Bruto.
 Las medianas empresas son los negocios dedicados al comercio que tiene desde 31
hasta 100 trabajadores, y generan anualmente ventas que van desde los 100 millones y
pueden superar hasta 250 millones de pesos. Son unidades económicas con la
oportunidad de desarrollar su competitividad en base a la mejora de su organización y
procesos, así como de mejorar sus habilidades empresariales. Entre sus características
también poseen un nivel de complejidad en materia de coordinación y control e
incorpora personas que puedan asumir funciones de coordinación, control y decisión; lo
que implica redefinir el punto de equilibrio y aumentar simultáneamente el grado de
compromiso de la empresa. Representan casi el 1 por ciento de las empresas del país y
casi el 17 por ciento del empleo; además contribuyen con más del 22 por ciento del
Producto Interno Bruto.
 Las grandes empresas a aquellos negocios dedicados a la producción de bienes y la
prestación de servicios que tienen desde 101 hasta 251 trabajadores y ventas superiores
a los 250 millones de pesos. Una gran empresa tiene entre sus características, sobrepasar
una serie de límites ocupacionales o financieros, los cuales, dependen de cada país.
Obtienen economías de escala, que consisten en ahorros acumulados por la compra de
grandes cantidades de bienes y entre sus ventajas está la facilidad de financiamiento que
da mayor garantía a las empresas del pago de sus deudas y sus barreras de entrada son
relativamente escasas debido a la gran cantidad de mano de obra generada.
Actualmente, en nuestro país las micro, pequeñas y medianas empresas
(MIPYMES) aportan alrededor del 52% del PIB y generan el 72% de los empleos
formales (IMCO).

De acuerdo con la Encuesta Nacional sobre Productividad y Competitividad de las


Micro, Pequeñas y Medianas Empresas (ENAPROCE), elaborada por el INEGI en
2019, del total de las empresas registradas en nuestro país, el 97.6% son microempresas,
las cuales emplean al 75.4% del personal; mientras que las pequeñas empresas
representan el 2% y emplean al 13.5% del personal. Por su parte, las medianas empresas
representan el 0.4% y emplean al 11.1% del personal.
El Global Entrepreneurship Monitor (GEM, 2020), afirma que en México existen
alrededor de 8.6 millones de personas que trabajan por cuenta propia o en estas
microempresas, de las cuales el 60% requiere financiamiento. El acceso al mismo se
complica por las condiciones de mercado y por la urgencia de sobrevivir y tener
liquidez. Actualmente se está descuidando el espíritu empresarial de alto crecimiento y
las políticas de austeridad representan un desafío adicional. El crecimiento económico
mundial continúa desacelerándose y la calidad de producción equivale a 8.5, registrado
en 2020 en México, han empeorado las condiciones para el desarrollo empresarial y la
generación de empleos.
De acuerdo con GEM (2021), el Índice Nacional del Contexto Emprendedor (NECI, por
sus siglas en inglés), la aptitud del entorno económico para el emprendimiento, en el
caso de México, para el periodo del 2020 al 2021, fue de 4.1 (sobre una escala Likert
del 0 al 10); puntación con la cual pasó de ocupar el lugar 23 (Periodo 2019-2020) a
ocupar el lugar 34 (Periodo 2020-2021). Esta puntuación NECI, para cualquier
economía, se obtiene mediante un promedio simple de las Condiciones del Entorno
Empresarial (EFCs, por sus siglas en inglés), mismas que se enlistan a continuación:
Acceso a finanzas emprendedoras, Política de gobierno: Apoyo y pertenencia,
Impuestos y burocracia, Programas gubernamentales de emprendimiento, Educación
escolar (y post-escolar) sobre emprendimiento, Transferencia de investigación y
desarrollo, Infraestructura comercial y profesional, Facilidad de entrada: Dinámica de
mercado, Cargas de mercado y regulaciones; Infraestructura física y Normas sociales y
culturales.
Se dice que “aquello en lo cual perseveramos se vuelve más fácil de realizar, no porque
su naturaleza haya cambiado, sino porque nuestra capacidad para realizarlo ha
aumentado”. Por lo anterior, resulta de gran importancia reforzar el impulso al
emprendimiento, ya que este esfuerzo incrementará nuestra capacidad de generar
impactos positivos en lo social y económico.
Incentivar el emprendimiento en México, mediante la creación de mejores condiciones
para el ecosistema emprendedor de nuestro país; por sí mismo, no llevará a nuestra
economía al nivel de crecimiento que se requiere para garantizar el bienestar de 127
millones de mexicanos, al menos no de forma directa; pero lo que sí es seguro, es que
contribuirá con su granito de arena para poder incrementar el número de PyMEs en
México, que como se describió en un principio, constituyen el motor de nuestra
economía.

IV.III Características del emprendimiento


 Innovar. Crea un proyecto a partir de ideas nuevas y originales.
 Creatividad. Crea a partir de ideas interesantes y novedosas.
 Asumir riesgos. Tiene en cuenta lo impredecible y supera los retos que el desarrollo de
un proyecto genera.
 Perseverar. Trabaja y espera paciente los resultados y ganancias, que, en muchos casos,
no llegan en los primeros meses, sino tiempo después de comenzado el emprendimiento.
 Flexibilidad. Está abierta al cambio y siempre focalizada en crecer. A lo largo del
camino modifica ciertos aspectos del emprendimiento para obtener mejores resultados.
 Paciencia. Es consciente de que la idea no debe apresurarse, y no suele encerrarse a
pensar una idea perfecta, sino que elige vivir su vida como todas las otras personas, para
experimentar las mismas necesidades que los demás y así encontrar, dentro de ese
camino, la idea a desarrollar.
 Información. Investiga los estudios de marketing que puedan aportar datos de interés
para un emprendedor, genera lazos entre personas que están en similar situación.
 Determinada. Tiene o desarrolla un espíritu emprendedor para trabajar por su cuenta y
generar sus propios negocios. Emprender suele ser una decisión muy difícil, quien la
toma sabe que está renunciando a la estabilidad que otorga un salario.

IV.IV Importancia del emprendimiento


Muchos profesionales deciden desarrollar un proyecto propio a fin de lograr una
estabilidad económica. Ante esta situación, gobiernos e incubadoras de negocios ayudan
a los emprendedores organizando entidades dedicadas a promover los pequeños
emprendimientos.
Esto se debe a que este tipo de proyectos da impulso a la economía, sobre todo al
considerar que la demanda de trabajo suele crecer a un ritmo superior al de la oferta.
En muchas ocasiones, un emprendimiento familiar ayuda a que la familia logre
satisfacer sus necesidades básicas de vida o mejorarla notablemente. Además, un
emprendimiento da independencia, ya que una persona que tiene un emprendimiento
propio trabaja de manera particular y no depende de jefes ni horarios.

IV.V Tipos de emprendimiento


El emprendimiento es el proceso de diseñar, lanzar y administrar un nuevo negocio, que
generalmente comienza como una pequeña empresa o una emergente, ofreciendo a la
venta un producto, servicio o proceso.
 Emprendimiento empresarial. - El emprendimiento empresarial es la iniciativa o
aptitud de un individuo para desarrollar un proyecto de negocio, u otra idea que genere
ingresos que le permite cubrir principalmente sus gastos básicos, y el de su familia. El
emprendimiento empresarial, tal como fue dicho anteriormente ha surgido por las crisis
económicas del país, lo cual lleva al individuo desarrollar ideas innovadoras en el
mercado que le permita crecer en momentos dificultosos. No obstante, el
emprendimiento empresarial tiene sus ventajas, en primer lugar, el de generar ingresos,
empleos. Luego, permite al individuo ser su propio jefe, y por lo tanto, manejar su
propio tiempo y tomar sus propias decisiones.
 Emprendimiento cultural. - El emprendimiento cultural puede ser visto como el
generador de empresas u organizaciones culturales con el objetivo de que no se pierda el
significado, ni el valor simbólico de los productos y costumbres pertenecientes de un
país.
 Emprendimiento social. - El emprendimiento social busca satisfacer las necesidades de
la sociedad en donde se desenvuelve. Como tal, el emprendimiento social es una
persona u organización que atacan problemas de la comunidad, bien sea en lo social,
económico, y cultural. En referencia a este punto, surge una distinción entre el
emprendimiento empresarial ya que este último busca ganancias para el emprendedor,
mientras que el emprendimiento social busca soluciones que mejoren la sociedad sin
ningún lucro económico.

IV.VI Importancia del emprendimiento


El emprendimiento favorece la economía del país. Al crear nuevas empresas, los
emprendedores crean oportunidades de empleo para las personas, impulsan la
competitividad y la productividad de las empresas, crean industrias nuevas que pueden
ser motores de crecimiento para el futuro, ayudan a mejorar la renta nacional e
introducen innovación de productos en el mercado.
El país tiene un aspecto vulnerable que inhibe el emprendimiento: sus
instituciones.
Además, los factores de inseguridad, violencia o incertidumbre son desalentadores para
el espíritu emprendedor.
A nivel mundial, México ocupa una posición desfavorable en los siguientes rubros:
 Instituciones: 106
 Eficiencia del mercado laboral: 120
 Eficiencia en el mercado de bienes: 96
 Pero ocupa una posición privilegiada en factores como:
 Tamaño del mercado: 12
 Ambiente macroeconómico: 28
Para fortalecer el emprendimiento en México se necesita atender los siguientes puntos:
 Fortalecer las instituciones. Garantizar un entorno legal, político, institucional, fiscal y
social transparente para disminuir la corrupción e inseguridad.
 Implementar modelos triple hélice para que los emprendedores, centros de
investigación y el Gobierno trabajen en conjunto.
 Ofrecer educación para formar emprendedores; es decir, formar a personas con
conocimientos administrativos, estratégicos, con inteligencia financiera y emocional.
 Generar programas que se ajusten a las necesidades reales del emprendedor mexicano.
 Favorecer la innovación para afrontar los cambios del mundo moderno.
V. LA ECONOMÍA SOCIAL Y SOLIDARIA
V.I Definición y características generales

La Economía Social y Solidaria (ESS) es un enfoque socioeconómico para el


desarrollo de actividades productivas basado en la búsqueda del bien común. Abarca, a
nivel global una diversidad de experiencias prácticas que pretenden dar respuesta a los
graves problemas de desigualdad (económica, social, cultural y medioambiental) que el
sistema predominante genera. Dichas experiencias han ido tejiendo una red de
iniciativas que en conjunto constituyen una visión alternativa de la economía
contemporánea.
En contraste con el enfoque del sistema económico vigente, el cual está centrado en la
producción, el capital, la rentabilidad económica y el consumo, la ESS propone poner al
centro de la economía, el bienestar de las personas, situando los recursos, la riqueza, la
producción y el consumo solamente como medios para alcanzar tal fin, más no como
fines en sí mismos. Para ello, desarrolla prácticas alternativas mediante la aplicación de
valores universales, como la equidad, la justicia, la solidaridad, el compromiso con el
entorno, la propiedad colectiva y la democracia directa para la toma de decisiones
organizacionales.
Recordemos que la ESS es un modelo que convive con la economía de mercado, sin
embargo, como ya se mencionó, bajo el enfoque de la ESS se propone que la economía
esté al servicio de las personas y no las personas al servicio de la economía, tal como se
practica de manera común actualmente entre las empresas o iniciativas con enfoque en
el capital y la rentabilidad.
La ESS está representada en todo el mundo por diversas iniciativas de naturaleza
colectiva que desarrollan actividades en todas las esferas de la economía (producción de
cualquier tipo de bienes, primarios o industrializados, prestación de cualquier tipo de
servicios médicos, vivienda, financieros, culturales, educativos, etc.), en las que se
privilegia el bienestar de las personas y su trabajo por encima del capital.
Una de las figuras más representativas de estas iniciativas de naturaleza colectiva es, por
ejemplo, la cooperativa. Estas organizaciones ofrecen a cada uno de sus miembros las
mismas atribuciones y obligaciones, básicamente porque todos ellos son dueños de
manera igualitaria (son socios), y su finalidad es satisfacer las necesidades sociales y
económicas de sus integrantes, por lo que los proyectos basados en este modelo de
desarrollo socioeconómico deben ser viables tanto técnica como económicamente para
sostenerse en el tiempo.
A veces, la ESS es relacionada con una economía exclusiva para los colectivos más
vulnerables, pero en realidad es una opción para todas las personas de cualquier ámbito
(urbano o rural) y para desarrollar cualquier tipo de actividad económica (primaria,
secundaria o terciaria). La economía social tiene presencia en todos los sectores de la
economía y es para todas las personas que se identifican con los principios, valores y
fines de este enfoque de desarrollo socioeconómico.
En la actualidad la ESS puede tener tantas definiciones como autores que hablen de ella
y se manifiesta en la práctica a través de muy diversas iniciativas colectivas, sin
embargo, se puede caracterizar de manera general por lo siguiente:
 Prioriza el bienestar colectivo frente a la acumulación de riqueza.
 Su enfoque cuestiona a la economía capitalista, afirmando que esta produce
desigualdad y afecta al medio ambiente.
 La ESS no implica ni exige la eliminación del capitalismo, sino que actúa bajo
principios y valores diferentes, centrados en el bienestar de las personas y en el cuidado
del medio ambiente. Por ejemplo, cooperar en lugar de competir; ponderar al trabajo
por encima del capital; privilegiar la propiedad colectiva sobre la propiedad individual,
velar activamente por el cuidado de la comunidad y su entorno, entre otros.
 Uno de los principios de la ESS es la autogestión, lo que significa que la
organización o empresa es administrada por los propios trabajadores, que a su vez
son los dueños. Esto sucede, por ejemplo, cuando muchos productores, profesionistas o
prestadores de servicios pequeños forman una empresa de propiedad colectiva y de esa
manera buscan generar economías de escala y aumentar su poder de negociación frente
a clientes grandes, ofreciendo un mayor volumen de venta, lo que les permite obtener
mejores condiciones de mercado para sus productos o servicios.

 La gestión democrática, es otro de los fundamentos de este tipo de organizaciones


empresariales en las que sus miembros participan activamente en la definición de las
políticas y en la toma de decisiones; cada miembro, representa un voto.
 Otro de los pilares es la sostenibilidad y compromiso con la comunidad, por lo que una
organización basada en los principios y valores de la economía social y solidaria,
promueve utilizar métodos de producción que afecten lo menos posible el medio
ambiente y también procura que su actividad retribuya de manera positiva a la
comunidad que la rodea.
 Las organizaciones con este tipo de enfoque administran su funcionamiento con base en
principios como la ayuda mutua, la solidaridad, la equidad, el compromiso con la
comunidad y con la preservación de la naturaleza. Por ello no buscan solamente
maximizar las ganancias económicas. Pueden constituirse en distintos tipos de entidades
jurídicas que son mayoritariamente propiedad de sus miembros o trabajadores, tales
como las siguientes:
- Cooperativas: Empresas que administran un negocio de propiedad conjunta y
control democrático. La idea es que todos los socios y socias compartan los mismos
derechos y obligaciones, por lo que el voto de cada miembro tiene el mismo valor. Otra
característica de las cooperativas es que su gobierno es horizontal, es decir, todos los
asociados se encuentran en igualdad de condiciones. No hay un trato vertical entre la
dirigencia y el resto de la entidad.
- Mutuales: Organizaciones sin fines de lucro. Los asociados realizan una
contribución económica y como retribución acceden a programas preventivos y de
capacitación. Igualmente, las mutuales brindan prestaciones, subsidios o pensiones para
aquellos trabajadores que sufran, por ejemplo, un accidente laboral y que forme parte de
dicha mutualidad.
- Fondos de empleados: Asociaciones conformadas por trabajadores
dependientes de la misma empresa pública o privada. Se constituyen con el objetivo de
ofrecer servicios a sus miembros, recibiendo ahorros y otorgando créditos. Sus
excedentes se destinan a actividades sociales.

Las figuras o tipos de entidades que representan a la ESS a lo largo y ancho del mundo,
varían entre los diferentes países, sin embargo, su base ideológica las identifica, ya que
incorpora rasgos esenciales compartidos, como unos sistemas de decisión y
organización democráticos, voluntad de transparencia y equidad, empoderamiento de
las personas, orientación ética de la actividad, primacía de la cooperación frente a la
competencia y del trabajo sobre el capital, preocupación prioritaria por las personas,
respeto medioambiental, focalización en la generación de empleo, atención destacada al
entorno local y vocación de trabajo al servicio del bien común.
Las ventajas de la ESS en la sociedad son:

 Las personas que forman parte de las entidades o empresas son propietarios de las
mismas y por lo tanto no son consideradas recursos o elementos del capital humano,
sino que son justamente eso, personas que encierran enormes potencialidades y
comparten con otras un proyecto empresarial en igualdad de condiciones. Por ello,
procuran para sus integrantes un trabajo decente o digno lo que significa la oportunidad
de acceder a un empleo productivo que genere un ingreso justo, la seguridad en el lugar
de trabajo y la protección social para las familias, mejores perspectivas de desarrollo
personal e integración social, libertad para que los individuos expresen sus opiniones, se
organicen y participen en las decisiones que afectan sus vidas, y la igualdad de
oportunidades y trato para todos, mujeres y hombres.
 La propiedad colectiva de estas iniciativas y el elevado grado de participación en la
toma de decisiones estratégicas de las mismas fomentan que sus integrantes encuentren
en ellas relaciones igualitarias y más justas, ya que forman parte de un mismo colectivo
con intereses, derechos y necesidades comunes, lo que promueve y fortalece la cohesión
social. Es importante el empoderamiento de las personas que participan en el proceso de
toma de decisiones y en la ejecución de los proyectos, teniendo voz y voto, según unos
criterios convenidos en cada iniciativa, contando con la opinión de cada integrante más
allá de sólo criterios monetarios.
 Estas entidades pueden ser más adaptables en períodos de crisis desde el punto de vista
laboral, ya que la participación de los miembros en las decisiones económicas,
laborales, estratégicas, etc. hace que los mismos socios o trabajadores sean proclives,
por ejemplo, a un ajuste salarial de forma colectiva y acordada en aras de reducir gastos,
relegando el despido a la última de las opciones posibles. Por lo que se consideran más
flexibles frente a las condiciones de mercado, en comparación con otro tipo de
empresas.
En general, la ESS se caracteriza por buscar:
V.II La Economía Social y Solidaria en México
Algunos gobiernos han asumido la institucionalización de la economía social y solidaria
reconociéndola, en diferentes grados, en textos constitucionales y legislativos, y han
desarrollado estructuras ejecutivas para su promoción, como ocurre en México.
En nuestro país, contamos con el Instituto Nacional de la Economía Social
(INAES), que es un órgano desconcentrado de la Secretaría de Bienestar. Tiene como
objeto instrumentar las políticas públicas de fomento y desarrollo del sector social
de la economía, con el fin de fortalecer y consolidar al Sector como uno de los
pilares de desarrollo económico y social del país, a través de la participación,
capacitación, investigación, difusión y apoyo a proyectos productivos del Sector.1

El Instituto Nacional de la Economía Social

Fomentar el Sector Social de la Economía a través de desarrollar y


fortalecer las capacidades técnicas, administrativas, financieras, de
gestión, así como la formación de capital y comercialización de los
MISIÓN Organismos del Sector Social de la Economía, para contribuir a consolidar
y visibilizar el sector como opción viable de inclusión productiva, laboral
y financiera.

Ser un Instituto que contribuya a que México sea un país más incluyente
al colaborar activamente con un sector social de la economía consolidado,
basado en relaciones de solidaridad, cooperación y reciprocidad, que
VISIÓN impulse una mayor articulación social y el aprovechamiento de las
oportunidades de desarrollo de carácter territorial, sectorial, laboral, de
ingreso y bienestar social.
El INAES conceptualiza a la ESS de la siguiente manera:
La Economía Social y Solidaria (ESS) es un conjunto de iniciativas
socioeconómicas y culturales que se fundamenta en un cambio de paradigma
centrado en el trabajo cooperativo de las personas y la propiedad colectiva de los
bienes. Busca generar relaciones de solidaridad y confianza, espíritu comunitario y
participación en la sociedad, fortaleciendo procesos de integración productiva, de
consumo, distribución y de ahorro y préstamo para satisfacer las necesidades de
sus integrantes y comunidades donde se desarrollan.

La ESS genera un modo solidario, justo y diferente de hacer economía, buscando una
transformación social, y que puede ser aplicado a cualquier tipo de empresa o iniciativa
económica. Una de las características más importantes de este enfoque es que la
propiedad es colectiva, es decir, todos son dueños y los socios centran su acción en el
trabajo cooperativo, buscando un equilibrio entre resultados económicos y objetivos
sociales. En contraste con otro tipo de empresas en las que, por ejemplo, la propiedad es
individual y los resultados económicos son destinados principalmente a beneficiar a los
dueños del capital.
Otra característica central es la gestión autónoma, democrática y transparente por parte
de todos los miembros, gestión que no está ligada directamente al capital o a las
aportaciones financieras de cada socio, sino al bienestar común; a diferencia de otro tipo
de empresas en las que las decisiones las toma el dueño o quienes poseen la mayor
cantidad de acciones en la misma, buscando principalmente beneficiar a los aportantes
de capital.
Se destacan como elementos característicos de las empresas o iniciativas de Economía
Social y Solidaria, los siguientes:
 Propiedad colectiva
 Democracia para la toma de decisiones
 Distribución equitativa de beneficios entre sus integrantes y
 Compromiso social en favor de la comunidad y el medio ambiente
Para que estas empresas funcionen como tales, existen una serie de principios y valores
que rigen la forma en que se desarrollan dichas iniciativas, por mencionar algunos están:
membresía voluntaria y abierta, control democrático de los miembros, educación,
formación e información, entre otros.
El Sector Social de la Economía es aquel que agrupa a las diferentes formas de
economía social que podemos encontrar en México. Éste es referido en el párrafo
octavo del artículo 25 de la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos “Al
desarrollo económico nacional concurrirán, con responsabilidad social, el sector
público, el sector social y el sector privado”. Por su parte la Ley de la Economía Social
y Solidaria (LESS) se refiere al sector social de la economía como uno de los pilares de
la economía del país.
Dicho sector está conformado por los Organismos del Sector Social de la Economía
(OSSE), señalados en la LESS son: los ejidos, comunidades, organizaciones de
trabajadores, sociedades cooperativas, empresas que pertenezcan en su mayoritaria o
exclusivamente a los trabajadores y en general todas las formas de organización social
para la producción, distribución y consumo de bienes y servicios socialmente
necesarios.
Los OSSE deberán observar los fines, principios, valores y prácticas enunciados en la
LESS.
a. Que la toma de decisiones es democrática y no está ligada al capital aportado por los
socios, asociados, o integrantes.
b. Que la propiedad de los medios de producción es social o paritaria.
c. Que los excedentes o beneficios generados sean destinados a alguno de los siguientes
rubros:
i. A la prestación de servicios de carácter social;
ii. Al crecimiento de sus reservas y fondos; o
iii. A la retribución de los servicios aportados o del trabajo prestado por sus socios,
asociados o integrantes. La distribución de estos excedentes o beneficios NO debe estar
asociada a las aportaciones en capital que, en su caso, se hubiesen realizado.

V.III Las empresas de Economía Social y Solidaria


Como sabemos, el objetivo principal de estas empresas no es el de ganar dinero para
acumular riqueza -como lo es para la mayoría de las empresas convencionales, sino que
su objetivo es generar beneficios sociales para los miembros, sus familias y las
comunidades en las que se desarrollan, como, por ejemplo: tener siempre agua limpia en
casa, comer alimentos sanos y abundantes, tener un trabajo digno y bien pagado, vivir
en casas bien construidas, etcétera.
Con ese fin, las empresas de Economía Social y Solidaria también deben producir
ganancias para poderse sostener como proyecto. Desde el enfoque de la ESS, estos
beneficios se deben ver en lo que, por ejemplo, en Chiapas, el pueblo tzeltal llama
“lequil cuxlejalil”, que en español significa “el buen vivir”. Para ellos, “buen vivir” no
significa ser dueño de muchas cosas, como televisores, teléfonos, casas o coches; sino
estar en armonía con la madre tierra, con el trabajo y con los demás miembros de la
comunidad, de tal forma que exista un sano equilibrio en la vida.
Para profundizar sobre qué es una empresa de economía social y cómo se diferencia de
las demás empresas y organizaciones, revisa el caso del Grupo de Cooperativas Yomol
A´tel, el cual se encuentra en la Selva Norte de Chiapas y está conformado por
alrededor de 350 familias indígenas tzeltales.
Video caso Yomol A´tel (parte 1).mp4 Video caso Yomol A´tel (parte 2).mp4
La historia de Yomol A´tel ilustra cómo son y cómo pueden funcionar en general las
empresas de Economía Social y Solidaria en el medio rural. Sin embargo, esto no
significa que la ESS se ubique solamente en el campo, ya que también existen muchas
iniciativas que se desarrollan bajo este enfoque en el medio urbano.
Para ejemplificar el caso de una empresa de economía social que desarrolla sus
actividades en el medio urbano, revisa el video de la Cooperativa Alux de México
Gestores Ambientales, integrada por un grupo biólogos que se unieron ante la necesidad
del autoempleo.
Una de las figuras más representativas de la ESS en todo el mundo es la cooperativa, y
en México son ejemplo tanto en el medio rural como en el urbano, desarrollando
actividades de manera exitosa en cualquier sector de la economía.
En nuestro país se reconocen tres tipos de cooperativas:
 Cooperativas de consumo: los miembros se asocian con el objeto de obtener en
común artículos, bienes y/o servicios para ellos, sus hogares o sus actividades de
producción.
 Cooperativas de producción: los miembros se asocian para trabajar en comúnen la
producción de bienes y/o servicios, aportando su trabajo personal físico o intelectual.
 Cooperativas de servicios financieros: los miembros se organizan para realizar
principalmente actividades de ahorro y préstamo. Es decir, que su objeto es la
captación de ahorro de dinero de sus socios, así como la colocación y entrega de los
recursos captados entre sus mismos socios.
En particular, este último tipo de cooperativas se han posicionado como un ejemplo del
cooperativismo en México. Son mejor conocidas como Sociedades Cooperativas de
Ahorro y Préstamo (SOCAP), las cuales, entre otras entidades, forman parte del sector
de ahorro y crédito popular de nuestro país.
Para conocer más sobre este sector, observa el siguiente video:
Considerando que el sector de ahorro y crédito popular en México está integrado por los
tres tipos de entidades que se mencionan el video (Sociedades Cooperativas de Ahorro y
Préstamo SOCAP, Sociedades Financieras Populares SOFIPO y Sociedades Financieras
Populares y las Sociedades Financieras Comunitarias, SOFINCO) y con base en
información de la CONDUSEF, las Cooperativas de Ahorro y Préstamo autorizadas y
supervisadas representan el 78.6% de este sector.
Los siguientes datos pueden dar una idea de la relevancia de las Sociedades
Cooperativas de Ahorro y Préstamo en nuestro país:

Si consideramos a las SOCAP autorizadas, en proceso de autorización y a las de nivel


básico podemos observar que cuentan con alrededor de 8.5 millones de socios, que sus
activos representan $210,720,303,335 administrados por 655 cooperativas
con presencia en toda la República Mexicana.
Las SOCAP´s se han convertido en una alternativa muy demandada, ya que no sólo
ofrecen servicios como ahorro, inversión y créditos a la población en general, sino que
además se encuentran ubicadas principalmente en localidades alejadas de las zonas
urbanas o localidades medianas y pequeñas que no son atendidas por la banca
tradicional. Algunas de ellas ya cuentan con aplicaciones digitales, tarjetas de crédito,
pago de remesas y también brindan el servicio de corresponsalía, lo que multiplica sus
ventanillas donde se pueden realizar operaciones de pago y/o de depósito (tiendas de
conveniencia, farmacias, entre otros) para facilitar las operaciones a sus usuarios.
Ventajas de las empresas de economía social y solidaria:
En general, los miembros de las sociedades cooperativas reconocen que ser parte de una
de ellas tiene las siguientes ventajas:
En suma, la economía social y solidaria combina dos dimensiones que frecuentemente
parecen contrarias:
 La economía que agrupa las actividades relativas a la producción, distribución y venta
de bienes y servicios, y
 La social que se refiere a una vida comunitaria y a las relaciones que las personas
mantienen entre ellas.
En la economía tradicional, la rentabilidad se mide en términos de ganancias
monetarias. En la ESS, se mide por la mejora de la calidad de vida de una comunidad.

V.IV La Economía Social y Solidaria: un concepto integrador


Se puede considerar a la ESS como un concepto que aúna perspectivasde diferentes
corrientes de la economía alternativa. Entre estas corrientes podemos encontrar, por
ejemplo, el enfoque de la economía verde, el de la economía con un enfoque de género,
o bien, el de la mirada indígena del buen vivir, como se vio en el caso de Yomol A´tel.
Todas estas perspectivas buscan poner a las personas y sus condiciones de vida en el
centro y vincular el trabajo con la producción socialmente necesaria y con la
satisfacción de las necesidades básicas a través del consumo consciente e informado de
bienes y servicios, apostando por una economía más justa desde una perspectiva social y
ambiental. Así existen, entre otras, dos relevantes expresiones alternativas de la
economía contemporánea que sintonizan con los valores de la economía social: la
economía verde y la economía feminista. Veamos brevemente en qué consisten ambas.
 Economía Verde: El Programa de Naciones Unidas para el Medio Ambiente
(PNUMA) define como Economía Verde aquella que resulta del "mejoramiento del
bienestar humano e igualdad social, mientras que se reduce significativamente los
riesgos medioambientales y la escasez ecológica". De tal manera, que una Economía
Verde comprende dentro de sí los aspectos económicos, sociopolíticos y
medioambientales del desarrollo. Por lo que se puede decir que es aquella que produce
bajas emisiones de carbono, usa los recursos eficientemente y es socialmente
incluyente.

 Economía con enfoque de género: La economía con enfoque de género –también


llamada economía de los cuidados– pone el énfasis en reivindicar una vida que merezca
la pena ser vivida, entendiendo como tal una vida sostenible, en la que sea factible
compatibilizar trabajo, vida y tiempo libre. Para ello, es importante entender por trabajo
no sólo el empleo (la actividad productiva que se intercambia en el mercado por dinero),
sino también todas aquellas actividades que tienen que ver con la reproducción de la
vida y que permiten el sostenimiento de las sociedades (por ejemplo, la crianza o el
cuidado de las personas mayores). Dichas actividades son ejercidas mayoritariamente
por mujeres de manera no remunerada ni valorada por la sociedad. En este marco, la
economía con enfoque de género afirma que, para lograr sociedades equitativas y
sostenibles, es fundamental poner en valor todo este trabajo, no única ni principalmente
a través de su monetarización, sino del reconocimiento social y del reparto justo entre
hombres y mujeres.
Un sistema económico que no entiende que aquello que lo sustenta –la naturaleza y las
personas– tiene límites, está menoscabando su futuro y poniendo en riesgo la existencia
humana en el planeta. Frente a ello, poner a las personas y al entorno en el centro del
sistema económico es la propuesta de la economía social y solidaria, de la economía con
enfoque de género y de la economía verde o ecológica, entre otras corrientes de la
economía alternativa.

V.V Los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) y la Economía Social y Solidaria


¿Qué es el desarrollo sostenible?
"El desarrollo sostenible es el desarrollo que satisface las necesidades del presente sin
comprometer la capacidad de las generaciones futuras para satisfacer las suyas." -
Nuestro futuro común: Informe de la Comisión Mundial sobre el Medio Ambiente y el
Desarrollo (Informe Brundtland), 1987.
Considerando esa definición de desarrollo sostenible, el reto es lograr el equilibrio entre
las tres dimensiones o tres pilares del desarrollo sostenible: el económico, el social y el
ambiental.
En ese sentido, la Agenda 2030 para el Desarrollo Sostenible y los Objetivos de
Desarrollo Sostenible (ODS) representan una renovación del compromiso mundial no
solo para acabar con la pobreza y el hambre, sino también para lograr la protección
social universal, reducir las desigualdades y alcanzar la sostenibilidad medioambiental,
objetivos que requieren cambios fundamentales en la forma en que funcionan nuestras
economías. En la Agenda 2030 se reconoce que es necesario un enfoque holístico y que
seguir haciendo todo como hasta ahora no es una opción. Si queremos hacer realidad
la visión transformadora de la Agenda 2030, es crucial examinar estrategias de
desarrollo alternativas y modelos económicos emergentes que puedan optimizarse en
aras de la sostenibilidad y la inclusión.
La ESS puede desempeñar un papel clave en la realización de la Agenda 2030 y los
ODS mediante la promoción de un desarrollo inclusivo y sostenible a través de
innovaciones y prácticas, tanto sociales como institucionales y tecnológicas concretas.
Los vínculos entre la ESS y los ODS, ponen de relieve su potencial como modelo
alternativo de desarrollo que puede transformar las bases estructurales sobre las que se
asienta el desarrollo excluyente e insostenible.
Revisa el siguiente video e identifica las relaciones que existen entre la ESS y los ODS.

Es primordial que los nuevos emprendimientos de economía social, así como los
organismos de ESS existentes, se orienten hacia uno o más ODS para lograr sus propios
fines, sumándose estratégicamente a los esfuerzos de toda una comunidad internacional
que busca mayor justicia social y ambiental en los modelos de desarrollo actualmente
implementados.

Sitios de interés:
Instituto Nacional de la Economía Social. (2021). Sistema Nacional de Capacitación y
Asistencia Técnica Especializada. [18 de abril de 2022], de INAES Sitio
web: https://sinca.gob.mx/
Instituto Nacional de la Economía Social. (2020). Repositorio de infografías. [18 de
abril de 2022], de INAES Sitio web: https://www.gob.mx/inaes/galerias/infografias-
inaes
Naciones Unidas. (2015). Objetivos de Desarrollo Sostenible. [18 de abril de 2022], de
Naciones Unidas Sitio web: https://www.un.org/sustainabledevelopment/es/2015/09/la-
asamblea-general-adopta-la-agenda-2030-para-el-desarrollo-sostenible/#:~:text=Adem
%C3%A1s%20de%20poner%20fin%20a,el%20crecimiento%20econ%C3%B3mico
%20sostenido%3B%20adoptar
Bibliografía recomendada:
https://www.condusef.gob.mx/documentos/scap/302246_ahorro_y_credito_popular_-
2018.pdf
Bibliografía
Coraggio, J.L. (2011). Economía social y solidaria: el trabajo antes que el capital. Quito,
Ecuador: Abya-Yala.
Comisión Nacional para la Protección y Defensa de los Usuarios de Servicios
Financieros. (2022). Sector de Ahorro y Crédito Popular. Recuperado el 20 de abril de
2022, de CONDUSEF Sitio web: https://www.condusef.gob.mx/?p=sacp
Fideicomiso Fondo de Supervisión Auxiliar de Sociedades Cooperativas de Ahorro y
Préstamo y de Protección a sus Ahorradores. (2021). Boletín informativo. Recuperado
el 20 de abril de 2022, de FOCOOP Sitio
web: https://focoop.com.mx/WebSite16/WebForms/Boletin.aspx
Instituto Nacional de la Economía Social. (2022). ¿Qué hacemos? Recuperado el 18 de
abril de 2022, de INAES Sitio web: https://www.gob.mx/inaes/que-hacemos
Instituto Nacional de la Economía Social. (2019). Ley de la Economía Social y
Solidaria. Recuperado el 18 de abril 18 de 2022, de INAES Sitio
web: https://www.gob.mx/inaes/documentos/ley-de-la-economia-social-y-solidaria-
36064#:~:text=La%20Ley%20tiene%20como%20objeto,sistema%20eficaz%20que
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Novillo, E. (2016). La economía social y solidaria: una economía para las personas.
Recuperado el 18 de abril de 2022, de El portal de la economía social y solidaria Sitio
web: https://www.economiasolidaria.org/recursos/biblioteca-la-economia-social-y-
solidaria-una-economia-para-las-personas/
Sitio de recursos de la economía social y solidaria. (2020). Economía Solidaria y
Objetivos de Desarrollo Sustentable. Recuperado el 18 de abril de 2022, de socioeco.org
Sitio web: https://www.socioeco.org/page12_es.html

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