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ANTECEDENTES HISTÓRICOS

Un alto porcentaje de las instituciones jurídicas del Derecho Colombiano iniciaron en Roma. De ahí que El Código Civil es una
réplica en su mayoría del Corpus Juris Civile; conforme a lo anterior, se tienen como bases de nuestra materia dos escuelas: LA
ESCUELA CLÁSICA DEL DERECHO (Derecho Francés y Romano) y ESCUELA PANDECTISTA O MODERNA (Derecho Alemán).
ROMA: La leyenda sobre la fundación romana tiende a relacionar al naciente pueblo con las entidades más eminentes de su
época, para poder "demostrar" que su gran éxito depende también de su origen especial. La siguiente se considera
comúnmente como la principal leyenda:
RÓMULO Y REMO: edificaron una nueva ciudad en el mismo lugar en el que fueron encontrados por una loba. Decidieron que
uno construiría el pueblo mientras que el otro ayudaría. Así que empezaron a preguntar a los dioses para informarse de quién
iría a dirigirla. Para la fundación siguieron los ritos tradicionales de su época para fundar ciudades. Con la ayuda de una vaca y
un toro blanco, usó un arado para trazar la cerca de la ciudad. Remo saltó sobre el surco, violando la muralla, lo cual era una
especie de sacrilegio, que fue la primera pena capital del homo sacer (que era el castigo por pasar), pues la muralla se trazaba
desde el primer momento para ser inviolable. Y de acuerdo con la tradición, Rómulo lo mató a espada, para que los dioses no
permitieran que en el futuro la muralla fuese violada de nuevo. Rómulo fue el primer rey romano, y reinó hasta que desapareció
durante una tormenta, llevado por su padre Marte.
Roma que comenzó como un pequeño reino, se fue expandiendo hasta colonizar todo el territorio de Europa, Asia y parte de
África. Entre 753 a.C. y 600 d.C. duro el Imperio Romano, o sea 12 siglos de poder, época en la cual el imperio se distinguió por
la construcción del Derecho y las normas jurídicas. Entre sus más importantes tratadistas se encuentra GAYO (año 186 d.C)
quien recogió en LAS INSTITUTAS: son el estudio de las cosas, las personas y el patrimonio; siendo este un conjunto de libros o
manuales destinado a la enseñanza del Derecho romano.
Otro destacado jurisconsulto fue JUSTINIANO, emperador que compiló todas las leyes romanas más importantes en una obra
llamada CORPUS JURIS CIVILE (recopilación de derecho romano) y que a su vez se componía de varios libros como LAS
INSTITUTAS, EL DIGESTO (Colección de textos escogidos de juristas romanos) (Cuya etimología significa “Fragmentar para
estudiar el Derecho”) Y EL CÓDEX (El Código de Justiniano (en latín, Codex Iustinianus) es una recopilación de constituciones
imperiales promulgada por el emperador Justiniano, este último forma parte del denominado Corpus Iuris Civilis).
En el año 300 d.C. el Imperio Romano se divide en Oriente y Occidente, lo que lleva a su total fragmentación y decadencia,
apareciendo nuevos reinos que eran herederos de las tradiciones romanas.
EDAD MEDIA: surgen dos filósofos destacados: SAN AGUSTÍN DE HIPONA y SANTO TOMÁS DE AQUINO. San Agustín de Hipona
fue llamado “El Doctor de la Iglesia” y su obra más famosa es “La Ciudad de Dios” que, entre otras cosas, mencionó ideas
interesantes e importantes para el Derecho como que existe un Derecho Natural que proviene de Dios, base de la Escuela
conocida como Ius Naturalista.
Por otra parte, Santo Tomás de Aquino hizo un estudio de la ley en su obra “La Suma Teológica” recogiendo todo lo dicho sobre
el derecho natural y añadiendo otros principios como el del “Justo Precio” o sea a cada quien lo suyo o a cada quien lo que le
corresponde. También tocó temas como la justicia y equidad entre las partes en una negociación.
REVOLUCIONES LIBERALES: para 1789 con las Revoluciones Liberales, en especial la francesa, la sociedad se reorganiza y
aparece un nuevo grupo: el proletariado, que se declara regido por unos principios de igualdad, fraternidad y libertad,
enfatizando en la posibilidad de adquirir bienes propios, lo que posteriormente se conocería como “Propiedad Privada”.
ALEMANIA: aparece la Escuela Histórica del Derecho cuyos más importantes representantes son Savigny y Von Hiering. El
primero de ellos, Savigny, menciona que el Derecho es dinámico y evoluciona por los conflictos entre las personas. Von Hiering
nos habla de la antijuridicidad, o sea la idea de que el daño genera reparación o lo que ahora conocemos como Responsabilidad
Civil. De esta escuela también deriva la PANDECTISTA que se preocupó mucho por profundizar en la teoría del negocio jurídico y
que sigue vigente en las legislaciones civiles actuales.
En 1804 se publica el Código Civil Napoleónico que es la aplicación del Corpus Iure Civile a la realidad de Francia. Luego esta
obra fue traducida y estudiada por el sabio Andrés Bello, quien la implementó como Código Civil en Chile y más adelante ella fue
asumida por el ordenamiento jurídico colombiano.
DERECHO CLÁSICO: es aquél que viene del Corpus Jure Civile y que fue recogido por Napoleón en su famoso Códice. Por el
contrario, la ESCUELA ALEMANA hizo un estudio nuevo de este Derecho, dando lugar a la aparición del Derecho Moderno que
ha influenciado el Derecho Latinoamericano. Tanto de una escuela como de otra, en Colombia existen claros representantes; en
la CLÁSICA se destacan Álvaro Pérez Vives y Francisco Valencia Zea. En la Moderna Tamayo Lombana y Ospina Fernández.
El Código Civil tiene una influencia totalmente clásica por ser traducción directa del Corpus Jure Civile. Pero, gracias a la Escuela
Pandectista, se retomó este Derecho y se lo dividió, creando nuevas teorías.
¿Qué es una teoría? Es un conjunto sistemático de observación, investigación y comprobación que trata de explicar un
fenómeno natural, social, político o de cualquier otra clase. Las teorías se renuevan y cambian, más si se relacionan con
fenómenos sociales. Por ejemplo: hoy en la teoría del acto o negocio jurídico, pero con el tiempo la misma puede cambiar
porque el Derecho es dinámico.
LA TEORÍA DEL NEGOCIO JURÍDICO: es un estudio respecto a la dinámica del Derecho Civil conforme ha evolucionado y es una
explicación que puede ser reformada con el paso del tiempo.
¿CUÁL ES LA IMPORTANCIA DEL ESTUDIO DEL NEGOCIO JURÍDICO?
1. Permite regular las relaciones entre personas en el mundo de los negocios jurídicos.
2. Está involucrada con el patrimonio de las personas.
3. Porque a través de los negocios jurídicos se crea riqueza, objetos y economía en los países. Los negocios jurídicos
determinan la economía.
4. Para saber distinguir qué clases de negocios jurídicos existen y sus características.
SITUACIONES JURÍDICAS: Son acontecimientos que pasan diaria y rutinariamente. Tienen el nombre de “Jurídicas” porque
inciden en el mundo del Derecho, mueven las normas jurídicas. Las normas jurídicas tienen su sustento en situaciones fácticas y
gracias a esas situaciones existe la aplicación de una ley o norma.
Giorgio del Vecchio” autor italiano, dice lo siguiente: “La norma jurídica es un imperativo hipotético” queriendo decir con esto
que el Derecho siempre es imperativo por naturaleza, pero para que se pueda aplicar es necesario que se cumpla una situación
hipotética, nos exige que hagamos ciertas cosas bajo el supuesto de alguna condición. Por ejemplo: El Código Penal trae el tipo
del Homicidio cuyo verbo rector es “Matare”, así quien matare a otro tendrá como consecuencia una pena. La norma nos da la
hipótesis y la situación jurídica el acto la pone en movimiento. Las normas penales como silogismos, donde hay una premisa
mayor que es la norma jurídica, la premisa menor que es el caso en particular que se ajusta a la hipótesis y la conclusión que es
la consecuencia particular aplicada al caso concreto. Ejemplo: Silogismo (delito del homicidio)
Premisa mayor: quien matare recibirá un castigo
Premisa menor: Juan mato a Pedro
Conclusión: Juan recibirá un castigo
Las situaciones jurídicas se dividen a su vez en:
Hechos Jurídicos: son acontecimientos o situaciones que tienen incidencia en el mundo del Derecho pero no interviene la
voluntad del hombre y generan consecuencias jurídicas como por ejemplo: el nacimiento o fallecimiento de una persona. Es
Importante anotar que no todos los fenómenos de la naturaleza generan consecuencias jurídicas. (Catástrofes naturales)
Actos Jurídicos: son acontecimientos o situaciones que tienen incidencia en el mundo del Derecho pero en éstos si interviene la
voluntad del hombre para generar consecuencias jurídicas, como por ejemplo el matrimonio, el contrato de arrendamiento, el
mutuo, etc.
Diferencias entre ACTO JURÍDICO, CONTRATO y NEGOCIO JURÍDICO.
Acto jurídico: declaración unilateral de la voluntad, es decir la voluntad de una sola persona para generar consecuencias
jurídicas; como por ejemplo, el testamento.
Contrato: es el acuerdo de dos o más voluntades con el fin de crear obligaciones, como por ejemplo, el contrato de
compraventa.
Negocio Jurídico: es una situación jurídica que crea, modifica y extingue obligaciones, El término negocio jurídico se deben a la
pandectística alemana en su intento de sistematizar la ciencia jurídica para facilitar la  solución de problemas prácticos en
supuestos en que la autonomía de la voluntad juega un papel relevante. Ejemplos de este serían el contrato de sociedad o la
convención colectiva de trabajadores.
La Escuela Moderna agregó a lo explicado anteriormente una nueva connotación de Negocio Jurídico, diciendo que es una:
“Situación que sirve para crear, modificar o extinguir relaciones jurídicas de carácter patrimonial”.
EL PRINCIPIO DE LA AUTONOMÍA DE LA VOLUNTAD: El principio de la autonomía de la voluntad es una facultad, poder o
libertad de autodeterminación. Este principio es el “ESTRUCTURAL” del Derecho Privado y por ende de los contratos.
Actualmente por la “Constitucionalización del Derecho Privado” los contratos entre particulares podría anularse si van en contra
de la Constitución.
DEFINICIÓN DE OBLIGACIÓN: del latín obligatio que significa lazo; la obligación es un vínculo jurídico donde el acreedor puede
exigir a su deudor una prestación que consiste en Dar, Hacer y No Hacer. Es jurídico porque esa potestad se la puede solicitar
coactivamente utilizando mecanismos legales.
ELEMENTOS O REQUISITOS DEL NEGOCIO JURÍDICO: Los elementos del negocio jurídico son aquellos sin los cuales éste no
produce ningún efecto. Son elementos necesariamente de carácter jurídico y los podemos clasificar en tres clases:
Elementos generales. (Escuela clásica)
Elementos particulares. (Escuela clásica)
Elementos estructurales. (Escuela moderna)
Elementos del Negocio Jurídico en General: como su nombre lo indica, estos elementos son aquellos que deben estar en todos
los negocios jurídicos y sin su concurrencia no producen efectos jurídicos u obligaciones. La escuela clásica los relacionó en el
artículo 1502 del Código Civil: Requisitos para Obligarse. Para que una persona se ligue respecto a otra mediante un acto o una
declaración de voluntad, necesita de ciertos requisitos: capacidad, consentimiento y que éste adolezca de vicios, objeto lícito y
causa lícita.
Elementos del Negocio Jurídico en Particular: estos elementos sirven para distinguir entre negocios jurídicos, los que le dan “El
apellido” al negocio jurídico, los que lo caracterizan, y permiten individualizar cada negocio jurídico que se celebra. ARTÍCULO
1501. COSAS ESENCIALES, ACCIDENTALES Y DE LA NATURALEZA DE LOS CONTRATOS. Se distinguen en cada contrato las cosas
que son de su esencia, las que son de su naturaleza, y las puramente accidentales. Son de la esencia de un contrato aquellas
cosas sin las cuales, o no produce efecto alguno, o degeneran en otro contrato diferente; son de la naturaleza de un contrato las
que no siendo esenciales en él, se entienden pertenecerle, sin necesidad de una cláusula especial; y son accidentales a un
contrato aquellas que ni esencial ni naturalmente le pertenecen, y que se le agregan por medio de cláusulas especiales.
Esenciales: son aquellas sin las cuales el negocio jurídico no produce efecto alguno o degenera en un contrato completamente
diferente. Por ejemplo: en el contrato de compraventa hay que ponerse de acuerdo en dos cosas esenciales: la cosa y el precio
(Art. 1849). Si en esta clase de negocio nos ponemos de acuerdo en el precio pero no en la cosa, entonces degenerará en un
MUTUO y si nos ponemos de acuerdo en la cosa y no en el precio, pasará a ser DONACIÓN.
Naturales: son aquellos que sin ser esenciales se suponen pertenecen a él sin que exista cláusula especial. Este tipo de
elementos naturales son “IRRENUNCIABLES” porque no devienen de la voluntad de las partes, sino del legislador y por tanto
son NORMAS DE ORDEN PÚBLICO y de obligatorio cumplimiento. Ejemplo: si vendemos un vehículo automotor y éste a los
pocos días de vendido se avería o se daña. Conforme al artículo 1546 del Código Civil nos dice que para negocios como éste, la
parte que cumplió el contrato, o sea el comprador, puede exigir al vendedor en caso que la cosa tenga algún vicio oculto o sufra
un perjuicio dos cosas: la resolución del contrato o su cumplimiento.
Accidentales: son aquellos que sin ser esenciales ni naturales, le pertenecen y se le agregan mediante cláusulas especiales. Se
usan para darle un efecto adicional al negocio jurídico. Ejemplo de este tipo de elementos son las arras, los pactos comisorios,
los de reserva de dominio al comprador etc. Estos elementos no atentan contra la validez o la existencia del contrato.
Elementos estructurales del Negocio Jurídico: definidos por la Escuela Moderna, son básicamente tres:
. Manifestación de la voluntad o consentimiento.
. Reporte de un objeto.
. Formas solemnes o elementos ad sustantiam actum (solemnidades).
EFICACIA DE LOS NEGOCIOS JURÍDICOS: La eficacia está relacionada directamente con los elementos del negocio jurídico. “Un
negocio jurídico es eficaz cuando produce efectos jurídicos”. A contrario sensu, si no produce efectos jurídicos o los produce
defectuosamente, ese negocio será ineficaz.
REQUISITOS DEL NEGOCIO JURÍDICO EN GENERAL: Todos los negocios en general deben cumplir con los requisitos generales
contenidos en el artículo 1502 del C.C; para que las personas se obliguen y queden vinculadas de lo contrario no hay vínculo
jurídico esto lo hará cualquier contrato.
REQUISITOS DEL NEGOCIO JURÍDICO EN PARTICULAR: Cada contrato en especifico tiene una particularidad, estos requisitos
son los que complementan el contrato en general hacen que por ejemplo la compraventa sea lo que es y un arrendamiento de
igual manera lo que es.
REQUISITOS PARA LA EXISTENCIA SON LOS MISMOS REQUISITOS ESTRCUTURALES
1.- Manifestación de la voluntad (El consentimiento es la unión o concurrencia de dos voluntades).
2.- Reporte de un objeto u objetos.
3.- Formas solemnes o elemento ad sustantiam actum
REQUISITOS PARA LA VALIDEZ
1.- Causa y objetos lícitos.
2.- Capacidad de los sujetos.
3.- Ausencia de lesión enorme.
4.- Ausencia de vicios del consentimiento.
REQUISITOS PARA LA EXISTENCIA DEL NEGOCIO JURÍDICO: Un negocio jurídico es o no es. Un negocio jurídico puede nacer al
mundo del derecho, puede tener entidad jurídica, puede existir con todos los requisitos necesarios para su existencia.
La Escuela Clásica del Derecho no diferenció entre los requisitos de existencia y los de validez, los trató indistintamente en un
solo artículo, el 1502 del C.C. Al contrario, la escuela moderna sí hizo esta diferenciación y esta separación, para explicar que
a los negocios que les faltarle alguno de los elementos de existencia simplemente no producen efectos jurídicos, porque
jamás han nacido a la vida jurídica. Por el contrario, aquellos negocios que les falte algún requisito de validez, nacen a la vida
jurídica, producen efectos jurídicos, pero por esos defectos generan nulidad, o sea, pierden los efectos jurídicos que habían
adquirido.
EFICACIA PLENA DE LOS NEGOCIOS JURÍDICOS: Los REQUISITOS ESTRUCTURALES que fueron añadidos por la Escuela Moderna
a la teoría del negocio jurídico, equivalen a los requisitos para la existencia. Igualmente, esta escuela nos ha dicho que la figura
de la inexistencia sí está contemplada en varios artículos del Código Civil y del Código de Comercio y que se la puede reconocer
cuando en ellos se menciona frases o expresiones como las siguientes: “No produce efecto alguno…”, “No produce obligación
alguna…”, “No vale…”. Sin embargo nuestro máximo órgano de la Justicia Ordinaria, la Corte Suprema de Justicia ha
manifestado que la figura de la “INEXISTENCIA” no se puede aplicar en Colombia con un argumento obvio: los jueces no pueden
pronunciarse sobre un acto que jamás ha existido, que jamás nació al mundo del Derecho. Contrario sensu y como se dijo antes,
para la Escuela Moderna la inexistencia es una figura clara, plausible y evidente. Ejemplos:
Articulo 1611 C.C: REQUISITOS DE LA PROMESA. Subrogado por el art. 89, Ley 153 de 1887. La promesa de celebrar un
contrato no produce obligación alguna, salvo que concurran las circunstancias siguientes:
1. Que la promesa conste por escrito.
2. Que el contrato a que la promesa se refiere no sea de aquellos que las leyes declaran ineficaces por no concurrir los
requisitos que establece el artículo 1501, 1502 del Código Civil.
3. Que la promesa contenga un plazo o condición que fije la época en que ha de celebrarse el contrato.
4. Que se determine de tal suerte el contrato, que para perfeccionarlo solo falte la tradición de la cosa o las formalidades
legales.
Los términos de un contrato prometido, solo se aplicarán a la materia sobre que se ha contratado.
Articulo 1872 C.C: COMPRA DE COSA PROPIA. La compra de cosa propia no vale; el comprador tendrá derecho a que se le
restituya lo que hubiere dado por ella. Los frutos naturales, pendientes al tiempo de la venta, y todos los frutos, tanto naturales
como civiles, que después produzca la cosa, pertenecerán al comprador, a menos que se haya estipulado entregar la cosa al
cabo de cierto tiempo o en el evento de cierta condición; pues en estos casos no pertenecerán los frutos al comprador, sino
vencido el plazo, o cumplida la condición. Todo lo dicho en este artículo puede ser modificado por estipulaciones expresas de
los contratantes.
Requisitos Para La Validez: La validez de los negocios jurídicos presupone la existencia del negocio jurídico. Luego, la validez de
los negocios jurídicos se cumplirá con la confluencia de todos los requisitos para su validez. Puede suceder que a pesar que el
negocio jurídico nazca al mundo del Derecho, pero no contenga uno todos los requisitos de validez. Así las cosas, dicho negocio
jurídico será defectuoso o podrá generar un efecto completamente diferente al buscado desde el comienzo por las partes.
Cuando el contrato no produce el efecto jurídico deseado o ese efecto es diferente, entonces se configura lo que se conoce
como NULIDAD.
TEORÍA DEL TÍTULO Y EL MODO
TÍTULO: instrumento donde se depositan las obligaciones, el título faculta a una persona para la adquisición de los derechos
reales (es el poder jurídico que ejerce una persona (física o jurídica) sobre una cosa de manera directa e inmediata para un
aprovechamiento total o parcial, siendo este derecho oponible a terceros. La figura proviene del Derecho romano ius in re
o derecho sobre la cosa).
Ejemplos: el contrato de compraventa, el contrato de permuta, la donación entre vivos.
MODO: Forma jurídica a través de la cual se realiza el título, modo de adquirir el dominio de la cosa.
Clases y aplicación 
Articulo 673 C.C: MODOS DE ADQUIRIR EL DOMINIO. De la adquisición de dominio por estos dos últimos medios se tratará en
el libro de la sucesión por causa de muerte, y al fin de este Código.
1. Prescripción: Mediante este modo, se adquieren los derechos reales con base en la posesión quieta, pacífica e
ininterrumpida de las cosas.
2. Accesión: El dueño de una cosa se hace dueño de lo que ella produce y de lo que a ella se adjunta. Implica la unión de
dos o más cosas, de diferentes dueños formando un todo indivisible.
3. Sucesión por causa de muerte: Es el hecho jurídico mediante el cual el patrimonio del causante, previo el trámite de la
liquidación herencial, judicial o notarial, se transfiere a quienes de una u otra forma entran en la condición de
sucesores.
4. Tradición: Consiste en la entrega que el dueño hace de la cosa a otro, habiendo por una parte la intención de transferir
y por la otra la intención de adquirir.
5. Ocupación: Se adquieren las cosas que carecen de dueño. Es un modo originario de adquisición del dominio; no
transfiere la propiedad ya que no se recibe de nadie. Se adquieren cosas que no tienen dueño y cuyo aprovechamiento
no está prohibido.
Para ser dueño se necesita de titulo y modo
FUNCIONES DE LA TRADICIÓN EN MUEBLES E INMUEBLES
Artículo 740: DEFINICION DE TRADICION. La tradición es un modo de adquirir el dominio de las cosas, y consiste en la entrega
que el dueño hace de ellas a otro, habiendo por una parte la facultad e intención de transferir el dominio, y por otra la
capacidad e intención de adquirirlo. Lo que se dice del dominio se extiende a todos los otros derechos reales.
Ejemplo: en la compraventa el modo siempre va a ser la tradición artículo 1880: OBLIGACIONES DEL VENDEDOR. Las
obligaciones del vendedor se reducen en general a dos: la entrega o tradición, y el saneamiento de la cosa vendida. La tradición
se sujetará a las reglas dadas en el título VI del libro II.
Articulo 754 C.C: FORMAS DE LA TRADICION. La tradición de una cosa corporal mueble deberá hacerse significando una de las
partes a la otra que le transfiere el dominio, y figurando esta transferencia por uno de los medios siguientes:
1. Permitiéndole la aprehensión material de una cosa presente.
2. Mostrándosela.
3. Entregándole las llaves del granero, almacén, cofre o lugar cualquiera en que esté guardada la cosa.
4. Encargándose el uno de poner la cosa a disposición del otro en el lugar convenido.
5. Por la venta, donación u otro título de enajenación conferido al que tiene la cosa mueble como usufructuario,
arrendatario, comodatario, depositario o a cualquier otro título no traslaticio de dominio; y recíprocamente por el
mero contrato en que el dueño se constituye usufructuario, comodatario, arrendatario, etc.
TRADICIÓN DE BIENES INMUEBLES
ARTICULO  756. TRADICION DE BIENES INMUEBLES. Se efectuará la tradición del dominio de los bienes raíces por la inscripción
del título en la oficina de registro de instrumentos públicos. De la misma manera se efectuará la tradición de los derechos de
usufructo o de uso, constituidos en bienes raíces, y de los de habitación o hipoteca.
OBJETO DE LOS NEGOCIOS JURÍDICOS
El objeto puede tener varias connotaciones que pueden ser:
 La Finalidad Que Persiguen las Personas: por ejemplo, cuando se compra una casa ya sea para habitarla o negociarla.
 Cuando el fin del negocio y el objeto del negocio, son idénticos. Por ejemplo, cuando negocio un automóvil para poder
usarlo, el objeto de ese negocio recae sobre ese automóvil, ese rodante como tal.
 Cuando Se Trata De Una Prestación: o sea crear una obligación de dar, hacer o no hacer algo, una acción positiva o
negativa.
LA ESCUELA CLÁSICA DEL DERECHO: esta nos dice que el objeto siempre debe responder a la pregunta ¿QUÉ ES LO QUE SE
DEBE? Y que además debe reunir unas características que son:
1. Debe existir y si no existe, debe esperarse que exista.
2. Debe ser posible.
3. No debe estar prohibido por la ley.
LA ESCUELA MODERNA: nos dice sobre el objeto del negocio jurídico que este objeto corresponde a una “Operación Jurídica
consistente en crear, modificar o extinguir relaciones jurídicas”. Ejemplo: A hace un préstamo de mutuo a B por seis meses.
Luego, B llegada la fecha para el cumplimiento de la obligación, pide a A la ampliación del plazo, cosa a la que A accede. Luego,
cuando se cumple el nuevo plazo estipulado, B cancela la deuda a favor de A. El mutuo es un préstamo de consumo. En esta
operación descrita, hay tres fenómenos: cuando se presta de A a B se crear la obligación de restituir el dinero; con la prórroga
se genera una modificación en el plazo; finalmente, con el pago se extingue la obligación.
CONDICIONES DEL OBJETO: La doctrina y la ley establecen que el objeto debe ser real y debe existir en el panorama de las
obligaciones.
Articulo 1518 C.C: REQUISITOS DE LOS OBJETOS DE LAS OBLIGACIONES. No sólo las cosas que existen pueden ser objeto de
una declaración de voluntad, sino las que se espera que existan; pero es menester que las unas y las otras sean comerciales y
que estén determinadas, a lo menos, en cuanto a su género. La cantidad puede ser incierta con tal que el acto o contrato fije
reglas o contenga datos que sirvan para determinarla. Si el objeto es un hecho, es necesario que sea física y moralmente
posible. Es físicamente imposible el que es contrario a la naturaleza, y moralmente imposible el prohibido por las leyes, o
contrario a las buenas costumbres o al orden público.
PLAZO Y CONDICIÓN
Plazo: es un hecho futuro pero cierto del cual depende el cumplimiento y la extinción de un derecho
Condición: depende de una condición ya que es un hecho futuro incierto
ARTICULO 1530. DEFINICION DE OBLIGACIONES CONDICIONALES. Es obligación condicional la que depende de una condición,
esto es, de un acontecimiento futuro, que puede suceder o no.
Clasificaciones de condición (Suspensivas o resolutorias)
Suspensiva: el derecho queda suspendido hasta el cumplimiento de la condición y a partir de ahí nace el derecho. Ejemplo: te
arrendare el apartamento si viajo a Bucaramanga
Resolutoria: el derecho ya ha nacido y al momento de cumplirse se extingue. Ejemplo: usa mi bicicleta si llueve me la devuelves
LA CAUSA: Ésta busca responder a la pregunta ¿Por qué hago el negocio jurídico? o ¿Qué busco satisfacer o cuál es el móvil
para realizar el contrato?
La Escuela Clásica en relación a la causa nos ha dicho que “SON LOS MOTIVOS O FINES QUE LLEVAN A CONTRATAR A LA
PERSONA” y responde a la pregunta ¿Por qué quiero contratar?
La Escuela Moderna afirma que todas las teorías de la causa son inútiles, porque finalmente se termina confundiendo la causa
con el objeto y que por ello, a la causa como tal no se la puede considerar como requisito de validez del negocio jurídico.
El artículo 1524 del Código Civil CAUSA DE LAS OBLIGACIONES. No puede haber obligación sin una causa real y lícita; pero no es
necesario expresarla. La pura liberalidad o beneficencia es causa suficiente. Se entiende por causa el motivo que induce al acto
o contrato; y por causa ilícita la prohibida por la ley, o contraria a las buenas costumbres o al orden público. Así, la promesa de
dar algo en pago de una deuda que no existe, carece de causa; y la promesa de dar algo en recompensa de un crimen o de un
hecho inmoral, tiene una causa ilícita.
Ejemplo: A arrienda a B una casa. En el contrato de arrendamiento se estipula que el canon será de un millón de pesos y que el
término de duración del contrato será de un año. A contrató para que B habitara en el predio de su propiedad, pero B, como
arrendatario, destina la vivienda para la fabricación de cocaína. Como sabemos el contrato de arrendamiento consiste en el uso
y goce de un predio a cambio de un canon. Ahora, pese a que la causa o sea el fin que le dio B al contrato, es ilícito, el negocio
es existente pero no tiene validez porque A hizo el negocio pensando que la causa era una y B le dio un giro diferente, motivo
por el cual si A demanda a B, este contrato se sancionará con la nulidad. Igual ocurre si las dos partes sabían que la causa de
este negocio era la fabricación de sustancias ilícitas.
LA MANIFESTACIÓN DE LA VOLUNTAD: Es un elemento estructural de los negocios jurídicos. Es la “Intención”, los motivos, el
querer de las partes para formar negocios jurídicos”. La voluntad es una consecuencia de la libertad porque solo una persona
libre pude auto-determinarse. Psicológicamente hablando la manifestación de la voluntad es “La intención de consentir en
algo”.
Hay que distinguir entre manifestación de la voluntad y consentimiento son dos cosas diferentes. La manifestación de la
voluntad se dirige a formar el consentimiento. A su vez, el consentimiento es la corresponsabilidad de dos o más
manifestaciones de voluntad.
Clases de Manifestación de la voluntad: Hay varias clases de manifestación de la voluntad:
1. Una sola manifestación de la voluntad, o ACTO JURÍDICO.
2. Dos manifestaciones de la voluntad, o ACTOS JURÍDICOS BILATERALES
3. Varias manifestaciones de la voluntad o ACTOS JURÍDICOS PLURILATERALES.
LOS LÍMITES A LA MANIFESTACIÓN DE LA VOLUNTAD
LA LEY: entendida ésta como la ley escrita, positiva, ya sean los Decretos, los Códigos, los decretos reglamentarios, etc.
EL ORDEN PÚBLICO: como límite en la manifestación de la libertad, está relacionado a los derechos ajenos de ahí nace un
principio (mi derecho llega hasta donde comienza el derecho de la otra persona)
LA MORAL Y LAS BUENAS COSTUMBRES: la moral es una apreciación general y objetiva, la moral es una sanción de conciencia.
LÍMITES CONSTITUCIONALES A LA MANIFESTACIÓN DE LA VOLUNTAD
Artículo 6º: esta norma afirma que los particulares responderá por el incumplimiento de las leyes y los servidores públicos,
además, por la omisión o extralimitación en sus funciones.
Artículo 58: se debe garantizar a toda persona, por parte del Estado, el acceso a la propiedad privada. No hay límite a la
adquisición de un número de propiedades, pero mientras estas propiedades cumplan una función social que se materializa con
el pago de impuestos o tributos a favor del Estado por tener esa propiedad. En casos excepcionales, el Estado puede tomar esta
propiedad como cuando esté involucrado el interés general de la comunidad o en caso de guerra, eventos taxativos en los
cuales la expropiación es viable, porque el “Interés Particular debe ceder siempre al Interés General”.
Artículo 333: la actividad económica y la iniciativa son libres en cuando a la creación de empresa o cualquier otro tipo de
asociaciones económicas, pero este ejercicio también se limita por el bien común. Así como ocurre con la propiedad, toda
empresa está obligada a pagar tributos, contribuciones y gravámenes a favor del Estado. Podemos concluir entonces, con todo
lo expuesto, que la manifestación de la voluntad como tal en Colombia no es absoluta.
Requisitos De La Manifestación De La Voluntad:
1. Que sea real y seria: real y seria significa que las personas deben expresar su voluntad de forma no aparente. No puede
ser suplida o reemplazada por ningún otro acto real. Por ejemplo, una representación actoral de la celebración de un
negocio jurídico no es real ni seria; igual cuando se hace un ejercicio académico sobre cómo se celebra un contrato.
2. Que se exteriorice: debe necesariamente salir del fuero interno de la persona, expresarse. Lo contrario a este requisito
la doctrina lo ha denominado “RESERVA MENTAL” que se define como “Guardarse el verdadero querer” por cualquiera
de las partes.
3. Que sea clara e inteligible (Que puede ser comprendido o entendido): o sea las personas deben expresar su
manifestación de la voluntad por medios idóneos (orales, escritos, vía telefónica, fax) y utilizando un lenguaje conocido
por las partes o medios convencionales que se conozcan y haciendo o cumpliendo con los requisitos que la ley exige
para un negocio jurídico.
LA FORMACIÓN DEL CONSENTIMIENTO
LA OFERTA Y LA ACEPTACIÓN: La oferta está tratada o estudiada a profundidad por el Código de Comercio (Decreto 410 de
1971) más que por el Código Civil, precisamente porque el primero de estos Códigos es más nuevo que el de Andrés Bello y va
más con las tendencias de la Escuela Moderna.
Artículo 845 C.co: “La oferta o propuesta es un proyecto de negocio jurídico que una persona formula a otra”. Así tenemos que
ésta como la norma lo indica es apenas un PROYECTO DE NEGOCIO JURÍDICO no un negocio jurídico como tal y se conforma de
dos sujetos, quien hace la oferta conocido como OFERENTE y la persona a la que se hace esa propuesta de negocio jurídico
conocido como DESTINATARIO.
Requisitos de la Oferta:
1. Elementos esenciales del negocio jurídico o sea aquellas del artículo 1501 del Código Civil.
2. Que sea comunicada al destinatario.
3. Elementos relativos a la existencia de todo negocio jurídico o sea los del artículo
1502 del Código Civil.
Ahora bien, además de los anteriores requisitos, debe reunir unas condiciones adicionales como son:
1. Que sea firme: o sea la manifestación de la voluntad tiene que ser clara y dirigida a generar efectos jurídicos. Lo contrario a
firme es una mera intención.
2. Que sea inequívoca: significa que no haya duda sobre la voluntad de contratar por parte del oferente o proponente.
3. Que sea precisa y completa: debe contener todos los elementos del negocio jurídico proyecto.
4. Debe surgir de la voluntad del oferente: es decir debe hacerla quien se puede y quiere obligar o quien tiene la facultad para
obligarse, y si no es esa persona la debe hacer su representante mediante la figura de la “Representación”.
5. Debe comunicarse a un destinatario y hacerla llegar a su conocimiento: hay que comunicarla al destinatario por un medio
idóneo ya sea verbal, escrito, telefónico, etc. El artículo 845 del Código de Comercio habla más específicamente de este
requisito.
Valor o efectos jurídicos de la oferta: La oferta es un acto jurídico unilateral y debemos entender que acto jurídico es diferente
de negocio jurídico. La oferta es una manifestación de la voluntad encaminada a formar un negocio jurídico y solo habrá
negocio jurídico como tal cuando la contraparte a quien se dirija dicha oferta, acepte. La aceptación genera el negocio jurídico
como tal porque ahí solamente se comprometerán las dos voluntades.
Empero lo anterior, hay teorías que discrepan de esta posición y se cree que en ciertos casos se puede hacer exigible. Hay tres
teorías para determinar si la oferta es vinculante u obligatoria, si genera efectos jurídicos o de lo contrario no genera nada.
Estas son:
1. Teoría clásica o de la escuela clásica: la oferta con todos sus requisitos no genera ningún efecto jurídico y por lo tanto
no es de carácter obligatorio o vinculante, aún sin que haya sido aceptada por el destinatario y así el oferente o el
destinatario fallezcan, se declare en estado de insolvencia o entre en estado de discapacidad mental, ni ellos (las
partes) ni los herederos serán obligados a responder por nada. CONCLUSIÓN: para la Escuela Clásica la oferta no es
obligatoria.
2. Teoría moderna o de Escuela Moderna: la oferta desde el momento en que se hace, vincula, es obligatoria, genera
efectos jurídicos aún en el evento que el destinatario no haya aceptado. Si el oferente o destinatario llegaren a fallecer,
a caer en insolvencia económica o discapacidad mental después de haber realizado la oferta, ellos y sus herederos
están facultados por una parte y obligados por otra a exigir y a cumplir la oferta. CONCLUSIÓN: para la Escuela
Moderna la oferta es obligatoria. Esta teoría es acogida en Alemania, Italia, EE.UU. y Colombia.
3. Teoría Intermedia: ésta era recogida por el artículo 186 del anterior Código de Comercio, o sea el anterior al Código de
1971 y le daba un carácter restringido a la oferta es decir, el oferente podía libremente revocar la oferta pero si se
causaba perjuicios con la revocatoria, estaba obligado a indemnizarlos.
El artículo 846 del Código de Comercio nos dice: IRREVOCABILIDAD DE LA PROPUESTA. La propuesta será irrevocable. De
consiguiente, una vez comunicada, no podrá retractarse el proponente, so pena de indemnizar los perjuicios que con su
revocación cause al destinatario. Como vemos en la oferta se obliga solamente el oferente. En el negocio jurídico se obligan las
dos partes. ¿Qué los diferencia? La responsabilidad que solo se aplica a los contratos, conocida como RESPONSABILIDAD
CONTRACTUAL. Para la oferta opera la RESPONSABILIDAD PRECONTRACTUAL o AQUILIANA. Además, es necesario aclarar que
cuando se incumple la oferta, el destinatario solo tendrá derecho a exigir la INDEMNIZACIÓN DE PERJUICIOS y por el contrario,
en el caso de los contratos, se puede pedir EL CUMPLIMIENTO DEL CONTRATO más la INDEMNIZACIÓN DE PERJUICIOS o la
RESOLUCIÓN DEL CONTRATO más la INDEMNIZACIÓN DE PERJUICIOS.
OFERTA: propuesta o invitación que una o más personas formulan a otra u otras determinadas a celebrar una convención.
Responsabilidad precontractual: El precontrato y las negociaciones previas a la celebración del contrato. En esta
responsabilidad solo se puede exigir para la reparación de los perjuicios. Pero no puede buscar el cumplimento de la obligación
principal porque no hay contrato aun.
RESPONSABILIDAD AQUILIANA: El Código Civil diferencia entre las obligaciones nacidas de actos u omisiones ilícitos
constitutivos de infracciones penales, y las obligaciones nacidas de actos u omisiones constitutivos de ilícitos civiles. El  artículo
1.089 del Código Civil establece que: “las obligaciones nacen de la ley, de los contratos, cuasi contratos y de los actos y
omisiones ilícitos o en que intervenga cualquier género de culpa o negligencia”. Se diferencian dos tipos de obligaciones nacidas
de culpa o negligencia: las nacidas de delito o falta, que se regirán por las disposiciones del Código Penal, y las que derivan de
actos u omisiones, que no llegan a constituir infracción penal, pero que constituyen un ilícito en que interviene culpa o
negligencia, y que pueden incidir en el ámbito de los contratos y que van a generar responsabilidad contractual, o fuera del
campo del contrato y que generan una responsabilidad extracontractual, conocida ya desde el Derecho romano como culpa
aquiliana.
La oferta que hace el oferente debe ser tan clara o contener todos los elementos para que el destinatario de una manera simple
se vincule al negocio jurídico propuesto, la corresponsabilidad.
El consentimiento es la corresponsabilidad de 2 manifestaciones de voluntad. Siempre y cuando se tomara el negocio jurídico se
trata de negocio jurídico de carácter consensual, pero en aquellos negocios jurídicos donde se requiere formas solemnes
además del consentimiento deberá reunir la forma solemne.
RESPONSABILIDAD CONTRACTUAL: si ya se formo el negocio jurídico y una de las parte incumple la obligación de dicho
contrato la responsabilidad es contractual. Articulo 1546 clausula resolutoria tacita.
Todos los perjuicios en temas de carácter civil deber ser probados en un proceso.
Hacer cumplir la obligación principal o se pude escoger en hacer cumplir o resolver el contrato, la indemnización de perjuicios
en la resolución o el arreglo. De manera que un contrato debe tener las posibilidades del 1546 (condición resolutoria tacita) en
los contratos bilaterales va envuelta la condición resolutoria tacita en caso de no cumplirse por uno de los contratantes lo
pactado. Pero en tal caso podrá el otro contratante pedir a su arbitrio, o la resolución o el cumplimento del contrato con
indemnización de perjuicios.
Eso se pude realizar cuando se tiene un contrato, un negocio jurídico y si cumple con todos los requisitos para que ese exija y
sea válidamente celebrado.
REGLAS INHERENTES A LA OFERTA: proyecto de negocio jurídico a una persona determinada, por el contrario el proyecto de
negocio jurídico a persona indeterminada o no determinada recibe el nombre de policitación.
LA POLICITACIÓN: es una oferta a varios. O sea, mientras la oferta es una propuesta de negocio jurídico dirigida a una persona
determinada, la policitación es una propuesta de negocio jurídico dirigida a una persona o personas indeterminadas. Ésta se
hace a través de medios masivos de comunicación como circulares, televisión, radio, prensa, etc.
Oferta y policitación son diferentes, porque la primera como habíamos visto, es obligatoria, mientras que la segunda no, salvo
unas excepciones:
1. Cuando se ofrece recompensa.
2. La del artículo 847 del Código de Comercio, o sea cuando se hace por medio de propaganda escrita.
3. La del artículo 848 del Código de Comercio, que hace relación a las que hacen los comerciantes en lugares donde se exhiban
las mercancías con el precio, en sus vitrinas o en establecimientos de comercio hasta que éstas sean retiradas o se hallen
expuestas. La oferta debe hacerse con base en el precio (Símbolo $) y no por porcentajes (%).
4. Aquellas mercaderías que se publican por medios masivos de comunicación y circulares, y en ellas se ofertan cosas de género,
se crea una obligación de género por cantidad y calidad y ésta podrá ser satisfecha con la cantidad y calidad anunciadas. Cuando
el número de mercancías es limitado o son de cuerpo cierto, son obligatorias hasta el día siguiente de su anuncio.
Reglas bajo las cuales se debe aceptar la oferta: las condiciones del negocio jurídico siempre las formula quien hace la
propuesta, o sea EL OFERENTE
1. La aceptación de la oferta puede ser expresa o tácita. Expresa aquella manifestación concreta en la que el destinatario dice
por un medio válido ACEPTO (Art. 850 Código de Comercio). La aceptación tácita es aquella conducta inequívoca, se acepta la
oferta sin necesidad de manifestarlo expresamente y por esto, la ACEPTACIÓN TÁCITA TIENE LOS MISMOS EFECTOS QUE LA
ACEPTACIÓN EXPRESA.
La aceptación de la oferta debe ser un acto volitivo ósea una expresión de la voluntad del destinatario y su silencio jamás puede
ser tomado con una conducta de formación de negocios jurídicos, ya que cuando se guarda silencio la voluntad no se exterioriza
y hay “Reserva Mental”.
2. Si la oferta es verbal y las partes están presentes, la oferta deberá ser aceptada o rechazada inmediatamente o “en el acto”
(Artículo 850 C. Co).
3. Si la oferta es por vía telefónica, también deberá aceptarse en el mismo instante o inmediatamente.
4. Si la oferta es escrita y si el destinatario reside en el mismo sitio donde tiene residencia el destinatario, entonces el
destinatario tendrá un término de seis (6) días hábiles para aceptar la oferta. Pero si el destinatario reside en un lugar diferente
al del oferente, al término inicial de seis (6) días se le sumará “el término de la distancia” ARTÍCULO 851. PROPUESTA
ESCRITA. Cuando la propuesta se haga por escrito deberá ser aceptada o rechazada dentro de los seis días siguientes a la fecha
que tenga la propuesta, si el destinatario reside en el mismo lugar del proponente; si reside en lugar distinto, a dicho término se
sumará el de la distancia. ARTÍCULO 852. TÉRMINO DE LA DISTANCIA. El termino de la distancia se calculará según el medio de
comunicación empleado por el proponente (Artículo 829 del Código de Comercio REGLAS PARA LOS PLAZOS). Estos plazos se
aplican cuando las partes u oferentes han callado sobre el plazo que se les da o no la han estipulado expresamente.
El artículo 852 del Código de Comercio define como tal la expresión “Término de la Distancia” y éste se calcula según el medio
de comunicación empleado por el proponente. Esto ha sido un problema porque el oferente puede escoger el medio que desee,
variando el tiempo de llegada de la oferta al destinatario. Igual, puede ocurrir que por la inseguridad, la oferta no llegue en el
tiempo planeado por el destinatario o se pierda y entonces, todo caerá en equívocos difíciles de solucionar.
5. Los días establecidos en la oferta, son hábiles, o sea de lunes a viernes, excluyendo festivos.
6. Si la aceptación es extemporánea o condicional, no formará ningún negocio jurídico, pero pasará a ser una contraoferta del
destinatario al oferente original (Artículo 855 del Código de Comercio). Cuando esto ocurre, los plazos y condiciones vuelven a
revivirse como si se tratara de una nueva oferta y comenzarán a correr de nuevo.
7. Pero si la aceptación de la oferta se hace de forma pura y simple porque la obligación es pura y simple (lo contrario son las
obligaciones modales), entonces el negocio jurídico se perfeccionará con la simple aceptación siempre y cuando sea de aquellos
negocios que no requieran los elementos ad sustantiam actu o forma solemne, como ocurre con los contratos reales que
requieren de la entrega de la cosa más la escrituración para lograr su tradición.
8. El artículo 858 del Código de Comercio nos dice: “Cumplimiento de obligaciones por varias personas. Si las condiciones de la
oferta se cumplen separadamente por varias personas, solo tendrá derecho a la prestación ofrecida, aquella de quien el
oferente primero reciba aviso de su cumplimiento. En caso de igualdad en el tiempo, el oferente decidirá en favor de quien haya
cumplido mejor las condiciones de la oferta, pudiendo partir la prestación, si ésta es divisible”.
TEORÍAS DE LA ACEPTACIÓN DE LA OFERTA: Como observamos anteriormente, cuando las oferta se hace por escrito y las
partes residen en el mismo sitio, de no fijarse plazo para la aceptación, el destinatario tiene seis días hábiles para aceptarla o
rechazarla; pero, no ocurre lo mismo cuando tanto oferente como destinatario residen en sitios diferentes y se hace una oferta
por escrito. La norma nos ha dicho, que además de los seis días, se sumarán los del “Término de la distancia”, lo que ha
complicado saber en qué momento el destinatario acepta o no la oferta.
Para resolver este problema, se han propuesto cuatro teorías que se hace necesario explicar:
1. Sistema de la Declaración: corresponde al sistema francés o clásico. El negocio jurídico se perfeccionará o nacerá a la vida
jurídica, cuando el destinatario declare con hechos inequívocos que acepta la oferta sin necesidad de remitir una respuesta al
oferente, o sea, sin que el oferente la conozca.
2. Sistema de la Expedición: manifiesta esta teoría que el negocio jurídico se forma cuando el destinatario expide su respuesta
por un medio idóneo aceptando la oferta, es decir, dando un paso más adelante que lo que estipulaba la anterior teoría.
3. Sistema de la Recepción: manifiesta que el negocio jurídico se forma cuando la respuesta del destinatario ha llegado al lugar
de su destino, pero dicha respuesta aunque sigue siendo desconocida para el oferente, es recepcionada por uno de sus agentes,
como podría ser una secretaria, una dependencia, el mensajero, etc.
4. Sistema de la Información: el negocio jurídico se perfecciona cuando el oferente se ha enterado e informado del contenido
de la respuesta dada por el destinatario.
El artículo 864 del Código de Comercio al definir el contrato dice que: “Se entenderá celebrado en el lugar del proponente y en
el momento en que éste reciba la aceptación de la propuesta” correspondiendo esta primera parte del artículo a la teoría de la
recepción. Luego añade en el inciso segundo: “…Se presumirá que el oferente ha recibido la aceptación, cuando el destinatario
pruebe la remisión de ella dentro de los términos…” dando lugar a la Teoría de la Expedición.
Existen dos clases de presunciones: las legales y las de Derecho. Las primeras admiten prueba en contrario, o sea, se pueden
desvirtuar. Las segundas, son absolutas y por tanto no se puede probar contra ellas. Se las distingue una de otra cuando en el
articulado de cualquier código se utiliza para las presunciones de Derecho la siguiente expresión: “Se presume de pleno
Derecho…”. A contrario sensu, las presunciones legales solo utilizarán la expresión: “Se presume que…” como en el caso del
artículo 864 del Código de Comercio (DEFINICIÓN DE CONTRATO. El contrato es un acuerdo de dos o más partes para constituir,
regular o extinguir entre ellas una relación jurídica patrimonial, y salvo estipulación en contrario, se entenderá celebrado en el
lugar de residencia del proponente y en el momento en que éste reciba la aceptación de la propuesta.
Se presumirá que el oferente ha recibido la aceptación cuando el destinatario pruebe la remisión de ella dentro de los términos
fijados por los artículos 850 y 851.
Así las cosas, en COLOMBIA LA FORMACIÓN DE NEGOCIOS JURÍDICOS A TRAVÉS DE OFERTAS ESCRITAS TIENE UN CONCEPTO
HÍBRIDO (o sea mixto) y se entenderán formados bajo el sistema de la recepción, pero también se puede aplicar cuando sea
necesario, la teoría de la expedición para desvirtuar la presunción legal que establece el artículo 864 del Código de Comercio.
CONCLUYENDO: el negocio jurídico se entenderá formado primero que todo cuando el oferente recibe por él o por cualquiera
de sus agentes, la respuesta del destinatario, conozca el oferente o no la respuesta dada por el destinatario. Ahora, si por
circunstancias externas o fortuitas, el oferente no recibió la respuesta del oferente pese a que éste la envió, entonces se
aplicará la presunción del inciso segundo del artículo 864 del Código de Comercio, la cual por ser legal, admite prueba en
contrario.
1. Cuando la comunicación del destinatario llega a la empresa oferente. (teoría de la recepción) probatoriamente
hablando el artículo 864 del código de comercio trae una presunción y es de carácter legal. (admite prueba en
contrario)
2. Luego de la formación del negocio jurídico tiene un carácter mixto, mezcla dos teorías, dichas teorías servirán para
defender la posición más relevante en que se encuentra el oferente o destinatario.
3. Articulo 1861 código civil. Arras confirmatorias
Colombia acoge la teoría de recepción y la de expedición. La oferta solo da para indemnización de perjuicios
Caducidad: Pérdida de la validez o efectividad de un documento, ley, derecho o costumbre, generalmente por el paso del
tiempo.
Prescripción: prescripción de los derechos de las personas pueden ser extintiva y adquisitiva se puede ganar o perder un
derecho con el paso el tiempo
CADUCIDAD DE LA OFERTA: la oferta como dijimos antes, tiene todos los efectos vinculantes, es irrevocable. Estos efectos
jurídicos cesan o caducan en los siguientes eventos:
1. Rechazo expreso o silencio: el destinatario rechaza expresamente la oferta y así ésta pierde todos sus efectos. A su vez, el
silencio del destinatario jamás puede ser considerado como una aceptación tácita y por tanto, no tiene efectos vinculantes.
2. La aceptación condicional o extemporánea: cuando el destinatario acepta de manera condicional la oferta, inicialmente
cesan todos los efectos jurídicos. En el caso de la oferta aceptada extemporáneamente, la oferta inicial deja de tener efectos
plenos y la aceptación extemporánea pasa a ser considerada una nueva oferta, dando lugar a que se comiencen a contar de
nuevo términos para su aceptación.
3. Cuando expira o termina el plazo estipulado para la aceptación de la oferta : cuando el destinatario ha establecido un plazo
para que el oferente acepte la oferta y este plazo caduca, entonces ahí termina la oferta.
4. Por muerte o incapacidad del oferente cuando los negocios son “In tuite personae”: es decir, aquellos negocios que se
hacen en relación con las cualidades de las personas como por ejemplo, cuando se contrata una obra por la habilidad única que
tienes esa persona de hacer tal o cual cosa, valga decir personas reconocidas en su arte u oficio.
LA PROMESA BILATERAL DE CONTRATO
Es una figura o institución jurídica que no tiene origen en el Derecho Romano, porque éstos solo se ocuparon del contrato. Esta
institución viene del Derecho Español y debido a su utilidad, ha tomado importancia en el mundo de los negocios jurídicos.
En Colombia este estudio está normativizado en el ARTÍCULO 89 DE LA LEY 153 DE 1887 que subrogó el antiguo artículo 1611 el
Código Civil.
Ocurre que a veces las personas quieren realizar de manera inmediata un negocio jurídico, pero debido a diferentes
circunstancias, no es posible materializarlo, haciéndose necesaria entonces la figura de la PROMESA BILATERAL DE CONTRATO.
Una de estas muchas circunstancias que impiden la realización inmediata del contrato, puede ser el dinero o cuando el objeto
del contrato es una cosa que no existe hoy pero se espera lleguen a existir (sometidas a una condición).
Nuestra Corte Suprema de Justicia ha manifestado que la promesa bilateral de contrato surte efectos por vía de excepción, es
decir, que no cumpliéndose los requisitos contenidos en la ley, esta promesa nunca generará efectos jurídicos y que
excepcionalmente y cumpliéndose dichos requisitos el contrato tendrá efectos plenos.
La promesa bilateral de contrato genera una sola obligación que es la “OBLIGACIÓN DE HACER”. A contrario sensu de lo definido
en la oferta, la cual es sin duda un “ACTO JURÍDICO” la promesa bilateral de contrato es un “NEGOCIO JURÍDICO” o “CONTRATO
DE CARÁCTER BILATERAL”.
Requisitos de la promesa bilateral de contrato artículo 89 de la ley 153/1987- ARTICULO 1611 código civil
Tal como queda redactado el artículo la corte suprema ha manifestado que el artículo solo produce efectos jurídicos por vía
excepcional, es decir que la regla general dice que la promesa el contrato no produce efecto alguno,
Aquellos negocios jurídicos que no producen efectos pueden ser ineficaces por inexistencia.
La promesa bilateral de contrato tendrá plenos efectos jurídicos o generará una obligación, cuando reúna los siguientes
requisitos:
1.- Que conste por escrito.
2.- Que el contrato a que la promesa se refiere no sea de aquellos que las leyes declaran ineficaces por no concurrir los
requisitos establecidos en el artículo 1502 del Código Civil (Manifestación de la voluntad, capacidad, objeto lícito y causa lícita).
Articulo 1501 código civil
3.- Que la promesa contenga un plazo o condición que fije la época en que ha de celebrarse el contrato.
4.- Que se determine de tal suerte el contrato, que para su perfeccionamiento solo falte la tradición de la cosa o las
formalidades legales. Los términos de un contrato prometido, solo se aplicarán a la materia sobre la que se ha contratado.
ELEMENTOS DE LA PROMESA BILATERAL DE CONTRATO
1.- Que conste por escrito: este tipo de contrato es ante todo técnico y solemne, un verdadero contrato. Esto significa que es
casi una solemnidad. La norma no diferencia si el escrito es privado o público, dando lugar a que se pueda hacer de las dos
formas, pero si es necesario que sea por escrito, cosa que en materia civil es obligatoria. En materia comercial cambia un poco
esta última condición o situación, ya que por la naturaleza de este Derecho, los negocios tienden a ser consensuales, incluida la
promesa de contrato tal y como lo menciona el artículo 824 del Código de Comercio, que a la letra dice: “…Los comerciantes
podrán expresar su voluntad de contratar u obligarse verbalmente, por escrito o por cualquier modo inequívoco. Cuando una
norma legal exija determinada solemnidad como requisito esencial del negocio jurídico, este no se formará mientras no se llene
tal solemnidad…”.
Lo anterior obedece a que los comerciantes necesitan que sus negocios sean expedidos, rápidos y por ello la promesa de
contrato se puede hacer de manera verbal o consensual, sin necesidad de que conste por escrito.
El artículo 861 del Código de Comercio también nos dice: “…La promesa de celebrar un negocio producirá obligación de hacer,
la celebración del contrato prometido se someterá a las reglas y formalidades del caso…”.
La excepción a la informalidad en materia comercial del contrato de promesa bilateral es la establecida en el artículo 119 del
Código de Comercio, referente a la PROMESA DE CONTRATO DE SOCIEDAD.
A pesar que la ley mercantil determina que no es obligatorio que la promesa conste por escrito, es MUY IMPORTANTE que ésta
se eleve a un escrito entre otras cosas, con el propósito de pre-constituir la prueba del contrato prometido.
2.- Que el contrato de promesa tenga todos los requisitos del artículo 1502 del Código Civil: o sea manifestación de la voluntad,
capacidad, objeto lícito y causa lícita. ¿Por qué requiere todos estos requisitos? Porque la promesa bilateral de contrato es un
auténtico negocio jurídico.
3.- Que la promesa contenga un plazo o condición que fije la época del contrato prometido definitivo: siempre que se hable de
promesa bilateral de contrato, nos referimos a que se está prometiendo algo a futuro y por ello el contrato que se celebra hoy
va a tener un plazo o condición a futuro. Pero, ¿Qué es plazo o condición?
PLAZO: hecho futuro y siempre cierto, por ejemplo una fecha o la muerte.
CONDICIÓN: hecho futuro pero incierto, por ejemplo, cuando compro un apartamento sobre planos.
La Corte Suprema de Justicia de nuestro país ha manifestado en varias de sus sentencias, que el plazo y la condición en el
contrato deben ser determinados so pena de nulidad absoluta. El plazo no puede ser indeterminado y la condición tampoco,
motivo por lo cual si así se hace, la promesa bilateral como tal será objeto de nulidad. Cuando se fija una condición, ésta
siempre deberá ir aunada a un plazo, para que no quede suelta y por lo tanto genere una nulidad contractual.
4.- El negocio en la promesa debe quedar absolutamente determinado (Artículo 1501 del Código Civil): es decir, los elementos
esenciales, naturales y meramente accidentales del negocio, deben estar plenamente estipulados. Es preferible exagerar en la
determinación de las características del objeto del contrato, sus elementos característicos. También hay que mencionar
expresamente cuándo se va a llevar a cabo el negocio definitivo. La Corte Suprema de Justicia ha manifestado que en la
promesa de contrato se admite que para evitar la transcripción de linderos nuevamente, se puede invocar la Escritura Pública
de la cual provienen.
La obligación en la promesa bilateral de contrato es la de HACER UN CONTRATO HACIA EL FUTURO. Y así, por ejemplo, la
promesa bilateral de contrato de compraventa llevará a que en el futuro se celebre el contrato de compraventa como tal.
LA PROMESA UNILATERAL DE CONTRATO U “OPCIÓN”
Este es un contrato o verdadero negocio jurídico que está regulado en el ARTÍCULO 23 LEY 51 DE 1918. Se lo define acorde a la
doctrina como: “Contrato en virtud del cual el propietario de una cosa o de un derecho, concede a otra personal a facultad
exclusiva para adquirirla o transferirla a un tercero, bajo ciertas condiciones o en determinados plazos, debiéndose obligar a
mantener dicha propuesta durante el término del plazo del contrato o el cumplimiento de la obligación”.
Hay dos partes a saber:
EL PROMITENTE: quien es la persona que ofrece la opción y queda obligada al cumplimiento del contrato.
EL BENEFICIARIO: quien puede tomar dicha opción para sí mismo o para un tercero; es la persona que ejerce la facultad de
optar o de opción. Este no queda obligado absolutamente a nada.
Algunos autores dicen que la opción es una oferta irrevocable, pero en realidad la oferta y la opción son dos figuras bastante
diferentes.
Características del Contrato de Opción
1. Es un contrato unilateral: o sea, celebrado entre dos partes, pero en la cual solamente queda obligada una sola de las partes.
2. Genera un derecho eventual a favor del beneficiario y por tanto no existe “Mutación” de los patrimonios.
3. Una parte de la doctrina ha dicho que genera un derecho precario a favor del beneficiario y que dicho derecho cobrará un
verdadero valor cuando el beneficiario ejerza su voluntad de opción.
4. Cuando el beneficiario ejerza su faculta de opción, se formará la obligación de “HACER EL CONTRATO DEFINITIVO” pero si el
beneficiario decide no hacer uso de su facultad, no queda obligado a absolutamente nada.
5. Si el promitente decide revocar su promesa antes de la aceptación o del ejercicio de la facultad del beneficiario (Opción)
habrá lugar a una indemnización, más si el beneficiario opta dentro de los plazos o condiciones establecidas, el promitente
queda obligado junto con el beneficiario a suscribir el contrato prometido.
Requisitos del Contrato de Opción:
1. Todos los mencionados en el artículo 1502 del C.C., o sea los de existencia de todo negocio jurídico.
2. Determinación del negocio prometido (Artículo 1501 del C.C.).
3. La promesa unilateral del contrato u opción debe tener un plazo o una condición que fije la época de celebración del negocio
jurídico definitivo. Pero si se pacta una “Condición”, ésta debe cumplirse al menos dentro del año siguiente a la celebración de
la promesa so pena de tenerse por fallida.
4. La ley no exige que conste por escrito, sin embargo, es muy importante para pre-constituir prueba que ésta conste por
escrito.
Ejemplo: A es propietario de una casa y como promitente suscribe un contrato de opción con B para que dentro de un plazo de
seis meses el beneficiario o compre la casa para él o la venda a un tercero (C).
Diferencias entre la opción y la oferta:
1. Tanto oferta como opción, se regulan por normas legales diferentes.
2. La oferta es un acto jurídico, la opción es un negocio jurídico.
3. La oferta se puede hacer a persona determinada o a personas indeterminadas; la opción solamente a persona determinada.
4. En la oferta, destinatario acepta únicamente para sí mismo lo que se le ofrece; en la opción el beneficiario acepta para sí
mismo o para un tercero.
5. En la oferta la responsabilidad es precontractual o aquiliana; en la opción, la responsabilidad es contractual.
LA REPRESENTACIÓN
Mandato diferente de representación
Mientras el mandato es un negocio jurídico la representación es una facultad de apoderamiento.
El mandato en Colombia siempre es representativo (el contrato del mandato) así el mandatario o representante pero el
contrato de mandato siempre va a ser negocio jurídico mientras la representación va a ser un instrumento para la
materialización de las obligaciones.
Normalmente a la celebración de un negocio jurídico acuden las partes interesadas, pero en varios ocasiones la comparecencia
de manera personal se vuelve difícil o a veces imposible y así aparece la figura de la “REPRESENTACIÓN” que permite que otra
persona diferente a la interesada en la celebración de un negocio jurídico, lleve a cabo tal negocio y los efectos jurídicos
recaigan en cabeza del propio interesado.
LAS PARTES SON:
REPRESENTADO: persona que delega la facultad para que la representen. También puede ser una persona que no es capaz o
una persona con una discapacidad mental absoluta. Sobre esta persona recaen todos los efectos del negocio jurídico.
REPRESENTANTE: es la persona encargada de ejecutar la gestión del representado.
Es una figura de un “Intermediario” que lleva la orden, la ejecuta y una vez cumplida la figura del representante como tal,
desaparece. Sobre el representante no recae ningún efecto del negocio jurídico, es un simple testaferro.
Requisitos de la Representación
1. La intención e intervención del representante: el representante debe acudir personalmente a expresar la voluntad de su
representado y por supuesto, esa manifestación de la voluntad del representante debe cumplir con los requisitos de ella
(Exteriorizarse, ser clara, simple y completa). El representante debe ser capaz, por regla general. Pero hay excepciones como el
“Incapaz Relativo” (menor adulto) o sea, aquél mayor de 14 años y menos de 18 años, que puede intervenir como
representante para cierto tipo de contratos como el de mandato o el de matrimonio.
2. Voluntad y actuación en nombre del representado: el representante debe expresar que actúa en nombre y representación
del representado al momento de suscribir el negocio jurídico. Si así no se hiciere, entonces todos los efectos jurídicos de tal
negocio recaerán en cabeza del representante.
3. Un poder debidamente conferido: el poder es la facultad de APODERAMIENTO que enviste al representante para que pueda
actuar en nombre del representado. Los poderes pueden ser verbales o escritos. En aquellos poderes para celebrar negocios
jurídicos solemnes, éstos deberán revestir igualmente de solemnidad lo que significa que deberán presentarse ante un Notario
para la autenticación o el reconocimiento de la firma, tanto de representante como de representado.
Es muy importante distinguir REPRESENTACIÓN de MANDATO, por cuanto este último es un contrato que genera obligaciones y
la representación no es un contrato, sino una facultad de apoderamiento para la celebración de un negocio jurídico. El mandato
solo se da para gestiones de carácter jurídico.
Clases de Representación
1. Legal: es la que está delegada por la ley, como ocurre con los padres hacia los hijos menores de edad.
2. Judicial: es aquella delegada por un juez dentro de un proceso, como ocurre con los curadores ad litem, los albaceas y los
tutores.
3. Convencional: es aquella que otorgan los particulares para ser representados por otras personas. Ejemplo: el cliente que
otorga poder a su abogado de confianza.
VICIOS DEL CONSENTIMIENTO
En esta parte, cabe advertir, que estudiaremos este tema a la luz de la teoría actual del negocio jurídico.
Los negocios jurídicos además de tener todos los requisitos que la ley ordena, deben estar libres de vicios que afecten su
validez, so pena de que si existen estos vicios, el contrato quede viciado de invalidez y se pueda reclamar su nulidad.
Los vicios del consentimiento conforme a la Teoría Clásica son: ERROR, FUERZA y DOLO. Para la Teoría Moderna son LA
IGNORANCIA, LA VIOLENCIA y EL ENGAÑO (Artículo1509 del C.C.). La Escuela Clásica consideraba que LA LESIÓN ENORME era
también un vicio del consentimiento; empero lo anterior, la Escuela Moderna consideró que no, y lo trata como un tema aparte,
ajeno a los vicios del consentimiento.
El error: hay dos clases de errores: ERRORES DE HECHO y ERRORES DE DERECHO.
El artículo 1509 del C.C. nos dice lo siguiente: “El error sobre un punto de Derecho, no vicia el consentimiento”. Igualmente el
artículo 9 ibídem nos dice: “La ignorancia de la ley no sirve de excusa”. De lo dicho se entiende, que cuando existe en un
contrato error de derecho o se celebró ignorando la ley, estas dos causales no son motivo suficiente para pedir la nulidad del
negocio jurídico como tal.
Jurisprudencialmente la Corte nos ha dicho que cuando un error de Derecho verse sobre un punto sustancial del contrato que
fue determinante, entonces es posible pedir la invalidez del contrato, todo conforme al artículo 2315 del C.C. que a la letra reza:
“Se podrá repetir aun lo que se ha pagado por error de Derecho, cuando el pago no tenía fundamento ni aún una obligación
puramente natural”.
Contrario sensu, el ERROR DE HECHO es el que precisamente vicia el consentimiento y se define como: “La falsa noción de la
realidad, es la discrepancia mental de lo que una persona percibe de algo y de lo que ese algo realmente es”. Algunos autores
de la Escuela Moderna dicen que “El error es equiparable a la ignorancia”, pero la verdad es que tanto error como ignorancia
son dos figuras totalmente diferentes; el ERROR es la percepción equivocada sobre algo; la IGNORANCIA es la ausencia de
conocimiento sobre algo. Empero lo anterior, para efectos de los negocios jurídicos el error es casi igual a la ignorancia porque
la gran mayoría de errores provienen de la ignorancia.
Contractualmente hablando el error es: “La falsa idea de uno de los contratantes acerca de algún elemento del negocio
jurídico”.
CLASIFICACIÓN DEL ERROR PARA LA ESCUELA MODERNA
1. Errores obstáculo (Artículo 1510 C.C.): son errores MUY GRAVES, tanto que impiden la formación del consentimiento, es
decir, hay ausencia del consentimiento de manera que el efecto jurídico en esta clase de errores será LA INEXISTENCIA pero no
por vicio del consentimiento sino por la ausencia total de éste.
a.- Error sobre el Objeto: aquí no hay acuerdo sobre el objeto material del contrato o negocio jurídico, por cuanto una o las dos
partes, pueden tener en mente un objeto diferente. Ejemplo: el vendedor cree que vende el apartamento 201 y el comprador
cree comprar el apartamento 101.
b.- Error sobre la Causa: es aquél que recae sobre el motivo que tienen las partes para contratar (Artículo 1524 del C.C., Causa
Real y Lícita de las Obligaciones). Ejemplo: el legatario que compra un contrato de seguro contra todo riesgo lo adquiere
desconociendo que el causante ya había asegurado el bien contra todo riesgo con anterioridad (Legatario es la persona que
recibe un bien de una tercera persona, para que éste cumpla una obligación o un objetivo).
c.- Error sobre la Naturaleza del Negocio Jurídico: aquél donde las partes se equivocan en la clase de negocio que celebran. Por
ejemplo: uno cree que celebra un contrato de mutuo, el otro piensa que es donación.
2. Error Nulidad (Artículos 1511-1512 C.C.): son errores MENOS GRAVES. Sí generan nulidad del contrato (Nulidad Relativa).
Aquí si hay consentimiento, solo que esa manifestación de las voluntades es equivocada.
a. Error Sobre la Sustancia: cuando la calidad o sustancia esencial del objeto sobre el cual versa el negocio jurídico es diferente
a la que se cree. El código civil trae un ejemplo clásico: cuando se compra bronce pensando que es oro.
FRENTE A ESTE TEMA HAY DOS TEORÍAS:
Teoría Objetiva: es de origen romano y hace referencia a que habrá error en la sustancia, cuando los materiales de los que están
hechos las cosas u objetos no corresponden a los elementos físicos y químicos de los que se cree. Ejemplo: compro un anillo
pensando que es de oro, cuando de verdad es de platino
Teoría Subjetiva: también hay error en la sustancia cuando hay equivocación no en los componentes físico químicos de la cosa,
sino en cualquier otra cualidad esencial de la cosa como su origen, historia, antigüedad, etc. Conforme al artículo 1511 del
Código Civil y con base en la teoría subjetiva se puede pedir la nulidad absoluta del contrato por error en la sustancia, solo si: 1)
La calidad de la cosa es el principal motivo para contratar; y b) La otra parte conocía dicho motivo
b. Error sobre la persona: este error se configura cuando hay equivocación sobre la persona con la que creemos contratar. Por
ejemplo: si hago un pacto para que me pinte un cuadro Fernando Botero el pintor famoso y lo pinta una persona homónima o
sea con el mismo nombre, que no es el pintor famoso. Frente a este tipo de error, también se puede pedir la nulidad absoluta
del contrato.
3. Errores Indiferentes: son errores “insustanciales” que en nada afectan la validez del negocio jurídico. Por ejemplo: si compro
un automóvil y al momento de la entrega le falta un tapete, eso no es motivo suficiente para pedir la nulidad del negocio
jurídico.
LA FUERZA: se desarrolla en el artículo 1513 del CC. La fuerza es una amenaza física o psicológica, con el fin de obtener el
consentimiento de una de las partes de manera forzada. No es la fuerza lo que vicia el consentimiento en sí, sino el temor que
provoca el elemento psicológico que de no realizarse el negocio jurídico se produzca un mal mayor. La fuerza está relacionada
con la libertad de la persona, en nada toca su intelecto como sucede con el error.
Lo que de verdad vicia el consentimiento, como se dijo antes, es la fuera psicológica aunque también existe la fuerza física, pero
ésta como tal, no vicia el consentimiento, porque si por medios físicos doblego a una persona para que manifieste su voluntad,
aquí hay ausencia total del consentimiento. Todo negocio jurídico celebrado con fuerza física produce INEXISTENCIA, contrario a
la violencia psicológica que genera NULIDAD.
Todos los vicios del consentimiento generan nulidad relativa. Cuando la nulidad proviene de objeto o causa ilícita NO SE
PUEDEN SANEAR NI CON EL PASO DEL TIEMPO.
Hay una tendencia de la doctrina a reconocer que se puede pedir la inexistencia que es diferente a la nulidad absoluta, porque
cuando se decreta la nulidad absoluta ésta da derecho a que se reclamen indemnizaciones; con la inexistencia no hay tal.
1.- Requisitos para comprobar que existió fuerza:
a) Que sea grave: la fuerza connota una fuerte impresión en una persona de sano juicio (artículo 1513 C.C.) entendiendo sano
juicio como una persona en condiciones normales. Para determinar justamente la gravedad de la fuerza hay una teoría de
origen romano o TEORÍA OBJETIVA que nos dio la regla o parangón conocido como “Constantísimos Vir” o “El hombre más
fuerte” una especie de Hércules. Si la amenaza es fuerte y Constantísimos Vir se asustaba era grave, de lo contrario, no.
Actualmente Constantísimos Vir es una persona en sano juicio.
También hay un criterio o TEORÍA SUBJETIVA que dice que hay que tener en cuenta además del sano juicio otras características
como la edad, el sexo, la educación, etc. (Inciso 2º del artículo 153 C.C.).
b) Que sea determinante: o sea que haya una relación de causalidad entre la amenaza y la celebración del negocio jurídico, es
decir, de no haber existido la amenaza no se habría conformado el negocio jurídico o se habría contratado.
c) Que sea Ilícita: frente a ésta debemos distinguir dos clases de amenazas: vías de derecho y vías de hecho.
. Vías de Derecho: son amenazas legalmente avaladas por la comunidad y reconocidas como lícitas, por ejemplo cuando el
acreedor amenaza al deudor con embargarlo si no paga.
. Vías de Hecho: son amenazas sin marco jurídico de respaldo.
Finalmente podemos decir que la fuerza debe ser presente aunque en realidad es futura y puede ser ejercida sobre las mismas
partes contratantes o sobre familiares ascendientes o descendientes.
En Colombia hay una tendencia a que se reconozca la amenaza a personas que no son familiares como tal, o sea a la novia o a
los amigos.
EL DOLO: es el mismo dolo que en Derecho Penal. Se define en el artículo 63 del Código Civil como: “La intención positiva de
inferir injuria a la persona o propiedad de otro”.
Los romanos entendieron el dolo como aquellas maquinaciones, argucias, mentiras y reticencias (ocultamiento de la
información que es obligación darla a conocer). Desde la doctrina del negocio jurídico el dolo son todas las maniobras
fraudulentas, engaños y mentiras de que una persona se sirve para engañar a otra con ocasión de un negocio jurídico.
No es el dolo lo que vicia propiamente el consentimiento, sino el error inducido por la contraparte para contratar.
En la Teoría del error este es autónomo, nace del yo. En la Teoría del Dolo el error es provocado por la contraparte.
La teoría del dolo es más severa en relación a las sanciones, es decir, se castiga absolutamente todo por leve que sea cuando es
provocado por la otra persona para la celebración de un negocio jurídico. Se trata de castigar esa conducta para generar
seguridad jurídica. Se sancionará a aquella persona que actúe de manera desleal en el negocio jurídico. El dolo es una sanción
del DELITO CIVIL comparable a la estafa.
1.- Requisitos del Dolo
a) La intencionalidad de quien lo provoca: debe existir intención, ese elemento interno, algo difícil de probar, porque hay que
comprobar la apariencia, la exageración o la ocultación.
b) Que sea sancionable: una conducta reprochable. Desde el antiguo Derecho Romano hay dos clases de dolo:
Dolo Bonus: es un dolo o engaño bueno, es decir una especie de engaño socialmente tolerable como ocurre en el caso de la
publicidad engañosa.
Dolo Malus: este es un dolo que como tal, genera el vicio del consentimiento. Todo delito penal de estafa sancionado genera un
dolo en materia civil; pero, no todo dolo civil es estafa.
Empero lo anterior, valga decir que frente a la publicidad engañosa el Estatuto del Consumidor ha establecido que frente a éste
el particular puede reclamar indemnizaciones si así lo desea.
El ejemplo típico del dolo civil, es el cheque en blanco que no tiene fondos.
c) Que sea determinante: o sea que exista una relación de causalidad entre el engaño provocado y la celebración del negocio
jurídico. La doctrina distingue dos clases de dolo: incidental y determinante.
Dolo incidental: aquél engaño provocado por la contraparte a pesar de que la otra parte de todas maneras iba a contratar solo
que lo va a hacer en condiciones más onerosas. No da para nulidad del contrato, solo indemnización de perjuicios. Ejemplo de
esto es la persona que compra una obra de arte y el vendedor al notar el interés del comprador pinta el marco color ocre para
darle apariencia de antiguo y así subirle el precio a la obra a venderse, argumentando que es antigua.
Dolo Determinante: este dolo como tal es el que sí vicia el consentimiento.
d) Debe provenir de la contraparte: la Escuela Clásica solo admitía que el dolo provenía de un tercero, cuando éste ayudaba a
engañar a cualquiera de las partes para que se celebrase el negocio jurídico. La escuela moderna para corregir esta teoría se
ideó tres situaciones donde puede haber dolo de un tercero como tal así:
Complicidad del contratante: si se prueba que el contratante es cómplice del tercero hay dolo.
El dolo del Representante es el dolo del Representado: o sea que si se da poder a una persona para que celebre a nombre de
ésta un negocio, si el representante comete dolo éste recae sobre los dos: tanto representante como representado.
Cuando estamos ante un negocio jurídico de carácter gratuito: aquí hay una presunción legal de dolo ejercido por un tercero.
2.- Dolo del Incapaz (Artículo 1744 del Código Civil): cuando hablamos de una persona incapaz nos referimos a un menor
adulto (mayor de 14 años y menor de 18). La norma dice: “Si de parte del incapaz ha existido dolo para inducir al negocio
jurídico, ni él ni sus herederos o cesionarios podrán pedir la nulidad del negocio”. Todo por el principio jurídico de “Nemum
auditum propiam tupidinems allegans” o sea, nadie puede alegar su propia torpeza en su defensa. En esta primera parte, el dolo
se maquina.
Ahora ocurre diferente con la situación que propone el inciso segundo de este artículo en la cual se habla que el incapaz
también mintió pero no hizo ninguna maniobra fraudulenta (“Hizo la aserción de aseverar”). En este segundo caso, el contrato
se puede anular pero no por dolo sino simplemente por incapacidad.
3.- Dolo en el matrimonio: la teoría del dolo se aplica a todos los negocios jurídicos, Excepto para el matrimonio.
Finalmente es importante manifestar respecto a este tema dos cosas: la primera, que todos los vicios del consentimiento no se
presumen, hay que probarlos. La segunda, que la caducidad para esta solicitud de nulidad es de cuatro (4) años.
LESIÓN ENORME (NO ES VICIO DEL CONSENTIMIENTO): esta figura es autónoma. La Escuela Clásica decía que la lesión enorme
sí era vicio del consentimiento si una persona vendía por debajo de la mitad del valor real o compraba al doble del mismo valor.
Para la Escuela moderna la lesión enorme no tiene nada que ver con el consentimiento y se reduce a una simple operación
matemática.
Históricamente la lesión enorme viene de Roma, incluso se inventaron esta figura para que las personas menores de veinticinco
años estuviesen protegidas, ya que ellas eran consideradas en Roma como carentes de “Madurez Negocial”.
Hacia la Edad Media la figura adquirió mayor relevancia ya que Tomás de Aquino y San Agustín propendieron por un derecho
natural y el concepto de “Justo Precio” para quienes vendían muy baratos sus fundos. En la Revolución Francesa la lesión
enorme cae en decadencia por la preponderancia de la libertad contractual. El Código Napoleónico recogió de manera
restringida esta figura para algunos negocios jurídicos y no para todos. Luego, Andrés Bello tradujo para Chile el Código
Napoleónico que fue implementado en Chile y posteriormente Colombia lo adoptó, tomando esta figura de manera restringida.
Cuando se hace un negocio jurídico se busca la equivalencia de las prestaciones entre contratantes. El esquema es
prácticamente el de una balanza. Las obligaciones son conmutativas en los negocios jurídicos o más bien en los contratos
bilaterales. Las partes quedan satisfechas con lo que dan y reciben. Para definir la lesión enorme decimos que es: Un
desequilibrio en las prestaciones económicas que una de las partes sufre como producto de la celebración de un negocio
jurídico. Cualquiera de las dos partes sufre el perjuicio. El legislador frente a esto buscó restablecer las condiciones justas del
contrato mas no el equilibrio, cosa imposible.
Momento de la Lesión Enorme. Es el perfeccionamiento del contrato o negocio.
La lesión enorme no podrá ser observada ni antes (Como en la promesa de contrato) ni después. Si se celebró el negocio
jurídico el 23 de octubre de 2014 es en ese momento en que debo examinar si se configuró la lesión enorme y no antes o
después. Si el desequilibrio se da después del negocio jurídico, entonces se da una figura diferente llamada “Teoría de la
Imprevisión”.
Negocios Jurídicos donde se da la lesión enorme. Son varios, y entre ellos tenemos:
. La aceptación de una herencia (artículo 1291 CC)
. Partición Sucesoral (Artículo 1405 CC)
. Interés en el contrato de mutuo (Artículo 2231 CC)
. Compraventa de Bienes Inmuebles (Artículo 1946 – 47 CC)
. Cláusula Penal (Artículo 1601 CC)
. Permuta (Artículo 1955 – 1958 CC)
. Hipoteca (Artículo 2455 CC)
. Anticresis (Artículo 2466 CC)
Requisitos de la lesión enorme en Compraventa de Bienes Inmuebles. Son cinco:
a) Solamente aplica para bienes inmuebles.
b) Debe haber lesión enrome bajo el principio “Ultra Diminium” o sea “Menos de la mitad o más del doble” del justo precio.
Pero debemos tener en cuenta, por ejemplo, que si un bien inmueble cuesta mil pesos y lo compro en quinientos pesos,
entonces es simplemente un negocio excelente, no hay lesión enorme.
Pero si compro ese mismo bien en cuatrocientos noventa y nueve pesos, entonces ya se produce la lesión enorme. El justo
precio lo determina un perito de la lista de auxiliares de la justicia nombrado por el Juez.
c) Que el contrato no sea aleatorio o que la compraventa no se haga por el Ministerio de la Ley, o sea que no puedo reclamar
lesión enorme en negocios en los que se venda una posibilidad de ganar como ocurre con las loterías; tampoco cuando se
compra un bien inmueble que está siendo rematado.
d) Que la cosa o bien no se haya perdido o enajenado en cabeza de un tercero.
e) Que no exista una cláusula posterior en donde las partes de común acuerdo renuncien a la acción rescisoria por lesión
enorme.
Efectos de la Lesión Enorme. Cuando alguna de las partes perciba o se sienta lesionada con motivo de la celebración de un
contrato de compraventa, tendrá derecho a acudir a una acción judicial conocida como “ACCIÓN RESCISORIA POR LESIÓN
ENORME”. Esta acción tiene un término de caducidad de cuatro (4) años contados a partir de la fecha de celebración del
negocio jurídico.
Esta acción persigue dos fines concretos:
a) Busca la rescisión del contrato o negocio jurídico: o sea, una especie de nulidad del contrato, es decir, volver a su estado
anterior las cosas.
b) La revisión del contrato: que se lo haría bajo los postulados del artículo 1948 del C.C., que a la letra dice: “…El comprador
contra quien se pronuncia la rescisión podrá a su arbitrio consentir en ella, o completar el justo precio, con deducción de una
décima parte. Y, el vendedor, en el mismo caso, podrá a su arbitrio consentir en la rescisión o restituir el exceso del precio
recibido sobre el justo precio aumentado en una décima parte…”. Entonces de la lectura de la norma, podemos sacar dos
situaciones y sus fórmulas:
. Si el vendedor (Quien salió lesionado) demanda al comprador y la sentencia sale en contra de este último, entonces podrá
elegir a su arbitrio o la declaratoria de la rescisión del contrato o podrá completar el justo precio descontando la décima parte.
Tenemos así que la fórmula para este caso sería:
Precio pagado + (Justo Precio – 1/10)
Si el comprador (Quien salió lesionado) demanda al vendedor y la sentencia condena a este último, entonces podrá elegir a su
arbitrio o la declaratoria de la rescisión del contrato o puede conservar el bien restituyendo el exceso del precio recibido, sobre
el justo precio, aumentando en una décima parte. Tenemos así que la fórmula para este caso sería:
Precio pagado – (Justo precio + 1/10)
DESVIACIÓN DEL CONSENTIMIENTO
El consentimiento a veces puede ser declarado pero a veces no de la forma que las partes quieren o esperan. Al respecto, hay
dos figuras: LA SIMULACIÓN Y EL FRAUDE PAULIANO.
V-C COMPLETAR (J.P-1/10)
C-F RESTITUIR (J.P+1/10)
LA SIMULACIÓN: Los romanos ya habían hablado de esta figura. Tiene varios sinónimos como fingir, aparentar, engañar, mentir.
Una definición doctrinal es la siguiente: “Simulación es la discrepancia intencional entre la manifestación de la voluntad y el
verdadero propósito de las partes”. A la simulación la caracteriza el elemento INTENCIÓN o sea que dos parte se ponen de
acuerdo para aparentar o disfrazar una declaración de voluntad, produciendo en consecuencia un “DESDOBLAMIENTO DEL
CONSENTIMIENTO”. Existen dos teorías respecto a si en la simulación existen dos actos o solo uno, y que pasaremos a explicar:
1) Teoría Dualista: La simulación contiene dos actos o negocios jurídicos: uno es el público, el simulado o aparente o visible que
es el OSTENSIBLE. El otro, o segundo acto, es el secreto, que conocen solo las partes y que comúnmente se llama
CONTRAESCRITURAS y que es el verdadero querer de las partes.
2) Teoría Monista: en la simulación hay un solo acto jurídico, el cual es el verdadero querer de las partes, lo que ellas buscan.
Para los defensores de esta teoría el acto simulado es INEXISTENTE y nuestra Corte Suprema de Justicia acogió esta teoría.
1.- Clases de Simulación. Doctrinalmente hablando, hay dos clases de simulación:
a) Simulación absoluta: en ésta las partes aparentan celebrar un negocio jurídico pero no quieren que los efectos jurídicos del
mismo se produzcan. Se disfraza todo un negocio jurídico, como ocurre por ejemplo, con las ventas de confianza. El objetivo de
esta simulación es solo uno: DEFRAUDAR A LOS ACREEDORES.
b) Simulación relativa: aquí las partes sí han querido celebrar un negocio jurídico, pero no en la forma declarada, que se puede
dar por tres situaciones:
La naturaleza del negocio jurídico: las partes simulan una compraventa pero en realidad lo que están buscando es una
donación.
Por la interposición de sujetos: el típico ejemplo es el testaferrato, que es una figura legal de origen español y que se define
como aquella donde existiendo una prohibición legal, tratamos de evadirla con una tercera persona. Por ejemplo cuando un hijo
le vende un bien a su hijo menor de edad. En esta clase se incluyen todos los actos o negocios prohibidos por la ley porque
tienen objeto ilícito (Artículo 1802 CC).
Por el contenido negocial: se simula ciertos elementos del negocio jurídico y ésta se da por el precio, por ejemplo.
2.- Efectos de la Simulación. Son los siguientes:
a) Las personas o las partes que se sientan afectadas por un acto de simulación, tienen una acción judicial llamada “ACCIÓN DE
SIMULACION” que tiene un término prescriptivo de 10 años a partir de la fecha de celebración del negocio jurídico. Es amplia
porque busca proteger el verdadero querer de las partes y se necesita diez años para usucapir el bien por el tenedor.
b) Frente a las partes si la simulación absoluta: o sea las personas originarias del negocio (comprador y vendedor por ejemplo).
Si el juez halla que la simulación se dio, entonces decreta que el acto es “INEXISTENTE”, ordena cancelar la escritura pública, el
registro y ordena la restitución del bien inmueble.
c) Frente a terceros, si la simulación es absoluta: en esta se mirará si los terceros son de buena o mala fe. Si son de buena fe, se
presume que ellos no tenía conocimiento de la simulación y como es presunción legal admite prueba en contrario; en
consecuencia, a los terceros de buena fe se les respeta su derecho. Si por el contrario, el tercero es de mala fe, o sea que sea
prestó para defraudar, entonces para éste el contrato es INEXISTENTE, ordenándose además la cancelación de la escritura y el
registro.
d) Frente a las partes, si la simulación es relativa: en esta prima lo realmente querido es decir, no tiene valor lo que se simula,
por ello el juez deberá buscar qué es lo que las partes de verdad quería en el negocio jurídico. Si las partes simularon
compraventa y era donación, entonces el juez determinará que el verdadero negocio era la donación y entonces aplicará las
reglas relativas a la donación y no la de la compraventa.
e) Frente a terceros, si la simulación es relativa: se aplicará nuevamente el principio de buena o mala fe
3.- Legitimados en la causa para ejercer la acción de simulación.
a) Las partes contratantes.
b) Los terceros: acreedores e interesados.
c) Los herederos: de cualquiera de las partes.
d) El defensor de familia o la madre representante de los hijos menores por los alimentos.
4.- Pruebas en la acción de simulación. Se admiten todos los medios probatorios establecidos en el Código General del Proceso.
También los “Indicios” o “Medios Indiciarios” o elementos que dan sospecha y que me llevan a constituir una prueba. Por
ejemplo: que no haya aumento o disminución en el patrimonio de los contratantes con el negocio celebrado; que no se entregó
la cosa; el estado de edad avanzado de las personas, las enfermedades terminales, etc. También pueden servir las pruebas
documentales como las contraescrituras.
EL FRAUDE PAULIANO: Este nombre se lo debe a un pretor romano llamado “Paulus” quien ideó esta figura para proteger las
obligaciones de los acreedores frente a sus deudores.
A diferencia de la simulación, en el fraude pauliano los negocios jurídicos que hace el deudor son serios y reales que se realizan
en un solo acto, pero su fin es perjudicar a los acreedores.
1.- Requisitos:
a) Son contratos serios y reales.
b) La voluntad declarada y la querida coinciden.
c) Se hace detrimento o en perjuicio de los acreedores.
d) El acreedor debe haber tenido tal calidad, antes del negocio jurídico que generara el fraude pauliano.
Ejemplo: una persona que tiene múltiples deudas, decide vender todos sus bienes a precios bastante económicos, todo a fin de
no pagarle a sus acreedores.
Frente al Fraude Pauliano existe una acción judicial conocida como “ACCIÓN PAULIANA” que es aquella que tienen todos los
acreedores con el propósito que la garantía de prenda de su obligación, regresen a cabeza del deudor para poder satisfacer
dichas obligaciones. En la acción hay que probar que el “ANIMUS FRAUDIS” o sea la mala fe del deudor en la celebración del
negocio jurídico.
Están legitimados para impetrar esta acción no solo los acreedores de obligaciones quirografarías o hipotecarias, sino también
todos aquellos acreedores que tengan un interés legítimo en el pago de sus obligaciones como los alimentarios, la DIAN para el
cobro de deudas fiscales, los trabajadores frente a sus empleadores, etc.
La acción pauliana tiene un término prescriptivo de un año, contado a partir de la celebración de los negocios con los cuales el
deudor se insolventó.
Con relación a este tema también existe la ACCIÓN OBLICUA que ocurre cuando un deudor que tiene la posibilidad de recibir
una herencia o donación cuantiosa, por no pagar sus deudas, decide no aceptarla, entonces cualquiera de sus acreedores por
medio de esta acción puede obligar a que dicha donación o herencia ingrese al patrimonio del deudor para que de esa forma se
paguen los créditos debidos.
Finalmente es bueno recalcar que la acción pauliana no persigue a terceros acreedores porque es NETAMENTE PERSONAL.
CAPACIDAD
La capacidad es una regla general en Colombia o una presunción legal conforme al artículo 1503 del Código Civil. Así, todos
estamos habilitados para celebrar negocios jurídicos y que todas las personas presuman esa capacidad de los demás.
Esta presunción por ser legal admite prueba en contrario y quien la alegue debe demostrarla.
Cuando nos referimos a capacidad queremos decir la “CAPACIDAD LEGAL O DE EJERCICIO” no otras capacidades como el goce
(Capacidad de goce es la que tienen todas las personas por el simple hecho de nacer y que se trasluce en derechos como el
nombre, la nacionalidad, el alimento, la protección). Esta diferenciación es importante, porque no todas las personas que tienen
capacidad de goce, pueden celebrar negocios jurídicos. Así, aunque todas tienen capacidad de goce, algunas tienen capacidad
legal o de ejercicio. Por eso, la capacidad legal o de ejercicio es aquella que tienen las personas para estar en el mundo de los
negocios jurídicos.
La capacidad como tal es una aptitud, facultad o poder, pero legalmente está definida en el artículo 1502 inciso final, cuando
afirma: “…la capacidad legal de una persona consiste en poderse obligar por sí misma y sin el ministerio o autorización de otra”.
LAS INCAPACIDADES
Conforme al artículo 1504 del Código Civil, en Colombia hay tres grupos de personas que son incapaces:
. Incapaces absolutos.
. Incapaces relativos.
. Incapaces especiales o con “Inhabilidades”.
Incapacidades Absolutas. En este grupo están personas como los dementes, los impúberes, los sordomudos que no puedan
darse a entender por escrito. Empero lo anterior, esta clasificación se ha modificado ostensiblemente por la promulgación de
leyes como la 1306 de 2009 y por vía jurisprudencial, cosa que es necesario pasar a explicar.
La palabra “Demente” fue reemplazada por la Ley 1306 de 2009 por la expresión “Discapacitado Mental”. El tema de la
demencia está relacionado con un nombre de una patología eminentemente mental y en el Código Civil se la relacionaba con
otros términos como mentecato, loco furioso, imbécil, mentecato, cretino y otros de misma estirpe. Todos estos términos eran
despectivos y discriminatorios, dando pie a que se configuraran desigualdades.
Antes de la ley 1306 de 2009, al demente se lo marginaba o anulaba del mundo de los negocios jurídicos. Gracias a esta ley ya se
piensa en la persona y se vuelve incluyente porque busca el restablecimiento de su salud. El demente es discapacitado mental y
así se debe mencionar en un derecho moderno, cuando se trata de emplear acepciones correctas.
La ley dice que hay “Discapacidad mental absoluta” cuando una persona sufre una patología profunda de aprendizaje. Estos
cánones internacionales de evaluación de la discapacidad los debe hacer un comité médico científico existente en cada país y
que para Colombia es el Instituto Colombiano de Medicina Legal y Ciencias Forenses.
Ahora bien, con relación a los impúberes que son aquellos que no han alcanzado la pubertad y no son capaces de realizar
negocios jurídicos por su edad, la ley les protege por su falta de madurez y experiencia. Para saber quiénes son impúberes nos
remitimos al artículo 34 del C.C., que por sentencia C-534 de 2005 declaró inexequible parte de este artículo en su expresión
“mujer de 12 y varón” y decidió dejar la edad para entender que los impúberes tienen capacidad en 14 años, sin importar si son
hombres o mujeres. Cuando una persona impúber celebra un negocio jurídico, tal acto no produce efectos jurídicos u
obligaciones, ni siquiera naturales.
El artículo 294 del C.C. estableció la figura del PECULIO PROFESIONAL O INDUSTRIAL que a la letra reza: “El hijo de familia se
mirará como emancipado y habilitado de edad para la administración y goce de su peculio profesional o industrial”. Este artículo
admite la emancipación y habilitación de edad con base en un principio de derecho que dice que “Quien puede lo más, puede lo
menos”.
En lo relativo a los sordomudos que no pueden darse a entender por escrito, la Corte Constitucional declaró inexequible la
expresión “…por escrito” conforme a la sentencia C-983 de 2002 con ponencia del Magistrado Jaime Córdoba Treviño. Ahora,
los sordomudos pueden darse a entender por medio de señas u otro medio convencional.
Aquellos que no puedan darse a entender por ningún medio serán considerados incapaces absolutos.
Concluimos entonces que la incapacidad absoluta genera NULIDAD ABSOLUTA, todo de conformidad con el artículo 1741 del
C.C.
Incapaces Relativos. Este grupo está conformado por las siguientes personas:
Menores adultos: entre 14 y 18 años.
Disipadores declarados en interdicción: disipador es una persona que posee una voluntad débil y se deja arrastrar por las
pasiones como el juego, la bebida o las apuestas. La interdicción es una situación judicial para proteger el patrimonio de
personas con una voluntad débil. La ley 1306 de 2009 dice que los familiares están en la obligación legal de proteger la salud del
disipador y solicitar la interdicción. El no hacerlo podría ser causal de desheredamiento. Ahora, si la persona tiene una sentencia
de interdicción, los negocios anteriores a dicha declaratoria requieren para reputarse como nulos no solo exhibir la
correspondiente sentencia sino pruebas adicionales que demuestren que la persona al momento de realizarlos estaba con su
consentimiento viciado.
. Hay otros incapaces relativos: como los drogadictos, el bebedor consuetudinario y los pródigos.
CLASIFICACIÓN DE LOS NEGOCIOS JURÍDICOS
Esta clasificación la encontramos de los artículos 1496 a 1499 del Código Civil.
DESDE EL PUNTO DE VISTA DE LAS OBLIGACIONES
1.- Unilaterales: aquellos contratos donde una sola de las partes de la relación contractual queda obligada. Ejemplo: contratos
de donación, mutuo, la opción, el comodato y el depósito.
2.- Bilaterales: se producen y surgen obligaciones para las dos partes que intervienen en el negocio jurídico de manera
recíproca. Ejemplo: la compraventa, el arrendamiento, la permuta, la anticresis.
3.- Plurilaterales: obligaciones que se dan para varias personas o partes. Aquí concurren el acuerdo de varias voluntades.
Ejemplos: contrato de sociedad, la convención colectiva de trabajadores, los pactos de convivencia en los inmuebles sometidos
a régimen de propiedad horizontal.
DESDE EL PUNTO DE VISTA DE SU PERFECCIONAMIENTO
Cuando se habla de perfeccionamiento nos referimos a aquellos negocios que nacen al mundo del Derecho. Son de tres clases:
1.- Consensuales: éstos solo necesitan del simple acuerdo de voluntades para nacer al mundo del Derecho. Ejemplo: la
compraventa –de manera general- y el arrendamiento.
2.- Solemnes: son aquellos que se perfeccionan con un requisito legal adicional para nacer al mundo del Derecho, definido en la
mayoría de los casos como “Ad sustantian actum” o formalidad. Ejemplo: compraventa de bienes raíces, las servidumbres, la
venta de derechos herenciales, la donación sujeta a plazo o condición.
3.- Reales: son aquellos negocios jurídicos o contratos que nacen al mundo del derecho mediante la entrega de la cosa. Ejemplo:
el depósito, el mutuo y el comodato.
CONTRATOS PRINCIPALES Y ACCESORIOS
1.- Principales: son aquellos actos jurídicos o contratos que no necesitan de ningún otro contrato para poder ejecutarse.
Ejemplo: la compraventa, el arrendamiento, la permuta y la donación.
2.- Accesorios: son aquellos negocios que necesitan de otro contrato principal para ejecutarse o cumplirse. Por ejemplo, la
hipoteca que es un contrato accesorio al mutuo, para que en caso de incumplimiento en el pago del mutuo, se proceda a
embargar el bien dado en garantía mediante hipoteca. Otro ejemplo es la pignoración.
OTRAS CLASIFICACIONES DE LOS NEGOCIOS JURÍDICOS
1.- Típicos y nominados: aquellos que están regulados por una norma, código o ley. Aquí se encuentran la mayoría de contratos
como por ejemplo la compraventa, el arrendamiento, etc.
2.- Atípicos o innominados: aquellos que son fruto del principio de la autonomía privada de la voluntad de las partes o la unión
de dos o más contratos que genera un tercero. Ejemplo: el leasing inmobiliario, el anticresis como se realiza en la ciudad de
Pasto.
3.- Contratos de ejecución instantánea: son aquellos que se ejecutan una sola vez y en una sola instancia. Ejemplo: compraventa
de ejecución instantánea, o la venta a plazos.
4.- Contratos de tracto sucesivo: aquellos contratos que se van ejecutando por instalamentos o pasos. Ejemplos: el contrato de
arrendamiento o el de trabajo.
5.- Contratos “Inter vivos”: aquellos negocios jurídicos que se dan entre personas vivas como son la mayoría de ellos.
6.- Contratos “Mortis causa”: son aquellos que se ejecutan una vez haya fallecido una persona. Ejemplo: el testamento y el
seguro de vida.
TERMINACIÓN DE LOS NEGOCIOS JURÍDICOS
POR EJECUCIÓN NORMAL DEL CONTRATO
Es la forma ideal de terminar un negocio jurídico. La gran mayoría de negocios jurídicos termina por la ejecución debida del
contrato.
POR MUTUO ACUERDO DE LAS PARTES
“Las cosas en Derecho se hacen como se deshacen”. Si dos personas se pueden poner de acuerdo para hacer un negocio
jurídico, también pueden ponerse de acuerdo para terminarlo o deshacerlo.
PORQUE SE EXTINGA ANTES DE SU NACIMIENTO, DURANTE SU EJECUCIÓN O DESPUÉS DE SU NACIMIENTO
Un acuerdo de voluntades puede extinguirse ANTES DE SU NACIMIENTO, como ocurre para los casos de la inexistencia, en los
cuales y conforme a lo ya explicado, le faltan los requisitos básicos para su existencia (Manifestación de la voluntad y que ésta
esté exenta de vicios, reporte de un objeto y cumplimiento de una formalidad cuando así lo requiera).
DURANTE SU EJECUCIÓN es cuando se presenta la nulidad, porque aunque el negocio jurídico nació a la vida jurídica adolece de
la falta de alguno de los requisitos para su validez como son: ausencia de vicios del consentimiento, ausencia de lesión enorme,
que el objeto sea lícito y que la causa sea lícita.
Las nulidades pueden ser de dos clases:
1.- Nulidad Absoluta: esta busca proteger el interés jurídico general. Puede ser decretada por el juez o a petición de parte. Las
causales para la nulidad absoluta están en el artículo 1741 del C.C. y son: objeto ilícito, causa ilícita, falta de requisitos o
formalidades solemnes y la incapacidad absoluta.
2.- Nulidad Relativa: son omisiones menos graves que buscan proteger el interés particular y se reducen a: vicios del
consentimiento (error, fuerza, dolo) y la incapacidad relativa.
Finalmente, para la terminación de los negocios jurídicos DESPUÉS DE HABERSE CELEBRADO tenemos que se puede dar ante
todo, por INCUMPLIMIENTO CONTRACTUAL, o sea, que el contrato es válido, existe, pero no logra su cometido.
Las formas de pedir la terminación del contrato después de haberse celebrado son tres:
1.- Resolución: es una terminación de carácter judicial que se encuentra en el artículo 1546 del Código Civil y que se aplica para
cualquier contrato: “En los contratos bilaterales va envuelta la condición resolutoria en caso de no cumplirse por uno de los
contratantes lo pactado… Pero en tal caso podrá el otro contratante pedir a su arbitrio o la resolución o el cumplimiento del
contrato con indemnización de perjuicios”.
2.- Rescisión: es una especie de nulidad de los negocios jurídicos y por tanto de terminación aduciendo la falta de algunos
requisitos concretos en algunos contratos en específicos. Esta declaratoria de Rescisión también es judicial. El ejemplo de esta
forma de terminación de un negocio jurídico es la rescisión por lesión enorme.
3.- Resciliación: es la manera judicial de terminar un negocio jurídico, por acuerdo entre las partes. Obviamente, se hace ante un
estrado judicial, dentro de un proceso. Es de mutuo cuerdo de la partes, principio jurídico “las cosas en derecho se deshacen
como se hacen”.

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