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Los secuestres son funcionarios públicos que administran un bien que les ha sido

entregado bajo mandato y administración por un juez. Por lo general estos bienes son
secuestrados porque se encuentran en proceso de embargo o están siendo disputados por
dos o más partes, el secuestre es quien se encarga de tenerlos bajo su custodia hasta que
se decida a quien se deben restituir.

A pesar de que los secuestres quedan como mandatarios del inmueble, ellos deben
responder por una serie de cosas que enumeraremos a continuación:

Deben respetar las relaciones económicas ya establecidas.

Deben hacerse cargo de la conservación del inmueble y de que sus servicios públicos,
administración, etc., estén al día.

Administra los cánones que éste reciba, manteniendo las cuentas claras para evitar
problemas al momento de restituirlo a su nuevo propietario.

Si la propiedad tiene frutos o cosechas pendientes por recibir, al recibirlas se las queda el
secuestre y él se encarga de administrarlas, respondiendo de la misma forma que se indica
en el punto anterior.

Si la propiedad contiene bienes muebles u objetos de valor, el secuestre debe encargarse de


guardarlos en una bodega o un depósito para que estén seguras, contemplando las medidas
necesarias para su conservación y mantenimiento.

Si se trata de una empresa industrial, el gerente debe seguir administrándola pero no


conserva el derecho para disponer de dineros o tomar acciones decisivas sobre la empresa
sin autorización previa del secuestre.

Si existen dineros en efectivo, el juez que maneje el caso debe consignarlos en una cuenta
de depósitos judiciales.

Ahora, al momento de recibir el bien, el secuestre debe levantar un acta en donde


especifique cómo recibe la propiedad, en qué condiciones la encontró y con cuántos y
cuáles bienes anexos dentro de ella, de igual manera en el acta debe constar cómo se
encuentra cada uno de esos bienes anexos, si se van a depositar en bodegas, etc., el acta se
puede completar con fotografías y demás. Así mismo, cuando el secuestre restituya la
propiedad, debe rendir cuentas ante el juez y ante quien quede como propietario, de la
administración, conservación y mantenimiento de la misma junto con sus frutos (si los
recibió) y los demás bienes anexos.

Es importante tener presente que el propietario del bien secuestrado puede vigilar la
administración del secuestre y denunciar cualquier irregularidad ante el juez que esté a
cargo del caso. El secuestre puede responder penalmente por Abuso de Confianza, si
obtiene provecho del bien para sí mismo.

2. cómo se da el proceso:

El secuestre es cuando se da la aprehensión del bien, es un proceso que realiza el juez de


conocimiento, el abogado, secretario y una persona que designan secuestre, que pasaría a
ser mandatario judicial.

Durante el proceso ejecutivo, el juez dicta una medida cautelar sobre el bien mueble, en este
caso el vehículo automotor.
Los bienes muebles son sujetos a registros, cuando una autoridad judicial ordene el
secuestre.

El secuestre procede a través de la inscripción de embargo o secuestre que expide el juez a


la oficina competente, en este caso de vehículo automotor se hace la inscripción en la
secretaria de tránsito municipal o distrital.

Así mismo, se expide una orden a la policía para que lo inmovilice cuando lo encuentre en la
calle.

El juez expide el auto que decrete el secuestre, se señalará fecha y hora para la diligencia y
se designará el secuestre que deberá concurrir a ella, en este caso el juez comisionará al
respectivo inspector de tránsito para que realice la aprehensión y el secuestro del bien.

Al momento de realizar el secuestre, el comisionado elabora un acta en donde especifica


fecha, hora, lugar, nombre del juez y numero de acta que ordeno el juez, condición y delito,
cómo recibe el vehículo, en qué condiciones lo encontró y con cuántos y cuáles bienes
anexos dentro de ella, de igual manera en el acta debe constar cómo se encuentra cada uno
de esos bienes anexos.

Así mismo, en el acta se debe decir si el vehículo se entrega a disposición del acreedor para
su custodia de acuerdo al artículo 595 que dice “cuando se trate de vehículos automotores,
el funcionario que realice la diligencia de secuestro los entregará en depósito al acreedor, si
este lo solicita y ha prestado, ante el juez que conoce del proceso, caución que garantice la
conservación e integridad del bien. En este caso, el depósito será a título gratuito.”

De lo contrario se debe establecer el parqueadero en el cual quedara guardado el vehículo


automotor, teniendo en cuenta que es al propietario a quien le corresponde el pago del
mismo. Se firma el acta y se puede completar con fotografías y demás

El secuestre por medio de acta debe rendir cuentas ante el juez y ante quien quede como
encargado de la administración, conservación y mantenimiento del mismo y de los demás
bienes anexos.

Que es?

El secuestro de bienes es una medida cautelar que se utiliza con el fin de prevenir que el
deudor se insolvente o carezca de bienes que garanticen el pago de sus deudas.

El artículo 2273 del Código Civil define el secuestro de bienes de la siguiente manera:

“El secuestro es el depósito de una cosa que se disputan dos o más individuos, en manos
de otro que debe restituir al que obtenga una decisión a su favor.”

Existen dos tipos de secuestro:

Convencional: Se realiza por mutuo acuerdo de las partes y se arregla mediante


conciliaciones entre el deudor y sus acreedores.

Judicial: Es decretado por un juez. Éste es mucho más delicado ya que el dueño del
inmueble corre un riesgo enorme, pues de no cancelar la deuda o de no llegar a un acuerdo
con el acreedor, sus bienes pueden ser rematados sin que le corresponda nada de lo que se
gane con su venta.

Así mismo, el secuestre puede ser elegido por las partes que reclaman el bien o por el
mismo juez que declaró la medida cautelar. Al secuestre se le asignan las mismas facultades
de administrador o mandatario tal como lo cita el artículo 2270 del Código Civil:
“El secuestre de un inmueble tiene a su administración, las facultades y deberes de
mandatario, y deberá rendir cuenta de sus actos al futuro adjudicatario.”

Luego de que se resuelva el caso y se designe a quien quede como propietario del bien, el
secuestre tiene la obligación de rendir cuentas a éste. Es por ello que al tomar el bien en
secuestro es importante tener muy en cuenta las condiciones en las que se encuentra el
bien antes de entregarla, y las condiciones en que se recibe (puede ser un inventario, fotos,
testigos, etc)

El secuestre no puede renunciar a menos de que tenga por motivo una situación urgente e
imposible de evadir,  a menos de que las partes lo dispongan si es un secuestro
convencional, o un juez lo decrete si se trata de un secuestro judicial.

2.

El secuestro implica que la administración del bien secuestrado se le retire al dueño y le sea
entregado al secuestre quien debe administrarlo y rendir cuentas de los frutos de esa
administración si los hubiere.

El secuestro tiene como finalidad conservar los bienes, impidiendo que su dueño o
poseedor de los mismos los enajene, asegurando de esta forma que se cumpla con la
decisión resultante del proceso que dio lugar al secuestro de tales bienes.

El secuestro es una medida cautelar para asegurar el cumplimiento o ejercicio de un


derecho legalmente reconocido, como en el caso de cobros ejecutivo de créditos, para lo
cual se opta por secuestrarlos para preservarlos hasta la hora en que la justicia tome la
decisión final sobre lo que se está discutiendo o alegando, y que de acuerdo a dicha
decisión, el bien se regresa a su propietario o se le hace entrega a quien alega un derecho,
quien lo recibe como garantía, pago o indemnización.

El código civil regula estos hechos, del cual se transcribe a continuación lo relacionado con
el secuestro de bienes.

ARTICULO 2273. DEFINICIÓN DE SECUESTRO. El secuestro es el depósito de una cosa que


se disputan dos o más individuos, en manos de otro que debe restituir al que obtenga una
decisión a su favor.
El depositario se llama secuestre.

ARTICULO 2274. APLICACIÓN DE LAS REGLAS SOBRE EL DEPOSITO. Las reglas del
secuestro son las misma que las del depósito propiamente dicho, salvas las disposiciones
que se expresan en los siguientes artículos y en las leyes de procedimiento.

ARTICULO 2275. BIENES OBJETO DE SECUESTRO. Pueden ponerse en secuestro no sólo


cosas muebles, sino bienes raíces.

ARTICULO 2276. SECUESTRO CONVENCIONAL Y JUDICIAL. El secuestro es convencional o


judicial.

El convencional se constituye por el solo consentimiento de las personas que se disputan el


objeto litigioso.

El judicial se constituye por decreto de juez, y no ha menester otra prueba.

ARTICULO 2277. OBLIGACIONES FRENTE AL SECUESTRE. Los depositantes contraen para


con el secuestre las mismas obligaciones que el depositante respecto del depositario en el
depósito propiamente dicho, por lo que toca a los gastos y daños que le haya causado el
secuestro.

ARTICULO 2278. RECLAMO POR PERDIDA DE LA TENENCIA . Perdiendo la tenencia podrá


el secuestre reclamarla contra toda persona, incluso cualquiera de los depositantes, que la
haya tomado sin el consentimiento del otro, o sin decreto del juez, según el caso fuere.

ARTICULO 2279. FACULTADES DEL SECUESTRE DE INMUEBLE. El secuestro de un


inmueble tiene relativamente a su administración, las facultades y deberes de mandatario, y
deberá dar cuenta de sus actos al futuro adjudicatario.

ARTICULO 2280. CESACIÓN DEL CARGO DE SECUESTRE. Mientras no recaiga sentencia de


adjudicación, pasada en autoridad de cosa juzgada, no podrá el secuestre exonerarse de su
cargo, sino por una necesidad imperiosa, de que dará aviso a los depositantes, si el
secuestro fuere convencional, o al juez en el caso contrario, para que disponga su relevo.

Podrá también cesar antes de dicha sentencia, por voluntad unánime de las partes, si el
secuestro fuere convencional, o por decreto de juez, en el caso contrario.

ARTICULO 2281. RESTITUCIÓN DE LA COSA. Pronunciada y ejecutoriada dicha sentencia,


debe el secuestre restituir el depósito al adjudicatario.

Orden de embargo y secuestro.

Presentada la solicitud de medidas cautelares por el demandante, si el juez lo encuentra


procedente libará la orden de embargo y oficiará a las distintas entidades encargadas de
materializar el embargo como bancos, empleadores, oficina de registro, etc.

Estas entidades tienen la obligación de acatar la orden de embargo y proceder según les
corresponda a cada una.

Casos en que se decreta el embargo y secuestro de bienes.

El embargo y secuestro es de decretado por ejemplo en los procesos ejecutivos en cobro de


deudas u obligaciones, o en los procesos de divorcio sobre bienes que pueden que puedan
ser objeto de gananciales.

En el caso de los procesos ejecutivos que son los más comunes, el juez decretará el
embargo y secuestro de los bienes del demandado si encuentra que la obligación o deuda
reclamada está respaldada en un título ejecutivo o documento que preste mérito ejecutivo.

Por lo general todo demandante en un proceso ejecutivo solicita el embargo y secuestro de


los bienes del demandado.

Notificación del embargo y secuestro.

La orden de embargo y secuestro no se notifica como tal al demandado, por la sencilla


razón de evitar que pueda enajenar los bienes que se pretenden embargar en caso de ser
avisado antes de ejecutar el embargo.

El inciso primero del artículo 298 del código general del proceso señala:

«Las medidas cautelares se cumplirán inmediatamente, antes de la notificación a la parte


contraria del auto que las decrete…»

Se trata de no poner sobre aviso al demandado, de manera que este sólo se entera del
embargo cuando le es notificado el mandamiento de pago.

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