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CONCEPTO BIENESTAR

En la literatura el concepto de bienestar suele asimilarse al de felicidad, calidad de vida y salud, entre otros
Una persona puede juzgar su nivel de bienestar a partir de las cosas materiales que posee, vivir bien. Su
estado de salud, estar bien. Su apariencia física, verse bien. O las emociones que experimenta cuando
reflexiona sobre su vida, sentirse bien.

El bienestar es, por lo tanto, una evaluación o apreciación personal, en la cual los individuos hacemos una
valoración global de diferentes aspectos que consideramos importantes en la vida.

Recuerda que cada persona es única, que no hay nadie igual a ti o a mí. Así mismo, los criterios que tenemos
para evaluar nuestro bienestar son únicos, particulares.

Las investigaciones sobre el tema del bienestar muestran que al responder la pregunta, ¿qué tan bien estoy
en este momento de mi vida?, las personas tienen en cuenta: 1, aspectos personales. 2, aspectos del medio
en el que viven

Algunos de los aspectos personales que consideramos al evaluar nuestro bienestar son los siguientes:

1, Los recursos económicos y las cosas materiales que se pueden adquirir con el dinero.

2, Los servicios públicos de calidad a los cuales tenemos acceso.

3, La vivienda cómoda y agradable en un medio ambiente limpio y seguro que habitamos.

4, La salud física y las oportunidades, recursos y servicios que están disponibles en el medio en el que
vivimos para conseguirla, mantenerla o recuperarla cuando la hemos perdido o se ve amenazada por
cualquier circunstancia.

5. La autoaceptación, es decir, el conocimiento que tenemos de quiénes somos y las actitudes positivas que
expresamos hacia las características con las cuales nos identificamos.

6, Las posibilidades que tenemos para entablar y mantener relaciones positivas con otras personas.

7, las ocasiones en las cuales ejercemos la autonomía tomando las propias decisiones, expresando nuestra
opinión en los asuntos que nos afectan y participando en las actividades comunitarias y políticas.

8, La habilidad personal para elegir y controlar las condiciones del medio en el que vivimos para satisfacer
nuestros deseos y necesidades.
9, Los planes que tenemos para el futuro que permiten darle sentido a nuestra vida y la capacidad que
creemos tener de continuar logrando lo que nos proponemos.

10, El empeño que ponemos en llevar a cabo acciones que nos permitan el desarrollo de capacidades y
seguir creciendo como personas.

Entre los aspectos del medio en el que vivimos que consideramos al evaluar el bienestar, se han identificado
los siguientes:

1, Integración social, el sentimiento de ser parte de un grupo y de mantener vínculos con una red social que
está disponible para ofrecer apoyo en caso de necesitarlo. 2, Aceptación social, confianza en que las
personas que están alrededor aceptan los aspectos positivos y negativos que hacen parte de nuestra vida. 3,
Contribución social, sentimiento de utilidad, de que somos capaces de aportar algo a la sociedad en que
vivimos para que este cada vez mejor

4, Actualización social, confianza en el futuro de la sociedad, en su capacidad 


para producir mejores condiciones para promover el bienestar de sus miembros.

5, Coherencia social, confianza en nuestra capacidad para entender la manera cómo funciona el mundo en el
que vivimos, de encontrarle sentido y lógica a los acontecimientos cotidianos.
 concluir que, 
1, el bienestar es una valoración subjetiva. 
2, incluye aspectos personales y aspectos del contexto en el que vivimos.

CRITERIOS PARA VALORAR EL BIENESTAR FISICO, PSICOLOGICO Y SOCIAL

Estos aspectos hacen referencia a tres dimensiones del bienestar, el bienestar físico, el bienestar psicológico
y el bienestar social. Resumamos entonces las definiciones de las tres dimensiones del bienestar.

El bienestar físico implica contar con las condiciones anatómicas y funcionales para desarrollar y disfrutar las
actividades cotidianas con el mayor grado de independencia posible.

Esto requiere, por un lado, fomentar y mantener patrones de comportamiento con relación a la alimentación, la
actividad física, el descanso, entre otros aspectos requeridos para mantenernos bien. Además, implica evitar
patrones de comportamiento nocivos para el cuerpo y disponer de oportunidades para funcionar.
Autónomamente, incluso en situaciones en las cuales presentamos daños o lesiones físicas o funcionales.

El bienestar mental o psicológico se refiere a tener actitudes positivas hacia nosotros mismos que nos
permitan lograr nuestros objetivos vitales y participar en las actividades cotidianas de manera efectiva. Esto
implica, entre muchas otras cosas, poder manejar los retos de la vida cotidiana de manera constructiva,
establecer y mantener relaciones estables y confiables, sentirnos capaces de definir. Y preservar nuestras
convicciones de manera independiente, desarrollar las habilidades que se requieren para elegir o crear
entornos favorables para satisfacer los deseos y necesidades propias

El bienestar social por su parte corresponde al sentimiento de pertenencia a una colectividad que nos
permite participar activamente. Para esto necesitamos un contexto seguro en el que podamos establecer
vínculos sociales y confiar en los otros, que nos ofrezca oportunidades para sentirnos personas útiles,
respetadas y valoradas, así como competentes para aportar algo a la sociedad en que vivimos.
A partir de estas definiciones podemos concluir que, si bien el bienestar es una valoración personal subjetiva,
las condiciones del entorno son fundamentales para que las personas logremos sentirnos satisfechas y a
gusto con nuestro cuerpo, con lo que somos, lo que sentimos, lo que podemos hacer y lo que vivimos.

El bienestar es el resultado de la interacción de una gran variedad de factores, entre los que se destacan.

Los factores biológicos y psicológicos. Los factores de la red social de la que hacemos parte. Los factores del
vecindario en el que vivimos. Los factores del entorno sociocultural, económico, político, normativo, histórico y
temporal en el que nos encontramos.

Todos estos factores influyen en nuestras decisiones personales ante una situación concreta. En esas
decisiones, se ponen en juego lo que percibimos que necesitamos hacer, lo que identificamos que debemos
hacer, lo que creemos que somos capaces de hacer, y lo que reconocemos que es posible hacer en las
circunstancias particulares en que nos encontramos.

¿COMO VIVIMOS?

Se trata de la historia de John Henry, un afroamericano trabajador de los ferrocarriles en Estados Unidos,
quien, para salvar su trabajo y el de sus compañeros, que estaba en peligro, reta al inventor del martillo de
vapor a una competencia. En esta apuesta, el vencedor sería el que terminara primero de martillar los rieles.
Al final, John Henry resulta el vencedor pero en el proceso sufre un ataque cardíaco y muere.
Lo que esta historia nos plantea es que en la cotidianidad, muchas personas, buscando superar los
estereotipos o bajas expectativas que se pueda tener sobre ellas. Dada su raza, etnia, orientación sexual,
grado de funcionalidad o cualquier otra condición, terminan realizando esfuerzos que superan sus
capacidades y terminan por pagar un alto costo para su bienestar físico, mental o social.

En estos casos podemos encontrar que las desventajas que tienen las personas por ser miembros de un
grupo minoritario de la población se suman las desventajas que implican las consecuencias negativas de sus
esfuerzos sobre su bienestar. La desventaja más extrema que nos describe la historia que te acabo de relatar
es la muerte.

Los conceptos de desigualdad, inequidad y equidad

Un indicador es un dato o información que nos sirve para valorar una característica, un comportamiento, o un
hecho, o un asunto, o una situación, o una condición o un fenómeno. Los indicadores pueden ser
cuantitativos, numéricos, o cualitativos, opiniones, percepciones, relatos.

Es decir, el comportamiento de las mujeres de nivel educativo más alto era distinto al de las mujeres con nivel
educativo más bajo. En este caso, por lo tanto, vemos que, cuando nos referimos a diferencias, estamos
diciendo que existe una desigualdad.

Las condiciones son el conjunto de situaciones o circunstancias que caracterizan el contexto en el que nos
encontramos, y que afectan nuestro bienestar.
La equidad hace referencia a la posibilidad efectiva que tienen las personas de satisfacer sus necesidades e
intereses. Alcanzar el máximo nivel de desarrollo posible de acuerdo a sus potencialidades y las condiciones
del contexto sin que dicha posibilidad se vea limitada en función de su posición social.

Todas las personas nos ubicamos en un lugar en la sociedad en la que vivimos. Ese lugar, usualmente, se
conoce como la posición social e indica las condiciones que tenemos con respecto a otros miembros de la
sociedad. Es decir, las oportunidades que se nos ofrecen, los recursos y servicios a los cuales accedemos, y
el prestigio o la valoración social que tenemos. Estas condiciones, asociadas a la posición social, influencian,
entre otros, el bienestar físico, psicológico, y social.

Posición social, lugar que ocupa una persona en la sociedad en la que vive de acuerdo a unas características
que son valoradas socialmente.

Este concepto es muy útil porque nos permite reconocer en la vida cotidiana las condiciones de inequidad que
se presentan en el medio en el que vivimos.

Para el personal de salud, educación y de las ciencias sociales, este concepto también le facilita el análisis de
las situaciones que afectan el bienestar de las personas, grupos y poblaciones. Por eso es importante conocer
cuáles son las características. Características de la posición social.

Primero, la posición social es multidimensional, es decir, la posición social de una persona no se establece a
partir de un solo criterio. Entre los criterios o aspectos que pueden ser usados para establecer el lugar de una
persona en la sociedad están la raza, la etnia, la orientación sexual, el nivel educativo, la religión, el lugar de
origen, su ocupación, etc. Además, la posición social es dinámica, se modifica de acuerdo al lugar físico
donde nos encontramos en un momento dado. Por ejemplo, nuestra posición social puede ser una cuando
estamos en la casa y modificarse inmediatamente al salir a la calle. La posición social también puede cambiar
en el tiempo.

Segundo, la posición social es el producto de los procesos de estratificación social que se dan en la sociedad,
es decir, no es algo natural. Cada sociedad en un momento y lugar dado establecen una serie de acuerdos
frente a qué aspectos o características las personas se les concede mayor valor y a cuáles no. ¿A quiénes se
les concede mayor acceso al poder y a quiénes no? ¿Qué tipo de personas tienen mayor prestigio y cuáles
no? Esas decisiones ponen a las personas en diferentes lugares de la es...

¿en qué circunstancias consideras que una desigualdad puede ser considerada una inequidad en el
contexto social en el que vives?

Posición social e inequidad

Diversos estudios han permitido establecer que la posición que ocupa una persona en la escala social
influencia.

1, los recursos a los que puede acceder.

2, las condiciones a las que está expuesto a lo largo de su vida.

3, las oportunidades a las que puede acceder y aprovechar.

4, su grado de vulnerabilidad a diversas situaciones y factores. Y,


5, las consecuencias de los eventos que afectan su salud.

dada la posición social que una persona ocupa en la sociedad, va a tener más o menos recursos que puede
usar para su bienestar. Puede estar más o menos expuesta a lo que en el campo de la salud se conoce como
factores protectores y de riesgo. Y, además, cuando esta persona se enferma, va a tener más o menos
consecuencias derivadas de esta condición, y más o menos posibilidades de mejorar o recuperar las
condiciones de salud que tenía previamente.

Un factor protector es aquel que maximiza o hace más óptima la condición de salud de una persona, al tiempo
que evita o minimiza la aparición de un evento o condición negativa para su salud. Un factor de riesgo es
aquel que incrementa la posibilidad de que se presente un evento o condición negativa para su salud.

Pensemos en dos personas, una con bajo nivel educativo y otra con alto nivel educativo. Hay suficiente
evidencia de investigación que indica que las personas que tienen diferente nivel educativo también tienen
distinta posición social en la escala social. Además, se sabe que las personas, según su nivel educativo,
tienen distintos recursos para tomar decisiones, establecer relaciones en su red social, y hacer reflexiones
críticas sobre el comportamiento y las condiciones del medio que afectan su bienestar

También se ha encontrado que las diferencias en el nivel educativo se relacionan con el tipo de ocupación que
desempeñan las personas. Por lo tanto, es más probable que quien tiene mayor nivel educativo cuente con un
empleo donde no solamente tiene mayor autonomía, sino en el que además está expuesta a menos riesgos
ocupacionales.

Pero, incluso, vamos a suponer que las dos personas trabajan en una mina de carbón, es decir, están
expuestas al mismo tipo y nivel de riesgo laboral. Es posible que la persona con nivel educativo más alto
tenga más oportunidades para contrarrestar los efectos de ese oficio.

Por ejemplo, para la persona con mayor nivel educativo puede ser más fácil comprender la normatividad sobre
salud ocupacional, y esto le facilita que esté más dispuesta a cumplir la recomendación sobre medidas de
precaución para evitar los riesgos laborales que implica su oficio.

Este caso sintetiza los hallazgos de varias investigaciones sobre las ventajas que tienen las personas que han
contado con oportunidades para alcanzar niveles educativos más altos. Esos estudios revelan que las
personas con menor nivel educativo están en desventaja en diferentes aspectos y tienen más probabilidades
de enfrentar desventajas adicionales a lo largo de su vida que repercuten en su bienestar.

Diferenciando las desigualdades de las inequidades

La desigualdad, por lo tanto, hace referencia a las diferencias que observamos que se presentan entre dos o
más personas o grupos. La inequidad, por su parte, se refiere a las diferencias que siempre se observan entre
dos o más personas o grupos, que son innecesarias, evitables e injustas

¿Recuerdas la desigualdad que comentamos en el video dos, en donde las mujeres pueden morir por cáncer
de cuello uterino, mientras que los hombres pueden morir por cáncer de próstata? Para este caso, en donde
la diferencia se da entre las causas de muerte por localizaciones de cáncer entre hombres y mujeres, tampoco
habría una inequidad. Solamente existe una desigualdad.

Esas diferencias están dadas por características biológicas, propias de cada sexo. Es decir, son inevitables.
En cambio, para las diferencias encontradas en la realización de la citología entre mujeres de alto y bajo nivel
educativo que comentamos en el primer video. Esta desigualdad sí puede ser considerada una inequidad,
porque las diferencias en el nivel educativo son innecesarias, evitables y son injustas.

Como señalamos en el video anterior, las diferencias en el nivel educativo no solo determinan diferencias en
la posición social de las personas, también se relacionan con otras diferencias innecesarias, injustas, y
evitables. Por ejemplo, las investigaciones muestran que las mujeres con menor nivel educativo tienen menos
conocimientos sobre el funcionamiento de los órganos sexuales y sobre practicas de autocuidado, como la
citología.

Lo que hemos hablado hasta aquí revela que la posición social determina las condiciones de equidad o
inequidad que disfrutamos cuando nos comparamos con otros miembros de la sociedad. Esas condiciones
asociadas a la posición social influencian nuestro bienestar físico, psicológico y social.

Las inequidades que se derivan de la posición social, además tienen un efecto negativo en la sociedad. Las
personas que las experimentan tienen menos recursos, habilidades y oportunidades para participar
activamente en el desarrollo social y económico del país.

La posición social se define a partir de categorías, tales como el género, la orientación sexual, la identidad
étnica, la raza, la afiliación religiosa, el nivel educativo o el nivel socioeconómico.

Con base en esas categorías, con frecuencia se nos ofrece un trato inequitativo. Es decir, se nos facilita o se
nos obstaculiza el acceso a las mismas oportunidades, servicios, recursos, beneficios o condiciones que
tienen los grupos mayoritarios. Ese trato inequitativo, que se fundamente en nuestra posición social, es lo que
caracteriza las diversas formas de discriminación que observamos en nuestras sociedades.

Reconocer las inequidades que se presentan en el medio en el que vivimos es importante porque nos permite
entender el lugar que ocupamos en la sociedad por diversas categorías socialmente valoradas. La relación
entre esa posición social y las condiciones que se nos ofrecen para disfrutar de bienestar a lo largo de nuestra
vida.

Es importante que reconozcamos las inequidades porque, como hemos visto, son evitables y, por lo tanto, se
pueden transformar.

Es importante reconocer que las inequidades producen sufrimiento entre las personas. Limitan su potencial y
obstaculizan el desarrollo de la sociedad

Alta seguridad a mediana

Solicitaron 72-

Meganbantil

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