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DERECHOS HUMANOS

La equidad.
1, permite a las personas a alcanzar su desarrollo integral y disfrutar de bienestar.
2, ofrece oportunidades para aprovechar potencialidades personales.
3, requiere que las posibilidades no se vean limitadas por las condiciones del contexto y la posición social de las
personas.

CONCEPTO DE DERECHOS HUMANOS


En la actualidad el término derechos es frecuentemente utilizado en diversos contextos. En Colombia, hasta las niñas y
los niños los conocen. Sin embargo, en nuestro entorno hablar de derechos no siempre es interpretado de una manera
positiva.
Algunas personas perciben que son una amenaza para la posición privilegiada que ostentan y otras creen que trabajar
en la defensa de los derechos de los grupos más desafortunados puede ser peligroso.
En la investigación que realizamos con nuestras colegas españolas encontramos que las opiniones a favor o en contra
de trabajar en asuntos de derechos humanos estaban relacionadas con el conocimiento que tienen las personas sobre
este tema. Por eso, en este curso consideramos importante comenzar por aclarar qué son los derechos humanos.
La Declaración de los Derechos Humanos tal y como la conocemos hoy fue definida por consenso entre los países
miembros de las Naciones Unidas después de la Segunda Guerra Mundial. Esa declaración consisten en una lista de 30
condiciones que hoy se reconocen como esenciales y fundamentales para todo ser humano, sin distinción de ningún tipo,
para que cada persona logre el más alto nivel de bienestar posible.
El bienestar es una valoración subjetiva que cada quien realiza acerca de qué tan bien está en un momento particular,
dadas las circunstancias en las que se encuentran. Esa valoración, en tanto es subjetiva, es muy relativa.
¿Cómo podemos saber si las condiciones que nos ofrece el medio en el que vivimos son las que nos merecemos? ¿De
qué manera podemos establecer qué condiciones se merecen las personas con las que nos relacionamos a diario?
Los derechos humanos son los estándares mínimos que merece cualquier ser humano para vivir dignamente. Estos
estándares mínimos han sido reconocidos por los países miembros de las Naciones Unidas, y constituyen criterios
universales para determinar las condiciones básicas que los estados deben garantizarle a sus ciudadanos para
asegurarles el bienestar que se merecen.
Para comprender mejor este planteamiento conviene definir tres conceptos clave, estándares, estado y ciudadanos.
1. Los estándares constituyen criterios claros y explícitos que sirven de punto de referencia para valorar algo, en este
caso, las condiciones de vida de las personas.
2. Un estado está conformado por el territorio, las instituciones políticas, la normatividad que regula la manera como se
organiza la sociedad, al igual que por la población del país.
3. ciudadano alude a toda persona que se reconoce como miembro activo de un estado. Como ciudadanos tenemos
unos derechos y, a su vez, unas responsabilidades que tienen que ver con el cumplimiento de la normatividad vigente y
el respeto de los derechos de los demás.
UNA BREVE HISTORIA DE LOS DERECHOS HUMANOS
Las Naciones Unidas (1945)
Cincuenta naciones se reunieron en San Francisco en 1945 y fundaron la Organización de las Naciones Unidas para
proteger y promocionar la paz.
La Segunda Guerra Mundial se había librado violentamente de 1939 a 1945, y al aproximarse el fin, las ciudades de toda
Europa y Asia yacían en ruinas humeantes. Millones de personas murieron, millones más quedaron sin hogar o morían
de hambre. Las fuerzas rusas se acercaban, rodeando los restos de la resistencia alemana en la bombardeada capital de
Alemania, Berlín. En el Pacífico, los infantes de Marina de Estados Unidos todavía estaban luchando con las fuerzas
japonesas atrincheradas en islas como Okinawa.
En abril de 1945, delegados de cincuenta naciones se reunieron en San Francisco, llenos de optimismo y esperanza. La
meta de la Conferencia de las Naciones Unidas sobre Organización Internacional era crear un organismo internacional
para promover la paz y evitar guerras futuras. Los ideales de la organización se establecieron en el preámbulo al Acta
Constitutiva que propusieron: “Nosotros, la gente de las Naciones Unidas, estamos decididos a proteger a las
generaciones venideras del azote de la guerra, la cual dos veces en nuestra vida ha producido un sufrimiento
incalculable a la humanidad”.
El Acta Constitutiva de la nueva organización de las Naciones Unidas entró en vigencia el 24 de octubre de 1945, fecha
que se celebra cada año como Día de las Naciones Unidas.
La Declaración Universal de los Derechos Humanos (1948)
La Declaración Universal de los Derechos Humanos ha inspirado a muchas otras leyes sobre los derechos humanos y a
tratados por todo el mundo.
Para 1948, la nueva Comisión de Derechos Humanos de las Naciones Unidas se había apoderado de la atención del
mundo. Bajo la presidencia dinámica de Eleanor Roosevelt (viuda del presidente Franklin Roosevelt, defensora de los
derechos humanos por derecho propio y delegada de Estados Unidos ante la ONU), la Comisión se dispuso a redactar el
documento que se convirtió en la Declaración Universal de los Derechos Humanos. Roosevelt, a quien se atribuyó la
inspiración del documento, se refirió a la Declaración como la Carta Magna internacional para toda la humanidad. Fue
adoptada por las Naciones Unidas el 10 de diciembre de 1948.
En su preámbulo y en el Artículo 1, la Declaración proclama, sin lugar a equivocaciones, los derechos inherentes a todos
los seres humanos: “La ignorancia y el desprecio de los derechos humanos han resultado en actos de barbarie
ultrajantes para la conciencia de la humanidad, y la llegada de un mundo donde los seres humanos gocen de libertad de
expresión y creencia y sean libres del miedo y la miseria se ha proclamado como la más alta aspiración de la gente
común... Todos los seres humanos nacen libres e iguales en dignidad y derechos”.
Los países miembros de las Naciones Unidas se comprometieron a trabajar juntos para promover los 30 Artículos de los
derechos humanos que, por primera vez en la historia, se habían reunido y sistematizado en un solo documento. En
consecuencia, muchos de estos derechos, en diferentes formas, en la actualidad son parte de las leyes constitucionales
de las naciones democráticas.

https://www.unidosporlosderechoshumanos.mx/what-are-human-rights/brief-history/the-united-nations.html

CARACTERISTICAS DE LOS DERECHOS HUMANOS


En la Declaración de los derechos humanos se afirma que estos se caracterizan por ser, Universales, inalienables,
indivisibles, interdependientes.
 Son universales porque son garantías que se merecen todas las personas por el solo hecho de ser seres
humanos desde el nacimiento hasta la muerte y en cualquier lugar del mundo.
 Son inalienables, es decir, nadie puede ser despojado de ellos y tampoco podemos transferir nuestros derechos
a otras personas.
 Son indivisibles, porque ningún derecho es más importante que otro, por lo tanto no es posible dividirlos en
categorías que establezcan una jerarquía de ellos. No podemos decir cuáles priorizamos sobre otros, tampoco
podemos decir que vamos a disfrutar un derecho a costa de otro.
 Son interdependientes, en el sentido en que en muchas ocasiones la realización del derecho depende de la
realización simultánea de otros derechos. Por ejemplo, la realización del derecho a la salud depende también
que se garantice el derecho al trabajo, a tener unos ingresos suficientes, el derecho a la alimentación, al vestido,
a la vivienda.
 La interdependencia también significa que los derechos están relacionados y, por lo tanto, cuando se vulnera un
derecho se están vulnerando otros derechos. En muchos contextos se alega que esas características no son
absolutas y que se debe tener en cuenta el contexto cultural, aunque hoy se sigue debatiendo al respecto y este
suele ser uno de los argumentos de muchos sectores que se resisten a cambiar el statu quo.

Si tenemos en cuenta que los derechos humanos definen los estándares mínimos que merecemos las personas para
vivir una vida digna, estos no son relativos. Todos los estados deben velar por su realización efectiva aunque en el
proceso para lograrlo sea un proceso largo.

TIPOS DE DERECHOS HUMANOS

Existen diversas formas de clasificar los derechos humanos. La forma más conocida de clasificar los derechos es la
que describe su evolución histórica, es decir, el orden temporal en el que se han ido reconociendo diversos asuntos
de la vida humana en los diferentes tratados y documentos en las naciones unidas.
Los derechos humanos de primera generación son básicamente civiles y políticos, tratan de la libertad para participar
en la vida política, exigen del estado su cumplimiento y sirven para proteger al individuo de abusos por parte de las
autoridades estatales.
Los derechos humanos de segunda generación están relacionados con la igualdad. Son fundamentalmente
económicos, sociales y culturales, y aseguran a la ciudadanía que merece las misma condiciones y el mismo trato.
Esos derechos protegen el rol social de las personas. Los derechos de tercera generación por su parte, nacieron
para impedir que se repitieran en el futuro los horribles sucesos que se vivieron en la Segunda Guerra Mundial.
El objetivo es buscar, la unidad, el respeto, la colaboración mutua entre las naciones con el fin de alcanzar altos
niveles de bienestar. Esto derechos protegen a la nación, y a sus ciudadanas y ciudadanos como colectividad.
Reclaman el derecho de los pueblos a la autodeterminación, al disfrute de un medio ambiente sano y la paz nacional
e internacional. En la lectura de apoyo que encuentras a continuación te presentamos una tabla resumen de los
principales derechos incluidos en cada generación.

MECANISMOS PARA ASEGURAR QUE DISFRUTEMOS DE LO QUE NOS MERECEMOS


En el marco de derechos humanos, el Estado es el principal encargado de asegurar que las ciudadanas y los ciudadanos
disfrutemos de lo que nos merecemos para el desarrollo integral.
Para asegurar que todas las personas gozamos de esas libertades mínimas, el Estado debe cumplir con tres tipos de
obligaciones, respetar, proteger y promover.
- La obligación de respetar los derechos humanos significa que el estado debe abstenerse de obstaculizar su
disfrute. Por ejemplo, los estados deben de abstenerse de admitir normas o leyes para restringir el derecho a la
información o a la libertad de expresión. Tampoco pueden perseguir y reprimir a las personas que tratar de hacer
valer sus derechos.
- La obligación de proteger significa que el estado debe adoptar medidas para impedir que otros vulneren los
derechos humanos. Por ejemplo, los estados deben proteger el acceso a la educación de niñas y niños y
adolescentes. Para ello deben garantizar que madres, padres y cuidadores les faciliten acudir al colegio.
Además, deben asegurarse de no obstaculizar las oportunidades y el acceso a la educación.
- La obligación de promover los derechos humanos significa adoptar medidas para facilitar a la población la
realización y el disfrute efectivo de sus derechos. Esta obligación incluye proveer los medios necesarios para la
realización del derecho, fomentando la capacidad de las personas para satisfacer por sí mismas sus intereses y
aspiraciones. Por ejemplo, para realización del derecho a la salud o a la educación, el estado debe poner a
disposición de la población los mecanismos necesarios para prestar dichos servicios. Esto puede hacerse
directamente a través de instituciones estatales o indirectamente en la generación de condiciones jurídicas para
que el sector car pueda compensar las características de la oferta pública de servicios educativos o de salud a
toda la población.
De lo expuesto hasta aquí podemos concluir que el estado es quien tiene la obligación de garantizar las condiciones
mínimas esenciales. Todo ser humano requiere para disfrutar de bienestar. Sin embargo, en algunos contextos
garantizar esas condiciones mínimas no pueden lograrse de manera inmediata, se requiere de tiempo. Esos casos los
estados deben demostrar que están utilizando el máximo de sus recursos disponibles para mejorar la situación y que
toda la población disfrute de esos derechos.
Por ejemplo, en Colombia la gran encuesta integrada de hogares mostró que en el 2008, más de la mitad de los hogares
en pobreza extrema, no contaban con una vivienda propia. Mientras que esta situación solo se presenta en el 16% de la
población de mayores niveles de riqueza. Si tienes en cuenta lo que conversaste con Diego, esa diferencia es una
muestra clara de la inequidad que hay en nuestro país.
Para cerrar esa brecha el estado colombiano definió una política para facilitar a la población más pobre acceso a la
vivienda propia. Aún falta mucho por alcanzar, pero se están haciendo esfuerzos importantes en ese sentido. De esta
manera el estado puede demostrar a la comunidad de Naciones Unidas que está cumpliendo con su obligación de
trabajar por la realización progresiva del derecho a una vivienda.

Tú y yo también participamos en la realización de los derechos

El Estado no es el único implicado en la realización de los derechos. Para lograr que todas las personas contemos con
las condiciones mínimas que merecemos para disfrutar de bienestar, es necesario involucrar al conjunto de la población
civil y a los sectores sociales, como los medios de comunicación, los grupos religiosos, los empresarios, las
organizaciones no gubernamentales, entre otros.
Todas estas instancias sociales contribuimos participando en la vida política con el fin de incidir directamente, tanto en la
toma de decisiones que nos afectan, como en la ejecución y control de la gestión estatal en sus diversos niveles de
gobierno. Asimismo, todos los ciudadanos tenemos la responsabilidad de respetar los derechos de otras personas en
cada una de nuestras actividades diarias, con el fin de contribuir a su bienestar.
 Los derechos no son un listado de asuntos que solo reclamamos en casos extremos ante las instancias
gubernamentales, sino que son las condiciones mínimas que merecemos que se nos garanticen para disfrutar el nivel
más alto de bienestar posible. En este momento te invito a reflexionar en torno a las siguientes preguntas.

¿COMO OBSERVAMOS A TRAVÉS DEL LENTE DE LOS DERECHOS HUMANOS?


EL ENTORNO VISTO CON EL LENTE DE LOS DERECHOS HUMANOS

Te cuento que nosotras llevamos muchos años trabajando con grupos de personas de diferentes edades, niveles
educativos y lugares de residencia. Y la mayoría de las veces encontramos que a las personas les cuesta reconocer los
derechos en situaciones de la vida cotidiana. Esa experiencia nos muestra que al menos en nuestro país los derechos
humanos siguen siendo ideales, que están plasmados en un abundante cuerpo normativo, pero que pocas veces los
usamos como guía en las decisiones cotidianas que tomamos.

El concepto de enfoque basado en los derechos humanos

En la lección anterior dijimos que los derechos humanos son, Las condiciones mínimas que todo ser humano merece que
se le reconozcan para su desarrollo integral y para disfrutar del más alto nivel posible de bienestar. También dijimos que
los derechos humanos han sido reconocidos por los países miembros de las Naciones Unidas Como estándares o
criterios universales para determinar si los estados cumplen con la obligación de garantizar a sus ciudadanos las
condiciones mínimas para el bienestar que se merecen.

Los derechos humanos, por lo tanto, son un referente para establecer las condiciones del entorno, que influyen positiva o
negativamente, en el bienestar de las personas.

El enfoque hace referencia a aquello en lo que tú centras la atención cuando lideras procesos de intervención o acciones
concretas

En el campo de las intervenciones para promover el bienestar de las personas, el enfoque se identifica por:

1, los principios que fundamentan las decisiones.

2, las personas que vinculamos a los procesos.

3, las metas que nos proponemos.

4, los criterios que usamos para valorar lo que hacemos.

Con base en la definición de los derechos humanos y la de enfoque, podemos decir que en el ámbito de la investigación
y la intervención social, el enfoque basado en los derechos humanos nos invita a centrar la atención en las condiciones
que se ofrecen a las personas. Para asegurar que cumplen con los estándares mínimos que todos los seres humanos
merecemos para lograr nuestro desarrollo integral, y disfrutar del bienestar.

Es como si permanentemente estuvieras viendo la realidad a través del lente de una cámara, que permite acercase a
esas situaciones que afectan el bienestar y además captar los detalles de todo lo que está pasando. Esos detalles son
las condiciones del entorno que favorecen u obstaculizan a las personas vivir una vida diga, la vida que se merecen por
ser seres humanos.

Así mismo, cuando nos comprometemos con la promoción del bienestar, el enfoque basado en los derechos humanos
nos indica cómo debemos actuar.

Nos indica que nuestros esfuerzos debemos dirigirlos hacia la generación de las condiciones que garantizan a las
personas la realización de sus derechos.
Es importante señalar que el consenso de los países miembros de las Naciones Unidas de usar los derechos humanos
como referente para valorar las condiciones de vida de las personas, y para definir lo que se debe hacer para
transformarlas o mejorarlas, surgió del reconocimiento de la evidencia científica que nos mencionaba Diego sobre la
relación entre inequidad y bienestar.

Es decir, los resultados de diversos estudios hicieron que los países miembros de las Naciones Unidas identificar que el
bienestar de la población estaba determinado por las inequidades que se presentaban en sus territorios como resultado
de múltiples acciones y omisiones que obstaculizan el disfrute de los derechos humanos.

Con base en esa evidencia, los países acordaron en usar los derechos humanos por una parte con marco normativo, es
decir como normas, estándares y criterios de obligatorio cumplimiento por parte de los estados. Por otro lado, decidieron
también usar los derechos humanos como marco metodológico, es decir, como guía para decidir qué acciones llevar a
cabo y cómo llevarlas a cabo para promover el bienestar de la población.

Concretamente, podemos decir que el enfoque de derechos es:

1, un marco normativo que define los estándares mínimos que se deben considerar al valorar las condiciones de vida de
las personas. 2, un marco metodológico que establece hacia dónde se deben dirigir los esfuerzos, es decir, de qué
manera se deben garantizar las condiciones mínimas que las personas merecen y con qué criterios se pueden evaluar
las condiciones que se llevan a cabo para promover el bienestar.

Características del enfoque basado en los derechos humanos

Los aspectos que definen las características del enfoque basado en los derechos humanos son:
1, los principios que fundamentan las decisiones y acciones.
2, los agentes sociales implicados.
3, las metas que persiguen.
4, los criterios para valorar situaciones y acciones
Nos referiremos a las características que se refieren a los tres primeros aspectos.
- Los principios son las ideas clave que orientan las decisiones y acciones. En el enfoque basado en los
derechos humanos, las decisiones se fundamentan precisamente en los estándares mínimos que definen los
derechos humanos.
En el año 2003 el Programa de Naciones Unidas para el desarrollo acordó los principios orientadores de las
políticas, planes, programas, proyectos en los diversos sectores, los cuales se fundamentan en los derechos
humanos. Además, definió que esos mismos principios deben tenerse en cuenta en la práctica, es decir, en todas
las fases de los procesos de planificación, implementación y evaluación de las acciones que se lleven a cabo.
Los principios de este enfoque incluyen ante todo las características de los derechos humanos que definimos en la
lección anterior de, Universalidad, inalienabilidad, indivisibilidad e interdependencia. Estos principios son características
inherentes a los derechos humanos
Las otras ideas clave que nos plantea este enfoque definen las condiciones que deben fomentarse cuando actuamos con
base en los derechos humanos. Esas condiciones hacen referencia a la igualdad y no discriminación, participación e
inclusión, e, responsabilidad, trasparencia o rendición de cuentas.

+Igualdad y no discriminación. Cuando trabajamos desde el enfoque basado en los derechos humanos, debemos
asegurarnos de que cumplimos con el derecho fundamental a la igualdad y a la no discriminación. Esta es una idea
básica para desarrollar acciones. Si estas no promueven el derecho a la igualdad, no estamos trabajando con el enfoque
basado en los derechos humanos.
este derecho reconoce que todas las personas, desde que nacemos, merecemos que se nos brinden las condiciones
mínimas para el desarrollo integral. Por lo tanto, desde el enfoque basado en los derechos humanos, se espera que
todas las acciones se orienten a logar que todas las personas reciban el mismo trato. Sin ninguna distinción por motivos
de sexo, orígenes étnico racial, edad, orientación sexual, idioma, religión, opinión política, origen nacional o social,
condiciones de discapacidad
+
Participación e inclusión. Este principio reconoce la relevancia que tiene fomentar la participación de todas las
personas y todos los pueblos en las decisiones que les conciernen. Trabajar desde un enfoque basado en los derechos
humanos implica emprender acciones para integrar a los grupos que tradicionalmente han sido excluidos y marginados
de los procesos políticos y de planificación.
Con frecuencia la marginación y la exclusión están determinadas por la posición social que se atribuye a las personas en
el medio en el que viven. En los países de América Latina y el Caribe, por ejemplo, los grupos tradicionalmente
marginados suelen ser niñas, niños y adolescentes, las mujeres, las personas lesbianas, gays, bisexuales, transexuales.
Las comunidades afro o indígenas, las personas con diversidades funcionales. Es importante resaltar que el principio que
recoge el derecho a la participación depende profundamente de la realización de los otros derechos humanos. Por
ejemplo, si se quiere que las niñas, los niños y adolescentes participen activamente en las estrategias para reducir las
inequidades que les afectan, deben tener la libertad de organizarse sin restricciones.
De reunirse sin obstáculos, de decidir lo que quieren sin intimidaciones y deben conocer los hechos que les interesan y
que les afectan.
+Empoderamiento. El enfoque basado en los derechos humanos reconoce que las y los ciudadanos Se les debe ofrecer
oportunidades para decidir sobre su vida de manera autónoma y para definir su propio destino. Para ejercer el derecho a
decidir de manera autónoma, las personas requieren que se les fomente el empoderamiento.
El empoderamiento es el proceso a través del cual las personas, los grupos y las comunidades ganan control sobre sus
propias vidas y su entorno. En el marco de los derechos humanos, el empoderamiento fomenta las capacidades de las
personas, los grupos y las comunidades para.
A, reconocer y analizar críticamente las situaciones inequitativas que viven en el entorno.
B, determinar las condiciones del entorno que obstaculizan la realización efectiva de los derechos humanos.
C, liderar acciones que contribuyem a cambiar esas condiciones del entorno con el fin de contribuir a mejorar su
bienestar.
+Trasparencia o rendición de cuentas.El enfoque basado en los derechos humanos busca que se definan políticas,
planes, programas y proyectos de tal manera que sea totalmente transparente, donde todos los ciudadanos podamos
conocer y participar en cómo se gestionan tanto las iniciativas como los recursos. Para tal fin, el enfoque basado en los
derechos humanos exige la incorporación de mecanismos de monitoreo, evaluación y rendición de cuentas de los
resultados obtenidos en esas acciones que se llevan a cabo para promover el bienestar
Además, este principio plantea que una de las obligaciones de los estados consiste en la definición de mecanismos de
exigibilidad que puedan ser usados por los ciudadanos en caso en que sus derechos sean vulnerados. Reclamar por
medio de diferentes mecanismos legales el reconocimiento y la garantía de las condiciones de vida fundamentales. La
exigibilidad es una de las principales características que distinguen el enfoque basado en derechos, de otras
aproximaciones, como lo veremos más adelante.

Características relacionadas con los agentes sociales implicados y las metas que se persiguen

El enfoque basado en los derechos humanos reconoce que todas las personas, por el hecho de formar parte de la
sociedad, compartimos la responsabilidad de promover y reconocer los derechos humanos. Es decir, desde este
enfoque, tú, yo, todas las personas estamos implicadas en la generación de las condiciones mínimas y cotidianas que
favorecen el desarrollo integral y promueven el bienestar propio y de los demás.

Las personas cumplimos diferentes roles en la realización efectiva de los derechos humanos.

Los roles que podemos desempeñar en la realización de los derechos humanos son de tres tipos: Titular de derechos,
titular de responsabilidades, titular de obligaciones.

- Los titulares de derechos somos todas las personas, sin distinción por sexo, edad, orientación sexual, origen
étnico, filiación religiosa, estatus civil o económico o cualquier otra condición.
- Los titulares de responsabilidades también somos todas las personas y organizaciones que, como miembros
de una sociedad, podemos incidir en el ejercicio de los derechos de otras personas.
Los titulares de responsabilidades incluyen los amigos, la pareja, la familia, líderes religiosos, líderes
comunitarios, las empresas, el sector privado, organizaciones sociales y cualquier otro agente social que tiene
algún tipo de compromiso con respecto a algún titular de derechos y, por lo tanto, debe asegurarse de que
disfruta de las condiciones que se merece.
- Los titulares de obligaciones, por su parte, incluyen todas las instituciones del Estado y sus representantes,
que jurídicamente están obligadas al cumplimiento y la realización de los derechos humanos. Incluyen a todas
las personas que trabajan en instituciones del Estado y todas las que presten un servicio público.

Al identificar los roles de cada una de las partes implicadas en la garantía de los derechos, el enfoque basado en los
derechos humanos destaca la responsabilidad compartida. Para cumplir con la función que cada quien le corresponde,
según su rol, es necesario que, a lo largo de la vida, las personas cuenten con oportunidades para adquirir los
conocimientos, las actitudes y las habilidades que requieren para participar en la sociedad en pro del bienestar de la
siguiente manera.

- Los titulares de derechos, para que puedan reconocer y actuar en favor de sus propios derechos.
- Los titulares de obligaciones, para que, como su nombre lo indica, puedan cumplir con su obligación de
garantizar y hacer respetar los derechos humanos.
- Y los titulares de responsabilidades, para que reconozcan los derechos de los demás y actúen en coherencia.

Cuando cada uno de esos actores cumple su papel, se pueden disfrutar, ejercer y vivir los derechos humanos en las
interacciones cotidianas. Los derechos humanos se materializan en las acciones de la vida diaria, y no porque estén
escritos en el papel.

En cuanto a las características relacionadas con las metas que se persiguen, el enfoque basado en los derechos
humanos nos plantea que, para fomentar el desarrollo integral y promover el bienestar, todas nuestras acciones deben
dirigirse a la generación de las condiciones básicas que todo ser humano merece.
Por lo tanto, desde el enfoque basado en los derechos humanos, las metas de las políticas, planes, programas y
proyectos es garantizar que todas las personas, sin excepción, gozan de las condiciones esenciales para su desarrollo
integral y su bienestar.
Por lo tanto, desde el enfoque basado en los derechos humanos, las metas de las políticas, planes, programas y
proyectos es garantizar que todas las personas, sin excepción, gozan de las condiciones esenciales para su desarrollo
integral y su bienestar.

COMO EVALUO MI ENTORNO CON EL LENTE DE LOS DERECHOS HUMANOS

la cuarta característica del enfoque basado en derechos humanos. La que tiene que ver con los criterios que nos
permiten analizar críticamente el entorno y valorar las condiciones que nos ofrece para disfrutar de bienestar. En
mi opinión, estos criterios constituyen uno de los aportes más importantes del enfoque basado en derechos humanos,
porque nos indican qué es lo que se debe hacer para garantizar un derecho.

¿Cómo promovemos el bienestar desde el enfoque basado en los derechos humanos?

De acuerdo con lo que dimos en la lección anterior, cuando buscamos promover el bienestar desde un enfoque basado
en los derechos humanos debemos, Tener en cuenta el marco normativo de los derechos humanos. Trabajar con
titulares de derechos, titulares de responsabilidades y titulares de obligaciones. Tener como meta la realización de uno o
varios derechos humanos.
Orientar las acciones al fortalecimiento de las capacidades de los titulares de derechos y de responsabilidades para que
puedan ejercer, respetar y exigir sus derechos. También implica apoyar a los titulares de obligaciones para que cumplan
con sus deberes.
Tal y como planteamos en el curso sobre diseño de proyectos para promover el bienestar, que ofrecemos a través de
esta plataforma de Coursera, cuando queremos contribuir al bienestar en el medio en el que vivimos o trabajamos lo
primero que debemos hacer es analizar el contexto. Desde el enfoque basado en los derechos humanos, este paso
supone:
- Examinar el entorno en el que vivimos para determinar las situaciones que afectan nuestro bienestar y el de las
otras personas con las cuales interactuamos.
- Determinar las condiciones del entorno que nos facilita u obstaculiza el disfrute de los derechos humanos.
- Identificar si existen situaciones de inequidad, contrastando lo que observamos en el medio en el que vivimos,
con lo que se observa en otros grupos de población o regiones. De esta manera podemos determinar si la
situación que afecta nuestro bienestar difiere de lo que ocurre en otros grupos.
- Coherentemente con los principios del enfoque basado en los derechos humanos, en este proceso de análisis
del contexto debemos identificar todas las personas que están involucradas en la transformación de la situación
en pro del bienestar. Titulares de derechos, titulares de responsabilidades y titulares de obligaciones, y
motivarlas a participar activamente. El análisis del entorno también incluye conocer los tratatos internacionales de
derechos humanos que ha ratificado el país.
- Y examinar si la legislación nacional recoge esos compromisos, en particular aquellos relacionados con el
derecho o la población con la que se está trabajando. Por ejemplo, los derechos que se refieren a las niñas y a
los niños, el derecho a la salud, a la vivienda, al agua potable, a la igualdad entre hombres y mujeres. A los
derechos de las poblaciones afro e indígenas, a la población con capacidades diversas, entre otros.

Otro paso muy importante en este proceso análisis consiste en examinar las oportunidades que tienen la población
para ejercer o disfrutar sus derechos.
Para analizar las oportunidades que ofrece el contexto para disfrutar de un determinado derecho, el enfoque
basado en los derechos humanos establece cuatro criterios. 1, disponibilidad. 2, accesibilidad. 3, aceptabilidad.
4, calidad.

1. La disponibilidad se refiere a la oferta existente de oportunidades, infraestructura, establecimientos, programas,


proyectos, bienes, servicios, recursos humanos, materiales, tecnológicos y financieros para el 
cumplimiento del derecho que nos interesa analizar.
Para valorar la disponibilidad, por lo tanto, tenemos que hacernos diversas preguntas que permiten determinar la
variedad y cantidad de oportunidades y recursos que existen en un contexto particular para garantizar ese
derecho.
La disponibilidad se refiere a la oferta existente de oportunidades, infraestructura, establecimientos, programas,
proyectos, bienes, servicios, recursos humanos, materiales, tecnológicos y financieros para el cumplimiento del derecho
que nos interesa analizar.
Para valorar la disponibilidad, por lo tanto, tenemos que hacernos diversas preguntas que permiten determinar la
variedad y cantidad de oportunidades y recursos que existen en un contexto particular para garantizar ese derecho.
Vamos a suponer que nos encontramos en una zona desértica, como la Guajira en Colombia, y que estamos analizando
el derecho al agua. 
Entre las preguntas que debemos plantearnos para determinar si se cumple el criterio de disponibilidad, están las
siguientes: ¿En este contexto existe alguna norma, ley, plan, política, programa relacionado con garantizar el derecho al
agua? ¿Qué oportunidades se ofrece a la población para conseguir agua?
¿Cuenta el territorio con algún establecimiento que provea de agua potable a los hogares? 
¿Qué proporción del presupuesto asigna el Estado a los programas que se encargan de garantizar el derecho al agua de
esa población?

Este conjunto de preguntas giran en torno a la existencia de las condiciones y recursos mínimos para garantizar el
derecho al agua. 

2. La accesibilidad hace referencia al grado en el que cualquier persona puede aprovechar la oferta existente de
oportunidades, infraestructura, establecimientos, programas, proyectos, bienes, servicios, recursos
humanos, materiales, tecnológicos y financieros para el disfrute de un derecho. 
En forma sintética, podemos decir que la accesibilidad indica qué tan al alcance de cualquier persona están esas
condiciones mínimas que se requieren para gozar de un derecho.

La accesibilidad se refiere a las posibilidades que tienen las personas de aprovechar la oferta existente de
oportunidades para el disfrute de un derecho.
De acuerdo con esta definición, la accesibilidad implica que las oportunidades que se ofrecen para disfrutar del
derecho estén libres de discriminación. Es decir, que no estén restringidas por la edad, el sexo, el género, la
orientación sexual, la identidad étnica, la actividad laboral, la situación socioeconómica, el estatus de salud, la
condición de discapacidad o cualquier otro motivo. 
También supone asegurar que las instituciones, organizaciones, establecimientos, recursos, servicios,
programas o proyectos que ofrecen oportunidades para el disfrute de los derechos, estén al alcance
geográfico de todos los sectores de la población, en especial de los grupos que, tradicionalmente, han estado en
una posición social desventajosa. Como las minorías étnicas o sexuales, las niñas, los niños, las mujeres, las
personas mayores, las personas con diversidad funcional o las personas que viven con VIH, por ejemplo. 
Así mismo, la accesibilidad exige que no existan barreras de acceso para que las personas, por ejemplo,
aquellas que no cuenten con recursos económicos para pagar la oferta disponible, puedan utilizarlo. Siguiendo
con nuestro ejemplo del derecho al agua, algunas preguntas que podemos 
plantearnos para valorar este derecho a partir del criterio de accesibilidad son:
- ¿En este contexto las personas tienen la posibilidad de disfrutar de agua potable de manera continua en el
hogar? 
- ¿Los servicios de agua y saneamiento son accesibles a todas las personas de manera continua, en el hogar, en
las instituciones educativas, en los centros de trabajo y en los lugares públicos?
- ¿La infraestructura para conseguir agua potable está ubicada en zonas geográficas seguras y de fácil acceso
para toda la población? 
- ¿Las entidades que proveen de agua potable facilitan que todas las personas, sin distinción de ninguna índole,
puedan acceder fácilmente al agua?
Si revisas las preguntas que acabamos de mencionar, te puedes dar cuenta que todas giran en torno a qué tan al
alcance están estos recursos y condiciones que les permiten a las personas disfrutar del derecho.

3. La aceptabilidad se refiere a la atención que se presta a las características demográficas y culturales


específicas de las personas, cuando se definen las oportunidades que ofrece el contexto para disfrutar de un
derecho determinado.
Las características demográficas incluyen la edad, el sexo, el estado conyugal, el nivel de ingresos, la ocupación
y el nivel educativo de las personas.
El concepto de culturalas características culturales incluyen tanto la historia, tradiciones y costumbres de un
grupo social, como el cumulo de experiencias, creencias, actitudes, expectativas, normas sociales, estándares de
conducta, intereses, aspiraciones, ideas, opiniones que regulan la manera como vemos e interpretamos el
mundo. La forma como expresamos nuestras emociones, la manera en como interactuamos con otras personas
y con el ambiente en el que vivimos.
La cultura es lo que nos permite darle sentido a las palabras, a los gestos, a las imágenes, a los símbolos, a los
comportamientos y a todo lo que ocurre en nuestro alrededor.
Contrariamente a lo que popularmente se cree, las personas no somos recipientes vacíos de la cultura.
Cada instante y en todas las interacciones sociales que establecemos cotidianamente creamos, aplicamos,
reproducimos, transformamos y transmitimos prácticas culturales como agentes sociales activos de la cultura.
Seguramente tú has notado que los seres humanos tendemos a ser muy similares en muchos aspectos, pero
también somos muy diferentes en muchos otros.
Asimismo ocurre con la cultura, si bien las personas que vivimos en una misma vecindad, ciudad, región o país
tenemos muchas cosas en común, hay muchas cosas que nos diferencian. Y esas particularidades son
relevantes cuando se trata de definir las oportunidades para la garantía de los derechos humanos.
La aceptabilidad se refiere al grado en el que las oportunidades que se ofrecen para la realización de un derecho se
ajustan a las características demográficas y culturales específicas de las personas.
En el caso del derecho al agua, por ejemplo, es esencial valorar las características demográficas y culturales de los
grupos y subgrupos de la población, y tenerlas en cuenta al decidir sobre los servicios, medios y recursos que se van a
poner a disposición de las personas para garantizarles el acceso al agua potable.
Desde el enfoque basado de los derechos humanos y teniendo en cuenta el criterio de aceptabilidad, las
personas interesadas en reducir la inequidad y promover el bienestar deben ser capaces de:
a, examinar su propio marco de referencia cultural, para establecer que los conocimientos, valores, creencias, opiniones,
actitudes, normas sociales, intereses, aspiraciones, expectativas, habilidades y limitaciones, pueden influir en sus
decisiones y en las relaciones que establecen con personas culturalmente diversas. Las relaciones que establecen con
personas culturalmente diversas.
b, reconocer y respetar las particularidades culturales de las personas con las que se interactúa para poder analizar las
situaciones desde su perspectiva, prestarles la atención que merecen y permitirles participar de manera efectiva en las
decisiones sobre los asuntos que les afectan.
Es importante señalar que esta tarea no es fácil, muchas veces no somos concientes de nuestra propia cultura y a veces
nos resulta más sencillo identificar las características de personas pertenecientes a grupos culturales diferentes al
nuestro. Además, en muchas ocasiones se nos dificulta reconocer que nuestras características culturales y las
diferencias que tenemos con otras personas influyen en la manera en la que nos relacionamos.

En ese sentido, al analizar las oportunidades que ofrece el contexto para disfrutar de un determinado derecho,
necesitamos establecer si se adecúa a las características demográficas y culturales de las personas, si satisfacen sus
intereses y expectativas, si les genera confianza. Una pregunta clave para este análisis es, Al definir la oferta de
oportunidades para la realización de los derechos, ¿se tuvieron en cuenta las características demográficas y culturales
de las personas?
En nuestro caso sobre el derecho al agua potable, para valorar el criterio de aceptabilidad podemos plantearnos
preguntas como las siguientes. ¿Se realizó un análisis de la situación y se tuvieron en cuenta las características
demográficas y culturales para determinar cómo debía ofrecerse el servicio de agua potable?
¿Los recursos y materiales que se usan para proveer agua potable fueron seleccionados teniendo en cuenta las
características demográficas y culturales de esta población? ¿Al definir el servicio se consideraron sus tradiciones,
costumbres, normas sociales, creencias, actitudes y prácticas habituales de higiene que en la comunidad se relacionan
con el uso del agua?

4. La calidad se define como el grado en el que las oportunidades que ofrece el contexto para disfrutar de un
determinado derecho se generan teniendo en cuenta información confiable y actualizada. Este criterio es
importante, porque de la calidad depende que se logren los resultados que se persiguen.
En muchas ocasiones, las oportunidades que se ofrecen para la realización de los derechos humanos fallan
porque:
1, en el análisis del contexto no se tienen en cuenta las percepciones, opiniones, expectativas y experiencias de
las personas directamente implicadas.
2, las decisiones se toman con base en la intuición, el sentido común o las creencias personales, y no con base
en la información proveniente de fuentes confiables.
3, los recursos técnicos y materiales que se usan para ofrecer los servicios no se seleccionan ni se desarrollan
teniendo en cuenta los avances tecnológicos.
4, el personal que se encarga de proveer los servicios o de llevar a cabo las acciones no ha sido debidamente
formado.

En nuestro ejemplo del derecho al agua, algunas de las preguntas que podemos plantearnos para evaluar la
calidad son las siguientes:
- ¿Las decisiones que se tomaron sobre cómo ofrecer el servicio de agua se tomaron involucrando a
todas las personas directamente interesadas?
- ¿El servicio de agua es seguro para la población porque fue definido teniendo en cuenta los avances
tecnológicos?
- ¿Se cuenta con personal formado para manejar los equipos y tomar decisiones relacionadas con
servicios? ¿El operador tiene definido un plan para asegurar la continuidad del servicio del agua en el
largo plazo?
- ¿Las autoridades locales que se encargan de liderar este proceso tienen la voluntad política para
cumplir con su obligación?
Como puedes observar, las preguntas que acabamos de mencionar giran en torno a garantizar que las
oportunidades, la infraestructura, los servicios, todos los recursos que se ofrecen para garantizar un derecho
tienen las mejores condiciones.
La valoración de las oportunidades que ofrece el contexto para la realización de un determinado derecho requiere
que nos planteemos varias preguntas en torno a estos cuatro criterios.

 La disponibilidad para establecer la variedad y cantidad de oportunidades para la realización. La realización del
derecho en el medio en el que vivimos.
 La accesibilidad, que nos permite identificar las posibilidades reales que tenemos de aprovechar esas
oportunidades que se ofrecen.
 La adecuación, con el fin de determinar si las oportunidades disponibles y a las cuales tenemos acceso se
adaptan a nuestras características demográficas y culturales y responden a nuestros intereses.
 La calidad, que nos facilita reconocer si la oferta de oportunidades es la que requerimos para disfrutar de las
mejores condiciones, las condiciones que merecemos para vivir una vida digna.
VENTAJAS DEL ENFOQUE BASADO EN DERECHOS HUMANOS

Mecanismos de exigibilidad: una particularidad del enfoque basado en los derechos humanos

Una de las principales características del enfoque basado en los derechos humanos es que reconoce la exigibilidad de
los derechos.
Como lo hemos mencionado a lo largo del curso, los derechos humanos nos ofrecen unos estándares universales sobre
las condiciones que merecemos que el Estado nos garantice.
Con base en esos estándares, los ciudadanos tenemos la expectativa de que el Estado, sus representantes y quienes
viven en nuestro alrededor hagan ciertas cosas, o que se abstengan de hacer otras, para promover nuestro desarrollo
integral y garantizar nuestro bienestar.
Cuando por alguna circunstancia esa expectativa no se cumple, e nos permite reclamar el cumplimiento de un
determinado derecho o conjuntos de derecho al Estado, para que nos los garantice.

Para reclamar el cumplimiento de un determinado derecho debemos identificar:

1, el derecho cuya realización está siendo violada, vulnerada u obstaculizada, por ejemplo, el derecho a la educación.

2, los titulares de derechos, es decir, las personas, grupos de personas, colectivo o comunidad que merecen que se les
garantice ese derecho. Por ejemplo, las niñas y los niños de una comunidad apartada que no tienen acceso a la
educación de calidad.
3, los titulares de obligaciones, que deben hacer efectivo ese derecho. Recuerda que los titulares de obligaciones son el
Estado y sus representantes.
En nuestro ejemplo del derecho a la educación el Estado tiene el deber de cumplir el compromiso adquirido ante los
ciudadanos y la comunidad internacional, definiendo un marco normativo-administrativo que asegure a niñas y niños el
acceso a la educación básica primaria de manera gratuita obligatoria.

Los gobernantes, como representantes del Estado, deben destinar recursos para que este derecho se realice incluso en
las zonas más apartadas del país. Asimismo, las directivas de las instituciones educativas y el personal docente deben
facilitar que todas las niñas y los niños, incluidos los pertenecientes a comunidades apartadas, sin restricción de ningún
tipo, cuenten con un entorno favorable para el aprendizaje. cuenten con un entorno favorable para el aprendizaje

4, los titulares de responsabilidades, que deben respetar y hacer respetar este derecho. Por ejemplo, las madres, padres
y personas cuidadoras, como, por ejemplo, las abuelas o los tíos, tienen la responsabilidad de promover en la vida
cotidiana las condiciones que les permitan a las niñas y los niños asistir a la escuela y llevar a cabo las tareas que esto
implica. Tienen también la responsabilidad de velar que la educación que deben recibir...

Es decir, una educación basada en conocimiento científico que fomente su autonomía, promueva su desarrollo integral,
al reconocer los derechos de las niñas y los niños. Los procedimientos legales definidos nacional o internacionalmente
para que los titulares de derechos puedan reclamar, a los titulares de obligaciones, el cumplimiento de sus deberes.

Ese reclamo lo podemos realizar a través de un mecanismo como una demanda, o una denuncia o una queja ante una
instancia independiente, como, por ejemplo, una jueza, el defensor del pueblo o incluso ante instancias como la Corte
Internacional de Derechos Humanos. El objetivo es que esa autoridad imponga sanciones, defina medidas de reparación
según el daño ocasionado por el incumplimiento, vulneración o violación de ese derecho.
Cada país miembro de las Naciones Unidas debe tener definidos los mecanismos de exigibilidad y está en la obligación
de darlos a conocer para que los ciudadanos y las ciudadanas puedan hacer uso de ellos cuando identifiquen que sus
derechos no están siendo garantizados.

El enfoque de derechos y otras aproximaciones de intervención

El campo de trabajo en el acompañamiento individual y comunitario, las personas y organizaciones que se encargan de
las intervenciones en pro del bienestar, diseñan las iniciativas que suelen realizarse desde alguna de las siguientes tres
aproximaciones:
 Enfoque de necesidades,
 el enfoque de capacidades
 y el enfoque de derechos humanos

El enfoque de necesidades. Muchas iniciativas están dirigidas a la identificación y satisfacción de lo que se consideran
las necesidades básicas.
Las necesidades básicas hacen referencia a las condiciones que los seres humanos requerimos para la supervivencia,
de tal manera que su insatisfacción nos pueda ocasionar daños y prejuicios graves. Entre las necesidades basicas se
reconocen la nutrición, el agua potable, el descanso, la vivienda, el vestido, la salud, la educación, el trabajo remunerado.
Como el ejemplo de iniciativas fundamentadas en este enfoque encontramos las dirigidas a dar alimentos a las personas
desnutridas, entregar subsidios educativos a los estudiantes que han abandonado el sistema escolar, llevar brigadas de
salud a las comunidades más apartadas de un territorio. En este tipo de iniciativa se suele identificar y nominar a las
personas como beneficiarias de las ayudas. Y las acciones tienden a enfocarse en resolver situaciones específicas que
se observan, es decir, las causas inmediatas.

El enfoque de capacidades. En este enfoque, las iniciativas están concentradas en fortalecer las potencialidades,
fortalezas, habilidades o competencias que permiten a las personas, grupos, organizaciones o comunidades enfrentar las
circunstancias en que viven y que les impiden disfrutar de bienestar.
Estas iniciativas se centran en fortalecer las capacidades individuales para la generación de: Recursos materiales, como,
por ejemplo, el acceso a créditos para adquirir una vivienda.
Recursos psicológicos, como facilitar el desarrollo de conocimientos y el cambio de aptitudes o el fomento de habilidades
para disminuir los índices de violencia de pareja, por ejemplo. Recursos sociales, facilitando la conformación de redes
sociales de apoyo. El enfoque de capacidades asume que las personas son agentes. Es decir, dueños de su propio
destino.
Desde esta aproximación, la meta de las acciones es el empoderamiento de las personas, los grupos y las comunidades
para que asuman el control de sus vidas y gestionen el mejoramiento de sus condiciones de vida.
El enfoque de capacidades, por lo tanto, tiende a delegar exclusivamente en las personas directamente afectadas la
responsabilidad de transformar las condiciones del entorno para mejorar su bienestar.

El enfoque basado en los derechos humanos. El enfoque basado en los derechos humanos, como you hemos dicho,
reconoce a todas las personas, sin excepción alguna, su rol como titulares de derechos. Es decir, seres humanos dignos
de que se les reconozcan y garanticen los entándares mínimos de vida para su desarrollo integral. Además, desde esta
aproximación las acciones de las iniciativas están encaminadas a garantizar la realización de los derechos humanos.

Estas características son claves, porque plantean varias diferencias en el proceso de intervención social, desde el
análisis de la situación hasta la evaluación:

1, no se habla de satisfacer necesidades, sino de respetar las condiciones mínimas que merecen las personas para tener
una vida digna.
2. El análisis desde el enfoque de necesidades no implica obligaciones para los Estados, desde el enfoque de los
derechos sí implica esto.
3. Las necesidades no son universales, en cambio, los derechos humanos sí lo son.
4. Las necesidades pueden atenderse mediante acciones de corto plazo, basadas en la entrega de lo que se carece.
5. La garantía de los derechos exige estrategias de largo plazo y procesos orientados a generar las condiciones que se
requieren para el desarrollo integral de manera sostenible.
5. Las necesidades pueden organizarse jerárquicamente, de acuerdo con orden de prioridades, mientras que los
derechos, no, porque todos son igualmente importantes.
6. El enfoque basado en los derechos humanos empodera al Estado y a sus representantes para cumplir con sus
obligaciones.
7. El enfoque basado en los derechos humanos fortalece la capacidad de los titulares de derechos para exigir a los
titulares de obligaciones el respeto, la protección y la realización afectiva de los derechos humanos. Y reconoce la
importancia de los titulares de responsabilidades en la realización de los derechos en la vida cotidiana. Frente a estas
dos últimas características, quiero resaltar algo que, para mí, constituye la clave del enfoque basado en los derechos
humanos.

Como observas en la figura que aparece en la pantalla, la transformación de las condiciones en las cuales vivimos
requiere la acción conjunta de diferentes agentes sociales en todos los entornos en los cuales interactuamos. No solo
exige que exista un marco normativo y político a favor de los derechos humanos. También requiere que las personas,
desde el lugar en que nos encontremos, conozcamos ese marco normativo y político y nos apropiemos de él.

Además, nos exige coherencia, es decir, como titulares de obligaciones y responsabilidades debemos usar los derechos
humanos como guía en todo lo que hacemos en los diferentes entornos. Y como titulares de derechos debemos
aprovechar los mecanismos definidos para exigir que estos derechos se nos garanticen.

Solo así eso que está escrito sobre los derechos humanos tu no va a ser letra muerta.

Ventajas y desafíos del enfoque basado en los derechos humanos

La identificación de las diferencias del enfoque basado en los derechos humanos. Con respecto al enfoque de
necesidades y al enfoque de capacidades, nos permite establecer tanto las ventajas de dicho enfoque como los desafíos
que representa.
En este vídeo, vamos a mencionar las dos ventajas más importantes, y los desafíos que se derivan de cada una de ellas:

1, en el enfoque basado en los derechos humanos, nos facilita realizar un análisis de las situaciones que afectan el
bienestar, considerando las causas más profundas, no solo las causas inmediatas, y sus causas subyacentes.
- Las causas inmediatas son las que determinan el estado de la situación actual que observamos.
- Las causas subyacentes hacen referencia a las dificultades del acceso al establecimiento, recursos, bienes y
servicios. Las causas profundas o estructurales de la situación corresponden a las condiciones inequitativas del
entorno, que impiden a las personas desarrollarse integralmente y disfrutar de los más altos niveles de bienestar.

Esta ventaja, a su vez, implica el reto de llevar a cabo procesos con altos niveles de complejidad, en la medida en que se
deben abordar de manera intersectorial todas la condiciones de inequidad con el fin de promover la realización de los
derechos. Esas causas estructurales son mucho más profundas. Están directamente relacionadas con el sistema
normativo, con creencias y prácticas culturales que no pueden abordarse con estrategias de corto o mediano plazo.

2, otra ventaja del enfoque basado en derechos humanos es que nos anima a la identificación de los agentes sociales
implicados en la situación, titulares de derechos, titulares de obligaciones y titulares de responsabilidades. Y nos facilita
identificar su rol en la promoción del bienestar para involucrarlos activamente en el proceso de garantía de derechos.
Esta ventaja nos plantea dos desafíos.
Por una parte, el que implica motivar la participación de todos los agentes sociales en los procesos. Y, por otra, las
resistencias al cambio, que usualmente se observan en las personas, grupos y organizaciones implicadas en la garantía
de los derechos, a la vez fundamentales para su realización.
Para atender a estos desafíos, el enfoque nos propone, como alternativa, promover el fortalecimiento de capacidades de
titulares de derechos, titulares de responsabilidades y titulares de obligaciones de manera simultánea, para hacerse
cargo de la transformación en el largo plazo.

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