El Texto de George Lapassade de los grupos, organizaciones y las
instituciones, ha nacido de preocupaciones vinculadas esencialmente a la
psicosociología. Lapassade propuso denominar análisis institucional al procedimiento que apunta a sacar a luz ese nivel oculto de la vida de los grupos, así como su funcionamiento. Para comenzar es preciso trabajar la institución misma; hay que cuidar esmeradamente la institución. Expertos e investigadores se han visto llevados en el curso de estos últimos años a establecer definitivamente que un grupo y por grupo también se entiende una organización social se halla siempre sobre determinado por instituciones, lo que ocurre en un grupo tiene estrecha relación con el conjunto institucional de nuestra sociedad, es decir existe una estrecha relación de interdependencia entre los conceptos de grupo, organización e institución. Las nociones de grupo, organización e institución que en el lenguaje corriente permite designar a tres niveles del sistema social pueden también servir para determinar tres niveles del análisis institucional. Primer nivel: Grupo-Nivel de Base y de la vida diaria, en este nivel se sitúa el taller, la oficina, el aula, en este nivel ya hay institución; horarios, normas de trabajo, estatutos etc.; en el taller y el aula está presente, aunque de manera sutil, el poder del Estado, y en este mismo nivel básico hay que situar la familia, el grupo familiar constituye el cimiento más firme del orden social establecido. El segundo nivel es el de la Organización, es el nivel de la fábrica en su totalidad, de la universidad, del establecimiento administrativo, es a su vez el nivel de la organización, grupo de grupo, donde se lleva a cabo la mediación entre la base y el Estado. El tercer nivel es el de la Institución, tanto para Durkheim como para los sociólogos que le sucedieron las instituciones definen todo aquello que está establecido; el tercer nivel es en realidad el Estado.
La práctica pedagógica se establece en tres niveles:
El primer nivel es la Unidad Pedagógica de Base, es el nivel escolar de la clase, de la práctica docente, la relación entre educadores y educandos conserva su estructura de poder, basada en la disimetría que opone el saber al no saber. El segundo nivel es el del establecimiento: la escuela, el liceo, la facultad, al Establecimiento se le suele llamar institución. Este nivel es el de la organización. La estructura de la administración universitaria es autoritaria porque las autoridades son elegidas por lo decanos de la misma facultad, los educando no participan. El tercer nivel: el Estado define las normas generales de la Universidad, es visible que los docentes, como entregan los diplomas, son los representantes de la autoridad estatal en la unidad pedagógica básica. En el camino del análisis institucional encontramos el Estado clasista, la estructura de clase de una determinada formación social; allí es donde nos conducía hace un instante el ejemplo del sistema universitario. Hoy se conoce a la Institución Universitaria como institución clasista, a esta institución solo se la puede comprender como un sitio en el que se cruzan la instancia económica, la instancia política y la instancia ideológica.
El Estado se establece entonces en el compromiso de la lucha
de clases hasta el momento en que se convierte, con el advenimiento de la Revolución Francesa, el Estado Burgués. Toda revolución popular es siempre un proceso que comienza a reemplazar al Estado por una soberanía poli forma, por un mero sistema institucional, la revolución es el objeto central de la represión. Antes de la crisis de mayo las investigaciones institucionales remataban en un callejón sin salida. La crisis de mayo disipo las ilusiones y las desinteligencias, la crisis de las instituciones paso a ser evidente en todos los niveles de nuestro sistema social, una práctica revolucionaria eficaz puede mostrar todos los niveles del sistema institucional que se han descrito anteriormente. En mayo se redescubrió que el Estado no es nada apenas deja de encontrar apoyo en las instituciones dominantes, es decir las universidades y que estas solo se mantienen en pie gracias al sostén del Estado y de su aparato de represión. El movimiento de mayo reveló que una minoría puede ser la verdadera expresión de una mayoría incierta, la entrada en la revolución siempre implica esa ruptura, esa falla en el sistema y ese despertar de la invención política colectiva. La acción revolucionaria apunta a la abolición de las diferencias, simplemente a abrir la brecha que le permita a todo grupo conducirse solo y analizarse sin el apoyo de animadores, que llevan a cabo el servicio de orden en grupos de formación.