Está en la página 1de 5

Definición de Actos impugnables

Son los actos y disposiciones de la Administración en relación con los cuales

será admisible el recurso contencioso-administrativo. En este sentido, son

actos impugnables todos los que hayan puesto fin a la vía administrativa. Las

disposiciones de carácter general que dictare la Administración del Estado,

las entidades locales y las corporaciones e instituciones públicas, podrán ser

impugnadas directamente ante la jurisdicción contencioso-administrativa, una

vez aprobadas definitivamente en vía administrativa. También será admisible

la impugnación de los actos que se produjeren en aplicación de las mismas,

fundada en que tales disposiciones no son conformes a Derecho

ACTIVIDAD IMPUGNABLE

El proceso contencioso-administrativo tiene siempre por objeto las pretensiones

que se deduzcan en relación con un acto administrativo o una disposición

general. El proceso contencioso-administrativo 13/6 Así, lo característico del

proceso contencioso administrativos es que las pretensiones, que constituyen

su objeto, han de deducirse precisamente en relación con los actos,

disposiciones generales o cualquier inactividad u omisión que exteriorice la

voluntad de la Administración

Por tanto, esta regla general ha de ser matizada en un doble sentido: a) han de

incluirse los supuestos de actos presuntos producidos por efecto del silencio

administrativo; y b) igualmente se incluye la actividad administrativa producida

mediante meras «inactividades» de la Administración, o por actuaciones

materiales que constituyan «vía de hecho» para cuya defensa puede acudirse
a los tribunales ordinarios, mediante la vía interdictal, o ante la jurisdicción

contencioso-administrativa

. ACTOS ADMINISTRATIVOS IMPUGNABLES

Los actos administrativos impugnables pueden ser expresos o presuntos (por

efecto del silencio administrativo), que pongan fin a la vía administrativa.

Los actos impugnables pueden ser definitivos o de trámite. Para que estos

últimos sean impugnables es necesario que: a) decidan directa o

indirectamente el fondo del asunto, b) determinen la imposibilidad de continuar

el procedimiento o c) produzcan indefensión o perjuicio irreparable a derechos

o intereses legítimos

También puede impugnarse la inactividad de la Administración, y sus

actuaciones materiales que constituyan vía de hecho

LAS DISPOSICIONES GENERALES IMPUGNABLES

Pueden impugnarse ante la jurisdicción contencioso-administrativa: – Las

disposiciones generales de rango inferior a la ley, y – Los Decretos legislativos

cuando excedan los límites de la delegación (art. 1.1 de la LJCA).

Las disposiciones generales pueden impugnarse directamente o a través de

sus actos de aplicación (impugnación indirecta


Impugnación directa Con carácter general la LJCA admite la impugnación

directa de las disposiciones generales emanadas de la Administración General

del Estado, de las CCAA, de las Entidades Locales, y de las Corporaciones e

Instituciones Públicas, sin necesidad de la previa interposición de recurso

administrativo (art. 107.3 LRJPAC).

B) Impugnación indirecta Se produce cuando la impugnación de la disposición

general se hace aprovechando la impugnación de un acto de aplicación de la

misma (art. 26.1 LJCA). Esta impugnación puede fundarse en cualquier

infracción del ordenamiento jurídico, salvo vicios formales apreciados en su

elaboración, según reiterada jurisprudencia del Tribunal Supremo

ACTOS IMPUGNABLES L.J.C.A

7 Artículo

28. La acción será admisible en relación con los actos definitivos de la

Administración Pública que no sean susceptibles de ulterior recurso en vía

administrativa.

En el caso de los actos de trámite, la acción será admisible cuando éstos no

sean susceptibles de ulterior recurso administrativo y decidan directa o


indirectamente el fondo de asunto, de tal modo que pongan término a la vía

administrativa o hagan imposible o suspendan su continuación.

La acción contra los actos administrativos de carácter general o disposiciones

se regirá por lo previsto en el Artículo 30 de esta Ley.

Artículo 29. Cuando se formulare alguna petición ante la administración y ésta

no notificare la resolución en los plazos señalados en el Artículo 84 de la Ley

de Procedimiento Administrativo, el interesado podrá denunciar el retraso y

transcurridos ocho días desde la denuncia, podrá considerar denegada su

petición, a efecto de formular frente a esta denegación presunta, el

correspondiente recurso administrativo o la acción jurisdiccional, según

proceda, o esperar la resolución expresa de su petición.

Artículo 30. Los actos de carácter general o disposiciones que dictare la

Administración Pública, podrán impugnarse directamente ante la Jurisdicción

ContenciosoAdministrativa, una vez que hayan entrado en vigencia en vía

administrativa. También será admisible la acción contra los actos de carácter

particular que se produjeren en aplicación de los actos administrativos de

carácter general, fundada en que éstos no son conforme a Derecho.

No obstante serán asimismo susceptibles de impugnarse mediante la acción

contencioso administrativo, en todo caso, los actos de carácter general que

hubieran de ser cumplidos por los administrados directamente, sin necesidad

de un previo acto de requerimiento o sujeción individual.


La falta de impugnación directa de una disposición o acto de carácter general o

la desestimación de la acción que frente a ella se hubiere interpuesto, no

impedirán la impugnación de los actos de aplicación individual, fundada en el

supuesto previsto en el párrafo anterior.

Artículo 31. No se admitirá la acción contencioso-administrativa respecto de:

a) Los actos firmes, es decir, aquellos que no hubieren sido recurridos en

tiempo y forma o que hubieren sido consentidos expresamente, y los

confirmatorios de los actos firmes consentidos, así como los que sean

reproducción de otros anteriores ya definitivos o firmes;

b) Las resoluciones que pongan término a la vía administrativa como previa a la

judicial

Los actos que se dicten en virtud de una Ley que expresamente les excluya de

la vía Contencioso Administrativo.

Artículo 32. Se admitirá la acción Contencioso-Administrativa contra los actos

firmes y aquellos confirmatorios de los actos firmes a que se refiere el inciso a)

del Artículo anterior, cuando fueren nulos de pleno derecho y estén surtiendo

efectos; pero ello únicamente para fines de su anulación e inaplicabilidad

futura.

También podría gustarte