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ANÁLISIS LA FARSA DE LA TINAJA

UNIVERSIDAD FRANCISCO JOSÈ DE CALDAS


FACULTAD DE ARTES ASAB
PROYECO CURRICULAR ARTES ESCÈNICAS
HISTORIA DEL TEATRO I
YILDER IVAN RUIZ SALINAS
20182104033

PERSONAJES

JAQUINOT: Marido
JEANETTE: Su mujer
JAQUETTE: La suegra

ARGUMENTO:
La historia inicia cuando JAQUINOT (el marido) se levanta un día
cualquiera de su cama y su JEANETTE y su LA SUEGRA lo
encuentran “holgazaneando” por lo que la esposa le pide que haga
los quehaceres de la casa porque eso haría un buen marido.
Entonces arman un complot para ello mientras le piden que
escriba en un pergamino las tareas a las que está destinado sin
ningún tipo de queja. Él accede a hacer únicamente lo que ellas le
dictaron en dicho pergamino.
En la siguiente escena su esposa se encuentra en la tinaja del
baño mientras le pdie a su marido que le ayude a doblar una
sábana y en esta acción cae a la tinaja llena de agua mientras se
ahoga y pide ayuda a su marido quien decide no ayudarla porque
esto no está dentro de sus tareas. Este le exige un perdón por que
está cansado de esas tareas mientras ella pide ayuda. Llega la
suegra dándose cuenta de lo que pasa e intenta ayudar a su hija,
sin embargo, siguen necesitando ayuda de JAQUINOT quien no
cede hasta que lo eximen de las tareas de la casa y este resuelve
ayudarla saliéndose con la suya.

COMENTARIO CRÍTICO

Esta farsa es un pequeño vistazo en la edad media que Europa


robara un poco de formato cómico para su propio beneficio
literario, enriqueciendo la comedia del arte con estas muestras
anónimas de comicidad donde la vida ondula, donde los pequeños
chistes escénicos hacen pie de situaciones de dependencias
sociales donde personajes de la vida diaria, cotidianos,
contingentes, transversales a la vida, en conflicto con la vida y
entorno se dirigen en un lánguido camino de dificultades
impuestas o creadas por aquellos que los rodean en pugna de una
resolución envuelta de trucos a la vida, un juego cómico que
dispone de su astucia para ser el que engaña, el que sale por la
tangente, o el engañado, e ingenuo, el simple.

Son apenas los esbozos de un tipo de teatro que veremos con más
forma en los años posteriores, pero que suavemente enmascaran
la comicidad de la vida que se ve día a día.

Con esta farsa se trama uno de los conflictos que resultan


previsibles hasta un punto pero que al tiempo tienen de viveza el
cálculo de los personajes que al luchar contra una fuerza, un
obstáculo contrario el esposo logra, por la avidez de la misma
situación que toma forma cómica cuando la explicitéz del
mandamiento de la suegra y la esposa toma el climax y la
dependencia en situaciones extremas.

La carga de estos momentos dentro de la obra proviene de la


repetición, la insistencia, la forma en que doblegan los dos
personajes al esposo quien se ve dominado no por argumentos
sino por mandatos casi dictadores que reducen sus derechos a
una condición de criado, casi por una obligación moral enmarcada
dentro de los anaqueles sociales donde las relaciones
matrimoniales sirven no solo para conservar el nivel social con el
que consigo deviene, sino también para establecer status dentro
del mismo círculo donde uno de los dos se ve subyugado al
mandato de una de las paridades, justificados por un estamento
social poco infundado. La suegra y la esposa toman este papel
preponderante, estas relaciones pautan unos roles extremos
dentro de la historia, donde el esposo no ve más salida que verse
explotado por las albores a las que es obligado sino también por el
tono impuesto con el que se refieren a él, restándole todos los
privilegios de lo que en un comienzo se pauta, que es el
matrimonio.

Este clímax permite inmiscuirnos dentro de otra realidad que sirve


para hablar de temas pintorescos, farsescos y reales al mismo
tiempo dentro de una sociedad, por lo mismo que creemos dentro
de la fábula construida el extremo al que el esposo llega por
reclamar unos derechos que han sido cortados, todo esta realidad
bien construida para hablar de temas que atañen, aunque
cómicos, a una sociedad relegada a la sumisión, dependiente y
bajoneada.

Este ejemplo de farsa nos sirve para entender la construcción de


personajes más directos y estructurados dentro de un estilo de
dramaturgia y construcción escénica ya no solo para contar
situaciones sino para definir en la estera de la sociedad aquellos
personajes destinados a atacar aquello que parece indignante y
hacerle burla en función de una crítica a la sociedad, servida de
arte para hacer reír y al mismo tiempo hacer pensar, construyendo
un teatro mezclado de vida y ficción.

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