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ANTONIO BUERO VALLEJO

HISTORIA DE UNA ESCALERA


Resumen del argumento:
FERNANDO.- No. Te lo suplico. No te marches. Es preciso que me oigas... y que me creas. Ven.

(La lleva al primer peldaño)

Como entonces.

(Con un ligero forcejeo la obliga a sentarse contra la pared y se sienta a su lado. Le quita la lechera y la
deja junto a él. Le coge una mano.)

CARMINA.-¡Si nos ven!

FERNANDO.- ¡Qué nos importa! Carmina, por favor, créeme. No puedo vivir sin ti. Estoy desesperado. Me
ahoga la ordinariez que nos rodea. Necesito que me quieras y que me consueles. Si no me ayudas no
podré salir adelante.

CARMINA.-¿Por qué no se lo pides a Elvira?

(Pausa. Él la mira, excitado, alegre.)

FERNANDO.- ¡Me quieres! ¡Lo sabía! ¡Tenías que quererme!

(Le levanta la cabeza. Ella sonríe involuntariamente.)

¡Carmina, mi Carmina!

(Va a besarla, pero ella le detiene.)

CARMINA.- ¿Y Elvira?

FERNANDO.- ¡La detesto! Quiere cazarme con su dinero. ¡No la puedo ver!

CARMINA.- (Con una risita.) ¡Yo tampoco!

(Ríen felices.)

FERNANDO.- Ahora tendría que preguntarte yo: ¿Y Urbano?

CARMINA.- ¡Es un buen chico! ¡Estoy loca por él! (Fernando se enfurruña.) ¡Tonto!

FERNANDO.- (Abrazándola por el talle.) Carmina, desde mañana voy a trabajar de firme por ti. Quiero
salir de esta pobreza, de este sucio ambiente. Salir y sacarte a ti. Dejar para siempre los chismorreos, las
broncas entre vecinos... Acabar con la angustia del dinero escaso, de los favores que abochornan como
una bofetada, de los padres que nos abruman con su torpeza y su cariño servil, irracional...

CARMINA.- (Reprensiva.) ¡Fernando!

FERNANDO.- Sí. Acabar con todo esto. ¡Ayúdame tú! Escucha: voy a estudiar mucho, ¿sabes? Mucho.
Primero me haré delineante. ¡Eso es fácil! En un año... Como para entonces ya ganaré bastante,
estudiaré para aparejador. Tres años. Dentro de cuatro años seré un aparejador solicitado por todos los
arquitectos. Ganaré mucho dinero. Por entonces tú serás ya mi mujercita, y viviremos en otro barrio, en
un pisito limpio y tranquilo. Yo seguiré estudiando. ¿Quién sabe? Puede que entonces me haga
ingeniero. Y como una cosa no es incompatible con la otra, publicaré un libro de poesías, un libro que
tendrá mucho éxito...

CARMINA.- (Que le ha escuchado extasiada.) ¡Qué felices seremos!


FERNANDO.- ¡Carmina! (Se inclina para besarla y da un golpe con el pie a la lechera, que se derrama
estrepitosamente. Temblorosos, se levantan los dos y miran, asombrados, la gran mancha en el suelo.)

Características lingüísticas y literarias del texto: Historia de una escalera es la primera obra de Antonio
Buero Vallejo, estrenada en 1949 en plena dictadura franquista. La obra inaugura en la escena española
una tendencia de teatro realista y social que se mantuvo durante varias décadas de la segunda mitad del
siglo XX.

Los textos dramáticos desarrollan una historia, en este caso, el fracaso de las ilusiones juveniles y la
frustración amorosa, esta trama se representa en un escenario por unos personajes, Fernando y
Carmina, que contemplan, desde el pasado, el presente y el futuro de sus hijos, que también se llaman
Fernando y Carmina, un futuro que se adivina muy parecido a la vida que han tenido ellos.

Toda la obra tiene lugar en un único escenario: una escalera de un edificio de pisos de clase media-
baja. El tiempo es un elemento fundamental en la obra, que consta de dos actos, separados por
treinta años. Aunque el tono del fragmento parece el de una comedia romántica, hay un fondo de
ironía y amargura en él, que lo acercan a la tragedia, los personajes se encaminan a una situación sin
salida, ellos mismos van labrando con sus acciones su desdichado futuro. Como en un moderno cuento
de la lechera, que el autor nos recuerda de manera explícita, al hacer que Fernando de un puntapié a la
vasija que contiene la leche y la derrame, el lector/espectador intuye que los planes de los dos jóvenes
no llegarán a realizarse.

Las funciones apelativa y expresiva del lenguaje son las dominantes, por eso abundan los vocativos:
¡Carmina. Mi Carrmina!, ¡Fernando!, etc.; el uso del modo imperativo: No te marches, Ayúdame; las
oraciones interrogativas y exclamativas. ¡La detesto!, ¡Qué felices seremos! ¿Sabes?, ¿Por qué no se lo
pides a Elvira?; la utilización de elementos afectivos: Por favor; ¡Tonto!, de adjetivos valorativos: sucio
ambiente, cariño servil, pisito tranquilo.

PARA CONTESTAR A ESTA PREGUNTA DEBES PARTIR DEL TEXTO Y LUEGO ALEJARTE DE ÉL,
MANIFESTANDO OPINIONES PROPIAS, BASADAS EN TU EXPERIENCIA, O EN ACONTECIMIENTOS
HISTÓRICOS O ACTUALES ETC.

Este es un tema muy amplio que puede prestarse a diversas consideraciones. Basándonos en el texto,
especialmente en los dos últimos parlamentos de Fernando, y en el último de Carmina, vemos que estos
personajes tratan de sustituir la realidad que no les gusta por otra más atractiva.

Para el espectador o el lector es un caso claro de autoengaño. Cuando Fernando dice: "desde mañana
voy a trabajar de firme por ti" nos damos cuenta de que mañana no va a hacer lo que hoy se propone,
porque ya no lo hizo ayer, y tampoco lo ha hecho hoy, no ha tenido voluntad real de cambiar ese
presente que no le gusta y lo sustituye por la ilusión de hacerlo en un futuro más o menos lejano.

Los seres humanos tenemos dificultad para aceptar la realidad cuando no nos gusta y tendemos a
sustituirla por una ficción. ESTE AUTOENGAÑO es una cosa bien distinta de la ignorancia: es
desconocimiento voluntario de la realidad, es disposición a ignorar lo inconveniente, son ganas de
pasar por alto lo indeseable. Vivimos constantemente apartándonos de lo real, huyendo de la verdad.
Quizá vemos lo que existe pero rechazamos lo que significa, cuando un obstáculo molesta, en el caso de
Fernando, el trabajo duro de cada día, se decide ignorarlo.

Podemos buscar innumerables ejemplos lejos del texto: Don Quijote ve la venta pero la adapta a la idea
del castillo, las ovejas balan, pero para él es el ruido que hacen los ejércitos. La motivación de huida de
la realidad y sustitución por un mundo ficticio la encontramos en el espectador de cine, que sustituye,
aunque sea por unas horas, su vida diaria por la magia de la pantalla, o está también en la atracción que
siente muchas personas por revistas o programas televisivos, sobre gente famosa o rica, que lleva una
vida, al parecer, muy diferente a las suyas y por un tiempo olvidan su realidad, sustituyéndola por vidas
ajenas.

Personajes

ELVIRA: Hija de Don Manuel. Niña un poco caprichosa y consentida. Está enamorada de Fernando.

CARMINA: Malvive con muchas privaciones al lado de su madre. Está enamorada de Fernando y éste de
ella. Tiene otro hermano, Pepe.

DON MANUEL Padre de Elvira, hombre viudo y de situación económica desahogada. Aparece solo al
inicio del primer acto, en el segundo ya ha fallecido.

GENEROSA madre de Carmina. Mujer bondadosa

PACA: Madre de Urbano, le gustan los chismes. Es soberbia y desconfiada.

TRINI: Hermana de Urbano. Tímida y decente.

ROSA La otra hermana de Urbano, está liada con Pepe. Sus padres la repudian por ello.

PEPE. Hermano de Carmina. Es un sinvergüenza sin escrúpulos. Vive sin trabajar, se aprovecha de Rosa
para poder beber e ir de juerga.

Interpretación de la obra. Trascendencia y significado

Los sucesos que ocurren en Historia de una escalera, aparentemente particulares y muy concretos,
tienen un alcance más amplio, poseen un doble sentido:

a) La representación de la realidad más inmediata.

Historia de una escalera es un análisis de la sociedad española en una época muy difícil, de pobreza,
hambre y falta de oportunidades. La obra tiene lugar en tres momentos, correspondientes a los actos.
De manera que los dos primeros actos se ambientan en la realidad social de los años cuarenta. Entre los
actos segundo y tercero ha transcurrido una guerra civil, la española, que por razones obvias (la censura)
no es tratada directamente, pero cuyas consecuencias son evidentes. En conclusión: Historia de una
escalera es una dolorida reflexión sobre la España de la posguerra

b) El de símbolo abierto, partiendo de la situación de España en la posguerra.

La obra es la historia de una imposibilidad. Nos empuja a preguntarnos: ¿por qué fracasan Fernando y
Urbano? ¿Es por culpa de su propia incapacidad? O, por el contrario, ¿son sólo víctimas de una sociedad
y una época que no daba oportunidades a los más humildes

Pensemos en ello, Fernando es un soñador, egoísta e insolidario que tiene grandes planes para el
futuro pero para conseguirlo renuncia a su amor por Carmina y se casa con Elvira sólo porque tiene
más dinero. Opta por el camino más fácil, pero se equivoca, ha elegido el más difícil. Al vivir sin amor,
pierde la motivación y las fuerzas que necesita para lograr sus sueños. Se ha mentido a sí mismo, ha
renunciado a la verdad (recordemos el tema del teatro de Buero Vallejo: “la búsqueda de la verdad”) y
ha fracasado. La falsedad le ha llevado a la infelicidad.

A Urbano le ocurre algo parecido, pero por otra vía. Es más honesto que Fernando y más realista. Al
contrario que Fernando piensa que la única manera para conseguir cambiar su situación es la solidaridad
y el trabajo en equipo. Puede que por convicción o como le dice Fernando en el acto I porque no tiene
confianza en sí mismo. El caso es que es un fatalista; cree que es imposible ascender, que les ha tocado
vivir en una época en la que todos están condenados a vivir para morir sin que nada haya cambiado en
sus vidas. En definitiva le echa la culpa al destino.

Cada uno a su manera, pero ambos se equivocan. La obra nos trasmite la idea de que nosotros somos en
buena medida los dueños de nuestro destino. Hay una parte importante que depende de las
circunstancias exteriores, pero la realidad no lo condiciona todo como piensa Urbano, ni con egoísmo
se puede progresar como intenta Fernando.

En conclusión, los cuatro personajes principales de la obra han fracasado, el desarrollo cíclico de la obra
hace que en el acto tercero: Fernando hijo y Carmina hija repiten, 30 años más tarde, la misma
situación que sus padres. Sin embargo, ahora ellos luchan por su amor, son fieles a sí mismos y quieren
estar juntos a pesar de que sus padres se lo prohíben.

El drama (como casi todos los de Buero) tiene un final abierto: ¿conseguirán los hijos corregir los
errores de sus padres? o, por el contrario ¿volverán a repetirlos?

c) Los símbolos. De los muchos símbolos de la obra destacaremos algunos esenciales:

– La escalera es el símbolo principal. Representa la inmovilidad social de unos personajes que se pasan
30 años subiendo y bajando la misma escalera que no les lleva a ningún sitio. Es el símbolo de los deseos
de ascender, pero que a los personajes sólo les ha servido para subir y bajar si que nada cambie.

– Los personajes principales encarnan en sí mismos signos humanos: Fernando el soñador; Urbano el
fatalista | Fernando egoísta; Urbano solidario.

– El amor: que en la obra se identifica con la libertad y la verdad. Fernando, Urbano, Elvira y Carmina
renuncian al verdadero amor y eso les condena a la infelicidad.

– El tiempo cíclico: que nos lleva al final abierto antes aludido.

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