HISTORIA DE LA MÚSICA EN COLOMBIA CAPITULO IV

presentado por: Eduardo Hernandez Marin

presentado a: esp. Carmelo Coronel

EL PAPEL DE LA IGLESIA EN EL INICIO DE LA MÚSICA EUROPEA EN

COLOMBIA

La iglesia jugo un papel importante en como llego la música a Colombia, pues

fueron los primeros obispos quienes pidieron a la corona de España libros e
instrumentos musicales con los cuales se pretendía catequizar cada vez más
población indígena. La idea era que los indígenas aprendieran a leer y a escribir
y a contar y cantar. Las primeras formas musicales aplicadas a tal tarea se
basaban en el canto y órgano, reforzado con chirimías, las cuales eran un
instrumento de viento antecesor del clarinete, que tenía varios tamaños y usaba
lengüeta de caña. Entre los hallazgos que están ubicados en la catedral de
Bogotá se encuentra una partitura para dos chirimías y órganos de Fray Manuel
Blasco que datan del año 1684. Unos de los primeros colegios Seminarios
conciliares de américa fue el seminario de san Luis fundado en 1573 y el cual
enseñaba canto y lectura musical a sacerdotes y doctrineros.
Otro de los grandes aportes de la iglesia para dar inicio a la formación musical
de la música europea en Colombia fue el órgano, el cual fue traído por primera
vez para dotar la catedral santafereña por medio del arzobispo fray Bartolomé
Lobo Guerrero. También formalizo la tarea del músico como un oficio
remunerado. el arzobispo fray Bartolomé Lobo Guerrero también aporto haber
encargado pintar una colección muy importante de música coral la cual se
conserva en perfectas condiciones en la catedral de Santa Fe, las cuales en
conjunto suman 32. Cartagena también albergo hombres que dejaron grandes
aportes, como es caso de don Juan Pérez de Materano, el cual parece ser,
escribió el libro de música más antiguo de Colombia y al cual se le permitió por
más de 10 años vender un libro que había compuesto de canto y órgano y canto
llano.
En este periodo los músicos alcanzaron gran reputación, un ejemplo de esto es
que el maestro de capilla tenía a su cargo el gobierno de todos los músicos y
dentro de sus tareas estaba la de asistir todos los días en los que se celebrara
fiesta solemne para encargarse de los oficios de altar y coro. Las comunidades
religiosas de todo el país tuvieron grandes libros corales que hoy son patrimonio
musical de Colombia, los cuales se encuentran en catedrales del centro del país.