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El documento resume la historia de la música en Ecuador durante la época colonial. Se dividió en tres períodos: 1) La llegada de los conquistadores españoles y la mezcla inicial de la música indígena y europea. 2) La influencia de las misiones religiosas y la popularización de instrumentos como el arpa y la guitarra. 3) El surgimiento de formas musicales criollas y la influencia de estilos europeos entre las clases altas a finales del siglo XVIII. Destaca los maestros de capilla como figuras importantes y a Diego L
El documento resume la historia de la música en Ecuador durante la época colonial. Se dividió en tres períodos: 1) La llegada de los conquistadores españoles y la mezcla inicial de la música indígena y europea. 2) La influencia de las misiones religiosas y la popularización de instrumentos como el arpa y la guitarra. 3) El surgimiento de formas musicales criollas y la influencia de estilos europeos entre las clases altas a finales del siglo XVIII. Destaca los maestros de capilla como figuras importantes y a Diego L
El documento resume la historia de la música en Ecuador durante la época colonial. Se dividió en tres períodos: 1) La llegada de los conquistadores españoles y la mezcla inicial de la música indígena y europea. 2) La influencia de las misiones religiosas y la popularización de instrumentos como el arpa y la guitarra. 3) El surgimiento de formas musicales criollas y la influencia de estilos europeos entre las clases altas a finales del siglo XVIII. Destaca los maestros de capilla como figuras importantes y a Diego L
DOCENTE: Mgst. Carlos Freire Soria, PhD LA COLONIA
A finales del siglo XV, mientras en Europa finalizaba
la guerra entre árabes y españoles y Cristóbal Colon abría nuevos horizontes con el descubrimiento de América, en nuestro territorio se consolidaba la dominación incásica por parte de los invasores sureños sobre las diversas etnias de nuestro territorio. Luego de la muerte de Huayna-capac, nacido en la ciudad de Tomebamba (actual Cuenca), que había dividido el territorio de su imperio entre sus hijos Huáscar y Atahualpa, se produjo una batalla fratricida, tratando de lograr el dominio total del Incario; lo que facilitó la incursión de los conquistadores españoles. Con la llegada de los europeos a nuestro territorio en el año 1.526 (cuando Bartolomé Ruiz desembarcó en costas ecuatorianas), se empieza a generar una serie de fenómenos culturales, producto de la mezcla de dos sistemas diferentes. En el aspecto musical, los conquistadores habrían causado estupor y admiración en nuestros antepasados, con el sonar de “extraños” instrumentos como cornetas, oboes y timbales que traían consigo en su campaña guerrera. • La primera fundación española de Santiago de Quito, se realizó el 28 de agosto de 1534; la posterior y definitiva, como San Francisco de Quito, el 6 de diciembre del mismo año. En la América española, la estructura administrativa de mayor jerarquía fue el virreinato, el virrey representaba al Monarca español. El virreinato de Perú fue creado en 1550. En 1563 se creó la Real Audiencia de Quito, a esta unidad le correspondía las funciones judiciales, la administración y gobierno, además se encargaba del cobro de tributos, ingresos municipales, control de las cuentas de la hacienda, protección de los nativos, etc. La sociedad colonial, bajo la perspectiva de sus relaciones socio económicas. El periodo colonial puede ser estudiada en tres grandes períodos: • El primer período va desde la conquista hasta fines del siglo XVI, es una etapa de asentamiento e inicial consolidación del régimen colonial español. El segundo abarca el siglo XVII y las décadas iniciales del siglo XVIII, la producción textil fue la principal actividad económica. El último período está caracterizado por la crisis, el agotamiento del régimen colonial y la readecuación de las relaciones sociales. Este período termina con la independencia. • Como referencia y paralelismo, en el ámbito musical también señalaremos tres etapas: la primera, termina con el fallecimiento del maestro de capilla, Diego Lobato de Sosa (1614); la segunda tiene como personaje central a Santa Mariana de Jesús (1618–1645), concluye con la expulsión de los jesuitas (1767); la última etapa culmina con el cierre del Aula de Música del fraile agustino Tomás de Mideros y Miño (1810). En 1550 llegó a Quito, proveniente de Lima, el Obispo Bachiller Don Garcí Diez Arias, para fundar el Colegio de San Andrés, en el convento de los franciscanos, de la ciudad de Quito.
En 1555, Fray Jodoco Rike y Fray Pedro Gosseal inician la
enseñanza de lectura, escritura y música, en dicho plantel, cuyo principal objetivo era la formación en Artes y Oficios: “Además de enseñar a los indios a leer y escribir, Fray Jodoco les enseñó a tañer los instrumentos de música: de tecla y cuerda, y también flautas, trompetas, cornetas, y la ciencia del órgano y el canto Llano. Con toda esta influencia foránea, nuestra música autóctona se iba transformando. Los ritmos y melodías tradicionales sufrían cambios y “arreglos” por parte de los músicos españoles y la gran influencia de la música religiosa europea limitaba el repertorio profano. Solamente en las comunidades alejadas de los principales centros urbanos se conservaban casi intactas las manifestaciones musicales tradicionales. Los instrumentos musicales propios de nuestros indígenas como rondadores, flautas, quipas, bocinas, pingullos, bombos, payas, redoblantes, sonaban con menos frecuencia, en las ciudades, y los sonidos extraños y novedosos de los instrumentos musicales de los conquistadores iban ganando intérpretes en nuestro territorio. En la parte norte de la Sierra se popularizaron el arpa, el bandolín y la guitarra y en la zona central y austral el violín y la guitarra. En la región costanera se dio la influencia de nueva cultura extranjera: la africana, que produjo como resultado una música totalmente diferente a las del resto de nuestro país, especialmente en lo que se refiere a las formas musicales (torbellino, bomba, caderona) y a los instrumentos utilizados como marimba, cununo, alfondoque, guasa, etc. Esta influencia se limitó a determinadas zonas geográficas de nuestro territorio: a la Provincia de Esmeraldas, en la costa y al Valle del Chota (Provincia de Imbabura), en la sierra, específicamente. En otras zonas de la Costa, sus habitantes conocidos como “montubios” crearon una manifestación musical muy propia denominada “amorfino”, compuesta por coplas, muchas veces improvisadas, que se cantan con el acompañamiento de guitarra a bandolín, en forma de contrapunto. • Construcción de instrumentos musicales
La necesidad de abastecerse de los instrumentos necesarios
para el desarrollo de la actividad musical, especialmente religiosa, obligó a los españoles a construirlos en nuestro territorio, siendo los órganos “tubulares” de iglesia los de mayor envergadura, similares a los traídos, con mucha dificultad, de Europa. En 1638 produjo gran conmoción la construcción de un órgano de 600 tubos por un fraile franciscano del Convento de Quito, que gracias a la calidad de los materiales y a la técnica empleada en la construcción fue considerado como el mejor del Virreinato. En otras ciudades del país se encuentran otros ejemplares de estos imponentes órganos, como el de1 templo de Calpi, en la ciudad de Riobamba, construido en 1816, o el de la Catedral Vieja de la ciudad de Cuenca, fabricado por e1 Sr. Antonio Esteban Cardoso en 1735. Instrumentos de cuerda como guitarras, mandolinas y arpas también fueron enseñados a construir, debido a la gran aceptación que tenían para la actividad musical de aquellos tiempos. Los Maestros de Capilla La gran importancia que tenían los “Maestros de Capilla” en el ambiente artístico capitalino debido a la sólida formación musical que poseían y a sus estrechos vínculos con el clero, los convirtieron en los más importantes personajes de la música de esa época. Se destacaron entre ellos Diego Lobato, Joseph Ortuño, Manuel Blasco, los caciques Pillajo, entre otros.. Con la influencia del estilo musical español, los ritmos y melodías autóctonas se iban transformando, produciendo formas musicales criollas que, en muchos casos, suplantarían a los anteriores, como el sanjuanito, el albazo, el pasacalle, la tonada, conservando sus características tradicionales el yaraví, el yumbo y el danzante. • A finales del siglo XVIII las formas musicales europeas como minuet, vals, polka y mazurka, tuvieron gran acogida en nuestro territorio, especialmente entre las clases sociales elevadas. • En 1797 se radicó en Cuenca el Dr. Antonio Soler, guitarrista español de gran valía, quien formó una especie de academia de música, en la que destacó Miguel Espinoza, quien continuaría como su director. • El Maestro de Capilla mestizo más importante del Quito colonial fue Diego Lobato de Sosa Yarucpalla, hijo del español Juan de Lobato y de una de las esposas del Inca Atahualpa, doña Isabel Yarucpalla, nativa del Cuzco. Estudió en el colegio San Andrés donde “aprendió a cantar y a tocar el órgano con Fray Jodoco Ricke, además estudio lógica filosófica y teología, con los padres dominicos de Quito”. Por sus estudios, Lobato es ordenado sacerdote y ocupa el oficio de organista y maestro de capilla en la Catedral de Quito, donde organizó el coro de criollos e indios e inauguró los dos órganos de la catedral que fueron donados por Lorenzo de Cepeda. • Lobato de Sosa desempeñó gran parte de su vida como organista principal de la Catedral de Quito, “A la voz del padre Diego Lobato acuden (los naturales) como si fuera la voz de su propio emperador inga. Cuando predicaba Diego Lobato, los indios dejaban a otros predicadores, incluso a los recién llegados padres de la Compañía, ellos (los indios) iban con fervor a escuchar sus predicas”. • “En l.595 realizó por encargo del Obispo de la Peña una inspección a la región de los indios Quixos situada en la salida hacia el oriente y aunque su mayor empeño era arrancar a los indios de sus antiguas costumbres de idolatría, era tan amado por ellos que le llamaban "padre" , lo que en este caso significaba mucho más que el común apelativo que se les da a los religiosos; mas, nada de esto le sirvió, pues dada su condición de mestizo, finalmente le fue negada la calidad de canónigo que había solicitado y tanto merecía” • Además Lobato fue autor de varios textos históricos, uno de ellos Historia de los Incas y “el jesuita Manuel Guzmán le tiene en su "Gramática Quichua" editada en Quito en l.920, como uno de los más antiguos quichuistas ecuatorianos por sus predicaciones en dicho idioma, que gozaron en su tiempo de "alta fama”. Las obras musicales, al igual que sus libros, desaparecieron. Se presume que Lobato murió en 1610 en Quito. • • Dentro de la sociedad quiteña se vivía en aquellos años una doble moralidad y religiosidad, entre el dinero y la fe, los burócratas españoles y el clero, la inmoralidad publica y privada y precisamente la figura de Mariana de Jesús Paredes y Flores se abre paso con sus humildad, modestia, los múltiples milagros que se le atribuye, despertando la conciencia religiosa de Quito. • Santa Mariana de Jesús nació en Quito, en 1618. A los cuatro años quedó huérfana de padre y madre y pasó al cuidado de su hermana mayor y de su cuñado. Desde muy pequeñita demostró una gran inclinación hacia la piedad y un enorme aprecio por la pureza, la caridad hacia los pobres, el amor a Dios, a rezar el rosario y a hacer el viacrucis. Aprendió a leer, tocar instrumentos musicales y cantar, todo para la alabanza a Dios. • Llegó a manejar con destreza el ravel, la guitarra y la vihuela, “Tenia una voz suavísima y dulcísima, gracia no común en la ejecución y una pasión dedicada por la música, no dejó pasar un sólo día sin que consagre un rato a este ejercicio. Más aún nunca abusó del talento que Dios le había dado; de suerte que la música era para ella un poderoso auxilio para meditar y levantar su corazón a Dios”. • A Mariana de Jesús se le atribuyen algunos cantos de su autoría y que cantaban en honor a Jesucristo y su pasión en la cruz.