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ATENEO PONTIFICIO REGINA APOSTOLORUM

Facultad de Teología

Análisis narrativo del


inicio del ministerio
de Jesús en Nazaret
(Lc 4, 16-30)

Profesor: Cristóbal Vilarroig, L.C.


Estudiante: Juan Pablo Castañeda R. Z., L.C.
Número de Matrícula: 00010329
PTEO1006 Evangelios sinópticos y Hechos
Roma, 26 de mayo de 2018
2

I. Introducción
1. Pasaje evangélico: Lc 4, 16-30
16
Vino a Nazará, donde se había criado, y entró, según su costumbre, en la sinagoga
el día de sábado. Se levantó para hacer la lectura 17 y le entregaron el volumen del
profeta Isaías. Desenrolló el volumen y halló el pasaje donde estaba escrito:
18
El Espíritu del Señor sobre mí, porque me ha ungido para anunciar a los
pobres la Buena Nueva, me ha enviado a proclamar la liberación a los cau-
tivos y la vista a los ciegos, para dar la libertad a los oprimidos 19 y procla-
mar un año de gracia del Señor
20
Enrolló el volumen, lo devolvió al ministro y se sentó. En la sinagoga todos los
ojos estaban fijos en él. 21 Comenzó, pues, a decirles: «Hoy se ha cumplido esta
Escritura que acabáis de oír.» 22 Todos hacían comentarios sobre él y se extrañaban
de la elocuencia y seguridad con que hablaba.

La gente se preguntaba: «¿Pero no es éste el hijo de José?» 23 Él les respondió:


«Seguramente me vais a aplicar el refrán que dice: Médico, cúrate a ti mismo. Todo
lo que hemos oído que ha sucedido en Cafarnaún, hazlo también aquí en tu patria.»
24
Y añadió: «Os aseguro que ningún profeta es bien recibido en su patria.» 25 «Os
digo de verdad que en vida de Elías, cuando se cerró el cielo por tres años y seis
meses y hubo gran hambre en todo el país, había muchas viudas en Israel; 26 pero
a ninguna de ellas fue enviado Elías, sino a una mujer viuda de Sarepta de Sidón.
27
Y muchos leprosos había en Israel en tiempos del profeta Eliseo, y ninguno de
ellos fue purificado sino Naamán el sirio.» 28 Al oír esto, todos los de la sinagoga
montaron en cólera 29 y, levantándose, lo sacaron fuera del pueblo y lo llevaron a
una altura escarpada del monte sobre el que se elevaba el pueblo, con ánimo de
despeñarlo. 30 Pero él, pasando por medio de ellos, se marchó.1

2. Cuestiones generales

Partiendo de la estructura geográfica del evangelio de Lucas el relato se co-


loca al inicio del ministerio de Jesús en Galilea, despúes de concluir la parte de la
infancia y el díptico introductorio. Aunque el autor toma como fuentes fundamen-
tales el evagelio de Marcos y la denominada fuente Q, es importante señalar que
añade material nuevo y parece fusionar dos eventos independientes en una misma
escena.

Se subraya la presentación pública de Jesús a través del cumplimiento de las


antiguas profecías que hablan de la salvación anunciada a Israel. Como se verá más
adelante, esta obra salvífica se revela no sólo al pueblo elegido, sino que presenta

1
Biblia de Jerusalén, Desclée De Brouwer, Bilbao 20094.
3

un universalismo nuevo, abierto a toda la humanidad. La división del texto coincide


con las secciones de la Biblia de Jerusalén, lo que demuestra la centralidad del texto
frente a la finalidad del autor sagrado.

El contexto espacio-temporal del relato es el pueblo natal de Jesús, Nazará


o Nazaret según las variantes, específicamente durante la lectura de la escritura en
sinagoga el día sábado. El protagonista es sin duda Jesús, que tiene como interlo-
cutores a la gente que acude a escuchar su palabra. Hemos mencionado el hecho
que parece incluir dos escenas distintas en una única narración. Esto se explica por
la aparente anomalía entre la admiración que suscita la primera parte del relato (en
línea con Mc 1, 21ss y Mt 4, 13) y la subsiguiente reacción de la gente (localizada
en Mt 13, 53-58 y en Mc 6, 1-6). La intención del autor es la presentación del mi-
nisterio de Jesús dirigida a los judíos, que rehúsan aceptar el cumplimiento de las
profecías, lo cual abre la esperanza de la salvación universa, tema predilecto de
Lucas.

Además de la forma rara de Nazará, que algunos manuscritos corrigen a


Nazaret, en el v. 18 se tiene la siguiente adición a partir de la LXX: «a curar a los
que tienen destrozado el corazón». De ahí no se presentan otros problemas de crítica
textual.

II. Análisis narrativo


1. Obra profético-salvadora de Jesús

El autor presenta toda su obra en función del significado teológico acerca


de la promesa-cumplimiento (Lc 1,1-4). Este relato muestra no sólo este aspecto,
sino cómo ordena el material hacia ese objetivo. Dividimos el pasaje en dos partes
ya señaladas anteriormente. En la primera parte Jesús se presenta como el profeta
anunciado para la salvación del pueblo, como ya había sido predicho por Isaías.
Precisa el autor afirmando que el cumplimiento se da «hoy», que introduce un tema
4

importante: no se trata del tiempo histórico de Jesús sino del tiempo actual del cum-
plimiento2. En Lucas resalta la importancia de la historia como tiempo de salvación,
en el doble sentido de liberar del mal que amenaza y de otorgar el bien plenamente.
Es la historia de la plena y universal liberación de Dios iniciada con el pueblo de
Israel, llevada a plenitud por Jesucristo y prolongada en la Iglesia hasta el final de
los tiempos.

En la segunda parte se resalta la contraposición de dicha salvación. De la


misma forma que los profetas del Antiguo Testamento sufrieron el rechazo de las
gentes, Jesús no es aceptado ya desde el comienzo de su ministerio. De esta forma
la misión de Jesús se identifica con la del profeta escatológico, que introduce la
historia en la meta-historia, expandiendo el mensaje de salvación a la totalidad de
la humanidad.

2. Desarrollo de la narración

Desde el inicio de la narración Jesús está en sintonía con las tradiciones de


su pueblo. Acude a la sinagoga el día de sábado «según su costumbre» (v. 16). En
el versículo anterior se mostraba a Jesús predicando en las sinagogas, práctica que
continuarán realizando los apóstoles, en especial Pablo (Hch 9, 19b-20). La lectura
de las escrituras constituía una parte escencial de la religiosidad judía. Es por ello
que adquiere un nuevo carácter en la acción de Jesús, que mantiene la continuidad
entre lo antiguo y lo nuevo. El pasaje de Isaías que reporta Lucas es innexacto. Se
trata de una combinación de Is 61, 1-2 e Is 58, 6, que «omite aquellos elementos
que podrían espiritualizar el texto o restringir su focalización sobre el “verdadero”
Israel»3. Jesús hace propia la referencia de la Escritura a sí mismo, pues «ha sido
ungido» (Lc 3, 21-22), anuncia a los pobres el Reino (Lc 6, 20) y sobre todo realiza
los signos que le identifican como el Mesías. Esta interpretación vendrá confirmada
más tarde cuando los discípulos de Juan le pregunten sobre su misión (Lc 7, 18-23).

2
Cf. R. E. BROWN - J. A. FITZMYER - R. E. MURPHY (ED), Nuevo Comentario Bíblico
San Jerónimo, Verbo Divino, Pamplona 2004, 155.
3
Ibidem, 154
5

Lucas describe la escena con un gran dramatismo. Jesús realiza tres accio-
nes: «enrolla» el volumen, lo «devuelve» al ministro y «se sienta» (v. 20). La gente
mantiene los ojos fijos en él, a la espera de la instrucción. Y las palabras de Jesús
causan una gran sensación, al punto que «hacían comentarios» y se «extrañaban»
(v. 23). Pero ¿qué dice para suscitar estas reacciones? Es importante resaltar que
afirma no sólo el cumplimiento de lo que se ha proclamado, sino que se se ha cum-
plido «hoy», por lo que Jesús asume todas las referencias proféticas del texto.

En este punto se divide el relato y Lucas nos presenta un cambio radical en


la actitud de la gente. Al tratarse de una persona conocida por todos desde pequeño
comienzan a preguntarse sobre esas palabras (v. 22). La respuesta de Jesús no se
hace esperar. A diferencia de Marcos y Mateo, Lucas no hace referencia a la falta
de fe de sus conciudadanos como la causa de la ausencia de signos milagrosos entre
ellos. Se añade a esto que los sucesos de Cafarnaúm citados por Jesús serán reali-
zados después de su visita a Nazaret (v. 31ss.). Con todo, la finalidad del autor se
muestra en lo que viene a continuación.

De la misma forma que Elías fue enviado a ayudar a una mujer viuda de
Sarepta de Sidón (1 Re 17, 8-24) y Eliseo a curar a Naamán el sirio (2 Re 5, 1-27)
Jesús no será aceptado en su patria (v. 24). Es una referencia no sólo a su ciudad
natal, sino a la totalidad del pueblo de la Alianza, que no ha aceptado el mensaje de
salvación afirmado por los profetas. De esta forma introduce Lucas otro gran tema:
la promesa de salvación se extiende más allá del pueblo judío a todos los gentiles.
Es por ello que la Buena Nueva de «conversión para perdón de los pecados a todas
las naciones» (Lc 24, 47) deberá ser anunciado «en Jerusalén, en toda Judea y Sa-
maría y hasta los confines de la tierra» (Hch 1, 8).

Por último, todos los presentes se encolerizan con Jesús (v. 28). Entienden
las consecuencias de lo que ha dicho y es por ello por lo que es sacado del pueblo,
señal de su expulsión como integrante del mismo. Se demuestra que la gracia de
Dios no está condicionada por nada. A pesar de esto Jesús se marcha «pasando por
medio de ellos» (v. 30), una alusión al camino que Jesús recorre hacia la victoria de
la Pascua y a la que todos sus discípulos están llamados a recorrer.
6

III. Conclusión
Lucas presenta la misión de Jesús compromentida desde su inicio. Condensa
en este relato los grandes temas desarrollados a lo largo de sus dos obras. El camino
que Jesús realiza hacia Jerusalén será llevado a plenitud con la predicación de sus
apóstoles por todo el mundo. Pero lo más importante es que la llamada a la salva-
ción se revela proféticamente a todos los pueblos.

La interpretación escriturística que hace Lucas, a través de Jesús, resulta


paradigmática: Jesús cumple las esperanzas profundas del pueblo de Israel;
las promesas de Dios hechas desde antiguo tienen en el Maestro su cumpli-
miento. Sin embargo, ante la pérdida de prerrogativas, quienes están en po-
sición de privilegio quieren impedir la misión de Jesús.4

R. AGUIRRE – C. BERNABÉ – C. GIL (ED), Guías de lectura de los evangelios de Mateo,


4

Marcos y Lucas, Verbo Divino, Navarra 2014, 180


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Bibliografía
AGUIRRE, R. – BERNABÉ C. – GIL C., Guías de lectura de los evangelios de Mateo,
Marcos y Lucas, Verbo Divino, Navarra 2014.

Biblia de Jerusalén, Desclée De Brouwer, Bilbao 20094.

R. E. BROWN - J. A. FITZMYER - R. E. MURPHY (ED), Nuevo Comentario Bíblico San


Jerónimo, Verbo Divino, Pamplona 2004.

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