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UNIVERSIDAD TECNOLÓGICA DE SANTIAGO

UTESA
Área de Ciencias y Humanidades
Carrera de Derecho

EL REGISTRADOR DE TÍTULOS Y SU NUEVA


COMPETENCIA DENTRO DEL SISTEMA
INMOBILIARIO SEGÚN LA LEY 108-05

Monografía para optar por el título de


Licenciados en Derecho

PRESENTADA POR:
FERNANDO BLADIMIR GONZÁLEZ 1-05-9020
RAMÓN ANTONIO GARCÍA 97-9300

ASESORES:
ARELYS ROMÁN, MA
DR. MÁXIMO SANTANA

San Felipe de Puerto Plata


República Dominicana
Agosto, 2009
INDICE GENERAL

RESUMEN
INTRODUCCIÓN

CAPÍTULO I. SISTEMA INMOBILIARIO EN LA REPÚBLICA


DOMINICANA

1.1 Origen y Evolución


1.2 Conservaduría de Hipotecas
1.3 Derechos reales inmobiliarios
1.4 Sistema de publicidad inmobiliaria
1.5 Ley 108-05 de Registro Inmobiliario
1.6 Ley 51-07 que modifica la Ley de Registro Inmobiliario
1.7 Reglamentos y normas complementarias

CAPÍTULO II. MARCO INSTITUCIONAL DE LA JURISDICCIÓN


INMOBILIARIA

2.1Composición de la Jurisdicción
2.1.1Tribunales Superiores de Tierras
2.1.2 Tribunales de Jurisdicción Original
2.1.3 Dirección Nacional de Registro de Títulos
2.1.4 Dirección Nacional de Mensura y Catastro
2.1.5 Comisión Inmobiliaria
2.2 Competencia
2.3 Jueces y Funcionarios
2.4 Base del Sistema Registral Inmobiliario

CAPÍTULO III. DIRECCIÓN NACIONAL DE REGISTRO


DE TÍTULOS

3.1 Definición
3.2 Funciones de acuerdo a la Ley 108-05
3.3 Director Nacional del Registro de Títulos
3.3.1 Requisitos del Director Nacional de Registro de Títulos
3.3.2 Funciones del Director Nacional de Registro de Títulos
3.4 Registro de Títulos
3.4.1 Funciones del Registro de Títulos
3.4.2 Organización del Registro de Títulos
3.5 Registradores de Títulos
3.5.1 Requisitos del Registrador de Títulos
3.5.2 Funciones del Registrador de Títulos

CAPÍTULO IV. ANÁLISIS Y PRESENTACIÓN DE LOS


RESULTADOS

4.1 Matriz de las variables e Indicadores del Estudio


4.2 Instrumento aplicado al Registrador de Títulos de Puerto Plata

HALLAZGOS
CONCLUSIONES
RECOMENDACIONES
APÉNDICE
BIBLIOGRAFÍA
RESUMEN
A través de la Ley de Registro Inmobiliario No. 108-05 del 23 de

Marzo del 2005, la República Dominicana refuerza el sistema de registro

inmobiliario, adecuándolo a los tiempos actuales, fortaleciendo la capacidad

de servicio de la administración de justicia y concediéndole singular

importancia a las inversiones inmobiliarias.

Esta Ley 108-05 viene a simplificar y optimizar los procedimientos,

incrementando la celeridad de los mismos facilitando el acceso a la justicia,

todo soportado en las nuevas tecnologías que transforman las prácticas

tradicionales aplicables a la mensura, registro y titulación, lo que hace

posible que los procesos de registros, certificaciones, expediciones sean

viables y rápidos.

La situación actual del sistema inmobiliario en la República

Dominicana es que en las funciones del Registrador de Títulos hay una

trascendencia en cuanto a su fundamento legal dada la publicidad registral a

que se refiere el segundo principio de la ley de jurisdicción inmobiliaria en

donde se presume la exactitud del registro dotando de fe pública a su

constancia. Esto hace suponer que la autoridad de la cosa juzgada se ha


dado a lugar a este paso del procedimiento y, por tanto, hace que no sean

accesibles otros recursos a excepción de la revisión por causa de fraude de

la cual se dispone de un plazo de un año para ser ejercida.

La ley de Registro Inmobiliario ha designado, con categoría de ley,

las funciones del Registro de Títulos imponiendo en el reglamento las

funciones específicas de este órgano tan trascendente dentro de este

ordenamiento. Su relevancia llega al más elemental concepto de estado de

derecho, ya que como es evidente la tierra es la principal fuente de riqueza,

por lo tanto la posesión y propiedad debe estar totalmente garantizada por el

Estado. En tal virtud, es de suma importancia ofrecer informaciones acerca

de las nuevas competencias del Registrador de Títulos, de ahí que sea

importante la realización de esta investigación.

El objetivo general de esta investigación es evaluar la efectividad del

Registrador de Títulos en su competencia dentro del Sistema Inmobiliario

según la Ley 108-05.

El estudio es descriptivo porque se analizaron los cambios

implementados en la Ley 108-05 y se describieron los procedimientos, las


certificaciones y la publicidad. De igual manera se explicaron las diferentes

formas de registros, las condiciones para las emisiones de certificados de

títulos y certificaciones varias.

También el estudio es de tipo bibliográfico, porque se levantó la

información secundaria de libros, leyes, decretos, resoluciones,

reglamentos, gacetas judiciales, folletos, revistas, tesis y monográficos de

estudios realizados precedentemente sobre el Registro Inmobiliario en la

República Dominicana. Por otro lado se realizó una investigación de campo

porque los datos primarios se recogieron mediante una entrevista a la

Registradora de Títulos de Puerto Plata.

Uno de los puntos relevantes del estudio es que en el proceso de

registro de Certificado de Título se incorporan los elementos esenciales del

derecho de propiedad, que son: sujeto, objeto y causa; esto significa que el

mismo debe identificar el o los propietarios del inmueble con sus generales,

su individualización con la designación catastral del inmueble,

especificándose la extensión superficial del mismo, y el plano que le sirve

de base.
Otro hallazgo importante es que a las certificaciones tradicionales se

le ha cambiado la denominación. Las certificaciones Duplicado del

Acreedor Hipotecario ahora se denominan Certificaciones de Registros de

Acreedores, en donde los derechos reales accesorios, las cargas y

gravámenes se acreditan mediante certificaciones, de registro de acreedores

emitidas por el Registro de Títulos, también las certificaciones que antes se

denominaban de cargas y gravámenes, ahora se llaman certificación de

Registro de derechos Reales Accesorios.

Un factor relevante es que a pesar de que las modificaciones de

procedimientos y formas implementadas en la Ley 108-05, el sistema de

emisión de certificados de títulos, expedición de certificaciones y los

asientos registrales se han acelerado poco.

En la actualidad tanto las emisiones de certificados de títulos así

como la inscripción del Inmueble, Certificaciones de Registro de Derechos

Reales Accesorios, Certificaciones con Reserva de Prioridad y

Certificaciones de Registro de Acreedores tardan el mismo tiempo con la

Ley 108-05 que con la Ley 1547.


De igual forma, otro hallazgo importante es que el personal del

Registro de Títulos de Puerto Plata tiene conocimiento acerca de la Ley

108-05 y le han impartido entrenamiento al respecto, sin embargo, al no

contar con personal suficiente, el trabajo sigue acumulándose.

Al finalizar esta investigación se concluyó que la Ley 108-05 de

Registro Inmobiliario de fecha 23 de marzo del 2005, regula el registro de

todos los derechos reales inmobiliarios correspondientes al territorio de la

República Dominicana, la cual se complementa con algunas resoluciones y

reglamentos, siendo uno de esto el Reglamento General de Registro de

Títulos.

Otra conclusión es que para la emisión de certificado de títulos, que

es un documento oficial emitido y garantizado por el Estado Dominicano,

que acredita la existencia de un derecho real y la titularidad del mismo, el

Registrador de Título debe tomar en consideración el sujeto, es decir, se

debe identificar el o los propietarios.

También se concluye que la publicidad de un inmueble se acredita

frente a terceros mediante las certificaciones que emiten los Registros de

Títulos, las cuales son a través de las consultas, informes y certificaciones.


Por último el estudio concluye que los trabajos en el Registro de

Títulos de Puerto Plata no se han agilizado con la entrada en vigencia de la

Ley 108-05 de Registro Inmobiliario, esto se evidencia en el hecho de que

en la actualidad, el proceso para la emisión de un certificado de título, la

expedición de las certificaciones y los asientos registrales en los inmuebles

tardan el mismo tiempo que antes. De igual forma, el estudio concluye que

el Registro de Títulos de Puerto Plata no cuenta con suficiente personal, por

lo que se acumulan los trabajos y esto incide en que el sistema de registro

inmobiliario en esta ciudad sea lento e ineficiente.


INTRODUCCION

La Ley de Registro Inmobiliario No. 108-05 viene a simplificar y

optimizar los procedimientos, incrementando la celeridad de los mismos, y

facilitando el acceso a la justicia, todo soportado en las nuevas tecnologías

que transforman las prácticas tradicionales aplicables a la mensura, registro

y titulación, lo que hace posible que los procesos de registros,

certificaciones, expediciones sean viables y rápidos.

Uno de los desafíos que presenta la sociedad dominicana es el

proceso de modernización de la Jurisdicción de tierras, en cuanto a su

organización, operación y gestión, para hacer posible que la institución y las

organizaciones que la componen puedan responder apropiadamente a los

esfuerzos del desarrollo económico y social del país.

Esta investigación se justifica porque antes de la promulgación de la

Ley 108-05 de Registro Inmobiliario, la capacidad de servicios de la

Jurisdicción de Tierras era ineficiente, lenta e insegura para resolver los

procesos pendientes y lo que surgen cotidianamente por el desarrollo

inmobiliario en la República Dominicana, el cual ha tenido un crecimiento

sostenible en la última década. Por otro lado, con esta investigación se


analizó la competencia del Registro de Títulos y su papel en la

modernización del sistema inmobiliario dominicano, además de tener una

relevancia práctica para los interesados, ya que se identificó si esta nueva

ley y los reglamentos y resoluciones relacionadas, han venido a acelerar el

proceso de registro de los inmuebles.

El Sistema Inmobiliario Dominicano, antes de la entrada en vigencia

de la Ley 108-05, se regulaba mediante la Ley No. 1542 del año 1947

creada mediante Orden Ejecutiva No. 511, la cual no estaba acorde con el

desarrollo inmobiliario que ha tenido la República Dominicana en las

últimas décadas, con lo que contribuía a que el sistema inmobiliario fuera

desfasado e ineficiente.

De acuerdo a estudios realizados en conjunto por la Suprema Corte

de Justicia y la Jurisdicción de Tierras (2003), era imprescindible el

establecimiento de un nuevo modelo organización para la jurisdicción que

contribuyera a la descentralización del sistema, la separación de funciones y

una apropiada asignación de los niveles de responsabilidad, jerarquía y

relaciones adecuada entre las unidades operativas de la institución, a la vez


que simplificará y optimizará los procedimientos incrementando la

celeridad de los mismos.

El objetivo general de esta investigación es evaluar la efectividad del

Registrador de Títulos en su competencia dentro del Sistema Inmobiliario

según la Ley 108-05. Para lograrlo se plantearon tres objetivos específicos:

1. Analizar los cambios implementados en la Ley 108-05 en cuanto al

registro, certificaciones y publicidad.

2. Evaluar la competencia del Registrador de Títulos según la Ley 108-05.

3. Determinar si la nueva competencia del Registrador de Títulos viene a

acelerar el registro inmobiliario.

Esta investigación estuvo delimitada a analizar los cambios

introducidos en la Ley 108-05 en cuanto a los procedimientos de registro de

inmuebles, certificaciones y publicidad. De igual manera, se evaluó si la

nueva competencia del Registrador de Títulos ha cumplido con el propósito

de agilizar los procesos registrales.

Para la recolección de los datos se utilizó un cuestionario con 13

preguntas, el cual se aplicó a la Registradora de Títulos de Puerto Plata. Los

resultados fueron analizados y presentados en forma de ensayo.


En esta investigación se contó con la limitante de la tardanza de la

Registradora de Títulos en contestar las preguntas del instrumento.

La investigación se desarrollo en cuatro capítulos, los cuales se

detallan a continuación:

En el primer capítulo se trató del Sistema Inmobiliario en la

República Dominicana, su origen, evolución, la Conservaduría de

Hipotecas, los derechos reales inmobiliarios, la Ley 108-05 de Registro

Inmobiliario y la Ley 51-07; así como los reglamentos y normas

complementarias.

En el segundo capítulo se presentó el Marco Institucional de la

Jurisdicción Inmobiliaria con su composición, en la que se incluyeron los

Tribunales Superiores de Tierra, los Tribunales de Jurisdicción Original, la

Dirección Nacional de Registro de Títulos y la Dirección Nacional de

Mensura Catastral. También se explicó la competencia de estos

departamentos; así como las funciones de los jueces y funcionarios y la

Base del Sistema Registral Inmobiliario.

En el tercer capítulo se trató todo lo relacionado con la Dirección


Nacional de Registro de Títulos, las funciones de acuerdo a la Ley 108-05,

los requisitos para ser Director de Registro de Títulos, los Registro de

Títulos y el Registrador de Títulos; incluyendo sus requisitos y funciones.

En el cuarto y último capítulo se presentó un análisis de los

resultados de la aplicación del instrumento de recolección de datos y la

matriz de las variables e indicadores del estudio. A continuación se

presentan los hallazgos encontrados, las conclusiones y las

recomendaciones ofrecidas.
CAPÍTULO I. SISTEMA INMOBILIARIO EN LA REPÚBLICA
DOMINICANA

El sistema inmobiliario en la República Dominicana ha tenido varios

períodos desde antes de su descubrimiento hasta hoy en día. A partir del año

2005 se cuenta con una legislación inmobiliaria adecuada a los nuevos

tiempos, la Ley 108-05 que ha venido a revolucionar el sistema inmobiliario

en el país.

Esta Ley 108-05 introduce cambios significativos en el proceso de

registro, saneamiento, certificación, inscripción que garantiza los derechos

reales de los propietarios de los inmuebles. Para la aplicación de esta ley se

han promulgado resoluciones, normas y reglamentos que hacen posible que

la misma sea viable y cumpla con sus objetivos.

1.1 Origen y Evolución

La evolución histórica de la propiedad inmobiliaria en la República

Dominicana se circunscribe a seis grandes períodos en el derecho de tierras.

El primer período se inicia con la "Bula Inter Caétera", o "Noverum

Universi", del Papa Alejandro VI, del 3 de mayo del 1493, en ella se

legitima la conquista del nuevo mundo invistiéndose a la Corona española


con el derecho de propiedad de las tierras descubiertas. En ese período

convivieron la propiedad pública, arbitraria con el uso de la fuerza del

conquistador y la propiedad clandestina de los oprimidos, consistiendo éste

último un uso forzado por las circunstancias que con el tiempo fue creando

derecho.

En 1513 aparecen las primeras disposiciones sobre reparto territorial

en forma legislativa. La merced fue una compensación hecha por el

Monarca de terrenos de su propio patrimonio y del de la Corona por

servicios militares o públicos que incluía el derecho a vender como propios

los terrenos, pasados cuatro años de posesión, constituyéndose como el

sistema legal de adquisición.

Otro medio muy particularmente castellano de adquisición de la

propiedad inmobiliaria fue el de los repartimientos o conjunto de

operaciones mediante las cuales la Corona española administraba y

distribuía las tierras descubiertas. Su interés, para los estudiosos de la

historia del derecho de propiedad en América y en particular para Santo

Domingo, estribaba en que fue el primer sistema establecido por España en

las tierras recién descubiertas a medida que eran arrancadas a los


aborígenes y entregadas a los conquistadores y colonizadores a principios

del siglo XVI.

El segundo período se inicia con la llamada Ley de Amparo Real del

20 de noviembre del 1578, la misma ratifica el derecho de propiedad de la

Corona española sobre las tierras y se establece un procedimiento para

amparar los derechos de propiedad a poseedores que tuvieran una prueba

escrita preexistente basada en la merced.

Más tarde, la Ley de composición de tierras del 17 de marzo del 1631

dispuso que todos los ocupantes de tierras en exceso fueran sometidos a

moderadas composiciones, se les entregaran títulos de sus posesiones y se

les vendiera el resto. Estas dos disposiciones, conjuntamente con la creación

del Consejo de Indias, y las Cédulas Reales, constituyeron lo que se conoce

como las Leyes de Indias. En ellas surgen las "Capitulaciones", o convenios

entre la Corona y un particular.

El tercer período se inicia a raíz de la independencia de 1844, cuando

regía en el país el Código Civil francés de 1804 "napoleónico", que había

sido impuesto por el dominador haitiano desde 1822, con ese hecho

adquiere la nueva República, que surgía libre e independiente, todos los


derechos que sobre estas tierras tenía en su patrimonio la Corona de España.

Como no se había legislado aún de manera especial sobre los terrenos

comuneros, era necesario acudir para la partición de los mismos al Código

de Procedimiento Civil, lo que hacía que una partición fuese un

procedimiento largo, costoso e imperfecto, puesto que la demanda debía ser

notificada a tantas partes como accionistas existieran, corriéndose el riesgo

de que muchas veces después de concluido un procedimiento de partición

apareciera un nuevo accionista que no había sido notificado y cuyos

derechos era preciso tener en cuenta.

El cuarto período comienza con la Ley de División de Tierras

Comuneras del 21 de abril del 1911, durante el gobierno del Presidente

Ramón Cáceres, éste fue el primer intento serio del legislador para

organizar de manera definitiva y realizar el procedimiento de división de

dichos terrenos.

El quinto período surge con la promulgación de la Orden Ejecutiva

511 del 21 de julio del 1920 durante la ocupación militar norteamericana,

que introduce el Sistema Torrens de registro de propiedad inmobiliaria. Ese

sólo hecho representa un acontecimiento legal de trascendental importancia,


que necesariamente tenía que marcar un período en la historia de la

propiedad inmobiliaria en este país. En la República Dominicana fue

promulgada bajo el nombre de la Ley de Registro de Tierras al igual que la

Ley sobre División de Terrenos Comuneros del año 1911 y son los dos

grandes esfuerzos legislativos hechos en el país con el propósito de resolver

el problema de las tierras comuneras y de organizar un sistema de registro

de la propiedad inmobiliaria.

El sexto período nace con la Ley Sobre Registro de Tierras No. 1542,

de fecha 11 de octubre de 1947, legislación netamente dominicana, que

representa un acontecimiento de extraordinaria importancia para la historia,

donde los dominicanos pudieron manifestar la voluntad de darse el régimen

legal de la tenencia de la tierra que nos rige. Luego de esto en el año 2005 se

promulga la Ley 108-05 sobre Registro Inmobiliario que rige hasta la fecha.

1.2 Conservaduría de Hipotecas

En la República Dominicana el Sistema Registral Inmobiliario

participa de una doble naturaleza, tratándose de un inmueble que no haya

sido saneado hasta la obtención del Decreto de registro y hecha su

transcripción, o sea la copia íntegra del mismo en el libro registro de la


oficina del Registro de Títulos correspondiente, se le reserva a la

Conservaduría de Hipotecas. Esta es la instancia legal para hacer oponibles

a terceros las operaciones o negocios con inmuebles no abarcados por el

contenido del artículo 6 de la Ley no. 1542 del año 1947.

En virtud de la Ley 2914, en cada una de las ciudades de las

Provincias o Distritos hay una oficina de Hipotecas que está a cargo del

Director del Registro Civil, y se denomina Conservador de Hipotecas en

caso de muerte o causa mayor sufrida por el Conservador de Hipotecas lo

sustituye un oficial mayor.

En el caso de que en la cabecera de la Provincia no tengan Oficial

mayor, desempeñará las funciones de Director de Registro y Conservador

de Hipotecas el Secretario del Ayuntamiento. (Ley 609 de 1912).

Tienen el deber de llevar seis libros: el primero, libro D, destinado al

asiento, por orden numérico, de los actos que recibe; el libro E para las

inscripciones hipotecarias. Con la inscripción, que consiste en la anotación

de un extracto del acto en el libro indicado, la hipoteca toma rango; el libro

F donde se asientan, con el vaciado íntegro, los actos Traslativos del


derecho de propiedad. Con esa trascripción los actos son oponibles a

terceros; el libro G para la trascripción de los actos de embargos; el libro H

o libro índice para facilitar la búsqueda de cualquier dato en el momento en

que este sea requerido; finalmente, el libro I dedicado a la contabilidad,

donde se asientan los cobros de los derechos fiscales que establece la ley.

Todos los libros, a excepción de los dos últimos, deben ser

autorizados por un auto del Juez Presidente del Juzgado o Cámara Civil de

Primera Instancia.

Antiguamente se usaba un papel sellado. El libro de inscripciones

según la ley debe cerrarse a las seis de la tarde. Actualmente, los

Conservadores se ajustan al horario oficial para las oficinas públicas y

cierran las inscripciones a las 2 y 30 de la tarde. Esta formalidad la certifica

diariamente el Conservador, con una nota puesta al pie del último registro.

La trascripción se realiza en razón de las personas, copiando

íntegramente cada acto, uno seguido del otro, según se van recibiendo,

poniéndole un sello a cada acto con los datos relativos a la trascripción,

como forma probatoria de la ocurrencia, sin necesidad de una certificación


al respecto. Es oportuno destacar que solo los actos "entre vivos", relativos

específicamente a inmuebles, deben ser transcritos. En consecuencia, todo

acto traslativo del derecho de propiedad o susceptible de hipoteca, así como

que contengan renuncia a sus derechos; toda sentencia que contenga

declaración de un inmuebles; todo acto que envuelva venta, permuta,

promesa de venta, retroventa, dación en pago, aportes en naturaleza para

una sociedad, sean estos a títulos onerosos o a título gratuito deben ser

gratuitos. Para la trascripción de los actos a título gratuito, así lo dispone el

Art. 939 del Código Civil.

Por el contrario, aquellos actos que no son traslativos de un derecho

de propiedad sino meramente declarativos de ese derecho, como los que

tienen su origen en una causa de muerte, tal como una partición o

transacción sucesoral que no envuelva renuncia, no tienen que ser

transcritos por considerarse que el heredero es un continuador jurídico de su

causante. Tampoco se transcriben los actos confirmativos de un derecho

como en el caso de una nulidad relativa, a la cual se renuncia o los actos

abdicados como la renuncia a un legado o sucesión ni el acto relativo a un

terreno comunero, los cuales están sometidos al registro de la Ley de 1912.


En cuanto se refiere a la inscripción de los actos, cabe destacar que

junto al título que justifica y constituye la hipoteca, debe someterse una

doble factura de inscripción. Se le llama factura al requerimiento hecho al

Conservador para la inscripción de un crédito.

La firma del notario actuante, la parte diligente o su representante,

debe contener fecha, nombres y generales tanto del deudor como del

acreedor; elección de domicilio de la partes; fecha y naturaleza del título;

importe del capital, término e intereses a devengar, así como la descripción

del inmueble afectado por la hipoteca.

Si esta es convencional, debe anexarse el acto constituido de la

misma; si es judicial, la sentencia en que se fundamenta y si es legal, como

en el caso de la mujer casada, la de los menores en interdicción y la del

estado, los municipios o establecimientos públicos, basta solo la factura.

Cabe destacar, finalmente, que cuando un acto se transcribe, no es necesario

registrarlo ya que según el Art. 7 de la Ley 665 del año 1921, la trascripción

tiene la misma validez y eficacia que el registro.


1.3 Derechos reales inmobiliarios

Andújar (1993, P. 25) indicó que el Derecho Real Inmobiliario es un

derecho absoluto, de contenido patrimonial, cuyas normas sustancialmente

de orden público, establecen entre una persona (sujeto activo) y una cosa

(objeto) una relación inmediata, que previa publicidad, obliga a la sociedad

(sujeto pasivo) a abstenerse de realizar cualquier acto contrario al mismo

(obligación negativa), naciendo para el caso de violación una acción real y

que otorga a sus titulares las ventajas inherentes al ius persequendi y al ius

praeferendi. Este autor lo que quiere decir es que en el derecho real

inmobiliario deben darse tres elementos: la persona, el objeto y la causa.

Ciprian (2003, P.36) define el Derecho Real Inmobiliario como el

poder jurídico que un sujeto ejerce en forma directa e inmediata sobre un

bien que le permite su aprovechamiento total o parcial en sentido jurídico y

es además oponible a terceros. Esto significa que el derecho real

inmobiliario es un derecho absoluto que tiene una persona física o moral

sobre un inmueble y que puede disponer de ella de la forma que considere

pertinente.
Son derechos reales principales el derecho de propiedad y sus

desmembraciones, de los cuales se reconoce como derecho real por

excelencia el derecho de propiedad, siendo las desmembraciones del

derecho real las siguientes: El usufructo, el uso, habitación, las

servidumbres reales, y las enfiteusis.

1.4 Sistema de publicidad inmobiliaria

La constitución y la transferencia de los derechos reales dentro del

tráfico jurídico inmobiliario deben ir acompañada de la garantía de la

publicidad. No basta con que el adquirente de un bien tenga la percepción

exterior de que la persona que le trasmite puede hacerlo, y que no tenga

ninguna limitación para trasmitir, es necesario además una certeza plena de

ese hecho que solo lo brinda la inscripción previa en un registro que

publique la situación real del inmueble objeto de la transacción. La

publicidad es que hace el inmueble oponible a los terceros.

Es ese precisamente y no otro el origen histórico de la institución de

la publicidad inmobiliaria y los registros, la lucha por la seguridad del

tráfico jurídico y contra la clandestinidad de los actos, todo lo que tuvo un

fundamento económico: el florecimiento del crédito territorial vinculado a


la hipoteca y la necesidad de saber si el contratante es el verdadero dueño

del inmueble y puede ofrecerlo en garantía, esa seguridad vigorizó la

circulación de la riqueza y adicionó confiabilidad al negocio y a partir de

entonces esta rama del derecho se ha denominado a partir de una

concepción estrecha de su contenido, Derecho Hipotecario.

Existen dos sistemas de inscripción generalizados: el declarativo y el

constitutivo. El primero, el declarativo, tiene su esencia en la autonomía de

la voluntad y en la traidito romana ó sea la transmisión del bien por el título

y el modo: solo tiene que existir un bien y la forma de trasmitirlo, sin que

para ello sea requisito indispensable la inscripción en un registro público, lo

que no ocurre en los sistemas constitutivos en que dicha inscripción

constituye un requisito “sine equanom” para la validez de dicho acto. En el

sistema inmobiliario dominicano tiene validez la inscripción constitutiva.

1.5 Ley 108-05 de Registro Inmobiliario

A través de la Ley 108-05 de fecha 23 de marzo del 2005 la

República Dominicana refuerza el sistema de registro inmobiliario,

adecuándolo a los tiempos actuales, fortaleciendo la capacidad de servicio


de la administración de justicia y concediéndole singular importancia a las

inversiones inmobiliarias.

Con este proceso de modernización se hace posible que las

instituciones y las organizaciones que componen la Jurisdicción de Tierras,

puedan responder apropiadamente a los esfuerzos del desarrollo económico

y social de la República Dominicana, obteniendo a su vez la

descentralización del sistema, con la separación de funciones y con una

apropiada asignación de niveles de responsabilidad, jerarquía y relaciones

adecuadas entre las unidades operativas de la institución.

De igual manera esta Ley 108-05 simplifica y optimiza los

procedimientos, incrementando la celeridad de los mismos, facilitando el

acceso a la justicia acercando las unidades operativas de la jurisdicción a las

necesidades de los usuarios.

También la Ley 108-05 de Registro Inmobiliario soporta todo el

proceso en las nuevas tecnologías que transforman las prácticas

tradicionales aplicables a la mensura, registro y titulación, y permiten

definir con mayor precisión el objeto del derecho, controlar la


documentación y simplificar y agilizar todo procesos, logrando incluso

simplificar y eficientizar el régimen tributario aplicable en lo relativo al

registro inmobiliario en República Dominicana.

Tomando en esencia el Principio IV que reza "Todo derecho

registrado de conformidad con la presente Ley es imprescriptible y goza de

la protección y garantía absoluta del Estado" se ve el firme interés estatal en

garantizar todos los derechos nacidos a raíz del registro de un inmueble por

parte de ciudadanos nacionales o extranjeros.

Se logra para garantizar estos derechos componer jurisdicciones

representadas por Dirección Nacional de Mensuras y Catastro, Dirección

Nacional de Registro de Tierras, Tribunales Superiores de Tierras y

Tribunales de Jurisdicción Original y la comisión inmobiliaria. En el caso

propio de Los Tribunales Superiores de Tierra se garantizarán fallos justos

y perspicaces, toda vez que la ley crea estos tribunales colegiados

compuestos por 5 jueces, nombrados por la suprema corte de justicia. Las

audiencias serán celebradas por tres jueces cuyas decisiones serán firmadas

por estos.
1.6 Ley 51-07 que modifica la Ley de Registro Inmobiliario

Esta Ley 51-07 modifica varios artículos de la Ley 108-05 de

Registro Inmobiliario.

Dentro de estas modificaciones está el Artículo 2 de la Ley No.108-

05, del 23 de marzo del 2005, sobre Registro Inmobiliario, para que rija del

modo siguiente: “Composición de la jurisdicción. La Jurisdicción

Inmobiliaria está compuesta por los siguientes órganos: Tribunales

Superiores de Tierras y Tribunales de Jurisdicción Original; Dirección

Nacional de Registro de Títulos; Dirección Nacional de Mensuras

Catastrales”.

De igual forma, lo referente al Abogado del Estado, los artículos 11 y

12 fueron modificados y los artículos 15, 16 y 17 referente a la Dirección

Nacional de Mensuras Catastrales. También se modifican los artículos 41 y

42 de la Ley 108-05 sobre los inmuebles que se adquieran por primera vez;

el artículo 108, 109 y 110 sobre el régimen de mensura, designación

catastral y profesionales habilitados.


1.7 Reglamentos y normas complementarias

Para poder implementar tanto la Ley 108-05 de Registro Inmobiliario

como la Ley 51-07 que modifica algunos artículos de esta misma ley, se

hace necesario contar con reglamentos y normas complementarias.

En este sentido hasta el momento se han emitido los siguientes

reglamentos y normas complementarias:

• Reglamento General de los Registros de Títulos que tiene por objeto

regular el funcionamiento de la Dirección Nacional del Registro de Títulos

y de los Registros de Títulos, así como los procedimientos y la forma en

que se registran los derechos reales inmobiliarios de conformidad con la

Ley de Registro Inmobiliario.

•Resolución No. 517 del 2007 que aprueba el Reglamento para el Control y

Reducción de las Constancias Anotadas en los Certificados de Títulos cuyo

objeto es suspender la emisión de las denominadas Cartas Constancias;

•Reglamento de los Tribunales Superiores de Tierra y de Jurisdicción

Original de la Jurisdicción Inmobiliaria;

• Resolución No. 622-2007 del 29 de Marzo del 2007 que aprueba los

formatos del los Certificados de Títulos y Constancias Anotadas y establece

el cobro de nueva tasas las cuales se ordenó fueran aplicadas en un plazo de


90 días a partir de la vigencia de esta Resolución, es decir 90 días luego del

4 de Abril del 2007. Estas tasas deben pagarse por la expedición de

Duplicado por perdida del anterior; expedición de Certificación de Reserva

de Prioridad; Expedición de Certificación de Status Jurídico y Certificación

de Inscripción y Expedición de Derechos Reales Accesorios.


CAPÍTULO II. MARCO INSTITUCIONAL DE LA JURISDICCIÓN
INMOBILIARIA

Después de arduo trabajo del Programa de Modernización de la

Jurisdicción de Tierras (PMJT), que reformaron casi nueve décadas de la

anterior Ley 1542 de Registro de Tierras del año 1947, se promulgó la Ley

108-05 de Registro Inmobiliario con la cual se estableció un nuevo modelo

organizacional en la Jurisdicción Inmobiliaria, que descentraliza el sistema

con la separación de funciones, optimiza los procesos y facilita el acceso de

los usuarios.

Dentro de estas modificaciones se contempla el marco institucional

de la Jurisdicción inmobiliaria que destaca la composición de la

jurisdicción, la competencia, los jueces y funcionarios; así como también la

base del sistema registral inmobiliario.

2.1 Composición de la Jurisdicción

En virtud de la Ley 108-05 de Registro Inmobiliario, la jurisdicción

inmobiliaria está compuesta por los siguientes órganos:

1. Tribunales Superiores de Tierras

2. Tribunales de Jurisdicción Original


3. Dirección de Registro de títulos

4. Dirección de Mensuras Catastrales

Estos órganos que conforman la jurisdicción inmobiliaria son

coordinados por la Suprema Corte de Justicia o por la instancia que ésta

designe para tales fines y para el manejo integral de la Jurisdicción. En

cuanto a este aspecto, el artículo 4 de la Ley 108-05 establece que para el

manejo integral de la Jurisdicción Inmobiliaria los servicios comunes y

administrativos serán prestados por la administración general cuyo titular

será designado por la Suprema Corte de Justicia.

2.1.1 Tribunales Superiores de Tierras

De acuerdo a la Ley 108-05 en su artículo 6, los tribunales superiores

de tierras son tribunales colegiados compuestos por no menos de cinco (5)

jueces designados por la Suprema Corte de Justicia, entre los cuales debe

haber un presidente, los cuales son escogidos de acuerdo a los mecanismos

establecidos por la vía reglamentaria.

Para celebrar audiencia el tribunal superior de tierras estará

integrado por tres (3) jueces. En cuanto a las decisiones serán firmadas por

los mismos y serán adoptadas por mayoría simple.


En relación a la competencia, los tribunales superiores de tierras

conocen en segunda instancia de todas las apelaciones que se interpongan

contra las decisiones emanadas de los tribunales de jurisdicción original

bajo su jurisdicción, así como también en última instancia de las acciones

que le son conferidas expresamente por esta ley. Si se presentare conflicto

de jurisdicción entre tribunales superiores de tierras es competencia de la

Suprema Corte de Justicia atribuir la competencia.

Se crean los siguientes tribunales superiores de tierras:

1) Tribunal Superior de Tierras del Departamento Central;

2) Tribunal Superior de Tierras del Departamento Norte;

3) Tribunal Superior de Tierras del Departamento Noreste;

4) Tribunal Superior de Tierras del Departamento Sur;

5) Tribunal Superior de Tierras del Departamento Este.

Las provincias comprendidas dentro de la jurisdicción de un tribunal

superior de tierras serán definidas por la Suprema Corte de Justicia por vía

reglamentaria.
2.1.2 Tribunales de Jurisdicción Original

Son tribunales unipersonales que constituyen el primer grado de la

Jurisdicción Inmobiliaria. Estos tribunales conocen en primera instancia de

todas las acciones que sean de la competencia de la Jurisdicción

Inmobiliaria, mediante el apoderamiento directo por parte del interesado y

de acuerdo a su delimitación territorial.

La competencia territorial se determina por la ubicación física del

inmueble, conforme a lo establecido en el capítulo de esta ley relativo a la

Secretaría de los Despachos Judiciales. Todo Tribunal de Jurisdicción

Original se encuentra dentro de la jurisdicción de un Tribunal Superior de

Tierras. Los tribunales de jurisdicción original gozan de plenitud de

jurisdicción dentro del distrito judicial al que pertenecen.

2.1.3 Dirección Nacional de Registro de Títulos

Álvarez (2001) indica que la Dirección Nacional de Registro de

Títulos es el órgano de carácter nacional dentro de la Jurisdicción

Inmobiliaria encargado de coordinar, dirigir y regular el desenvolvimiento

de las oficinas de Registro de Títulos, velar por el cumplimiento de esta ley

en el ámbito de su competencia y por el cumplimiento del reglamento


General de Registros de Títulos. La misma está a cargo de un Director

Nacional, cuyos requisitos están especificados en el mismo reglamento.

Las Oficinas de Registro de Títulos están supeditadas

jerárquicamente a la Dirección Nacional de Registro de Títulos y sus

funciones son registrar los derechos inmobiliarios, velar por la correcta

aplicación de la ley dentro de su competencia y cumplir con todas aquellas

funciones que se les asigne por la vía reglamentaria.

En relación con su delimitación territorial las oficinas de Registro de

Títulos se encuentran vinculadas a uno o varios tribunales de jurisdicción

original y a un único Tribunal Superior de Tierras. Estas oficinas de

Registro de Títulos están a cargo de un Registrador de Títulos.

2.1.4 Dirección Nacional de Mensura y Catastro

La Dirección Nacional de Mensuras y Catastro es el órgano de

carácter nacional dentro de la Jurisdicción Inmobiliaria encargado de

coordinar, dirigir y regular el desenvolvimiento de las Direcciones

Regionales de Mensuras y Catastro, velar por el cumplimiento de esta ley

en el ámbito de su competencia y por el cumplimiento del reglamento

General de Mensuras y Catastro. También ofrece el soporte técnico a la


Jurisdicción Inmobiliaria en lo referente a las operaciones técnicas de

mensura y catastro; el lugar de su sede y sus funciones son establecidas por

la Suprema Corte de Justicia por la vía reglamentaria.

La Dirección Nacional de Mensuras y Catastro está a cargo de un

Director Nacional que será nombrado por la Suprema Corte de Justicia. Las

Direcciones Regionales de Mensuras y Catastro. Están supeditadas

jerárquicamente a la Dirección Nacional de Mensuras y Catastro y su

función es velar por la correcta aplicación de esta ley y del Reglamento

General de Mensuras y Catastro. Las Direcciones Regionales de Mensuras

y Catastro están a cargo de un Director Regional de Mensuras y Catastro.

2.1.5 Comisión Inmobiliaria

Es un organismo colegiado ante la Jurisdicción Inmobiliaria y está

conformada por tres miembros, un miembro nombrado por el Poder

Ejecutivo, un miembro nombrado por la Suprema Corte de Justicia y un

miembro nombrado por el Congreso Nacional de la República. La

Comisión Inmobiliaria dispone para el cumplimiento de sus dictámenes del

auxilio de la fuerza pública.


Para ser miembro de la Comisión Inmobiliaria se requieren las

mismas condiciones que para ser Ministerio Público ante la Corte de

Apelación en la Jurisdicción Ordinaria. A partir de su designación

permanecerán como miembros de la Comisión de manera inamovible por

un período de cuatro (4) años, y podrán ser ratificados por el organismo que

los designó. Podrán ser destituidos en cualquier momento por la comisión

de faltas graves.

El presidente de la Comisión es el miembro elegido por la Suprema

Corte de Justicia. Las decisiones de la Comisión son válidas con un mínimo

de voto favorable de dos (2) de sus miembros. Se le concede a la Comisión

establecer por la vía reglamentaria las demás funciones para el mejor

desenvolvimiento de la misma.

Las comisiones inmobiliarias tienen los abogados ayudantes que

fueren necesarios para asistirlos en el correcto desempeño de sus funciones,

quienes son nombrados por cada comisión de un listado presentado para

esos fines por el Consejo de la Escuela del Ministerio Público. La Comisión

Inmobiliaria tiene a su cargo la protección y representación del Estado

Dominicano y de los particulares en todos los procedimientos que así lo


requieran ante la Jurisdicción Inmobiliaria, a la vez que ejerce las funciones

de Ministerio Público ante esta Jurisdicción, y en función de esto la

Comisión Inmobiliaria es competente para someter ante la jurisdicción que

corresponda a los autores de las infracciones castigadas por la ley para que

se les impongan, si procede, las sanciones establecidas.

Esta Comisión Inmobiliaria también emite dictámenes, opiniones,

mandamientos y todas las demás atribuciones que como Ministerio Público

le corresponda. Ejecuta las sentencias penales dictadas por la Jurisdicción

Inmobiliaria, y las demás decisiones que sean susceptibles de ejecución

forzosa y emite su opinión en el proceso de saneamiento a la vez que

participa como Ministerio Público en el proceso de revisión por causa de

fraude. Como se puede apreciar la Comisión Inmobiliaria tiene múltiples

funciones importantes dentro del sistema inmobiliario.

2.2 Competencia

La jurisdicción inmobiliaria tiene competencia exclusiva para

conocer de todo lo relativo a derechos inmobiliarios y su registro en la

República Dominicana desde que se solicita la autorización para la mensura

y durante toda la vida jurídica del inmueble, salvo los casos expresamente
señalados en la Ley 108-05. Los embargos inmobiliarios, y los

mandamientos de pagos tendentes a esos fines son de la competencia

exclusiva de los tribunales ordinarios y no de la Jurisdicción Inmobiliaria,

aún cuando la demanda se relacione con la propiedad del inmueble cuya

expropiación se persiga, o con cualquier derecho susceptible de registrar y

aún cuando dicho inmueble esté en proceso de saneamiento.

2.3 Jueces y Funcionarios

Los jueces y funcionarios de la jurisdicción inmobiliaria son

designados por la Suprema Corte de Justicia de acuerdo a los

procedimientos establecidos para tales fines y que los mismos deben reunir

las condiciones requeridas por la Ley, cumplir con los deberes y gozar de

los derechos establecidos por la Constitución de la República Dominicana,

la Ley de Organización Judicial, la Ley de Carrera Judicial, la Ley 108-05 y

sus reglamentos.

Los jueces y funcionarios de la Jurisdicción Inmobiliaria son

designados por la Suprema Corte de Justicia de acuerdo a los

procedimientos establecidos para tales fines. Los jueces de los tribunales

superiores de tierras y los de los tribunales de jurisdicción original deben


reunir las condiciones requeridas por la ley, cumplir con los deberes y gozar

de los derechos establecidos por la Constitución de la República

Dominicana, la ley de Organización Judicial, la ley de Carrera Judicial, la

presente ley y sus reglamentos.

Los requisitos para todos los demás funcionarios de la Jurisdicción

Inmobiliaria son los establecidos por vía reglamentaria por la Suprema

Corte de Justicia. Los agrimensores, cuando ejecutan mensuras o

modificaciones parcelarias se convierten en oficiales públicos y auxiliares

de la justicia, sometidos al cumplimiento de la ley.

2.4 Base del Sistema Registral Inmobiliario

El artículo 23 de la Ley 108-05 establece que la base del sistema

registral inmobiliario dominicano es el inmueble, sobre el que se realizan

todos los asientos de inscripciones, anotaciones y cancelaciones de derechos

reales, cargas y gravámenes.

Se considera inmueble registrado a toda parcela o superficie de

terreno, con todo lo edificado, clavado, plantado y adherido al suelo,

individualizado mediante un plano de mensura con una designación


catastral, sobre el que existe un derecho de propiedad registrado en los

Registros de Títulos.

Las modalidades de inmuebles son:

a) La Parcela, denominándose así a la extensión territorial continua,

delimitada por un polígono cerrado de límites, objeto de un derecho de

propiedad o copropiedad registrado, cuya existencia y elementos esenciales

han sido comprobados y determinados mediante un acto de levantamiento

parcelario documentado, aprobado y asentado en la Dirección Regional de

Mensuras y Catastro y en el Registro de Título correspondientes.

b) Unidad de Condominio, denominándose así a la unidad resultante

de la afectación de una parcela al régimen de condominio, cuya existencia y

elementos esenciales han sido aprobados y asentados en la Dirección

Regional de Mensuras y Catastro y en el Registro de Títulos

correspondientes.

Ciprián (2003) señala que la Mejora es todo lo edificado, clavado,

plantado y adherido al terreno, con carácter permanente o temporal, que

aumente su valor. Sólo se anotarán las mejoras permanentes sobre

inmuebles registrados. Las mejoras permanentes a favor de terceros sólo se

anotarán en el Registro Complementario del Inmueble:


(i) cuando una decisión de un Tribunal de la Jurisdicción Inmobiliaria

así lo ordene como consecuencia del proceso judicial de saneamiento; o

(ii) con el consentimiento expreso del dueño del inmueble contenido

en un acto auténtico.

Si un Juez o Tribunal ordenara el registro de una mejora a favor del

propietario del inmueble, se consignará en el Certificado de Título.

Los derechos reales, cargas, gravámenes y medidas provisionales

sobre inmuebles registrados se inscriben, anotan o cancelan a solicitud

expresa de parte interesada o por disposición de Juez o Tribunal

competente. Las inscripciones y anotaciones se producen a pedido de:

a. El o los propietarios del inmueble, por si mismos o por

intermedio de su representante, si lo hubiere.

b. El o los beneficiarios de derechos reales, carga o gravamen que

se pretende inscribir, anotar y/o cancelar, por si mismos o por

intermedio de su representante, si lo hubiere.

c. El Juez o Tribunal, en caso de inscripciones, anotaciones y/o

cancelaciones ordenadas judicialmente.


Con posterioridad al primer registro, para ejecutar actos por los

cuales se constituyan, transmitan, declaren, modifiquen o extingan derechos

reales, cargas o gravámenes sobre inmuebles, se requiere que previamente

conste registrado el derecho de la persona que otorga, o en cuyo nombre se

otorgan los mismos. La prioridad para inscripciones o anotaciones se rigen

por la fecha y hora de ingreso del expediente al Registro de Títulos.

Cuando un negocio jurídico está garantizado por una certificación

con reserva de prioridad, su fecha de prioridad será la de la anotación que le

sirve de base, que es la fecha y hora de ingreso del expediente al Registro

de Títulos.

Cuando en un mismo expediente se generen dos (2) o más asientos

registrales relativos a un mismo inmueble, el orden para la inscripción o

anotación le será concedido a aquel que sirva de causa y del cual dependan

los demás.

El derecho del disponente debe estar debidamente justificado con el

correspondiente asiento en el Registro de Títulos. Para transferir un

inmueble, el o los propietarios, deben tener la libre disponibilidad del

mismo.
CAPITULO III. DIRECCION NACIONAL DE REGISTRO DE
TITULOS
La Dirección Nacional de Registro de Títulos cuenta con un

Reglamento General de Registros de Títulos que complementa la Ley 108-

05 de Registro Inmobiliario del 23 de marzo del 2005, y es de aplicación en

todo el territorio de la República Dominicana. Este reglamento tiene por

objeto regular el funcionamiento de la Dirección Nacional de Registro de

Títulos y los Registros de Títulos, así como el procedimiento y la forma en

que se registran los derechos reales inmobiliarios de conformidad con la

Ley.

3.1 Definición

La Dirección Nacional de Registro de Títulos es un órgano de

carácter nacional dentro de la Jurisdicción Inmobiliaria que depende de la

Suprema Corte de Justicia. Tiene su sede en la ciudad de Santo Domingo de

Guzmán, Distrito Nacional y se encuentra a cargo de un Director Nacional.

3.2 Funciones de acuerdo a la Ley 108-05

Las funciones de la Dirección Nacional de Registro de Títulos son:

a) Coordinar, dirigir y regular el funcionamiento de los Registros de

Títulos.
b) Velar por el cumplimiento de la Ley de Registro Inmobiliario y sus

Reglamentos, así como de otras leyes en el ámbito de su competencia.

c) Velar por el mantenimiento adecuado del registro de firmas y sellos de

los funcionarios de los Registros de Títulos habilitados para emitir

documentos oficiales.

d) Proporcionar, cuando sea necesario, asistencia técnica en materia

registral a los Registros de Títulos.

e) Estandarizar los formularios, sellos y demás documentos de los Registros

de Títulos.

f) Proponer a la Suprema Corte de Justicia aquellas modificaciones que

estime convenientes para mejorar y mantener permanentemente

actualizados la reglamentación y/o legislación aplicables al registro de

derechos inmobiliarios.

g) Unificar los procedimientos y las técnicas registrales en los Registros de

Títulos, relacionado con la aplicación de la Ley de Registro Inmobiliario y

sus Reglamentos en cuestiones de su competencia.

h) Velar por la oportuna recolección y publicación de los datos estadísticos

de los Registros de Títulos

i) Establecer indicadores de gestión que permitan controlar y calificar el

servicio que prestan los Registros de Títulos.


k) Promover la capacitación y desarrollo del personal de la Dirección

Nacional de Registro de Títulos y de los Registros de Títulos, a los efectos

de optimizar el funcionamiento del organismo.

l) Proponer a la Suprema Corte de Justicia la celebración de convenios

institucionales con entes oficiales o privados nacionales e internacionales,

con arreglo a las disposiciones vigentes.

3.3 Director Nacional del Registro de Títulos

El Director Nacional de Registro de Títulos es designado y removido

por la Suprema Corte de Justicia

3.3.1 Requisitos del Director General de Registro de Títulos

Para ser Director Nacional de Registro de Títulos, se requiere:

a) Ser dominicano, mayor de edad y estar en el pleno goce de los derechos

civiles y políticos.

b) Ser licenciado o doctor en Derecho.

c) No haber sido condenado a pena aflictiva o infamante, ni haber sido

sancionado disciplinariamente de manera definitiva por el Colegio de

Abogados o la Suprema Corte de Justicia, salvo la amonestación.

d) Haber ejercido la profesión de abogado con un mínimo de cinco (5) años.


e) Aprobar las pruebas generales de ingreso para ser empleado del Poder

Judicial.

f) Aprobar las pruebas específicas de capacidad para el desempeño del

cargo previstas por el Poder Judicial.

g) Ser o haber sido Registrador de Títulos, preferiblemente.

3.3.2 Funciones del Director Nacional de Registro de Títulos

Son funciones del Director Nacional de Registro de Títulos:

a) Coordinar, dirigir, supervisar y regular el funcionamiento de los

Registros de Títulos.

b) Establecer criterios tendentes a ofrecer una efectiva y rápida prestación

de los servicios de la Dirección Nacional y de los Registros de Títulos.

c) Procurar la uniformidad de criterios en la interpretación y aplicación de

las normas legales y técnicas aplicables en materia registral.

d) Elaborar y proponer a la Suprema Corte de Justicia políticas y

normativas que tengan por objeto mejorar el servicio ofrecido por la

Dirección Nacional y los Registros de Títulos.

e) Aprobar los formularios, formatos y procedimientos que se utilicen en la

Dirección Nacional y en los Registros de Títulos, siendo responsable de su

estandarización e implementación.
f) Velar por la integridad, conservación y actualización de los archivos

físicos y/o digitales de la Dirección Nacional y de los Registros de Títulos,

cuando proceda.

g) Mantener actualizados los datos estadísticos de la Dirección Nacional y

de los Registros de Títulos.

h) Establecer indicadores de gestión que permitan controlar y calificar la

gestión del servicio que prestan los Registros de Títulos.

i) Conocer y resolver los recursos jerárquicos interpuestos contra actos

administrativos de los Registros de Títulos.

j) Poner en conocimiento de la autoridad que corresponda cualquier intento

de cometer actos ilícitos, así como cualquier acto que, ejecutado, presuma

tener el mismo carácter.

k) Cubrir provisionalmente las vacantes del personal de la Dirección

Nacional y de los Registros de Títulos cuando sea necesario.

l) Contribuir con la Suprema Corte de Justicia en el reemplazo definitivo

del personal de la Dirección Nacional y de los Registros de Títulos.

m) Convocar a los Registradores de Títulos del país para reuniones

periódicas ordinarias o extraordinarias para tratar asuntos relativos a la

gestión de los Registros de Títulos.


n) Autorizar por escrito las solicitudes de reconstrucción de Certificados de

Títulos o un Registro Complementario, cuando así proceda.

ñ) Custodiar y administrar los formatos preimpresos en papel de seguridad

de los certificados de títulos y demás documentos que utilicen los Registros

de Títulos en la prestación de sus servicios.

3.4 Registro de Títulos

Los Registros de Títulos son dependencias de la Dirección Nacional

de Registro de Títulos y se encuentran a cargo de un Registrador de Títulos

quienes son designados, trasladados y removidos por la Suprema Corte de

Justicia.

3.4.1 Funciones del Registro de Títulos

Las funciones de los Registros de Títulos son

a) Velar por el cumplimiento de la Ley de Registro Inmobiliario y sus

Reglamentos, así como de otras leyes en el ámbito de su competencia.

b) Registrar los derechos, cargas y gravámenes sobre inmuebles de

conformidad con la Ley de Registro Inmobiliario y sus Reglamentos.

c) Emitir los Certificados de Títulos y sus correspondientes duplicados y/o

extractos.
d) Llevar y mantener actualizado el Registro Complementario.

e) Emitir certificaciones, según corresponda.

f) Rechazar las actuaciones sometidas a su consideración cuando las

mismas no sean procedentes.

g) Llevar y mantener actualizados los distintos libros y registros que

sustenten la publicidad inmobiliaria y velar por su custodia y conservación,

hasta que los mismos sean entregados de manera definitiva al Archivo

Central de la Jurisdicción Inmobiliaria.

h) Dar publicidad a los derechos registrados sobre inmuebles y el estado

jurídico de los mismos.

i) Velar por la integridad, conservación y actualización de los archivos

físicos a cargo del Archivo Activo, hasta que los mismos sean entregados

de manera definitiva al Archivo Central.

j) Ofrecer la debida orientación al usuario acerca de los trámites

comprendidos en el ámbito de su competencia.

3.4.2 Organización del Registro de Títulos

Los Registros de Títulos, sus sedes y competencia territorial son:

a) Registro de Títulos de Baní, con sede en la ciudad de Baní y competencia

sobre las provincias de Azua, San José de Ocoa y Peravia.


b) Registro de Títulos de Barahona, con sede en la ciudad de Santa Cruz de

Barahona y competencia sobre las provincias de Bahoruco, Barahona,

Independencia y Pedernales.

c) Registro de Títulos de Bonao, con sede en la ciudad de Bonao y

competencia en la provincia de Monseñor Nouel.

d) Registro de Títulos de Cotuí, con sede en la ciudad de Cotuí y

competencia sobre la provincia Sánchez Ramírez.

e) Registro de Títulos del Distrito Nacional, con sede en la ciudad de Santo

Domingo de Guzmán y competencia sobre la provincia de Santo Domingo

y el Distrito Nacional.

f) Registro de Títulos de El Seibo, con sede en la ciudad de Santa Cruz del

Seibo y competencia sobre las provincias de El Seibo y Hato Mayor.

g) Registro de Títulos de Higüey, con sede en la ciudad de Salvaleón de

Higüey y competencia sobre la provincia de La Altagracia.

h) Registro de Títulos de La Vega, con sede en la ciudad de Concepción de

La Vega y competencia en la provincia de La Vega.

i) Registro de Títulos de Mao, con sede en la ciudad de Mao y competencia

sobre la provincia de Valverde.

j) Registro de Títulos de Moca, con sede en la ciudad de Moca y

competencia sobre la Provincia de Espaillat.


k) Registro de Títulos de Monte Cristi, con sede en la ciudad de San

Fernando de Monte Cristi y competencia sobre las provincias de Dajabón y

Monte Cristi.

l) Registro de Títulos de Monte Plata, con sede en la ciudad de Monte Plata

y competencia sobre la provincia de Monte Plata.

m) Registro de Títulos de Nagua, con sede en la ciudad de María Trinidad

Sánchez Nagua y competencia sobre la provincia de María Trinidad

Sánchez.

n) Registro de Títulos de Puerto Plata, con sede en la ciudad de San Felipe

de Puerto Plata y competencia sobre la provincia de Puerto Plata.

o) Registro de Títulos de Salcedo, con sede en la ciudad de Salcedo y

competencia sobre la provincia de Salcedo.

p) Registro de Títulos de Samaná, con sede en la ciudad de Santa Bárbara

de Samaná y competencia sobre la provincia de Samaná.

q) Registro de Títulos de San Cristóbal, con sede en la ciudad de San

Cristóbal y competencia sobre la provincia de San Cristóbal.

r) Registro de Títulos de San Francisco de Macorís, con sede en la ciudad

de San Francisco de Macorís y competencia sobre la provincia de Duarte.

s) Registro de Títulos de San Juan de la Maguana, con sede en la ciudad de

San Juan de la Maguana y competencia sobre las provincias de Elías Piña y


San Juan.

t) Registro de Títulos de San Pedro de Macorís, con sede en la ciudad de

San Pedro de Macorís y competencia sobre las provincias de La Romana y

San Pedro de Macorís.

u) Registro de Títulos de Santiago de los Caballeros, con sede en la ciudad

de Santiago de los Caballeros y competencia sobre la provincia de Santiago.

v) Registro de Títulos de Santiago Rodríguez, con sede en la ciudad de San

Ignacio de Sabaneta y competencia sobre la provincia de Santiago

Rodríguez.

3.5 Registradores de Títulos

Los Registradores de Títulos son los funcionarios encargados de los

Registros de Títulos en sus diferentes

3.5.1 Requisitos del Registrador de Títulos

Para ser Registrador de Títulos se requiere:

a) Ser dominicano, mayor de edad y estar en el pleno goce de los derechos

civiles y políticos.

b) Ser licenciado o doctor en Derecho.


c) No haber sido condenado a pena aflictiva o infamante ni haber sido

sancionado disciplinariamente de manera definitiva por el Colegio de

Abogados o la Suprema Corte de Justicia, salvo la amonestación.

d) Haber ejercido la profesión de abogado con un mínimo de tres (3) años.

e) Aprobar las pruebas generales de ingreso para ser empleado del Poder

Judicial.

f) Aprobar las pruebas específicas de capacidad para el desempeño del

cargo previstas por el Poder Judicial.

g) Ser o haber sido empleado de un Registro de Títulos, preferiblemente.

3.5.2 Funciones de los Registradores de Títulos

Los Registradores de Títulos tienen la función de:

a) Coordinar, dirigir y regular el correcto funcionamiento del Registro de

Títulos a su cargo y del personal bajo su dependencia.

b) Cumplir los principios registrales y ejercer la función calificadora de los

documentos que le son presentados como base de una actuación registral.

c) Pronunciarse definitivamente, dentro un plazo no mayor de cuarenta y

cinco (45) días hábiles contados a partir de la fecha de recepción de las

solicitudes que le son sometidas al Registro de Títulos.


d) Revisar y firmar los Certificados de Títulos y sus correspondientes

duplicados y/o extractos, cuando así corresponda.

e) Revisar y firmar los asientos registrales que se realizan en los registros

complementarios, cuando así corresponda.

f) Revisar y firmar las certificaciones, cuando así corresponda.

g) Revisar y firmar los oficios de rechazo de las actuaciones, cuando así

corresponda.

h) Cumplir los requisitos de forma y fondo establecidos en la ley y el

presente Reglamento para la emisión, conservación y secuencia cronológica

de la ejecución de los Certificados de Títulos y sus correspondientes

Duplicados.

i) Solicitar diagnósticos catastrales, cuando así corresponda.

j) Pronunciarse dentro del plazo de quince (15) días sobre las solicitudes de

reconsideración.

k) Rectificar los errores puramente materiales detectados en los Certificados

de Títulos y en los registros complementarios, de conformidad con la ley y

el presente Reglamento tal como se establece en el capítulo correspondiente

a las Rectificaciones.
l) Informar a la Dirección Nacional de Registro de Títulos de cualquier

situación irregular, así como de cualquier intento de cometer actos ilícitos, o

de cualquier acto que, ejecutado, presuma tener el mismo carácter.

m) Velar por la integridad, conservación y actualización de los archivos

físicos a cargo del Archivo Activo, hasta que los mismos sean entregados

de manera definitiva al Archivo Central; debiendo informar al Director

Nacional de Registro de Títulos cuando considere que los mismos se

encuentren en peligro o desprotegidos.

n) Elaborar y remitir periódicamente al Director Nacional de Registro de

Títulos su reporte de desempeño con los datos estadísticos del Registro de

Títulos a su cargo.

o) Preservar la integridad de la información y la estructura de tractos que

contiene la base de datos registral, cuando se utilice el sistema

automatizado, siendo responsable de las modificaciones que se introduzcan

a la misma.
CAPITULO IV. ANALISIS Y PRESENTACION DE LOS
RESULTADOS
El capítulo IV de este trabajo de investigación presenta un análisis de

los resultados, comenzando con la matriz de las variables y los indicadores

del estudio con sus respectivos objetivos, los principales hallazgos,

conclusiones arribadas y las recomendaciones ofrecidas.

El objetivo general de esta investigación es evaluar la efectividad del

Registrador de Títulos en su competencia dentro del sistema inmobiliario

según la Ley 108-05.

De acuerdo al Reglamento General del Registro de Títulos (2007,

artículo 13) los Registradores de Títulos están a cargo de las oficinas de

Registros de Títulos y son designados, trasladados y removidos por la

Suprema Corte de Justicia y dentro de sus funciones principales están

coordinar, dirigir y regular el correcto funcionamiento del Registro de

Títulos a su cargo y del personal bajo su dependencia.

Bengoa (2006, P. 62) en un estudio realizado en la PUCMM, expresa

que el Registrador de Títulos, en virtud de la Ley 108-05 de Registro

Inmobiliario, tiene un papel preponderante en todo el sistema inmobiliario


dominicana, porque se le asigna, ante todo, velar por el cumplimiento de

esta ley en el ámbito de su competencia y por el cumplimiento del

Reglamento General de Registro de Títulos.

Otra tesis sobre el tema fue realizada por Brito (1996, P. 16) en la

cual concluyó que por el desarrollo inmobiliario de la última década, se

hacía imprescindible que los Registros de Títulos se modernizaran con

tecnología y una reorganización de sus funciones.

En esta investigación se plantearon algunas interrogantes, dentro de

las cuales están: ¿Ha sido efectiva esta Ley 108-05 para agilizar el proceso

de registro inmobiliario en Puerto Plata? ¿Cuáles son los mecanismos

nuevos de la Ley 108-05? ¿Eran necesarias estas modificaciones? ¿Está el

Registrador de Títulos en Puerto Plata y su personal preparado para aplicar

la Ley 108-05? ¿Qué tiempo se tarda el proceso de certificación, asiento,

expedición de certificados de títulos?

El instrumento utilizado para la recolección de datos es un

cuestionario que consta de 13 preguntas cerradas, el cual se le aplicó a la

Registradora de Títulos de Puerto Plata, este ha sido presentado en forma de

ensayo.
4.1 Matriz de las variables e indicadores del estudio

Objetivos Variables Definición de Indicadores Objetivos de los Fuentes


Específicos variables indicadores
1. Analizar los cambios 2.1 Cambios 2.1.1 Se refiere a las 2.1.1.1 2.1.1.1.1 Identificar los diferentes 2.1.1.1.1.1 Bibliográfica
implementados en la Ley implementados modificaciones que se Procedimiento cambios en el proceso de registro de
108-05 en cuanto al introducen en la Ley inmuebles.
registro, certificaciones y 108-05 2.1.1.2 2.1.1.1.2 Evaluar el proceso de la 2.1.1.1.1.2 Bibliográfica
publicidad Certificaciones emisión de las certificaciones.
2.1.1.3 Publicidad 2.1.1.1.3 Analizar los cambios 2.1.1.1.1.3 Bibliográfica
introducidos en la Ley 108-05 en
cuanto a la publicidad..
2. Evaluar la 1.1 Competencia 1.1.1 Se refiere a las 1.1.1.1 Tipo de 1.1.1.1.1 Identificar los tipos de 1.1.1.1.1.1 Bibliográfica
competencia del nuevas funciones que Registro registros que son competencia del
Registrador de Títulos tiene el Registrador de Registrador de Títulos
según la Ley 108-05. Títulos en virtud de la 1.1.1.2 Emisión de 1.1.1.1.2 Evaluar las condiciones bajo 1.1.1.1.1.2 Bibliográfica
Ley 108-05. Certificados las cuales el Registrador de Títulos
emite un certificado de títulos.
1.1.1.3 Emisión de 1.1.1.1.3 Determinar las diferentes 1.1.1.1.1.3 Bibliográfica
Certificaciones certificaciones que puede emitir el
Registrador de Títulos.
3. Determinar si la nueva 3.1 Aceleración del 3.1.1 Se refiere a la 3.1.1.1 Mecanismos 3.1.1.1.1 Determinar si los 3.1.1.1.1.1 Instrumento aplicado a
competencia del Registro rapidez con que el mecanismos utilizados agilizan los la Registradora de Títulos de
Registrador de Título Inmobiliario Registrador de Títulos procesos en el registro inmobiliario Puerto Plata
viene a acelerar el realiza el registro de 3.1.1.2 3.1.1.1.2 Identificar si el personal del 3.1.1.1.1.2 Instrumento aplicado a
registro inmobiliario inmuebles. Conocimiento del Registro de Títulos tiene conocimiento la Registradora de Títulos de
personal de los nuevos procesos. Puerto Plata.
3.1.1.3 Agilización 3.1.1.1.3 Determinar si los trabajos del 3.1.1.1.1.3 Instrumento aplicado a
en los trabajos Registro de Títulos se han agilizado la Registradora de Títulos de
con la Ley108-05. Puerto Plata.
4.2 Instrumento aplicado a la Registradora de Títulos de Puerto Plata

La Registradora de Títulos expresó que tanto la emisión de

certificados de títulos como la certificación de registro de derechos reales

accesorios sufrieron cambios con la Ley 108-05 de Registro Inmobiliario.

De igual forma precisó que es poco lo que ha acelerado el proceso de

registro con los nuevos mecanismos establecidos en dicha ley y que sin

embargo, estas modificaciones eran necesarias.

También la entrevistada manifestó que el personal de Registro de

Títulos de Puerto Plata tiene mucho conocimiento acerca de la Ley 108-05.

En ese sentido, se le ha impartido entrenamiento acerca de los nuevos

procesos y los mismos se corresponden mucho con las actividades diarias

del Registro de Títulos en cuanto a los procesos y requisitos.

Por otro lado, la Registradora de Títulos expresó que en poco se han

agilizado los trabajos en el Registro de Títulos de Puerto Plata. Antes de la

Ley 108-05 se tardaba más de 21 días el proceso de certificación de registro

de derechos reales accesorios y en la actualidad, con la nueva ley, también

se tarda más de 21 días.


En cuanto a la expedición de certificados de títulos, la entrevistada

expresó que antes de entrada en vigencia de la Ley 108-05 se tardaba de 3 a

4 meses, dependiendo de las diligencias y que ahora se tarda los mismos (3

a 4 meses), en virtud del cúmulo de trabajos y el poco personal.

Por último, la Registradora manifestó que los asientos registrales en

virtud de la Ley 1542 se tardaban de 3 a 4 meses, dependiendo; y que en

estos momentos este proceso tarda los mismos 3 a 4 meses en virtud del

cúmulo de trabajo y el poco personal del Registro de Títulos.


HALLAZGOS

A continuación se presentan los hallazgos encontrados en esta

investigación acerca del Registrador de Títulos y su nueva competencia

dentro del sistema inmobiliario según la Ley 108-05:

En el primer objetivo: “Analizar los cambios implementados en la

Ley 108-05 en cuanto al registro, certificaciones y publicidad”, el

estudio reveló que en el proceso de registro de Certificado de Título se

incorporan los elementos esenciales del derecho de propiedad, que son:

sujeto, objeto y causa; esto significa que el mismo debe identificar el o los

propietarios del inmueble con sus generales, su individualización con la

designación catastral del inmueble, especificándose la extensión superficial

del mismo, y el plano que le sirve de base y que en el mismo debe quedar

consignado el acto que da origen al derecho de propiedad, especificándose

el funcionario de quien emana o ante quién se instrumenta; la fecha de su

emisión o instrumentación, su naturaleza y las partes intervinientes.

Este hallazgo coincide con lo establecido por los artículos 66, 67 y 68

del Reglamento General del Registro de Títulos en donde se especifica el

proceso de registro de los certificados de títulos, los requisitos en cuanto al


sujeto, objeto y causa; así como también la obligatoriedad de plasmar la

extensión superficial.

Por otro lado, también se reveló que en cuanto a las certificaciones,

se introdujeron cambios significativos. Las certificaciones Duplicado del

Acreedor Hipotecario ahora se denomina Certificaciones de Registros de

Acreedores, en donde los derechos reales accesorios, las cargas y

gravámenes se acreditan mediante certificaciones, de registro de acreedores

emitidas por el Registro de Títulos. Estas certificaciones tienen fuerza

ejecutoria y validez probatoria por ante todos los tribunales de la República

Dominicana durante el plazo de vigencia de las mismas, excepto cuando se

demuestre que son contrarias a la realidad del registro.

De igual forma, se implementó que la certificación del Estado

Jurídico del Inmueble sólo puede expedirse a solicitud del propietario o los

propietarios del inmueble y a solicitud de jueces, Comisión Inmobiliaria,

representantes del Ministerio Público y de Titulares y beneficiarios de

derechos reales accesorios, cargas, gravámenes y medidas provisionales.

Estos hallazgos coinciden con Bobea (2003, P. 25) quien en una

investigación acerca de las principales ventajas y desventajas de la Ley de


Registro Inmobiliario, afirmó que en el aspecto de los procesos de registro y

certificaciones es que esta ley ha implementado mayores cambios.

En cuanto a la publicidad, el estudio reveló que la Ley 108-05

establece diferentes tipos de publicidad: de mensura, de las actuaciones, de

las decisiones, registral y de las notificaciones. Todas tienen la facultad de

poner en conocimiento del público un proceso y todas las acciones

emanadas por la Jurisdicción inmobiliaria en relación con los mismos. Esta

revelación coincide con un escrito de Ciprian (2003, P. 36) en el sentido de

que la publicidad es la información contenida en los Registros de Títulos de

de acceso público para todo el que tenga interés en conocer el estado

jurídico de un inmueble.

En el segundo objetivo, “Evaluar la competencia del Registrador

de Títulos según la Ley 108-05”, el estudio reveló que dentro de la

competencia del Registrador de Títulos de Puerto Plata está la

responsabilidad del asiento registral de la ejecución de documentos aptos

para constituir, transmitir, modificar, declarar o extinguir derechos reales,

cargas o gravámenes que recaen sobre un inmueble registrado. Dentro de

estos registros se establecen, la inscripción definitiva, provisional y las

anotaciones. Esta revelación coincide con lo establecido en el Reglamento


General de Registro de Títulos en cuanto a la función del Registrador de

Títulos de revisar y firmar los asientos registrales.

Otro hallazgo con referencia a este objetivo es que el Registrador de

Títulos emite un certificado de título de acuerdo el acto que da origen al

derecho de propiedad, la fecha de su emisión o instrumentación, su

naturaleza; y las partes intervinientes cuando así proceda. Este certificado

de títulos tiene un número único que lo identifica y se redacta en castellano,

utilizando como unidad de medida y de superficie el sistema métrico

decimal, sin recurrir a abreviaturas y no debe contener interlineados,

raspaduras, tachaduras, ni espacios en blanco.

Estas emisiones de certificados de títulos pueden ser a causa de un

duplicado, pérdida, deterioro o destrucción. Esta revelación coincide con el

programa de consolidación de la jurisdicción inmobiliaria impartido por la

Suprema Corte de Justicia (2007) en donde ser recomendaba a los Registros

de Títulos tener cuidado al emitir un certificado de títulos y evitar errores

materiales que retrasan el proceso de registro inmobiliario.

El estudio también reveló que el Registrador de Títulos está en la

facultad de emitir diversas certificaciones, dentro de las cuales están las


certificaciones del Estado Jurídico del Inmueble, Certificaciones de

Inscripción del Inmueble, Certificaciones de Registro de Derechos Reales

Accesorios, Certificaciones con Reserva de Prioridad y Certificaciones de

Registro de Acreedores. En este sentido sólo pueden expedirse

certificaciones a solicitud de las personas y/o instituciones asignadas en la

ley de Registro Inmobiliario y las mismas se mantendrán a disposición de

los interesados por un máximo de dos (2) meses contados a partir de su

fecha de emisión. Este hallazgo coincide con lo que establece el artículo

104 del Registro Inmobiliario en lo referente a las certificaciones.

En el tercer objetivo, “Determinar si la nueva competencia del

Registrador de Títulos viene a acelerar el registro inmobiliario”, el

estudio reveló que en virtud de la Ley 108-05, la emisión de los certificados

de títulos y la expedición de certificación de Registro de Derechos Reales

Accesorios sufrieron cambios. De igual forma, se encontró que eran

necesarias las modificaciones en el proceso de registro, pero que sin

embargo, de acuerdo a los nuevos mecanismos establecidos por la Ley 108-

05 los trabajos en el Registro de Títulos se han agilizado poco. Este

hallazgo no coincide con un estudio realizado por Bengoa (2006) en el cual

concluía que la entrada en vigencia de la Ley 108-05 indudablemente


agilizaría los procesos de emisión de certificados de títulos y certificaciones

varias.

Otra revelación de este estudio es que el personal del Registro de

Títulos tiene mucho conocimiento acerca de la Ley 108-05 de Registro

Inmobiliario y que se les ha impartido entrenamiento con respecto a los

procesos de registro inmobiliario y todo lo relacionado con dicha ley.

En cuanto a la agilización de los trabajos, un hallazgo encontrado es

que el proceso de certificación de los derechos reales accesorios se tarda

más de 21 días antes y después de la Ley 108-05. De igual forma, la

expedición de los certificados de títulos se tarda entre 3 a 4 meses, antes y

después de la Ley 108-05 y los asientos registrales también se tardan de 3 a

4 meses. Esta situación según revela el estudio se debe al cúmulo de

trabajo y al poco personal del Registro de Títulos de Puerto Plata.

Estos hallazgos no concuerdan con uno de los considerandos de la

misma Ley 108-05 que establece que se hace indispensable establecimiento

de un nuevo modelo de gestión que simplifique y optimice los

procedimientos, desjudicializando e incrementando la celeridad de los

mismos.
CONCLUSIONES

Luego de presentados los hallazgos de esta investigación se presentan

las siguientes conclusiones:

La Ley 108-05 de Registro Inmobiliario de fecha 23 de marzo del

2005, regula el registro de todos los derechos reales inmobiliarios

correspondiente al territorio de la República Dominicana y para su

aplicación se complementa con reglamentos y normas complementarias

dictados por la Suprema Corte de Justicia.

A tal efecto y a los fines de complementar la citada ley, en fechas 22

de marzo de 2007 y 12 de julio de 2007, la Suprema Corte de Justicia ha

dictado varias resoluciones, entre las cuales se encuentran la No. 517-2007

sobre Reglamento para el control y reducción de constancias anotadas; No.

1338-2007 referente a las Mensuras Catastrales y el No. 9-2009 en cuanto a

las tarifas por los servicios en la jurisdicción inmobiliaria.

Dentro de las modificaciones contempladas en la Ley 108-05 de

Registro Inmobiliario está lo relativo a los procedimientos para el registro

de los inmuebles, las certificaciones y la publicidad. El estudio concluye


que para la emisión de certificado de títulos, que es un documento oficial

emitido y garantizado por el Estado Dominicano, que acredita la existencia

de un derecho real y la titularidad del mismo, el Registrador de Título debe

tomar en consideración el sujeto, es decir, se debe identificar el o los

propietarios. Este propietario puede ser una persona física o una persona

moral y ambos casos, el certificado de título debe contener los datos

generales.

También el certificado de título debe estar individualizado, es decir,

el mismo debe tener la designación catastral del inmueble, con la extensión

superficial del mismo, y el plano que le sirve de base. Además, se debe

incluir la causa que justifica el derecho real, es decir, el acto que da origen

al derecho de propiedad.

Otra conclusión de este estudio es que la publicidad de un inmueble

se acredita frente a terceros mediante las certificaciones que emiten los

Registros de Títulos, las cuales son a través de las consultas, informes y

certificaciones.
El Registrador de Títulos tiene la función de revisar y coordinar los

asientos registrales en su jurisdicción. Existen diferentes modos de registro:

la inscripción definitiva, que se ejecuta en los registros como consecuencia

de un acto que constituye, transmite, declara, modifica o extingue derechos

reales, cargas y/o gravámenes sobre un inmueble; la inscripción provisional

que no tiene un carácter definitivo porque es consecuencia de un acto que

constituye, transmite, declara o modifica derechos reales, cargas y/o

gravámenes sobre un inmueble; y por último la anotación que es cualquier

otro asiento registral de carácter provisional o temporal que se ejecuta con

relación a una inscripción específica para afectar su integridad, como

consecuencia de la Ley de Registro Inmobiliario, sus Reglamentos o de una

orden judicial.

Una conclusión arribada en esta investigación, es que a pesar de los

esfuerzos de los legisladores por promulgar una ley sobre Registro

Inmobiliario que incrementara la celeridad de los procedimientos y que

agilizara los procesos de la institución para hacerla más eficiente, esto no se

corresponde con la realidad actual del Registro de Títulos de Puerto Plata,

ya que los trabajos de emisión, certificaciones y asientos registrales se están

tardando el mismo tiempo que antes.


El Registro de Títulos de Puerto Plata no cuenta con suficiente

personal para lograr los objetivos y propósitos de la Ley 108-05 de

optimizar y agilizar los procesos de emisión de certificados de títulos,

asientos registrales y la expedición de certificaciones, lo que trae como

consecuencia una acumulación de trabajos y por ende el estancamiento del

proceso de modernización de la jurisdicción inmobiliaria.


RECOMENDACIONES

Al finalizar esta investigación acerca del Registrador de Títulos y su

nueva competencia dentro del Sistema Inmobiliario según la Ley 108-05, se

plantean las siguientes recomendaciones:

Dirección Nacional de Registro de Títulos:

 Velar por el cumplimiento de la Ley 108-05 en su ámbito de

competencia para de esta manera eficientizar los procedimientos y la

forma en que se registran los derechos reales inmobiliarios de

conformidad con dicha ley.

 Continuar impartiendo entrenamiento y capacitación al personal del

Registro de Títulos de Puerto Plata.

 Tomar en consideración ampliar la capacidad laboral en el Registro

de Títulos de Puerto Plata tomando en consideración la falta de

personal para llevar a cabo los trabajos.

 Supervisar el funcionamiento del Registro de Títulos de Puerto Plata

para detectar debilidades y fortalezas con referencia a la aplicación de

la Ley 108-05 de Registro Inmobiliario.


Registro de Títulos de Puerto Plata:

 Afianzar sus conocimientos acerca de los procedimientos

establecidos por la Ley 108-05 y el Reglamento General de Registro

de Títulos con el propósito de ponerlos en práctica.

 Agilizar los trabajos de emisión de certificados de títulos, asientos

registrales y certificaciones para de esta contribuir con la

modernización de la Jurisdicción de Tierras.

Al Público en general:

 Preocuparse por conocer la Ley 108-05 de Registro Inmobiliario ya

que la misma ofrece seguridad y garantía para todo lo relacionado

con el sistema inmobiliario, desde una emisión de certificado de

títulos dentro de un plazo razonable, hasta la expedición de una

certificación y un adecuado sistema de registro.

 Exigir a los funcionarios del Registro de Títulos de Puerto Plata que

los trabajos sean realizados dentro de los plazos que contempla la ley

108-05, sin tener la necesidad de hacer diligencias extras


APENDICE

INSTRUMENTO APLICADO A LA REGISTRADORA DE TÍTULOS


DE PUERTO PLATA

Somos Fernando Bladimir y Ramón, estamos preparando un estudio como


exigencia parcial para optar por el título de Licenciados en Derecho,
agradecemos que usted nos responda de la manera más sincera las
siguientes preguntas.

Mecanismos
1. ¿Cuáles de los siguientes mecanismos sufrieron cambios con la Ley 108-
05 sobre Registro Inmobiliario?
a. Emisión certificados de títulos ___
b. Certificación de Registro de Derechos Reales Accesorios ___
c. Asientos Registrales ___
d. Otros (especifique) _______________________

2. ¿En qué medida se ha acelerado el proceso de registro con los nuevos


mecanismos establecidos en la Ley 108-05 de Registro inmobiliario?
a. Muchísimo ___
b. Mucho ___
c. Poco ___
d. Nada ___

3. ¿Cuán necesarias eran estas modificaciones en la Ley 108-05 sobre


Registro Inmobiliario para agilizar los procesos en el Registro de
Títulos?
a. Imprescindibles___
b. Necesaria s ___
c. Poco necesarias ___
d. Innecesarias ___

Conocimiento del Personal


4. ¿Tiene el personal del Registro de Títulos de Puerto Palta conocimientos
acerca de la Ley 108-05 sobre Registro Inmobiliario?
a. Muchísimo ___
b. Mucho ___
c. Poco ___
d. Nada ___

5. ¿Se les ha impartido entrenamiento al personal del Registro de Títulos de


Puerto Plata en cuento a los nuevos procesos de registro
inmobiliario?
a. Sí ___ (mencione en qué tópicos)
b. No ___

6. ¿Se corresponde el entrenamiento recibido con las actividades diarias del


Registro de Títulos de Puerto Plata en cuanto a los procesos y
requisitos?
a. Muchísimo ___
b. Mucho ___
c. Poco ___
d. Nada ___

Agilización de los trabajos


7. ¿En qué medida se han agilizado los trabajos en el Registro de Títulos de
Puerto Plata?
a. Muchísimo ___
b. Mucho ___
c. Poco ___
c. Nada ___

8. ¿Qué tiempo se tardaba el proceso de Certificación de Registro de


Derechos Reales Accesorios en virtud de la Ley 1542?
a. 1 a 7 días (1 semana) ___
b. 8 a 15 días (2 semanas) ___
c. 16 a 21 días (3 semanas) ___
d. Más de 21 días ___

9. ¿Qué tiempo se tarda el proceso Certificación de Registro de Derechos


Reales Accesorios en virtud de la Ley 108-05?
a. 1 a 7 días (1 semana) ___
b. 8 a 15 días (2 semanas) ___
c. 16 a 21 días (3 semanas) ___
d. Más de 21 días ___
10. ¿Qué tiempo se tardaba la expedición de un certificado de títulos en
virtud de la Ley 1542?
a. Menos de 1 mes ___
b. De 1 a 2 meses ___
c. De 3 a 4 meses ___
d. Más de 4 meses ___

11. ¿Qué tiempo se tarda la expedición de un certificado de títulos en virtud


de la Ley 108-05?
a. Menos de 1 mes ___
b. De 1 a 2 meses ___
c. De 3 a 4 meses ___
d. Más de 4 meses ___

12 ¿Qué tiempo se tardaban los asientos registrales en virtud de la Ley


1542?
a. Menos de 1 mes ___
b. De 1 a 2 meses ___
c. De 3 a 4 meses ___
d. Más de 4 meses ___

13. ¿Qué tiempo se tarda los asientos registrales en virtud de la Ley 108-05?
a. Menos de 1 mes ___
b. De 1 a 2 meses ___
c. De 3 a 4 meses ___
d. Más de 4 meses ___
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