1

ENSAYO

HUASIPUNGO (Jorge Icaza)

Alumna: ANAYIBE DIAZ MORALES, Grado: 11°

Institución Educativa Técnico Comercial La Dorada

Asignatura: Español

Docente: NAUYALEN CARVAJAL VASQUEZ

“Huasipungo” es una novela del escritor ecuatoriano Jorge Icaza, nos presenta una obra muy

interesante en cuanto al realidad y las circunstancias que afectan a los pueblos indígenas; la

historia transcurre en Ecuador, y cuenta el humillante trato por parte de la clase social formada

por las personas acomodadas para con el pueblo nativo de la sierra ecuatoriana. Muestra

indignación e impotencia, repudio ante el maltrato y explotación por parte de la alta sociedad

hacia las clases menos favorecidas, y una serie de insultos y reproches.

“Huasipungo” se desarrolla con Ándres Chiliquinga, un indio trabajador, como principal

protagonista de la novela, quién aparece de principio a fin. Don Alfonso Pereira, hombre

adinerado considerado un caballero de la alta sociedad quiteña pero que ahora tiene dificultades

debido a las deudas (le debía diez mil sucres a su tío Julio Pereira, tenía deudas con los bancos,

rentas e impuestos) y además su hija adolescente “Doña Lolita” embarazada a la temprana edad

de 17 años. Problema que él lo llamaba “honor en peligro”.

 2

Un día Don Alfonso, iba caminando por la calle y de repente notó que alguien lo llamaba

desde un vehículo, era su tío Julio Pereira, Tío Julio invita a don Alfonso a su despacho para

tratar “asuntos pendientes” y sintiéndose en aprietos Don Alfonso intenta hablar sobre su deuda

pero su tío ya tenía otros planes.

Tío Julio le propone a su sobrino un negocio que a su decir, los hará millonarios a todos.

Dicho negocio trataba en explotar las tierras de Cuchitambo, propiedad de Don Alfonso, puesto

que allí, su tío junto a Mr. Chapy (un estadounidense gerente de la explotación maderera en

Ecuador) había descubierto que Cuchitambo contiene madera de gran calidad, que podría ser

utilizada en la industria ferroviaria e incluso para exportación, además el tío Julio decía que eso

no debía ser lo principal, sino que también tenía noticias que en los terrenos de la cordillera

oriental había petróleo;

Acosado por todas las circunstancias, (el motivo económico) don Alfonso Pereira arreglo

cuentas y firmo papeles con el tio y Mr Chapy. Se encarga de construir una carretera, apropiarse

de los bosques vecinos y acabar con los huasipungos situados a las orillas del río, luego de

aquello, Mr. Chapy pondría a trabajar su costosa maquinaria industrial para talar y poner en

marcha el negocio.

Los llamados huasipungos eran el hogar de los indios, un pedazo de tierra que un terrateniente

les prestaba a cambio de su trabajo diario. Cuando finalmente la Familia Pereira se marcha hacia

Cuchitambo, en parte también por la vergüenza ante la sociedad de que su hija haya quedado

embarazada de un cholo, tenían la certeza de que los indios que allí vivían no iban a ser

suficientes para llevar a cabo sus tareas y que debían atraer a los indios que habitaban en los

bosques aledaños.
 3

Policarpio, el mayordomo de la hacienda los esperaba con todo arreglado para la llegada de

sus patrones, quienes en el horrible camino habían utilizado a los indios inclusive como animales

de carga. Todo esto sucedía mientras el indio Chiliquinga vivía en su huasipungo junto con su

esposa Cunshi y su hijo, quienes estaban temerosos por la llegada del patrón a la hacienda.

Don Alfonso Pereira comienza una amistad con Jacinto Quintana, teniente político del

pueblo y con el sacerdote del lugar formando así una asociación entre sus poderes materiales y

religiosos.

El hijo de doña Lolita había nacido ya, pero su madre incapaz de amamantarlo, decide dejar

esa tarea para las indias jóvenes, las cuales se peleaban por hacerse de esa responsabilidad puesto

que eso suponía salir por momentos de la miseria y los trabajos esclavizadores que a diario

desempañaban.

El indio Chiliquinga es elegido entre tantos indios más para derribar las tierras de Guamaní,

siendo estos sometidos a todo tipo de maltrato físico y moral por “el tuerto Rodríguez”, mandón

capataz de la hacienda. A pesar de la gran distancia entre haciendas, Andrés Chiliquinga se da

modos para poder llegar a la noche junto con Cunshi su mujer, pero cierto día habiéndose

demorado en empezar la jornada, el indio es cruelmente golpeado por el capataz.

Cunshi había sido nombrada como la nueva niñera del infante recién nacido, suponiéndole a

Chiliquinga gran rabia y enojo, producto de aquello cierto día sufre un accidente que lo deja cojo

para siempre y es asignado a una nueva tarea, debía cuidar de la cementera.

El pueblo indígena estaba sometido a las costumbres religiosas impuestas por el cura y por la

autoridad civil del teniente político que junto con Don Alfonso cegado por la codicia decide

forzar aún más el trabajo de los indios para poder cumplir con sus obligaciones, sin importar la
 4

vida de sus sirvientes, muchos de los cuales perecieron en condiciones extremas de trabajo

forzoso y deshonra.

Una vez terminado el carretero, la prensa muestra como hombres de valor a los tres personajes

duros antes mencionados, sin tomar en cuenta la labor cumplida por los indios y su coraje para

llevar bien las órdenes de sus verdugos, sin importar que aquello les significa la vida a muchos

de sus seres queridos.

El poder esclavizador de la iglesia se muestra claramente cuando el cura decide celebrar una

misa en festejo de las obras cumplidas cuyos gastos serían costeados por los indios. En dicho

evento un campesino rogó al cura rebajar los costos de la celebración, entonces el cura enojado

maldice al pueblo indio invocando la furia de Dios, el cielo desata toda su furia en tormentas y

lluvias que terminan por inundar los huasipungos de los indios, sumiendo al pueblo en pobreza y

desesperanza.

El hambre y la miseria se habían apoderado del sitio, por lo cual se ven obligados a

desenterrar el cadáver de un buey que había muerto a causa del suceso. Andrés logra conseguir

carne del putrefacto cadáver y se lo lleva a su familia para poder quitar el hambre. Sin importar

el hedor de la carne, ellos lo comen complacidos, su hambre los hubiese hecho comer cualquier

cosa en esos momentos.

Al día siguiente, Cunshi muere como resultado de haber consumido la carne del buey muerto

y desenterrado. A pesar del inmenso dolor de haber perdido a su india, Chiliquinga ruega por

ayuda a Don Alfonso y al cura para poder sepultar a su mujer, pero esta fue negada. Sin dinero y

con desesperación, Andrés se ve obligado a robar una vaca y venderla para poder conseguir el

dinero suficiente para sepultar a Cunshi.

 5

Cuando el delito fue descubierto, Andrés fue brutalmente castigado al torturante látigo, lo

golpearon y ese castigo fue ejemplo para los demás indios de la comarca.

Mr. Chapy había ordenado desalojar los huasipungos asentados en la loma de la montaña,

puesto que allí sería instalado el aserradero mayor, todo esto sucedió ante el insensibilidad de los

indígenas que sufrían profundamente al ver como el pedazo de tierra que creían suyos estaba

siendo descubierto sin misericordia, dejando a los suyos sumidos en la miseria absoluta.

Andrés organiza la resistencia indígena que ya de por sí estaba llena de odio hacia los blancos

por haber traído la desdicha y el sufrimiento a sus tierras. Después del primer asalto el resultado

muestra 5 muertos, entre ellos el tuerto Rodríguez y Quintana.

Don Alfonso huye a Quito y pone alerta al ejército sobre la rebelión que se había producido.

Las consecuencias: fueron los soldados acribillaron sin piedad a los indios, uno a uno los cuerpos

sin vida del pueblo indígena cayeron sobre las tierras que los habían visto nacer, la sangre tiño de

horror el campamento y las memorias de los indios.

Los sobrevivientes se refugian en la choza de Chiliquinga, pero esta no duraría mucho en pie.

Los soldados le prendieron fuego y asfixiados por el humo, la resistencia indígena se vio

obligada a salir. Esa sería la última vez que verían la luz.

Conclusiones.

Y así pensamos la mayoría de nosotros, cuando estamos frente a problemas de otros, cuando

en realidad la cooperación, la libertad y defensa de los derechos humanos nos competen a todos.
 6

La sociedad ha estado siempre manejada por criterios morales, dominios políticos y

económicos que han hecho de la injusticia sea un fenómeno visible en cada rincón del planeta.

En el tiempo en el que se desarrolla la obra, el mandato muestra su lado más oscuro y

malicioso, privilegiándose siempre de aquellos cuyo poder y posición social ha estado por sobre

algo tan fundamental como lo es EL RESPETO A LOS DERECHOS HUMANOS, EL

RESPETO A LA VIDA MISMA.

La inclemencia moral permanece en la actualidad, donde la esclavitud se evidencia por

expresiones o dichos, más moderados y no hay dudas que ahora la esclavitud es mantener a la

gente necesitada e ignorante.

La lucha diaria de la gente trabajadora y el irrespeto hacia sus derechos no muestran otra cosa

más que la ventaja del capital frente al ser humano.

La obra “Huasipungo” vista desde un contexto social es una excelente forma de dar a

conocer el atropello del que han venido siendo víctimas principalmente los indígenas

ecuatorianos. Rabia e impotencia entre cada página de esta novela..

Es muy claro darse cuenta como a través de los años, el poder eclesiástico se valió de la

ignorancia para imponer sus normas y criterios morales, que en muchos casos ha servido

únicamente para infundir temor y sometimiento.

Es indignante darse cuenta de la realidad del pueblo indígena que debido a la falta de

oportunidades y al olvido de las autoridades se ha visto retardada del progreso social y

económico.
 7

Un cambio en la conciencia colectiva empieza desde nosotros, cuando logramos entender que el

respeto hacia la vida de los demás significa también el respeto hacia la nuestra.