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Líderes confundidos

Los líderes que denominamos "confundidos" no son, necesariamente, malas personas; a veces
son muy sinceros. Si supieran que están confundidos, dejarían de estarlo; como le pasó a Saulo
de Tarso que a pesar de ser un líder religioso estuvo luchando contra Dios hasta que el
testimonio de Esteban por un lado, y la obra de Dios por el otro" lo sacaron de su confusión. Fue
entonces que se convirtió en un auténtico líder en el nombre de Dios. Como Saulo de Tarso, los
líderes confundidos de hoy (convencidos de que tienen el monopolio de la ver-dad y que como
tales son instrumentos de Dios) son celosos guardadores de la ortodoxia, según su particular
interpretación. Muchos evangélicos tradicionalmente han acusado a la Iglesia Católica
Apostólica Romana de ser dogmática y absoluta en sus interpretaciones y de negar a sus
feligreses la libertad para examinar e inter-pretar libremente las Sagradas Escrituras. Tal
acusación se vuelve un bumerang para estas personas que por lo general son tan dogmáticas
como la Iglesia de Roma, o más. Sobre todo ahora que los católicos están estu-diando y
distribuyendo las Escrituras. Antes de entrar a analizar las distintas áreas de confusión es bueno
aclarar que consideramos un líder a todo aquel que es capaz de influir sobre otros al extremo de
alterar su comportamiento conducién-dolos por el camino de sus ideas y/o actitudes. Aún
consideramos líderes a aquellos que logran reclutar se-guidores aunque sea por corto tiempo.
Ahora, al referirnos a las áreas de confusión, que son muchas, nos limitaremos a enunciar cinco
de ellas sin hacer un análisis profundo: a) Las características de la personalidad del líder podrán
contribuir a crear conflictos tanto en él como en otros miembros de la comunidad. Sus
motivaciones conscientes o inconscientes determinarán su conducta y su influencia sobre los
demás. b) Las características sobresalientes de la persona-lidad de los demás miembros de la
congregación pueden contribuir a acentuar las dificultades de personali-dad del líder. La
congregación puede ser una comunidad enfermiza y enfermante o sana y terapéutica. Un líder
enfermo puede enfermar a la comunidad y una comunidad enferma puede empeorar su
situación. La comunidad puede aportar negativamente a Sus líderes confundiéndolos. c) El tipo
de estructura eclesiástica puede, o no, incentivar actitudes autocráticas y dictatoriales
disfrazadas de piedad. d) Los objetivos de la co-munidad, la comprensión de su razón de ser. e)
El medio socio-económico, cultural, etc. del líder.
El autócrata
Esté tipo de líder confunde, por lo general a nivel inconsciente, la letra s minúscula con la
mayúscula en la palabra Señor. Así afirma: "El Señor me ha revelado, me ha dicho, dice, etc.",
cuando realmente está expre-sando su propia ambición de autoridad, mando y reconocimiento
por parte de los demás. Claro que no todos los que hacen afirmaciones semejantes son líderes
confundidos. El Señor, con mayúscula, se manifiesta a sus hijos; pero hay que asegurarse de
que no es el señor, con minúscula, el que se expresa. ¿Cómo establecer las diferencias? La
Biblia dice: "Por sus frutos los conoceréis" (Mateo 7:16–20). Uno no puede separar lo que es de
lo que hace; y lo que hace debe hacerlo porque es un siervo de Jesucristo, no un autócrata
prepotente y orgulloso disfrazado de piedad. Esta confusión reside en el área a de los problemas
psicológicos del líder y se hace más grave cuando está en conjunción con el área de las
limitaciones culturales. El sentimiento de inferioridad que tienen algunas personas por sus
limitaciones intelectuales -sobre todo cuando participan de una congregación donde el ni-vel es
superior al del líder- suele ser compensado, a nivel inconsciente, por expresiones de piedad que
no siempre son auténticas. La situación se agrava para todos cuando en la congregación hay
muchas personas que tienen la tendencia a someterse ante una personalidad fuerte (área b),
cuando el tipo de estructura ecle-siástica favorece la colocación "en el trono" de líderes
autócratas (área c) y cuando la iglesia como comuni-dad carece de objetivos y su existencia es
un fin en sí misma (área d).

El anti pastor
En el análisis de cada uno de los líderes confundidos debemos tener en cuenta las cinco áreas
de confusión. No vamos a volver sobre ellas, como hicimos en el análisis del líder autócrata,
pero el lector debe tener-las siempre presentes. Al principio del capítulo señalamos los serios
problemas pastorales que surgieron en la iglesia neotestamentaria, los cuales son planteados
con toda honestidad como medio de alcanzar soluciones. Nos vamos a referir a Diótrefes, un
líder anti pastor que aparece en las páginas de la Biblia. El anciano, posi-blemente San Juan,
escribe a Gayo la Tercera Epístola de San Juan. Esta epístola fue escrita a fines del siglo I,
16cuando la iglesia era dirigida por apóstoles y profetas que viajaban constantemente. Cada
congregación tenía varios ancianos (presbíteros) que se ocupaban de las tareas pastorales.
Diótrefes, aprovechando la ausencia de los líderes naturales de la iglesia, quiso apropiarse del
poder. Al parecer Diótrefes presidió una asamblea de la congregación, donde la mayoría votó
por no recibir a los predicadores enviados por el anciano. Pero una minoría, que no se sometió
al antipastor, recibió a los predicadores, por lo cual fueron excomulgados por Diótrefes. Demetrio
parece haber sido el jefe de los [página 14] predicadores enviados por Juan, posiblemente-te en
una segunda visita. Juan le pide a Gayo que reciba al grupo de predicadores itinerantes. Es
posible que la carta haya sido llevada por el mismo Demetrio. Juan se refiere a la calidad
humana y a la calidad de la fe de sus enviados. Habían dejado sus comodidades para
embarcarse en una aventura de fe en servicio de Jesu-cristo y de su Iglesia.

10 APTITUDES BÁSICAS QUE DEBE TENER UN LÍDER


El liderazgo a menudo es confundido con la motivación, la inspiración o el éxito; en realidad
es un concepto dinámico que se adapta a diversos escenarios gracias a 10 características básicas.

De manera general, se define como el conjunto de habilidades que una persona posee para influir
en las personas y motivarlas a cumplir una meta.

Surge de forma natural y no es exclusivo de jerarquías o reconocimientos formales, por


ejemplo, cuando una persona se integra a un grupo, toma la iniciativa, influye en las decisiones y
motiva a otros para realizar tareas.

Las 10 aptitudes o puntos importantes sobre el liderazgo son los siguientes:

1. Motivación. El líder canaliza la energía y el potencial de las personas. Además, debe ser
sensible para percibir el ánimo en el ambiente y reconocer los esfuerzos.
2. Empatía. La inteligencia emocional es indispensable para todo líder, no sólo para comprender
las situaciones de otros miembros del equipo, también para inspirar y crear confianza.
3. Servicio. El líder apoya al equipo facilitando herramientas, orientación, confianza y atención en
todo momento y en cualquier situación.
4. Visión. El líder debe tener la capacidad de ver o dimensionar escenarios no contemplados por
los miembros del equipo e inspirarlos para superar los obstáculos.
5. Creatividad. El líder impulsa el desarrollo de nuevas habilidades y busca enriquecer la
imaginación de sus colaboradores.
6. Confianza. El líder es seguro de sí mismo y de sus colaboradores, y proyecta esa sensación en
cualquier situación de tal manera que genera un ambiente positivo.
7. Autoconocimiento. El líder ha aprendido a querer, a quererse y conocerse a sí mismo, así
como reconocer las propias cualidades y limitaciones. Va de la mano con la confianza y la
inteligencia emocional.
8. Intuición. El líder es sensible a todo lo que pasa a su alrededor, prevé cambios, corre riesgos,
da soluciones y genera confianza.
9. Disciplina. El líder sabe cómo mantener el orden, la lealtad y la subordinación sin obligar o
infundir temor entre los colaboradores.
10. Empoderamiento. El líder saca lo mejor de su equipo, sirve de guía y exige para potenciar la
capacidad de decisión, poder e independencia de sus colaboradores cuando no esté presente.

Un líder integra sus aptitudes y poder para influir en otras personas, por lo que existen diferentes
tipos de liderazgos detonados por las situaciones, características del grupo o tipo de institución.

El liderazgo no se trata de jerarquía, es más un estilo de vida que se logra llevando a cabo los
puntos anteriores. Comienza escuchando a los demás, comprometiéndote con una causa,
trabajando en equipo para lograr una meta en común y considerando la opinión de tus
colaboradores, porque eso se reflejará en sus actitudes.

Recuerda que un jefe ordena y exige obediencia, pero un líder orienta y obtiene lealtad.

Un autócrata o líder autocrático o autoritario es aquel dirigente de un grupo humano, nación


o comunidad que se otorga las facultades para asumir por completo la toma de decisiones,
el ordenamiento y la dirección absoluta del conjunto, a través de un mando único e
incuestionable, a menudo sostenido en el dominio implacable de las instancias de poder. En
política, a los líderes autoritarios se les denomina autócratas o dictadores.

En este sentido, la autocracia será el modelo de gobierno que coloca en manos de un


único individuo el conjunto de los poderes públicos y toda la capacidad de toma de
decisiones, incluso cuando éstas vayan en contra de los intereses del propio pueblo u
obedezcan a los caprichos o beneficios personales del líder. Por lo general este tipo de
regímenes se instauran mediante la fuerza.

Puede bien considerarse un modelo de régimen opuesto al democrático, en el que las mayorías
eligen a sus representantes para la conducción de la colectividad y existen medios para
controlar, supervisar o interrumpir dicho poder. En una autocracia el poder no permite
cuestionamientos a la voluntad del dirigente.

Los reyes absolutistas, los dictadores de cualquier signo político y los líderes tiránicos de
algunas bandas criminales pueden ser buenos ejemplos de ello.

Características de un líder autocrático

Por lo general, los autócratas se caracterizan de la siguiente manera:

 Son carismáticos y se erigen con el poder en pro de una supuesta necesidad colectiva.
 Detentan todo el poder de decisión y se lo imponen a los demás mediante la fuerza
(legal, militar, económica o incluso física).
 No permiten el cuestionamiento a su autoridad y sancionan rápidamente toda forma de
oposición o crítica.
 Exhiben tendencias a la paranoia y se aferran al poder a través de todos los medios.
 No son dados a la autocrítica ni al reconocimiento, sino que se piensan siempre los
más indicados o los más convenientes para guiar a los demás.
 Amenaza, castiga y persigue a sus subalternos, en pro de mantener un orden
específico.

El liderazgo autocrático en el mundo empresarial

A menudo en el mundo corporativo se cuestionan los modelos autocráticos de liderazgo, que


plantean el sacrificio de las libertades individuales en pro de un orden más riguroso o una mayor
efectividad.

De hecho, se distingue en el lenguaje empresarial entre las figuras de “jefe” y “líder” en


base a su cercanía con el personal de a pie, su permeabilidad a las nuevas ideas, su
horizontalidad de trato y su capacidad para inspirar en lugar de atemorizar a sus subalternos.
El liderazgo autocrático, también conocido como liderazgo autoritario, es un estilo de
liderazgo que se caracteriza por el control individual del líder sobre todas las decisiones y
la poca aportación de los miembros del grupo. Los líderes autocráticos suelen tomar decisiones
basadas en sus ideas y juicios y rara vez aceptan los consejos del resto, impulsando un control
absoluto y autoritario sobre el grupo.

Procede del griego auto (uno mismo) y kratos (gobierno o poder), de manera que es un sistema
de gobierno donde la voluntad de un individuo, en este caso el líder, es la ley, dado que la
autoridad recae solo sobre él.

Características del liderazgo autocrático


 Seguro
 Responsable
 Capacidad de liderazgo
 Capacidad de expresar sus ideas de forma directa
 Altos conocimientos del sector en el que se encuentra
 Experiencia dentro de la empresa
 Capacidad de respuesta ante las necesidades del momento sin dudar

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