Documentos de Académico
Documentos de Profesional
Documentos de Cultura
MÉTRICA
El poema está dividido en cuatro estrofas con diferente número de versos cada una. La
primera tiene tres, la segunda ocho, la tercera tres y la cuarta nueve versos. El poema
está compuesto por versos de arte menor y arte mayor. Haciendo uso de sinéresis y
sinalefas podríamos decir que son versos de siete y once sílabas, exceptuando el
decimonoveno verso que es de tres sílabas y el último que tiene 6. Por ello podría decirse
que es una silva. La silva es un tipo de composición tradicional que permite cierta
libertad al poeta ya que no tiene un número de versos y estrofas fijo. Por este motivo,
Pedro Salinas eligió este tipo de composición. Pero introdujo además elementos, como
el verso de tres sílabas, que la hacen diferente. A lo largo de todo el verso se observa
una rima asonante que no sigue una regla que la unifique.
TEMA
El tema expresado a través del poema es la admiración y placer que siente el hombre
ante sus propios progresos. El poeta siente una gran admiración, asombro y placer al
descubrir los adelantos y progresos que hace el hombre ya que ello contribuye a que
viva mejor. Por tanto, a través del poema expresa un sentimiento positivo ante la idea
de progreso. Pedro Salinas guiado de su afán renovador y contagiado del futurismo que
se estaba desarrollando en esos momentos escribe este poema dedicado a la luz
eléctrica y, por tanto, un canto al avance, al progreso, a los adelantos.
El título de este poema esconde un doble significado. “Treinta y cinco bujías” pueden
parecer una cosa muy simple, de poca importancia. Sin embargo, esas “treinta y cinco
bujías” son las que hacen posible la luz y a partir de eso muchas otras cosas, como refleja
el poema.
CONCLUSIÓN
El poeta siente una gran admiración por el progreso general y en este poema vemos
cómo en concreto se siente admirado por la luz eléctrica. Por ello vemos cómo a partir
de un objeto tan banal como una bombilla, construye un poema sobre el amor a la luz.
De esa forma transforma y personifica a la luz en una mujer amada que vive prisionera
y vigilada en un castillo y sólo puede liberarla su amado, su príncipe. Pero el poema no
está dedicado a una bombilla como se ha dicho muchas veces, sino más concretamente
a la luz eléctrica, aunque ambas vayan inseparablemente unidas, ya que la bombilla
representa ese castillo de cristal y la luz es esa princesa que vive prisionera en él. Por
todas estas características podría decirse que el poema es una alegoría amorosa en la
que la luz, el término real, se ve transformada en una mujer. A través de la invención de
esta historia amorosa que es una muestra de su admiración por los avances del hombre
y más en concreto de la luz eléctrica, podemos ver cómo Pedro Salinas recoge esa
influencia futurista Y la desarrolla según su propio estilo. Podemos ver también un rasgo
futurista en la gran utilización de metáforas para expresarse