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1. INTRODUCCIÓN
Pero puede presentarse el caso en el cual esta neutralidad del IGV no debiera presentarse,
ello porque el propio contribuyente la ha utilizado indebidamente o porque se han presentado
supuestos señalados por el propio legislador para que se restituya el IGV que se utilizó. Esta
devolución del crédito fiscal sería una especie de restitución.
Lo primero que debemos realizar es definir el término “reintegro” el cual será utilizado en el
presente Informe.
De allí que el reintegro tiene como finalidad una devolución de un crédito que se utilizó en
una determinada fecha, el cual posteriormente es entregado al fisco mediante la figura de la
restitución.
Cabe mencionar que esta figura del reintegro del crédito fiscal se encuentra regulada en el
texto del artículo 22º de la Ley del Impuesto General a las Ventas.
En el Reglamento de la Ley del Impuesto General a las Ventas se puede observar los
numerales 3, 4 y 5 del artículo 6º.
Existen las reglas que determinan el nacimiento de la obligación tributaria en materia del
Impuesto General a las Ventas y que se encuentra reguladas en el artículo 4º de la Ley que
regula dicho tributo, haciendo mención a cada una de las operaciones que el IGV considera
afectas al pago, tales como el caso de:
Sin embargo, la propia Ley del Impuesto General a las Ventas también cuenta dentro de su
propia estructura normativa con determinadas reglas, las cuales tienen por finalidad realizar
ajustes o correcciones del crédito fiscal, el cual fue en un inicio reconocido como válido y
aceptado pero que posteriormente el fisco exige su restitución.
Esta figura es conocida en la legislación del IGV y en la doctrina como el “reintegro del
crédito fiscal”, el cual opera cuando se realizan ventas de bienes calificados como activos
fijos bajo ciertas condiciones. Ello determina entonces que el reintegro tributario como
posibilidad de ajuste únicamente opera cuando se realizan venta de este tipo de bienes.
En este orden de ideas, convenimos en determinar que la figura del reintegro del IGV por las
adquisiciones realizadas, implica necesariamente que el crédito fiscal en un inicio cumplió
con los parámetros legales exigidos por la normatividad tributaria del IGV y ello permitió
utilizarlo sin dificultad en su oportunidad. Sin embargo, por la presencia de una causal
sobreviniente el mismo se pierde y existe mandato del fisco para exigir su restitución, lo cual
determina entonces el reintegro del crédito fiscal.
El texto del artículo 22º de la Ley del Impuesto General a las Ventas determina que en el caso
de venta de bienes depreciables destinados a formar parte del activo fijo, antes de transcurrido
el plazo de dos (2) años de haber sido puestos en funcionamiento y en un precio menor al de
su adquisición, el crédito fiscal aplicado en la adquisición de dichos bienes deberá
reintegrarse en el mes de la venta, en la proporción que corresponda a la diferencia de precio.
Esta primera parte de la norma amerita realizar una descripción detallada de los supuestos
que encierra el texto. De este modo, se puede precisar que se requiere el cumplimiento de los
siguientes requisitos:
• La venta5 se debe efectuar antes que se cumplan los dos (2) años de haber sido puesto en
funcionamiento el referido bien.
• El precio pactado en la operación de venta del activo fijo sea a un monto menor de
adquisición del bien.
De aquí se puede determinar grosso modo que si la venta se produce luego del plazo de los
dos (2) años mencionado anteriormente, ya no resulta relevante verificar si se vendió a un
monto mayor o menor al de su costo de adquisición, ello porque no le serán aplicables las
reglas del reintegro del crédito fiscal.
Si se aprecia, el plazo de los dos (2) años es inferior al plazo que la normatividad del Impuesto
a la Renta determina para realizar la depreciación de los bienes que se encuentran en el activo
fijo. Ello se puede observar de una simple revisión del texto del literal b) del artículo 22º del
Reglamento de la Ley del Impuesto a la Renta, el cual contiene el siguiente cuadro.
En efecto, conforme el artículo 42º de la Ley del Impuesto General a las Ventas, el
impuesto bruto se calculará sobre el valor de mercado del activo fijo materia de venta, de
manera que el ajuste a la base imponible por dicho concepto constituye en sí mismo una
forma indirecta de reintegro del crédito fiscal. En tal sentido, el precio de venta a comparar
para efectos del reintegro debe entenderse constituido por el valor de venta establecido
para efectos del impuesto de acuerdo al artículo 42º. Si efectuado el ajuste (incremento) a
valor de mercado de la base imponible de la venta del activo fijo continuara habiendo una
diferencia de menos con el precio de adquisición del bien, el artículo 22º de la Ley obligaría
a reintegrar proporcionalmente el crédito fiscal por la sola disminución del valor de
mercado del activo entre la fecha de su adquisición y la fecha de su vencimiento,
circunstancia sobre la que el contribuyente no tiene ingerencia alguna y que en modo
alguno desvirtúa el cumplimiento del requisito contenido en el inciso a) del artículo 18º de
la Ley para la configuración del crédito fiscal objeto del reintegro, considerando que dicho
requisito debe ser apreciado en términos sustanciales y no cuantitativos” 7.
El segundo párrafo del artículo 22º de la Ley del Impuesto General a las Ventas precisa que
tratándose de los bienes que califican como activo fijo, que por su naturaleza tecnológica
requieran de reposición en un plazo menor, no se efectuará el reintegro del crédito fiscal,
siempre que dicha situación se encuentre debidamente acreditada con informe técnico del
Ministerio del Sector correspondiente 9.
El tercer párrafo del artículo 22º de la Ley del Impuesto General a las Ventas considera el
supuesto en el cual ocurra la desaparición10, destrucción11 o pérdida12 de bienes cuya
adquisición generó un crédito fiscal, así como la de bienes terminados en cuya elaboración
se hayan utilizado bienes e insumos cuya adquisición también generó crédito fiscal,
determina la pérdida del mismo.
En todos los casos, la oportunidad en la cual el reintegro del crédito fiscal deberá efectuarse
es en la fecha que corresponda declarar las operaciones que se realicen en el periodo tributario
en que se produzcan los hechos que originan el mismo.
Ello implica que en el PDT Nº 621 IGV – RENTA mensual que corresponda al período donde
se debe reintegrar el IGV se deberá descontar del crédito fiscal el monto que se debe restituir
al fisco, lo cual en términos prácticos implicaría que se cuente previamente con papeles de
trabajo donde se hubiera efectuado el cálculo del IGV a restituir y solo se restaría del crédito
fiscal, lo cual implica disminuirlo.
Con respecto a la parte operativa relacionada al reintegro del IGV en la venta de activos
recomendamos la revisión del trabajo titulado “REINTEGRO DEL IGV EN VENTA DE
ACTIVOS FIJOS”, el cual se puede consultar accediendo al Blog de José Luis García
Quispe 13.
El quinto párrafo del artículo 22º de la Ley del Impuesto General a las Venta determina los
supuestos en los cuales se excluyen de la obligación del reintegro, los cuales se detallan a
continuación:
En este punto resulta importante diferenciar los conceptos de Caso Fortuito y Fuerza Mayor.
EL CASO FORTUITO
2. IMPREVISTO: Que en los cálculos ordinarios de una persona normal no sea esperable
su ocurrencia.
LA FUERZA MAYOR
Otra situación extrema que se puede presentar en la pérdida de los bienes es la fuerza mayor,
entendida ésta como aquella “…causa que no se puede evitar y tampoco se puede
prever”17.
Como se puede apreciar son situaciones en las cuales el contribuyente no ha podido prever
que los hechos sucedan ya que éstos se producen al margen de la voluntad del mismo.
Dentro del Derecho Civil las figuras del caso fortuito y la fuerza mayor se encuentran
recogidas en normas como el Código Civil. En el Perú, específicamente se encuentran
reguladas en el artículo 1315º del Código Civil el cual determina lo siguiente:
La pérdida de bienes como figura del ilícito penal puede presentarse de dos maneras, las
cuales se diferencian una de otra por la utilización o no de la violencia en la comisión del
delito. En este caso pueden presentarse dos figuras en materia penal, nos estamos refiriendo
al “HURTO” y al “ROBO”. A veces utilizamos estos términos como sinónimos cuando en
realidad tiene una clara definición legal que los distingue totalmente.
EL HURTO
Según el portal DEFINICIÓN ABC el término HURTO significa “… todo acto que
represente la sustracción de algún elemento a una persona de manera ilegítima o sin su
acuerdo o aceptación. El hurto es una forma de delincuencia, quizás menor, pero de todos
modos significa la realización de un acto ilegal ya que implica obtener algo de un modo
incorrecto o sin la aceptación de aquel a quien se le saca el objeto. Los hurtos pueden
llevarse a cabo de maneras muy diferentes y variadas aunque por lo general se trata de
acciones que no requieren demasiada logística o preparación si no que son
aprovechamientos sobre descuidos momentáneos que las víctimas tienen, obviamente, sin
darse cuenta.”20
La figura del Hurto se encuentra consignada en los artículos 185º al 187º del Código Penal y
las penas de cárcel (pena privativa de libertad) varían entre uno (1) y seis (6) años, ello
dependerá si se trata de un hurto simple o agravado.
EL ROBO
Según el portal DEFINICIÓN ABC el término ROBO significa “… aquel delito que se
perpetra contra el patrimonio de un individuo, grupo, organismo, empresa, entre otros. Un
robo, básicamente, consiste en apoderarse de aquellos bienes ajenos, con la única
finalidad del lucro y utilizando la violencia, la intimidación y la amenaza como recursos
para lograrlo.
La figura del Robo se encuentra consignada en los artículos 188º al 189º del Código Penal y
las penas (pena privativa de libertad) varían entre tres (3) y veinte (20) años, dependiendo de
los agravantes.
Aun cuando en materia penal es posible realizar distinciones de ambos ilícitos penales,
tomando como referencia el uso de la violencia, en materia tributaria (tanto para el Impuesto
a la Renta como en el IGV) los efectos son los mismos cuando se producen robos o hurtos.
EL CONCEPTO DE MERMA
En el Reglamento de la Ley del Impuesto a la Renta existe una definición del concepto de
merma, específicamente en el numeral 1 del literal c) del artículo 21º. Allí se menciona que
merma es la “Pérdida física, en el volumen, peso o cantidad de las existencias, ocasionada
por causas inherentes a su naturaleza o al proceso productivo”.
EL CONCEPTO DE DESMEDRO
En el Reglamento de la Ley del Impuesto a la Renta existe una definición del concepto de
desmedro, específicamente en el numeral 2 del literal c) del artículo 21º. Allí se menciona
que desmedro es la “Pérdida de orden cualitativo e irrecuperable de las existencias,
haciéndolas inutilizables para los fines a los que estaban destinados”.
Conforme lo menciona PICÓN GONZALES 28, existen diversos supuestos en los cuales
las existencias se convierten en desmedros:
• Deterioro de los bienes: Ladrillos rotos, tornillos oxidados que están en un almacén y que
no tienen alta rotación, vidrios rotos, copas rajadas, entre otros.
• Bienes perecederos: Bienes con fecha de caducidad que hubieran vencido, como es el caso
de las medicinas que ya venció el plazo de expiración. También es el caso del pan que se
vende embolsado en los centros comerciales en los cuales también expiró la fecha de
comercialización al público.
Para efecto de lo dispuesto en los incisos antes mencionados, se deberá tener en cuenta lo
establecido en el Reglamento de la presente Ley y en las normas del Impuesto a la Renta29.
El reintegro al que se hace referencia en los párrafos anteriores, se sujetará a las normas que
señale el Reglamento.
En el caso del texto del Reglamento de la Ley del Impuesto General a las Ventas, existen
normas que complementan las reglas de la Ley en el tema del reintegro del crédito fiscal. Nos
estamos refiriendo a los numerales 3), 4) y 5) del artículo 6º del mencionado reglamento, los
cuales se desarrollan a continuación:
El numeral 3 del artículo 6º del Reglamento de la Ley del Impuesto General a las Ventas
determina que para calcular el reintegro a que se refiere el Artículo 22° de la Ley del Impuesto
General a las Ventas, en caso de existir variación de la tasa del Impuesto entre la fecha de
adquisición del bien y la de su venta, a la diferencia de precios deberá aplicarse la tasa vigente
a la de adquisición.
El mencionado reintegro deberá ser deducido del crédito fiscal que corresponda al período
tributario en que se produce dicha venta. En caso que el monto del reintegro exceda el crédito
fiscal del referido período, el exceso deberá ser deducido en los períodos siguientes hasta
agotarlo. La deducción, deberá afectar las columnas donde se registró el Impuesto que gravó
la adquisición del bien cuya venta originó el reintegro 30.
El numeral 4 del artículo 6º del Reglamento de la Ley del Impuesto General a las Ventas
considera que en el caso que la desaparición, destrucción o pérdida de bienes cuya
adquisición generó un crédito fiscal, así como la de bienes terminados en cuya elaboración
se hayan utilizado bienes e insumos cuya adquisición también generó crédito fiscal;
determina la pérdida del crédito, debiendo reintegrarse el mismo en la oportunidad, forma y
condiciones establecidas en el numeral anterior.
Debemos hacer notar que la norma reglamentaria hace referencia a cuatro supuestos de
ineficacia negocial distintos: la nulidad, la anulabilidad, la rescisión y resolución
contractual. Los cuatro supuestos de ineficiacia negocial originan la restitución de
prestaciones. Desde este punto de vista, en el caso de la venta de bienes, no procedería el
reintegro de crédito fiscal, sino el ajuste del débito y crédito fiscal a través de la emisión de
la nota de crédito correspondiente.
SUMILLA: Tratándose de la transferencia de bienes del activo fijo que han sido utilizados
para realizar operaciones gravadas con el IGV, será de aplicación lo dispuesto en el primer
párrafo del artículo 22° del TUO LIGV y su reglamento, con prescindencia que dicha
transferencia no resulte gravada con el IGV, como es el caso de la originada en una
reorganización empresarial.
En este supuesto, para que surja la obligación de reintegrar el crédito fiscal es imprescindible
que el bien del activo fijo sea transferido a un precio menor al de su adquisición.
SUMILLA:
1. Para que proceda la deducción de los desmedros deben ser acreditados con la destrucción
de los bienes, según el procedimiento establecido en el inciso c) del artículo 21° del
Reglamento de la Ley del Impuesto a la Renta. A la fecha, no existe norma jurídica alguna
que haya aprobado un procedimiento distinto al señalado.
2. Tratándose de bienes que habiendo sufrido una pérdida cualitativa e irrecuperable,
haciéndolos inutilizables para los fines a los que estaban destinados, son enajenados por el
contribuyente, en aplicación del artículo 20° del TUO de la Ley del Impuesto a la Renta, el
costo de estos bienes podrá ser deducido.
3. No existe la obligación de reintegrar el crédito fiscal en los casos de bienes que hayan
sufrido desmedros pero que hayan sido enajenados porque no se habría producido los
supuestos contemplados en el artículo 22° del TUO de la Ley del IGV e ISC.
RTF Nº 146-3-1998
Se declara nula e insubsistente la apelada, debido a que los reparos no han sido debidamente
sustentados por la Administración al no obrar en autos los correspondientes papeles de
trabajo, y en cuanto al extremo referido al reintegro tributario, si bien existe acuerdo respecto
de que se halla respaldada en un Acta Notarial ésta no obra en autos, por lo que se ordena
que la Administración emita nuevo pronunciamiento previa determinación de si la
destrucción de envases corresponde (1) a productos dañados en el proceso productivo o
productos terminados, o (2) a insumos, pues en el primer caso no procedería el reintegro
tributario debido que el gasto forma parte de la renta gravada por constituir costo de
producción, en cambio en el segundo caso sí procedería el reintegro tributario debido a que
dicho gasto al no constituir costo de producción no forma parte de la renta gravada; Por otro
lado se confirma en cuanto al reparo por haber sustentado su crédito fiscal con facturas
emitida por la Agencia de viaje por el costo total del pasaje cuando los boletos de aviación
tiene la condición de comprobantes de pago, correspondiendo a las agencias de viaje facturar
únicamente por su comisión ya que son comisionistas. En cuanto a las resoluciones de multa
emitidas por no incluir en sus declaraciones ingresos y rentas gravadas, estas se declaran
nulas a efecto que se resuelva en el mismo sentido que la cuestión de fondo, Finalmente se
acepta el desistimiento parcial formulado.
RTF Nº 199-4-2000
Es venta todo acto por el que se transfieren bienes a título oneroso, independientemente de
la designación que se dé a los contratos o negociaciones que originen esa transferencia y de
las condiciones pactadas por las partes; por lo que la transferencia del indicado vehículo si
constituye una venta, y, dado que se realizó antes de transcurridos dos años de haber sido
puestos en funcionamiento y a un precio menor al de su adquisición, la recurrente estaba
obligada a reintegrar en el mes de la venta el crédito fiscal aplicado en la adquisición, en la
proporción correspondiente a la diferencia de precio.
RTF Nº 00417-3-2004
Se revoca la apelada respecto al reparo del Impuesto General a las Ventas por reintegro del
crédito fiscal por la pérdida o destrucción de bienes por caso fortuito o fuerza mayor. Se
señala que de acuerdo a los artículos 18º y 22º de la Ley del Impuesto General aprobado por
el Decreto Legislativo Nº 821 no debe reintegrarse el crédito fiscal por la destrucción de
bienes por caso fortuito o fuerza mayor, debidamente acreditados, un cuando no se haya
contemplado expresamente dentro de las excepciones que señalaba el reglamento, aprobado
por los Decretos Supremos Nº 029-2004-EF y 136-96-EF. En tal sentido, tal como se indica
en el resultado del requerimiento de fiscalización y se advierte de la copia certificada de la
denuncia policial, la pérdida de bienes cuya adquisición generó crédito fiscal, ocurrió como
consecuencia de las inundaciones producidas por el fenómeno del Niño, las cuales califican
como fuerza mayor, por lo que la recurrente no se encontraba obligada a efectuar dicho
reintegro. Se declara que la presente resolución constituye precedente de observancia
obligatoria disponiéndose su publicación en el diario oficial El Peruano.