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Barcelo Bartolomeu - Crecer en Grupo (Scan) PDF
Barcelo Bartolomeu - Crecer en Grupo (Scan) PDF
"H
Crecer en grupo
Una aproximación desde
el enfoque centrado en la persona
BROUWFR
Bartomeu Barceló
88
CRECER EN GRUPO
Una aproximación desde
el Enfoque Centrado en la Persona
Crecimiento personal
C O L E C C I Ó N
<?erendipits
Queda prohibida, salvo excepción prevista en la ley, cualquier forma ÍNDICE
de reproducción, distribución, comunicación pública y transformación
de esta obra sin contar con la autorización de los titulares de propiedad
intelectual. La infracción de los derechos mencionados puede ser cons-
titutiva de delito contra la propiedad intelectual (arts. 270 y sgts. del
Código Penal). El Centro Español de Derechos Reprográficos (www.ee- Prologo. Por Javier Ortigosa
dro.org) vela por el respeto de los citados derechos. 13
Introducción y gratitudes
23
1- Un enfoque para crecer
2. Ser persona en crecimiento
Bartomeu Barceló, 2003
3. El grupo, más que nunca un mar de vida
EDITORIAL DESCLÉE DE BROUWER, S. A., 2003
Henao, 6 - 48009 Bilbao 4. La senda del grupo: signos del acontecer 103
www.edesclee.com 5. Estar presente: una manera de hacer 131
info@edesclee.com
6. La relación con el sí mismo. Tentativas de f o c u s i n g . . . 151
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diciones que favorezcan el despliegue de esta tendencia ac- nos encontramos también incluidos en una sociedad, en nues-
tualizante. Esta tendencia al crecimiento no forma parte ex- tro caso, que puede hacer exigencias diferentes de los deseos
clusivamente del ámbito de la moral, más bien tiene que ver individuales. Esta sociedad está representada en nuestro de-
con el desarrollo biológico y con la capacidad de adaptación sarrollo por nuestros padres, nodrizas, profesores y otros,
en la satisfacción de las propias necesidades, con el impulso quienes, en vez de facilitar el desarrollo del crecimiento au-
intrínseco de cada individuo al restablecimiento del equili- téntico, a menudo interfieren el desarrollo natural". 11
brio emocional y con el deseo interno de desarrollar las pro- En realidad, en este pasaje de Perls, se vislumbra la tesis
pias potencialidades. subyacente de los condicionamientos externos al organismo
En realidad, pudiera ser que esta tendencia al crecimiento como limitadores de la actuación de la tendencia natural a la
y a la actualización, tuviera que ver con una tendencia direc- actualización y al crecimiento, por lo que la finalidad del pro-
cional formativa que opera en todo el universo. Una tenden- ceso terapéutico consistirá en favorecer la reactualización.
cia evolutiva presente tanto en la vida orgánica, como en mi- Fue Abraham H. Maslow (1908-1970), impulsor de la de-
croorganismos, o materia inorgánica como la formación de nominada "tercera vía" en psicología, quién de manera más
cristales. Es sensato imaginar una corriente que opera en el sistemática describió el funcionamiento de la tendencia a la
universo a muchos niveles y hace posible que cada forma se autorrealización en el ser humano y aportó una investigación
origine, a su vez, de una forma más sencilla anterior. exhaustiva con relación a los presupuestos básicos de una
Si bien constituye una de sus hipótesis básicas, el postula- psicología del desarrollo y de la autorrealización. Para
do de la existencia de la tendencia actualizante no es exclusi- Maslow resulta fundamental comprender que la tarea auto-
vo del Enfoque Centrado en la Persona. Otros psicólogos de rrealizadora es un difícil camino para la mayoría de las per-
la psicología humanista y de la corriente sistémica fundamen- sonas y exige mucho valor y esfuerzo prolongado; al mismo
tan sus métodos terapéuticos en la consideración de la capa- tiempo, sugiere que la terapia no es el único medio de ayuda
cidad de respuesta adaptativa del organismo ante situaciones para simplificar este proceso sino que la educación, la vida
emocionales y cognitivas en estado de desequilibrio de las familiar y la dirección de la propia existencia pueden presen-
que mana una cierta inclinación global de reordenación. tar marcos adecuados y eficaces para el despliegue de esta
Así, por ejemplo, Fritz Perls (1893-1970) creador de la psi- tendencia natural.
coterapia gestalt, expresa: "Así llegamos al conflicto básico: ca- Dice Maslow, con un inaudito carácter optimista: "Puesto
da individuo, cada planta, cada animal, tiene sólo una meta que esta naturaleza interna es buena o neutral y no mala, es
implícita - u n solo objetivo innato-: el actualizarse tal como es. mucho más conveniente sacarla a la luz y cultivarla que in-
Una rosa es una rosa; una rosa no intenta actualizarse como tentar ahogarla. Si se le permite que actúe como principio rec-
un canguro, o un elefante no trata de actualizarse como un pá- tor de nuestra vida; nos desarrollaremos saludable, prove-
jaro. En la naturaleza -con excepción del magnífico ser huma- chosa y felizmente...Esta naturaleza no es fuerte, dominante
no-, constitución y salud, potencial y crecimiento, son un to- e inequívoca como el instinto lo es en los animales. Es débil,
do unificado...¿Cuál sería entonces el problema? Nos encon-
11. PERLS, E, Sueños y existencia. Santiago de Chile: Cuatro Vientos, 1987,43.
tramos por un lado con individuos que quieren actualizarse;
delicada, sutil y fácilmente derrotada por los hábitos, presio- te proceso. Lo significativo de esta teoría es que lo organiza-
nes sociales y las actitudes erróneas a su respecto. Aún cuan- do está en fluidez, es inestable; pero cuando una estructura se
do es débil, raramente desaparece en las personas normales e agita y se producen nuevas conexiones, las partes se reorga-
incluso puede ser que tampoco desaparezca en las enfermas. nizan en una nueva estructura de un orden superior. Dice
Aún cuando se la niegue, perdura calladamente presionando Prigogine: "De este modo, lejos del equilibrio los procesos
de continuo por salir a la luz". 12 irreversibles son fuente de coherencia. La aparición de esta
Las nuevas corrientes sistémicas de tratamiento terapéutico actividad coherente de la materia -las estructuras disipati-
tienen también implícita la aseveración de una suerte de pro- v a s - nos impone una nueva forma de mirar, una nueva ma-
pensión autoorganizativa de la globalidad relacional y contex- nera de situarnos respecto al sistema que definimos y mani-
tual de lo que se denomina un sistema, que incluye no sola- pulamos. Mientras que en el equilibrio y cerca del equilibrio
mente al organismo, sino también el ambiente y las interaccio- el comportamiento del sistema está, para tiempos suficiente-
nes entre todos los factores influyentes. En este sentido, la co- mente largos, enteramente determinado por las condiciones
nocida profesora de la Universidad de Venecia, Valeria Uga- de contorno, en lo sucesivo deberemos reconocerles una cier-
zio, manifestó en uno de sus artículos: "El objetivo de las tera- ta autonomía que permite hablar de las estructuras lejos del
pias sistémicas no ha sido por tanto nunca el de promover, equilibrio como de fenómenos de autoorganización". 14
orientar y reconstruir un proceso de maduración sea de la na- Así pues, aunque el postulado de la tendencia actualizan-
turaleza que sea, sino más bien el de infringir ciertas reglas que te no es original, lo genuino del Enfoque Centrado en la Per-
impiden al sistema encontrar una solución adaptativa diversa. sona es que hace de esta idea consistente su hipótesis central
Una vez que tales premisas se hayan removido, el sistema en- y se preocupa en establecer las condiciones necesarias y sufi-
contrará, autónomamente una solución al propio problema". 13 cientes para promover su despliegue en las personas. Estas
Lo más asombroso, para mí, lo representan las nuevas co- condiciones son actitudinales y deben ser aportadas por la
rrientes de la ciencia natural en relación a la posibilidad exis- presencia del facilitador, terapeuta, educador; que las posee
tencial de una tendencia autoorganizadora global en el uni- interna y realmente, y las desprende por su manera de estar
verso. Los trabajos de Ilya Prigogine, físico belga, premio presente creando el clima psicológico en el que es posible el
Nobel en 1977, parecen ir en esta dirección. Su teoría de las crecimiento de la persona.
estructuras disipativas explica los procesos irreversibles que
El mismo Cari R. Rogers resume su tesis principal: "La hi-
tienen lugar en la naturaleza, un movimiento hacia un orden
pótesis central de este enfoque puede ser fácilmente resumi-
vital cada vez más perfecto. Los seres vivos y algunos siste-
da. Los individuos tienen dentro de sí vastos recursos de au-
mas sin vida orgánica son estructuras disipativas definibles
tocomprensión y para la alteración de conceptos propios, ac-
como un todo que fluye altamente organizado en permanen-
titudes básicas y conducta autodirigida. Estos recursos son
12. MASLOW, A., El hombre autorrealizado. Barcelona: Kairós, 1983, 30.
14. PRIGOGINE, L, y STENGERS, I., Entre el tiempo y la eternidad. Madrid:
13. UGAZIO, V., "El modelo terapéutico sistémico: una perspectiva cons-
Alianza Editorial, 1990, 66.
tructivista". en Revista de Psicoterapia. (Barcelona) núm 6-7. (1991)
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susceptibles de ser alcanzados, si se logra crear un clima de- Se han realizado numerosas investigaciones que parecen
finible de actitudes psicológicas facilitativas". 15 confirmar el potencial de estas actitudes 16 y se han aplicado
La primera condición actitudinal tiene que ver con la au- en diferentes ámbitos relaciónales con un elevado grado de
tenticidad, la sinceridad y la congruencia. Cuando el profe- éxito y satisfacción para promover el cambio y el desarrollo
sor, el educador o el facilitador se muestra a sí mismo en la personal y social 17 .
relación, sin esconderse detrás de una máscara psicológica y Desde la muerte de Rogers se ha continuado la investiga-
profesional existe una mayor posibilidad de que la persona ción y la profundización en el Enfoque Centrado en la
facilitada crezca de manera constructiva y se muestre a sí Persona. Así, el Center for Studies of the Person continúa
misma más auténticamente. aportando nuevos elementos de investigación y experimen-
La segunda condición actitudinal para la creación del cli- tación en psicoterapia, educación, grupos de encuentro y ta-
ma psicológico adecuado para el crecimiento y la eficacia la lleres de comunicación. En Brasil, Argentina, México, Estados
constituye la aceptación, el aprecio o la consideración positi- Unidos, Italia, Francia, Portugal, Austria, Reino Unido y
va incondicional. Cuando el facilitador consigue sentir una Japón entre otros países, existen asociaciones y centros desti-
actitud positiva y de aceptación hacia la persona facilitada es nados al estudio y a la práctica del Enfoque Centrado en la
más probable el crecimiento y el cambio. Se trata de dispo- Persona (ECP). Se celebran congresos y encuentros naciona-
nernos a aceptar que la persona facilitada pueda experimen- les e internacionales en donde los distintos profesionales pre-
tar y expresar sus propios sentimientos y que éstos no serán sentan los últimos hallazgos con relación a los distintos as-
juzgados ni manipulados sino considerados como parte sig- pectos significativos del ECP y su aplicación a diversos ám-
nificativa del organismo. bitos de la ciencia, la acción y la propia vida. Para mí, uno de
La tercera condición facilitadora de la relación es la com- los intercambios más interesantes lo constituyen los encuen-
prensión empática. Consiste en la percepción por parte del fa- tros latinoamericanos del ECP que se celebran Manualmente;
cilitador del mundo interno de la persona facilitada con una ac- el último celebrado acaba de tener lugar en octubre de 2002
titud de escucha profunda y activa para recoger con exactitud en Socorro (Brasil). En la Universidad Iberoamericana de
los significados personales que experimenta, en el momento, la
16. Especialmente es destacable la investigación de TAUSCH, R. Facilitative
persona ayudada; y comunicar esta comprensión. Cuando una dimensions in interpersonal relations: verifying the teoretical assumptions of
persona se siente escuchada empáticamente llega a compren- Cari Rogers, 1978. En el campo de la educación, diversos autores, como
der con más precisión el fluir de sus propias experiencias. BILLS (1966), GROSS (1948), WILLIAMS (1930) o ZARET (1966), han
realizado muchísimas investigaciones. En el mismo ámbito educativo,
Estas condiciones son válidas en cualquier tipo de relación yo mismo junto con Victoria Picó presentamos una reciente investiga-
significativa y de ayuda: terapeuta-cliente, profesor-alumno, ción en el X Encuentro Latinoamericano del Enfoque Centrado en la
facilitador-grupo, padre-hijo. De hecho son condiciones váli- Persona que tuvo lugar en octubre de 2000 en Córdoba (Argentina), la
titulamos Educación Centrada en la Persona: el paradigma emergente.
das en cualquier situación en la que el desarrollo de la perso-
17. En la revista Psicoterapia, 32 (1998), 5-14, se publica un artículo muy in-
na sea una finalidad. teresante de SEGRERA, A.: "El enfoque centrado en la persona vigente
y pujante", sobre la aplicación de esta orientación en diversos ámbitos
15. ROGERS, C , El camino del ser. Barcelona: Kairós, 1987, 61. de la intervención educativa, social y organizativa y los retos de futuro.
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México, bajo la coordinación del profesor Alberto Segrera, se Hemos aplicado este enfoque en la enseñanza, en la ani-
han organizado los "Archivos Internacionales del Enfoque mación sociocultural y educación en el tiempo libre, en la di-
Centrado en la Persona" que cuentan con más de 20.000 vo- námica de grupos y en otros ámbitos organizacionales. Los
lúmenes, libros y trabajos de investigación que hoy se pue- resultados han sido admirables y satisfactorios. Quizá lo más
den consultar a través de internet. El funcionamiento de la Red importante para mí del ECP es que representa un estilo de vi-
Iberoamericana del ECP (RED-e), o de la Red brasileira y el de da profundo y revolucionario, no solamente un método para
la Client-Centered Theraphy/Person-Centered Approach la intervención social y educativa.
Network (CCTPCA), en castellano, portugués e inglés res- En cualquier caso, a partir de los postulados y la vivencia
pectivamente, permite el intercambio de ideas, reflexiones e del Enfoque Centrado en la Persona, hemos ido perfeccionan-
investigaciones entre los distintos profesionales. do, en los últimos veinte años, un modelo de facilitación de
Nuevos elementos y aportaciones realizadas últimamente grupos y de intervención socioeducativa que nos permite, con
sobre el funcionamiento de la personalidad, las relaciones in- operatividad, crear las condiciones para que el grupo desplie-
terpersonales y la relación de ayuda en psicoterapia y psico- gue su mayor potencial relaciona!, creativo y productivo. La
logía clínica; el análisis de los procesos de aprendizaje y en- intervención del facilitador, su presencia en el grupo, su ma-
señanza y la integración posible de los binomios afectivi- nera de relacionarse, es lo que hace posible la creación del cli-
dad/efectividad, libertad/disciplina, relación profesor ma necesario y adecuado. Hemos aprendido, en fin, que lo
alumno en educación; el impacto de la creatividad y la pro- más significativo para el despliegue del potencial del grupo
ductividad o la cooperación en equipos de trabajo en psico- no son los objetivos propuestos, ni los contenidos de la tarea
logía de las organizaciones; así como otros aspectos relacio- de grupo, ni siquiera los recursos disponibles, sino, sobre to-
nados con la solución de conflictos sociales, desarrollo hu- do, el tipo de relación que establecemos con el grupo y con las
mano y cooperación política e internacional; nos permiten un personas que lo conforman; y esta relación está basada en las
reconfortante optimismo en el proceso de investigación, de- actitudes del facilitador para fomentar el crecimiento.
sarrollo y difusión del Enfoque Centrado en la Persona. La intención de este libro es, en este sentido, intentar mos-
La práctica, la teoría y la investigación establecen que el trar este modelo de intervención y facilitación, y hacerlo ope-
Enfoque Centrado en la Persona se fundamenta en la con- rativo para su práctica y aplicación desde un estilo centrado
fianza básica en el organismo. En cada organismo, en cual- en la persona. Ciertamente no hay recetas mágicas ni progra-
quier nivel, existe un movimiento subyacente hacia el cum- mas milagrosos de intervención grupal; sin embargo, puede
plimiento positivo de sus posibilidades inherentes. En la per- ser posible acercarnos, desde diversas aristas, al conocimien-
sona también existe esta tendencia natural hacia un desarro- to y la interiorización de una manera de estar en el grupo que
llo más completo. Esta tendencia actualizante es una tenden- proporcione la confluencia de factores que hacen viable des-
cia constructiva. Conocemos las condiciones necesarias y su- prender un potencial creativo y eficaz. Este es mi deseo y
ficientes para el despliegue de esta tendencia. Estas condicio- constituye un reto interesante y una aventura entrañable.
nes son actitudinales y se pueden aplicar a cualquier tipo de
relación significativa y de facilitación.
2
SER PERSONA EN CRECIMIENTO
3
clado en nuestro núcleo personal y dispuesto a extenderse en
la dinámica de nuestro proyecto vital para hacer de nuestra
vida un proceso satisfactorio, gratificante, eficaz y creativo.
32. La prensa norteamericana y europea se hacía eco, de vez en cuando, de 33. HARRIS, M. Introducción a la antropología general. Madrid: Alianza
las repercusiones sociales de este movimiento que, sin estar organiza- Editorial, 1999, 730.
do ni poseer una estructura asociativa determinada, se consolidó como 34. Rogers parecía creer que este movimiento estaba muy consolidado:
una fuerza influyente. Una famosa periodista americana, Jane Howard, "Quienes crean que el grupo de encuentro constituye una manía o un
recorrió en 1969, durante todo un año, varios de los centros participan- fenómeno que afecta en forma temporaria a unas pocas personas debe-
do en las experiencias intensivas que se ofrecían y entrevistando a sus rían detenerse a meditar nuevamente sobre el asunto. En el turbulento
líderes. Recogió sus vivencias en un curioso libro: HOWARD, J: porvenir que nos aguarda, la tendencia hacia la experiencia grupal in-
Tóqueme, por favor. Reportaje sobre el Movimiento de Potencial Humano. tensiva se vincula con graves e importantes problemas referentes al
Barcelona: Kairós, 1973. En otro libro, cuya referencia es cambio... Es un movimiento de honda significación, y el rumbo que to-
SCHÜTZENBERGER, A y SAURET, M. Nuevas terapias de grupo. me en los años venideros tendrá gran repercusión en todos nosotros,
Madrid: Pirámide, 1980, el lector puede encontrar una exposición de para bien o para mal". (ROGERS, C. Grupos de encuentro. Buenos Aires:
cada una de las modalidades de estos grupos. Amorrortu, 1979,178.
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Human Potential Movement fue decayendo con los nuevos fuerzas en progresión que contribuyeron significativamente
tiempos de la sociedad hiperindustrializada de finales del al desarrollo personal vislumbrando nuevas y distintas for-
milenio que ofrecía otros valores basados más en el tener que mas de relacionarse entre las gentes en las que la sinceridad,
en el ser, y mostraba los grandes avances tecnológicos y eco- la escucha, la transparencia y el aprecio sujetaban la dinámi-
nómicos que encajaban poco en la manera de vivir más per- ca de los procesos de interacción.
sonalizada e intimista que pretendía el humanismo de los La Conferencia de Oíd Saybrook, en 1964, puso las bases de
grupos de encuentro el cual, quizá, no supo o no pudo adap- lo que sería una nueva corriente en la psicología y la psicote-
tarse a las nuevas corrientes de la mentalidad más racionalis- rapia que se desarrolló rápidamente traspasando las fronteras
ta y positivista de los últimos años. del ámbito médico y psicológico. Los miembros de la "tercera
Algunos sobrevivientes de este movimiento, como el mis- fuerza" recuperaron las aportaciones de la filosofía fenómeno-
mo Gendlin, reconocen parte de este fracaso: "Después de al- lógica de Husserl (1859-1938) cuyo punto de partida era la con-
gunos años todos notamos que esos grupos no tenían ningu- cepción del propio "yo" trascendental como sujeto constitu-
na posibilidad de continuación... El Movimiento de Grupos yente del saber absoluto y la consideración de la estructura de
de Encuentro empezó a disminuir y a morir en torno a nues- la conciencia como intencionalidad. Completaron sus funda-
tra incapacidad de construir patrones sociales institucionales mentos con las aseveraciones de la filosofía existencial de
en los que se pudiera continuar viviendo con todo este nue- Heidegger (1889-1976) y Sartre (1905-1980) en virtud de las
vo mundo de complejidad interna humana... El Movimiento cuales se revaloriza la idea del hombre como centro, la subjeti-
de los Grupos de Encuentro se alimentaba exclusivamente de vidad como marco referencial en el tiempo finito, el sentido de
gente nueva, pero no desarrolló ninguna continuación, no la existencia como proyecto y la libertad limitada por la pre-
creó ningún patrón de encuentro o de asociación que pudie- sión del otro a partir de lo cual el hombre, como único respon-
ra llegar a formar parte de la estructura social".35 sable de sí mismo, puede comprometerse en una acción posi-
Sin embargo, el movimiento de los grupos de encuentro y tiva de libertad radical que conlleve a su autorrealización.
las aportaciones de la psicología humanista en las que se ba- Creo que no está de más reconocer, en todo caso, que este
saba, tuvo y sigue teniendo grandes repercusiones en las per- movimiento aparecido en la década de los sesenta, con todos
sonas y en la sociedad. Desde que en la primavera de 1961 sus defensores y detractores, con todos sus conflictos y disi-
apareciera en Norteamérica el Journal of Humanistic dencias, contradicciones y paradojas; ha tenido y tiene, hoy
Psychology como instrumento de expresión de la psicología por hoy, una gran incidencia en el campo de la psicología, la
de la "tercera vía" -en contraposición con las tendencias con- pedagogía, la psicoterapia y la misma acción social. Incluso
ductistas y psicoanalíticas del momento-; y un año después otros ámbitos ajenos como el ecologismo, los nuevos movi-
A.H. Maslow, junto con un grupo de psicólogos, fundara la mientos feministas, las corrientes de liberación sexual, de
Association for Humanistic Psychology, se inició un cúmulo de educación por la libertad y otras nuevas formas de entender
el comportamiento humano y la estructura de las relaciones
35. GENDLIN, E. " Logros y problemas en la psicología humanista" en
ALEMANY, C. Psicoterapia Experiencial y Focusing. La aportación de E.T.
personales; son, en buena parte, fruto de las influencias de la
Gendlin. Bilbao: Desclée De Brouwer, 1997, 432. psicología humanista y de la cultura de los encuentros.
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Es cierto que si analizamos estas contribuciones hay que posterior sino como herramientas para favorecer una expe-
admitir que, en buena medida, forman parte de una tenden- riencia concreta válida en sí misma.
cia cultural más amplia que tuvo lugar en esos tiempos no Y nos dota, en fin, de un cuerpo de investigación y teoría
tan lejanos. Los elementos contraculturales de la comunidad aplicables a múltiples campos en los que las personas y los
hippie, los avatares producidos por las nuevas tendencias mu- grupos constituyen el centro de la acción socioeducativa. Así,
sicales expresadas en Woodstock en agosto de 1969 o, inclu- para el movimimento del potencial humano, lo esencial de la
so la transformación de una institución tan tradicional como experiencia en el grupo radica en facilitar la madurez de la
la Iglesia a través del Concilio Vaticano II, forman parte de un persona que, en esta concepción, consiste en estar en contac-
complejo conjunto de fenómenos históricamente simultáneos to con los sentimientos propios, abierta a la experiencia del
que, lejos de ser mera casualidad a pesar de lo inexplicable, momento y capaz de comunicarse íntimamente con los indi-
no pueden ser sino la expresión de un paso en el proceso es- viduos de su entorno. En cierto modo se pretende una diná-
piritual y cultural de la humanidad. mica más intrapersonal que interaccional y se antepone en
No obstante no podemos obviar, aunque sea en el seno de grado sumo el experienciar afectivo al aprendizaje de la efi-
un marco más particular, las especificidades aportadas por la cacia que, prácticamente, queda excluido de la experiencia.
psicología humanista que, al fin y al cabo, se basa en una sen- Los grupos de encuentro de los sesenta no eran, en cual-
cilla premisa: las personas son importantes y su potencial es- quier caso, los primeros avatares de los experimentos grupa-
tá siendo obstaculizado, por lo que si conseguimos un entor- Íes. Habían surgido, con gran probabilidad, como respuesta
no adecuado, los individuos tienen la capacidad de desarro- de cambio a los Training Groups del NTL (National Training
llarse como personas sanas, autónomas, responsables y libres. Laboratory) en Estados Unidos que, durante más de diez
En realidad, la psicología humanista nos dota de un con- años serían los auténticos protagonistas de la dinámica de
junto de valores para promover el crecimiento personal y la grupos norteamericana.
transformación dando prioridad a las necesidades humanas, El primer laboratorio grupal tuvo lugar en Bethel (Maine)
advirtiendo la importancia de lo subjetivo y lo intuitivo en el en el norte de los Estados Unidos en el verano de 1947. Había
ser humano, contemplando el riesgo en lo relacional y en la sido diseñado por Kurt Lewin -el auténtico padre de la diná-
toma de decisiones vitales, y subrayando las cualidades hu- mica de grupos, que no pudo asistir al evento al sorprender-
manas distintivas: capacidad de elegir, creatividad, valora- le la muerte a principios del mismo año-, y sus colaborado-
ción y autorrealización. res Leland Bradfort, Lippit etc. La experiencia consistía en or-
Nos aporta también un amplio abanico de técnicas y re- ganizar un curso constituido por diversos grupos dedicados
cursos útiles para facilitar el crecimiento personal y la diná- a contemplar, todo el día, su propia vida, a elucidar las fuer-
mica interaccional en los grupos, y nos confiere habilidades zas que iban surgiendo y su dinámica con el objetivo de ad-
en las relaciones personales y sistemas de facilitación grupal. quirir aprendizajes para el ejercicio posterior del liderazgo.
Estos instrumentos utilizados en los grupos de encuentro Desde esta primera experiencia, los T-groups pretendían la
eran, a la vez, el medio y la finalidad, en tanto no estaban di- comprensión del proceso grupal por parte de los participantes
señados como procedimientos para lograr un aprendizaje en el laboratorio intensivo, el análisis de las fuerzas condicio-
rs i
nantes de la conducta de los miembros del grupo, el aprendi- El grupo, para Kurt Lewin, es este campo de fuerzas opues-
zaje de las condiciones adecuadas para el desarrollo del grupo, tas que mantienen un equilibrio hasta que se produce un cam-
la observación de las interrelaciones entre sus miembros y la bio a causa del aumento o disminución de la fuerza que modi-
consecución de habilidades necesarias para poder liderar un fica este equilibrio. El grupo es concebido, en cualquier caso,
grupo en otras situaciones distintas. En cierta manera consti- como una globalidad dinámica, un sistema interdependiente
tuían grupos de formación y aprendizaje para que sus partici- distinto, aunque no independiente, de sus partes.
pantes adquirieran habilidades de facilitación de grupos para La concepción lewiniana y las experiencias de T-groups
mejorar su eficacia. Tenían pues una finalidad funcional y pe- acentúan el aspecto organizacional del grupo y las influen-
dagógica, y se interesaban por los fenómenos interpersonales cias conductuales entre sus miembros. En el grupo el indivi-
más que por el proceso experiencial de cada persona. duo es sólo una pequeña parte de un sistema poderoso cons-
La base teórica de sustento era la denominada "teoría del tituido por sus normas, sus esquemas de comunicación, la
campo" del mismo Kurt Lewin, el cual intentó adecuar la teo- forma de ejercer el liderazgo, la estructura de roles y las fun-
ría física del campo (Faraday, Maxwell, Hertz, Einstein) a la ciones de eficacia. La persona como sujeto autónomo con un
dinámica grupal y social de acuerdo con las investigaciones proceso experiencial interno afectivo y emocional, con su es-
que realizó en la década de los treinta en la Universidad de pacio interior flexible poco encajable en un patrón objetiva-
Iowa y más tarde en el Massachussets Institute of Technology. do, tiene poca cabida en las teorías de Lewin remarcadoras
Esta teoría física del campo es recogida para la psicología, de la tensión, la valencia y el vector como conceptos de aná-
en un principio, por la escuela de la Gestalt, o psicología de la lisis del comportamiento. En palabras de Max Pagés: "Hay
forma (Wertheimer, Kóhler, Koffka) que sostiene que cada en la obra de Lewin una concepción técnica de la acción y del
objeto es definido de una forma determinada por el contexto cambio, basada en la coacción, al lado o más bien por debajo
total en el que está incluido. La percepción pues está deter- de una concepción psicológica, basada en la comunicación.
minada por las relaciones entre los componentes de un cam- Las estructuras más íntimas del grupo no son reconocidas
po perceptual más que por las características fijas de cada por él como realidades psicológicas, sino que se imponen a
componente particular. los miembros como cosas". 36
Así Lewin explica la conducta individual a partir de la es- No es de extrañar, entonces, que unos años después de
tructura que establece un sujeto y su medio ambiente en un Bethel se produjera la reacción del Movimiento del Potencial
momento determinado. Esta estructura es un campo dinámi- Humano centrando el énfasis en el crecimiento personal inte-
co, un sistema de fuerzas en equilibrio que cuando se rompe rior, en la comunicación afectiva y en la significación de la
genera una tensión. Se parte de la idea de que el grupo pue- misma experiencia per se como espacio de desarrollo y madu-
de ser considerado como un lugar en donde las personas ración de la persona. A la búsqueda del por qué lewiniano su-
constituyen singularidades como fuerzas que se influyen cedió el interés por el cómo de los encuentros, a la explicación
mutuamente. El campo o espacio vital comprende todas las causal de la historia grupal se reaccionó con la sensibilización
influencias afectivas e intelectuales que afectan una conduc-
36. PAGES, M. La vida afectiva de los grupos. Barcelona: Fontanella, 1977,576.
ta concreta en un momento determinado.
n; i
por la vida en el presente del grupo, a las fuerzas interaccio- Para Bion38 el grupo que actúa a nivel racional y conscien-
nales les sucedieron los procesos internos del experienciar y el te orientado hacia la consecución de la tarea asignada siem-
percatarse; los grupos centrados en su evolución, sus tensiones pre va acompañado de impulsos afectivos potentes que pue-
y sus cambios se convirtieron, en fin, en grupos cuya existen- den favorecer o dificultar la progresión en la eficacia. Este
cia se basaba en la posibilidad de vivir una experiencia afecti- fuerte componente emocional emerge irracionalmente y de
va importante en un clima de comunicación "auténtica", como manera espontánea, y suele ser una manifestación de la re-
entre paréntesis respecto a la vida ordinaria y familiar. gresión que implica que los individuos se despersonalicen en
De los laboratorios de Bethel, sin embargo, aprendimos beneficio de la ilusión de grupo como entidad.
también numerosas aportaciones. Desde entonces sabemos El componente emocional, para Bion, se representa en tres
que los grupos son fuerzas poderosas que mantienen en su categorías que están presentes en el inconsciente grupal aun-
seno un gran potencial y que funcionan como unidad totali- que, según el momento del proceso, sólo una de ellas resulta
taria distinta a la simple suma de sus partes. Hemos apren- perceptible. Llama a las categorías "supuestos básicos". El
dido condiciones facilitadoras para generar una mayor efica- primer supuesto es el de la dependencia en el que el grupo,
cia y una mejor organización de las tareas de los grupos, y he-
simbolizando un momento de la evolución infantil, desplaza
mos comprendido la dinámica del proceso evolutivo de los
toda su responsabilidad hacia el líder. Al segundo supuesto
grupos como organismo social que tiene vida propia.
lo denomina emparejamiento, mediante el cual el grupo de-
Con justicia habría que dirigir la mirada, en esta misma
sea liberarse de los sentimientos de odio y aplazar el com-
época, hacía el otro lado del Atlántico. En Londres, el
promiso del presente. Al tercer supuesto lo designa de ata-
Tavistock Institute of Human Relations fundado en 1957, de ins-
que-huida, en virtud del cual el grupo se une para defender-
piración analítica, organizaba también sus experiencias de
se de cualquier amenaza interna o externa.
grupo basadas en las aportaciones de W.R. Bion y A. K.
De Tavistock aprendimos a tomar en cuenta las poderosas
Rice37. Tavistock ponía el énfasis a lo que sucede en el grupo
fuerzas que subyacen en el inconsciente del grupo y a valo-
en un nivel más profundo aunque ello suponga desatender
rar las importantes fuentes de conflicto de liderazgo que mo-
otros aspectos más visibles de las relaciones interpersonales.
difican la conducta grupal. Y, sin duda, desde las aportacio-
Bion y sus colaboradores centran su atención en los aspectos
nes de Bion, podemos activar mecanismos para facilitar los
conflictivos del grupo, especialmente los producidos por la
aprendizajes significativos y penetrantes denominados in-
relación con el liderazgo y la autoridad, y en poner en con-
tacto al grupo con su propio inconsciente. sight que cada participante puede protagonizar y, en cual-
quier caso, permanecer tranquilos si alguno no ha sentido se-
37. El lector encontrará una buena exposición de las distintas tendencias mejante experiencia.
psicosociológicas de dinámica de grupos en el libro de LÓPEZ-YARTO,
L. Dinámica de grupos. Cincuenta años después. Bilbao: Desclée De 38 .Se puede encontrar una exposición de las experiencias y teorías de Bion
Brouwer, 1997. También en el libro de GONZÁLEZ, P. (ed.) y VEN- en dinámica de grupos en BION, W.R. Experiencias en grupo. Buenos
DRELL, E. (ed). El grupo de experiencia como instrumento de formación. Aires: Paidós, 1979; y en BION, W.R. Aprendiendo de la experiencia.
Barcelona: EUB, 1996. Barcelona: Paidós, 1980.
Parece posible, ciertamente, que con una ligera mirada mento temporal de la vida grupal. Este hecho comporta una
atrás hacia Bethel de los cuarenta y cincuenta hasta Esalen de distinción fundamental entre un grupo y una organización
los sesenta y setenta, de Maine a California, podamos confluir, institucional que tiene existencia independientemente de las
mirando hacia adelante, en la búsqueda de nuevos modelos de personas que circunstancialmente la forman. Un grupo, a pe-
facilitación y experiencia grupal que nos aporten, en los inicios sar de tener vida por sí mismo, está conformado por las per-
del nuevo siglo, nuevas concepciones y herramientas para ani- sonas que le pertenecen, puede haber un cambio de alguna o
mar estos organismos grupales en los nuevos tiempos, y crear varias personas en el transcurso de la vida del grupo que in-
las condiciones para que desplieguen todo su potencial de de- fluirá en su dinámica; sin embargo esta influencia formará
sarrollo para ayudar al crecimiento y aprendizaje personal y parte del proceso vital del grupo. Por el contrario, las mismas
fomentar la creatividad y la eficacia grupal. personas, después del punto final del grupo podrán formar
un nuevo grupo que será distinto porque tendrá una nueva
Un intento de describir la estructura de este organismo vida, un diferente segmento temporal.
llamado grupo (fig.l) Fig.l. La estructura del grupo
Un aula de alumnos con su profesor, un equipo docente
con su coordinador, un conjunto de trabajadores en un de-
1
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,1
y la muerte del grupo. Esta se produce cuando existe un es-
pacio "vacacional" significativamente largo entre el quehacer
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del grupo y la nueva tarea, aunque tenga que ser realizada POTENCIAL DEL GRlJPC)
por casi las mismas personas. Un curso escolar, por ejemplo,
determina generalmente muchas vidas de grupos, pero esta Es en el "durante" del grupo donde acontecen la mayoría
vida puede venir también determinada por una experiencia de los fenómenos grupales. En el transcurso de nuestra expe-
intensiva, por un tiempo de trabajo en común o por otras di- riencia de facilitación de grupos, en los últimos veinte años,
versas circunstancias. Lo significativo es percibir este seg- hemos presenciado múltiples y diversos acontecimientos en
la vida de los grupos y hemos intentado, en función de gra- la superficie de este grupo. Algunos grupos están organiza-
baciones, observaciones y filmaciones; establecer hipótesis y dos de una forma más jerarquizada y otros de manera más
comprobaciones para encontrar leyes generales de funciona- democrática. Podemos percatarnos también de cómo es la
miento comunes a estos grupos. distribución de tareas y responsabilidades, cómo planifican
Hemos percibido que el grupo conforma una unidad or- su trabajo, cómo formulan sus objetivos y cuál va siendo su
ganísmica con gran energía interna y, en el seno de esta uni- cumplimiento. Podemos vislumbrar su sistema de evalua-
dad, son muchos los factores que, de manera simultánea, in- ción en relación a las actividades del grupo y a su propio fun-
ciden en su fluir permanente. Las emociones y los pensa- cionamiento y podemos, en fin, observar los procedimientos
mientos de las personas pertenecientes al grupo, las comuni- que usan para mejorar su eficacia.
caciones que se producen o las que se reprimen y amagan, las Todos estos procesos forman parte de un nivel patente del
percepciones mutuas de los individuos, la conciencia o in- grupo, perceptible por un observador aunque no sea muy ex-
conciencia respecto a las posibilidades del propio grupo y su perto. Este nivel es la cabeza del grupo, su nivel organizati-
progreso en relación al cumplimiento de las metas, las inte- vo, es el espacio de la racionalidad del grupo.
racciones relaciónales, los encuentros y los conflictos... Todo Es en este espacio de racionalidad grupal donde el grupo
este conjunto de fenómenos forma parte de la gran energía de configura su quehacer, su tarea como grupo. Los grupos se
un grupo. Esta energía está allí, en el seno del organismo gru- reúnen para planificar, para discutir algún aspecto de sus ac-
pal que tiene vida propia total más allá de la vida de las per- tividades, para señalar objetivos, para organizar acciones, pa-
sonas que lo forman. Esta energía siempre emerge, de distin- ra distribuir responsabilidades, para decidir sobre algo, para
tas maneras, canalizada o no, en el proceso grupal y hace que evaluar y plasmar su memoria. Quizá podemos concluir que
el grupo funcione como unidad global siendo, entonces, más este conjunto de procesos tiene lugar en una área temática del
que la simple suma de personas. grupo. Esta área temática es el qué del grupo. Contiene pues
Como organismo social el grupo es un mar de vida. Como las funciones de planificación y programación de objetivos y
en el océano, se producen en el grupo tormentas y momentos actividades, la organización de las tareas, la distribución de
de calma, olas y mareas, vientos veloces o suaves brisas y, co- responsabilidades y la evaluación.
mo el mar, siempre está en permanente fluidez, nunca inmó- No resulta difícil imaginarnos el tipo de comunicaciones
vil. Aunque reine la calma en la superficie quizá en el fondo que se producen en este ámbito temático. Tienen más bien un
se forjen, algunas veces, fuertes corrientes. aspecto de intercambio de ideas, de debate, de racionalidad
Como las personas, los grupos tienen también "cabeza y en la que la implicación emocional es casi nula. Las discusio-
corazón", y a veces la razón de la cabeza no encaja bien con nes que se producen no afectan mucho a nuestro sentir emo-
las razones del corazón. El grupo piensa y siente y no siempre cional, tienen un carácter más político que personal e, inclu-
actúa de acuerdo con el pensar reflexivo que queda muy con- so corporalmente, la energía está concentrada más en la ca-
dicionado por las fuerzas emocionales del sentir del grupo. beza que en el pecho.
Observando a un equipo de personas que realizan una ta- Tampoco resulta complicado entrever que la función del
rea determinada nos podemos dar cuenta de la estructura en liderazgo deberá ser moderadora, controlando los tiempos
para que las reuniones no sean eternas e ineficaces y que de- Normalmente, cuando hablamos de dinámica de grupos
berá existir un procedimiento en la toma de decisiones. nos referimos, de manera parcial, a esta área funcional del
Todos los grupos formados para algo tienen esta área en grupo. A ella pertenecen los componentes estructurales de la
funcionamiento. El problema se presenta cuando se convier- participación de los miembros, los roles que se establecen, el
te en el único ámbito del funcionamiento grupal, en un gru- status, los intercambios de informaciones, los procedimientos
po de trabajo. Entonces la energía subyacente, presente en el de toma de decisiones, los compromisos respecto de la tarea
seno del grupo, debajo de la superficie, impulsa su emerger y todas esas cuestiones de las que la mayoría de manuales de
y, como no existen canales en su fluir, puede desbordarse por dinámica de grupos ofrecen recursos y técnicas, a modo de
otros huecos y generar ineficiencia grupal a causa de conflic- ejercicios o "dinámicas" para practicar y mejorar nuestro ni-
tos no expresados y ocultos. vel funcional.
En el espacio racional del grupo, en su nivel organizativo, Sin embargo, quedarnos aquí, al borde de la superficie,
existe todavía una nueva área que bordea la superficie pero tampoco constituye ninguna panacea del buen funcionamien-
que está situada por debajo de la línea más perceptible que to grupal. A lo sumo, ejercemos como una especie de pedago-
hemos descrito anteriormente. Podemos denominar a esta gía activa -que ha proliferado en estos últimos años- pensan-
área como ámbito funcional del grupo. do que facilitamos el grupo de manera correcta y eficaz.
El ámbito funcional contiene los procesos y los aconteci- Lo que sucede en el área funcional del grupo afecta un po-
mientos relacionados con la manera de funcionar del grupo co más al sentir de las personas y del grupo, a su emociona-
como organización. No es el qué del grupo sino el cómo. Cuál lidad; pero sigue estando localizado en la cabeza y no genera
es su manera de planificar, cómo se organiza, cómo es el li- excesiva implicación. La energía subyacente continúa inten-
derazgo, cómo se toman las decisiones. A veces este ámbito tando emerger por cauces desconocidos que siguen estando
funcional no se corresponde en sus principios con el área te- cubiertos en el ámbito funcional.
mática. Un grupo puede discutir y acordar, por ejemplo, que Tanto el área temática como el área funcional forman parte
es preciso evaluar no sólo las actividades que realiza sino re- del nivel organizativo del grupo, de este espacio de racionali-
visar también el ejercicio de la responsabilidad por parte de dad grupal en el que las cuestiones se plantean y discuten a
cada miembro; y, sin embargo, no dedicar tiempos y espacios modo de debate y participación. Es un funcionamiento equi-
a esta última función en la práctica. Puede decidir adoptar las valente a cuando una persona reflexiona sobre sus aspectos
decisiones de forma democrática y consensuada, y, no obs- vitales, sus actividades y sus problemas y adopta propósitos
tante, existir un líder institucionalizado o no que en realidad que puedan reportarle cambios aunque nunca se produzcan.
adopta las decisiones por sí mismo. Sin embargo este nivel organizativo es muy importante y
Este ámbito funcional me parece mucho más interesante significativo en la vida de los grupos porque de su buen fun-
en la dinámica de grupos. No es tan perceptible como el área cionamiento dependen, en gran parte, los grados de produc-
temática pero condiciona mucho más la eficacia del grupo tividad y de eficacia. Establecer condiciones facilitadoras en
por lo que es deseable que los grupos dediquen tiempos y re- este espacio de racionalidad será, sin duda, muy relevante
cursos a mejorar los procesos funcionales. para un buen dinamizador de grupos.
El grupo como organismo tiene también su espacio de la
La mayoría de las personas que conforman un grupo tie-
sensibilidad, su nivel afectivo. En este espacio ocurren las ri-
nen conciencia de los elementos de estas áreas ya que forman
sas y los llantos, las euforias y las depresiones, las emociones,
parte de un nivel patente del grupo. Quizá no manifiestan o
los sentimientos, las comunicaciones significativas y las inte-
no explicitan su opinión pero la tienen, y perciben un deter-
racciones, los encuentros y los conflictos, los deseos, los amo-
minado grado de satisfacción o insatisfacción respecto al fun-
res y los odios, las evasiones, los miedos, los riesgos, las
cionamiento grupal.
aventuras interpersonales. Casi toda la energía del grupo se
Así, uno de los elementos predominantes de este ámbito
genera en este espacio sensible del grupo. Estas fuerzas están
funcional es lo que se denomina el rumor como manifesta-
ción particular del proceso de comunicación. El rumor y la siempre latentes en la vida de un grupo aunque en pocas oca-
conspiración se producen cuando no hay mecanismos para siones los grupos dedican tiempo y espacio a explicitarlas.
canalizar la energía perceptiva respecto a la insatisfacción del En el espacio de sensibilidad del grupo existe un área lúdi-
funcionamiento grupal. Los rumores son un reflejo de la an- ca. Todos los grupos buscan espacios de celebración en los que
siedad y de las expectativas de los individuos que intentan el elemento dominante es el juego, la risa, el canto, la mesa, la
abarcar los pocos aspectos conocidos para deducir lo que si- tertulia, la marcha, las actividades recreativas grupales.
gue siendo desconocido. Siendo imposible conocer la totali- Algunos grupos confunden el trabajo afectivo con su implica-
dad de las sensaciones y opiniones de los miembros de un ción en esta área lúdica y argumentan que estos espacios búdi-
grupo respecto al funcionamiento grupal en un momento de- cos son los adecuados para la "comunicación interpersonal".
terminado porque, entre otras cosas, el funcionamiento va Es cierto que esta parte lúdica del grupo favorece una dis-
cambiando constantemente y también porque no siempre se tensión de los conflictos, una diferente forma de relacionarse
expresan en el seno del grupo estas sensaciones y opiniones; que no sea exclusivamente en el ámbito de la tarea y permite
la situación de grupo origina permanentemente rumores. hacer surgir la energía comprimida en el proceso grupal.
Los sentimientos referidos al área funcional del grupo que También es cierto sin embargo que, en muchas ocasiones, lo
no han sido expresados y las personas que en el grupo suelen que sucede en el ámbito lúdico del grupo no deja de ser una
ser más silenciosas tienden a suscitar rumores. forma de evasión.
En nuestra acción facilitadora resulta conveniente pues Es en esta área lúdica donde se expresan verbal y no ver-
dedicar tiempo a las dos áreas del espacio de racionalidad: balmente sentimientos y emociones disfrazados irónicamen-
por una parte a introducir métodos, técnicas e instrumentos te que pueden permitir ocultar los temores a la comunicación
para dinamizar y hacer más efectivas las reuniones de los interpersonal para no asumir riesgos que se consideran inne-
grupos con la finalidad de planificar y evaluar con más efi- cesarios y, a la vez, relativizar fuertes tensiones que se hayan
ciencia; por otra parte, sería enriquecedor para el trabajo gru- producido. Al mismo tiempo, en esta área lúdica se generan
pal dedicar tiempo a explicitar el sistema de funcionamiento, nuevas relaciones interpersonales, distintas percepciones de
a revisarlo, a expresar nuestras satisfacciones e ingratitudes los demás y originales interacciones porque se consiente un
para que nuestra tarea y nuestra pertenencia al grupo resul- clima más permisivo que favorece el mostrarse de una ma-
tasen más gratificantes. nera más auténtica y vulnerable ante los demás.
El elemento dominante del área lúdica es el humor. tanto por la distensión que provocan como para facilitar los
También está vinculado a las tensiones del grupo y a lo ocul- procesos creativos: "La distracción de estímulos novedosos, de
to o cubierto. Cuando se expresan algunos sentimientos de vistas magníficas, de culturas extrañas, permite que los proce-
manera humorística e irónica, de tal forma que esta comuni- sos mentales subconscientes establezcan conexiones que resul-
cación no produzca demasiados recelos o temores, puede tan improbables cuando el problema se aborda con la lógica li-
producirse una descarga emocional significativa seguida de neal aprendida de la experiencia. Y después de que la conexión
una sensación de alivio. inesperada se traduce en una intuición, el entorno familiar
Los grupos crean su propia cultura del humor. Esto les vuelve a ser más propicio para completar el proceso; la eva-
permite expresar sensaciones, emociones y acontecimientos luación y la elaboración se realizan más eficazmente en la at-
que han revestido alguna particular importancia en la diná- mósfera sobria donde prevalece la lógica del campo". 40
mica del grupo. En palabras de Joseph Luft: "Cabe bromear, Del área lúdica nacen intuiciones que pueden derivarse al
por ejemplo, en torno a la adopción de iniciativas o al grado espacio de racionalidad del grupo donde el grupo puede dar-
de estructuración, y estos hechos humorísticos pueden con- les forma para nuevas acciones creativas; y se provocan nue-
vertirse entonces en una parte de la cultura del grupo. Por vas corrientes y mareas que impulsan el proceso del grupo
afectar el humor a cuestiones vitales, si bien de un modo es- para vivenciar nuevas experiencias. Con todo, abusar de lo
pecial y limitado, facilita la comunicación y la adopción de lúdico o sustituirlo por lo afectivo produce también inefica-
decisiones. El humor, evidentemente, puede servir de medio cia e incomunicación real ya que nuevamente nos quedamos
de expresión de hostilidad en el seno del grupo, y puede en la superficie, esta vez la del espacio de la sensibilidad del
practicarse a expensas de determinados individuos o sub- grupo que tiene unas grandes profundidades.
grupos. O puede también constituir una escapatoria tempo- En este espacio de sensibilidad del grupo, en su nivel afec-
ral frente a una situación dada". 39 tivo, debajo del área lúdica, el grupo como organismo tiene
En el área lúdica el grupo genera un lenguaje específico un área extraordinariamente importante y significativa que
propio que da nombre a diversas experiencias grupales, se se puede denominar ámbito de las relaciones personales afec-
dota de toda una simbología e incluso de unos ciertos ritua- tivas. Me refiero al conjunto de fenómenos que se producen
les que no son comprensibles para personas externas al gru- en un grupo y que tienen que ver con las percepciones de las
po, todo ello ayuda al grupo a promover experiencias nove- personas entre sí, con las comunicaciones verbales y no ver-
dosas que inciden en el fomento de la creatividad. bales, con los contactos y las interacciones, los sentimientos,
En el ámbito lúdico del grupo es donde surgen nuevas las emociones y las actitudes.
ideas de su quehacer, nuevas intuiciones para actividades cre- En un grupo las relaciones interpersonales que impactan,
ativas y nuevas propuestas para superar metas o adquirir nue- para bien o para mal, y afectan al proceso experiencial de las
vos compromisos. Por ello resulta muy importante establecer personas, forman un elemento irreductible en la configura-
condiciones que fomenten los espacios lúdicos del grupo no
40. CSIKSZENTMIHALYI, M. Creatividad. El fluir y la psicología del descubri-
39. LUFT, J. Introducción a la dinámica de grupos. Barcelona: Herder, 1978, 77. miento y la invención. Barcelona:Paidós, 1998,177.
ción del grupo. Los sentimientos que brotan en estas relacio- ciendo transparentes a los demás y, para ello, sus comunica-
nes emocionales, las interacciones que tienen lugar y las mu- ciones se tienen que hacer congruentes entre lo que siente y
tuas percepciones subjetivas son los componentes esenciales lo que expresa. "Determinadas experiencias ayudan a los
de estas conexiones. A veces estos aspectos se explicitan, miembros de un grupo a aceptarse a sí mismos y a aceptar a
otras veces permanecen ocultos en el subconsciente grupal; los demás. Los participantes deben adquirir una cierta trans-
en otras ocasiones, quizá en las que más, intentan esconder- parencia, tienen que abandonar su falso rostro, su máscara, y
se o disfrazarse. liberarse de todo prejuicio...Más allá de las semejanzas o las
El amor, la angustia, el deseo, el aprecio, el odio, la sole- diferencias, de la dificultad de los intercambios, la transpa-
dad... constituyen sentimientos y emociones presentes en al- rencia ante el otro hace posible gradualmente una comunica-
gún momento de la vida grupal y, al formar parte de la "pri- ción en profundidad con él". 41
vacidad" de las personas, son difíciles de comunicar de for- El elemento fundamental de esta área es el vínculo. Si las
ma auténtica. Están ligados a la experiencia íntima y su co- personas del grupo van participando progresivamente en un
municación produce, en muchos casos, miedo y ansiedad. proceso de hacerse transparentes en el marco del grupo, exis-
Quizá por esta causa pocos grupos dedican momentos es- ten muchas probabilidades para generar el nacimiento del
pecíficos a intentar hacer más transparente su área de rela- vínculo. El vínculo es la sensación fuertemente percibida y
ciones personales afectivas. Y sin embargo en esta área rela- comunitariamente compartida de sentirse ligadas, las perso-
cional se genera la mayor parte de la energía grupal, de tal nas de un grupo, por una corriente de energía afectiva que les
manera que si un grupo crece en comunicación y transparen- cohesiona.
cia en este ámbito tiene muchísimas posibilidades de incre- El vínculo es la cohesión en mayúsculas. No es aquella co-
mentar su bienestar, su creatividad y su eficacia. hesión de grupo que se refiere a los conceptos tradicionales de
Esta área relacional del grupo se corresponde con el sentir interés común, proyecto compartido o ideas similares de los
experiencial de la persona. Es el pecho y el corazón del gru- miembros de un grupo. Es una cohesión afectiva, emocional,
po, el centro del cuerpo del grupo, el lugar donde suceden las que se produce por la confluencia de las conciencias, por el
emociones y los sentimientos, el lugar donde se sienten las contacto entre los espacios cercanos al núcleo de las personas.
palpitaciones grupales. Y lo que aquí suceda influirá definiti- Sin duda, la función más importante del facilitador de un
vamente en todos los demás lugares del organismo grupal. grupo será crear el clima psicológico adecuado para generar
No es de extrañar que el Movimiento del Potencial Humano el nacimiento del vínculo, creando las condiciones necesarias
dedicara todos sus esfuerzos y energías a facilitar esta área en para la comunicación y el crecimiento.
los grupos de encuentro. Se equivocaron quizá en no facilitar El grupo es, desde esta perspectiva, un organismo lleno de
las demás. En cualquier caso en las otras áreas se producen vida. Como organismo es una totalidad donde todo se mez-
los síntomas, en ésta las causas reales. cla y se mueve. Esta totalidad, formada por una complejidad
Un grupo que desea crecer, como una persona, necesita
abrirse a su experiencia y darle significado. En el grupo, esto 41. ALBERT, L. y SIMÓN, P. Las relaciones interpersonales. Barcelona:
Herder, 1983, 400.
sólo es posible en la medida en que las personas se vayan ha-
de interacciones es más que la suma de sus partes. Estas par- diseccionando este organismo grupal para comprender me-
tes tienen su fluir en un espacio racional en el cual ejercen sus jor su funcionamiento y sus posibilidades.
tareas en un ámbito temático y configuran sus procedimien-
tos en un ámbito funcional; y fluyen también en un espacio
sensible en el que comparten celebraciones y evasivas en un La dinámica interna del grupo: procesos psicológicos
área lúdica, e interaccionan fuertemente en el ámbito de las significativos
relaciones personales afectivas.
Si en el área relacional-afectiva del grupo es el lugar don-
Con todo es un organismo en permanente proceso. Como de se condensa la mayor parte de la energía parece plausible
organismo vital tiene también un tiempo de vida, que es lo suponer que tiene que existir un mecanismo psicológico im-
mismo que decir que tiene un momento de nacer y un mo- pulsor que genera este potencial energético y que, si presen-
mento donde acontece la muerte. A veces resulta difícil acep- ta un funcionamiento correcto, propulse el grupo hacia su
tar que ha llegado la hora de la muerte del grupo pero, al fin crecimiento y desarrollo.
y al cabo, se produce sin consuelo ni retorno. Siguiendo con las comparaciones y metáforas nos atreve-
Nuestra hipótesis fundamental es que el grupo, siendo un mos a enunciar que, así como las personas tienen un flujo san-
organismo, participa de la tendencia formativa y actualizan- guíneo en circulación constante bombeado por el corazón, el
te que permite el desarrollo de sus potencialidades que in- grupo tiene que poner en marcha un motor que le permita mo-
trínsecamente posee. Esta tendencia, también en el grupo, es verse, bombear su energía, hacerla circular para trasformarla
una fuerza direccionalmente constructiva que tiende al creci- en creatividad y eficacia desde la interacción, y canalizarla por
miento y, en consecuencia, impulsa al grupo a desarrollarse los cauces adecuados para que no se difumine por huecos y sa-
positivamente, a autodirigirse, a realizar una tarea eficaz y lidas imprecisas a modo del vapor de una olla a presión.
creativa. Se tratará, una vez más, de crear las condiciones pa- Hemos aprendido por nuestra experiencia en la facilita-
ra facilitar el despliegue de esta tendencia. Estas condiciones ción de grupos que existe un proceso que tiende a la comu-
afectan a todos los espacios del grupo, a sus áreas temática y nicación y genera un gran potencial en la vida dinámica del
funcional y a los ámbitos lúdico y relacional-afectivo. De las grupo. La promoción de este mecanismo, su impulso por
aportaciones de Lewin y otros tenemos bases para la inter- parte del facilitador constituye, en realidad, la base funda-
vención en el ámbito funcional. De las investigaciones de mental para que el grupo avance en su desarrollo comunica-
Rogers y los maestros de la cultura de los encuentros sabe- tivo, vivencial y organizativo.
mos como impulsar los cambios y el crecimiento en el área re- ¿Cuál es el funcionamiento de este proceso interno que pro-
lacional-afectiva. Otros autores y ámbitos de intervención so- mueve tanta fuerza y energía grupal? Nos preguntamos ahora
cial nos aportan experiencias válidas para intervenir en las por el movimiento circular del grupo, por su motor interno,
áreas temática y lúdica. Todo junto, compilado y procesado por su flujo sanguíneo que le mantiene vivo, por el mecanismo
de acuerdo a nuestra propia experiencia, nos aporta un siste- interior que fundamenta su esencia como organismo vital y
ma de facilitación que nos ha resultado útil y eficaz y que ex- sustenta el ser del grupo. Este mecanismo está situado en el
ponemos en este libro. Antes me parece procedente continuar núcleo del grupo, en su área relacional-afectiva, y abarca todos
los componentes interaccionales que lo configuran. Su origen, Una persona camina de la experiencia a la percepción, a
entonces, está en cada una de las personas del grupo en el ins- veces de forma automática, sin darse cuenta, otras veces es
tante antes de la interacción. Intentemos describirlo. preciso activar la función de "atender" a la experiencia. Sólo
Las personas de un grupo, de una relación, aún en sus ini- atendiendo a la experiencia somos capaces de percibir. Lo
cios y durante todo el segmento temporal de la vida grupal y que pasa es que esta función de atender se da, generalmen-
relacional están inmersas en un complejo mundo de fenóme- te, de forma natural, especialmente cuando el conjunto de
nos que les afectan a modo de estímulos. El estímulo puede estímulos que configuran la experiencia nos afecta signifi-
variar desde un saludo a una mirada, una sonrisa, una ma- cativamente.
nera de vestir del otro que puede parecerme agradable o no. En realidad vivenciar es sentir y darse cuenta. El facilita-
Puede que también forme parte del estímulo el prejuicio, la dor de un grupo deberá hacer posible, desde su propia expe-
imagen previa del otro, o una simple conducta inicial que riencia y vivencia, el proceso de darse cuenta poniendo a dis-
afecte a mi proceso experiencial. Todo este cúmulo fenomé- posición del grupo su actitud y sus recursos para promover
nico produce en la persona material de la experiencia, sensa- un compendio suficiente de estímulos que produzcan expe-
ciones que pueden atenderse y adquirir significado explícito riencia, y ayudar al proceso de dar nombre y percatarse para
desde su significación implícita. Este flujo líquido que cam- dar significado a la experiencia. Cuantas más percepciones se
bia a cada instante y ondea en el campo fenoménico de cada produzcan en un grupo, más posibilidades existirán de gene-
individuo configura la experiencia de este individuo como rar un flujo comunicativo. Para favorecer este proceso de per-
ser en el grupo. Cada experiencia de cada persona es, por cibir sin interferencias es preciso intentar que la conciencia
tanto, distinta, pues los estímulos que le afectan pueden ser pensante no distorsione su nivel intuitivo.
diferentes o, siendo similares, afectan a cada una de manera A veces será bueno utilizar recursos que faciliten la toma
desigual. A todo este cuadro descrito lo denominamos expe- de contacto con la experiencia para fomentar el otorgarle sig-
riencia. La experiencia conforma esta "sensación de" produ- nificado, sobre todo al cómo nos sentimos en nuestro devenir
cida por algún conglomerado de estímulos que me afectan. en grupo. Dar significación a las sensaciones que tenemos
Puede que una persona no esté abierta a la experiencia y no respecto a nuestro estar en el grupo favorece un gran núme-
perciba el significado de esta experiencia. Cuando una perso- ro de percepciones que constituyen la fuente del fluir del gru-
na es capaz de dar nombre a la experiencia se percata de ella, po y de las personas.
tiene una percepción. Las personas de un grupo perciben sen- No todas las experiencias son percibidas ni todas las per-
saciones, emociones, sentimientos, imágenes en relación con cepciones comunicadas. Sin embargo, la comunicación signi-
las demás personas y con el mismo grupo. La percepción con- ficativa nace de la percepción y ésta de la experiencia. La co-
siste en un proceso psicológico a través del cual damos un sig- municación significativa es aquella que expresa alguna expe-
nificado subjetivo a la experiencia. La percepción es un poco riencia desde el referente interno de la persona, sale del sí
posterior a la experiencia, es el nombre de la experiencia. Estar mismo, de algo afectado del organismo. Las comunicaciones
abiertos a la experiencia y darle un significado es el primer pa- significativas tienen consecuencias en la dinámica del grupo,
so en el mecanismo generador de la comunicación grupal. las no significativas tienen escasa influencia.
Veamos un pequeño ejemplo ilustrativo: otro; es pues una comunicación significativa que aporta ma-
terial psicológico al fluir del grupo.
"-¡Hola! (Buenos días)
La comunicación significativa representa pues el tercer
-¡Hola! (Buenos días)
punto de fuerza del mecanismo circular que impulsa la ener-
-Qué agradable temperatura, ¿verdad? (¿Cómo estás?)
gía del grupo. El primer punto de fuerza es la experiencia, el
-Sí que lo es. Aunque parece que va a llover. (Bien ¿Y
segundo la percepción. Entre cada punto de fuerza hay una
tú?)
función activadora que permite la transformación de un pun-
-Bueno, me alegro de verte bien. (Muy bien).
to de fuerza en otro. Entre la experiencia y la percepción se
-Nos veremos
-Hasta luego. activa el "atender" que permite dar significado a la experien-
-Hasta luego". 42 cia. Entre la percepción y la comunicación significativa es
preciso activar la función de implicación.
"John a Alma: Puesto que estamos hablando de cosas, Cada persona del grupo puede tener percepciones respec-
quizá no viniera mal referirnos un poco a tu caso. Tú me re- to a las otras personas del grupo pero sólo si se implica las co-
cuerdas a una mariposa. (Risas). munica. Algunas personas, bien por temor, por falta de riesgo
Alma: ¿Por qué? Quiero decir, ¿cómo, por qué dices una o por simple decisión se reservan sus percepciones y no se im-
mariposa? plican. Si no existe implicación se corta el flujo comunicativo,
John: Mira, una mariposa es algo raro para mí. Es una se impide la circulación de la energía, del movimiento san-
cosa a la que uno puede acercarse bastante, como a un nue- guíneo grupal, por lo que el grupo enferma. El facilitador de-
vo amigo, podríamos decir, pero en el instante mismo en berá crear condiciones para motivar la implicación que gene-
que se encuentra al alcance de la mano y es posible acari- ra comunicación. El recurso para hacerlo es promover el con-
ciarla, o aproximarla más a sí y mirarla, revolotea y se va. tacto, hacer demandas de contacto de manera respetuosa y
Alma: (Ríe en forma nerviosa).."-43 penetrante, sin forzar al grupo ni a las personas, pero con la
Estos ejemplos de comunicaciones presentan diferencias mirada puesta en el interesarnos por la percepción del otro.44
interesantes. La primera comunicación es un ceremonial, no La implicación como función del mecanismo propulsor
expresa ningún flujo de experiencia interna, en todo caso grupal impulsa la concentración de energía en el punto de
puede resultar una evasiva ante un contacto fortuito, casi in-
44. En el capítulo 9 de este libro intento exponer recursos para la facilita-
deseado. La segunda, aún sin conformar un intercambio en ción del contacto. Por otra parte acabamos de presentar una investiga-
las profundidades personales, es generadora de proceso. ción, junto con Ferran Juan, en el XI Encuentro Latinoamericano del
Constituye una expresión del darse cuenta, una comunica- Enfoque Centrado en la Persona que ha tenido lugar en Socorro (Brasil)
en octubre de 2002, que hemos titulado "La intervención por contacto
ción de una percepción proveniente de dar un significado a en la facilitación de grupos. De la no-directividad al experiencing". En
la experiencia provocada por los estímulos de la imagen del esta investigación sugerimos distintas formas verbales y no verbales
para generar la función de contacto, tan importante en las relaciones
42. BERNE, E. Juegos en que participamos. México: Diana, 1982, 41. humanas y en la facilitación de grupos. Algunas de las aportaciones es-
43. ROGERS, C. Grupos de encuentro. Buenos Aires: Amorrortu, 1979, 36. tán recogidas en el capítulo mencionado.
n. i
fuerza posterior que hemos definido como comunicación por tres elementos de análisis como mínimo: la persona que
significativa. Según los físicos la fuerza viene determinada genera comunicación significativa, la que la recibe y genera
por la cantidad de energía consumida. Ello nos da una idea nueva comunicación y la relación en sí que se origina en esta
del nivel de profundidad de cada comunicación. Sin duda confluencia. Este tercer elemento, el de la relación, es el que
una comunicación de ceremonial, como la de nuestro primer forma propiamente la interacción.
ejemplo, no comporta un consumo excesivo de energía; sin En el proceso interaccional los participantes de la relación
embargo, el segundo ejemplo precisa un mayor esfuerzo pa- llegan a coincidir al definir la situación y sus reglas, aunque
ra la persona, un mayor consumo de energía emocional. es poco frecuente que todas las identidades de cada persona
Como la energía no se destruye sino que se transforma, cada estén implicadas en una sola relación. La relación, en cual-
punto de fuerza, en especial el de la comunicación significa- quier caso, no incluye de principio la totalidad del sí mismo
tiva que requiere una mayor cantidad de energía emocional, de los respectivos individuos sino muestras parciales que se
sugiere una posibilidad de mutación transformativa para el han hecho transparentes. A medida que la relación se desa-
grupo; un tambaleo emocional, una inestabilidad en el equi- rrolla pueden aumentar las áreas incluidas porque los inte-
librio del momento que reporta una nueva estructura for- ractuantes van revelando una mayor cantidad de espacios
mada a partir del caos producido por la inestabilidad. del sí mismo.
Las comunicaciones significativas favorecen la interacción. En la interacción, entendida así, procedente de la con-
No todas las comunicaciones significativas son objeto de inte- fluencia de comunicaciones significativas, cada interactor lle-
racción en un grupo, pero sin las comunicaciones significati- ga a considerar de forma peculiar al otro y al vínculo inme-
vas no se produce interacción emocional. La interacción es el diato que acontece y que los liga, y siente la relación con una
cuarto punto de fuerza del mecanismo. Viene determinada cualidad única.
por la confluencia de comunicación significativa entre distin- Sin embargo, para que la comunicación provoque interac-
tas personas del grupo. Una persona del grupo, por ejemplo, ción es preciso activar una nueva función denominada feed-
comunica algún mensaje significativo respecto de otra y ésta back o retroalimentación. El feed-back consiste en un retorno
manifiesta lo que significa para ella la percepción de esta ex- al emisor de un nuevo mensaje relacionado con los efectos
presión emocional, entonces se produce interacción. producidos por la comunicación inicial. Si el participante re-
La interacción es un concepto relacional de naturaleza bi- ceptor de la comunicación adopta una actitud pasiva ante
direccional que tiene su origen en una comunicación signifi- una comunicación, dificulta la generación de interacción. A
cativa que produce efectos emocionales percibidos por el medida que el grupo avance más necesidad experimentarán
grupo o por el individuo que protagonizó la comunicación. los individuos de entrar en contacto con los demás. Para que
Lo importante de la interacción es que estructura una con- esto suceda debe haber una cierta predisposición de las per-
fluencia de comunicaciones entre varias personas, al menos sonas que forman el grupo.
entre dos. Las comunicaciones suelen ser asimétricas y la per- Una de las tareas importantes del facilitador será estimu-
cepción del significado distinta para cada individuo partici- lar en las personas los procesos de feed-back para que devuel-
pante en la interacción. Al ser bidireccional está conformada van, con una comunicación significativa, un mensaje al indi-
rr
viduo que inició, con su implicación, la expresión del signifi- nuevamente para producir una nueva comunicación signifi-
cado de su experiencia con respecto al otro. cativa, recibir y aportar feed-back para facilitar una nueva in-
El feed-back es así la función que favorece la interacción. "Si teracción. Y volver a empezar confiando en que este movi-
dos personas no interactúan, jamás podrán llegar a ser ami- miento es capaz de transformar el conflicto en encuentro.
gas, y en realidad es poco probable que adopten siquiera una En un grupo, sin embargo, a diferencia de una relación in-
actitud interpersonal. La proximidad física aumenta la fre- terpersonal, no se producen solamente interacciones aisladas
cuencia de interacción, llevando a la polarización de las acti- protagonizadas exclusivamente por dos personas que inte-
tudes interpersonales, que tienden a ser más favorables que ractúan, sino que se forman haces de interacciones múltiples
desfavorables". 45 Esta necesidad de proximidad es la que ha- en un compendio relacional de varios individuos. Cada rela-
ce preciso que los grupos dediquen tiempo y espacios a la co- ción bidireccional intersecciona con otras relaciones que in-
municación interpersonal en su área de la sensibilidad y no fluyen en las estructuras de la interacción. Se forman nudos
sólo en el ámbito de la tarea. de relaciones inmediatas que hacen que los pares de interac-
La interacción, entonces, es la confluencia de comunica- tores lleguen a funcionar como unidades cuando tratan con
ción significativa entre diversas personas que tiene lugar me- otros pares creando condiciones de influencia en la estructu-
diante el feed-back. Esta interacción puede ser positiva, favo- ra del grupo de máxima intensidad, como una nube en mo-
recedora de encuentro; o negativa, generadora de conflicto. vimiento que tiende a descargar. La inestabilidad que se pro-
Una y otra constituyen el fundamento para la profundización duce genera una nueva estructura, lleva inherente un nuevo
de la relación en proceso transformativo. orden que se origina mediante la transformación del anterior.
Si la interacción es gratificante y percibida como satisfac- Es por ello que el facilitador amplia su tarea de promover
toria se puede iniciar un camino de encuentro a partir de es- feed-back a lo que denominamos función de vínculo o linking
ta experiencia relacional, atendiéndola y otorgándole signifi- function46. "Una persona dice algo, luego una segunda agrega
cado, comunicando esta nueva percepción con la implicación una nueva idea pero no siempre expresa la relación de su idea
necesaria, recibiendo y aportando feed-back y generando, por con el significado de la primera contribución... Usualmente es
posible ver en un grupo varios canales circulando en líneas
consiguiente, una nueva interacción. Y así sucesivamente,
paralelas de pensamiento. Sin embargo, si el líder centrado en
impulsando el movimiento circular propulsor del flujo ener-
el grupo hace un esfuerzo por percibir el vínculo entre cada
gético emocional.
nuevo comentario y luego expresa esta relación al grupo, la
Si por el contrario la interacción se percibe como negativa,
discusión parece fluir por un canal adquiriendo más fuerza a
como conflicto, puede existir la tentación de ocultarlo o eva-
medida que cada nueva contribución se vincula a ella".47 Esta
dirlo. No obstante la posibilidad de generar encuentro a par-
función está relacionada con la comprensión de los significa-
tir del conflicto reporta una gran esperanza en el proceso del
grupo. El mecanismo es el mismo, el movimiento circular de 46. Término acuñado por Thomas Gordon colaborador de Rogers en la fa-
atender la experiencia, percibir su significado, implicarse cilitación de grupos de encuentro.
47. GORDON, T. "Liderazgo y dirección centrados en el grupo" en RO-
45. ARGYLE, M. Análisis de la interacción. Buenos Aires: Amorrortu. 1983,214. GERS, C. Psicoterapia centrada en el cliente. Buenos Aires: Paidós. 1977,307.
dos y de las intenciones de los individuos que se implican ya vos se convierten en ceremoniales y evasivas. Otras, sin em-
que, muchas veces, el comentario de un individuo a menudo bargo, producen fuertes interacciones, de conflicto o de en-
tiene que ver con una contribución anterior en su intención in- cuentro, para el caso es lo mismo. Éstas tienen un efecto tor-
terna y se vincula con ella, pero no siempre se expresa con glo- bellino que provoca un rebrote de nueva experiencia que, es-
balidad transparente; probablemente porque las contribucio- ta vez sí, comporta un almacén de mayores dimensiones que
nes están más centradas en el yo que en el grupo y los miem- el de la interacción de donde procede.
bros responden a sus propias necesidades excluyendo lo que En realidad lo que hace que un grupo tenga vida es esta
ocurre fuera de sí mismos. Esta función vincular ejercida por dinámica de comunicación. En palabras de Ruth Sanford, co-
el facilitador tiene efectos en la orientación de cada persona en facilitadora de Rogers: "Si el grupo funciona como un siste-
términos del proceso grupal, porque otorga continuidad al ma abierto, los organismos individuales dentro de ese grupo
movimiento circular de flujo. se vuelven conscientes de la comunicación dentro de ellos
La dinámica descrita (fig. 2) contiene cuatro centros de mismos y de la comunicación con los demás miembros del
fuerza que almacenan la corriente energética del grupo y la grupo, siendo ambas esenciales para que dicho grupo consi-
ga verse como una comunidad". 48
bombean: la experiencia, la percepción, la comunicación y la
interacción; entre uno y otro hay que introducir unos estímu- Fig.2. La dinámica del grupo
los que generen el movimiento del flujo: atender a la expe-
riencia para descubrir su significado implícito, implicarse pa-
ra compartirla, recibir y otorgar feed-back para promover inte-
racción, continuar atendiendo la nueva experiencia y seguir
en este movimiento continuo.
Los centros de fuerza o, siguiendo con la metáfora, alma-
cenes de energía, no tienen la misma superficie ni el mismo
volumen. Hay una mayor cantidad de experiencia, una parte
de esta experiencia se mueve hacia el centro de la percepción.
El almacén perceptivo es un poco menor que el de la expe-
riencia porque no todas las experiencias se perciben. Las que
se perciben pueden ser comunicadas, pero tampoco son ex-
presadas todas las percepciones, de hecho muchas se guar-
dan entre paréntesis en el seno del sí mismo. Las que se co-
munican pueden ser objeto de interacción, pero de nuevo no A medida que el grupo avanza este movimiento es más
todas las comunicaciones significativas reciben feed-back, por natural y fluyente, progresivamente más rápido, funciona co-
lo que muchas de ellas quedan flotando en el aire hasta di-
luirse; tampoco todas las que reciben retroalimentación pro- 48. SANFORD, R. "De Rogers a Gleick y de Gleick a Rogers", en BRAZIER,
ducen efectos interactivos, algunos intercambios comunicati- D. Más allá de Cari Rogers. Bilbao: Desclée De Brouwer, 1997, 227.
mo un motor que propulsa, cada vez a mayor velocidad, al energía o impedir el flujo; puede, en fin, mantener y revitalizar
grupo hacia adelante; esto genera mayor potencial, más crea- la salud del grupo o, por el contrario, contribuir a enfermarlo.
tividad y eficacia y estimula el crecimiento personal y la co- Esta acción del grupo está configurada en una especie de
hesión grupal. Cuando se acaba el movimiento, quizá de ma- dos cuadrantes distintos pero estrechamente relacionados (fig.
nera imprevisible, casi siempre por motivo de finalización 3). En un cuadrante el grupo realiza su acción interna como or-
del segmento temporal, el grupo muere. Este morir del gru- ganismo autónomo. El grupo, en este marco, siente y piensa.
po puede que haya generado nueva vida como en un ciclo vi-
tal, es posible también que la muerte no deje más que viejos Fig.3. La acción del grupo
recuerdos y un cúmulo de experiencia y aprendizaje perso-
nal. En ambos casos la participación en un grupo siempre ha-
brá valido la pena. Espacio de la Espacio de la
Racionalidad Tarea Extema
Espacio de la PENSAR
La acción del grupo Sensibilidad
^ACTUAR
SENTIR
El grupo como organismo, no es un ser ensimismado que
se contempla a sí mismo en su propio devenir. Al contrario, Cuadrante interno Cuadrante externo
del Grupo del Grupo
el grupo es actividad permanente. El mismo proceso del gru-
po consistente en ir siendo consciente de sí mismo constituye
una gran parte de la acción del grupo.
Desde el momento de su constitución como grupo sus in- Trayecto de la evaluación experiencia!
tegrantes se agrupan con la intención de participar en una ac-
ción conjunta, se reúnen para algo. Es muy posible que esa
Siente en tanto que el fluir de su dinámica promueve emo-
intención inicial se vea modificada a lo largo del proceso y
ciones y sentimientos en cada persona en particular y en el
deje de formar parte del conjunto de los elementos persona-
grupo como totalidad. Este fluir emocional tiene lugar, como
les y relaciónales que configuran el ser del grupo, sin embar- dijimos, en el espacio de la sensibilidad del grupo. Y como
go no por ello decae la actividad del grupo sino que la acción fluir en colectividad provoca sentimientos similares o com-
que se produce es fruto del conglomerado de nuevos proyec- partidos. En este espacio sensible, en distintos momentos de
tos, ideas, emociones, sentimientos y relaciones. También de la vida del grupo los miembros comparten sentimientos co-
nuevos retos nacidos de la dinámica y del funcionamiento lectivos inconscientes que son expresados verbal o no verbal-
del grupo en su proceso. mente de una forma u otra. Este compartir estructura la acti-
En realidad el grupo es un ir haciendo en permanente mo- vidad del grupo en su espacio sensible, esta estructuración es
vilidad y este hacer del grupo influye de manera decisiva en su el sentir del grupo. A través del sentir es como el grupo se
dinámica y en su estructura. Es más, el hacer del grupo puede vincula, produce la cultura de grupo y promueve su cohe-
activar el movimiento circular de la dinámica generadora de
rs i
sión. Este proceso es potencialmente constructivo y es una En este espacio de la tarea externa del grupo cobra signifi-
manifestación de la tendencia actualizante. En palabras de cación la eficacia, la eficiencia y la creatividad de la acción del
Max Pagés: "Creemos que es útil subrayar el carácter funda- grupo porque constituye el producto del grupo.
mental del concepto de vínculo positivo, es decir, no ambiva- En mi experiencia como facilitador he aprendido que exis-
lente, que subyace en la vida de todo grupo en su nivel más ten factores e influencias que favorecen la eficacia en la pro-
profundo. Postulamos que la actividad de los grupos se yección del grupo a través de su acción externa. Tengo la con-
orienta hacia la clarificación de los conflictos y ambivalencias vicción que cuando un grupo ha generado vínculo y cohesión
del grupo y de sus miembros, y tiende a la elucidación y al en su espacio de la sensibilidad, en el área de su sentir, y ha
refuerzo del vínculo positivo entre los miembros, vínculo que sido capaz de anticipar este producto mediante intenciones
precisamente sostiene al grupo desde el comienzo de su exis- comunes en el espacio de la racionalidad, a través de su pen-
tencia e hizo posible toda su actividad". 49 sar, existen muchas posibilidades de mejorar la eficacia de su
Los grupos, además de sentir, piensan. El pensar del gru- acción consistente en la adecuación congruente entre sus ob-
po forma una actividad interna que tiene lugar en el espacio jetivos, intenciones y procedimientos y la acción real ejecuta-
de la racionalidad del grupo, consiste en el debatir ideas, pla- da en el ámbito externo. En este caso la acción concuerda con
nificar acciones, idear proyectos, organizar actividades, to- el pensar y el sentir del grupo, es una acción eficaz.
mar decisiones. Este pensar del grupo viene muy determina- Para que se de esta concordancia es preciso que el grupo,
do por su sentir. En mi experiencia he aprendido que cuando en su espacio interno, el del sentir y el del pensar, intencione
un grupo se ocupa de su sentir emocional, su pensar reporta sus procesos y adopte criterios metodológicos acertados, dis-
grandes beneficios a sus tareas que parecen más creativas y ponga de un método de trabajo acordado, distribuya respon-
son ejercidas con mayor eficacia. sabilidades y compromisos y adquiera un sistema de coordi-
Pero el grupo, además de sentir y pensar, proyecta. Lo que nación que asegure la conexión entre los procesos estableci-
hace el grupo fuera del grupo, las actividades que realiza pa- dos en la planificación de sus proyectos.
ra otros, conforman la tarea externa del grupo. Este hacer fue- Y resulta más importante todavía asegurarse de que la in-
ra del grupo es el proyectarse del grupo, y este proyectarse formación necesaria para la ejecución de la acción del grupo
será efectivo y creativo si ha surgido de un buen hacer inter- esté a disposición de todos sus miembros y que, en todos los
no. Este actuar del grupo surge de su sentir y su pensar que ámbitos, se produzca una fluidez de los canales comunicativos
ha sido facilitado por la dinámica del grupo a través de su a través de la incentivación de los procedimientos defeed-back.
movimiento circular de flujo energético y en cada una de las Cuando un grupo es eficaz puede ser también eficiente. La
áreas de la estructura del grupo. Es el actuar del grupo lo que eficiencia consiste en que la adecuación entre la planificación
es percibido por personas ajenas al grupo, sean o no usuarios y la acción del grupo se realice en un tiempo determinado, en
de las acciones del grupo, este actuar del grupo es la muestra el mínimo tiempo posible establecido por el propio grupo.
de la calidad de la acción grupal. Para ello el grupo ha de fijar tiempos y espacios concretos pa-
ra cada ámbito de su devenir y de su hacer, debe constatar y
49. PAGÉS, M. Psicoterapia rogeriana y psicología social no directivas. Buenos
Aires: Paidós. 1976,135. acordar anticipadamente en el espacio de la racionalidad los
aspectos a resolver para planificar su acción externa, y es pre- dirigen hacia el cuadrante externo del grupo y vuelven al
ciso que explicite los acuerdos y compromisos que se preten- cuadrante interno ocupando de este último sólo un espacio,
den. Todo ello introduce una sensación de ritmo que induce el espacio de la racionalidad. El grupo actúa y piensa, vuelve
a las personas del grupo a mejorar el producto de su acción y a actuar y a pensar, y así sucesivamente. Al entrar energía en
a hacerlo con cierta rapidez. el espacio interno del grupo procedente de su actuar, las per-
Muchos grupos, sin embargo, centran su quehacer como sonas del grupo tienen nuevas sensaciones y emociones que,
grupo en el espacio exclusivo de su tarea externa, en su pro- al no ser explicitadas en el espacio de la sensibilidad porque
yección. Lo que aquí nos gustaría aportar es nuestra convic- el trayecto evaluativo no transcurre por este espacio, se for-
ción de que resulta casi imposible proyectar aquello que no se man montículos de cantidades de energía afectiva que, al no
tiene y no se es. Un grupo que no ha generado energía en su estar canalizada en un fluir comunicativo adecuado, tiene
sentir y en su pensar difícilmente podrá proyectar una acción que desprenderse por otros derroteros y puede reportar con-
eficaz y creativa porque esta acción no surgirá del interior del secuencias de carácter enfermizo para la vida del grupo.
propio grupo sino que estará condicionada solamente por su Me parece más significativo un trayecto de evaluación
hacer externo y, en este hacer externo, la implicación que se más experiencial, un camino que desde la acción recorra el
promueve en el compromiso de las personas es bastante re- sentir del grupo, estructure su pensar y proyecte una nueva
ducida. El compromiso para una tarea se produce cuando una acción. Desde esta perspectiva las personas del grupo estarán
persona o un grupo percibe que la fuerza del impulso para re- más abiertas a su propia experiencia en el transcurso de la
alizar esta tarea surge de su propio interior, es decir; cuando misma acción, harán y sentirán de manera simultánea y el
existe una motivación intrínseca para realizarla y no cuando grupo establecerá tiempos evaluativos para compartir cómo
la motivación queda limitada por factores externos al propio nos hemos sentido en nuestra acción, cómo he interconecta-
organismo. La misma actividad realizada desde una óptica do o no con el otro, y cuál ha sido mi fluir interno junto con
motivadora interna o desde una motivación condicionada por el grupo durante la ejecución de nuestra acción. En este tra-
factores exteriores presenta grandes diferencias comparativas yecto la evaluación se centra en las personas, en sus actitudes
en términos de creatividad, calidad y eficacia. y en las interacciones, afecta al proceso experiencial de cada
Desde este enfoque cobra importancia el asunto de la eva- una de ellas y al sentir del grupo y, desde este sentir, se alza
luación. Muchos grupos centran sus procesos evaluativos en el hacia el pensar como configurante de nueva estructura per-
espacio de la tarea externa en un proceso bipolar de acción- mitiendo una nueva planificación surgida de lo implícito que
evaluación de la acción. Este binomio está condenado a meca- proyecte hacia el espacio exterior una nueva acción que es re-
nismos sin salida porque no reporta ninguna nueva proyec- alizada con más eficacia y creatividad.
ción al centrarse exclusivamente en el actuar del grupo. El gru- Si consideramos que la experiencia del grupo ha de ser un
po se convierte así en un organismo paralizado, sin vida inte- espacio de crecimiento y autonomía, los valores de la acción
rior, que se centra en su trabajo y va perdiendo motivación. y la evaluación han de facilitar coherencia y ajuste entre am-
Otros grupos aplican un recorrido evaluativo tripolar, ac- bas, por lo que la evaluación no puede centrarse solamente
ción-reflexión-acción. En este caso los procesos evaluativos se en criterios que no relacionen el sentir, el pensar y el hacer de
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las personas de un grupo sino que debe incluir todo el pro- constituyen el significado del acontecer, de la evolución vital
ceso experiencial que afecta a la estructura interaccional total de este organismo denominado grupo que, al fin y al cabo,
del grupo, en todos sus ámbitos y áreas a través de la diná- contiene un mar de vida.
mica del grupo que mueve su flujo energético motivador de
interacción. Sin duda, el movimiento no se produce cuando
la evaluación se realiza fuera del grupo o no afecta a todo su
espacio. En este sentido la evaluación ha de permitir la dife-
renciación de los individuos en su sentir interno y, al mismo
tiempo, alcanzar una armonía en la totalidad que fomente el
aprendizaje significativo, interiorizado, sobre los elementos
que hay que cambiar para ayudar al individuo y al grupo a
situarse mejor en la realidad vivida. Así la evaluación puede
convertirse en un instrumento esencial para el desarrollo del
grupo y de las personas en un marco relacional.
Desde este punto de vista "la evaluación es el período más
importante en una acción, y no debe ser considerada como una
fase especial, independiente de dicha acción. La evaluación es-
tá influida por los diversos elementos de la acción, dado que
ésta posee repercusiones sobre aquélla. Una evaluación bien
integrada con el resto de la experiencia puede convertirse en
una buena ocasión de aprendizaje. Constituye un punto de re-
ferencia para quienes están sumergidos en la acción".50
La acción del grupo, en definitiva, consiste en un hacer
permanente. Este hacer se configura en el sentir, en el pensar
y en el actuar. Estos espacios son dinamizados con fuerza por
un mecanismo que impulsa la energía desde la experiencia
hasta la interacción que conforma una nueva experiencia.
Este movimiento de impulso y bombeo tiene lugar de mane-
ra abierta en el espacio de la sensibilidad del grupo pero afec-
ta profundamente a toda su estructura, la tambalea y produ-
ce nuevas formas más desarrolladas, y estas nuevas formas
Tendencia al desarrollo
y autoridad /',' 2.~ Fase de frustración y contradependencia
e ignora los procesos de eficacia al centrarse -como no podía
// * 3- Fase de resolución y cooperación
ser de otra manera en el caso de las experiencias de los grupos
de encuentro- en el ámbito afectivo-relacional. "i¥"4» ' i ;
Por último deseamos que nuestro esquema tenga en cuenta Relaciones de ; ' ', rh_ 4.- Fase de encantamiento y fuga
tanto los aspectos afectivos y de crecimiento personal como los interdepen-
dencia ', /\\ 5.-Fase de desencantamiento y lucha
componentes que influyen hacia una mayor eficacia y creativi-
dad de la tarea grupal. En este sentido creemos que un grupo, ¡\ * 6.-Fase de validación y cohesión
al funcionar como unidad organísmica, no presenta disensión
entre el desarrollo personal de cada uno de sus miembros y el Vaivenes ~---v. ENCUENTRO \
desarrollo del potencial de grupo en su área racional y sensi-
ble que crecen de la mano y en armonía. Los síntomas de la si-
tuación de grupo en cada una de sus áreas nos dan una idea de 1.- Fase de expectación y dependencia.
la situación de las demás y, por ello, nuestro esquema inter- La formación inicial de un grupo siempre suele ser apasio-
pretativo pretende abarcar la totalidad del sistema que confi- nante. Las personas se reúnen para algo, para realizar alguna
gura el trayecto vital y desea determinar las condiciones facili- actividad, para iniciar el desarrollo de un proyecto o para con-
tadoras que permitan acompañar al grupo en este trayecto54. traer un compromiso hacia una tarea determinada. Existe un
Desde esta perspectiva nos parece interesante y compatible la cierto interés común y unas motivaciones subyacentes. Las ex-
aportación de López-Yarto55 que auna lo interpersonal y lo in- pectativas de los miembros del grupo, también sus temores, se
trapersonal y sugiere pautas de intervención del facilitador en entremezclan con la ansiedad inicial del facilitador o del res-
cada una de las fases del proceso grupal. ponsable del grupo que, en el fondo, tiene también sus intere-
Podemos representar y decribir el esquema que propone- ses e intenciones, sus propias expectativas y temores.
mos como sigue (fig. 4): Esta primera fase de la vida de un grupo se caracteriza por
la incertidumbre, casi siempre acompañada de una cierta an-
53 ROGERS, C. Grupos de encuentro. Buenos Aires: Amorrortu, 1979. En el
capítulo segundo titulado "El proceso del grupo de encuentro", se de- siedad. Las personas del grupo saben que comienzan un pro-
fine el esquema propuesto por el autor. ceso y se disponen estando a la expectativa de las indicacio-
54 Estas condiciones de facilitación en función del trayecto serán expues- nes del responsable o de su facilitador. Comienzan a tener
tas en el capítulo 7 de este libro.
sensaciones y experiencias con relación al propio facilitador,
55 LÓPEZ-YARTO, L. Dinámica de grupos. Cincuenta años después. Bilbao:
Desclée De Brouwer, 1997. En el capítulo catorce titulado "Un modelo al grupo y a los demás componentes. Esperan y quizá tam-
integrador" el autor expone su esquema de evolución de los grupos. bién desean que el facilitador indique la tarea a realizar y los
procedimientos a utilizar y dé pautas organizativas para el 2.- Fase de frustración y contradependencia.
funcionamiento grupal. Buscan normas y consensos de com- En algún momento del trayecto empiezan a surgir latidos
portamiento y actuación. de frustración porque el facilitador no ha satisfecho las nece-
En el área de la sensibilidad se producen algunas mani- sidades del grupo y el grupo no responde a las expectativas
festaciones de ironía y humor que suelen ser expresiones pa- iniciales de sus miembros. Las personas empiezan a expe-
ra disfrazar esta angustia inicial. Normalmente las personas rienciar sentimientos negativos hacia el facilitador y hacia
de un grupo, en sus inicios, actúan bajo máscaras psicológi- otras personas del grupo. Surgen subgrupos de sentimientos
cas para generar una imagen de sí mismos aceptable para los contrapuestos. Algunas personas intentan suplir el liderazgo
demás. Se experimenta una leve desconfianza pero al mismo del monitor y proponen, a modo de evasiva, sugerencias de
tiempo existe ilusión para desarrollar la actividad que ha actividades y tareas o modelos organizativos que sienten co-
promovido el nacimiento del grupo. mo más seguros. Otras personas continúan confiando en la
El facilitador puede sentirse tentado a dar indicaciones e capacidad del facilitador para salir del atolladero.
instrucciones precisas respecto a la tarea del grupo aunque A veces se produce una falsa cohesión del grupo en contra
suele saber que, si sucumbe a su propia ansiedad, realizará del animador que es percibido como enemigo común. Surgen,
intervenciones contraproducentes para el desarrollo del po- de este modo, sentimientos y conductas de rebeldía que son
tencial del grupo. expresados verbalmente o con comportamientos y actitudes
Se empiezan a plantear objetivos, debates racionales, se de evasión o agresividad.
sugieren proyectos o actividades varias, se manifiestan ex- La agresividad se expresa contra el mismo facilitador o
pectativas y deseos. En realidad se vislumbra una tendencia contra otras personas del grupo que siguen confiando en la
a llenar de contenido la vida del grupo. Las relaciones que se dinámica del grupo y en la profesionalidad del facilitador.
empiezan a formar son superficiales, y las comunicaciones Las ideas del facilitador se van considerando incorrectas y se
adolecen de contenido significativo. Las interacciones son va generando una sensación de que éste ha abandonado al
poco auténticas porque no se expresan todavía sentimientos grupo o es incompetente.
reales hacia las personas del grupo. En el área de la racionalidad se manifiestan sentimientos
En realidad parece que se produce una búsqueda de segu- contradictorios de falta de organización y método, pérdida de
ridad ante la ansiedad del inicio que promueve una situación tiempo, planteamientos alternativos que hacen surgir nuevos
de dependencia hacia el facilitador y hacia los otros indivi- intentos de liderazgo para atraerse a los miembros del grupo.
duos del grupo. Las intervenciones reiteradas del facilitador, Algunas veces se manifiesta una cierta lucha de poder en-
en este estado, prolongarían esta situación dependiente pero, tre líderes "naturales" o no institucionalizados y resulta difí-
aunque se produzcan, tienen también efectos en la frustra- cil, en esta etapa, percibir actitudes de escucha profunda y
ción de las expectativas porque no suelen satisfacer las nece- comprensión.
sidades del grupo que tiende a ocultar determinados senti- Es un momento percibido como caos en el que el equilibrio
mientos y temores. inicial se ha desgajado y ha producido inestabilidad y ruptura.
La toma de conciencia de esta situación, la correcta interven- En esta fase el grupo se ocupa de satisfacer las necesida-
ción del facilitador o la tendencia natural del grupo a desarro- des y se impulsan procesos cooperativos, se van aceptando
llarse hace que, la mayoría de las veces, el grupo realice un sal- responsabilidades compartidas en un clima de manifiesta so-
to hacia delante, experimente una mutación transformativa lidaridad pero todavía en un momento adolescente y super-
hacia un nuevo estadio, hacia una nueva estructura, un nuevo ficial. La estructura del grupo se va unificando y el clima va
orden que estaba inherente en el seno del mismo caos. siendo percibido como más positivo. Esta sensación genera
un nuevo salto.
3.- Fase de resolución y cooperación.
4.- Fase de encantamiento y fuga.
En este estadio las personas del grupo intentan solucionar
la desestructuración y se inicia un proceso de comunicación La percepción de que el grupo va funcionando y satisfa-
que, si bien se sitúa en la superficie, empieza a ser muy efec- ciendo las necesidades de sus individuos que se producía
tivo. Algunas personas se percatan, y así lo manifiestan, de en la fase anterior va generando una sensación de cohesión
que los comentarios del facilitador no estaban tan lejos de la y de buen clima de grupo que ha podido crearse a partir de
realidad del grupo. Se producen los primeros aprendizajes la superación de luchas interiores que han conllevado a la
significativos en relación con el proceso grupal causados por cooperación.
la elucidación de la historia del grupo que han sugerido al- Se inicia un período de relajación que va manifestándose
gunos individuos. a través de conductas que conllevan a las risas, cantos y sali-
Los participantes intentan comunicaciones para el resta- das fuera de la vida del grupo. El grupo toma cualquier indi-
blecimiento del equilibrio y comienzan a percibir que han de cio de conflicto con gran sentido del humor y van flotando
aprender a aceptar una responsabilidad compartida de lo sensaciones euforizantes y sentimientos de unanimidad y co-
que sucede en el grupo. Algunas veces este aprendizaje se re- hesión. En realidad, sin embargo, es una huida.
aliza bajo síntomas de autoculpabilidad por lo acontecido pe- Suelen acontecer situaciones de confianza entre las perso-
ro, casi siempre, hay muestras de aceptación del trayecto e in- nas del grupo que consideran que el suyo es un buen equipo
tenciones de cambio. en el que se aceptan la mayoría de sugerencias por acuerdo o
Surge, en muchas ocasiones, algún rol mediador entre las di- consenso. El grupo intenta conservar su armonía a cualquier
versas posiciones en el grupo y alguien comienza a manifestar precio aunque existen conflictos internos sin resolver que han
alguna emoción interior más profunda y a verbalizar senti- sido ocultados, dejados de lado o han sido mal presentados.
mientos personales que producen interacciones. Empieza a ge- Muchas veces, este clima de encantamiento, vivido a mo-
nerarse un conjunto de comunicaciones aisladas y personales do de síntomas de "Peter Pan" por el que el grupo tiende a
que suelen producir algún impacto en la experiencia y con ello mantenerse en estado adolescente, se experimenta al margen
se percibe un comportamiento más transparente y una sensa- del facilitador aunque, también en muchas ocasiones, el gru-
ción más aliviante. Se inicia el quebrantamiento de las fachadas po no es consciente de esta especie de marginación. Un buen
psicológicas y el facilitador es percibido como técnico que pue- facilitador debe saber interpretar esta experiencia y no dejar-
de ayudar al grupo pero que participa poco del clima grupal. se llevar por un clima fantasioso que sabe evasivo y condu-
cente a la ineficacia. Puede participar de algunas manifesta- agresividad. Algunos grupos no logran superar estos conflic-
ciones del encantamiento pero si permanece en ellas no po- tos y deciden destruirse en este momento, otros grupos ya
drá facilitar la vuelta del grupo a su espacio vital porque fo- tienen un gran potencial surgido de su dinámica y plantean,
mentará la continuación de la fuga. desde el diálogo, la comprensión y la comunicación de sus
A veces se forman subgrupos de naturaleza informal porque discrepancias para intentar resolver los conflictos que han
las cosas no se tratan en el grupo, pero no dejan de ser episo- devenido patentes. El facilitador sabe que, en este instante,
dios de fuga y evasión. Mantenerse en este clima va creando tiene una función de mediación muy significativa.
conflictos al grupo produciéndose una cierta ambivalencia en-
tre sus miembros al percibir que el grupo no satisface las nece- 6.- Fase de validación y cohesión.
sidades individuales que se han sustituido por las colectivas y, La conciencia de temporalidad por parte del grupo es un
en consecuencia, cada persona no puede desarrollarse de forma factor extraordinariamente influyente en el salto hacia una
autónoma. La sensación más frecuente, al final de este estadio, nueva etapa. No es el único factor, ciertamente, pero consti-
es la de necesidad de dotar de mayor eficacia al grupo que se tuye un punto de inflexión muy determinante. La sensación
siente desorganizado. Parece como si las personas se sintieran de que se acerca el momento de una determinada actividad
muy bien juntas pero incapaces de proyectar actividad externa. externa por la cual se había constituido el grupo, o la percep-
ción de que se acerca el final de la existencia del mismo gru-
5.- Fase de desencantamiento y lucha.
po como consecuencia de que está a punto de producirse el
Algunas personas menos "intimistas" empiezan a no po- final de una experiencia intensiva, o el final de la actividad de
der soportar el clima anterior de falsa cercanía entre los un curso o cualquier otro final inminente; incita al grupo a es-
miembros del grupo y comunican un cierto desencanto. Las ta nueva etapa del camino que genera validación y cohesión,
personas van percibiendo que no todo es tan bonito y gratifi- es decir, eficacia.
cante y experimentan sentimientos contrapuestos. Parece co- El grupo, en esta fase, inicia un proceso de evaluación de lo
mo si el grupo volviera a desgajarse. Se manifiestan discre- que ha significado su quehacer hasta el momento, su historia,
pancias y sentimientos negativos hacia otras personas del su proceso como grupo, y genera una proyección venciendo el
grupo. Es como si se retornara a la segunda fase pero, esta temor al rechazo. Los miembros del grupo van aceptando las
vez, las divisiones e insatisfacciones se focalizan entre las diferencias entre ellos sin asociar lo que es bueno y lo que es
personas del grupo y no tanto hacia el facilitador. malo en función de estas mismas diferencias, los conflictos
Los participantes se enfrentan con el dilema entre salvar la existen sobre hechos reales más que imaginarios y el grupo va
propia personalidad o sacrificarla en beneficio del grupo. sintiendo que dispone de recursos para resolverlos.
Vuelve a producirse confusión, se suelen expresar ciertos en- Se mantienen discusiones racionales que facilitan el con-
frentamientos entre algunas personas y se visualizan más los senso de manera más eficaz y también se expresan senti-
conflictos intragrupales. mientos afectivos que impulsan hacia una mayor cohesión de
Es una etapa de nuevo caos y desequilibrio que, muchas grupo que suele potenciar un mayor compromiso de los
veces, adopta formas de subgrupos enfrentados con tintes de miembros con la tarea del grupo.
El facilitador va percibiéndose como un miembro más que cuestrada en el seno del propio grupo. Esta siempre es una
ayuda al grupo en su eficacia y comunicación. Esta es una fa- tarea apasionante, una aventura y un riesgo, también es la
se de cooperación, de participación, de creatividad y de efi- gratificación de haber peregrinado por una senda que conlle-
cacia y, en el ámbito afectivo, es un momento de comunica- va resultados satisfactorios y un cúmulo de experiencia y
ción vivencial y experiencial de las personas en el grupo. Los aprendizaje.
individuos comprenden mejor la forma de sentir y de pensar
de los demás y se va consolidando una relación de solidari-
El estallido que a veces se suscita
dad entre los participantes. El grupo, en fin, es capaz de ha-
cerse cargo de sí mismo y de expresar su autonomía, sabe En mi experiencia de facilitación he visto cómo, algunas
evaluar su progreso, controlar el propio funcionamiento, re- veces, después de la fase de validación y cohesión, el grupo
gular las tensiones que surjan e intervenir activamente para vive una mutación casi radical de elevado contenido emocio-
modificar las situaciones conflictivas. El grupo ha llegado a nal. Especialmente esta experiencia se suscita cuando un gru-
su madurez, y casi a su final. po, en el tiempo de su proceso, ha permitido hacer transpa-
Esta es la situación deseable en todo grupo: un grupo co- rente su área sensible y ha dedicado tiempo y espacios a la co-
hesionado auténticamente, capaz de comunicarse activamen- municación afectiva. Lamentablemente no conozco muchos
te, de interaccionar, de favorecer aprendizajes significativos y grupos ordinarios que trabajen intensamente este nivel afecti-
de realizar una tarea con eficacia y eficiencia. Para llegar a es- vo y posiblemente sea una línea de trabajo del futuro. Cuando
te estado es preciso haber crecido desde el principio. Una se produce esta dedicación se engendra un gran potencial.
persona no puede ser adulta sin haber tenido una infancia y Pero existen experiencias, no sólo de carácter intensivo,
una adolescencia. El grupo no puede ser maduro si no ha que han originado este estallido transformador que pone en
evolucionado en la senda de su acontecer. Como organismo entredicho cualquier intento de análisis racional de una si-
el grupo también nace y crece a través de un proceso evolu- tuación que se percibe como alterada y absolutamente nove-
tivo que provoca momentos de equilibrio y situaciones de dosa. Estas experiencias de encuentro en el seno de un grupo
inestabilidad. La toma de conciencia del proceso impulsa un han sido y son, para mí, una de las vivencias más enriquece-
equilibrio inestable que lanza al grupo hacia una mayor cre- doras, gratificantes y satisfactorias que puedo experimentar.
atividad y eficacia. Lo interesante es saber que este estado de- En algunos grupos las personas participantes hemos vivi-
seable no acontece desde la nada, sino desde los avatares del do sensaciones extraordinariamente significativas de solida-
comienzo. Casi de manera lineal una etapa sucede a la otra y ridad entre nosotros, de confluencia de las conciencias, de
resulta poco probable el salto de una fase a otra sin pasar por empatia vincular difícilmente explicables. Teníamos la sensa-
la que se corresponde entre ambas. ción de vivir como un todo armónico en comunión profunda
El facilitador deberá crear las condiciones para que el pro- entre nosotros y, a la vez, conectados con todo el universo.
ceso se desarrolle desde el mismo grupo, condiciones que fa- Era vivir como una especie de fusión, por un instante, entre
vorezcan este despliegue del potencial del grupo y para que todas las personas del grupo. No era necesario decir nada, el
esta tendencia al crecimiento no permanezca paralizada y se- silencio era presencia esencial y, en el vacío, experimentaba-
mos amor. Las palabras no podían abarcar la totalidad de la forme. Cada grupo, al ser distinto, tiene una desigual mane-
experiencia que era inexpresable. Quizá sólo la metáfora po- ra de caminar por su senda específica y cada uno experimen-
día cubrir la necesidad de verbalización. ta su camino con balanceo irregular.
Era encuentro, un espacio de flujo, un sentirnos cargados En las investigaciones que hemos ido realizando en nues-
de energía, un tocar el núcleo, un vivir la esencia, un diluirse tro departamento de dinámica de grupos de la "Escola de
entre el flotar de la conciencia común y el emanar plástico l'Esplai" 56 mediante el seguimiento de distintos grupos de
desde profundidades insospechadas hacia la totalidad del funcionamiento ordinario y a través de experiencias intensi-
cosmos oscilante. Presente y eternidad, pequenez absoluta y vas hemos podido comprobar que el proceso descrito tiene
espacio infinito, el todo y la nada, el yo y el no-yo, el otro, to- lugar globalmente en los grupos en el marco de característi-
talmente el otro, simultaneidad de las conciencias que se cas específicas independientemente de su duración temporal.
transforman poderosamente, percibir el poder del fondo, im- Así, una experiencia intensiva de tres o cuatro días de du-
pacto, espacio vincular que une, intensidad, inmensidad, pa- ración, por ejemplo, puede implicar la evolución de un gru-
labra insuficiente, silencio. po desde el inicio, en la primera etapa, hasta la fase de vali-
En el encuentro las personas nos sentimos poseedoras de dación y cohesión e incluso darse el salto hacia el encuentro.
un enorme potencial, extraordinariamente poderosas y posi- En otros grupos de duración más larga y de características no
tivas, con fuerza y propulsión para conectar con el vínculo, intensivas se experimenta el mismo proceso en el transcurso
con la esencia del otro que es lo mismo que mi esencia, con la de un curso escolar o de un año o varios según sea su seg-
esencia a solas. Nos experimentamos más integrados, unifi- mento temporal que enmarca su tarea como grupo.
cados, funcionando plenamente en fluidez, con amplias ca- Es plausible concluir que el proceso de un grupo tiene lu-
pacidades creativas, descubriendo la belleza y la armonía. gar en el marco de una acción global determinada, esta ac-
Acontece a un ritmo desinhibido, en un instante, sin causa ni ción viene definida por el conjunto de procesos, objetivos, in-
motivo, con máxima vulnerabilidad. tereses y actividades que un grupo realiza en un tiempo de-
Es un estallido que implica una relación franca con uno terminado. Es probable también que el mismo grupo, en ac-
mismo y con los demás, no existe ninguna garantía de que se ciones globales distintas con paréntesis temporal significati-
produzca en un grupo porque su aparición es indeterminada, vo entre ellas, experimente en el transcurso de cada una, el
sólo podemos crear condiciones que permitan la experiencia, proceso descrito porque el espacio del grupo y la acción glo-
no podemos asegurarla de antemano y, a veces, sucede. ¡Y
cuando sucede es maravilloso! 56. La "Escola de l'Esplai" es un centro formativo que se ocupa de la for-
mación de monitores y directores de grupos y de animadores sociocul-
turales además de ofrecer asesoramiento en la facilitación de grupos y
Vaivenes en el camino en la resolución de conflictos. También fomenta la investigación y el
aprendizaje en áreas de la educación no formal. Este centro funciona en
Mallorca desde 1974 y tiene un importante prestigio por su formación
Aunque descrito así parece que el progreso evolutivo del de calidad. Colabora también en convenio con distintas administracio-
grupo se realiza fácilmente y acontece en un contexto orde- nes públicas y algunas universidades privadas y públicas que convali-
nado, el trayecto de cada grupo no tiene lugar de manera uni- dan sus créditos formativos.
bal difieren de la anterior aunque tengan lugar de manera si- dor. En las tres últimas fases, sin embargo, el compendio de fe-
multánea o en intersecciones de tiempo. Esta última asevera- nómenos es fruto de las relaciones que establecen entre sí los
ción, sin embargo, requiere todavía más estudios e investiga- miembros del grupo, de las interacciones que emergen y de las
ciones para confirmarla y establecer si se trata o no del mis- comunicaciones que acaecen bidireccionalmente entre perso-
mo grupo aunque esté conformado por las mismas personas. nas del grupo siendo considerado el facilitador una de esas
Otro comentario que me parece significativo hace referen- personas en igualdad de condiciones. El campo fenoménico
cia al equilibrio inestable del proceso evolutivo de un grupo. suscitado es, en consecuencia, fruto de relaciones de interde-
Me parece que las tres primeras fases descritas tienen una si- pendencia que tienen un carácter más profundo.
militud con las tres últimas en parejas de a dos. Así, los sig- Esta diferenciación entre un marco de relaciones de de-
nos del acontecer de la primera fase que hemos denominado pendencia y autoridad y un marco relacional interdepen-
de expectación y dependencia guardan una cierta similari- diente adquiere una especial relevancia en la búsqueda de le-
dad con los signos de la cuarta fase de encantamiento y fuga, yes generales que expliquen ciertos avatares en el caminar
los signos de la contradependencia parecen iguales a los que del grupo, en su avanzar o en su retroceder. Intentemos ex-
se explicitan en el desencantamiento, y el acontecer de la eta- plicar estos vaivenes del camino.
pa de resolución y cooperación va muy en paralelo con el de- Los facilitadores del Enfoque Centrado en la Persona sa-
venir de la validación y la cohesión. bemos de la existencia de la tendencia actualizante, de la ten-
En el primer par los sentimientos de expectativa e ilusión dencia al crecimiento y al desarrollo que actúa en el seno de
iniciales se corresponden en su expresión con sentimientos cada persona que conforma el grupo y en el seno del propio
euforizantes de la fuga y la evasión. En el segundo par, la for- grupo como totalidad organísmica. El despliegue de esta ten-
mación de subgrupos, los conflictos que surgen, los distan- dencia hace que los esquemas emocionales de cada persona
ciamientos entre personas se manifiestan de forma semejan- del grupo y la confluencia de ellos en el grupo tiendan a ex-
te. En el tercer par, la catarsis, los indicios de evaluación del pandirse y promuevan comunicación y crecimiento.
proceso, el retorno al equilibrio y la proyección de la tarea de Sin embargo también tenemos experiencias de retroceso.
forma más creativa se reproducen de manera parecida. ¿Por En algunas condiciones negativas, las personas y los grupos,
qué establecemos entonces seis estadios para interpretar la además de no avanzar en un proceso de desarrollo parece
evolución de los grupos en vez de tres? ¿Cuál es la diferencia que enferman y retroceden. Es como si existiera, en determi-
fundamental entre los pares situacionales? nadas condiciones, una tendencia al desorden, a la entropía,
La experiencia y la investigación parecen indicarnos que los similar en su funcionamiento a la descrita por la física cuán-
procesos psicológicos y los acontecimientos de los tres prime- tica. Los grupos pueden participar también de esta tenden-
ros estadios tienen mucho que ver con la manera en que es per- cia. Investigaciones terapéuticas recientes parecen haber con-
cibido el facilitador o líder institucional del grupo por parte de firmado el surgimiento de esta fuerza conservadora en los
los miembros de este grupo. Los fenómenos que condicionan procesos terapéuticos: "Un rasgo importante del crecimiento
la experiencia vienen muy determinados por relaciones de de- y del cambio es el proceso dialéctico que se establece entre los
pendencia y autoridad que otorga el mismo grupo al facilita- procesos conservadores y transformadores. Por ejemplo: los
esquemas emocionales tienen una tendencia al crecimiento, ha permitido establecer pautas de intervención en resolución
al acomodarse a nuevas características del medio, lo cual ha- de conflictos de grupo con un grado elevado de éxito.
ce que el organismo esté en un constante fluir, mientras que La experiencia me indica también las circunstancias en las
se esfuerza simultáneamente por sobrevivir y mantener un que el grupo retrocede. Estas circunstancias se dan solamen-
sentido de coherencia. Sin embargo, en algunas circunstan- te en la fase sexta que hemos denominado de validación y co-
cias, puede predominar la tendencia conservadora, que hace hesión. Así, un grupo avanza desde la primera fase hasta la
que los esquemas no cambien, ni se acomoden a la nueva ex- sexta, en el camino puede quedar paralizado largo tiempo en
periencia y que, por el contrario, permanezcan rígidos. Esto un estadio o morir, pero nunca hay vuelta atrás; en la sexta
produce una pérdida de flexibilidad adaptadora y es una fase se pueden dar varias posibilidades.
fuente importante de disfunción". 57 En primer lugar, el grupo puede mantenerse un tiempo
Creo que es factible trasladar estas constataciones al gru- suficiente en el estadio de validación y cohesión realizando
po como organismo social. El grupo tiene una tendencia al una tarea productiva y eficaz, tanto en su nivel afectivo como
crecimiento, pero en determinadas circunstancias puede per- en el nivel organizativo hasta el punto y final del segmento
manecer rígido o retroceder en su camino. temporal del grupo en el cual el grupo muere como tal por-
que ha finalizado la acción para la cual se configuró; o puede
La experiencia me sugiere algunos hechos perseverantes
reproducirse, reformando el propio grupo, incorporando
que se producen en el trayecto de los grupos. Me indica que,
nuevas personas, despidiendo a otras y proyectando nuevas
en general, los grupos realizan el proceso evolutivo descrito
acciones a partir de nuevos intereses y motivaciones. En el
de manera secuencial, es decir; el proceso acontece desde la
primer caso el grupo acaba su proceso, en el segundo inicia
fase primera hasta la sexta sin saltarse ningún estadio y con
una nueva vida como nuevo organismo social, es un nuevo
el orden descrito. En algunos momentos y por determinadas
grupo y distinto del anterior a partir del cual se originó y, co-
circunstancias, algunas imprevisibles, el grupo puede perma-
mo tal, comienza su particular senda, un nuevo proceso des-
necer largo tiempo paralizado en un estadio pero jamás vuel-
de el principio del trayecto.
ve atrás. La tendencia al crecimiento es tan potente que, en
En segundo lugar, después de un tiempo en esta sexta fa-
todo caso, el grupo puede destruirse en un estadio concreto
se, el grupo puede superficializar su tarea y sus dinámicas
-en este caso queda destruida la tendencia actualizante inhe-
comunicativas, y experimentar un retorno al tercer estadio
rente a la vida del organismo-, o avanzar al estadio siguien-
de resolución y cooperación. Esta posibilidad es muy fre-
te. El aprendizaje de este curioso fenómeno de la vida de los
cuente en la vida de los grupos a causa, casi siempre, de un
grupos consistente en su ir avanzando siempre secuencial-
trabajo grupal que se convierte en rutinario y monótono en
mente hacia adelante y en la posibilidad de paralización du-
el espacio de la racionalidad y de construcción de nuevas ba-
rante largo tiempo pero sin que se dé jamás vuelta atrás en el
rreras psicológicas en la comunicación interpersonal, de
trayecto, ha sido para mi trabajo muy importante porque nos
otros límites que condicionan las posibilidades de interac-
ción. En este caso el grupo ha retrocedido en su camino y se
57. GRENNBERG, L.; RICE, L.; ELLIOT, R. Facilitando el cambio emocional.
El proceso terapéutico punto por punto. Barcelona: Paidós, 1996,120. puede paralizar en este estadio, morir en el mismo o seguir
hacia delante desde el tercer estadio al sexto con un buen sis- Mi experiencia me indica, no obstante, que los grupos que
tema de facilitación. han experimentado encuentro difícilmente vuelven a ser el
Puede suceder, como tercera posibilidad, que el grupo en mismo organismo y, casi siempre, las personas proyectan su
la sexta fase sienta un cierto agotamiento y vuelva al primer energía hacia otros grupos distintos como facilitadores. Este
estadio demandando que el facilitador resuelva sus proble- hecho, lejos de producirme abatimiento, me parece extraor-
mas. Es un retorno a la fase de expectación y dependencia a dinariamente gratificante porque hace emerger buenos facili-
través del cual el grupo vuelve a su época infantil. En este ca- tadores de grupos y expandir buenas dinámicas en distintos
so el facilitador deberá intentar facilitar de nuevo todo el pro- grupos sociales. El encuentro, visto así, representa un fuerte
ceso, del inicio al final. Este nuevo proceso suele realizarse a potencial en la formación de facilitadores creativos y eficaces.
más velocidad que el primer trayecto. El grupo, en este caso, En cualquier caso el grupo, como organismo vivo, experi-
habrá recorrido dos veces su camino en el mismo segmento menta un proceso constante en evolución. Este proceso es se-
temporal si no acontece su muerte antes de llegar. cuencial, tiene sus vaivenes y sus saltos, sus oscilaciones y su
Es factible, como cuarta posibilidad, que el grupo situado fluidez. Se genera en virtud de un equilibrio inestable que
en la sexta fase experimente el estallido hacia delante del en- compagina momentos de caos y orden, y en este movimien-
cuentro. Este acontecimiento es como una ruptura en la línea to ajetreado reside la capacidad adaptativa del grupo a nue-
secuencial, es un salto transformador e impactante. En mi ex- vas situaciones y originales retos. Me resulta conmovedor vi-
periencia, los grupos que han experimentado este momento venciar estos procesos grupales y percatarme.
de intensidad puntual significativa han revivido también po-
sibilidades distintas en su continuar como grupo. Por una Parones y estancamientos
parte es probable que este punto haya significado el final de
su proceso como grupo. Las personas recordarán esta expe- En nuestra práctica cotidiana en la facilitación y segui-
riencia como impactante y algunas de ellas habrán protago- miento de grupos diversos nos suele resultar útil trasladar el
nizado fuertes vivencias transformativas y de intenso apren- esquema evolutivo descrito como instrumento de diagnósti-
dizaje significativo y crecimiento personal. Otros grupos que co de situaciones grupales, se trata de comprender la tipolo-
han vivenciado el encuentro retornan con frecuencia a la fase gía de los grupos desde este esquema cognitivo. Esta pers-
de encantamiento y fuga porque se diluyen en el clima emo- pectiva nos permite discernir dos aspectos fundamentales de
cional intenso del encuentro y no consiguen canalizar la ener- la intervención grupal. Por una parte nos otorga una mayor
gía en términos de proyección y eficacia. Algunos, en fin, ex- aprehensión de los fenómenos de un grupo que, a pesar de
perimentan un retorno a la fase de expectación y dependen- estar estancado en un estadio determinado hasta poder ser
cia porque sienten que la maravillosa experiencia que viven catalogado con una denominación tipológica, nos permite in-
ha sido enardecida por el facilitador que se convierte para el tervenir y predecir resultados globales de nuestra interven-
grupo en una especie de maestro. En los dos últimos casos el ción basados en el movimiento previsible que realizará el
grupo deberá ser facilitado, una vez más, desde el punto del grupo si conseguimos crear condiciones que inciten este mo-
trayecto en que se encuentra para volver a generar proceso. vimiento. Por otra parte nos dota de mayor flexibilidad en los
r-: 1 r^ i
procedimientos de resolución de conflictos y en la búsqueda grupo en la fase primera por lo que podrá iniciar su trayecto
de una mayor eficacia grupal al poseer un campo más amplio tal como ha sido descrito. Si la intervención no se produce el
de visión del trayecto que queda por realizar. grupo morirá. Si hay suerte, quizá la tendencia actualizante
En este sentido la tipología grupal que proponemos no es sea tan poderosa que ella misma sitúe al grupo en su senda,
una tipología cerrada e inmóvil, como nos parece que eran las pero es difícil el surgimiento de la tendencia al desarrollo si
tipologías tradicionales que clasificaban a los grupos en auto- no existen condiciones adecuadas.
ritarios, democráticos o laissez-faire entre otras catalogaciones, El segundo punto de estancamiento es el que corresponde
impidiendo giros entre una u otra casilla clasificatoria porque a la primera fase, iniciado ya el proceso. Los grupos depen-
eran esquemas cerrados de división de las clases de grupos. dientes son grupos autoritarios. El director del grupo da ins-
El nuestro es un esquema global de catalogación que in- trucciones y consignas que son seguidas por los miembros
cluye todas las clases y permite el paso de un lugar a otro a del grupo. Esta función del líder crea un círculo vicioso que
través de medidas interventivas del facilitador. Se funda- mantiene el grupo en su dependencia y en su respeto y se-
menta en considerar que el grupo es un organismo en movi- guidismo hacia la autoridad. Una buena intervención impul-
miento permanente y en constatar que un determinado tipo sará al grupo en la fase siguiente, un mantenimiento de la ac-
de grupo no es más que un parón o un estancamiento signi- titud autoritaria puede hacer que el grupo se estanque en es-
ficativo en un momento del proceso que con un empujón po- te estadio. Una vez más, la misma tendencia actualizante
drá seguir su trayecto para devenir un grupo eficaz. puede favorecer el movimiento hacia delante.
Así, del esquema evolutivo de seis fases surge su corres- El tercer punto de estancamiento es el que viene determi-
pondiente esquema tipológico de siete clases de grupos aten- nado por la paralización de un grupo en la fase de frustración
diendo al punto del trayecto en donde el grupo sufre su es- y contradependencia. Son grupos rebeldes que no aceptan
tancamiento. Realicemos un intento de descripción. ninguna sugerencia del líder institucional que es considerado
Un grupo que casi no ha iniciado su camino y se paraliza un jefe ineficaz que concentra todos los malestares del grupo.
en los comienzos es un grupo laissez-faire. Este grupo no ha Estos grupos tienden también a desaparecer con prontitud o
entrado en el proceso, no tiene una visión del facilitador y el 1 se convierten en un equipo que cosecha reiterados fracasos
mismo facilitador considera de manera positiva cualquier i en su quehacer.
manifestación del grupo. Como no interviene o interviene | Muchos grupos de funcionamiento cotidiano están estan-
siempre desde su aceptación de cualquier expresión del gru- cados en la fase de resolución y cooperación. Se trata de gru-
po, el grupo no camina eficazmente, es un compendio de de- pos con estructura democrática en los que el liderazgo es ejer-
sestructuración y caos desorganizado e ineficaz. Los grupos cido con una cierta distribución de responsabilidades. Sin em-
así casi no han nacido, o en su nacimiento han sido abando- bargo, la mayoría de estos grupos no trabajan su nivel afecti-
nados, por lo que casi siempre mueren antes de nacer. Es co- vo o, en todo caso, sólo promocionan el área lúdica en este
mo un aborto grupal, un conato de grupo que no cuaja. ámbito de la sensibilidad. No existe pues una comunicación
Sabemos que una buena intervención y una intervención a real de los sentimientos entre las personas del grupo aunque
tiempo generarán expectación y dependencia, situarán al puede suscitarse una cierta eficacia en la tarea. Son grupos
centrados en la tarea de estructura formal situados en el espa- permiten y facilitan espacios de comunicación interpersonal
cio de la racionalidad del grupo y en el plano organizativo por en el ámbito afectivo y tienen también momentos de celebra-
lo que resulta más difícil una manera de hacer creativa. ción y fiesta lúdica. Los grupos así se significan por su tarea
Otros grupos se estancan en la cuarta fase de encanta- eficaz y creativa, por su liderazgo centrado en el grupo y por
miento y fuga. Viven una especie de clima pseudoafectivo su cohesión afectiva vincular. Son, para mí, los grupos dese-
adolescente y huyen de la tarea que ellos mismos planifica- ables, y nuestro esfuerzo debería encaminarse a impulsar
ron. No profundizan en la relación que se basa, casi exclusi- grupos de este tipo.
vamente, en un ambiente lúdico. Quizá el mejor nombre que Lo interesante del esquema es concebir que para llegar a
puede designar esta tipología grupal haya de ser también este tipo de grupos centrados en la persona hay que recorrer
irónico y metafórico en honor a la atmósfera que los caracte- el trayecto, por lo que de la intervención correcta en cual-
riza. Son grupos "Peter Pan" o grupos "kumba ya". Se carac- quier punto de estancamiento emerge el estadio inmediata-
terizan por su ineficacia en la tarea y por su comunicación su- mente siguiente hasta llegar al final. Desde este final el gru-
perficial y, aunque sus miembros se sientan bien juntos, su po puede también situarse en los puntos que se han descrito
proyección es escasa. con anterioridad, atendiendo a las distintas posibilidades en
El sexto punto posible de estancamiento de una situación los vaivenes. Esto hace que el proceso del grupo más que li-
grupal forma los grupos conflictivos. Su paralización en el pro- neal sea circular, un círculo en espiral en permanente movi-
ceso se ha producido en la etapa de desencantamiento y lucha miento. De ahí que resulte una aventura excitante la facilita-
por lo que el clima del grupo es de enfrentamiento entre varios ción. Se trata ahora de vislumbrar el cómo hacerlo e iniciar
subgrupos. Predominan la conspiración y las fuertes discre- nuestra tarea.
pancias fundamentadas más en aspectos personales que en di-
sensiones ideológicas o racionales. Estas discrepancias no de-
jan de ser un disfraz para ocultar y justificar desavenencias
afectivas extremas. Difícilmente estos grupos sobreviven si no
es con la intervención eficaz de un facilitador que tenga capa-
cidad de mediación en los conflictos y favorezca la comunica-
ción afectiva real entre las personas del grupo. En caso contra-
rio la escisión del grupo está casi garantizada.
Por último también hay grupos centrados en la persona.
Grupos que han sido capaces de mantenerse un tiempo sufi-
ciente en la fase de validación y cohesión. Son grupos que de-
dican tiempo a promover la comunicación entre sus miem-
bros en todos las áreas. Promueven debates cooperativos so-
bre el quehacer del grupo, dedican tiempo a evaluar expe-
riencialmente su acción externa y su funcionamiento interno,
rr i
5
ESTAR PRESENTE:
UNA MANERA DE HACER
65. No es mi intención, en este capítulo, ofrecer un estudio detallado del Primer paso: despejar un espacio.
Enfoque Corporal o focusing de Gendlm puesto que la riqueza de este
instrumento de autoayuda, al mismo tiempo que filosofía de vida, re- Mientras intento describir brevemente el proceso de focu-
quiere sin duda de más espacios específicos y mucho más desarrolla- sing puedes, estimado lector, intentar practicarlo por un mo-
dos. Sólo pretendo dejar constancia de la significación que, para mí
mento, quizá descubras, como a mí me pasó, un sistema ade-
mismo y para mi tarea de facilitación, ha adquirido en los últimos años
el aprendizaje -todavía impreciso por mi parte- de esta herramienta tan cuado para ir conectando contigo mismo a ver qué hay.
poderosa. En cualquier caso, el lector interesado puede consultar algu- El primer paso consiste en crear un espacio para ti mismo.
na bibliografía interesante sobre el enfoque corporal Entre otros libros, Busca un lugar cómodo, lejos de ruidos externos, como con-
cabe destacar: AMODEO, J Crecer en intimidad Bilbao: Desclée De
Brouwer, 1999. FLANAGAN, K. A la búsqueda de nuestro genio interior
cediéndote unos minutos para ti mismo, para disfrutar de ti
Bilbao- Desclée De Brouwer, 2001. GENDLIN, E Focusing Proceso y téc- mismo unos instantes. Puedes sentarte relajadamente en una
nica del enfoque corporal Bilbao- Mensajero, 1988 SIEMS, M Tu cuerpo sa- silla o en un sofá, cerrar los ojos, olvidándote también de los
be la respuesta Bilbao. Mensajero, 1997 WEISER, A El poder del focusing. ruidos interiores, de lo que tienes en la cabeza, de las preo-
Buenos Aires- Obelisco, 1999
cupaciones inmediatas, de lo que debes hacer, del trabajo es-
l~ft I m i
tresante que te condiciona, de cualquier cosa que sea un rui- gunta y espera a ver qué emana del interior, del centro de tu
do para ti en este instante. cuerpo. Respira nuevamente esta sensación vaga, corporal-
Intenta introducirte en el interior de ti mismo, como bus- íñente sentida, como si le dieras volumen e intenta nueva-
cando un espacio para contemplar tu propia experiencia in- mente dejarla a un lado, cerca de ti, pero distinta a ti mismo.
terna, de manera relajada y tranquila, sin forzar nada y deja Puedes ir repitiendo este breve proceso algunas veces, co-
que tu atención se concentre en el centro de tu cuerpo, en el mo si hicieras un inventario de lo que va surgiendo, de lo que
pecho, en el estómago, en la garganta... aquí es donde acon- hay entre tú y el sentirte realmente bien. Lo importante es
tecen los sentimientos y las emociones. Puedes respirar para que lo que mana venga del interior del propio cuerpo, no de
concentrar tu atención en este centro, hazlo pausadamente los análisis racionales que tantas veces hacemos, y dejar que
como dándote tiempo de situarte en el momento presente vayan fluyendo las distintas sensaciones. Pronto notarás que
después del ajetreo del día. Sitúate aquí, durante un minuto, hay un gran espacio en tu interior dispuesto para lo que quie-
en el centro de tu cuerpo y deja que tu atención permanezca ras enfocar, un espacio silencioso en el que has distanciado
aquí por un momento. las estridencias que impedían sentirte realmente bien contigo
Aparta de momento lo que pueda pesarte, deja espacio mismo. Ahora ya puedes seguir en el camino defocusing.
para ti mismo como observador, como intentando vivir una
experiencia novedosa contigo mismo. Si empiezas a estar re-
lajado y centrado en el interior de tu cuerpo puedes empezar Segundo paso: formar el felt sense. 6 6
prestando atención a tu estómago, a tu pecho, a tu garganta...
Una vez ya disponemos de espacio interior, tu cuerpo es-
y puedes decirte algo así como: "Parece que mi vida marcha
tá preparado para enfocar. Te puedes preguntar: de todas
bien, me siento realmente satisfecho últimamente ¿no es ver-
dad?". No contestes con tu mente, deja que surja algo, algu- esas sensaciones de mi inventario ¿qué quiere ser atendido
na vaga sensación que emerge del interior de tu cuerpo, mi- en este momento? Una vez más pregunta y espera. Deja que
ra cómo es, densa, asustada, vacilante... sea lo que sea deja el mismo cuerpo elija el tema, la situación, el problema que
que asome del interior. desea enfocar en este instante. Si te resulta difícil esta elección
tampoco hace falta preocuparse, puedes elegir de manera
Date cuenta de cualquier asunto o preocupación que aflo-
cognitiva alguna situación importante para ti, también pue-
ra y mira si puedes dejarla a un lado de momento, como en-
des preguntarte cómo te sientes en estos momentos. En la vi-
contrando distancia entre tú y ese algo que ha surgido, ima-
gina que lo colocas a un lado, o debajo, o frente a ti mismo; da, en el fondo, es como si todo estuviera conectado por lo
no lo expulsas completamente pero experimentas un cierto que no es preciso delimitar tan específicamente un asunto
distanciamiento entre tú y esa sensación vaga y difusa. que requiera enfoque por sí mismo.
Si consigues esa distancia vas despejando espacio para ti. Cuando creas que puedes enfocar ese algo, ese problema,
Continúa preguntándote algo así como: "Si no fuera por eso, esa situación, esa relación, dirige nuevamente tu atención en
o a pesar de eso, ¿hay alguna otra cosa que se interponga pa- el centro de tu cuerpo, en el pecho, en el estómago y observa
ra sentirme realmente bien?". No te contestes tampoco, pre- 66. Sensación corporalmente sentida.
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qué ocurre con eso. ¿Cuál es la sensación global de ese algo?
tando a esa sensación. Puede ser algo pegajoso, o "como
Pregunta y espera nuevamente, deja que tu cuerpo responda.
apretado", o "como una olla a presión", o pesado, o punzan-
Esa sensación global de algo es una sensación sentida corpo-
te... Intenta algo que encaje, un ajuste entre la palabra, la ima-
ralmente, con significado emocional, es elfelt sense.
gen y la sensación. Desecha cualquier otra cosa que no se
Es todavía una sensación imprecisa que no tiene palabras,
ajuste, no intentes imponerle a la sensación este asidero, deja
es algo que lentamente va apareciendo en el centro del cuerpo,
que aparezca por sí solo con paciencia.
es la globalidad de todo ese asunto hecha emocionalidad cor-
poralmente sentida que se expande por el tórax o por el estó-
mago o por la garganta. Quizá sea una sensación curiosa o Cuarto paso: resonar.
sorprendente, distinta a lo que hayas podido imaginarte sobre
lo que te genera este asunto cuando lo analizas con la razón, Ve ahora del asidero a la sensación como preguntando ¿es
pero acoge esta sensación difusa como dándole la bienvenida, realmente eso? ¿se ajusta de verdad? No contestes, pregunta
intenta respirarla, como expandiéndola. Permanece un rato y espera que el cuerpo responda. Tómate tiempo, al menos
con esta sensación como haciéndole compañía y aceptándola. un minuto, para entrar en contacto de nuevo con la sensa-
En ocasiones no me resulta fácil dejar que surja de mi ción. Deja que ella diga si se ajusta o no. Quizá notes un lige-
cuerpo una sensación de la globalidad de algo que deseo en- ro movimiento, como si se abriera, como un pequeño alivio
focar. Puede que me encuentre con cosas estáticas en mi men- que acontece al descubrir el nombre que tiene. Recíbelo con
te que me impiden abrirme a los indicios emocionales de mi curiosidad. Tal vez aparezcan nuevas palabras o imágenes
cuerpo. En la mente residen frases hechas, principios éticos que se ajustan mejor. Déjate llevar por ese balanceo desde la
valorativos de múltiples conductas, propósitos ignacianos imagen o la palabra a la sensación moviéndote entre lo uno y
sobre lo que debería sentir o hacer, sentimientos no acepta- lo otro y ve percibiendo los cambios que se producen.
dos y reprimidos y otras muchas cosas más. Quizá también Normalmente puedes irte diciendo las palabras y dejar
te ocurra. Es cuestión de hacer silencio, de callar y escuchar- que vuelva la sensación, suele hacerlo en unos veinte segun-
te, esperar y sentir. Si consigues alejar esos ruidos de la men- dos. Ve resonando hasta que coincidan exactamente. Puedes
te, respirar profundamente y centrar la atención en el centro preguntarle a la sensación ¿Está bien así?. Pregunta pero no
de tu cuerpo, el pecho se abre lentamente y empieza a emer- contestes, cuando encaja sientes algo así como: "¡Sí... es eso!"
ger la sensación sentida difusamente hasta que se expande. Tu cuerpo cambia al dar nombre correcto a la sensación, per-
Estáte con ella un rato dejándola estar ahí sin imponerle na- manece con ello un minuto, no te des prisa. Respira. Al ajus-
da y ve percibiendo su cualidad emocional. tarse sentirás un interesante alivio.
Esta sensación sentida ¿qué cualidad tiene? Intenta encon- Parece que ha llegado el momento de preguntar a la sen-
trar una palabra, una frase o una imagen que se vaya ajus- sación sentida de qué se trata. Ahora pregunta a la sensación
lo que es. Deja pasar algún tiempo hasta que el mismo cuer- movimiento como si le dieras volumen y valóralo porque for-
po responda. Necesitas ayudarte del asidero para hacer pre- ma parte de ti mismo. Agradece a tu cuerpo lo que te ha mos-
guntas a la sensación. Por ejemplo, si la palabra que encajaba trado y acepta cualquier cosa que hayas experienciado.
era "presión", puedes preguntarle a la sensación: "¿qué es lo Puedes buscar alguna imagen para percibir más claramente
tan presionante?". No contestes, pregunta y espera que el este cambio que podrá ayudarte a recordarlo más adelante. Y
cuerpo responda, la misma sensación se irá abriendo a medi- protégelo de voces críticas. Si realmente posees esta actitud
da que preguntes y esperes. A veces no contesta enseguida, de estar recibiendo, lo que venga no te abrumará. Es proba-
pasa un minuto o dos con la sensación interrogada. También ble que no puedas solucionar esta situación, problema o rela-
es conveniente hacerle otro tipo de preguntas: "¿qué es lo pe- ción en algún tiempo, pero tu cuerpo te habrá dado la direc-
or de todo ello?" o "¿qué es lo que realmente hay en eso?". ción para ello y después podrás intencionarlo.
Lo importante de este paso es preguntar y esperar. Alejar Recibir significa, en realidad, aceptar el cambio, por raro o
los mecanismos racionales y esperar a que el cuerpo responda extraño que pueda parecer. Con el recibir sentirás siempre un
en forma de cambio corporalmente sentido. A veces este paso alivio corporal. Por eso el proceso defocusing es algo bueno.
es el más difícil porque aparecen muchos pensamientos que Ahora ya puedes ir despidiéndote del proceso, como gene-
hacen que la sensación permanezca inmutable. Intenta pasar rando una pequeña distancia adecuada entre tú y tu expe-
de largo estos pensamientos y seguir enfocando el centro de tu rienciar eso en este momento sabiendo que puedes volver a
cuerpo, en uno o dos minutos ya vas a poder percibir ligeros ello cuando lo desees.
movimientos en la sensación, como si se abriera más y más. Cuando a tu cuerpo le permitas expresarse sin presiones
Por último pregúntale: "¿qué necesitaría para estar bien?" o tiene la magnífica sabiduría para tratar tus problemas, por
"¿qué necesito para sentirme mejor?". Dedica algún tiempo a ello el proceso del enfoque corporal no es una tarea dura si-
esta pregunta y enfoca de nuevo la sensación, espera a que el no simplemente el estar un corto tiempo amistoso dentro de
cuerpo responda nuevamente e intenta respirar profundamen- tu cuerpo, y puedes abrir la puerta de tu interior cuando lo
te como tocando la sensación permitiendo que responda. En desees, tú y sólo tú tienes esa llave.
algún momento se abrirá, sucede cuando tiene que ocurrir, no- En realidad el proceso del focusing es un proceso natural.
sotros no lo controlamos. Si percibes algún movimiento corpo- Es lo que hacemos normalmente, por ejemplo cuando hemos
ralmente sentido, si puedes permanecer un rato con esta lige- olvidado alguna cosa. Como que nos escuchamos interior-
ra sensación aunque no sepas exactamente lo que es, estás ha- mente centrando la atención en el centro de nuestro cuerpo
ciendo correctamente el proceso del enfoque corporal. hasta que como en un "¡zas!" aparece el recuerdo. El cuerpo
sabe antes que la mente porque el cuerpo es el sujeto de nues-
Sexto paso: recibir. tro propio experienciar. La técnica descrita, ideada por
Gendlin, no es más que explicitar operativamente un proce-
Recibe con curiosidad cualquier cosa que haya surgido so natural. Sirve para entrenarnos a conectar con nosotros
dándole la bienvenida. Acoge este pequeño cambio, que mismos. Al principio puede resultar un poco más difícil, qui-
siempre es positivo, de la sensación. Respira este minúsculo zá sea interesante practicarla por parejas en las que una per-
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sona guía y la otra es guiada. Cuando tengamos más prácti- entre múltiples pensamientos y acciones de las que ni siquie-
ca se puede realizar por uno mismo. ra tomamos conciencia personal. En estas situaciones no vi-
E\ focusing me ha ayudado enormemente en mi tarea de fa- bramos, no nos sentimos vivos. Parece como si nuestro cuer-
cilitar grupos. Antes de una intervención, ante una situación po interno, el lugar de las sensaciones, emociones y senti-
grupal y personal ya no me planteo qué tipo de respuesta es mientos estuviera extraordinariamente agarrotado y duro sin
la más conveniente. Presto un poco de atención al centro de dejar espacio para la flexibilidad, para fluir experienciando y
mi cuerpo, respiro y aparece una sensación intuitiva que me sintiendo. Cuando ocurre eso pagamos el precio de vivir des-
indica la intervención. Casi siempre funciona y parece gene- de afuera, como si siguiéramos un ritmo de vida robotizado
rar un enorme clima potencialmente constructivo. y mecánico. Entonces no escuchamos ni nos escuchamos, no
Por ello me parece que, a pesar de que el focusing siempre callamos ni miramos dentro de nosotros mismos a ver qué
se asocia al primer nivel de la autenticidad, a la genuinidad del hay, no nos damos tiempo ni permiso para estar con nosotros
facilitador; es decir, al entrenamiento requerido para facilitar la mismos, como si nos tuviéramos miedo, no crecemos porque
armonía entre la experiencia y la conciencia, para mí resulta convivimos con la muerte psicológica.
una autoaplicación de las tres actitudes relaciónales a la rela- En estas condiciones no podemos facilitar un proceso flu-
ción con el sí mismo. En el focusing puedo ser autoempático, yente de grupo porque nuestro quehacer en el grupo es dis-
escucharme y comprenderme realmente; puedo ser auténtico tante y etéreo, frígido y gélido. Quizá dominemos teorías psi-
conmigo mismo, comunicándome conmigo mismo sin prejui- cológicas y pedagógicas, conozcamos técnicas e instrumentos
cios; y puedo tenerme autoestima o consideración positiva in- de facilitación pero somos incapaces de transmitir esa ener-
condicional, aceptando y recibiendo todo lo que surja. gía afectiva y emocional que sólo se contagia cuando hay vi-
Aveces, en los grupos, dedicamos también un poco de tiem- da sintiente que se expande.
po a una sesión de focusing. Suele facilitar intensos momentos Y sin embargo, escucharse a sí mismo no es sencillo.
de toma de conciencia y facilita un clima de comunicación pos- Requiere intencionar volitivamente la disposición de aparcar
terior significativa porque procede del proceso de experienciar por un momento los estereotipos de la mente pensante y las
de cada participante. Ayuda a la aceptación de los diversos consideraciones cognitivas provenientes de las valoraciones
sentimientos que aparecen, aunque sean contradictorios, y fo- que hemos ido asimilando en nuestra racionalidad, y penetrar
menta la escucha y la aceptación entre los participantes. en ese lugar nuestro donde ocurren las sensaciones y las emo-
Relacionarse sanamente con uno mismo puede requerir, ciones para mirar con curiosidad el fluir de nuestras sensacio-
en muchas ocasiones, pautas de entrenamiento que favorez- nes significativas. Requiere visitar ese espacio sin miedo, de-
can conectarnos con nuestro interior. El focusing puede ayu- jando como de lado el temor a encontrar algo que puede no
darnos mucho en este aspecto. Muchas veces, lo que pensa- gustarnos, sabiendo que lo que hay nos pertenece y forma
mos y lo que hacemos no concuerda con nuestro sentir inter- parte de nuestro proceso experiencial y esperando con con-
no. A veces incluso ya no nos percatamos de lo que realmen- vicción que nuestro núcleo interno más profundo está forma-
te sentimos, como si hubiéramos construido un muro entre do por un cúmulo de energía positiva que desea expandirse
nuestro pensar y nuestro sentir que ha quedado enterrado hacia fuera e impregnarnos de potencial constructivo.
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En esta autoconfianza reside el fundamento de la propia Facilitar un grupo requiere, en fin, saber facilitarse uno mis-
autoestima, es decir, de la disponibilidad inherente a sentirse mo, y hacerlo también autoaplicándonos las condiciones nece-
bien con uno mismo que puede permitirnos la tendencia a sarias y suficientes de la facilitación centrada en la persona: es-
aceptarnos tal como somos y a posibilitar la acogida a los cucharse, aceptarse positivamente con aprecio y ser auténticos
cambios que irrumpen de nuestro interior. con nosotros mismos dando nombre correcto a lo que hay y no
Y es verdad que dando nombre correcto a la sensación autoengañarnos. Se trata, en realidad, de reconocer que sólo yo
sentida interior sobre la totalidad de un problema o una si- puedo ser yo mismo y, en ese reconocimiento es cuando pue-
tuación no se soluciona inmediatamente este problema o es- do permitirme ser más vulnerable y descubrir la fuerza intrín-
ta situación. No obstante el mismo cuerpo puede indicarnos seca a esta misma vulnerabilidad que nos hace más abiertos a
la direccionalidad adecuada sobre nuestro estar con este pro- la experiencia y más capacitados para experienciar el fluir de
blema o esta situación y, casi siempre, lo hace de manera ori- la vida y la posibilidad de transformarnos.
ginal, novedosa y creativa y nos ayuda a asumir la decisión
que podamos adoptar porque proviene de dentro de noso-
tros mismos y no de la exterioridad de las consignas raciona-
les de nuestro super-yo.
El silencio es una maravillosa herramienta para permitir-
nos conectar con uno mismo. Es tan sencillo como permane-
cer solos un rato, callar y respirar y, dejando a un lado las ten-
taciones de los análisis racionales, impregnarnos de silencio
para que fluya del centro de nuestro cuerpo el lenguaje de la
sensación que significa más que las palabras. Con el silencio
interior emerge un nuevo espacio que, a modo de engranaje,
concita un flujo continuo de emoción y sentimiento que se va
abriendo camino en nuestro vivenciar. Desde ahí cobra senti-
do la capacidad de sorprenderse de uno mismo, de percibir
el propio potencial constructivo, el poder personal que nos
otorga la posibilidad de confiar en nuestro propio organismo
y de ampliar el marco perceptivo de la conciencia que nos ha-
ce estar más abiertos al experienciar.
Y a partir de esta riqueza interna resulta gratificante arries-
garse a salir fuera y permitirse ser vulnerable experimentando
que el crecimiento es un proceso sin fin que tiene su raíz en el
propio núcleo personal y en las relaciones de confluencia de
las conciencias que, en este contexto de vulnerabilidad, pode-
mos experimentar.
m—i
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7
DISPONERSE,
ENFOCAR Y DESENFOCAR.
HACIA LA OPERATIVIDAD
DEL SISTEMA
"Parece que no existe un agente más eficaz que otra persona pa-
ra dar vida a un mundo propio, o para marchitar la realidad en la
que uno habita mediante una mirada, un gesto o un comentario".
(E. Goffman)
Consideración
Positiva
Incondicional
Empatia
y lucha.
La vivencia del desorden y el desequilibrio que las perso-
1
11
^^^™
Consideración
Positiva
^^^^
Empatia Autenticidad
8
cilitador no representa una vuelta al subjetivismo del roman-
ticismo filosófico, ni quiere significar un desplazamiento de
la razón. Constituye mejor un centrar la mirada hacia otro ti-
po de racionalidad, la racionalidad intuitiva que contiene la
totalidad del ser corporalmente sentido y toda su experien-
cia, y se manifiesta desde un instante de incertidumbre que, DOS DESTREZAS PARA
en el silencio interior escuchado por el sí mismo, lleva en su
seno la semilla creativa de la intervención facilitadora expre-
UNA ACCIÓN EFICAZ
sada como condición significativa hacia la posibilidad de una
nueva interacción.
Factores de eficacia
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Por último, si el grupo explicita los acuerdos y los compro- mar o modificar esta hipótesis de intervención. Sin embargo
misos adoptados para la resolución de los distintos elementos mi experiencia me indica que son destrezas que generan un
o para la planificación de la acción del grupo, se produce un potencial significativo para que un grupo realice su tarea más
mayor grado de asunción de responsabilidad de las personas eficazmente y con mucha mayor creatividad.
para ejecutar las decisiones que garantiza, en buena parte, que Como destrezas provenientes del facilitador forman parte
la acción decidida sea realizada. El grupo actúa, en este caso, de su sentir interno, de su manera de intervenir, de su estilo.
como factor de presión y motivación hacia el individuo que ha Por lo que no se trata tanto de sugerir recursos útiles para la
tomado una responsabilidad y un compromiso, el cual quiere impregnación de ritmo o de sentimiento lúdico sino de mos-
sentirse aceptado y valorado por el grupo en su quehacer. Se trar agilidad y animación.
siente, pues, impulsado hacia delante en la acción pretendida Me parece posible y conveniente la combinación de estas
para que devenga real aquello que se intuye como posible. dos destrezas en una unidad compleja interventiva en la que
se muestren ambas simultáneamente. Si no fuera así, estaría-
Agilidad y animación: el ritmo desenfrenado y el revulsivo mos hablando, en realidad de estilos distintos y contradicto-
de la metáfora rios. Me ha resultado gratificante encontrar esta considera-
ción en el manual de Alfonso López Caballero cuando mani-
A partir de nuestra experiencia hemos significado que el fiesta: "La oscilación posible entre la eficacia y la simpatía es
compendio de estos factores generadores de eficacia y de efi- una duda perpetua latente en todo líder de grupos. Nos en-
ciencia grupal pueden ser impulsados por el facilitador de un contramos, de hecho, ante dos posibles estilos de dirección,
grupo en base a la disposición de dos destrezas que comple- presentes en cualquier organización o colectivo humano" 72 .
mentan su estar presente actitudinal. Las hemos denominado Percibo, a diferencia de López Caballero, que no sólo son des-
destreza de la agilidad y destreza de la animación. trezas no contradictorias entre sí sino que son perfectamente
Parece que en el espacio de la racionalidad del grupo y en combinables y que, en realidad, es esta combinación sintética
el espacio de su tarea externa estas dos destrezas tienen una entre ambas la que genera una nueva destreza ágil-animada
relevante influencia para el impulso de una acción creativa y que promueve un clima de creatividad y de eficacia.
eficaz. Hemos aprendido que si complementamos nuestro es- En un reciente libro sobre la psicoterapia de Cari Rogers, su
tar presente actitudinal que abarca las actitudes de empatia, colaboradora María Villas-Boas -fallecida en 1994- comenta la
consideración positiva y autenticidad, con un mostrarnos transcripción de una de las últimas entrevistas de demostra-
ágiles promoviendo un determinado ritmo acelerado en la ta- ción del maestro que tuvo lugar en un seminario realizado en
rea del grupo, y animados, con una especie de sentido lúdi- 1983, cuatro años antes de su muerte. En uno de estos comen-
co; el grupo se muestra más eficaz y creativo. tarios -refiriéndose a la evolución de Rogers en sus entrevis-
No conozco muy bien todavía los fundamentos profundos tas- expresa Villas-Boas: "Dos cambios son evidentes, en pri-
que pueden secundar la influencia efectiva de estas destrezas mer lugar utiliza un abanico de técnicas mucho más amplio
en la acción del grupo, y son necesarias, sin duda, unas ma-
yores cantidades de experimentaciones que puedan confir- 72. LÓPEZ, A. Cómo dirigir grupos con eficacia. Madrid: CCS, 1997,135.
7 I
que la simple reformulación de lo que el cliente dice y la clari- tando. Se trata también que el facilitador genere ritmo, pre-
ficación de sentimientos. Usa la interpretación, las señales del sione temporalmente como si dijera: "¡Va, manos a la obra...!"
cuerpo de la cliente para traerla al aquí y al ahora, metáforas, o "¿empezamos?". Y se trata, en fin, de que el facilitador re-
humor, exagera y repite sus comentarios de autodesprecio pa- cuerde los límites temporales y él mismo sea congruente con
ra acentuar lo absurdo y la anima a ser precisa en la evaluación la disposición del tiempo del grupo: puntualidad al iniciar y
de sí misma. En segundo lugar, Rogers se permite a sí mismo finalizar la sesión, y coherencia con las acotaciones de tiem-
ser directivo. Formula hipótesis acerca de la fuente de los pro- po determinadas por el grupo para cada tarea.
blemas y las comprueba abiertamente para verificarlas; ade- Esta destreza de agilidad y de impulso de ritmo rápido
más, introduce temas nuevos y rompe silencios".73 conlleva la capacidad moderadora del facilitador fomentan-
Podemos entrever, a través de esta referencia, que el ma- do la implicación de todos los miembros del grupo, alimen-
estro ya intuía la significación en su estilo de la metáfora y el tando elfeed-back, mostrando interés por lo expresado, cen-
centramiento en lo esencial como destrezas facilitadoras. Sin trando continuamente el tema de discusión y explicitando los
haber expresado un compendio adicional teórico a sus "con- acuerdos adoptados para reafirmarlos.
diciones necesarias y suficientes" parece que Rogers ya desa- Una destreza de agilidad sin humor no despierta la creati-
rrolló en los últimos años estas habilidades en su manera de vidad grupal. La animación es una destreza por medio de la
entrevistar. cual el facilitador transmite entusiasmo, se presenta de ma-
Me parece plausible que esta disposición conjunta de am- nera simpática ante los miembros del grupo y hace uso del
bas destrezas tenga que ver con lo manifestado por lenguaje metafórico, a veces irónico, para elucidar la situa-
Csikszentmihalyi en una de sus extraordinarias publicacio- ción del grupo. Con esta destreza el facilitador, a través de la
nes: "Un tercer rasgo paradójico se refiere a la combinación metáfora y de su propia gestualización promueve la creativi-
afín de carácter lúdico y disciplina, o responsabilidad e irres- dad y la originalidad del grupo que se siente libre para apor-
ponsabilidad. Es indudable que una actitud Índicamente ale- tar nuevas ideas y superar los límites conceptuales a que pue-
gre es típica de los individuos creativos... Pero este carácter de estar sometido. Se trata de dar también importancia a la
lúdico no llega muy lejos sin su antítesis, una cualidad hecha ambientación de los espacios, a la presencia de nuevas ideas,
de tenacidad, resistencia y perseverancia". 74 a la experimentación, al riesgo, a lo lúdico, al humor y a la
Con la destreza de agilidad me refiero a la disposición del fiesta celebrativa. 75
facilitador a generar actividad. Se trata de que con su actitud La destreza de la animación no consiste exclusivamente en
el facilitador ayude al grupo a centrarse en la tarea y a obviar el uso de la ironía. La ironía del facilitador puede ser hirien-
la dispersión sugiriendo al grupo cuando es necesario que te y puede usarse para esconder la autenticidad del propio
nos debemos centrar en el contenido de lo que estamos tra- facilitador tras una máscara relativamente humorística que
no ayuda al grupo en su quehacer. La destreza consiste más
73. FARBER, B. y otros. La psicoterapia de Cari Rogers. Casos y comentarios.
Bilbao: Desclée De Brouwer, 2001,100. bien en el uso delicado de la metáfora como revulsivo para
74. CSIKSZENTMIHALYI, M. Creatividad. El fluir y la psicología del descubri- ayudar al grupo a la toma de conciencia y, a través de este
miento y la invención. Barcelona: Paidós, 1998, 84. percatarse, impregnarlo de impulso para una acción creativa.
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Me parece que esta síntesis de agilidad-animación, de ritmo Tomar decisiones: la importancia de la coherencia
desenfrenado y revulsivo metafórico, de eficacia y simpatía, de metodológica
lógica racional y juego afectivo, de matemática y poesía; pro-
duce una nueva unidad interventiva facilitadora que, en mi ex- Una de las funciones que con más frecuencia realiza un
periencia, transmite al grupo un impulso de proyecto con gran- grupo con un enfoque centrado en la persona consiste en la
des posibilidades de generar acciones eficaces y creativas. adopción de decisiones en su nivel organizativo. A diferencia
de otros grupos de carácter más jerarquizado o autoritario,
75. Mientras estaba redactando el manuscrito de este libro apareció publi- en los que los miembros de un grupo son llamados a ejecutar
cado un estupendo libro de lectura amena y muy bien fundamentado las decisiones tomadas por su líder institucional, los grupos
cuya referencia es IDÍGORAS, A. (Ed.). El valor terapéutico del humor.
Bilbao: Desclée De Brouwer, 2002. En esta publicación se presenta un
de funcionamiento democrático y en mayor medida aquellos
completo estudio sobre la capacidad facilitadora del humor en distintos que quieren fundamentarse en las bases de un centramiento
ámbitos y contextos. Sin duda será un valioso instrumento de trabajo en las personas, necesitan disponer de un método eficaz de
para aquellos animadores de grupo que se acerquen a nuestro enfoque
toma de decisiones compatible con los principios sustancia-
y deseen entrenar esta destreza del sentido lúdico que hemos sugerido.
También en el transcurso del verano de 2002, cuando seguía trabajando les del Enfoque Centrado en la Persona.
en este libro tuve la oportunidad de recibir en mi casa al Dr. Claudio La decisión constituye una acción interna del grupo refe-
Rud, uno de los más expertos psicoterapeutas rogerianos actuales.
rida tanto a los contenidos de la tarea como a los procedi-
Acababa de regresar del Congreso Mundial de Psicoterapia celebrado
en Viena en el que había presentado una ponencia muy hermosa que ti- mientos para llevarla a cabo, que tiene la intencionalidad de
tuló: "Metáforas y complejidad. Una sintaxis posible de la constitución y con- conseguir un resultado deseado. La manera como los grupos
figuración del acontecimiento terapéutico desde el acercamiento centrado en la adoptan las decisiones forma parte de la estrategia utilizada
persona". Fue una gran satisfacción por mi parte comprobar como en el
texto de la investigación el Doctor Rud abogaba por el lenguaje metafó- para hacerlas posibles y eficaces.
rico o figurado más allá del reflejo como manera de estar presente faci- En realidad, la forma de adoptar decisiones en un grupo,
litadora en el acontecimiento terapéutico. Reproduzco algunos pasajes el estilo del proceso de toma de decisiones y los procedi-
de la maravillosa exposición de Claudio Rud: "Es esta modalidad del
lenguaje en su carácter ambiguo, oscuro, críptico y multisignificativo, la mientos que se emplean para llevar a cabo este proceso re-
que pretendemos reivindicar. No sólo como instrumento idóneo en la presentan un síntoma muy evidente del nivel de cohesión y
función psicoterapéutica, sino como modo de presentación de lo real en evolución de un grupo. Así lo manifiesta, al menos, Klaus
nuestra tarea. El lenguaje figurado es el que permitirá dar cuenta de ese
suceso, iluminando desde ahí la función del terapeuta y, a nuestro mo- Antons, uno de los mayores especialistas de la dinámica de
do de ver, su utilidad en psicoterapia... Quisiera continuar con una afir- grupos moderna. Dice Antons: "Casi se puede aventurar la
mación de carácter metafórico: la realidad es en sí misma metafórica. hipótesis de que la forma en que un grupo emite sus decisio-
Esta afirmación podría entenderse en varios sentidos, y justamente por
eso, afirmo que es metafórica. Dada la riqueza polisémica de la mani-
nes constituye un indicador del nivel de madurez de un gru-
festación de lo real, habitualmente es accesible desde esa caracteriza- po, lo cual no quiere decir que la solución democrático-for-
ción... Cuando una metáfora funciona, no sólo causa la extrañeza de lo mal o la del consenso sean por sí mismas más o menos madu-
imposible, o invita a hacer proyecciones entre las categorías implicadas,
sino que, además proporciona una experiencia propia, una visión, una
ras o inmaduras: también un grupo grande, que durante mu-
actitud afectiva, que se impone al significado literal". cho tiempo se ha abierto paso a través de diversas formas de
hallazgo de soluciones, puede en ciertas circunstancias recu-
rrir de nuevo al procedimiento democrático-formal de la vo- nombres diversos que damos a una misma experiencia sean
tación; la ideología del consenso puede hacerse asimismo compartidas y conocidas por las personas que conforman
disfuncional e irreal". 76 grupo. Y en este compartir resulta imprescindible abordar un
En cualquier caso parece conveniente adoptar un procedi- proceso de consenso para determinar comúnmente cuál es la
miento de toma de decisiones coherente con la voluntad de situación que requiere solución y decisión colectiva.
implicación de todas las personas del grupo, alentador de la Sólo una vez que hayamos podido abordar y acordar el
participación y la cooperación colectiva, generador de com- problema objeto de la atención del grupo es posible iniciar un
promisos y de asumción de responsabilidades que posibili- procedimiento democrático y centrado en el grupo que con-
ten la ejecución de la acción acorde con la decisión tomada y, lleve a una determinación decisoria. Sólo a partir de un con-
en fin, que resulte satisfactorio a las personas del grupo por- senso inicial será plausible un consenso final validado que
que permita el ejercicio de la libertad y de la elección. permita una decisión grupal que comprometa a todos. Y en-
Este ejercicio de la libertad y de la elección comporta que la tre consenso inicial y consenso final se tratará de posibilitar
decisión supone una opción y, como tal, debe referirse a di- un procedimiento adecuado para asegurar la eficacia en la
versas y plurales posibilidades que permitan optar. Este pro- respuesta del grupo a una determinada situación conflictiva.
ceso de optar no se remite exclusivamente a los elementos ra- Basándonos en esta definición exacta del problema, acorda-
cionales y organizativos sino que contiene también aspectos da por todas las personas del grupo, es conveniente, como se-
afectivos y emocionales, incluso inconscientes que afectan a la gundo paso, incitar a la búsqueda de soluciones. Una de las
misma decisión. A veces quizá pueda sorprendernos como la mejores maneras para empezar a encontrar una solución ade-
especificidad de alguna interacción entre dos personas de un cuada consiste en motivar a las personas del grupo a que, sin
grupo, una simple observación o verbalización de alguien, tapujos ni análisis previos, propongan, a modo de braimstoor-
una postura corporal, una expresión de admiración o de en- ming o lluvia de ideas, todas las soluciones posibles que se les
vidia y desprecio, influyen de manera extraordinaria en la de- vayan ocurriendo en un ejercicio de creatividad y anticipación.
cisión. Quizá esto explique parte de las dificultades en que se En este momento del proceso el facilitador hará lo posible
encuentran los grupos para tomar decisiones eficazmente. para recoger todas las ideas y propuestas de solución evitan-
Para optar eficazmente, sin embargo, es conveniente que do que él mismo y los demás miembros del grupo adopten
el grupo dedique espacios y tiempos a definir correctamente una actitud de juicio evaluativo con alguna solución. Lo im-
el problema o el conflicto sobre el que tiene que decidir. La portante ahora es participar en un ejercicio sumativo de ideas
función del facilitador, en este ámbito, es la de intentar que que permita la creatividad y la originalidad en lo aportado
afloren a la superficie la pluralidad de las visiones y percep- para lo que resulta necesaria la evitación de cualquier con-
ducta tendente a la anulación o represión de una posible idea
ciones de todos los miembros del grupo, garantizando, me-
o propuesta.
diante la implicación, que las distintas experiencias y los
En mi experiencia, procuro aplicar, en esta situación pro-
76. ANTONS, K. Práctica de la dinámica de grupos: Barcelona: Herder, 1978, cedimental, alguna de las múltiples técnicas de trabajo gru-
171 pal existentes para favorecer la implicación de todas las per-
sonas y la aportación de ideas plurales. Desde el torbellino de obtener nuevos elementos para futuras intervenciones.
ideas, la técnica del grupo nominal, el giro... se puede fomentar Asegurarse de generar espacios y tiempos para la evaluación
la participación de las personas y la creatividad de sus apor- y disponer de instrumentos significativos para la misma es
taciones. Pero con técnicas o sin ellas, lo significativo es po- una responsabilidad del facilitador que, lamentablemente, en
der disponer de un compendio de propuestas que nos per- demasiadas ocasiones se pasa por alto y, por consiguiente, se
mitan un espacio de múltiples posibilidades para acordar lo pierde un poderoso recurso para el aprendizaje del grupo des-
que nos parece adecuado sin partir de prejuicios previos o de de el mismo grupo desaprovechando su enorme potencial.
falsas soluciones rutinarias que surgen cuando no ha habido Es verdad que muchos grupos adolecen de posibilidades
ningún esfuerzo para probar de imaginarnos cosas diferentes reales de adoptar decisiones colectivas o manifiestan tenden-
aunque, a simple vista, puedan parecer absurdas. cias de paralización y estancamiento en alguna situación de
Desde la complejidad de disponer de múltiples alternati- discusión indefinida, o incluso caen en círculos viciosos de
vas podemos recuperar el espíritu de análisis crítico que nos debate permanente y, en muchos casos, las soluciones que
conlleve a realizar, juntos, una síntesis y una selección de las adoptan son poco creativas porque se basan en acciones este-
soluciones sugeridas. Se trata, en fin, de evaluar cada solu- rio tipadas y convencionales.
ción en función de criterios aceptados y vislumbrar las con- El tipo de funcionamiento de un grupo y la manera de fa-
secuencias posibles que se derivarían de cada una de ellas. cilitarlo son, para mí, determinantes, para conseguir una ma-
En realidad nos situamos en un espacio de futuro posible a yor eficacia. En cualquier caso, cabe reiterarlo, el procedi-
través del que visualizamos imaginariamente la nueva situa- miento descrito es un instrumento que puede ser adecuado,
ción que emergería con la solución propuesta. De nuevo se pero no es un fin en sí mismo. Lo importante, una vez más,
trata de anticipar el futuro posible y captar si se acerca al fu- consiste en el estar presente del facilitador, en el transmitir vi-
turo deseado. Anticipando lo posible es cuando podemos in- vencialmente la posibilidad de una nueva forma de relación
tervenir en el camino y adoptar la decisión más adecuada. entre las personas de un grupo desde unas actitudes y unas
Y a partir de este análisis anticipatorio el grupo puede destrezas que son altamente facilitadoras de la comunicación
proceder a adoptar una decisión por consenso asegurándo- y también de la eficacia.
nos que todas las personas del grupo participen y se com-
prometan en la misma, porque sólo desde el compromiso co-
lectivo existirán posibilidades y garantías de que esta deci-
sión sea ejecutada intencionadamente.
Faltará, en este procedimiento, planificar correctamente la
acción decidida, distribuir responsabilidades y asegurarse de
la disposición de los recursos necesarios para garantizar una
acción eficaz.
Por último, me parece imprescindible proceder a una eva-
luación de la intervención realizada que nos podrá ayudar a
9
ENTRE LA ESPERA
Y EL CONTACTO
"El albedrío surge y engendra vida en el contacto real que, sin em-
bargo, entraña un grave riesgo para la identidad y la separatividad.
En esta contradicción se cifran la aventura y el arte del contacto".
(Erving y Miriam Polster)
La condición olvidada
rr i
facilitador es un recurso para el grupo y no me parece ético dos sus sentimientos recíprocos en tiempos distintos a la se-
que utilice al grupo para sus propias necesidades afectivas. sión grupal. Se trata, en realidad, de participar en dos grupos
Sin duda facilitar y comunicarse no es un equilibrio fácil y por simultáneos de comunicación, en el que facilitan y en el for-
eso parece más conveniente compartir esta tarea para poder mado por ellos mismos.
disponer de espacios de comunicación entre los facilitadores En realidad me doy cuenta que lo que acabo de manifes-
que satisfagan la necesidad de intercomunicación y generen tar es más un temor que una experiencia. He tenido la enor-
también energía para disponerse hacia el grupo. me fortuna de haber compartido la animación de grupos con
Aun cuando a mí mismo me produce mayor satisfacción extraordinarios facilitadores con quienes he aprendido a ser
un sistema de cofacilitación, tengo también la convicción de más vulnerable y a comunicarme con mayor profundidad. La
que es mucho mejor para el grupo. Es más, creo que un equi- mayoría de mis vivencias en la cofacilitación han significado
po de cofacilitadores formado por un hombre y una mujer para mí un gran caudal de crecimiento personal y un poten-
goza de extraordinarias ventajas. Muchos participantes se be- te impulso a establecer relaciones significativas con mis com-
nefician al observar el trabajo conjunto de un facilitador y pañeros en la animación de grupos en las que vamos supe-
una facilitadora mostrándose comprensión y respeto en con- rando límites personales para ir profundizando en nuestras
diciones de igualdad más allá de las percepciones ordinarias interacciones a todos los niveles. Con algunos de ellos se ha
de sexualización que, con frecuencia, se dan por sentados. formado una amistad potente basada en el amor mutuo que
Los roles de género, asimismo, permiten abarcar una mayor percibo como savia de crecimiento personal y vital.
presencia ante los participantes. A veces un participante se En los últimos años he tenido la sensación de haber apren-
siente más cómodo con la presencia de uno u otro sexo para dido algunos factores que han influido en mi manera de faci-
permitirse su autoexploración. litar grupos. Algunos aprendizajes parecen tener una base
En cualquier caso, independientemente del género de los más científica mientras que otros son simples ideas que me-
facilitadores, lo más significativo para mí es la exigencia de recerían una mayor investigación. Unos y otros van configu-
una relación de gran confianza entre ambos. Si dos facilita- rando añadidos al sistema de facilitación propuesto en las pá-
dores con niveles muy distintos de experiencia animan con- ginas precedentes y presiento que pueden perfeccionarlo.
juntamente un grupo, han de sentirse cómodos entre sí y en Un primer aprendizaje que me resulta cuando menos cu-
sus roles de cofacilitadores o de profesor y alumno. Si se pro- rioso tiene que ver con el factor tiempo. Me siento cada vez
dujera escisión, aunque oculta y no explícita, el grupo perci- más preocupado por la influencia del tiempo en la facilitación
biría las tensiones existentes en la relación de los cofacilita- grupal. He llegado a experimentar que el acotamiento de las
dores generando un clima inapropiado para el crecimiento sesiones de grupo alrededor de una hora y media de duración
grupal. Cuando esto sucede, me parece que es conveniente, constituye el segmento de mayor posibilidad de eficacia del
en algún momento, explicitar esta propia situación en el gru- grupo. Más allá de este segmento temporal de duración tengo
po de manera transparente y auténtica. Aunque es mucho la impresión que el grupo pierde eficacia comunicativa y pro-
más significativo que los cofacilitadores mantengan entre sí yectiva. La duración de hora y media de sesión no necesaria-
un fuerte caudal comunicativo que les permita verbalizar to- mente es matemática, oscila entre hora y cuarto y hora cua-
nr~i r¡¡ i
renta y cinco minutos, y caben excepciones. No obstante he la reunión del grupo y el entorno, así como la disposición de
llegado a optar por sugerir un descanso en las sesiones de los participantes, los recursos o la decoración tienen una re-
grupo a partir de este límite temporal. Parece como si se pro- lativa incidencia en la tarea grupal. He ido aprendiendo a
dujera un cansancio por el desgaste de energía si se supera es- adecuar los espacios según la tarea que el grupo se disponga
te límite, y la comunicación en el grupo se superficializa o dis- a realizar. Si se trata, por ejemplo, de ocuparnos de nuestro
minuye la creatividad si se trata de proyectar alguna acción. espacio de la sensibilidad, de comunicarnos afectivamente,
Asimismo, otorgar un receso al cabo de este tiempo ha signi- me parece conveniente ir eliminando todo lo que suponga
ficado, en la mayoría de los grupos, un impulso hacia adelan- descentramiento: mesas, sillas, cuadernos y bolígrafos... Si se
te en el proceso grupal, una especie de salto que se vislumbra trata de una tarea de planificación cabe contar con los mate-
en la próxima sesión que promueve una aceleración del pro- riales adecuados, soportes para escribir y anotar, distribución
ceso de despliegue de la tendencia actualizante. de los participantes cómodamente alrededor de una mesa...
También he aprendido a acotar los contenidos en un tiem- Se trata, en fin, de que el lugar en que se ubica el grupo se
po para cada aspecto del espacio grupal. Un tiempo para la ajuste a la intención de la tarea para que las condiciones ex-
comunicación afectiva, tiempo para la celebración lúdica y ternas ayuden también al proceso eficaz del grupo.
tiempo para la planificación y la evaluación en el espacio de No es que las condiciones ambientales del tiempo y el es-
la racionalidad. Vivir estos aspectos en tiempos determinados pacio sean decisivas en la senda de un grupo pero se me an-
y separados parece ayudar a la intensidad y al centramiento. toja que tienen su importancia en la facilitación del clima ne-
Así, cada cosa ocupa todo el tiempo disponible y ese ocupar cesario para que el despliegue del potencial de un grupo se
todo el tiempo promueve una mayor disposición de las per- realice de manera creativa y eficaz.
sonas a conectar entre ellas con la misma parte del sí mismo. Otro de los aprendizajes tiene que ver con el número de
No percibo con contradicción la disposición temporal del personas que forman el grupo. Hace tiempo ya deseché el lí-
grupo para cada tarea con una concepción filosófica del gru- mite establecido de un máximo de doce personas (entre ocho
po y de la persona como unidad organísmica que actúa ho- y doce) que se aconsejaba para los grupos de encuentro. Tengo
lísticamente. Es probable que un funcionamiento óptimo des- la impresión que si un grupo es demasiado reducido no se pro-
de un estado de cohesión grupal haría innecesaria una distri- duce el cúmulo de interacciones interpersonales que ayuda a
bución de los tiempos, sin embargo la responsabilidad de un aumentar el caudal energético de los acontecimientos grupa-
facilitador consiste en establecer condiciones para posibilitar Íes. En un grupo reducido más que un interactuar recíproco de
este óptimo funcionamiento que no deviene por sí mismo si las personas que conforman el grupo es como si se produjeran
no existen estas condiciones adecuadas, por lo que nuestra interacciones uno a uno con el facilitador en un marco grupal.
sugerencia es que la distribución temporal es uno de los ca- Desconozco cual pueda ser el número ideal de miembros para
minos que promueven una mayor eficacia comunicativa y un grupo de aprendizaje, pero me siento mucho más cómodo
proyectiva en los grupos. facilitando grupos de entre dieciocho y veinticinco personas
También la configuración del espacio físico parece tener su en los que se suele generar un flujo interaccional que permite
valor para el buen funcionamiento de los grupos. El lugar de un mayor despliegue de la tendencia al crecimiento.
Algunas experiencias con grandes grupos, de más de cien ra suelen verbalizar de manera racional y analítica y no exte-
participantes, en los que hemos participado e incluso hemos riorizan realmente sus sentimientos que se ven disfrazados
facilitado84 nos muestran como es posible la creación de un de grandes discursos realizados desde la mente pensante. Si
clima de comunicación, crecimiento y aprendizaje desde el la intervención del facilitador solo adopta un matiz cortante
estar presente actitudinal independientemente del número puede generar el suicidio de la participación de esta persona
de personas. Sin duda sería muy interesante continuar con el en el grupo. Así suelo realizar alguna intervención del estilo:
esfuerzo investigador sobre los efectos que las condiciones "desearía saber algo más de ti mismo" o " me gustaría ser ca-
necesarias y suficientes producen en grupos muy numerosos. paz de comprender lo que sientes realmente tras este aluvión
He notado que en la mayoría de los grupos se producen dos de palabras". En realidad intento buscar una unidad de in-
comportamientos recurrentes que consiguen ocupar mi aten- tervención que transmita deseo de escucha y desacuerdo ma-
ción de manera más directa. Una primera conducta tiene que nifestado irónicamente con una conducta monopolizadora.
ver con la actitud de algún participante que pretende mono-
Otro de los comportamientos recurrentes es el de la per-
polizar la mayor parte del tiempo disponible, como si deseara
sona que permanece en silencio todo el tiempo del grupo.
hablar sin cesar sobre todos los aspectos del acontecer grupal
Estas personas, quizá por miedo a autorrevelarse o por temor
y acaparara todo el tiempo y toda la atención. Inicialmente los
a no dar la talla y a sentirse poco valoradas, pasan largas ho-
demás miembros no se sienten inclinados a silenciar a esta per-
ras calladas y pareciera como si estuvieran ausentes del gru-
sona porque la conducta se percibe como una distensión en los
po. Es verdad que este comportamiento no se percibe como
momentos de silencio y otorga una cierta seguridad. Sin em-
tan perturbador como el descrito con anterioridad, sin em-
bargo pronto se va generando un estado de frustración e in-
bargo constituye también un desafío. Opto, después de un
cluso enfado. Este comportamiento se convierte entonces en
tiempo, por realizar demandas de contacto a esas personas,
un conflicto para el grupo. He aprendido a esperar a que el
por transmitir interés por su participación e implicación o
grupo resuelva su propio conflicto y se confronte con esta ac-
por reflejar los sentimientos que transmiten a través de su ex-
titud monopolizadora. En ocasiones, no obstante, si no experi-
presión corporal. Casi siempre funciona. Al sentirse acepta-
mento reacción grupal opto por una intervención que fomen-
te un mayor silencio por parte de esta persona y una mayor das en su manera de estar estas personas irrumpen en comu-
significación personal de las comunicaciones que ofrece. nicaciones transparentes y se hacen más vulnerables.
Es este tipo de intervención facilitadora la que me prepcu- He llegado a pensar que la facilitación de grupos, más que
pa. Normalmente las personas con esta conducta acaparado- basarse en un gran número de técnicas y recursos, es un arte.
De la manera de estar del facilitador, de su capacidad intuiti-
84 Una de las experiencias más novedosas tuvo lugar en mayo de 1999 a va en la intervención, de su sustrato personal y filosófico sur-
bordo de un gran barco que franqueaba las costas de Mallorca en la que gen intervenciones que suscitan un impulso significativo pa-
participaron mas de trescientas personas durante doce horas Una pe-
queña crónica de esta experiencia está contenida en el libro del autor ra el crecimiento de las personas y del grupo. Quizá sólo la
cuya referencia es BARCELÓ, B Centrarse en les persones Un model experiencia y la transformación personal sean las más aliadas
transformador d'intervenció socioeducativa Barcelona. Plenilum 2000 situaciones para formar buenos facilitadores.
r^ i n 1
Estar presente de una manera más empática y más vulne- noto que se va desplazando desde el corazón, desciende por
rable y transparente en mis propias relaciones personales ha el pecho y se concentra en mi vientre como un punto lumi-
sido mi mejor entrenamiento para la facilitación de grupos. noso que cosquillea, desde ahí activa mi mente pensante que
He aprendido mucho de mis propias relaciones personales, y al unísono es sintiente y me dispone a una intervención.
me siento en crecimiento cuando logro establecer y mantener Cuando esto me sucede me siento muy conectado a las per-
relaciones auténticas y transparentes. He tenido la suerte de sonas del grupo y, al mismo tiempo, me siento en contacto
poder escuchar, de ser auténtico con varias personas en mis con algo muy profundo de mí mismo. Sé que puede sonar al-
relaciones y de sentirme apreciado por eso. He visto que go raro pero esta experiencia me conmueve y me fascina.
cuando no exijo nada a cambio y no actúo en la relación en Cuando me siento así, como conectado, soy capaz de
función de mis propias expectativas ni en función de las ex- adoptar riesgos. Creo que el haberme arriesgado en mis rela-
pectativas del otro, la relación se hace mucho más profunda ciones interpersonales y en la facilitación de grupos me ha
y satisfactoria. No siempre soy capaz de poner entre parénte- ayudado a estar más abierto y me ha aportado grandes
sis mis expectativas, pero cuando lo logro me siento más vul- aprendizajes significativos. El riesgo no es una garantía de
nerable y me hago más presente auténticamente, entonces éxito en la facilitación, pero constituye una posibilidad mara-
me siento en crecimiento y percibo que el otro también se villosa para el crecimiento y la ayuda.
siente crecer. Vivo con mucha intensidad este tipo de relacio- Soy consciente también de algunos fallos personales que
nes y me siento extraordinariamente satisfecho y gratificado. precisan más atención. Todavía siento alguna vez una espe-
Cada vez en mayor medida confío más en mi propia in- cie de necesidad de sentirme valorado por mi tarea facilita-
tuición que en el modelo de facilitación expuesto. Quizá pue- dora. Este sentimiento puede condicionar inicialmente mi
da sentir esto porque ya he llegado a interiorizar un sistema manera de estar a causa de mis temores a no defraudar las ex-
de facilitación grupal centrado en la persona y he llegado a pectativas de los demás. Hasta que no logro internamente
aprender una gran variedad de recursos técnicos y actitudi- aparcar estos temores y relativizar mis ganas de valoración
nales que me permiten estar presente sin ansiedad por lo que externa no consigo disponerme completamente a ser yo mis-
hay que hacer. Es como si sintiera que tengo una mochila de mo y a facilitar el grupo con u n estar actitudinal.
recursos que puedo ir utilizando en función de la situación A pesar de mi necesidad de valoración, cuando me siento
de un grupo. No obstante, cada vez menos soy consciente de valorado o alguien expresa sentimientos muy positivos res-
los criterios adecuados para adoptar uno u otro recurso, por pecto a mí me siento abrumado, casi sin habla. Entonces no sé
lo que me dejo llevar por mi propia intuición facilitadora que si realmente produzco estos sentimientos en los demás de for-
surge cuando estoy en contacto con las personas del grupo de ma real o si la comunicación que recibo es fruto de una sensa-
manera muy profunda. No siempre es así, desde luego, pero ción auténtica del otro. Vivo esta situación muy contradicto-
cuando consigo trascender mi propio yo y diluirme en pre- riamente, me gustaría sentirme halagado y me molesta que
sencia vivencial se produce algo mágico que facilita el creci- me halaguen mucho. Parece u n ir y venir casi sin sentido.
miento y el despliegue. Siento que este tipo de intuición tie- Me siento mucho mejor cuando recibo aprecio que valora-
ne algo de sensación corporal, la localizo casi en el vientre, ción. Cuando me siento realmente apreciado y aceptado por
lo que soy y no por lo que hago me embarga un inmenso sen- que me falta mucho por aprender. Este impulso por el apren-
timiento de gratitud. Al mismo tiempo me percibo muy pe- dizaje no se satisface con más estudio e investigación, aunque
queño ante la grandeza del otro y me siento crecer interior- he de reconocer que me apasiona leer y estudiar para descu-
mente, como si me expandiera. brir nuevos conceptos y saber de nuevas investigaciones; si-
También me gusta más mostrar afecto y aprecio que valo- no que consiste más bien en un interés por participar de nue-
ración. A veces siento que las personas demandan más valo- vas experiencias de grupo y profundizar en las relaciones in-
ración y no soy capaz de transmitirla. Me parece que si deseo terpersonales. Me interesa participar en grupos y cursos co-
que la valoración sea algo interno, que cada persona debería mo participante y facilitador en ámbitos distintos al de mi
valorarse a sí misma; me produce un cierto límite basar esta propio lugar de residencia para conocer otras gentes y otros
autovaloración en la que pueda aportar una fuente externa y; estilos, o para aprender de otras maneras de ser y de estar, co-
por tanto, no deseo convertirme en esta fuente externa valo- nectar con otras culturas y personas y sentir que, al fin y al
rativa. Sin embargo percibo que muchas personas se sienten cabo, hay algo en el núcleo personal de cada uno que nos ha-
mejor cuando se perciben valoradas por su acción, sus ideas ce partícipes de una misma esencia que nos conecta y nos
y sus capacidades. transforma. Esta sensación me ayuda a no sentirme centro de
Otro de los fallos que no consigo superar tiene que ver con nada sino parte de un todo que acontece. Me gusta entonces
mi timidez ante nuevos grupos y nuevas personas desconoci- contemplar activamente este acontecer que al mismo tiempo
das. A pesar de la gran cantidad de personas que habrán pasa- me acontece, me transforma.
do por algún curso o algún grupo de los que he sido facilitador, Es posible que alguna experiencia tenga que ver con algo
siempre me percibo tímido al iniciar una nueva experiencia o transpersonal, como si la persona formara sólo parte de un
una nueva relación. Me ayuda enormemente compartir la tarea engranaje mucho más complejo que abarca, si es que es abar-
de facilitar un grupo con otra persona que me ayuda mucho en cable, toda la expansión del cosmos a través del cual todo es-
los momentos de inicio y en algunos instantes, entre pasillos, en tá intrínsecamente conectado. Al fin y al cabo, aquello que
que llego a sentir pánico si tengo que hacer alguna demanda me produce una mayor satisfacción personal en la facilita-
aunque esté relacionada con la intendencia o con la infraes- ción de grupos no es constatar ningún resultado exitoso sino
tructura del lugar. Esto me ocurre incluso en la vida ordinaria. sentirme inmerso en un proceso intencional inacabado que
Recuerdo mis miedos cuando alguien llegaba a mi casa aunque incide significativamente en mi propio estilo de vida, hace
fuera a desatascar una tubería o a cambiar una bombona de bu- que me sienta en crecimiento y me genera importantes grati-
tano. Siempre intentaba que fuera recibido por mi esposa por- ficaciones en mis relaciones interpersonales. Desconozco lo
que yo no sabía moverme con comodidad ante estas situacio- que depara el futuro al mundo del Enfoque Centrado en la
nes. Cuando recuerdo estas situaciones me siento ridículo y no- Persona, pero estoy extraordinariamente satisfecho de haber
to que he cambiado mucho. Sin embargo me sigo sintiendo tí- sido capaz de empezar por este camino.
mido al iniciar cada nueva experiencia grupal.
Una de las sensaciones más presentes en los últimos años
consiste en que me percibo con capacidad facilitadora pero
11
DE LA EXPERIENCIA AL APRENDIZAJE.
VIAJANDO HACIA EL "ENFOQUE
CENTRADO EN LA PERSONA".
85. Jordi Juan Sastre es Maestro de enseñanza primaria, forma parte del de-
partamento de dinámica de grupos de la "Escola de l'Esplai" de
Mallorca y ha sido colaborador y cofacilitador de grupos del autor. Fue
participante en el X Encuentro Lationamericano del Enfoque Centrado
en la Persona celebrado en octubre de 2000 en Córdoba (Argentina).
He de decir que mi experiencia empieza como participan- galaron el libro "Grupos de Encuentro" de Rogers y me propu-
te en distintos grupos. Han sido muchas las vivencias como sieron facilitar grupos. Me costó decidirme, pero finalmente
miembro de algún grupo, en algunas de ellas sufrí mucho y mi respuesta fue afirmativa y me embarqué en la aventura.
otras me han producido notables satisfacciones. Mirándolo Mi primera experiencia fue con un grupo reducido, de
desde mi actual situación, todas ellas no han constituido más nueve o diez participantes. La verdad es que en esta primera
que sufrimientos y satisfacciones de mi crecimiento interior, experiencia me dediqué, casi completamente, a escuchar y a
y han generado condiciones que me han ayudado a madurar comentar con los otros facilitadores impresiones sobre los
y a estar más preparado para vivir mi vida de una manera participantes, lo que percibía y como hubiera facilitado yo al-
más plena. gunos de los momentos del grupo. He de decir que me sien-
Estas experiencias me dieron la oportunidad de valorar to orgulloso de haber tenido sensaciones que luego me vali-
ciertas actitudes para desarrollar con las personas cercanas y daron el grupo y los otros facilitadores, al mismo tiempo
queridas, vislumbré que era importante escuchar a la gente, también me sentí orgulloso de haber tenido la intuición de,
que a las personas les gustaba ser escuchadas, se sentían más en algunos momentos, facilitar el grupo de la misma manera
cercanas a sí mismas y a sus dudas, miedos, a su pequeño nú- que lo hicieron mis compañeros. En esta primera experiencia
cleo interno. Con la escucha se ayuda a las personas a escu- también aprendí más teoría sobre el person-centered approach,
charse a sí mismas y a percatarse de su interior. de una manera más profunda; ya que podía validar las sen-
Otra de las cosas que aprendí es que la sinceridad hacía saciones experimentadas durante la facilitación con lo que di-
que la gente me valorase más. Los otros se sentían reconoci- cen los teóricos, es decir; un contraste experiencial entre pra-
dos o descubiertos, es decir; alguien era capaz de ser total- xis y teoría. Poco a poco vencí algunos de mis temores perso-
mente transparente con ellos, mostrándoles mis propios te- nales pero aún quedaba mucho camino por andar, sólo había
mores, o viéndose traspasados tras la máscara que se habían empezado un largo trayecto.
autoimpuesto. En el segundo grupo que facilité mi experiencia ya me in-
Finalmente de la última cosa que me percaté, y la que me dujo a arriesgarme más particularmente en la manera de fa-
costó más, fue el depositar la confianza en alguien, aunque cilitar pero aún sin transgredir muchos de mis miedos.
parezca que puede fallar. Sin duda, nunca lo conseguí ya que Además tuve que intervenir más en la explicación teórica de
mis prejuicios siempre se me anteponían. Todo esto sólo re- la vida de un grupo y del sistema de facilitación. Todo esto,
presentaba unas percepciones, un ver algo tras la niebla; aún creo que me ayudó muchísimo y me proporcionó muchos
no sabía que todo era más complicado. aprendizajes significativos al vislumbrar de una manera más
Poco a poco fui descubriendo a Cari Rogers, me hablaban clara el proceso grupal y su facilitación. Me acercaba al mé-
de él y de sus libros, alguno llegó a mis manos, pero no sería todo perfeccionando mi percepción teórica pero aún me se-
hasta más tarde y después de un grupo de encuentro -que de guía faltando la valentía de dejarme llevar, de dejar fluir mi
alguna forma significó un punto de inflexión en mi vida- , yo a la hora de facilitar el grupo.
cuando entraría en contacto directo con el mundo del Enfoque Fue en mi tercer grupo donde tuve que decidirme, pero es-
Centrado en la Persona. Fue en un momento en el que me re- to ocurrió al acabar todo el proceso grupal. Durante el curso
con este grupo me sentí más confiado en los espacios en los mente explicadas-, así en esta primera parte se trataba de
que debía intervenir con la explicación de la teoría, en la sis- partir de la experiencia de participar en un proceso grupal
tematización y análisis de la experiencia de grupo. Sin embar- como condición para el aprendizaje significativo para la faci-
go la facilitación in situ se me hizo difícil y poco efectiva, casi litación; y hacer de esto no sólo una "terapia de grupo" sino
no participé como facilitador, más bien estuve presente en si- una posibilidad para dotar de eficacia a un grupo cuando sus
lencio; recuerdo perfectamente que la sensación después de esfuerzos se destinen a su parte organizativa.
haber terminado era de decepción y rabia al no haber sido ca- De esta manera impulsábamos una experiencia de labora-
paz de facilitar, de no hacerlo según mis propias expectativas. torio de relaciones interpersonales para centrar el clima y la
Fue una experiencia muy dura para mí y me planteé seria- disposición del grupo a la comunicación profunda y sincera,
mente dejar la facilitación de grupos y dejar que fueran otros pasando por todas las fases que se dan en un grupo para,
más competentes los que ocupasen mi lugar. Al comunicar es- posteriormente, analizar lo que había acontecido durante es-
tas sensaciones a Tomeu, que era mi mentor y compañero de ta experiencia. Este formato conlleva a que los facilitadores
facilitación, me dijo que yo era capaz de facilitar bien y que tengan que desprender una gran cantidad de energía duran-
creía que su presencia me dificultaba mi trabajo en el grupo. te el proceso grupal, ya que la intención es que en tres días se
Al conversar sobre esto, me percaté de que así era, que no me dé el trayecto grupal completo, aunque cabe mencionar que
atrevía al temer equivocarme y poderlo decepcionar. Después los facilitadores en ningún momento forzamos o "violamos"
de esto él me mostró confianza en mis capacidades y me co- al grupo para fomentar la comunicación interpersonal.
municó que seguía con su intención de dejar su sitio en este Comenzamos el laboratorio con una sensibilización del
staff de facilitadores y que me espabilase. Así fue como me grupo que permite hacer surgir interacciones entre los parti-
quedé con la responsabilidad de facilitar un próximo grupo cipantes, mediante todo tipo de ejercicios. De esta manera
sin mi amigo y mentor, en el campo del Enfoque Centrado en nuestro proceder nos posibilita que cuando proponemos una
la Persona, pero con toda su confianza y deseos de que dejara dinámica de comunicación de los sentimientos, ya se ha pro-
a un lado mis miedos para focalizar mis capacidades. ducido una gran cantidad de energía y un cúmulo de per-
Sin ninguna duda, el sentirme responsable de un grupo y cepciones que, en gran parte, desembocan en interacciones
del staff de facilitadores constituyó un momento en el cual entre los participantes.
realmente exploté mis capacidades para enfrentarme a la fa- Resulta curioso que, a pesar de conocer la teoría me sentía
cilitación real de un grupo. Era un grupo formado por die- muy nervioso al empezar todo el proceso, confiaba en el po-
ciocho personas que se habían apuntado al curso donde se les tencial del grupo, un grupo que puede desplegar su tenden-
formaría como animadores de grupos y gestores de entida- cia actualizante, un grupo que es capaz de autogenerar ayu-
des asociativas en el ámbito de la educación en el tiempo li- da y estabilidad, un grupo que puede ser terapeuta con las
bre. El curso se iniciaba con una parte intensiva donde se in- aflicciones y temores del resto de los participantes. Confiaba
tentaba vivenciar la comunicación y el clima que se crea en porque confío en el grupo de una manera interiorizada, pero
un grupo cuando se trabaja la parte emocional -íbamos a se- no confiaba en mí mismo. Si no facilitaba correctamente, si
guir el funcionamiento de las otras experiencias anterior- mis intervenciones herían la tendencia actualizante del gru-
po, no ayudaría a generar las condiciones para el despliegue en mí mismo, en la que puedo percibir mi estado interior y
del potencial y pondría en mal papel a la gente que me había ser consciente de como mis sentimientos afloran como una
expresado su confianza en mis capacidades y, al mismo tiem- gran cascada para hacerse patentes, pero sé que al principio
po, me vería obligado a renunciar a la facilitación de grupos no puedo comunicarlos de una manera auténtica y debo "po-
de encuentro. No podía fallar ni al grupo ni a mi staff de fa- nerlos entre paréntesis" hasta que durante el proceso del gru-
cilitadores. Sorprendentemente sólo fue empezar; al hacerlo po los participantes ya no me perciban exclusivamente facili-
me cargué de energía. Puedo decir que el proceso funcionó tador, sino que me cedan un espacio como participante. En
de una manera muy digna y que estoy orgulloso del funcio- ese momento se puede aliviar poco a poco esta soledad.
namiento de esta parte del curso. Como facilitador me siento tremendamente responsable
Hay varias cosas que considero básicas e influyeron en el del grupo, en este sentido mi intención es la de no centrar la
buen funcionamiento de esta dinámica de grupo; una fue la atención del grupo en mí, sino en el propio grupo. Intento así,
magnífica comunicación entre el staff de facilitadores. No po- junto a mis compañeros del staff, facilitar el grupo de una
demos facilitar la comunicación de un grupo si los facilitado- manera vincular, buscando ver y reflejar bajo la superficie de
res no somos coherentes con nuestro modelo de facilitación y cada participante y ayudarle a ir hasta su interior, a esto lo
no comunicamos auténticamente nuestros sentimientos. llamo estar presente. Al estar presente, el grupo acontece con
Aunque esto parezca una obviedad, lo considero de suma toda su energía y potencial convirtiéndose en un organismo
importancia, por ello nos dedicábamos cada día a destinar un capaz de realizar un gran proceso de comunicación auténtica
espacio entre nosotros donde nos sincerábamos auténtica- y sincera y, además, convirtiéndose en un grupo eficaz y efi-
mente, mencionando las impresiones sobre el trabajo llevado ciente a la hora de atender a su parte organizativa.
a cabo durante el día, nuestros temores, nuestros errores, Al estar ante el grupo nos ceñíamos al modelo interpreta-
nuestros aciertos, cómo nos sentíamos entre nosotros, qué tivo del proceso para saber como focalizar las tres actitudes
nos molestaba o hería, qué nos alegraba o daba vigor en de Rogers, esto era muy importante para no llevar a cabo una
nuestro animar juntos un grupo... Todo esto nos hacía cargar "desfacilitación". Esto primero nos encasilló un poco y no
mucha energía para seguir con la tarea de facilitación al día nos sentíamos cómodos hasta que decidimos seguir utilizan-
siguiente y además mejoraba nuestra compenetración a la do el modelo pero de una manera más elástica. De esta ma-
hora de nuestra presencia en el grupo. Quizá por haber bus- nera descubrimos que el grupo va avanzando en su proceso
cado estos espacios fue posible que, sin mirarnos y sin con- pero no al unísono, una parte del grupo ya ha llegado una de
sultar nada en voz alta durante la sesión de grupo, supiéra- las fases mientras el resto está en camino. Gracias a certificar
mos cuando una intervención era mejor que la hiciera uno o esto nos dimos permiso para confiar en dos cosas: la primera
el otro, cuando debíamos dar por acabada la reunión, quién era nuestra experiencia y la otra nuestra intuición. Fue un pa-
necesitaba en ese momento una mano en la espalda o nuestra so muy acertado ya que unificamos dos elementos: nuestra
presencia junto a él o ella. razón y nuestro corazón. Al facilitar de una manera vincular
Casi siempre a la hora de facilitar un grupo me he sentido y al estar abiertos a la experiencia nuestra i n t u i c i ó n ^ é ^ p i ^ v
sólo. Es una soledad muy intensa que me deja muy centrado riencia funcionaron juntas de una manera única. / ^ B f ^ n T O
mos que el grupo estaba en una fase determinada del proce- alizando. Si, en cambio, te marcas objetivos, obligas, fuerzas
so pero también percibíamos los cambios que iban aconte- al grupo para que vaya por donde quieres que vaya, de esta
ciendo en los participantes durante una sesión. Nos pudimos manera no se da un proceso natural sino que alteras o false-
dar cuenta de que nuestra intervención era más eficaz y que as las sensaciones de los participantes, no dejas que su ener-
el grupo avanzaba. Esto nos llenaba de esperanza, coraje, gía y su interior se manifieste tal como es.
energía e ilusión a la hora de continuar con nuestro trabajo. También creo que un facilitador no sólo debe conocer la te-
De esta manera creo que, de una vez por todas, me sentí oría y las bases científicas del funcionamiento grupal; debe,
facilitador y que era capaz de desplegar mi potencial. Me especialmente, adentrarse en la práctica. Digo esto porque
siento muy orgulloso del resultado obtenido y del proceso creo que un facilitador, no sólo tiene que ser empático, au-
llevado a cabo. Sé, a ciencia cierta, que fallé y fallamos en al- téntico y mostrar consideración positiva en un grupo de en-
gunas fases del proceso; que podría y podríamos haberlo he- cuentro, sino que también debe impregnar su propia vida de
cho mejor, pero estoy en constante aprendizaje. Para ser un estilo centrado en la persona. Debe manifestar las actitudes
buen facilitador hay que estar permanentemente aprendien- con sus relaciones interpersonales, con su pareja, con su fa-
do de uno mismo y de los demás. El proceso es largo y creo milia, en su trabajo... De esta manera creo que demuestras
que inacabable. Pero he ahí una de las razones de que sea tan una coherencia, no sólo trabajas como facilitador, sino que
interesante, al trabajar con personas siempre te sorprenden, muestras tu persona ante las otras personas que te rodean,
siempre encuentras nuevos marcos diferentes, nuevas expe- eres persona con tus seres queridos.
riencias. Al mismo tiempo si estás abierto a la experiencia Sin duda se precisa de un gran coraje para hacer del
siempre te percatas de nuevas experiencias internas, de par- Enfoque Centrado en la Persona una manera de vivir porque
tes de las cuales nunca habías tenido constancia. Todo esto se nos hará más vulnerables ante los demás y la vulnerabilidad
debe a que las personas somos dinámicas y nuestra estructu- me produce casi siempre desasosiego, ya que al mostrarme
ra interna está sujeta a cambios constantes según nuestra ex- vulnerable es cuando me expongo más, pero también creo
periencia y desarrollo personal. que es el momento donde demuestro más fortaleza.
Además de lo comentado, como facilitador no puedo no Si también somos capaces de mostrarnos personas con las
confiar en mí mismo, no debo facilitar un grupo con proble- otras personas estamos impregnando a nuestro entorno de
mas propios que me interfieran en mi cometido, ni debo esta forma de vida que es el Enfoque Centrado en la Persona,
"obligar" al grupo a que se centre en mi persona para auto- por tanto estamos realizando la revolución silenciosa de las
satisfacer mi ego. Si actúo de esta manera no puedo ser faci- personas.
litador, sólo entorpeceré el proceso grupal y no dejaré que las Finalmente quiero decir que no soy una gran voz del mun-
personas se desarrollen plenamente. do del Enfoque Centrado en la Persona (ECP); mis aprendi-
Creo que tampoco hay que marcarse objetivos o expectati- zajes son de tipo significativo, no he leído, ni estudiado mu-
vas sobre el proceso grupal sino que hay que dejar fluir al cho los grandes autores del ECP, pero he aprendido de una
manera experiencial junto a mi amigo Tomeu, que me ha en-
grupo; solamente debemos guiar al grupo, ayudarlo cuando
señado muchísimo. Gracias a la oportunidad de facilitar gru-
más perdido se cree y hacerle vislumbrar el camino que va re-
pos he aprendido sobre el ECP y me siento un verdadero pri-
vilegiado. No siempre consigo mostrarme ante las personas
que me importan como un cristal transparente, a veces me
gana el mal humor, la frustración y la tristeza, pero creo que
cuando me dan una oportunidad soy capaz de mostrarme,
con toda mi vulnerabilidad, aunque en ocasiones me duela y
12
DEL DESCUBRIMIENTO SIGNIFICATIVO A
tenga mis temores. Todo esto se lo debo al ECP que me ha en-
señado a ser más humano y a centrarme en las personas. LA PROYECCIÓN SIGNIFICADA.
Espero continuar este camino junto al staff que ahora traba-
jamos, junto a Tomeu y junto a todos los que del ECP hacen UN COMPROMISO SENTIDO CON EL
un estilo de vida, para continuar con la revolución silenciosa. "ENFOQUE CENTRADO EN LA PERSONA".
Por Venan Juan Torrens 86
rs i
Con el tiempo, y al sentirme yo más seguro, empecé a re- amplía enormemente la implicación del equipo en las tareas,
alizar manifestaciones más auténticas. Incluso desde el silen- se sienten parte responsable del funcionamiento.
cio se generaba una energía vinculante que facilitaba más el Un ambiente de libertad de opinión, en el que todo el
crecimiento personal y grupal que muchas y elaboradas téc- equipo se pueda sentir suficientemente cómodo para hablar,
nicas y ejercicios. discutir, dar opiniones, se produce cuando los miembros se
Promover la participación en el seno grupal fue desde el sienten acogidos. Esto puede conseguirse cuando se han faci-
principio una de mis claras intenciones. Aborrezco bastante litado las condiciones para que se trabaje también el nivel
los muchos grupos en los que no se favorece e incluso se di- afectivo del grupo. Si se mejora la comunicación y los moni-
ficulta la participación. En reuniones, asambleas y claustros tores se empiezan a mostrar tal y como son, aunque al prin-
en los que solamente llevan la "voz cantante" unas pocas per- cipio sea difícil, acaban sintiéndose cada vez más cómodos y
sonas me siento muy incómodo al darme cuenta de que que- queridos en su desnudez.
da tanta gente que podría aportar tanto, pero que no se les da Cuando alguien se siente estimado y respetado por lo que
una oportunidad. Las repercusiones de estas situaciones sue- es y no únicamente por aquello que realiza, se ve impulsado en
len ser siempre las mismas: miembros que se sienten ignora- gran medida a ser más libre, más arriesgado. La creatividad y
dos y menospreciados, otros que acaban asumiendo que no la ilusión de nuestro equipo y la motivación ante riesgos o me-
tiene nada que ver con ellos, corrillos, ineficacia, caos, repeti- tas cada vez un poco más altas son los recuerdos que más me
ción de las mismas ideas, desorden, implicación escasa, fugas satisfacen de toda esta etapa, sin contar las grandes relaciones
de miembros hacia temas más lúdicos, poca innovación, unos personales que fui estableciendo. Resultó un grupo muy crea-
pocos que se apoderan exageradamente del poder decisorio, tivo, ya que nos dábamos permiso, en algunas ocasiones, a de-
jerarquías demasiado estables e inamovibles, etc. sear utopías, a imaginar ideas disparatadas haciéndose reali-
Tener esta intención clara desde el principio ayudó en dad y a confeccionar historias con mucha magia para adornar
gran medida al grupo. Al coordinar las reuniones quería co- las actividades. De esta libertad y de los pensamientos más hi-
nocer las diferentes opiniones de los miembros del grupo y larantes y lúdicos surgían las mejores ideas, que posteriormen-
su estado dentro de él. Especialmente los monitores que tení- te ya nos encargábamos de organizar más racionalmente.
an más problemas para comunicarse durante las reuniones, La evaluación positiva y sentida que tenía respecto al tra-
en ocasiones por baja autovaloración (por ser nuevos o por- bajo realizado y hacia el grupo (porque la verdad es que era
que no se habían sentido escuchados), empezaron a impli- un grupo muy competente) tuvo como consecuencia un gran
carse mucho más. sentimiento de entidad. Cuando nos sentimos valorados y
Esta acción del coordinador ha de surgir desde la actitud nos damos cuenta de que se está realizando una buena labor
sincera de escucha. No ha de parecer que queremos conocer nos identificamos con ese grupo o asociación, le reservamos
la opinión del equipo, hay que sentir interiormente que dese- un espacio en nuestro interior. Al percatarse, un individuo,
amos saber qué opinan, que creemos en ellos y que sus apor- que la tarea que individualmente efectúa y siente que su gru-
taciones son las que provocan que la maquinaria funcione, po va siendo eficaz, se suscita una repercusión motivadora
que las cosas vayan bien. La continua muestra de valoración muy positiva y los miembros del equipo se sienten orguiio-
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sos, implicados y acaban esforzándose al máximo. Hay que el que se generan espacios afectivos y en el que los miembros
tener en cuenta que a veces, incluso, podemos llegar a pade- se sienten a gusto trabajando, se crean, inevitablemente rela-
cer una egolatría de entidad. ciones más fuertes.
Debo reconocer que esta concepción tan clara y esta meto- Dentro del gran equipo nacen diferentes grupos de ami-
dología de favorecimiento de la participación también me gos que comparten otros espacios diferentes al formal. En es-
produjeron algunas dificultades. Tuve el temor, en diversas te nuevo contexto hay que tener en cuenta que aquello que
ocasiones de estar forzando demasiado al grupo. Deseaba afectará al grupo no sólo surgirá dentro del equipo. En las re-
tanto que la gente se implicase que creo que caí en la provo- laciones de pareja o de amistad tendrán lugar interacciones,
cación. No me sentí manipulador del grupo pero sí que en tanto positivas como negativas, que incidirán de algún modo
ocasiones incitaba a algunos miembros a que dijesen verbal- en la labor que se esté desarrollando. Es aconsejable, aunque
mente aquello que no se atrevían a comunicar pero que fácil- muchas veces sea duro, hacer explícitas aquellas relaciones,
mente se intuía. Les pedía que hiciesen explícito aquella co- fricciones, roces, estados de ánimo, animadversiones y atrac-
municación disfrazada o pormenorizada. Lamento haber in-
ciones que permanecen implícitas, pero que de algún modo
comodado o violentado a algunos compañeros cuando en-
afectan o afectarán al equipo, a su funcionalidad, a su moti-
contraba que su aportación, que su sentimiento real o su opi-
vación, a su eficacia o a su distribución.
nión eran importantes para el grupo y para mí.
Ésta es, como ya he comentado, una ardua tarea, a mí me
Otra dificultad que tuve fue mantener el equilibrio entre la
fue muy difícil; arriesgarme y ser auténtico en muchos instan-
participación y la eficacia. Al haber enfatizado en que las de-
tes me creaba el temor de perder algunas relaciones significa-
cisiones se tomasen por consenso después de la aportación
tivas. Creía que ciertas actuaciones del Ferran director ponían
de todo el equipo para cerciorarme de que realmente eran
sentidas, olvidé frecuentemente llevar un buen control tem- en peligro al Ferran pareja o al Ferran amigo. Quizá fue un
poral de las reuniones y sesiones. Mantener este equilibrio re- aprendizaje bastante tardío pero llegué a comprender que co-
sultó ser una ardua tarea para mí, sobre la que tuve que es- mo director debía permitirme ser director y a la vez poder
forzarme bastante, ya que en muchas ocasiones el tiempo co- mostrarme vulnerable, mostrar mis temores de pérdida de re-
rría más deprisa de lo deseable. lación personal y mis incertidumbres. En ese momento el gru-
Además, evidentemente, cuando el grupo estaba más can- po también puede comprender al animador desde su propio
sado la toma de decisiones era mucho más compleja. En es- marco de referencia y entender cuál es su función en el equipo.
tas circunstancias nos encallábamos y encontrar las solucio- No necesitaría entonces mostrarme perfecto, no tendría
nes adecuadas y aceptadas por todo el equipo era práctica- porqué tenerlo todo controlado, podría pedir ayuda, comu-
mente imposible. Quizá en esos momentos era mejor dejarlo nicar que tengo un problema con alguien del equipo, pero
y retomar la decisión después de un descanso o en una reu- que sin embargo podría seguir siendo coordinador. Mostrar
nión posterior. en alguna reunión un temor o duda puede generar una ener-
Durante esta etapa de coordinador tuve algunas otras gía y una facilitación superior a intentar tener dominada la
complicaciones o carencias. Como suele decirse, el roce hace situación, sin tener que parecer un pilar indestructible del
el cariño (aunque también crea conflictos) y en un grupo en que podrá sujetarse. Es un riesgo que vale la pena correr.
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Todo equipo nace, se desarrolla y acaba por morir, no sus dio con mucha celeridad y que quizá podría haberse realiza-
relaciones personales, que pueden ser muy duraderas, pero do un cambio generacional mejor. Aunque fue doloroso, era
sí la funcionalidad del equipo y el grupo en sí. El coordina- necesario. Agradecí la labor realizada por los monitores sa-
dor deberá facilitar estas tres etapas del grupo, promover el lientes del equipo, pero quizá lo sintieron como un agradeci-
nacimiento y el crecimiento del grupo será más o menos com- miento personal y no tanto institucional que les hubiese ali-
plicado, pero siempre resulta ser una tarea obvia para un di- viado la preocupación del abandono. Es necesario generar un
rector. Sin embargo, facilitar la disolución de un grupo o de pequeño caos para que pueda surgir un nuevo orden.
una generación es un paso que no suele darse consciente-
mente, pero que, a mi entender, debe realizarse.
El compromiso sentido con el "Enfoque Centrado en
Un campo que siempre está sembrado con el mismo culti- la Persona"
vo puede acabar siendo estéril, por tanto conviene ir cam-
biando el tipo de semillas cíclicamente o incluso quemar el Después de mi etapa de coordinador seguí interesándome
terreno para que pueda brotar nuevamente. De igual forma por la teoría rogeriana del Enfoque Centrado en la Persona, y
cuando se intenta establecer un orden perpetuo suele acabar al haber tenido un reencuentro personal con Tomeu, me de-
produciéndose un marchitamiento; es importante pues, para cidí a formar parte del Departamento de Dinámicas de
que el grupo pueda seguir siendo eficaz y creativo, que se Grupos de l'Escola de l'Esplai que, entre otros cometidos, es
pueda regenerar. el encargado de los cursos de Director de actividades de
Es complicado para un coordinador que se siente ligado y tiempo libre. Como suele sucederme, tuve el temor ante lo
preocupado por la labor que se está produciendo abandonar desconocido y, sobre todo, a no dar la talla. Facilitar grupos
el equipo. En ocasiones tenemos la tendencia de creernos in- conjuntamente con los coordinadores que había tenido yo
dispensables, aunque queramos justificarlo opinando que no como participante cuatro años atrás, imponía mucho respeto,
vemos al grupo lo suficientemente maduro o preparado. pero las ganas de seguir experimentando en este campo pe-
En el equipo en el que hice de coordinador llegó un mo- saban más.
mento en el que la productividad estaba bajando, incluso Mi experiencia, todavía no muy amplia, se basa, por aho-
aunque aún se estuviese realizando una buena labor. Percibir ra, en algunos grupos intensivos y otros tantos cursos de fin
esta situación grupal es más sencillo si me dejo guiar por la de semana. Intentaré, no obstante, reflejar algunos aprendi-
intuición. A mí me ayudó mucho constatar que algunos zajes, temores y deseos.
miembros del equipo tenían la necesidad de seguir expan- Un aspecto que me sorprendió fue el agotamiento físico
diéndose y asumir más responsabilidad. que se llega a producir. ¡Se desprende tanta energía estando
Si se confía auténticamente en la potencialidad del grupo presente en el grupo, captando, con la presencia nuclear, las
y se explícita, el grupo también asume su capacidad y com- comunicaciones! Pero a la vez me doy cuenta que las ganas
prende que está llegando su momento Esta situación también de estar para el grupo me hace estar conectado y concentra-
fue entendida por los miembros de más antigüedad y, por do y no llego a decaer. Eso sí, al día siguiente de una expe-
tanto, con más peso específico. La verdad es que todo suce- riencia de cinco días no sirvo para nada.
7 I
Durante las experiencias intensivas de dinámicas de grupo Como facilitador me encuentro a menudo con el dilema
el staff de facilitadores realiza, en realidad dos dinámicas pa- de intervenir o esperar. Saber cuando es conveniente o no, su-
ralelas. Una con el grupo y otra entre el staff. Esta segunda sir- pone un gran esfuerzo. Creo que soy un poco impaciente
ve para incrementar el conocimiento y confianza entre los faci- porque confío en el grupo y deseo que crezca y que las per-
litadores y además provoca un desprendimiento de energía sonas aporten todo su potencial.
que después se puede trasladar al grupo. Es muy beneficioso La manera de introducir una sesión es una pieza clave pa-
que entre el equipo de facilitadores se comente racionalmente ra su devenir. Cuando se explícita aquello que se desea y se
el devenir del grupo y también se generen espacios para que comunica desde el interior, no como un coordinador externo
puedan producirse comunicaciones desde el sentimiento. sino a partir del nosotros, se generará una energía facilitado-
ra del descenso a la parte afectiva del grupo. Sin embargo
Cuando se establece un vínculo de mutua confianza y se
cuando siento que el grupo está encallado o se resiste a des-
puede explicar cómo nos sentimos respecto al grupo y res-
cender y está manteniendo conversaciones cerebrales y no
pecto a los otros facilitadores después ya nos percibimos más
comunicaciones sentidas, me cuesta no intervenir. Con el
abiertos para estar presentes en el grupo. Es muy importante
tiempo voy dominando mi impaciencia y cuando el grupo o
para mí poder expresar un sentimiento de incomodidad con
algunos participantes son los que promueven la fluidez afec-
otro facilitador o si me ha dolido alguna comunicación, ya tiva y hacen descender al grupo, me siento orgulloso porque
que después puedo poner este sentimiento entre paréntesis y sé que el proceso se está promoviendo de manera natural.
vaciar de prejuicios y de condicionantes mi presencia grupal. Esto provocará que los participantes sean más conscientes de
A mí me ayudan mucho estos espacios, ya que puedo expre- su propio crecimiento.
sarme con menos temores y sentirme más firme.
Durante la última experiencia grupal me di cuenta de que
Hay muchos sentimientos que, como facilitador, no oso hay dos tipos de comunicaciones que un facilitador debe re-
comunicar ya que me da miedo arriesgarme o porque creo alizar. Están las comunicaciones grupales y las individuales.
que no son oportunos en ese momento del grupo. En cambio Las grupales son aquellas en la que explicitamos al grupo
con los demás facilitadores me permito mostrarme transpa- nuestro parecer o nuestras sensaciones respecto al funciona-
rente. No tengo miedo a explicitar mis intuiciones grupales, miento de los participantes y de la sesión. Al iniciarse o al fi-
muchas veces muy poco científicas. No me siento juzgado y nalizar una sesión manifestar auténticamente consideración
eso me permite que al comunicarlas puedan replantearse al- positiva respecto al proceso que están realizando y el con-
gunas situaciones desde el raciocinio posterior. Cuando los vencimiento de que este proceso podrá continuar en la si-
facilitadores se comunican de garganta a cintura surgen unas guiente sesión, potencia enormemente la conciencia del pro-
exploraciones y unas manifestaciones muy sinceras. En oca- greso y provocará que nos exijamos un poco más. El grupo
siones puedo ser como un volcán y cuando he descargado me da más de sí y es más consciente de querer aprovechar la se-
siento aliviado y comprendido, entonces me percato más dis- sión acotada temporalmente. Por otra parte, un sentimiento
puesto a centrarme en el grupo y a generar energía vinculan- de decepción o de enojo respecto al grupo resuena fuerte-
te. Se trata de una carga de baterías recíproca y una ayuda a mente en los participantes y les ayuda a mostrarse más au-
la racionalización de la situación grupal. ténticos y comunicarse más sinceramente.
n. i nr
Es importante, no obstante, realizar también comunicacio- Supone que después, y a veces durante la sesión, hay que ser
nes individualizadas cuando capto a un participante, con capaz de observar al grupo como si observásemos una filma-
miedo y ansia al mismo tiempo de realizar una comunicación ción. Por tanto, durante la sesión tenemos que estar presen-
significativa; es necesario hacerle sentir que será escuchado. tes y a la vez atentos al ambiente y a las comunicaciones e in-
Es suficiente con una mirada, un contacto físico para que se teracciones que se van realizando desde un punto de vista
atreva a derrumbar su propia muralla. En otras ocasiones se- más racional.
rá conveniente, si se siente, explicitárselo verbalmente. Con En un grupo facilitado por un staff en el que hay una bue-
sólo escuchar su nombre ya suele dar el paso y lanzarse a de- na comunicación podemos, al finalizar la sesión, intercam-
cir aquello que deseaba expresar. Entrar en contacto o inclu- biar pareceres e intuiciones (que suelen ir bien encaminadas)
so dar a conocer aquello que nos disgusta es un recurso faci- para llegar a una conclusión y saber como enfocar correcta-
litante en los estadios más avanzados del grupo. mente las actitudes facilitadoras del proceso grupal. La con-
Creo que las comunicaciones individuales auténticas flu- fianza entre los facilitadores ayuda a dejarse guiar por la in-
yen desde un punto cercano al núcleo, por eso desprenden tuición y a arriesgarse dentro del grupo sin haberlo comenta-
una energía fácilmente palpable por el grupo. Puede resultar do previamente con el staff.
arriesgado realizarlas ya que tienen el peligro de situar la Sinceramente a mí me cuesta bastante, todavía, poder ana-
atención del grupo excesivamente en el facilitador. Aunque lizar el grupo durante la dinámica, ya que suelo, al contrario
cuando no parten de la necesidad del facilitador, sino que se que en la vida cotidiana, estar presente más sentidamente
realizan como una muestra de interés por el otro, resuenan que cerebralmente. Por tanto tengo más facilidad para captar
también en muchos otros participantes que pueden sentirse la situación de los individuos que del ente grupal. A pesar de
identificados y suele remover el interior de las personas. esto, posteriormente, tengo la intuición sobre la fase grupal,
Son dos tipos de comunicaciones que, a mi entender, hay que aunque suelo carecer de razones más objetivas para refrendar
combinar según la necesidad del grupo y de sus participantes. esta situación.
Una aportación muy interesante al Enfoque Centrado en Una de las fases grupales es la del encantamiento y fuga.
la Persona es el modelo para interpretar la evolución de los En este estadio el grupo se suele sentir cohesionado y se crea
grupos de Bartomeu Barceló.88 Todo grupo, si se dan las con- un clima muy agradable, aunque algo empalagoso. En esta
diciones necesarias, tiene una tendencia actualizante que situación el grupo puede realizar alguna expresión de agra-
promueve su evolución por distintos estadios, para ir desa- decimiento hacia los facilitadores. En esta fase, y yo lo viví, es
rrollando sus potencialidades. Es necesario conocer en cual muy sencillo dejarse llevar por este clima euforizante. Es in-
de las seis fases se encuentra un grupo para poder facilitar su dispensable una cierta distancia del grupo para que el facili-
crecimiento de manera adecuada. Esto exige una racionaliza- tador pueda ser más consciente de que es una fase más en la
ción continuada sobre el estado del grupo. Reconocer poste- que no deben estancarse. Mantener al grupo en esta situación
riormente en qué fase se encuentra no es una tarea sencilla. provoca ineficacia, despreocupación e inoperancia en la que
muchos facilitadores pueden sentirse a gusto. Yo me dejé lle-
88. BARCELÓ, B. Centrarse en les persones. Barcelona: Pleniluni, 2000, cap. 6.
var por un grupo en esta fase y, como persona, me sentía a
n, i
gusto, aceptado y relajado. Pero realmente como coordinador
no estaba promoviendo el crecimiento grupal. Es una especie
de egoísmo en el que es muy sencillo caer. Es un error que me
siento satisfecho de haber realizado, ya que resultó un apren-
dizaje vivencial y muy significativo.
Otro aspecto que debería seguir trabajando para mejorarlo
es el contacto físico. Me cohibe mucho tocar e incluso que me
toquen. No me surge de manera espontánea abrazar a alguna
persona a la que me apetecería y que, además, puedo ser cons-
ciente de que lo necesita. Es un aspecto reservado socialmente
al rol femenino. Me gustaría prescindir más de los prejuicios
que conllevan los actos de comunicación física. Soy consciente
de que las barreras me las impongo yo mismo, pero como son
manifestaciones cargadas de un significado muy sentido, me
molesta que puedan ser mal interpretadas o que parezcan ac-
tuaciones falsas aunque recurrentes. Con el tiempo, me iré
atreviendo a coger la mano, abrazar o a situarme cercano a al-
guna persona como simbolización de que, si desea comunicar-
se, estaré para escucharla y será aceptada. Supongo que me iré
reprimiendo menos y aceptaré esta necesidad de mi organis-
mo sin que pase tanto por el filtro de la racionalidad.
El acercamiento al Enfoque Centrado en la Persona, que
concibo como un modelo de intervención socioeducativa, pe-
ro sobre todo como una manera de entender y vivir la vida, es
un largo recorrido que acabo de iniciar. No es un sendero sen-
cillo, pero sí creo que me ayuda a ser más consciente de lo que
va sucediendo. Realizando este camino me voy descubriendo
más y voy aprendiendo y conociendo tanto, que deseo poder
seguir caminando y caerme para volverme a levantar.
CRECER FACILITANDO.
13
UNA EXPERIENCIA PERSONAL
EN LA FACILITACIÓN DE GRUPOS
DE ENCUENTRO
Por Victoria Picó i Aguiló 89
r¡¡ i
marco de referencia en relación a las intencionalidades que Primera mueca: "Iniciando el contacto"
pretendemos, pero que no se convierta en un material de en-
corsetamiento que condicione la experiencia y el proceso. Intenciones:
Así, me gusta, en sentido figurado, denominar a las técni-
- Conocer el nombre de los participantes en un grupo al
cas grupales muecas para el entrenamiento. Como una mue-
ca, en cuanto contorsión del rostro generalmente burlesca; las iniciar una experiencia.
técnicas no son muestras de la autenticidad del experienciar -Descubrir algunos aspectos de la personalidad de los
sino signos que posibilitan una expresión de lo que puede ha- participantes.
ber por debajo de lo expresado y, en este sentido, pueden - Favorecer la desinhibición ante una situación nueva.
ayudarnos a ver un poco más de lo que hay. -Facilitar una disposición inicial para la comunicación
Y como las muecas pueden mostrar aristas de distintos afectiva.
sentimientos, emociones y pensamientos, también las técni- Participantes:
cas grupales pueden referirse a los distintos ámbitos del
- De 25 a 30 personas aproximadamente.
acontecer grupal, a la sensibilidad, a la racionalidad del gru-
po, a la eficacia de su tarea, o a su expresión celebrativa y lú- Tiempo:
dica. En todo caso, una técnica nunca debe ser impuesta sino - Aproximadamente una hora.
sólo sugerida. Y, a modo de sugerencia, ahí van algunas mue-
cas para el entrenamiento que a veces hemos utilizado. He Procedimiento:
procurado seleccionar algunos recursos que no se encuentran 1.-E1 animador reparte una ficha rectangular (fig. 12) y su-
en los libros citados, o han sido formulados de otras formas giere que cada participante escriba individualmente algunas
por nuestro equipo de dinámica de grupos o inventados en informaciones: en el centro, el nombre con el que quiere ser
algún momento de necesidad según una determinada situa- conocido en el grupo; en el ángulo superior izquierdo, algu-
ción de grupo. En cualquier caso no dejan de ser muecas y, na motivación que haya generado su participación en el gru-
como tales, pretenden también una cierta utilidad. po o curso; en el ángulo inferior izquierdo, alguna influencia
significativa en su historia personal (persona, experiencia,
lectura de algún libro etc).; en el ángulo superior derecho, al-
gún rasgo de su personalidad que cree lo define significati-
vamente; en el ángulo inferior derecho, algún deseo o expec-
tativa en el futuro inmediato.
2.-A continuación el animador pide a los participantes que,
con la ficha bien visible, se vayan moviendo por la sala en si-
lencio observando detenidamente las hojas de los demás par-
ticipantes (el animador participa como uno más), y mostran-
do a los otros participantes su propia ficha.
ft I
3.-Una vez finalizado el paseo (unos diez minutos), el ani- Variante:
mador sugiere que se junten por parejas e intercambien in- Si el grupo es reducido este mismo ejercicio puede reali-
formaciones respecto a su ficha procurando comunicar un zarse sentándose todos los participantes en círculo y cada
poco más de lo que aparece escrito. miembro del grupo va presentándose a sí mismo indicando
4.-A1 cabo de unos diez minutos, nos sentamos en círculo un aspecto que se refiera a cada uno de los apartados de la fi-
y cada participante presenta a su pareja, al mismo tiempo co- cha, empezando por su nombre. El animador puede ir refor-
munica al grupo las primeras impresiones y percepciones zando las distintas presentaciones con respuestas reflejo y
respecto a su pareja: cómo la percibo, qué me ha llamado más con consideración positiva. Una vez realizada la autopresen-
la atención etc. tación es conveniente realizar el paso 5.
5.-Por último dejamos un pequeño espacio de libre expre-
sión para dar oportunidad a alguna comunicación por parte
de algún participante si lo desea. En estos dos últimos pasos
el animador, con su actitud, se mostrará empático y reflejará
algunas comunicaciones para que resuenen en el fuero inter-
no de la persona y transmitirá consideración positiva, ini-
ciando la creación del clima necesario para el inicio de un
proceso interaccional.
Materiales:
- Fichas y rotuladores.
Fig.12. Ficha de presentación
Influencia ^ \ ^^ Deseo
Segunda mueca: "Percatándose"107 2.-E1 animador va dando las siguientes instrucciones. "Os
sugiero que cerremos los ojos... intenta respirar profunda-
Intenciones: mente y seguir con tu conciencia el ritmo de la respiración.
- Ayudar a tomar conciencia del propio cuerpo como ma- Intenta sentir como tu respiración penetra en tu cuerpo y el
nifestación real de uno mismo. aire llena todos los espacios. Entra y sale suavemente.
Procuraremos ahora prestar atención a distintas partes de
- Facilitar el enfoque de sensaciones corporales para inte-
nuestro cuerpo. Te ruego centres tu atención ahora en tus
grarlas en la conciencia.
pies. Haz que el aire que inspiras llegue hasta tus pies.
-Aprender a dar significado emocional a una sensación
Intenta ahora apretar con fuerza los dedos de tus pies y man-
corporal.
tenlos así un momento. Ahora puedes ir soltándolos lenta-
- Compartir comunicaciones y sensaciones que proceden
mente... uno... dos... tres... Los dedos se relajan, los pies pesan
del referente directo de cada uno. en el suelo.
Participantes: Haz subir lentamente tu enfocar por las piernas hasta las
- De 25 a 30 aproximadamente. rodillas. Presta atención a la articulación de tus rodillas.
Mueve las piernas cerrándolas a través de la articulación de
Tiempo:
tus rodillas, mantenías así, fuertemente cerradas por un mo-
- Una hora y media, aproximadamente. mento. Ahora puedes ir soltando tus piernas lentamente,
Procedimiento: uno... dos... tres... Las piernas y las rodillas pesan en el suelo,
se relajan.
1. -El animador sugiere el ejercicio como instrumento para
Sigue respirando profundamente. Concéntrate en tus ma-
tomar conciencia de los sentimientos y emociones ante una de-
nos. Siente como el aire de tu respiración llega hasta tus ma-
terminada situación grupal a través del cuerpo que constituye
nos, hasta los dedos de tus manos. Cierra tus manos en un
un archivo extraordinario de nuestra historia personal porque
puño fuertemente y mantenías así por un momento. Ahora,
guarda todas las sensaciones y aprendizajes de nuestra expe-
lentamente, puedes ir abriendo tus manos, poco a poco,
riencia. Seguidamente solicita a los participantes que, en silen-
uno... dos... tres... Siente como pesan y se relajan.
cio, se coloquen en una posición cómoda, preferiblemente
Vamos ahora a concentrar nuestra atención en los codos,
acostados en el suelo sobre mantas o colchones, con la espalda
en la articulación de nuestros brazos que es el codo. Lleva ai-
tocando al suelo y la parte delantera mirando al techo. Sugiere re hasta allí. Cierra ahora tus brazos fuertemente por la arti-
que cierren los ojos y desconecten de ruidos exteriores para fa- culación del codo, con fuerza, y manten esta posición unos
cilitar el contacto consigo mismos. (Puede acompañar el ejerci- momentos. Ve ahora soltando lentamente tus brazos, uno...
cio con música tranquila y clásica de fondo). dos... tres... con suavidad, hasta que estén en el suelo. Siente
como tus brazos pesan.
107. Esto es un pequeño ejercicio de focusing en grupo que permite tomar Centra ahora tu atención en los hombros, lleva el aire has-
conciencia de cómo una persona se siente realmente ante una deter-
minada situación y le ayuda a abrirse más a la experiencia. ta tus hombros. Intenta apretarlos lo más que puedas hasta
que casi te lleguen a las mejillas, manten esta postura unos dad? O no, ¿quizá se ajusta mejor esto, no es así? Cuando se
momentos y, lentamente, ve soltando tus hombros... uno... ajuste sentirás un ligero alivio.
dos... tres... Siente como se relajan y pesan. Habla con esta sensación, acoge lo que te dice y date unos
Vamos a concentrarnos ahora en nuestro cuello, una arti- segundos para estar con ella, quizá descubras algo nuevo de
culación muy poderosa y significativa. Siente el aire en el ti mismo. Respira.
cuello. Intenta ahora alargar tu cuello lo máximo que puedas, Intentaremos ahora hacernos un espacio, como generar
como una avestruz y mantenlo así unos segundos. una distancia adecuada entre tú y esta sensación. Imagínate
Lentamente vuelve a llevarlo a su posición normal, uno... que colocas esta sensación en una estantería situada delante
dos... tres... Siente como pesa y se relaja. de ti, no muy lejos. La respiración puede ayudarte a colocar
Respira con profundidad varias veces. Centra toda tu aten- la sensación en la estantería. Esta sensación está ahí pero hay
ción en las partes delanteras de tu cuerpo, en el centro de tu algo más entre tú y la sensación, tú eres más que esta sensa-
cuerpo. Siente como el aire penetra en tu garganta, llena tu pe- ción. Quizá más tarde podrás ocuparte de ella, dile simple-
cho y llega hasta tu vientre. Presta atención en esta parte cen- mente que quieres un poco de espacio para ti. Continúa res-
tral de tu cuerpo, de la garganta hasta la cintura. Llena de ai- pirando y centrándote en tu respiración.
re esta parte central. Quédate ahí un minuto, con esta parte, Mira a ver qué ocurre en el centro de tu cuerpo cuando te
junto a esta parte. Aquí nuestro cuerpo guarda las sensacio- preguntas ¿Cómo me siento ahora mismo?, o mejor incluso...
nes, las emociones, los sentimientos. Toma conciencia de esta Ahora me siento bien ¿no es verdad? 108 Deja que tu cuerpo
parte y mira si hay alguna sensación corporal que surge difu- responda, no pienses ni analices ninguna respuesta solamen-
samente en alguna parte de donde estás. Quizá en la gargan- te date dos minutos para ver lo que emerge de tu interior
ta va surgiendo algún nudo, o en el pecho, o en el estómago, cuando te preguntas eso. Deja tiempo para que se forme una
o en el vientre. Una sensación física, agradable o desagrada- ligera sensación física en la garganta, o en el pecho, o en el es-
ble. Date tiempo, dos minutos o así. Si no surge no pasa nada, tómago, o en el vientre... Ahora me siento bien ¿no es verdad?
sigue estando ahí unos segundos más... quizá aparezca algo. Enfoca esta sensación difusa que va surgiendo. Respírala,
Si hay alguna sensación centra tu atención en ella. como si la expandieras y la pasearas por el centro de cuerpo.
Enfócala. Respira profundamente para darle volumen y aco- Dale volumen, la respiración puede ayudarte a atender esta
ge esta sensación, dale la bienvenida. ¿Cómo es esta sensa- sensación corporal.
ción? No hace falta pienses qué la produce, aparta un poco tu Mira si encuentras un nombre, una frase o una imagen
mente racional, sólo mira cómo es, qué cualidad emocional que describa la cualidad emocional de esta sensación, (es al-
tiene: un nudo, una euforia, algo denso que pesa, un vacío... go denso o angustiante, es como un cosquilleo que conmue-
Intenta buscar un nombre o una frase, o una imagen que des-
108. La pregunta puede variar en virtud de la situación del grupo y del mo-
criba esta sensación corporal.
mento en que realicemos este ejercicio. Podemos decir, por ejemplo, en
Toma conciencia de si, en realidad, este nombre o esta este grupo me siento bien ¿no es verdad?, o me siento realmente acep-
imagen se ajusta a la sensación. Puedes ir de la sensación a la tado por el grupo ¿no es así? o incluso, me siento cómodo en este gru-
po ¿no es cierto?...
imagen y viceversa, hasta que se ajuste. ¿Es eso, no es ver-
ns i
ve...) dedica un poco de tiempo a buscar un nombre o una
puestos en pequeñas cartulinas en la mesa. Coge la ficha del
imagen que se ajuste. Puedes desplazarte desde la sensación
color que ahora más se identifique con tu estado de ánimo
corporal hasta la palabra o la imagen hasta que percibas un
ahora, elige tu cartulina y ocupa de nuevo tu lugar mirando a
encaje de ambas. ¿Es esto? ¿Quizá está mejor así? Aja, esto es,
los demás participantes y el color que han elegido" 110
sí ahora se ajusta. Me siento como que...
3. -Se trata seguidamente de indicar que se junten por sub-
¿Qué es lo peor de esta sensación? Pregunta y espera, de- grupos de colores. Cada participante forma subgrupo con los
ja que tu cuerpo conteste con otra sensación. Lo más ("an- demás miembros que han elegido su mismo color o algún co-
gustiante" o "denso", o".."), de esta sensación es... Date un lor parecido de su gama cromática. Se puede formar un sub-
minuto o así para dejar que aflore un ligero movimiento sen- grupo de colores con los participantes que hayan escogido un
tido corporalmente... Lo peor es que... Aja, eso es, ¡qué curio- color que no tiene correspondencia con ningún otro. En el
so! Quédate un momento con esta nueva sensación, respírala subgrupo, durante unos doce minutos, las personas compar-
y paséala por tu cuerpo, dale volumen. ¿Es eso realmente? Lo tirán su experiencia, pueden explicitarse las vivencias de ca-
peor es que me siento...109 da uno y comprobar si el sentido que han dado al color ele-
¿Qué necesito para sentirme bien en relación con eso? gido coincide o es muy diferente. Es un espacio para com-
¿Hacia qué dirección me lleva? Pregunta y espera. Deja que partir y comunicarse.
el cuerpo de signos con nuevas sensaciones que puedan 4.-Por último, los participantes se sientan en círculo y uno
orientarte para sentirte mejor. Eso es lo que deseo realmente de cada subgrupo expone un poco el contenido de la reunión
¿no es verdad?... Sí eso es... ¡qué curioso! Déjate sorprender- de su subgrupo. El animador se muestra presente con consi-
te por las indicaciones de tu cuerpo. Deseo que... Parece co- deración positiva y empatia, formula algunas preguntas para
mo que se me abre el camino hacia... Respira esta nueva sen- facilitar la comunicación. Se deja también un espacio para
sación corporal de ir hacia... que las personas que lo deseen puedan compartir algo de su
Recibe y acoge todo esto que has experienciado, como experiencia con todo el grupo grande.
agradeciendo a tu cuerpo que te haya dado indicaciones sobre Materiales:
cómo estás y qué deseas. Y mira ahora como ha sido tu pro-
- Un reproductor de CDS
ceso interno, como a qué ha sabido... ¿Cuál es la sensación
-Música clásica o relajante.
global de todo esto que he sentido? ¿Qué color pudiera rela-
- Pequeñas fichas de 6 x 6 cm de múltiples colores y con 10
cionarse con esta sensación global de mi proceso de aquí y
o 12 fichas de cada color.
ahora? ¿De qué color me siento ahora mismo? Date un mo-
mento para ver qué color te surge. Ahora, lentamente, puedes
ir abriendo los ojos y escoger un color de todos los que hay ex-
110. El animador del ejercicio habrá colocado pequeñas cartulinas de múl-
109. Podemos preguntar también ¿qué es lo mejor de todo esto?... o ir ha- tiples colores en la mesa para que cada participante pueda escoger el
ciendo otras preguntas a la sensación para que nos diga algo más de lo color que desee. Tiene que haber muchas fichas de cada color y múlti-
que hay debajo de ella misma. ples colores para permitir que algunos participantes escojan el mismo
color y favorecer que todos los colores estén presentes.
7 i
Tercera mueca: "Aprendiendo a escuchar el otro, pero no podrá añadir nada de su parte porque se tra-
ta de escuchar vivencialmente al otro. Al cabo de 7 minutos
Intenciones:
se intercambian las funciones. El escuchador será escuchado
- Facilitar el entrenamiento de la escucha y la empatia. y el que ha sido escuchado será escuchador. A los 14 minutos
- Experimentar las sensaciones de sentirse realmente escu- la pareja vuelve al lugar de reunión de todo el grupo.
chado por el otro.
3.-E1 animador habrá colocado en círculo tantas sillas como
- Impulsar la creación de un clima de comunicación en el
parejas hay y una más para él mismo. Sugerirá que una per-
grupo.
sona de cada pareja ocupe una silla y el otro miembro de la
Participantes: pareja se sitúe detrás de su pareja de pie tocando con las ma-
- Unos 20 aproximadamente. nos los hombros de la persona que está sentada. Las personas
Tiempo: que están sentadas no podrán hablar durante esta parte del
ejercicio. Se trata de que vean cómo les resuena el mensaje de
- Una hora
su pareja, sin afirmar ni negar nada, que se dispongan a ex-
Procedimiento: perienciar cómo es el ser escuchado o si se sienten verdadera-
1.-E1 facilitador del grupo puede introducir el ejercicio con mente escuchados y respetados. Las personas situadas detrás
una breve exposición sobre la importancia del escuchar y la de su pareja, por turno expondrán al grupo como se siente su
empatia en las relaciones interpersonales y de ayuda. Es im- pareja, en relación con lo que han escuchado en el paso ante-
portante recalcar que lo significativo no es solamente escu- rior, como si fueran ellos mismos. Se trata pues de hablar en
char el contenido del mensaje del interlocutor sino, sobre to- primera persona pero manifestando la vivencia de la pareja.
do, el proceso interno de su vivencia, los sentimientos, las Algo así como: "yo soy... me siento... y..". La persona que ha-
emociones... lo que hay más allá de las palabras. Sugiere rea- bla sabrá discernir perfectamente aquello que quiere o no co-
lizar un pequeño ejercicio para aprender a escuchar mejor. municar al grupo su pareja. La persona sentada en la silla es-
2.-Se trata de que los participantes se junten en parejas, pa- tá abierta a la experiencia de verse reflejada. En este ejercicio
ra este ejercicio es mejor juntarse con otra persona poco co- muchas veces suceden emociones fuertes y algún lloro por la
nocida, esto nos permitirá una mayor disposición y esfuerzo intensidad del sentirse realmente comprendido por otro.
para escuchar. Cada pareja dispondrá de 14 minutos para re- Durante los distintos turnos es muy importante la presencia
alizar el ejercicio. Durante 7 minutos una persona comunica- vivencial del facilitador que se mostrará empático profunda-
rá a su pareja alguna vivencia que le afecte emocionalmente. mente con los participantes que hablan y con las personas que
No se trata de hablar de opiniones ni de conceptos, sino de reciben empatia que están sentadas en el círculo.
compartir una vivencia real sobre cómo me siento en una re-
lación, en una situación, en el propio grupo... El otro miem- 4.-Cuando todas las personas que están de pie han reali-
bro de la pareja escuchará intensamente. Podrá reflejar lo que zado sus comunicaciones como si fueran el otro, se intercam-
dice el otro, hacer alguna pregunta empática, interesarse por bian las posiciones y se realiza el mismo procedimiento que
en el paso anterior.
5.-Una vez finalizado el ejercicio se deja espacio para com- Cuarta mueca "Escuchar sin palabras
partir sensaciones y experiencias, para expresar significados
y aprendizajes sobre esta dinámica. Intenciones:
Materiales - Intentar experimentar y expresar empatia a través de un
dibujo.
- No se precisan
- Facilitar la comprensión de los demás de manera no ver-
bal.
- Impulsar el proceso de comunicación y de interacciones
en el grupo.
Participantes:
7> i
animador sugiere que se vayan explicitando las anotaciones. Séptima mueca: "Consideración positiva incondicional".
Se trata de que, a medida que se quiera, un participante co-
munique el nombre de la persona anotada y le verbal ice los Intenciones:
sentimientos que ha escrito. Es importante dirigirse directa- - Enfocar sensaciones positivas con respecto a las personas
mente a la persona anotada, de tú a tú y no hablar en tercera del grupo y esforzarse en comunicarlas.
persona como si no estuviera presente. También es interesan-
- Recibir y dar aprecio.
te comunicar primero el sentimiento negativo y después el
- Entrenarse en mostrar consideración positiva.
sentimiento positivo. Después de cada intervención, el ani-
mador solicitará feed-back de la persona que ha recibido la co- Participantes:
municación. "¿Era consciente de que el comunicante tenía es- - De 12 a 25 personas.
tos sentimientos?" "¿Esperaba recibir la comunicación de es-
Tiempo:
ta persona?" "¿Puedo comprender realmente lo que siente
hacia mí el comunicante?"... - De 20 a 30 minutos.
4.-Cuando todos los participantes hayan aportado su co- Procedimiento:
municación y hayan recibido el feed-back correspondiente re- l.-Las personas del grupo están sentadas formando un cír-
sulta conveniente dejar un espacio abierto de libre comunica- culo. El animador dispone de una pelota. Manifiesta que es-
ción para ayudar a concluir procesos interaccionales. Al cabo te ejercicio consiste en mostrar consideración positiva hacia
de hora y media el animador ha de proponer un receso. 111 los demás, procurando comunicar a las personas del grupo
Materiales: sensaciones y sentimientos positivos que provocan en cada
- Hojas de papel y bolígrafos. uno. Se trata de intentar expresar estos sentimientos de ma-
nera auténtica huyendo de la superficialidad. No es una co-
municación muy profunda decir, por ejemplo, "me gusta tu
peinado"; es más significativo expresar: "te percibo como
una persona muy comprensiva y siento que me escuchas
cuando comunico alguna cosa".
2.-La persona que recibirá la pelota será, en este momento
la que reciba consideración positiva de los demás. Mientras
tenga la pelota no puede decir nada, sólo puede recibir apre-
cio. El animador tirará la pelota a algún participante que co-
111. Es curioso comprobar que si el ejercicio se facilita bien se suelen dar gerá la pelota y permanecerá en silencio. Las dos personas
muchos casos de ajuste en las elecciones. La persona que ha elegido a
otra para comunicarle sentimientos negativos y positivos muchas ve- que están sentadas a su lado, a la derecha y a la izquierda del
ces ha sido a su vez elegida por esa otra. Este fenómeno genera un cú- receptor de la pelota, están "obligados" en primer lugar a co-
mulo de energía interaccional muy potente y hace que emerjan múlti- municar algún sentimiento positivo a la persona que tiene la
ples interacciones de conflicto y de encuentro.
pelota. Una vez, estos participantes han comunicado su sen-
sación positiva respecto a la persona poseedora de la pelota, Octava mueca: "Cara a cara
las otras personas del grupo que lo deseen manifestarán co-
municaciones positivas al participante que está en posesión Intenciones:
de la pelota. -Sacar a la superficie percepciones interpersonales y co-
3.-Cuando todos los participantes que han deseado volun- rregir posibles prejuicios en relación con estas percepcio-
tariamente verbalizar sus sentimientos positivos a la persona nes.
que tiene la pelota han finalizado, esta persona tirará la pelota - Ayudar a las personas del grupo a una mejor compren-
a otro participante. Entonces se seguirá el mismo procedimien-
sión mutua.
to: el receptor de la pelota permanecerá en silencio, los que es-
tán a su lado derecho e izquierdo estarán "obligados" a comu- Participantes:
nicarle algo positivo y, con posterioridad, los otros miembros - De 12 a 20 personas.
del grupo que lo deseen realizarán sus comunicaciones.
Tiempo:
Después tirará la pelota a otra persona, y así sucesivamente.
4.-A1 cabo de un tiempo máximo de 15 minutos hay que - Una hora y media.
dejar un espacio de libre comunicación, retirando la pelota, Procedimiento:
para fomentar la expresión de cuál ha sido nuestro proceso
l.-Cada participante escoge, particularmente, una o dos
de experienciar este ejercicio. ¿Cómo nos hemos sentido reci-
personas del grupo y anota sus nombres en sendos papeles.
biendo aprecio o mostrándolo? Hay que tener en cuenta que
no todas las personas habrán obtenido su turno de pelota y En el reverso del papel el participante formula una pregunta
este hecho habrá producido algunos sentimientos interesan- que desearía que la persona elegida respondiera y que afecte
tes para comunicar y analizar. La habilidad del animador se- a su situación interna. Por ejemplo, puede anotar preguntas
rá una condición indispensable para generar energía comu- como: ¿Qué es lo que más te molesta de otras personas?
nicativa e interaccional en este ejercicio. ¿Cuáles son los sentimientos que dominas con mayor difi-
Materiales: cultad en ti mismo? ¿Qué crees es lo más (o menos) atractivo
de tu persona? ¿Qué piensas de mí?...
- Una pelota. 2.-También escribe, después de la pregunta, la respuesta
que se supone dará ese miembro elegido.
3.-Seguidamente, por turno, cada miembro del grupo lee-
rá en voz alta la pregunta formulada al participante elegido.
Éste, si lo desea, responderá a la cuestión formulada. Por úl-
timo el miembro que ha formulado la pregunta leerá la su-
puesta respuesta y comunicará los motivos en que fundaba
esta suposición. Se dejará para cada interacción un breve mo-
mento para elfeed-back si se precisa.
4.-Una vez todos los participantes han tenido su turno es Novena mueca: "Grupo nominal
conveniente dejar un espacio para la intercomunicación en
relación con la experiencia que acaba de darse y los aprendi- Intenciones:
zajes que, de ella, se puedan derivar.
- Favorecer la discusión en grupo a partir de una técnica
Materiales: de trabajo que permita la participación activa de todos
- Hojas de papel y bolígrafos. los miembros.
-Evitar repeticiones innecesarias en las aportaciones de
los participantes para mejorar la eficacia y la eficiencia de
la tarea de grupo.
- Distribuir de manera igualitaria el tiempo disponible en-
tre los participantes.
Participantes:
- Hasta 30 personas formando subgrupos de 6 o 7 personas.
Tiempo:
- Una hora y media aproximadamente.
Procedimiento:
l.-A partir de un tema que tenga que tratarse, situado en
el espacio de la racionalidad del grupo, (cualquier tema de
discusión es objeto de tratarse con esta técnica: análisis del
proceso de grupo, funciones y tareas del animador, planifica-
ción de alguna actividad etc). se forman subgrupos de 6 o 7
personas.
2.-En cada subgrupo, cada persona, en silencio, elabora un
listado de sus ideas sobre la cuestión de que se trate y que
van a constituir sus aportaciones. Anota, pues, en una hoja de
papel cada una de sus consideraciones en forma de lista de
ideas. Es conveniente dejar algunos minutos de silencio y tra-
bajo personal para permitir la fluidez de las aportaciones y la
expresión posterior de las mismas a partir del listado.
3.-Se elige un secretario para cada subgrupo que anotará
las aportaciones de los miembros de su subgrupo. La mecáni-
ca de la puesta en común en cada subgrupo es la siguiente:
por turno el primer participante comunica su primera idea de subgrupo exprese de forma gráfica (dibujos, esquemas y pa-
su listado que es anotada en otra hoja de papel por el secreta- labras) su visión de la cuestión tratada de tal manera que re-
rio. Cuando ha comunicado esta idea la borra de su listado, si sulte comprensible a los demás subgrupos. Una vez elabora-
algún otro participante tenía anotada esta misma idea en su dos los carteles se cuelgan en lugares visibles de la sala.
listado también la borra porque no se podrán repetir aporta- 7.-Reunión del gran grupo. Una persona de cada subgru-
ciones. En esta fase tampoco se permite la manifestación de po expone ante el gran grupo la aportación de su subgrupo y
acuerdos y desacuerdos con respecto a las aportaciones, sólo explica su cartel.
se permite la clarificación de la idea expuesta. Cuando el pri- 8.-Una vez todos los subgrupos han explicado su cartel el
mer participante ha expuesto su primera idea (sólo se puede animador sugiere semejanzas y diferencias en las aportacio-
comunicar una idea en cada turno), el siguiente participante nes y promueve, anotando en una pizarra, la elaboración de
expone una idea de su listado que, a su vez, es anotada por el un esquema que contemple todas las aportaciones. Sin duda
secretario, es borrada de lista y los demás participantes tam- la habilidad del animador para favorecer la discusión y la
bién la borran si forma parte de su respectiva lista. síntesis es muy importante en este momento. No se trata de
4.-Así, sucesivamente, de manera rotatoria cada partici- que el animador exponga sus ideas sino que fomente la con-
pante va exponiendo una sola idea en cada turno que es ano- fluencia de las ideas de los subgrupos para llegar a una sín-
tada por el secretario y borrada de las listas. Cuando un par- tesis global consensuada. Para ello utilizará expresiones ver-
ticipante, al que le corresponda el turno, vea que ha agotado bales tales como: ¿queda con esto reflejada vuestra aporta-
su listado manifiesta: "Paso del turno", porque ya no tiene ción?, ¿Estaríamos de acuerdo en...?, ¿La idea de este sub-
más que aportar en esta fase, y cede el turno al participante grupo es similar a la de este otro, podemos expresar con es-
siguiente. Cuando todos los participantes han agotado su lis- tas palabras esta idea común...?
tado el secretario lee en voz alta el conjunto de ideas aporta- 9.-Elaborado el esquema general, el animador lo relee pa-
das por el grupo en su totalidad. ra que resuene y se asegura que el resultado es fruto del con-
5.-Seguidamente se inicia una fase de discusión, clasifica- senso. Con ello concluye el ejercicio.
ción y priorización de las ideas expuestas. Ahora se pueden Materiales:
manifestar acuerdos y desacuerdos y llegar a un consenso
que va a constituir la aportación del subgrupo con relación al - Hojas de papel y bolígrafos.
tema de discusión. Es conveniente que el secretario haga - Papel de gran tamaño para los carteles.
también el papel de moderador en esta fase de la técnica pa- - Tijeras, rotuladores, celo y el material necesario para la
ra ordenar la discusión. Resulta importante limitar el tiempo elaboración de carteles.
de esta fase en unos 15 minutos, al cabo de los cuales se pasa - Pizarra y tiza o similar.
a la fase siguiente.
6.-Se trata ahora, en la siguiente fase, de plasmar gráfica-
mente en un panel, mediante un gran cartel, la aportación del
subgrupo referente al tema de discusión. De manera que el
Décima mueca: "El giro corriente de los debates que se realizaban, asimismo, el recién
llegado informa de manera sintética de las aportaciones que
Intenciones: se realizaban en el subgrupo de donde proviene. Si alguna de
- Favorecer la implicación de todos los participantes a tra- estas aportaciones es considerada pertinente, el subgrupo la
vés de una técnica de discusión. puede incorporar en el contenido de su discusión. Se reem-
- Ayudar a que las comunicaciones fluyan en un grupo nu- prende la discusión y se continúa.
meroso. 3.-A1 cabo de un tiempo, unos 8 minutos, el animador in-
dica un nuevo cambio. Se sigue el procedimiento anterior.
Participantes:
Después, cada cinco minutos puede indicar nuevos cambios,
- Más de 25 personas (esta técnica está diseñada para gran- de manera aleatoria: cambio de 3, cambio de 1, cambio de 5,
des grupos). cambio de 1, cambio de 7, cambio de 3, cambio de 1, cambio
Tiempo: de 4... El único cambio que no puede anunciar es el corres-
pondiente al número de las personas que hagan de secreta-
- Una hora aproximadamente.
rios. Cada vez que hay una rotación, la síntesis se refiere al
Procedimiento: último período de discusión.
l.-Se propone, en función de la tarea que realiza el grupo, 4.-Unos minutos antes de finalizar la discusión, al cabo de
un tema de discusión en el espacio de la racionalidad. Este 40 minutos, por ejemplo; el animador indica que faltan 2 mi-
ejercicio va muy bien para los momentos de evaluación y la nutos para finalizar y sacar conclusiones respecto a las aporta-
constatación de los aprendizajes que una experiencia haya ciones de cada subgrupo. Se trata de ordenar el debate y sinte-
podido propiciar. Se forman subgrupos de 6 o 7 personas y se tizar las aportaciones de cada subgrupo a la discusión general.
sientan en círculos en la misma sala, que debe ser suficiente- 5.-Por último, se forma el grupo grande. Los secretarios
mente grande. Cada persona de cada subgrupo es enumera- exponen el resultado de la tarea de su subgrupo. Se da un es-
da del 1 al 6 (o al número de personas que conforman el sub- pacio para clarificaciones y matizaciones. El animador reali-
grupo). Así, en cada subgrupo hay un número, 1, un 2, un 3... za una síntesis final.
El animador sugiere que un determinado número, por ejem- Materiales:
plo el 2, sea el secretario de cada subgrupo. Se inicia la dis- - Hojas de papel y bolígrafos.
cusión por subgrupos sobre el tema en cuestión y el secreta-
rio va tomando notas de las aportaciones.
2.-A1 cabo de unos diez minutos, el animador, en voz alta,
indica un cambio de número; por ejemplo: "¡Cambio del nú-
mero...! "Las personas con este número dejan su subgrupo y
van a formar parte del subgrupo vecino. Este "giro" se hace
en el sentido de las agujas del reloj. En el momento en que lle-
ga un nuevo miembro, el secretario le pone rápidamente al
EPÍLOGO