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Endoparásito

Un endoparásito es un parásito que vive en el interior de su anfitrión. Existen


endoparásitos que atacan plantas (endofitos) o animales(endozoos).
Se pueden clasificar en diferentes tipos de endoparásitos: según el tejido atacado, la
fisionomía, etc.
Estos a su vez se dividen en:

 Intracelulares: necesitan llevar al menos una parte de su ciclo de vida dentro de


la célula

 Extracelulares: parasitan fuera de la célula (tejidos, LCR, etc)


Muchas enfermedades son provocadas por endoparásitos, entre ellas la malaria y
la leishmaniosis.
Un endoparásito es un parásito que vive en el interior de su huésped. Existen
endoparásitos que atacan plantas (endofitos) o animales (endozoos). Se pueden
clasificar diferentes tipos de endoparásitos según el tejido atacado, la fisiognomía, etc.
Muchas enfermedades son provocadas por endoparásitos, entre ellas la malaria y la
leishmaniosis. Algunos endoparásitos tienen un ciclo de vida complejo y requieren de
varios tipos de huéspedes. Se ha descubierto parásitos que pueden cambiar el
comportamiento de sus víctimas para poder complemetar su ciclo vital. Así actúa
"microphallus papillorobustus" que afecta al cangrejo "gammarus insensibilis" de tal
manera que en vez de refugiarse en aguas profundas se mueve hacia la luz. Así es más
fácilmente detectado y ingerido por los pájaros que necesita el parásito para pasar del
estado de larva a animal adulto. Los huevos puestos por el parásito adulto pasan con
los excrementos al agua donde de nuevo entran en contacto con el primer huésped.

Caracterización y Tipos
 Protozoos

Son microscópicos y unicelulares, como la Giardia spp,


el Toxoplasma gondii, la Isospora spp, la Leishmania spp y la
Babesia spp.

 Cestodos

Son lombrices planas o tenias, como el Taenia taeniformis y el


Dypilidium caninum.
 Nematodos

Son lombrices redondas, los más habituales son el Toxascaris


leonina, el Toxacara cati, el Ancylostoma tubaeforme y la
Diroflaria immitis.

Protozoos:

La Giardia spp produce giardiasis en perros y gatos. Vive en el


intestino delgado desde donde migra al intestino grueso -al
ciego- para formar quistes que son eliminados con la materia
fecal. Estos quistes son muy resistentes y tienen una
supervivencia muy prolongada en el suelo y agua. Son
infestantes para cualquier especie y la vía de transmisión es
fecooral aunque también puede aparecer al consumir alimentos o
agua contaminados. Sus síntomas son la diarrea, de aguda a
crónica, pérdida de peso y malestar general en el animal. Contra
la giardiasis existe una vacuna preventiva que se administra al
cachorro a partir de las 6 semanas de vida y que se renueva
anualmente. El Toxoplasma gondii causa la toxoplasmosis, una
infección que se adquiere principalmente por la ingestión de
carne cruda o poco cocida, verduras y aguas contaminadas por
las heces de gatos parasitados. Los felinos son los hospedadores
definitivos del parásito y si un gato está infestado por este
protozoo a través de sus heces eliminará los huevos –ooquistes-
durante 2 ó 3 semanas después de la infestación intestinal. Esos
huevos maduran en el medio ambiente en un tiempo que varía de
dos a cinco días. La Leishmania spp produce la leishmaniosis
que afecta a perros, personas y otros mamíferos. La transmite un
insecto del género Phlebotomus que suele vivir cerca de terrenos
húmedos y aguas estancadas. La babesiosis es causada por la
Babesia spp que es transmitida por una garrapata portadora.
Produce anemia por destrucción de los glóbulos rojos. Los
síntomas son la fiebre, la anorexia, el letargo, la debilidad y un
pelaje áspero.

Cestodos:
Los dos más representativos son el Taenia taeniformis y el
Dypilidium caninum. El primero se transmite al gato al ingerir
carne cruda de un animal infestado, habitualmente pequeños
roedores -ratas y ratones-. Este tipo de gusano plano se da, por
tanto, en gatos que cazan. Por su parte, si aparece el Dypilidium
caninum hay que buscar pulgas en casa o en entorno. Es la
solitaria del gato y el perro. Es un gusano plano que ingresa al
animal por ingestión de sus huevos y, una vez en el hospedador,
las larvas llegan al estadio adulto en un mes aproximadamente.
Un Dipylidium adulto mide aproximadamente 60 centímetros de
largo por 3 centímetros de ancho, y vive dentro del intestino
delgado alimentándose de los nutrientes que son absorbidos, es
por ello que el animal siempre quiere comer, pero sin engordar.
La vía de infestación más frecuente es otro gato ya infectado.
Las larvas de las pulgas ingieren los huevos de Dipylidium del
pelo de la zona de alrededor del ano o de las heces de un gato
infectado. La infección pasa a otro gato cuando este ingiere una
pulga infectada durante su lamido diario.

Nematodos:

Los más frecuentes son de la familia Toxocara:

 Toxocara cati

 Toxocara leonina

Los Toxocara cati afectan, aproximadamente, al 10% de los


perros y gatos adultos, y hasta el 25% de los cachorros y gatitos
menores de tres meses. Los ejemplares adultos de este parásito
son gusanos grandes blanquecinos que viven en el intestino
delgado de los animales y provocan diarrea. Se eliminan por las
heces y los huevos evolucionan en el medio ambiente y para
desarrollar la forma larvaria. Cuando las larvas son ingeridas
salen del huevo y pasan del estómago al intestino, desde donde
se dirigen al hígado a través de la sangre y de allí a los
pulmones, pasando luego a los bronquios y a la traquea. De esta
se trasladan a la laringe para ser deglutidos de nuevo, volviendo
al estómago y de ahí al intestino delgado, donde se produce su
maduración.

El Toxocara leonina realiza todo su ciclo en el aparato digestivo.


Puede haber infestación de la madre a los gatitos a través de la
lactación. Por su parte, el Ancylostoma tubaeforme es un
parásito intestinal común que vive en el intestino del gato
infestado. La infestación se puede producir a través de la piel,
por vía oral o por vía transmamaria –lactación- o intrauterina –
gestación-. Se adhiere a la pared intestinal provocando una
herida sangrante que puede ocasionar anemia en la mascota.

La Dirofilaria immitis causa dirofilariasis felina o enfermedad del


gusano del corazón. Puede producir desde una obstrucción por
un desorden vascular pulmonar con complicaciones por
enfermedades clínicamente significativas del corazón, pulmón,
hígado, riñón y conducto torácico, hasta alteraciones en el
sistema nervioso central. Las filarias adultas son
una lombriz cuyo tamaño oscila entre los 12 y los 15 centímetros
los machos y entre los 25 y los 40 centímetros de las hembras,
que vive en el corazón y en las arterias pulmonares. Se transmite
por la picadura de un mosquito, que introduce las larvas debajo
de la piel donde permanecen durante 30 días para pasar después
a la sangre. La dirofilariosis en gato, no es tan frecuente como en
el perro, pero también se han diagnosticado casos.

Epidemiología
En España, las zonas en donde se da con mayor frecuencia son
Ibiza, Huelva y Canarias. Los síntomas más frecuentes en gatos
coinciden con problemas respiratorios acompañados de tos
crónica y seca, pérdida de peso, mal aspecto general
especialmente del pelo y un comportamiento decaído.

Prevención de la infección
Un gato que cuente con todas las vacunas al día y al que se le
administren antiparasitarios con periodicidad, si además no sale
de casa, no es candidato para ser infestado por un parásito. Los
ejemplares que salen de casa o hagan incursiones necesitarán
ser revisados por el veterinario siguiendo el calendario que éste
marque para velar por su buen estado de salud aunque si está
vacunado y ha recibido tratamiento antiparasitario es muy
improbable que se contagie.

La mayoría de los parásitos internos se pueden contagiar a


través de la vía feco oral cuando el parásito llega, por ejemplo, a
nuestra comida y después a nuestro sistema digestivo. Esto
puede ocurrir al manipular tierra contaminada y por no lavarse de
forma adecuada las manos después.

Se ha de señalar que también las personas podemos transmitir


un parásito al gato y la fuente de contagio puede ser la misma
que nos afecta a nosotros: tierra contaminada, agua en mal
estado, alimentos que no hayan sido lavados convenientemente,
contacto con un animal infestado, ingestión de carne infestada,
etcétera.

Ectoparásito
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El piojo humano (Pediculus humanus) es un ectoparásito

Un ectoparásito es un organismo que vive en el exterior de otro organismo


(el huésped) y se beneficia de la relación a expensas de este. 1
Algunos ectoparásitos, como las cochinillas en las plantas, o los aradores de la sarna en
animales, establecen una asociación permanente con su huésped, a menudo, con una
fuerte reducción anatómica. Otros, como es la regla en los parásitos hematófagos, se
desplazan activamente en busca de individuos a los que explotar, estando entre los más
comunes las garrapatas.
Una clase notable de relaciones simbióticas es la que existe entre animales que
acicalan a otros, actuando como limpiadores de ectoparásitos, acción que realizan,
peces, crustáceos y aves, como la garcilla bueyera (Bubulcus ibis) y los picabueyes
(género Buphagus) entre otros.
Las parasitosis externas son enfermedades que se dan con frecuencia, siendo mucho
mayor su incidencia en los meses cálidos. Afectan a la piel de los animales de dos
formas: ectodérmica (sobre la piel) o contraindica (dentro de la piel), pero a veces
pueden ser vector de enfermedades graves.
Los principales parásitos externos -por ser los más comunes- que pueden afectar
al hombre y animales domésticos son las pulgas, garrapatas, piojos, los ácaros del oído
y los productores de la sarna.

Los ectoparásitos son organismos que viven en la capa más externa


de su huésped; el prefijo «ecto» significa «exterior». En otras
palabras, los ectoparásitos son los parásitos que se encuentran sobre
la piel del hospedador, no en el interior de su cuerpo. La infestación
causada por un ectoparásito se llama ectoparasitosis.

Por ejemplo, las pulgas y los piojos son ectoparásitos. Como todos los
parásitos, los ectoparásitos desarrollan una relación de dependencia
con su huésped, de quien se aprovechan para ingerir los nutrientes
que los mantienen con vida. Los ectoparásitos pueden estar presentes
en animales y plantas.

Pulga
Índice [Ocultar]
 1 Características principales
o 1.1 Se anexan a especies distintas
o 1.2 Se alimentan de fluidos corporales
o 1.3 Suelen ubicarse en sitios de difícil acceso
o 1.4 No aportan nada a su huésped
o 1.5 Pueden ser temporales o permanentes
 2 Tipos principales de ectoparásitos
o 2.1 Insectos (artrópodos de seis patas)
o 2.2 Arácnidos (artrópodos de ocho patas)
 3 Ejemplos de ectoparásitos en humanos
o 3.1 El ácaro de la sarna (Sarcoptes scabiei)
o 3.2 El ácaro de los folículos pilosos (Demodex sp.)
o 3.3 El piojo de la cabeza (Pediculus humanus capitis)
o 3.4 La pulga común (Pulex irritans)
o 3.5 El piojo del pubis (Pthirus pubis)
 4 Referencias

Características principales

Se anexan a especies distintas

Los ectoparásitos se caracterizan por vivir pegados al cuerpo de


organismos de otras especies. Estando ubicados allí se aprovechan del
huésped y toman de este su alimento.

Se alimentan de fluidos corporales

Estos parásitos se nutren de la sangre o de otras secreciones de la piel


de sus huéspedes.

Suelen ubicarse en sitios de difícil acceso

Usualmente los ectoparásitos se ubican en lugares poco accesibles, de


forma que no sea fácil deshacerse de ellos a través de las acciones de
higiene regulares.

No aportan nada a su huésped


Como en el caso de todos los párasitos, la relación que se genera
entre los ectoparásitos y su huésped es de conveniencia. Los
ectoparásitos viven a expensas del organismo al cual parasitan.

Pueden ser temporales o permanentes

Los ectoparásitos se pueden clasificar según el tiempo que pasan


parasitando a su huésped; es decir, que pueden ser temporales o
permanentes.

Los ectoparásitos temporales pueden pasar ciertos periodos de tiempo


alejados de su huésped, como las pulgas, las garrapatas y los
mosquitos. En contraste, los ectoparásitos permanentes pasan todas
las etapas de su ciclo de vida sobre su huésped, como es el caso de
los piojos y los ácaros.

Tipos principales de ectoparásitos


Los ectoparásitos se dividen en dos grupos principales: arácnidos e
insectos. Esta clasificación se da por características estructurales.

La clase de arácnidos incluye garrapatas y ácaros. La clase de insectos


consiste en moscas, mosquitos, pulgas y piojos.

Insectos (artrópodos de seis patas)

Los insectos se caracterizan por tener tres partes distintas del cuerpo:
cabeza, tórax y abdomen. Tienen un par de antenas en la cabeza, tres
pares de patas en el tórax y, en algunos casos, presentan alas.
Muchos ectoparásitos de este grupo, incluyendo algunas especies de
moscas, mosquitos y pulgas, pasan poco tiempo sobre el huésped.

Por el contrario, otros, como las larvas de la mosca azul y los piojos,
permanecen en los cuerpos de los huéspedes durante periodos más
prolongados.

– Piojos

Los piojos son insectos comunes, fácilmente visibles, con una longitud
entre 2 y 4 mm aproximadamente. Como todos los insectos, los piojos
tienen 6 patas que están especialmente adaptadas a adherirse a la piel
y al pelo del huésped.

Morfológicamente, algunos piojos poseen el cuerpo alargado y otros


redondeado, similar a los cangrejos pero mucho más pequeños. Los
huevos de estos insectos se llaman liendras y son de color blanco.

Piojo
Los piojos en estado adulto se alimentan de sangre. Al hacer esto
inyectan saliva en la piel del huésped, lo cual causa una reacción de
hipersensibilidad. Esta reacción se evidencia al causar comezón en la
piel del individuo afectado (prurito).

Los piojos se transmiten fácilmente a través de fómites como peines,


accesorios para el cabello, toallas, entre otros.

– Moscas
Las moscas son insectos voladores que se encuentran ampliamente
distribuidos por todo el mundo. Muchas de estas son capaces de
infectar a los seres humanos a través de sus larvas, las cuales
provocan una respuesta inflamatoria. Las infecciones ocurren con
mayor frecuencia en áreas tropicales.

La infección causada por estos ectoparásitos varía según la especie de


insecto. Algunas moscas depositan sus huevos cuando hay una herida
en el huésped, posteriormente el huevo eclosiona y produce la larva.

Otras moscas depositan sus huevos en las mucosas del huésped, como
en las fosas nasales o cerca de los labios. Otro grupo de moscas dejan
sus huevos en la piel intacta y es la larva la que invade la piel.

– Chinches

Los chiches son otro tipo de insecto con hábitos parasíticos. Es común
encontrarlos en las camas, donde pueden parasitar fácilmente a sus
hospedadores. Morfológicamente son ovalados, de color pardo y de
unos 5 mm de longitud.

Normalmente, los chinches se encuentran en las grietas de la madera


y en los colchones. Sus hábitos alimenticios son nocturnos, mientras
sus huéspedes humanos duermen los chinches se alimentan
fácilmente.

Los síntomas principales de una mordedura de chinche son la


inflamación y la comezón, los cuales son provocados por una reacción
alérgica a las toxinas presentes en la saliva del insecto.
Arácnidos (artrópodos de ocho patas)

Dentro del grupo de los arácnidos se encuentran las garrapatas y los


ácaros. Morfológicamente, estos parásitos se caracterizan por tener
dos segmentos corporales: la cabeza fusionada con el tórax
(cefalotórax) y un abdomen.

Otra característica distintiva son sus cuatro pares de patas en el


estado adulto, y que no poseen alas ni antenas.

– Garrapatas

Las garrapatas son pequeños arácnidos ectoparásitos que se alimentan


de la sangre de los mamíferos, las aves y algunos reptiles y anfibios.
Estos arácnidos están distribuidos por todo el mundo; sin embargo, es
más común encontrarlos en climas cálidos y húmedos.

Frecuentemente se subdividen en dos grupos, según sus


características estructurales: garrapatas duras (familia: Ixodidae), las
cuales son difíciles de aplastar; y garrapatas blandas
(familia: Argasidae), que son fáciles de aplastar.

Garrapata
Las garrapatas localizan a sus huéspedes principalmente por el olor.
Sus cuerpos ovoides se llenan de sangre cuando se alimentan.

Poseen 4 etapas en su ciclo de vida: huevo, larva, ninfa y adulto.


Debido a que son hematófagos (que se alimentan de sangre), las
garrapatas son vectores de enfermedades que afectan a los humanos
y a otros animales.

– Ácaros
Los ácaros son arácnidos que se pueden observar fácilmente en
un microscopio. Sus cuerpos son generalmente redondos y aplanados,
aunque una excepción a esta regla general son los ácaros
pertenecientes al género Demodex, los cuales tienen forma alargada.

Los ácaros se encuentran en el estrato córneo de la epidermis y se


alimentan de restos de células muertas de la piel, como las escamas.
Algunas especies presentan hábitos de alimentación alternativos, como
perforar la piel para succionar el líquido linfático.

La transmisión ocurre por contacto personal o por compartir fómites


como la ropa, especialmente si hay pocas condiciones higiénicas.

Los síntomas son similares a los causados por otros ectoparásitos, la


comezón es una respuesta del cuerpo a una reacción de
hipersensibilidad retardada a las heces del ácaro. El ácaro se
encuentra dentro del estrato córneo de la epidermis.

Ejemplos de ectoparásitos en humanos

El ácaro de la sarna (Sarcoptes scabiei)

Sarcoptes scabiei es una especie de ácaro y es el agente causal de la


escabiosis, comúnmente llamada sarna. Esta es una enfermedad de la
piel y está distribuida mundialmente dado que es altamente
contagiosa.

La infección ocurre cuando una hembra cava túneles en la piel del


hospedador y va dejando sus huevos a medida que se desplaza. Los
huevos eclosionan y producen larvas que migran a la superficie y se
convierten en adultos infecciosos.

El ácaro de los folículos pilosos (Demodex sp.)

Los ácaros del género Demodex son pequeños ectoparásitos que viven
en los folículos pilosos de los mamíferos y en otras zonas cercanas.
Son muy pequeños y hay dos especies que afectan a los
humanos: Demodex folliculorum y Demodex brevis.

La infestación con Demodex es común y generalmente permanece


asintomática, aunque en algunos casos pueden generar enfermedades
en la piel, sobre todo en personas que tienen problemas con su
sistema inmune.

Si el sistema inmune no funcione correctamente, estos ectoparásitos


pueden proliferar y causar demodicosis.

El piojo de la cabeza (Pediculus humanus capitis)

P. humanus capitis es un ectoparásito del grupo de los insectos y es el


agente causal de la pediculosis. Estos parásitos no tienen alas por lo
que se ven obligados a pasar toda su vida sobre su hospedador.

Su forma es aplanada y su color es translúcido; sin embargo, se


tornan de color rojo cuando se alimentan de sangre humana. A pesar
de ser parásitos hematófagos (que comen sangre) estos piojos de la
cabeza no transmiten enfermedades.

La pulga común (Pulex irritans)


La especie Pulex irritans es un ejemplo de un ectoparásito que afecta
gravemente a los seres humanos porque es el vector de transmisión
de diversas enfermedades, incluyendo la peste bubónica que azotó a
Europa en tiempos pasados.

Es una especie que ha tenido éxito en su distribución por todo el


mundo. Se alimenta de sangre caliente de diversos animales como
perros, gatos, cerdos, murciélagos, ratas, pollos, entre otros.

El piojo del pubis (Pthirus pubis)

La ladilla del pubis es un ectoparásito que se alimenta exclusivamente


de sangre humana. Suele encontrarse en el pubis de las personas
infectadas, pero también se ha reportado su presencia en otras parte
del cuerpo, como las pestañas. Su distribución es mundial y su
transmisión es por contacto.

Cuando este piojo se alimenta causa ciertos síntomas en el


hospedador. El síntoma más común es la comezón, causada por la
hipersensibilidad a la saliva del piojo en el lugar de alimentación del
parásito (pubis). Otros síntomas son el enrojecimiento y la
inflamación.

HEMOPARASITOS
Sabes que son los HEMOPARASITOS?
Son enfermedades transmitidas por la picadura de pulgas y garrapatas
que están haciendo que mas el 30% de nuestros GATOS y PERROS se
nos están muriendo.
Son enfermedades, que en su mayoría no presentan síntomas agudos y
solo se presentan cuando han pasado semanas, meses e inclusive
años; cuando se encuentran, generalmente no hay mucho que hacer
por nuestros animalitos porque han hecho muchos daños orgánicos.
Como saber si tu mascota tiene HEMOPARASITOS?
Realiza exámenes de laboratorio de control por lo menos dos (2) veces
al año.
Como prevenir los HEMOPARASITOS?
Principalmente controlando que las garrapatas y las pulgas NO piquen
a los animalitos, llevando a cabo acciones adecuadas para ello, como
el uso de insecticidas tópicos, baños medicados, revisiones cada vez
que paseamos a nuestra mascota y evitando que pasen mucho tiempo
en la calle.

moparasitos: un problema que cada día nos confu


Como lo habiamos prometido, en esta edición continuamos con este tema
tan importante en la salud de nuestros gatos.

SIGNOS

Los signos son compatibles con lo que expliqué en la anterior edición número
3. Los glóbulos rojos son los encargados en mayor medida del transporte de
oxígeno, si lo ponemos en contexto y con sentido común, si el glóbulo rojo es
el que lleva el oxígeno y si el cuerpo se está autoatacando, el primer signo
sería la respiración acelerada para poder captar más oxígeno del ambiente.
De esta manera el corazón, que es el capitán del sistema cardiovascular, se
acelera para poder enviar más glóbulos rojos para suplir esta ausencia de
oxígeno, lo que nos traerá como signo consecuente el aumento de la
frecuencia cardiaca. Ahora bien, no solo los glóbulos rojos transportan
oxígeno, también llevan con ellos proteínas en su interior, y estas proteínas
junto con otros factores son los que le dan el color rojo a la sangre. Al
destruirse salen de allí estos pigmentos permitiendo que vayan por todo lado,
siendo uno de estos lugares la piel, la cual va tomando un tono amarillo que
lo denominamos ictericia (hace parte del síndrome ictérico felino) lo que dará
lugar a ver el gato con todas las mucosas y la piel de color amarillo.

El cuerpo siempre reaccionará ante cualquier tipo de ataque o daño que


ocurra en él, y como este agente es tan agresivo hace que los mecanismos
de defensa se disparen y generan cambios en el cuerpo para poder atacar.
Uno de ellos y el más importante es la temperatura, la cual se elevará por
encima de 40,1 grados centígrados (la temperatura normal de un gato es de
37,5 – 39,0) haciendo que el gato se sienta mal, las histaminas que son los
mensajeros del cuerpo se activan avisándole al cuerpo que es mejor guardar
energía para poder luchar contra este ejército maligno, lo que hace que el
gato baje todos sus procesos a niveles basales y entonces el gato se
quedará más quieto, lo que nosotros traducimos a que el gato está
deprimido, hipodinámico, no juega y ya no es el mismo.

Existe un signo muy importante que nos dimos cuenta en la práctica diaria en
nuestra clínica y es que el gato presenta movimientos repetitivos en la piel
como si tuviera comezón, esto se debe a la liberación masiva de histamina y
una hípersensibilidad, la pérdida de peso es muy rápida ya que el gato está
luchando contra el mismo y no ingiere los mismos alimentos o con la misma
frecuencia porque el cuerpo está tratando de consumir la menor energía
posible para agotarla en el ataque contra la Hemobartonella. Estos parásitos
hacen que en el cuerpo también ocurran daños a nivel de los vasos
sanguíneos y articulaciones por producir lo que nosotros llamamos
perivasculitis y poliartritis lo que produce dolor a nivel articular y cambios en
órganos importantes como el riñón y cerebro.

DIAGNÓSTICO

Dentro del diagnóstico de esta enfermedad existen varias pruebas con las
cuales se puede calificar, lo que sí es muy difícil es cultivarlo por lo que les
contaba que el parásito es muy lábil (vulnerable a los cambios de
temperatura) y no es muy resistente a otro medio que no sea la sangre. Con
un frotis sanguíneo y un cuadro hemático lo podemos diagnosticar, esto sí
deberá ser realizado a manos de un profesional médico veterinario y
zootecnista, quien tomará la muestra o un especialista en laboratorio clínico,
quien será el encargado de analizarlas y darnos el resultado de la
muestra.Estos signos son compatibles y hacen parte de los diferenciales de
varias enfermedades, pero las más importantes y es desde aquí donde yo
tomo la decisión de ahondar más en el tema son: el PIF (peritonitis pleuritis
infecciosa felina) y las pancreatitis por los mismos signos y su similitud en los
resultados de laboratorio. Desafortunadamente para el PIF no existe un
prueba diagnóstica que certeramente lo asegure.
Es de recalcar que existen signos que se pueden llegar a confundir y pueden
enmascarar en enfermedades aun más graves que el mycoplasma
haemofelis (Hemobartonella), por lo tanto el gato debe ser siempre visto por
un médico veterinario para que lo pueda valorar y descartar otras
enfermedades letales.

TRATAMIENTO

Luego de tener la confirmación de la presencia del parásito por laboratorio


procederemos a administrar antibióticos, antihistamínicos y antiinflamatorios
intravenosos para atacar al parásito muy rápido y agresivamente. Luego de
una corta estadía en la clínica el gato se deberá ir para la casa a continuar
con su tratamiento.

EVOLUCIÓN

La evolución de los pacientes luego de ser avaluados a tiempo y después del


tratamiento ideal es casi en un 90 por ciento rápida y el cambio se nota muy
pronto. Hay algunos gatos a los cuales el diagnóstico se hace más difícil y
por lo tanto el tratamiento se complica como es el caso en el que estén
comprometidos ya con una enfermedad de base, que impida administrar los
tratamientos de elección primaria.

Lo terrible de esta enfermedad es que ya una vez instalado el parásito en el


gato es muy difícil que salga, solo se controla con medicación y es poco
probable que repita una crisis pero puede llegar a pasar. Si el gato es
portador lo mejor es recurrir a las terapias inmunes estimulantes, las cuales
junto con las terapias alternativas y el exceso de amor son las que más me
funcionan.

Para concluir el tema y como recomendación general, aislar a los gatos de


las pulgas un ciento por ciento es casi imposible pero se pueden controlar,
existen múltiples opciones en el mercado con las cuales lo podemos proteger
y controlar. Para la casa con controladores naturales los podemos mantener
pues no son nocivos para los gatos, y una excelente nutrición y buen trato
mantendrán los niveles de defensas óptimos para evitar la reinfestación o la
contaminación. Hoy por hoy se considera el mycoplasma como un habitante
natural del cuerpo de los gatos, lo que quiere decir que conviviremos con
ellos, no existe tratamiento preventivo pero es vital saber que solo es con
diagnóstico y se tratará al animal, cuando expresa los signos y se ve y
comprueba en el laboratorio, de lo contrario no se tra

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