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LICENCIATURA EN FILOSOFÍA
Los términos relacionados con la ocupación de la ética, comprendemos que cada una
de estos tiene dos sentidos diferentes, por un lado: el trivial o relativo; y por otro el ético o
absoluto. Los juicios de valor relativo solo son enunciados de hechos, una descripción, que
no implica un juicio de valor absoluto. El valor relativo, lo compara con la premisa de
Hamlet, quien designa a lo bueno y malo un atributo de nuestro estado mental en la forma de
describir un hecho, pero no tiene un valor ético, bueno o malo. Por tanto nuestro lenguaje
solo describe acontecimientos.
Sin embargo, independiente mente del valor relativo de los hechos, el valor absoluto
o ético describe una experiencia de las vivencias, por ejemplo de sentirse absolutamente
seguro o el asombro de algo más allá de lo comprendido, de tal forma que pasa de una
expresión del lenguaje a la expresión por la existencia del lenguaje. Con lo anterior, la
pretensión de Wittgenstein hasta este punto es de romper los límites del lenguaje, pues afirma
que es una tendencia del espíritu humano, por buscar un sentido vida, lo absolutamente
bueno, lo valioso; que las ciencias no pueden explicar. El problema que surge es identificar
el juego de esos juicios éticos.
Finalmente, la descripción de los hechos no denota un juicio de valor ético como tal
y precisamente el lenguaje queda limitado en la descripción. Considero que en este punto la
ética presenta la intención inmanente del hombre en relación con el mundo, lo cual es difícil
de describir, ya que la subjetividad amuralla una utopía de generalidad absoluta; desde esta
Concuerdo con Wittgenstein, al decir que hablar de la ética tiene que romper los
límites de nuestro lenguaje ya que es algo que escapa de nuestra comprensión objetiva por el
hecho de estar más allá de la realidad terrena, sin embargo, si tenemos una noción de ella
sino no podríamos hacer un dialogo de ella o pretender explicarla. Es cierto también que la
ética no puede ser una ciencia como tal, pues eso limita en mucho la naturaleza de esta misma,
y aunque no hay un discurso que nos refiera concretamente a la ética, se puede comprender
a lo que se refiere de manera indirecta, ya sea por ejemplos, metáforas o incluso el mito. Por
lo tanto, si es cierto que la ética escapa a nuestro lenguaje y descripciones en los juicios de
valor absolutos, pero se tiene una noción de estos de manera indirecta.
Bibliografía
Gómez, C., DOCE TEXTOS FUNDAMENTALES DE LA ETICA DEL SIGLO XX; Ed.
Alianza, Madrid, 2018; 376 p.