Está en la página 1de 4

MANEJO DE EMOCIONES

MARCO TEÓRICO
Los seres humanos utilizamos distintas formas de pensar: con imágenes, pensamientos
abstractos, palabras, sensaciones y emociones; pero una de ellas constituye la base de
nuestra forma de pensar, de ser y de actuar en el mundo.
El éxito de nuestra vida tanto a nivel privado como profesional viene determinado por
diferentes factores; entre ellos se encuentra el de origen social, basado en parte en una dosis
de suerte, pero es con mayor relevancia, el manejo inteligente de las emociones propias y
ajenas. Para el logro de este manejo existe un tipo de inteligencia denominada emocional.
La inteligencia emocional es la capacidad de dominar las emociones y configurar rasgos de
carácter como la autodisciplina, la compasión y el altruismo. Consiste en saber reconocer lo
que se siente, controlar las respuestas emocionales, aprender a automotivarse y a
entusiasmarse con lo que se quiere. Definir y conseguir metas, afrontar la vida con
confianza y optimismo, comprender los sentimientos de los demás y relacionarse
armoniosamente con ellos
Daniel Goleman (1999), (citado por Fernando Sánchez 2000) determina que las
condiciones intelectuales determina que las condiciones intelectuales no son la única
garantía de éxito en el ámbito profesional del trabajo, sino tan sólo un factor, que unido a
las necesidades emocionales cubiertas del personal como equipo, desarrollará el desempeño
y los resultados de todo líder y trabajador motivándolo emocionalmente a ser productivo.
Una vez que una persona entra en una Organización para que pueda dar lo mejor de sí,
hacer bien su deber, que no sólo de su talento sino que además lo haga con entusiasmo y
compromiso, se necesitan. Primero que tenga sus útiles de trabajo y que sepa qué es lo que
tiene que hacer. Segundo, que sepa cómo hacerlo. Tercero que sienta que lo que está
haciendo tiene un valor significativo, que él está contribuyendo y que se le reconozca por
ello afectivamente.

Freud (1922) ha defendido la idea de que el autocontrol estaba asociado al desarrollo de la


fuerza del ego. Ahora bien, el superego seria el que controlaría la propia conducta y el
comportamiento moral y, por lo tanto, sería una característica estable de la personalidad.
El comportamiento moral, a su vez, seria influenciado por acontecimientos durante el
desarrollo que tendría una fuerte influencia sobre el grado de autocontrol desarrollado por
el sujeto.

Skinner (1953) el autocontrol no sería un rasgo o disposición y sí un proceso por el cual el


individuo cambiaría su probabilidad de respuesta, alterando las variables en las cuales la
respuesta es una función, teniendo una gran influencia del entorno social.

Harter (1983) es importante destacar tres aspectos relevantes para el estudio del
autocontrol, siendo ellos, los procesos cognitivos básicos, los procesos de internalización
y los procesos afectivos y motivacionales. Principalmente en lo que se refiere al papel de
los procesos afectivos y motivacionales en el establecimiento de patrones más aceptables
de autocontrol, el autor ha afirmado que apenas la recompensa no sería responsable por
internalizar funciones, sino que también el desarrollo tendría participación, por ejemplo,
en el caso de la función motivacional.

Cautela (1969), Mahoney (1972) es definido como la respuesta de un organismo para


modificar la probabilidad de otra respuesta. Esta modificación incluye tantos incrementos
en la frecuencia de la respuesta. Una característica esencial del auto manejo es que el
organismo sea, el mismo, el agente del cambio.

los/as policías con una adecuada inteligencia emocional tendían a afrontar las situaciones
de estrés llevando a cabo acciones para solucionar el problema, reflexionando acerca del
mismo, pensando en cosas que les distrajeran y/o respondiendo adecuadamente. Por el
contrario, la falta de habilidad a la hora de regular las emociones coincidió con el uso de
alcohol o drogas como una estrategia de afrontamiento al estrés.

Estos resultados, al igual que otros encontrados, nos indican que la inteligencia emocional
facilita el afrontamiento de las situaciones estresantes y que reflexionar y actuar sobre el
problema es más adaptativo que evitarlo.
IMPORTANCIA DEL MANEJO DE EMOCIONES PARA LOS ESTUDIANTES
DE LA POLICIA

La inteligencia emocional aplicada a la práctica policial, sin duda alguna, daría como
resultado la obtención y el logro de los objetivos principalísimos de la organización
policial. El cubrir las demandas sociales, tal como lo plantea la Ley Orgánica del Servicio
de Policía en su Artículo 77, y la consecución de las metas se convertiría en algo más
accesible y común. Nuestro trabajo se fundamenta en nuestra actuación, en el manejo de
las emociones ante los problemas de las comunidades, de los individuos que integran las
comunidades y nuestros problemas personales.

El término Inteligencia Emocional referido a la capacidad humana de sentir, entender,


controlar y modificar estados emocionales en uno mismo y en los demás, es básicamente
nuestro trabajo policial. Inteligencia emocional no es ahogar las emociones, sino dirigirlas
y equilibrarlas y en este sentido el policía está obligado a dirigir sus emociones de manera
adecuada y mantenerlas en equilibrio.

Una adecuada inteligencia emocional dentro del ámbito policial influye de forma positiva
sobre la estabilidad emocional, la sociabilidad, el sentido del deber, la confianza y
preocupación en y por los demás, la responsabilidad y autoexigencia en el trabajo, la
utilización de adecuadas estrategias de afrontamiento al estrés y disfrutar de una mejor
salud mental. En consecuencia, todos estos aspectos favorecen el bienestar psicológico de
los/las policías, tanto en sus relaciones personales como en el desarrollo de su actividad
laboral.
REFERENCIAS BIBLIOGRAFICAS

- López E. y Arango T. (2002). Inteligencia Emocional. Aprendiendo y creciendo


juntos: Bogotá (Colombia). Ediciones Gamma S.A. Oxford English Dictionary.
Actualization (2005).

- Armstrong, T. (2001). Inteligencias Múltiples. Cómo descubrirlas y estimularlas en


sus hijos. Bogotá (Colombia). Editorial Norma, S.A.

También podría gustarte