Documentos de Académico
Documentos de Profesional
Documentos de Cultura
jeto, Sociedad
Pérez Salazar, Juan Manuel Uribe Cano, John Fredy Lenis Castaño,
Hemández
o con cualquier propósito, sin autorización escrita de la Editorial Juan Manuel Uribe C a n o . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . xi
Universidad de Antioquia
E-mail: filodir@quimbaya.udea.edu.co
'"7fJ'
Página web: http://institutodefilosofia.udea.edu.co
De los fundamentos epistemológicos
Apartado 1226. Medellín. Colombia
de la clínica del sujeto
T,•Iéfono, (574) 219 53 30. Telefax: (574) 219 53 32 Construcción narrativa de la identidad
('orrco electrónico: imprenta@quunbaya.udea.edu.co
John Fredy Lenis Castaño . .. . . .. . . .. . . .. . 88
Gabriel Lombardi
de batalla
A primera vista, el psicoanálisis pareciera contribuir inexorable, la estructura, las imposibilidades que tra
a recortar más aún el estrechísimo margen de libertad man nuestro real; pero todo ello no es para dejarnos en
que queda al hombre, añadiendo determinaciones in una posición de mero estoicismo. No emprendemos el
conscientes a los deseos y los designios que rigen sus camino del análisis solamente para incitar la voluntad
síntomas y sus actos: "mecanismos" inconscientes que. de aquiescencia, que seria entonces el único ejercicio
en tanto tales, no requerirían ninguna elección del legítimo de la voluntad -la voluntad de consentir-. Por
sujeto-marioneta que ellos agitan o adormecen. el contrario, el psicoanálisis también nos muestra que,
Sin embargo, me empeñaré en mostrar que el campo en los intersticios estructurales de lo que no po d emos
lítica no es solo el del sujeto de los mecanismos incons opción que tal vez no se había tenido en cuenta, y que
cientes, sino también, y eminentemente, el ser hablante, no se la había tenido en cuenta por haber quedado,
en tanto capaz de elegir por gusto, por goce, por deseo, como opción, hundida en el inconsciente.
por su juicio íntimo, por un nuevo amor. Sostengo entonces que hay dos rea/es en juego: Jo real
Propondré, entonces, subscribir lo que afirma el filó ínemediable y lo real del acto de elegir, que se apoya en el
1
sofo de Crimes and misdemeanours: pnmero. Ello es coherente con la tesis de Jacques Lacan
importantes. Pero nos definimos a nosotros mismos por tes para constatar lo que el síntoma tiene de repetición
esas elecciones que hemos hecho. Somos efectivamente automática, sino para discernir en lo que se repite una
2
la suma de nuestras elecciones. fijación, una determinación en la que otra opción, otra
Film de Woody Allen, cuyo título en Argentina, "Crímenes y pe en realizar su acto y su tiempo.
cados", diluye la oposición del original. Misdemeanour es "falta
La pregunta que enmarca este texto es la siguiente:
leve", a lo sumo "pecado venial", y por ello se opone nítidamente
¿cómo talla el psicoanálisis en una tradición de inves
a "crimen". La comicidad del director-guionista-actor no impide,
sin embargo, reconocer la distinción precisa en cuanto a las tigación filosófica, ética, literaria, sobre la lucha entre
elecciones o posiciones morales entre el criminal y el que se determinación y libre albedrío, libre albedrío de la vo-
siente culpable. . Juntad, free will?
2 "We are all faced throughout our lives with agonizing decisions,
are on lesser points, but we define ourselves by the choices we 3 Jacques Lacan, "L'acte psychanalytique. Reseña del seminario
have made. We are, in fact, the sum total of our choicea". 1967-1968", en: Autres Écrits, París, Seuil, 2005, p. 3 8 1 .
•
Si bien ya en Aristóteles encontramos la noción de acto y la necesidad de la gracia divina, no fue la única que
voluntario-cuando actúo espontáneamente y no por com concibió el cristianismo. En la época de san Agustín,
pulsión exterior, cuando actúo sabiendo lo que hago-, Pelagio, un monje británico que vivió entre 360 y 425,
es Agustín de Hipona quien introduce, en la alta Edad sostuvo la idea estrictamente contraria: el pecado es algo
Media, la idea de libero arbitrio, libre albedrío o arbitraje que se comete, sí, pero no se hereda ni se transmite. El
de la voluntad, una suerte de asociación de la esponta pecado de Adán es un ejemplo -un mal ejemplo, sin
neidad del acto con la razón. Asociación crucial, porque duda-, pero no es la caída original que afecta a todos los
en ella se funda la responsabilidad del individuo ante las humanos. El pecado está en la naturaleza del hombre,
leyes morales, penales y divinas, según explicará siglos que tampoco necesita de la gracia para salvarse. Esta
después Tomás de Aquino, precisando que el libre albedrío concepción optimista respecto de la libertad del albedrío
se manifiesta en un tipo especial de acto, la elección, que del hombre implica que la intervención de la Iglesia no
es su actus proprius. La elección es decidirse entre dos o es indispensable para la salvación. Varios concilios de
varias opciones posibles, es el ejercicio de la capacidad esa época lo condenaron. Particularmente concluyente
Según la elaboración patrística, negar el libre albedrío es herético. El término "herético" es una palabra que
es inmoral, contrario a toda ética, ya que destruye el habla aquí con propiedad, en tanto procede del vocablo
principio mismo de la responsabilidad. Ahora bien, ella griego airesis, "elección". Es herético quien elige, y sobre
también considera inmoral la idea de que el hombre está todo quien lo hace sin los condicionamientos supuestos
judeocristiana, en la que la elección se refiere al pecado Otro punto del debate medieval sobre el libre albedrío,
como rebelión respecto del programa de Dios, y en la que del cual el psicoanálisis puede extraer consecuencias,
se considera que el pecado se elige de modo tal que no es formulado por Anido Boecio en su De consolatione
sólo se comete, sino que antes de ser cometido, y como philosophiae. Este texto fue redactado en condiciones en
su condición, se transmite y se hereda. Esta tradición que al autor parecía quedarle un muy estrecho margen
supone que hay un pecado previo, originario, que hace de libertad: filósofo, pero también político, nacido en
posible el arbitraje de la voluntad que, para poder deci Roma, donde había sido un ministro poderoso, lo escribe
para contrarrestar la compulsión que puede inducir 4 Lacan se valió de una homofonía ttanslingüistica para enseñar a
mo estos favores tomarán el nombre de "gracia" divina, cuarta consistencia que usualmente está dada para el humano
por Lutero en el inicio de la Reforma. se puede prescindir de él, a condición de servirse de él.
8 ¡ El sujeto contemporáneo: una perspectiua analítico-filosófica
Predetenninación y libertad electiua / 9
en lo que dice, a decir verdad, una gran libertad. No es tamente esa hipótesis: que no soñamos solamente
que esté encadenado por el rigor de sus asociaciones: cuando dormimos.
10
bocan en una palabra libre, en una palabra plena que En las ne u rosis encontramos diversas formas de
La invocación de Lacan a Dios no es aquí casual; es cia subjetiva desorientada, el tomar la angustia como
realiza cuando el sujeto dice algo que está por fuera del
He hablado de entereza e integridad como categorías más o menos rápidamente con los de otras etnias. Por
éticas y no ontológicas, ya que no dependen de una es otra parte, no hay poder imperial que produzca ejes
tabilidad, menos aun de una eternidad del ser. Quisiera identitarios de suplencia, como en Estados Unidos.
Hay, al menos, dos fuentes causales diferentes en lo Buenos Aires, a menudo sorprendente para el europeo,
que se llama "identidad". Por una parte, tenemos todo lo habituado a una cierta uniformidad de estilo a nivel lo
el sujeto. Los mecanismos freudianos de la identificación como consecuencia de la labilidad de las identificaciones
resumen buena parte de tales determinaciones sociales socia les, y la identidad es a menudo puesta en cuestión
una comunidad adquiera en ella su Ideal del yo, sus dad- hace del argentino un analizante en potencia, si
no en acto.
referencias míticas, etc. Ahora bien, ya que estas formas
clásicas de la identificación nunca se consolidaron en En tanto que psicoanalista que trabaja en Buenos
Buenos Aires, debo decir que mi práctica psicoanalítica Aires, soy especialista en crisis de identidad, con deter
se desarrolla en una ciudad donde la crisis de identidad minación social y económica; incluso dirijo un servicio
tado de crisis -que explica en alguna medida el éxito de la crisis económica y social de 2 0 0 1 . Y, sin embar
la exterminación casi total de las civilizaciones locales étnicas o culturales, como de la posición tomada por
por los conquistadores españoles y por los militares del el ser hablante frente a algunos acontecimientos muy
produjo una mezcla de etnias y de culturas diversas, sin sino con lo singular. Se presentan, en la experiencia,
En Buenos Aires, el analizante típico tiene su abuelo Les propongo reflexionar sucintamente sobre estas
liano del norte y su abuela, si no es calabresa o siciliana, nosotros, los analistas, no recibimos al analizante sino
es turca. Los alemanes, los irlandeses, los franceses, los en tanto ser capaz de elección. No tratamos autómatas,
14 Este capítulo fue la base del trabajo presentado en diciembre de decisivo, de responder sí o no a lo que se quiere. Y en
2007 en París, en las Jornadas de la Escuela de los Foros del este punto no importa tanto que ubique el deseo como
Campo Lacaníano de Francia, con el título: Choix qui fixent une
viniendo del Otro o crea reconocerlo como propio. Lo
identité.
16 ¡ El sujeto contemporáneo: una perspectiva analltico-filosófica Predeterminación y libertad electiva/ 17
que del ser decide, llamémosle voluntad, incluso free un sentido que debemos precisar, ha intervenido en ese
will, en este punto acotado pero crucial, es el decir sí o traumatismo en tanto ser capaz de elección.
no al deseo en juego. E incluso lo que sucede por azar, no Una analizante encuentra, casi al término de la explo
tiene la misma estructura, en su caso, que en el de un ración de las coordenadas inconscientes de su síntoma
ser no capaz de elección. este recuerdo que ella refiere en análisis por primera ve;
16 Sigmund Freud, Mis tesis sobre el papel de la sexualtdad en la 17 Elegir proviene del Iatin eligo, extraer, sacar una parte; que esa
etiología de las neurosis, en: Obras completas, vol. 7, Buenos parte puede ser la que uno prefiere, es mejor reflejado por el
Aires, Amorrortu, 1979. equivalente francés choisir, que procede del gótico gustar. Elegir
18 ¡ El sujeto contemporáneo: una perspectiva analttico-filosófica Predeterminación y libertad electiva / 19
La clínica Jreudiana del autorreproche pers. Por ello al discurso legal se le plantea a menudo
Este trauma, que afecta al ser en tanto capaz de �legir, en el autorreproche. Su posición fundamental se define
es el núcleo de lo que Freud llama elección de neurosis. Les a partir de este unglauben, este no creer forclusivo que
recuerdo que la primera nosología propiamente psicoana precede y estructura sus síntomas. La falta es a tal punto
lítica, que en esencia es también la última, se apoya en la del Otro, que amerita su eliminación, en tanto que Otro
elección de trauma y en la reacción del ser frente a este. verdadero.
No es por nada que se trata de una nosología elaborada Al respecto, a diferencia del paranoico y de la histé
sobre la clínica freudiana del autorreproche. rica, el obsesivo se siente culpable, tiene conciencia,
La histérica dice haber sufrido pasivamente el mo
propiamente hablando, de su participación activa en el
mento del trauma, una vez, dos veces, siempre inocente.
momento traumático. Eso le gustó, como a la paciente
Por supuesto que es una inocencia dialectizab'.e, ya que recién mencionada, y como el hombre de las ratas, que
detrás de los reproches dirigidos al Otro e s t á n , en su
puede expresarlo muy sinceramente en el relato de los
caso los autorreproches. Freud Jo explica en el historial acontecimientos de su infancia.
passibéte, no tan tonta; ella oculta el ser que por el verbo Momentos de elección que preceden
9
se asegura en la voz media" y no en el sujeto. ' al mecanismo
El paranoico también es inocente, pero de otro mod?.
su inocencia no es igualmente dialéctica; ella es, mas La hipótesis del inconsciente permite suponer que las
bien, incorregible, para emplear el término de Karl Jas- elecciones del ser hablante no necesitan ser conscientes
La.can del verbo: "el verbo se define por ser un significante no tan saber", discernidas por Freud en cada uno de sus casos
tonto [pas si béie] -es necesario escribir eso e� una p�abra
y en cada uno de los tipos clínicos que p r o p u so , dan
pasiuidad ¡passibétej, no tan tonto íbéte es =»: bestia/ co�o
cuenta de que ese mecanismo está precedido por una
los otros sin duda, que hace el pasaje de un sujeto a su propia
instancia, un momento de elección. En el hombre de los
división (¿activo o pasivo?) en el goce, y es menos tonto au�
cuando esta división la determina en disyunción, de modo que el lobos, Freud se encuentra, además, con que en un mismo
19 Por el verbo, por lo que conlleva en algunos casos de performatívo, la acepta, a cambio de una satisfacción anal substitu
el ser se conjuga con el lenguaje. El sujeto puede ser golpead_o tiva; además, entre sus capacidades está la de activar
pasivamente por el significante golpeador, pero en ese caso el
una tercera posición respecto de la castración, la más
se ausenta en tanto que ser capaz de elección. La parousia del
antigua: una desestimación (Verwefung), consistente en
ser no comienza sino con la voz media -una pasividad passibete,
no tan tonta- ya que por ella se afirma en la existe�c.ia, por �n retirar todo juicio acerca de su realidad objetiva.
loquor que le da la posibilidad, incluso en las cond1c1��es mas Quisiera señalar, con mayor detalle, tres momentos
extrt'mas de decir si o no a lo que le sucede, y también de no
electivos en el historial del hombre de las ratas, ya que,
el tr nade (cf., en el apartado "'Asegurar la identidad fuera del
en la prolija reconstrucción que hace Freud con el anali-
.._,811111', tl cuo referido por Ventoso).
20 / El sujeto contempordneo: una perspectiva analítico-filosófica
Predetenninación y libertad electiva/ 21
pudo entonces tocar su sexo y su vientre, que le pareció Asegurar la identidad fuera del Otro
curioso -esto es, interesante, digno de ser atendido-.
No es el genital, sino el vientre, lo que le parece curioso. Un psicoanálisis puede ser concebido entonces
Desde entonces, queda para él una curiosidad ardiente, como un trabajo de discernimiento y de pr�ducción d�
atormentadora, por ver el cuerpo femenino. Todo esto algunas elecciones del parlétre, que fijan, como destino
precede el momento de constitución de su síntoma pri (de stare, "fijarse, mantenerse parado, sólidamente"),
mario: la idea obsesiva de que sus padres adivinarían las coordenadas de su identidad. Las buenas reseñas
sus pensamientos. El verbo alemán es erraten, que clínicas del psicoanálisis desde Freud nos enseñan sobre
en adelante va a diseminarse como Komplexreizwort lo que tiene de determinante la posición tomada por el
Ratten, en las falsas deudas de 3,80 coronas que evocan cuando ella decide respecto del traumatismo vivido en¡�
las deudas impagas del padre, jugador empedernido infancia, y precede los mecanismos de la neurosis dando
(Spielratte}, y sobre todo en las elecciones malogradas aitia (causa) a su etiopatogénesis. En el otro e�tremo
en cuanto al matrimonio (Heirat). la �laboración analítica del síntoma muestra que, má�
Todo esto precede el segundo momento electivo funda aca de lo que tiene de típico, más acá de la variedad de
mental, el desencadenamiento de la neurosis del joven sus máscaras proteicas, hubo, hay y habrá ese núcleo
universitario. En efecto, esta neurosis se desencadena resistente a la interpretación, ese rasgo conservador
de modo clínicamente manifiesto cuando quiere elegir sobre el cual se produce lo incurable, donde el acto
mujer. No pretende optar, como su padre, por la mujer analítico encuentra su fin propio. 21
rica y no amada, pero tampoco se decide por su amada Juan Ventoso, psicoanalista que trabaja en Buenos
pobre. Elige no elegir y enferma a causa de eso, afirma Aires,2' ha destacado el beneficio terapéutico que consti
Freud taxativamente. De modo que la imposibilidad de tuye la producción analítica del síntoma. Relata un breve
elegir no es consecuencia de la enfermedad, sino que es tramo de análisis que permitió a la analizan te encontrar
el no elegir lo que la ocasiona; el aparente resultado es, en en su historia, y reformular, las primeras elecciones, irre
verdad, el propósito de ella. No trabaja más, no estudia versibles, identitarias, fuera del Otro desde el comienzo.
En tercer lugar, su síntoma fundamental es también 20 Jacques Lacan, Escritos 1, México, Siglo XXI, 1994.
una cuestión de elección: se trata de la duda que mar 21 Jacques Lacan, "L'acte psychanalytique. Reseña del seminario
c-n sus pensamientos y sus acciones, la duda que es la 1967-1968", en: Autres Écrits, París, Seuil, 2005, p. 375.
Estas han fijado su estrategia sintomática ante el Otro, pasado, para encontrar una opción nueva en la que el
así como el agujero por el que podría elegir y realizar ser, si quiere, puede darse una identidad de separacióri.P
singularmente su destino, con una resolución que tal a partir de una elección que interrumpe todo encade
Se trata de una histérica para quien la violación rei La decisión del ser, así revisitada, permite una clínica
terada por un primo militar, que ella cubrió con su si diferencial, que está en vías de construirse en el campo
lencio cómplice, solo dejó aparentemente cuestiones de lacaniano: entre el sujeto que padece la mecánica del
tipo "¿cómo es posible que mis padres no se hayan dado síntoma, y el ser que, por su destitución como sujeto,
cuenta?", y respuestas del estilo "mi padre era alcohólico, se resuelve a gozar del deseo del Otro, de modos más o
dre, y yo era muy pequeña para hablar". Solo cuando su El psicoanálisis permite conmutar lo que inicialmente
hermana le confesó que también ella había pasado por la se presenta como elección forzada y como identificación
misma experiencia, ella se decidió a hablar. Primero, en alienada al Otro (que elimina entonces a este en tanto
su infancia, parando rudamente a su primo; luego, en su que Otro). en otro modo de elegir. En esta oportunidad,
análisis, donde ella recuperó su capacidad de decir "no", a el parlétre puede alcanzar una identidad que fue fijada
partir del momento en que ella situó su síntoma primario: en el momento de elección de trauma, apoyándose sobre
un nudo en la garganta, que la acompañó siempre desde la heteridad del Otro, que ex-siste por no reconocer lo
la época del trauma, sin que se diese cuenta; un nudo que que el síntoma tiene de pulsional imposible de escuchar,
la incomodaba desde el momento en que se despertaba 8 O D. Este no reconocimiento, esta falla de interpreta
hasta la noche, que le impedía decir "no", separarse de ción (nicht erraten) del Otro, es inherente a la definición
su marido o de las situaciones que sentía que la ataban, de síntoma en psicoanálisis, en nuestro psicoanálisis.
e incluso hablar del nudo mismo. Entonces, cuando ella Es el único caso para el cual Lacan reserva el término
dice, con entusiasmo y alivio, al analista "¡El nudo en "conocimiento": hay conocimiento en el síntoma, en ese
la garganta desapareció!", este le pregunta sorprendido: punto preciso en que no podría haber reconocimiento
"¿De qué nudo en la garganta habla?". de parte del Otro. No tiene nada, decía el médico en la
Este síntoma le fue revelado por un sueño en el que época de Jean-Martin Charcot, no hay ya interpretación
ella se ahorcaba hasta despertarse, pero el despertar era posible para este síntoma, concluye el analizante en el
menzar estudios suspendidos desde hacía largo tiempo 24 John L. Austin, Palabras y acciones, Paidós, Buenos Aires, 1 9 7 1 .
Austin explica que no hay acto del acto, que no hay acto que pue
por procrastinación neurótica.
da ser consecuencia de otro acto; el acto produce entonces una
El efecto de un psicoanálisis no consiste en suprimir
ruptura en todo encadenamiento causal. Por eso el acto mínimo
el síntoma, aunque pueda aliviarlo, sino en reformular
la elección, es la posibilidad de una existencia no automática, no
Tanto Boecio, en De consolatione philosophiae, como tema de la sexualidad en la infancia. No obstante, hay en
Soren Kierkegaard, en su Concepto de la angustia, tu todo esto algo más importante qué considerar, éticamen
vieron el presentimiento de que es en el pecado, como te más conducente, que horrorizarse ante la idea de que
experiencia originaria del ser capaz de elegir, y de elegir a un niño varón, futuro obsesivo -y no homosexual-,
caer fuera del alcance del saber del Otro, que se produce puede haberle gustado, a los 5 ó 6 años, su experiencia
la identidad de Otro al que no conocemos, es porque Me refiero a un niño que prefirió eso, a dormir la siesta
suponemos que la identidad que se ha dado en la ex estival obligatoria entre los padres transpirados y as
periencia traumática es finalmente más estable, más fixiantes. Se escapó de la cama, se fue con sus hermanos
sólida que la que surge de las identificaciones con rasgos mayores al patio trasero de la casa. Además de lo que
del Otro; es sobre aquella donde se apoya la certeza del en este caso testimonió la victima, podemos presumir
acto psicoanalítico. En el caso del neurótico -<¡ue, a lo que usualmente, casi de manera monótona, mueve
6
diferencia del filósofo, no logra curarse a si mismo, no al victimario,2 y podemos conjeturar que el hermano
se autoayuda-, por las virtudes de nuestro método y mayor, ya perverso en su pubertad, no se excitaba sólo
de nuestro deseo que exalta la libertad de decir, noso por el contacto con el agujero "natural" que le ofrece el
tros, analistas, podemos dar al ser lo que es del ser: su cuerpo de su hermanito menor, sino con la angustia que
libertad de optar en cuanto al genoi hoios esi (llega a ser afecta a ese pequeño cuerpo por su empleo antinatural,
5
lo que tú eres),2 por el cual el significante lo intima no pero sobre todo, con ese otro momento en que la angustia
como significado, sino como causa de vida. La Matrix cede el paso a la satisfacción. Ese es el punto decisivo:
de lenguaje que lo envuelve, lo parasita y lo soporta, lo ese instante preciso en que su hermano menor elige
necesita para seguir viva. Necesita de su enérgeia, de quedarse allí, no gritar, no volver con sus padres, elige
Los términos y la lógica de la elección precisamente eso, lo que le interesa forzar al violador-y sin
Una objeción que puede suscitar la argumentación veces basta con un roce sutil, una mirada penetrante.
París, Seuil, 1966, p. 177. 26 Jacques Lacan, Kant avec Sade, Paris, Seuil, 1966.
' ' .
26 / El sujeto contemporáneo: una perspectiva analítico-filosófica Predeterminación y libertad electiva/ 27
no estar en condiciones de decidir nada. Sin embargo, a Ese efecto de sujeto, determinado por el par significante,
la hora de reformular la constitución del sujeto, Lacan se incide sobre el viviente, cortando el ciclo vital del siguiente
vio forzado a hacerlo en términos de elecciones. ¿Se vio modo: suplanta el instinto natural por una demanda, un
forzado o eligió hacerlo? Tal vez la pregunta es indecidi SI que opera como exigencia significante que impacta, en
ble, o mejor dicho, tal vez responde a un indecidible que el mejor de los casos, sobre el cuerpo funcionando como
es esencial a la estructura explorada. El hecho es que S2, como lugar de inscripción simbólica -es el principio
a las que llamó alienación y separación. En la primera Digo "en el mejor de los casos", porque el efecto de sujeto
se trata de elección forzada, en la segunda no. del lenguaje suele interesar al ser hablante de modo dife
¿En qué consiste la alienación para Lacan? Es algo que rente que al perro de Iván Pávlov, por suerte, ya que por ser
se produce por un forzamiento que está ya en el origen de hablante puede, en principio, responder, y tal vez también
la estructuración del parléire en tanto sujeto: este es lo que comenzar a interrogar el deseo del Otro que, como veremos,
un significante representa para otro significante. No para puede deslizarse entre S 1 y S2. El perro de Pávlov responde
otro sujeto, ni para Otro divino, tampoco para la madre como organismo, no discierne entre S 1 y S2, no sitúa el
ni el padre, sino para otro significante. En la articulación intervalo entre ellos; el ser hablante, en cambio, da cuerpo
con ese otro significante, el sujeto estará entonces sólo al S2, bajo el cual tiene la opción mínima de desaparecer.
representado, es decir, ausente, desaparecido bajo ese Con su fading (desvanecimiento), el sujeto protege el orga
significante binario que viene a funcionar como su Vors nismo del efecto directo del significante, efecto injuriante,
representación,justo allí donde no hay representación, sino Es esta coincidencia-que el efecto de sujeto se produzca
mera exigencia pulsional de lenguaje, demanda -dicho en un ser hablante que puede llegar a responder- lo que
La alienación no se produce solo como efecto del en sin embargo, ha de acomodarse a la forma de una elec
cuentro del ser con el lenguaje. Tanto para que ella se ción. Lacan parece haber advertido que el ser hablante es
produzca, como para ceñirla conceptualmente, es necesario propiamente res eligens, por la naturaleza misma de su
operar con un par de significantes. Dos significantes, ni interacción de viviente con el lenguaje. Lo que lo diferencia
más ni menos, porque si hay tres o más, el deslizamiento de cualquier otro sujeto de lenguaje es su aptitud para
del sujeto de un significante al otro es circular, y algo acomodar su existencia en los intersticios de un lenguaje
de su estructura resulta escamoteado: su división pre equívoco que lo provoca a responder en tanto eligens; un
cisamente." Y si hay solo un significante, no hay sujeto lenguaje que, para él, incluso en la situación de máxima
representado para . . . ; puede haber ser, puede haber acto alienación, se diferencia de un programa, en que no decide
27 Reseñamos en este capítulo algunos desarrollos de La.can sobre Fantasías y ejercicio de la libertad
alienación y separación que se encuentran principalmente en
también lo hallamos, en la actualidad, los psicoanalistas, ejercicio social; por otro, la libertad inherente a la locura,
que la libertad suele manifestarse en diferentes tipos clíni en tanto ruptura de todo lazo veridico con el Otro. Entre
cos, bajo la forma de un discurso interior más bien delirante, ambos están los diferentes lazos sociales, donde se pro
dificil de compartir. Tal "discurso" solo irónicamente puede duce el encuentro efectivo con el deseo del Otro, donde
ser llamado así, ya que no constituye ningún lazo social; es posible salir de la alienación por vía de separación.
no llevamos a una práctica socialmente inscrita sino un Pero antes de pasar a ello, recordemos algunos de los
porcentaje ínfimo de la osadía, el desenfreno, la libertad ejemplos que Lacan propone a partir de la Fenomenolo
de acción que fantaseamos en nuestros pensamientos. El gía del espíritu de Hegel, para mostrar que, aun forzada,
efecto de esa ensoñación libertaria es el contrario: tanta una elección es una elección, que determina posiciones
libertad, por el hecho mismo de permanecer como ensoña
subjetivas diferentes.
ción, induce el sometimiento a la normalidad gris que rige
nuestras acciones, en otra parte donde no somos tan libres, - La entrada en la vía de la esclavitud: conminado a elegir
en el marco del sentido común. La dilación en el actuar en entre la libertad y la vida, el esclavo elige conservar la vida
cuentra su sucedáneo en el demorarse en el pensar, según al precio de la libertad. Esa elección es posiblemente su
enseña Freud en su historial sobre el hombre de las ratas; última elección, ya que en ella renuncia a su condición
mientras pensamos esa libertad, no la ejercemos. de hombre libre.
Por otra parte, los lazos sociales reales, si bien suelen
-La realización de la esencia del amo se ilustra en el
brindar, en mayor medida, alguna posibilidad de libertad
momento del Terror que sigue a la Revolución Francesa
efectiva, son, sin embargo, lazos, amarras sociales, en los
(¡libertad, igualdad, fraternidad!). Ante la elección forza
cuales la libertad admite una práctica real, pero limitada.
da por la alternativa: libertad o muerte, el amo conserva
Nuestra realidad, en tanto socialmente estructurada, con
las dos, ya que si elige la libertad, es la libertad de
siste en una cierta atadura, un nudo, borromeo, pero nudo
morir, y si elige la muerte, en ese momento demuestra
al fin. Y si en algún momento escuchamos el ruido de rotas
que, incluso en tal circunstancia extrema, tiene aún la
cadenas, es posible que estemos locos; sobre todo, cuando
libertad de elegir. En ese sentido, el Terror realiza su
Jo escuchamos solo nosotros; no suele ser el sonido emble
esencia de amo-ya Aristóteles, en su Política, lo definía
mático de la revolución, sino un índice de locura. El precio
como hombre libre--. Esta alternativa, la libertad o la
de la libertad, desde esta perspectiva, que es la lacaniana,
muerte, fue figurada por Jean-Baptiste Regnault, en su
es el "desencadenamiento", por el que el ser hablante se
libera del lazo social, al precio de la locura. Esa libertad pintura homónima. A la izquierda, la libertad se quita
no es fantasía, pero no está al alcance de cualquiera; no el gorro frigio, para mostrar, sobre su bello rostro, la
cualquiera se permite un ejercicio efectivo de tal libertad diadema de la razón; a la derecha, la muerte tiene en
28
fuera del lazo social; su costo suele ser excesivo. su mano la corona de laureles, emblema de gloria para
28 Véase, al respecto, Gabriel Lombardi, "Cantor, la libertad", An A partir de esta lectura de la alienación en Hegel, Lacan
tropos moderno, [en línea], disponible en: http:/ /www.antropos discierne distintas "posiciones subjetivas del ser". Con ellas
moderno.com/antro-articulo.php?id_articulo=494, consulta:
muestra que, aun en la situación de elección forzada por
abril 26 de 2007.
30 / El sujeto contemporáneo: una perspectiva analftico·filosófica
Predeterminación y libertad electiva/ 31
y permita el fading del sujeto. Esa negativa a "dar cuerpo" Si en la alienación, la elección se presenta como forza
favorece la injuria directa del significante al organismo; sin da, entre significantes, y sin Otro verdadero (en esa fase
la protección del cuerpo como 82, el organismo se lesiona, no hay más Otro que otro significante), la constitución
por la incidencia holofrástica del significante. del sujeto no concluye sino en la separación, donde la
La psicosis en el débil mental y la paranoia son otros iniciativa queda de su lado, en respuesta al deseo del
ejemplos que propone Lacan: en ellos, el ser se petrifica, Otro que se ha deslizado entre S I y 82. El sujeto, antes
como soldadura de Sl y 82, haciendo fracasar el sistema desaparecido bajo el 82, ahora "ataca la cadena en su
por el que el par significante instaura, en la dimensión punto de intervalo"," en respuesta aloque en ese inter
humana, la creencia, basada en una oscilación entre S 1 valo entre significantes encuentra como deseo del Otro
y 82. Al haber holofrase, en lugar del par S l - 8 2 , falta ahora sí verdadero. La carencia de ser producida por su
uno de los términos de la creencia, y lo que se instala es fading, bajo el significante binario, interseca ahora con
que se funda la certeza del paranoico. Por la separación, dice Lacan, el sujeto halla el punto
Ahora bien, ¿son estas distintas "posiciones" el resul débil del par primitivo de la articulación significante,
mos, en Lacan, una prudencia que concierne a la ética tanto que su deseo es una incógnita, en ese punto de falta
del psicoanálisis, dejando abierta la pregunta acerca de si se constituye el deseo del sujeto. En un proceso que no
la instauración del mecanismo no fue precedida por una es sin engaños, que no es sin esta torsión fundamental
31 !bid., p. 843.
permite liberarse, ahora sí, del efecto afanisico del 82, el encarnizamiento para lograrlo"." Esta operación, este
significante binario que no lo representa, que solamente es acto, no se produce sin el Otro. La alienación implica
el lugar de desvanecimiento de su presencia de viviente. la eliminación del Otro; no así la separación, que toma
Desde que entró bajo la eficacia del par significante, del Otro lo más interesante, su deseo. Separarse es no
el ser hablante ya no podrá volver a ser meramente un tomar del Otro sino su carencia, su deseo, y soltarse de
viviente; una parte suya ha sido captada y puesta en otras adherencias para con él.
fading por el forzamiento del lenguaje. Pero la separa El neurótico fantasea con la libertad, pero continúa
ción le permite, ahora, una reaparición; lo que perdió en su posición de afánisis, de sujeto tachado (S), bajo el
en la alienación puede ahora hacerlo jugar en el deseo peso de la demanda. La cura de la neurosis pasa por la
del Otro que, curiosamente, se interesa en esa suerte separación, en tanto ejercicio auténtico de la libertad, que
de parusía negativa que es su afánisis. arranca, al ser pulsional, del eclipse al que se somete en
Ahora, entonces, se consideran los encuentros en los la alienación. "De lo que el sujeto debe liberarse, es del
37
que, debido a la eficacia del deseo de un Otro -y acaso efecto afanísico del significante binario" , es el manifiesto
no haya otra Gracia que ese "gracias"-, podemos optar. ético de Lacan.
Ahora, ya no viene al caso decir que "estamos forzados" a Su propuesta apunta a una transformación de la rela
salir del pensamiento, a tomar partido, a poner el cuerpo ción del ser hablante con lo pulsional: mientras la pulsión
de otro modo que en la angustia irresuelta.3' Ahora, en incide solo desde el par significante, es mera demanda,
la separación, nos jugamos, queremos hacerlo, el vel sin deseo. Es para protegerse de ella que, en la separa
(o bien . . . ) de alienación se transforma en un velle, dice ción, el sujeto ataca la cadena en su punto de intervalo,
Lacan.> un querer, un ejercicio de la voluntad, en el que mostrando la utilidad clínica y práctica que comporta
lo pulsional se satisface, al articularse en acto con el reducir la cadena del significante a un par: permite ad
deseo que viene del Otro, permitiendo al sujeto zafarse vertir que lo que verdaderamente interesa en la vida del
del 82 que lo dejaba en fading. hablante mora en el intervalo entre S 1 y 82, donde el
Es notable el énfasis ético puesto por Lacan en esta ser hablante encuentra sus objetos intersticiales, objetos
operación de separación. Separarse es un parirse, en señalados por el deseo del Otro, ligeramente por fuera o
do civil, vale decir, darse una posición en el lazo social, La clínica de lo que se ciñe por intervalo, como la ousía
que solo se alcanza por decisión propia. Escribe enfáti para Aristóteles, es la verdadera clinica del psicoanálisis.
camente: "nada en la vida de nadie, desencadena más Lacan había advertido que la relación con los objetos
34 J. Lacan, "Position de l'inconscient", en: Écrits, Op. cit., pp. 842-843. 36 J. Lacan, "Position de l'inconscient", en: Écrits, Op. cit.
35 Procurar un hijo al marido. 37 J. La.can, Le Séminaire, Livre 1 1 , Les quatre concepts fondamentaux
39
que el sujeto se borra, pierde la voz justo cuando podría realice en la fase de salida de la transferencia. El deseo
38
darse el encuentro con el deseo del Otro. del analista está alli, para facilitar esa salida.
En ese movimiento, de su partición (S) el sujeto pasa a En síntesis: Freud descubrió la participación de al
su parto, dándose otra opción completamente diferente gunos mecanismos inconscientes en la producción de
a la de la elección forzada por el par significante. Un los sin tomas neuróticos. Sin embargo, el psicoanálisis
ejemplo mínimo -que no pretende la altura de E rn p é evidencia que la etiología de la neurosis no es meramente
docles arrojándose al volcán del Etna, para devolverse accidental, mecánica, orgánica,fisiológica, ni tampoco solo
un estado civil en la amada Agrigento, de la que habia un "mecanismo lingüístico"; su causa acaece en un ser
sido desterrado bajo la forma de un poderoso (el semi cap= de elección, y es, en tanto sujeto que participa de
dios que habia sabido representar otrora, con su poder una elección, que alguien resulta afectado de una neurosis.
político y su saber médico)-. Se trata aquí de una mu El método psicoanalítico permite una revisión de la elec
jer que ha permanecido mucho tiempo en la siguiente ción de la neurosis, mediante una propuesta de libertad
alternativa: "estar con mi marido me es insoportable, asociativa, de exploración interpretativa de los límites de
pero la idea de quedarme sola a los cincuenta años esa libertad, y de conclusión que reabre opciones vitales.
también me es intolerable". El analista le sugiere otra El plus de libertad con que termina el análisis suele apo
manera de presentar esta alternativa: "no seré feliz, pero yarse incluso en lo que del síntoma resta de "incurable"
tengo marido" o "mejor sola, que mal acompañada". A -esa parte de si que el sujeto conoce sin recocerse en
la sesión siguiente, cuenta que fue a la peluquería (un ello-. Como propuesta ética, va en un sentido diferente
guiño a la mirada desean te del marido, y acaso de algún al de las diversas promesas sugestivas, reeducativas,
otro hombre, por qué no). Se sintió mejor. Luego tomó farmacológicas, etc., que tratan al sujeto de la neurosis
algunas decisiones laborales, que implicaban un cambio como un ente manipulable desde el exterior.
deja al sujeto en afánisis en los momentos del deseo, y la Aquino, Tomás de, Suma teológica, Madrid, Espasa Calpe, 1966.
pulsión no encuentra otra expresión que un significante Aristóteles, Physique, Paris, Les Belles Lettres, 1973.
liberar al sujeto del efecto afanisico del binario, comenta Boecio, Anicio, La consolación de la.fil.osofia, Madrid, Alianza, 1999.
38 Jacques Lacan, Seminario Lé désir et son interprétation, inédito. de lapsychanalyse, Op. cit., p. 199.
36 / El sujeto contemporáneo: una perspectiva analítico-filosófica Predeterminación y libertad electiva/ 37
Freud, Sigmund, Apropósito de un caso de neurosis obsesiva, en: Lacan, Jacques,Le Séminaire, Livre 10, L'angoisse, Paris, Seuil,
_, Algunas notas adicionales a la interpretación de los sueños. B: _, Le Séminaire, Livre 1 1 , Les quatre concepts fondamentaux de la
La responsabilidad moral por el contenido de los sueños, en: psychanalyse, París, Seuil, 1973.
Obras completas, vol. 19, Buenos Aires, Amorrortu, 1976. _, Le Séminaire, Livre 20, "Encare", París, Seuil, 1975.
_, De la historia de una neurosis infantil, en: Obras completas, vol 17, _, Seminario 22. R.S.I., inédito.
Buenos Aires, Arnorrortu, 1976. _, "'Une pratique de bavardage', Le moment de conclure, clase del
Inhibición síntoma y angustia, en: Obras completas, vol. 20, 15 novembre 1977", Omicar?, París, vol. 19, 1979.
_, Bueno� Aires, Arnorrortu, 1976. Lispector, Clarice, Revelación de un mundo, Buenos Aires, Adriana
vol. 23, Buenos Aires, Amorrortu, 1980. Lombardi, Gabriel, "Cantor, la libertad", Antroposmodemo [en
_, Mis tesis sobre el papel de la sexualidad en la etiología de las línea), disponible en: http:/ /www.antroposmoderno.com/
rrortu, 1979. _, "Choix qui fixent une identité", Jornadas de la Escuela de los
_, Nuevas puntualizaeiones sobre las neuropsicosis de defensa, en: Foros del Campo Lacaniano, París, dic., 2007.
Obras completas, vol. 3, Buenos Aires, Amorrortu, 1981. _, Clínica y lógica de la autorreferencia, Buenos Aires, Letra a,
Viv
_, Recordar, repetir, elaborar, en: Obras completas, vol. 12, Buenos 2008.
Aires, Amorrortu, 1976. Soler, Colette, "Invariants de l'analyse fi nie", Hétérité, B uenos
Gide, André, La porte étroite, París, Mercure de France, 1959. Aires, lnternationale des F orums cole de Psychanalyse du
É
Gilson, Etienne, La pbilosophie au mayen age, París, Payot, 1976. Champ La canien, núm. 5 , 200 5 .
Hegel, Georg W. F., Science de la logique, París, Aubier, 1981. _, "La elección de neurosis", en: Finales de análisis, M anantial,
Cultura Económica, 1990. V entoso, Juan, "La producción de u n síntoma como s olución
Hodges, Andrew, Alan Turing: The Enigma, Nueva York, Simon & terapéutica", nédito.
i
Schuster, 1983.
Económica, 1993.
tial, 1988.