Las saponinas son un grupo de glucósidos oleosos, los cuales son
solubles en agua produciendo espumosidad cuando las soluciones
son agitadas. Las contienen plantas muy diversas, entre ellas el abrojo, la saponaria o jabonera, el castaño de Indias, las legumbres, la yuca, el yingseng. Garbanzos, soja y quinoa son los que más tienen, según afirman en este estudio. Actúan como un compuesto jabonoso que al cocer no se suelen eliminar pero lavando, o dejando en remojo las legumbres, y antes de cocinarlas enjuagarlas sí, desaparecen. Es la espuma que aparece en ocasiones. Las saponinas se utilizan también para fabricar jabón y como remedio natural en cantidades muy pequeñas. Las saponinas reducen la absorción del hierro, según indica este estudio, y por ello es considerada como un antinutriente (componente que puede interferir en la digestión o absorción de algunos alimentos). En ocasiones puede dar además un sabor amargo a los alimentos. Por eso las legumbres se lavan, para intentar evitar su presencia. Por eso se recomienda lavar la quinoa y dejarla en remojo frotando los granos y enjuagándolos en más ocasiones. Si no lo has hecho así no pasa nada, simplemente habrás notado un sabor más amargo. Según el FAO (Organicación de Naciones Unidas para la Alimetación y la Agricultura) el principal efecto de la saponina es afectar el nivel de colesterol en el hígado y la sangre, con lo que puede producirse un problema en la absorción de nutrientes. Aunque se sabe que la saponina es altamente tóxica para el humano cuando se administra por vía endovenosa, queda en duda su efecto por vía oral. Para Juan Manuel Portugal, especialista en terapias para mejorar la salud a través del agua y las plantas, los beneficios de la saponina son múltiples, “por sus características espumosas la saponina puede ser utilizada por los bomberos para apagar incendios. Además, la saponina se está utilizando por empresas farmacéuticas en Estados Unidos y Alemania para la producción de medicamentos quimioterapéuticos para tratar el cáncer, y también para la elaboración de esteroides”, explica. Las saponinas son el principal factor antinutricional de las semillas de quinua. Están contenidas en la cáscara y son las responsables del sabor amargo. Su contenido permite distinguir las variedades de quinua como dulces (0,11%) [11]. Sin embargo, su presencia no se restringe a las semillas, también se han detectado en las hojas de la planta (9 g/1000 g) [12] y en menos proporción en las flores y frutos [13], de manera análoga a lo reportado en plantas como la Allium nigrum L. [14], Leguminous species [15] y Agave Offoyama [16]. En estos casos, las saponinas actúan como barreras protectoras contra el ataque de patógenos y herbívoros [17], por lo que se justifica que las partes más vulnerables de la planta tales como hojas, tallos, frutos y raíces, sean los reservorios de este tipo de compuestos
Químicamente, las saponinas de quinua son una mezcla compleja
de glucósidos triterpénicos que consisten de un oligosacárido hidrofílico enlazado a una aglicona hidrofóbica que se deriva del ácido oleanólico, hederagenina, ácido fitolacagénico, ácido serjanico o ácido 3β,23,30- trihidroxi olean-12-en-28-oico
El término saponina se deriva de la palabra Latina sapo, que
significa “jabón”, lo que refleja su disposición para formar espumas estables parecidas al jabón en soluciones acuosas. El rol biológico de las saponinas no es comprendido completamente, pero generalmente son consideradas como parte del sistema de defensa de las plantas contra patógenos y herbívoros, especialmente debido a su sabor amargo. Las saponinas consisten de aglicona y azúcar, cada uno representando aproximadamente el 50% del peso total de la molécula. En la quinua, las saponinas son una mezcla compleja de glucósidos triterpénicos que se derivan de siete agliconas: ácido oleanólico, hederagenina, ácido fitolacagénico, ácido serjánico, ácido 3β-Hidroxi-23-oxo-olean-12-en-28-oico, ácido 3β-Hidroxi-27- oxo-olean-12-en-28-oico, y ácido 3β,23α,30β-Trihidroxi-olean-12- en-28-oico, mientras que los azúcares mejor representados pueden ser la arabinosa, glucosa, y galactosa. Las saponinas han sido consideradas un grave factor antinutricional debido a su actividad hemolítica, que ha contribuido a una larga controversia sobre sus funciones en los alimentos. Se cree que las saponinas pueden formar complejos con esteroles de la membrana eritrocitaria, provocando un aumento en su permeabilidad y consiguiente pérdida de hemoglobina. Los últimos estudios de su actividad biológica in vitro e in vivo han asociado las saponinas con diversos beneficios para la salud. Las numerosas actividades biológicas asociadas a las saponinas incluyen efectos antiinflamatorios, anticancerígenos, antibacteriales, antifúngicos, y antivirales. También son de interés como valiosos adyuvantes, y las primeras vacunas basadas en saponinas han sido introducidas comercialmente. Tradicionalmente, las semillas de quinua son desgastadas mecánicamente para retirar el salvado, donde se sitúan predominantemente las saponinas, o son lavadas con agua para quitar amargura antes de su uso. Durante los procesos de lavado para eliminar las saponinas amargas, también se pierden valiosos nutrientes y se puede cambiar la composición química y el perfil de los aminoácidos de las semillas de quinua. El nivel final del contenido de saponinas en semillas de quinua para consumo sigue siendo una gran preocupación en términos de su amargura y posibles efectos biológicos negativos. Se ha creado un modelo matemático basado en la segunda ley de Fick para optimizar el proceso de lixiviación de saponinas de las semillas de quinua durante el lavado con agua. Muchos estudios se han enfocado en los efectos de las diferentes variables agronómicas, como irrigación y salinidad, en los perfiles de la saponina de quinua. Se ha observado que las saponinas disminuyen en las muestras que han sido expuestas a sequía y regímenes salinos. Estos resultados sugieren que la irrigación y salinidad pueden 318 regular el contenido de saponinas de la quinua, influenciando su valor nutricional e industrial. Los estudios actuales evalúan las diferentes composiciones del contenido de saponina en siete variedades de semillas de quinua cultivada en Italia y seis variedades de quinua cultivada en Chile bajo condiciones de secano o baja irrigación. Las semillas de localidades chilenas más áridas o estresantes tienen un contenido de saponina más alto. (PDF) Saponinas. Available from: https://www.researchgate.net/publication/266969103_Saponinas [accessed Sep 18 2018].