Está en la página 1de 5

POSICIONES EXISTENCIALES

A. MI POSICIÓN EXISTENCIAL:
Haciendo revisión y análisis de mi posición existencial, puedo encontrar un antes y
un después en mi vida. Ese antes de haber llevado un proceso terapéutico y un
después del mismo.
Antes, mi posición existencial era YO ESTOY NO OK, TÚ ESTÁS NO OK. Hoy
puedo analizar con mayor certeza los orígenes de esta posición existencial, detalles,
variantes circunstanciales y encontrar profundas comparaciones a mi actual
posición existencial, la cual, hoy, pretende ser constantemente un YO ESTOY OK,
TÚ ESTÁS OK; considerando la imposible perfección de ambos estados, claro está.
Sin embargo, esta posición existencial suele sufrir desviaciones, las cuales pueden
ser temporales o circunstanciales, transformándose en ocasiones en un YO ESTOY
OK; TÚ ESTÁS NO OK.
A continuación detallaré los tres estados.
1) YO ESTOY NO OK, TÚ ESTÁS NO OK (Vida pasada)
Una característica en mi infancia, fue la sobreprotección de mi madre;
sumado a esto la partida de mi padre del hogar por separación y posterior
divorcio, la figura paternal que predominó sobre mí fue la de mamá. Sumada
a esa sobreprotección, un signo muy marcado en mi madre fue (y siguen
siendo pero en menor medida) el rol de víctima; sin obviar las razones las
cuales la pudieron llevar a tomar esa posición existencial, las transacciones
que había entre ella y yo durante mis primeros diez años de vida estuvieron
marcadas por temores, miedos y profundos sentimientos de pérdida, de
rechazo y pensamientos de invalidez, de incapacidad para realizar cosas,
además de carencias, de tiempo, de afecto, de reconocimiento entre otras
producto de la ausencia de la figura paternal y el tiempo que dedicaba mi
madre al trabajo. Ello, considero me llevó a tomar esta postura existencial,
en la que sentía que no podía valerme por sí solo y necesitaba siempre de
mamá, aun no estando ella presente físicamente, su presencia en relación a
su pensar, sentir y actuar debía estar marcada en la mía. Así mismo, sentir
que los demás están en contra de uno, que no le hacen bien sino casi siempre
el mal, sentirse rechazado, ignorado o menos que los demás resumen mi
vida pasada y la encierran en esta posición existencial.
2) YO ESTOY OK, TÚ ESTÁS OK
Superando mis propios pronósticos y expectativas de recuperación y cambio
de posición existencial, marco de referencia o como diría (ni bien sentí los
cambios en mi vida) mi modo de ver la vida y de vivirla, modifiqué
prácticamente toda forma de pensar, sentir y actuar en mí. Hice consciente
de todo lo que estaba mal y me limitaba, e hice un giro completo para poder
sentirme bien con los demás, pero sobre todo conmigo mismo. De ahí que
hoy en día mantengo relaciones interpersonales duraderas, de calidad y
sobre todo puedo disfrutar de ellas; además me valgo por mí mismo y disfruto
de estar solo. Ayudo a otras personas sin esperar nada a cambio la mayoría
de veces, y, pretendo en todo momento actuar de manera madura (con mi
Yo Adulto), manteniéndome en constante aprendizaje y ayudar a los demás
a superar sus dificultades como yo lo hice.
3) YO ESTOY OK, TÚ ESTÁS NO OK
Sin embargo, cambiar prácticamente de vida, no es tan fácil; siempre quedan
rezagos de la vida anterior: Es por ello que cuando algo en el día o la semana
me recuerda a como era yo antes, se activan en mí algunos pensamientos
del pasado; formas de sentir y de actuar que, en la mayoría de ocasiones son
traídas a mi consciente por las personas que me rodean, cuando no es así;
me cuesta un poco pero termino siendo yo solo, quien se da cuenta que no
estoy actuando como debo, analizo la situación y busco siempre mejorar.
Características de este estado en mi vida actual, son por ejemplo el querer
tener siempre la razón, el minimizar en ocasiones posturas o argumentos de
otras personas, querer hacer las cosas a mi modo y lastimas a veces siendo
demasiado frío o directo. Las causas de esto las tengo muy en claro, puedo
relacionarlas muchas veces como un mecanismo de defensa que me impide
sentirme como me sentí antes, de una manera equivocada o desesperada
claro está. Sin embargo, lo positivo de esto es que cuando sucede, me sirve
de alarma, para darme cuenta que debo tomar una pausa y autoanalizarme.
B. CUADRO DE SÍNTESIS DE LOS JUEGOS PSICOLÓGICOS
LO BUENO Manifiesta un Son maniobras Son Ofrece de Ayuda a dar El origen de Los padres
deseo inconscientes que entretenidos, modo salida a los juegos se enseñan a sus
inconsciente de rigen nuestras dinámicos resumido su falsas busca en la hijos a jugar
autoprotección vidas. pero no biografía, emociones infancia. cuando aún sin
(defensa) Son una forma de siempre se nivel acumuladas darse cuenta.
vida aprendida. disfrutan. emocional y
psicológico.

LO MALO A largo plazo Jugamos todo el Son Algo El objetivo es El recurso al Querer obtener
genera daño a tiempo, poder dramáticos, aceptable a buscar, juego es caricias puede
uno mismo y a perder pareja, graves y nivel social y caricias, así para llevar a la
los que nos competencias con hasta pueden algo oculto sean extorsionar desesperación,
rodean. amigos. terminar en la en el nivel negativas la caricias. depresión o
Nos limitan. Hay cambios de muerte o psicológico. ganancia y suicidio.
roles y papeles pueden llegar las caricias.
dentro del a herir
triángulo
dramático.
LO Esconden La esencia del El niño natural Se juega Maniobra el Los juegos La renuncia a
INTERESANTE emociones juego radica en no los disfruta desde los niño son pautas dar caricias
ocultas que que hay y el adulto no estados del adaptado que se negativas para
merecen ser características de está enterado Yo negativo. negativo, aprenden en uno mismo y
tomadas en transacciones del juego. eliminando el la infancia, para los demás
cuenta. complementarias estado del pasándola es un paso
y ulteriores a nivel Yo. de básico para
social que generación dejar de jugar.
vislumbran a nivel en
psicológico. generación.
EJERCICIOS

1. El argumento individual
Las primeras expresiones faciales que vienen a mi mente son las de un bebé,
es lo que probablemente imagine recordar; puesto que no recuerdo otra
expresión facial. Al preguntarme de quién son esas expresiones faciales,
presumo que son las mías, viéndome en un espejo, algo fantasioso claro.
Los mensajes verbales que recuerdo de mis padres, son: de mi padre,
recuerdo su dureza, su creatividad, envuelta en mensajes no verbales como
gestos de enojo, fruncir el ceño, levantar la voz; así como reír fuerte, cantar
con mucho sentimiento y la fuerza con la que realizaba sus actividades. De
mi madre recuerdo su bajo tono de voz, su sonrisa dulce, su llanto, su miedo,
su pasividad.
Los sentimientos que surgen en mí son una mezcla de nostalgia, alegría, paz,
un poco de miedo y al mismo tiempo tristeza. Diría que en parte agradan pero
también son un poco incómodos. Los mensajes que comunican aquellas
expresiones no verbales son en muchos casos opuestos, por un lado
encuentro fortaleza, valentía, determinación, actividad; y por el otro, dulzura,
miedo, bondad, dolor y pasividad.
2. Mensajes verbales en su guion
Imaginando las palabras de mi familia, recuerdo más las de mi madre; y dicen
respecto a mi valía, que tenga cuidado, que tal vez mejor no lo haga todavía;
respecto a mis habilidades, que soy muy hábil y que está orgullosa de mí,
pero yo no siento que lo disfruten; respecto a mi moral, encuentro que soy
hijo de Dios y le debo todo a él; incluso aunque yo no esté de acuerdo; con
respecto a mi sexualidad, me dicen lo que es bueno y lo que es malo, aun
así yo crea lo contrario; con respecto a mi aspecto, me dicen que soy muy
delgado y muy “chato”, que eso está mal; con respecto a mi inteligencia, es
lo que más resalta y presume ante otras personas; pero yo no lo siento
sincero; con respecto a mi salud, encuentro que “debo estar enfermo” o debo
“tener algo” porque no crezco ni subo de peso; y con respecto a mi futuro,
dicen que seré exitoso y próspero, pero yo tampoco les creo.
Mi padre opinaría (en el pasado) de mí: Un niño inteligente, hijo de Dios y
próximo a seguir los caminos de su padre en la Iglesia.
MI padre opinaría (en el pasado) de mí: Un niño inteligente y hábil, que tiene
algunas deficiencias en su salud y por eso es así, y que debe tener cuidado
por el mundo en el que vive.
Actualmente ambos opinan algo muy distinto, y mi evaluación personal se
relaciona con esa opinión del pasado en algunas ocasionas, cuando siento
que no tengo el control de la situación.
3. Identificación de su rol
Luego de escuchar la parábola, reconozco que he sido mantenido y
domesticado durante mi infancia y hasta adolescencia por pensamientos
socioculturales de mi madre y religiosos de mi padre. Crecí cuando niño entre
la moral de la religión y el miedo del mundo en el que vivimos. Ya luego
siendo adulto, reconocí todas estas posturas y comencé a cambiarlas, sigo
en eso. Podría decir que en este camino no he salvado, pero sí ayudado a
ser consciente y a cambiar a mi pareja, a algunos amigos los estoy ayudando
también. A mí no me “salvaron” como se entiende ese término, pero sí me
ayudaron en terapia a cambiar. Mi madre y mi padre intentaron siempre
“salvarme” de lo malo; mi padre de lo que se aleja de Dios y mi madre de lo
que me acerca al mundo malo y cruel; cada uno a su modo.
4. En el escenario
- Mi vida sería una serie, mezcla de comedia y drama.
- El tema central de esa serie sería la lucha constante por reaprender lo
aprendido de mamá y papá, tanto en pensamientos, sentimientos y acciones.
- Esta serie y su tema central es constructivo, porque al día de hoy, existen
cambios significativos que servirían de mucho a personas que se encuentran
en la misma situación.
- Lloraría y aplaudiría al final de la serie, esperando el siguiente capítulo.

También podría gustarte