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Equipo Nitlápan-Envío
Día tras día se venían acumulando problemas financieros en este banco, al igual
que día tras día se acumulaban tensiones entre los dos grupos políticos que han
amarrado un pacto que jamás fue "de caballeros". Al estallar la crisis todo se
mezcló. Ante un problema financiero real y de compleja solución, el Presidente
Alemán abandonó irresponsablemente toda cautela y se lanzó a politizar la crisis.
A su vez, el caudillo del FSLN, al sentir "tocados" dos pilares del poderío
económico de la cúpula partidaria -el banco y el consorcio- entró al mismo juego,
politizando a su estilo la crisis. Una semana después de la intervención del
Interbank, y conociéndose las irregularidades en que también estaba envuelto con
CONAGRA el Banco de Finanzas (BDF) -también de capital sandinista, donde las
empresas del ejército manejan depósitos- Daniel Ortega anunció -disimulando con
calculada frialdad su intención- que la Superintendencia de Bancos también iba a
intervenir el BDF.
El ejército entra al terreno del pacto
El Ejército de Nicaragua entró entonces a la crisis como protagonista con poder.
Detuvo la intervención del BDF, tras una conversación entre el Jefe del Ejército,
Javier Carrión, y el Presidente Alemán, seguida de otra reunión de emergencia en
la que participó Alemán y Carrión con el resto de ministros del gabinete económico
y del gabinete de seguridad. Palabras más, palabras menos, Carrión le presentó
un firme ultimatum al Presidente, clímax al que llegó la primera oleada de la crisis
financiera, "equilibrando" la tercia política entre el PLC y el FSLN. Como
consecuencia de estas reuniones, no sólo el BDF no fue intervenido, sino que se
acordó que la intervención del Interbank no sería ejecutada únicamente por la
Superintendencia de Bancos, sino por una junta a la que se incorporó el sandinista
Samuel Santos, directivo del Interbank, con el objetivo de suavizar los términos del
proceso que dirigía la SIB.
¿Golpe de estado?
El gobierno liberal y el gobernante Arnoldo Alemán estuvieron al borde de la
quiebra política en esos días. Carrión mencionó que la intervención del Ejército era
necesaria porque la crisis ya estaba afectando la seguridad nacional. Los medios
hablaron abiertamente de que el país estuvo cerca de un golpe de Estado. Alguna
base para esto la dio el propio Presidente al afirmar, comentando las provocativas
declaraciones de Ortega: ¡La víbora saltó inmediatamente! Daniel quiso echarme
al ejército. Carrión negó que su intención hubiera sido intimidatoria. Sólo buscaba
garantizar la estabilidad nacional en un momento muy delicado, lo que es
exactamente su misión constitucional. El Presidente Alemán decidió suspender un
viaje a República Dominicana y nunca volvió a referirse a la crisis bancaria con la
triunfal sonrisa con que lo había hecho el 7 de agosto, cuando la SIB intervino el
Interbank. En esta ocasión, el Ejército se introdujo por primera vez públicamente
en el terreno del pacto para mostrar su "regla del juego", buscando demostrar
autonomía del juego de los dos grupos pactistas. Decisión riesgosa. ¿Acertada?
El imperio CONAGRA
La segunda gran pregunta surgida con la crisis del Interbank está referida al origen
de la fortuna de los dueños de CONAGRA, los hermanos Centeno Roque.
Hasta entonces, del irresistible ascenso de los hermanos Centeno sólo se hablaba
en voz baja y con cuidado, a excepción de los comentaristas deportivos, que
tenían a menudo a los Centeno en su boca o en su pluma. CONAGRA financia el
equipo de beisbol del Norte, campeón de la Liga Nacional en 1999, pagando a los
mejores peloteros del país los mejores salarios e impor-tando peloteros
extranjeros también muy bien pagados. A la par que acumular poder económico,
el consorcio ha buscado construirse una proyección social apoyando proyectos
humanitarios. También respalda proyectos caritativos de la Iglesia católica. Con la
crisis del Interbank se habló por primera vez de forma abierta, y más allá del
ámbito deportivo o asistencial, de los Centeno, vinculándolos al mayor escándalo
financiero y económico de la historia nacional. Este tránsito, del "secreto a voces"
a la exhibición pública, abrió un muy delicado momento en la coyuntura nacional.
Desde el primer día, El Nuevo Diario insinuó la vinculación del capital de los
Centeno al lavado de dólares y al capital de Humberto Ortega, quien respondió
demandando al director y a un periodista del diario por injurias y calumnias. Desde
el primer momento, el Cardenal Obando respaldó a los Centeno como gente
ejemplar y expresó admiración por su laboriosidad.
El respaldo de la UNAG
El respaldo de este sector de la UNAG se explica, entre otras razones, porque la
UNAG ha fracasado en su intento por constituirse en una alternativa para
garantizar créditos a los pequeños y medianos productores agropecuarios.
ECODEPA quebró, el Banco del Campo quebró, y a la UNAG sólo le queda
CARUNA, una financiera relativamente pequeña que atiende a un reducido grupo
de productores.
Mientras la SIB decide qué hacer con el Interbank -si devolverlo a sus actuales
accionistas, licitarlo y venderlo o liquidarlo- la tensión entre los trabajadores
dueños de las fincas del APT dadas por los Centeno en hipoteca al Interbank
como garantía de sus adeudos se acrecienta. Si la decisión es liquidar el
Interbank, esas propiedades serán subastadas. Y no puede olvidarse que
acaparando tierras, también con voracidad, hay otro grupo económico emergente:
el que se ampara a la sombra del propio Presidente de la República y su consorcio
GENINSA.
Hay que añadir que una de las revelaciones más inquietantes que se desprenden
de las preguntas que surgen ante el caudaloso capital de los Centeno y sus
procedimientos es que en Nicaragua el lavado de dólares podría estar usando la
modalidad de comprar propiedades agrarias, convirtiéndose así en instrumento de
la contrarreforma agraria y de la reconstitución del latifundio.
La iliquidez de CONAGRA
Otras preguntas de fondo giran en torno a las razones de la quiebra de
CONAGRA. La incapacidad de un grupo de empresas del consorcio para cumplir
sus obligaciones financieras con el Interbank tiene dos posibles razones: pérdidas
millonarias inesperadas causadas por maniobras especulativas con el precio
internacional del café, sensiblemente deprimido en la cosecha de este año por
causa de un exceso de oferta mundial y una acumulación gigantesca de
inventarios que han desplomado los precios; o una muy agresiva y "loca" política
de compra de propiedades agrícolas, que colocó al consorcio en una iliquidez tal
que le llevó a maniobrar con el Interbank buscando ganar tiempo para
recuperarse.
Tantos bancos pequeños han sido creados fundamentalmente para captar ahorros
que permitan a las empresas afines o propiedad de los accionistas del banco el
acceso a créditos. Ése es su "pecado original". Hay bancos que apenas cumplen
con el requisito legal del mínimo patrimonio propio. Esto los coloca en una
situación de gran debilidad. Bancos tan pequeños no son instituciones financieras
viables con perspectivas de futuro.
La caída de la pirámide
Al momento de su intervención, el Interbank era el segundo banco del país por la
captación de depósitos de ahorro. Nacido muy pequeño en agosto de 1992, su
crecimiento fue espectacular. Según estadísticas de la SIB, cortadas a marzo del
2000, el Interbank tenía algo más de 60 mil ahorrantes y un saldo total de
depósitos superior a los 2 mil 500 millones de córdobas.
Según la SIB, los problemas del banco empezaron a ser detectados en marzo, el
mes en que las exportadoras empiezan a pagar la cosecha de café. Los bancos
tienen la obligación de colocar un porcentaje de su cartera de préstamos en el
Banco Central. Es el encaje legal, que en Nicaragua es alto, del 16-20%.
Desde hace algunos años, los Almacenes Generales de Depósito, donde las
empresas exportadoras del país guardan mercancías y productos de exportación -
café y azúcar fundamentalmente-, son también supervisados por la SIB. Porque el
café que se almacena allí hasta su exportación, o esperando que mejore su
precio, sirve de garantía para conseguir créditos de corto plazo. Los almacenes
emiten los llamados bonos de prenda, instrumentos financieros que certifican la
cantidad y la calidad del café almacenado por la empresa, que presenta este bono
al banco para obtener dinero.
No es jugando...
¿Cuál va a ser la suerte del Interbank? Desde el punto de vista técnico, como sus
pérdidas se calculan en unos 40-50 millones de dólares y su capital es sólo de 23
millones, el banco está quebrado técnicamente y por lógica podría ser liquidado.
Esto es lo que solicitó la Asociación de Bancos Privados de Nicaragua, hoy
presidida por el gerente del Banco de América Central, propiedad del grupo
oligárquico Pellas, observador con mucho poder de la crisis.
Fuga de capitales
Si el tamaño de la crisis política se reflejó en que se empezó a hablar, por primera
vez desde 1990, de un "golpe de Estado" para poner orden en tanto desorden, la
crisis financiera se reflejó en que, por primera vez desde los turbulentos años 80,
el Banco Central reconoció la fuga de capitales. Según la SIB, la crisis hizo salir
del país más de 10 millones de dólares hacia bancos extranjeros.
Los únicos beneficiarios de la crisis son los bancos a donde fueron a parar los
depósitos sacados del Inter-bank. El who’s who puede indicarnos cuáles pueden
haber sido los más beneficiados. El capital oligárquico tradicional se agrupa en
torno al BAC y al Banexpo. El capital del FSLN en torno al Interbank y al BDF. El
capital liberal en torno al BANIC, aún estatal y en vías de una privatización total.
Los capitales medios tienen al Banpro, al Bamer, al Pribanco, al Bancentro, al
Banco del Café y al Banco Calley Dagnall. No puede descartarse que cuando se
calme algo la "politización pactista" de la crisis, los organismos multilaterales
"pidan la cabeza" de algunos de estos bancos y obliguen a una reestructuración
de todo el sistema.
Una crisis anunciada
El primer balance de la crisis es dramático. Las cifras macroeconómicas de las
que tanto se ufanaba el gobierno se han alterado. La capacidad técnica y
autónoma de la SIB para regular el sistema ha quedado en entredicho, al ser
identificada esta institución con la política disparatada de un gobierno que ha
puesto a todo el Estado al servicio del partido de un gobernante irresponsable. El
Superintendente Noel Sacasa tiene hoy una imagen en bancarrota y hasta se ha
visto obligado a expresar públicamente su arrepentimiento por haber asistido a
una de las reuniones convocadas por el Presidente para hallarle una "salida
política" a una crisis técnica agravada por su "metida de patas política". Los
organismos multilaterales están pagando muy caro su silencio y su "prudencia"
ante tantos desmanes previos a esta crisis.
Ante el problema se expresaron dos posiciones. Por una parte, los organismos
multilaterales y Estados Unidos, aún reconociendo la irresponsabilidad con que el
gobierno manejó la crisis, apoyaron que no se retrasara más el ingreso de
Nicaragua, para evitar que los frágiles equilibrios macroeconómicos se deshagan
más en el inestable período electoral y para que la entrada en la HIPC se
convierta en un nuevo incentivo para que el gobierno se comporte
responsablemente en materia fiscal y respete los equilibrios logrados.
Creen que la situación está rebalsando todos los cauces, y que sin un pronto
acceso de Nicaragua a la iniciativa, está en riesgo la estabilidad macroeconómica
y todo el esfuerzo de diez años de ajuste podría perderse. No pensaron así los
donantes bilaterales de Europa. Creen que es tal el nivel de irresponsabilidad del
gobierno que habría que haber esperado los resultados y el desarrollo de las
elecciones municipales para premiarlo con tan importante incentivo como es el
ingreso a la HIPC.
El pacto no sólo ha excluido cualquier alternativa política no tolerada por las dos
bandas, decisión que genera inestabilidad y violencia. También ha convertido la
regulación de la economía en materia de negociación política entre dos caudillos
que están activa y urgidamente dedicados a consolidar y a ampliar el capital limpio
y el capital sucio de sus respectivos grupos económicos.
¿Cómo cambiar las cosas de lugar en este lugar? Todas las vías institucionales
han sido cerradas por un pacto que hoy prepara el fraude electoral. Quedan las
vías de la resistencia activa, las de la persistencia de la memoria y del
pensamiento, las de la organización cívica, las que acumulan poder con ética
desde abajo. Hay que pensar en plazos más largos para conservar la esperanza.
ECONOMIA
Conagra, y el “arreglo” Alemán-Ortega
Entretelones de la crisis
bancaria del 2000
Ejército frenó a Alemán en el BDF, mientras
Ortega terminó de liquidar el BANIC
Iván Olivares
“Lo único que te puedo decir sobre las declaraciones de Ortega es que
las cifras del BANIC se encuentran en negro, entonces pareciera que
otra vez se está politizando el tema”, comentó un banquero.
El amago contra el BDF y la advertencia del
Ejército
Confidencial publicó el encontronazo entre el jefe del Ejército, General
Javier Carrión y el presidente de la República, Arnoldo Alemán.
“Desde el punto de vista del país este tiene que ser un foco de
preocupación muy grande, porque un antecedente como éste lo que
representa es un enorme factor de inseguridad para el sistema
financiero y significa que los depositantes van a tener más temor de
poner su dinero en un sistema donde puedan ocurrir cosas como éstas”.
“A la vez, crea una imagen pésima para el país desde el punto de vista de
quiénes le prestan dinero a los bancos, quienes quieran invertir en el
país, los que quieren hacer comercio y, por último, toda la comunidad
internacional de donantes que ven este tipo de fenómenos con
preocupación porque indicaría que en Nicaragua no podemos manejar
estas irregularidades o amenazas a la seguridad de los depositantes”.