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Ideología de Género. Qué Es y Qué No Es
Ideología de Género. Qué Es y Qué No Es
Qué es y qué no es
QUÉ ES :
Al final de los años sesenta, y como evolución de los anteriores movimientos feministas,
en defensa de la igualdad de los sexos, nace esta ideología, promovida a lo largo de la década
1960-1970 por los nuevos movimientos de feminismo radical, feminismo de género.
El término género proviene del campo de la lingüística y se nos presenta con tres
variaciones: masculino, femenino y neutro.
Se quiere achacar este término, por parte de esta ideología, a toda una serie de
connotaciones culturales y sociales, como consecuencias de roles y estereotipos que las
diferentes sociedades, a lo largo de los siglos, han dado a los sexos
Como todos sabemos, el término sexo hace referencia a la naturaleza de las personas,
y que implica dos posibilidades: varón o hembra (o bien hombre o mujer). Es importante tener
claro esta idea, para conocer las pretensiones de la llamada ideología de género.
Detrás de la cada vez más difundida expresión “genero”, se esconde una ideología que
pretende eliminar la idea de que los seres humanos se dividen en dos sexos: hombre y mujer.
La diferencia entre los sexos se considera como algo convencional, atribuido por la sociedad
en su devenir social y cultural.
Lo más triste y a la vez paradójico es que las premisas que sirven de apoyos a esta
ideología van realmente en contra del carácter específicamente femenino. Y no se dan cuenta,
les pasa desapercibido.
QUÉ NO ES :
No es una ideología que acepte que la persona humana fue hecho hombre y mujer con
sus respectivas masculinidad y feminidad.
Hace un análisis de la historia del mundo como una lucha de clase de opresores contra
oprimidos. En este análisis ve a la mujer como esclava, negativa e injustamente tratada.
Solicitan que la sociedad actual desmonte y rompa los roles socialmente construidos
por el hombre en contra de la mujer.
La libre elección para la reproducción es para esta ideología la expresión clave para
referirse al aborto procurado.
Esta ideología no genera aceptación, ni por supuesto potencia y ayuda, para la familia
tradicional de un hombre con una mujer y para toda la vida. Al contrario ataca furibundamente
esta institución, célula principal de la sociedad.
No importa cuántas evidencias positivas se acumulen contra sus ideas. Los defensores
de las ideología de género dirán que cualquier prueba o argumentación es un producto más
de la socialización ya construida por la conspiración patriarcal masiva diseñada por
el hombre/varón contra la mujer.
Gran cantidad de población mundial desconoce la gravedad de esta ideología, por falta
de información adecuada.