"Lo mo comenz en primaria, cuando tena 7 aos y cambi de colegio. Yo
me comportaba normal, como lo haba hecho siempre, pero un grupo de compaeras me tom mana. Daba igual el lugar, ya fuese en el aula, en el patio o en los vestuarios del colegio, porque en todos ellos me arrinconaban y me insultaban: que si ola mal, que si era fea, que si no saba vestir... De tantas veces que me lo dijeron, me cost mucho convencerme de que no era as, incluso hasta un tiempo despus de que dejaran de acosarme. Este es uno de los grandes problemas del acoso, y es que cuesta mucho trabajo recuperarse. En mi caso, he superado las secuelas ms graves, pero en ocasiones todava me pongo nerviosa al recordar todo aquello. Para m es como una herida que an est cicatrizando y que duele un poco al tocarla. Tras los insultos, el acoso pas a ser ms fsico: me robaban el desayuno y llegaron a lanzarme un pupitre. Por ejemplo, hubo un da en el que mis compaeras, despus de clase de gimnasia, empezaron a lanzarme papel higinico mojado. Me escond en un bao, pero ellas me lo siguieron lanzando por encima de la puerta. En aquellas ocasiones me quedaba quieta, no saba cmo reaccionar. Adems, no me atreva a decrselo a nadie por sus amenazas: 'Como se lo digas a alguien, sufrirs el doble', me decan. As que mis padres no se enteraron hasta que mis primas se lo contaron. En mi caso, logr superarlo al cambiar de colegio y al coincidir con una tutora que estaba muy involucrada en la lucha contra el acoso escolar. Ella nos habl abiertamente del problema y decid contrselo. El hecho de haber tenido una profesora sensible fue decisivo en mi caso
El miedo es ms valioso para quienes estn acostumbrados a
controlar a los dems. No dejes que se apodere de ti. "Nunca seas maltratado en el silencio. Nunca te permitas a ti mismo ser una vctima. No aceptes que nadie defina tu vida, defnete a ti mismo"