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CLASE 3 Teología 1
CLASE 3 Teología 1
S I S T E M ÁT I C A I
DOCTRINA DE
LA BIBLIA
LUNES MAGISTERIALES
PR. JAIME BURGOS
LA DOCTRINA DE LA PALABRA DE DIOS
• Cuando el profeta hablaba en el nombre de Dios de esta manera, toda palabra que
decía tenía que ser de Dios, o sería un falso profeta (cf. Nm 22:38; Dt 18:18-20; Jer
1:9; 14:14; 23:16-22; 29:31-32; Ez 2:7; 13:1-16).
• En estas y otras instancias en el Antiguo Testamento, a las palabras que los profetas
dijeron uno puede igualmente referirse como palabras que Dios mismo dijo. Así que no
creer o desobedecer algo que el profeta decía era no creer o desobedecer a Dios
mismo (Dt 18:19; 1 S 10:8; 13:13-14; 15:3, 19, 23; 1 R 20:35, 36).
• En el Nuevo Testamento varios pasajes indican que se pensaba que
todos los escritos del Antiguo Testamento eran palabras de Dios.
• Muchos otros pasajes del Nuevo Testamento hablan de manera similar en cuanto a
secciones del Antiguo Testamento. En Mateo 1:22 se citan las palabras de Isaías 7:14
como: (<lo que el Señor había dicho por medio del profeta». En Mateo 4:4 Jesús le dice al
diablo: «"No sólo de pan vive el hombre, sino de toda palabra que sale de la boca de
Dios"».
• En el contexto de las repetidas citas de Deuteronomio que Jesús utiliza para responder a
toda tentación, las palabras que proceden «de la boca de Dios» son las Escrituras del
Antiguo Testamento.
• En Hechos 1:16 se dice que las palabras de los salmos 69 y 109 son palabras que «por boca
de David, había predicho el Espíritu Santo». Así que se dice que las palabras de las
Escrituras son palabras del Espíritu Santo. En Hechos 2:16-17, al citar «lo que anunció el
profeta Joel> de Joel 2:28-32, Pedro inserta «dice Dios», atribuyendo de este modo a Dios las
palabras escritas porJoel, y afirmando que Dios está diciéndolas al presente.
• Aunque se usa cincuenta y una veces en el Nuevo Testamento, cada una de esas instancias
se refiere a escritos del Antiguo Testamento, no a ninguna otra palabra o escritos fuera del
canon de las Escrituras. Por tanto, todo lo que pertenecía a la categoría de «Escrituras» tenía
el carácter de ser «inspirado por Dios»; sus palabras eran palabras de Dios mismo.
• Pero en dos lugares del Nuevo Testamento vemos también que se llama «Escrituras» al
Nuevo Testamento a la par de los escritos del Antiguo Testamento.
• Como notamos en 2 Pedro 3:16 Pedro muestra no sólo tener conocimiento de la existencia de
Epístolas escritas por Pablo, sino también una clara disposición a clasificar «todas sus
epístolas [de Pablo» con «las otras Escrituras».
• Esta es una indicación de que muy temprano en la historia de la iglesia cristiana
se consideraban todas las Epístolas de Pablo como palabras de Dios escritas
en el mismo sentido que se consideraban los textos del Antiguo Testamento. En
forma similar, en 1 Timoteo 5: 18 Pablo cita las palabras de Jesús según se
halla en Lucas 10:7 y las llama «Escrituras».
• Estos dos pasajes tomados juntos indican que durante el tiempo en que se
estaban escribiendo los documentos del Nuevo Testamento se tenía conciencia
de que se estaban haciendo adiciones a esta categoría especial de escritos
llamados «Escrituras», que eran escritos que tenían el carácter de ser palabras
de Dios mismo. Así que una vez que establecemos que un escrito del Nuevo
Testamento pertenece a la categoría especial de «Escrituras», tenemos razón
para aplicar también 2 Timoteo 3: 16 a esos escritos, y decir que esos escritos
también tienen la característica que Pablo atribuye a «todas las Escrituras»: es
«inspirada por Dios», y todas sus palabras son palabras de Dios mismo.
• En algunos casos, los hay. En 1 Corintios 14:37 Pablo dice: «Si alguno se
cree profeta o espiritual, reconozca que esto que les escribo es mandato
del Señor». Pablo aquí ha instituido una serie de reglas para el culto en la
iglesia de Corinto y ha afirmado que son «mandatos del Señor», porque
la frase que se traduce «esto que les escribo» contiene un pronombre
griego plural relativo y se traduce más literalmente: «las cosas que les
escribo son mandatos del Señor».
• Una objeción en cuanto a ver las palabras de los escritores del Nuevo
Testamento como palabras de Dios se toma a veces de 1 Corintios 7:12,
en donde Pablo hace distinción entre sus palabras y las palabras del
Señor: «A los demás les digo yo (no es mandamiento del Señor) ... ». Sin
embargo, una interpretación apropiada de este pasaje se obtiene de los
versículos 25 y 40.
• Por consiguiente, Pablo da sus propias instrucciones: «A los demás les digo yo (no
es mandamiento del Señor): Si algún hermano tiene una esposa que no es
creyente, y ella consiente en vivir con él, que no se divorcie de ella» (1 Ca 7:12).
• Es impresionante, por consiguiente, que Pablo puede seguir en los versículos 12-
15 a dar varias normas éticas específicas a los corintios. ¿Qué le dio el derecho de
hacer tales mandamientos morales? Él dice que habla «como quien por la
misericordia del Señor es digno de confianza» (1 Ca 7:25). Parece implicar aquí
que sus opiniones podían colocarse en el mismo nivel autoritativo de las palabras
de Jesús.
• Por tanto, 1 Corintios 7:12, «a los demás les digo yo (no es mandamiento
del Señor)>>, es una afirmación asombrosamente fuerte de la propia
autoridad de Pablo; si él no tenía ninguna palabra de Jesús que se aplicara
a alguna situación, usaba las propias, porque sus propias palabras ¡tenían
igual autoridad que las palabras de Jesús!