Escuela de Teología

CERTIFICADO EN FUNDAMENTOS
DE LA TEAOLOGÍA
Primera Unidad

CLASE 10
El Espíritu Santo
a Través de
la Biblia
LA ACTIVIDAD DEL ESPÍRITU SANTO
EN EL ANTIGUO TESTAMENTO
LA ACTIVIDAD DEL ESPÍRITU SANTO
EN EL NUEVO TESTAMENTO
Pr. Juan Domingo de la Sotta
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El Espíritu Santo es la tercera persona
de la Trinidad. Es la persona en la
deidad que tiene la tarea de
“manifestar la presencia activa de
Dios en el mundo, y especialmente
en la iglesia”.[1] Sin embargo, es
evidente que todo lo referente al
Espíritu “siempre se encontrará con
algo imposible por explicar, es decir,
con algún área de misterio”.[2]
Es claro que la obra del Espíritu Santo
en la era del Nuevo Pacto es mucho
más pronunciada que la que vemos
en el Antiguo Testamento. El
ministerio del Espíritu marca la
redención en una medida que
sobrepasa a lo visto en el Antiguo
Pacto. No en vano Pablo llama a la
redención el “ministerio del Espíritu”
(2 Co. 3:8)
Cuando lo entendemos de esta
manera, entonces las profecías de
Ezequiel 36 y Joel 2 tienen más
sentido. Dios prometió por medio de
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sus profetas derramar de su Espíritu
sobre su pueblo de una manera
desconocida hasta entonces.
Pero todo esto no debe entenderse
como si el Espíritu estaba inactivo en
el Antiguo Testamento. Sería errado
pensar en esos términos. No se
puede concebir al Espíritu de Dios
como estando pasivo hasta
Malaquías y muy activo desde
Mateo.
Ahora, surgen algunas preguntas al
respecto:
A. ¿Cómo debemos entender
entonces la obra del Espíritu Santo
antes de la Redención?
B. ¿Hay alguna conexión entre sus
operaciones anteriores y sus
operaciones presentes?
C. ¿Cuál es la naturaleza del
ministerio y obra del Espíritu Santo en
el Antiguo Pacto?
Al dar una mirada a las operaciones
generales del Espíritu antes y después
de Pentecostés, encontraremos una
tremenda similitud entre ambas. Sus
actividades en el Antiguo
Testamento son como paralelas a sus
actividades en el Nuevo. La obra y
ministerio del Espíritu Santo en el
Antiguo Pacto es un anticipo de su
obra y ministerio en la redención. Sus
PRIMERA UNIDAD / CLASE 10 / EL ESPÍRITU SANTO A TRAVÉS DE LA BIBLIA

operaciones en la época de Israel Esto quiere decir que el Espíritu es

fueron como un adelanto de sus quien genera la vida en la creación,
operaciones en la iglesia incluyendo la vida humana, vegetal,
neotestamentaria. Para usar el y animal. Así lo entiende el salmista al
lenguaje del apóstol Pablo, las obras decir: “Escondes tu rostro, se turban;
del Espíritu que encontramos en el les quitas el aliento, expiran, y
Antiguo Testamento son como vuelven al polvo. Envías tu Espíritu,
sombras de la realidad de su obra en son creados, y renuevas la faz de la
la iglesia del Nuevo Testamento. tierra” (Sal. 104:29-30).

Podemos resumir esta actividad en Pero esta actividad del Espíritu no

tres categorías generales: La está limitada a dar vida, sino también
actividad de dar vida y sustentarla; la a sustentarla. Es decir, Dios, por
actividad de dar poder y fuerza; y la medio de su Espíritu cuida, sustenta, y
actividad de iluminar (dar sabiduría, preserva su creación. Por eso el
revelación, y entendimiento). profeta decía: “Así dice Jehová Dios,
Creador de los cielos, y el que los
LA ACTIVIDAD DEL ESPÍRITU despliega; el que extiende la tierra y
SANTO EN EL ANTIGUO sus productos; el que da aliento al
TESTAMENTO pueblo que mora sobre ella, y espíritu
a los que por ella andan” (Is. 42:5).
1. El Espíritu Santo como dador y
sustentador de la vida.
“Con toda evidencia, se desprende
En el relato de la creación, el autor
del Antiguo Testamento que el
dice: “el Espíritu de Dios se movía
origen de la vida, su mantenimiento y
sobre la faz de las aguas” (Gn. 1:2). El
su desarrollo dependen de la
mismo Dios, después de haber
operación del Espíritu Santo. Retirar
formado al hombre, “sopló en su
al Espíritu significa muerte”.[3]
nariz aliento de vida, y fue el hombre
un ser viviente” (Gn. 2:7). Este es el
entendimiento que Job tenía de su
2. El Espíritu Santo como dador
origen, por eso dice: “El espíritu de
de poder.
Esta capacidad estaba relacionada
Dios me hizo, y el soplo del
con el rol de liderazgo que algunas
Omnipotente me dio vida” (Job
personas cumplieron en Israel. En
33:4).
particular, sobresale esta

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capacitación en la época de los
Jueces, aunque también otros
recibieron el Espíritu para la tarea de
liderar. Por ejemplo, aquellos jueces
que el Señor levantaba para libertar
a su pueblo eran personas con una
gran capacidad y fortaleza que
provenía del poder que Dios les dio
por Su Espíritu.
La Biblia nos dice que el Espíritu del
Señor vino sobre Otoniel, luego sobre
Gedeón, también sobre Jefte, y
sobre otros más (Jue. 3:10; 6:34;11:29;
14:6; 15:14). El caso más notable de
este empoderamiento es el de
Sansón, quien derrotó a los filisteos
con el poder del Espíritu (Jue. 16).
Asimismo, cuando Saúl y David
fueron elegidos para ser reyes,
ambos fueron ungidos como una
señal de la presencia del Espíritu para
capacitarlos a dicha tarea.
El Espíritu Santo vino sobre Saúl con
poder y lo habilitó para la guerra
contra los enemigos de Israel (1 S.
11:6). Y cuando David fue ungido
como rey, “El Espíritu del Señor vino
con poder sobre David y desde ese
día estuvo con él” (1 S. 1:16:13)
habilitándolo para que cumpliera
con la tarea de reinar para la cual
Dios lo había llamado.[4]
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3. El Espíritu Santo como dador
de iluminación.
Esta función, en un sentido, agrupa y
resume varias otras funciones que
tienen que ver con el intelecto y el
discernimiento del creyente. “La
penetración intelectual o la
capacidad para entender los
problemas de la vida se atribuyen a
una influencia iluminadora del
Espíritu Santo”.[5] Pero esta función
también implica el dar sabiduría, dar
revelación y entendimiento.
José tenía el Espíritu del Dios y se le
reveló los sueños de Faraón y su
interpretación (Gn. 41:1-38). El Espíritu
fue dado a los setenta ancianos que
ayudarían a Moisés en la tarea de
administrar justicia al pueblo y
profetizar (Nm. 11:17, 25). Durante la
construcción del tabernáculo, el
Señor llenó de su Espíritu a Bezaleel y
a Aholiab“en sabiduría, y en
inteligencia, en ciencia y en todo
arte para inventar diseños, para
trabajar en oro plata y en bronce (Éx.
31:2-4). Otros también fueron llenados
del Espíritu de Dios para la
confección de las vestiduras de los
sacerdotes (Éx. 28:3).
Asimismo, el Espíritu era quien
revelaba, informaba, y capacitaba
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a los profetas para profetizar. Por eso Pacto. A continuación veremos su

Esdras dice: “Les soportaste por actuar casi de forma paralela pero
muchos años, y les testificaste con tu aún más evidente, permanente y
Espíritu por medio de tus profetas” poderosa en el Nuevo pacto.
(Neh. 9:30). El profeta Isaías anunció:
“El Espíritu de Jehová el Señor está LA ACTIVIDAD DEL ESPÍRITU
sobre mí, porque me ungió Jehová; SANTO EN EL NUEVO
me ha enviado a predicar buenas TESTAMENTO
nuevas a los abatidos, a vendar a los 1. El Espíritu Santo como dador y
quebrantados de corazón” (Is. 61). sustentador de la vida.
Además, el mismo Ezequiel confiesa: El Espíritu Santo es quien da vida al
“Y vino sobre mí el Espíritu de Jehová, pecador en la regeneración. La
y me dijo: Di: Así ha dicho Jehová: Así nueva vida impartida en el nuevo
habéis hablado, oh casa de Israel” nacimiento es la obra del Espíritu
(Ez 11:5) Santo. Jesús dijo. “Lo que es nacido
de la carne, carne es; y lo que es
Estas operaciones generales del nacido del Espíritu, espíritu es” (Jn. 3:6)
Espíritu durante el Antiguo Pacto y luego, “el Espíritu es el que da vida”
fueron entonces un anticipo de una (Jn. 6:63).
actividad y obra más poderosa y Por eso el apóstol Pablo decía que
completa en la redención. Estas fuimos salvados “por medio del
actividades que hemos mencionado lavamiento de la regeneración y la
ilustran lo que Él haría al aplicar la renovación por el Espíritu Santo” (Tit.
gracia divina (los beneficios de la 3:5).
redención) sobre la iglesia.
Pero esta nueva vida que imparte no
La profecía de Joel de que Dios solo es un contacto inicial que el
derramaría de su Espíritu sobre toda Espíritu hace con el creyente, sino
carne (Jl. 2), y la profecía de Ezequiel que incluye una permanente
de que ese Espíritu estaría dentro de presencia en su interior. El Espíritu
los creyentes (Ez. 36), ya anunciaban habita en el creyente. El Espíritu
esa actividad en el pueblo de Dios. permanece con el creyente para
sustentarlo y vivificarlo. Es por eso que
Ahora, es imposible dejar el actuar somos llamados el templo del Espíritu
del Espíritu Santo solo en el Antiguo (1 Co. 6:19).

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2. El Espíritu Santo como dador
de poder.
Jesús dijo a sus discípulos antes de
ascender, “recibiréis poder, cuando
haya venido sobre vosotros el Espíritu
Santo” (Hch. 1:8). Cuando el Espíritu es
dado al creyente en la conversión,
comienza en su vida la obra de
santificación. Para el efecto, el
Espíritu le da poder a los cristianos
para vivir para la gloria de Dios. El
Espíritu Santo es dado al creyente
para que pueda crecer en el
carácter de Cristo y agradar a Dios.
Pablo dice que los creyente
debemos estar “fortalecidos con
todo poder, conforme a la potencia
de su gloria, para toda paciencia y
longanimidad” (Col. 1:11). El mismo
apóstol oraba por los efesios para
que Dios les diera “el ser fortalecidos
con poder en el hombre interior por
su Espíritu” (Ef. 3:16).
Pero también, el Espíritu dio poder a
la iglesia para hacer milagros, poder
para la predicación del evangelio
(Hch. 1:8), y poder para servir. Además,
el Espíritu concede a los creyentes los
dones necesarios para la edificación
de la iglesia (1 Co. 12).
Robert Saucy dice:
“Sin negar la presencia de lo
milagroso en la iglesia del Nuevo
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Testamento, el énfasis claro de la
instrucción apostólica es que los
creyentes experimenten el poder
sobrenatural para vivir como Cristo
en el mundo: para tener esperanza
cuando parece que no la hay, para
perseverar en medio de pruebas y,
sobre todo, para amar a los demás
(incluyendo a nuestros enemigos).
Esa forma de vivir necesita de un
poder sobrenatural tanto como lo
necesita el hacer milagros”.
3. El Espíritu Santo como dador
de iluminación.
El Espíritu también cumple, como
vimos, una función de capacitación
intelectual. Es decir, la actividad de
iluminar, que incluye dar sabiduría,
dar revelación y entendimiento.
Para empezar, debemos destacar
que el Espíritu iluminó a los apóstoles
y profetas en su tarea de hablar y
escribir en nombre de Dios. El Espíritu
también les recordó las palabras de
Jesús para ese efecto (Jn. 14:26). Pablo
dice que el misterio del evangelio fue
“revelado a sus santos apóstoles y
profetas por el Espíritu” (Ef. 3:5), para
que luego ellos lo dejaran por escrito.
El mismo Pedro recuerda que “nunca
la profecía fue traída por voluntad
humana, sino que los santos hombres
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de Dios hablaron siendo inspirados A. Podemos crecer en humildad,

por el Espíritu Santo” (2 Pe. 1:21). En mientras reconocemos que la vida
resumen, la actividad del Espíritu que tenemos ha sido dada por
Santo también implica una Espíritu y no fue una obra nuestra. La
prominente obra de iluminación consciencia de la obra soberana del
para el pueblo de Dios. Espíritu para regenerarnos, nos
librará de una medida de jactancia.
Además, el Espíritu es quien B. Podemos crecer en confianza de
convence de pecado (Jn. 16:8) y nos que tenemos el poder para glorificar
revela a Cristo (Jn 16:14). Es Él quien nos a Dios, y que ese mismo poder nos
da la claridad para ver y apreciar el fortalece en el hombre interior.
valor, la suficiencia, y la belleza de
nuestro Salvador. El Espíritu también C. Podemos crecer en dependencia
nos da discernimiento para entender de la capacitación, instrucción, e
las cosas espirituales, es decir las iluminación del Espíritu para la vida
verdades del evangelio (1 Co. 2:12-15). diaria.
El Espíritu es quien da a los pastores y
maestros la habilidad para entender Sin embargo, creo que también
y enseñar las Escrituras. debemos cultivar una sensación de
expectativa, pues la obra del Espíritu
CONCLUSIÓN en la aplicación de la redención,
La obra y ministerio del Espíritu con toda su gloria y belleza, es
durante el pacto mosaico, con toda también sólo un anticipo de la gloria
su gloria y majestad, con toda su venidera y la manifestación de los
vida, poder e iluminación, solo nos hijos de Dios. De acuerdo con Pablo,
ilustraron y anticiparon cuán gloriosa los cristianos tenemos los primeros
sería su obra para la iglesia de hoy. frutos (primicias) de una
Esa misma actividad continúa hoy, manifestación aún más gloriosa que
pero en una medida más completa y experimentaremos en la vida eterna.
poderosa. Dicho de otra manera, incluso ahora
el ministerio del Espíritu, con toda su
Mientras meditamos en esa realidad, abundancia, es una evidencia de lo
podemos crecer en tres aspectos. glorioso que será cuando seamos
finalmente librados de las
consecuencias del pecado (Ro. 8:21-
23).

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BIBLIOGRAFÍA
1. Wayne Grudem, Teologia
sistematica, p. 666.
2. Richard Gaffin Jr., Existen los
milagros hoy?, p. 33.
3. Louis Berkhof, Teologia Sistematica
p. 505.
4. Grudem, p. 667.
5. Berkhof, p.506.

www.coalicionporelevangelio.org

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