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Elaboración de presupuestos de
instalaciones y telecomunicaciones
3.1. Documentación técnica
El presupuesto de una instalación de telecomunicaciones tiene como finalidad dar una idea lo
más aproximada posible del importe de la realización del proyecto, no refleja ni los gastos
de explotación ni los de la amortización de la inversión una vez ejecutada.
3.1. Documentación técnica
El presupuesto es valorativo detallado y por ello el cálculo del importe de las obras de las
instalaciones de telecomunicaciones se basa en la medición de las distintas unidades de obra,
y en la aplicación de los precios así obtenidos a cada una de las partidas que integran el
correspondiente estado de mediciones.
3.1. Documentación técnica
1. Estado de mediciones.
2. Estado de precios.
3. Presupuestos parciales y general.
El estado de precios presenta el cálculo de los precios de las unidades de obra y los cuadros
de:
El orden se consigue agrupando por capítulos las partidas correspondientes a cada clase de
obra de una instalación de telecomunicaciones, que viene a ser como una separación de
ocupaciones y por naturaleza de los trabajos más relevantes, dándoles a las partidas una
numeración correlativa.
3.1. Documentación técnica
La claridad. No solo los epígrafes de las diferentes partidas han de figurar con expresión
clara para su correcta definición, sino que su composición sobre el formato tanto digital o en
papel ha de hacerse en forma tabulada para que destaquen las cifras: se presenta un
resumen de las distintas unidades de obra con su respectiva unidad de medición y valor.
La licitación es también denominada concurso público o contrato del sector público y privado,
es la fase previa al contrato de obra en la cual el promotor pone a disposición de las empresas
instaladoras el proyecto y el pliego de cláusulas para la contratación, para que lo estudien y
presenten sus ofertas a efectos de contratar la obra correspondiente.
En España, tales procedimientos están regulados por el Real Decreto Legislativo 3/2011 de 14
de noviembre por el que se aprueba el texto refundido de Contratos del Sector Público.
3.1.2. Presupuesto de estudio
Todo ello permitirá obtener una serie de informes que, por sí mismos, constituyen una guía de
posibles actuaciones, gestiones y estrategias a establecer para determinar los parámetros del
estudio de costes.
En un procedimiento de adjudicación de una obra privada, el promotor recibe las ofertas de los instaladores
invitados o que reúnan ciertos requisitos en un concurso. Por medio de su departamento técnico o a través
de la figura del gestor de proyectos se revisan las propuestas y se procede a la adjudicación del contrato a
la oferta más ventajosa y que reúna los requisitos del pliego de cláusulas de contratación.
3.1.4. Presupuesto de venta o de contrato de ejecución
Para que la dirección facultativa pueda realizar el seguimiento de la obra supervisando los
plazos, costes y mediciones en la ejecución y con ello pueda aprobar precios contradictorios y
reformados, y poder así visar las certificaciones normalmente presentadas por el contratista,
hay que analizar el presupuesto de contrato de ejecución de obra.
3.1.5. Presupuesto objetivo o precoste
Está formado por las unidades de obra del proyecto con las cantidades y costes del objetivo
y/o por otras que quizás haya que modificar o sustituir, modificados, etc,, pendiente de
aprobación por la propiedad. Es el presupuesto al que el responsable(jefe de obra) cree que
llegará, por eso se le llama objetivo.
Para estimar el coste objetivo que a priori tendrá la obra, el jefe de obra normalmente recurre
a:
Durante el montaje de la instalación, la empresa instaladora actualiza los datos iniciales según
se van obteniendo rendimientos reales, se ajustan precios y aparecen los imprevistos. Esto
implica un proceso de control y puesta al dia permanente del plan de obra y del objetivo de
costes.
La unidad de obra es cada una de las partes en que puede dividirse el proyecto a efectos de
cálculo del presupuesto de una instalación de telecomunicaciones, de modo que primero se
obtiene el coste total de cada una de estas partes (lo que se denomina como precios
descompuestos), y se hace la medición para determinar el número de veces que se repite
cada una de estas unidades de obra, y finalmente se procede a la valoración sumando el
producto de precios descompuestos por las mediciones halladas.
3.2. Determinación de unidades de obra
Los criterios para definir las unidades de obra o ítem pueden ser variables porque dependen
de diferentes factores como:
Cada unidad de obra debe ser expresada con la unidad de la magnitud física más
característica, por ejemplo, en una canalización principal de unión entre RITI y RITM, la
medida de longitud ejecutada son los metros lineales.
Las unidades básicas y las unidades derivadas coherentes del SI forman un conjunto
coherente, denominado conjunto de unidades SI coherentes. Es preferible utilizar unidades de
obra cuyo precio haya sido previamente calculado.
3.2. Determinación de unidades de obra
Todas las unidades de obra deberán tener un análisis de los materiales, mano de obra, y
herramientas o equipo necesario para su obtención incluido el transporte.
Es necesario definir las unidades de obra correctamente, dejando claro lo que cada unidad
contiene. Debe incluirse en su descripción o definición los elementos de que consta, su grado
de terminación, el tipo de equipo con que debe ser ejecutada, si se incluye o no el transporte,
si incluyen o no piezas especiales, controles de calidad, etcétera.
Una vez que hemos generado los fragmentos en que hemos dividido nuestra instalación,
tenemos que agruparlos para poder medir y valorar el montaje. Lógicamente, estos
fragmentos no pueden estar colocados de forma arbitraria, sino que los vamos a agrupar en
un orden, ya sea por semejanza del sistema de telecomunicaciones, la cualificación del
técnico, el entorno profesional, en el que se realizan las unidades de obra, o bien por su orden
de ejecución.
La forma de medir y valorar una obra es descomponer la misma en unidades de obra para
luego agruparlas en capítulos de obra.
3.2. Determinación de unidades de obra
3.3. Mediciones. Técnicas
Una vez que las unidades de obra tienen su criterio de medición establecido, se procede a su
medición en un proyecto. Para ello, se procede de dos formas:
● Mediciones por unidad de obra: consiste en elegir una unidad de obra y medirla en
todos y cada uno de los planos del proyecto.
● Mediciones por planos: consiste en medir todas las unidades que existen en un plano
del proyecto.
3.4. Operaciones de montaje de la instalación. Tiempos
La medida del trabajo de las operaciones de montaje de la instalación se utiliza para poder
establecer el tiempo que un técnico, trabajando según un método previamente definido y
con la suficiente motivación, tardaría en realizar una operación de montaje de la
instalación asignada. Esto es el tiempo tipo de realización del trabajo, lo que posteriormente
permitirá detectar con rapidez la aparición de tiempos improductivos.
3.4.1. Usos y técnicas de la medida del trabajo en las operaciones de montaje
El estudio de tiempos es una técnica de medición del trabajo de las operaciones de montaje
de la instalación empleada para registrar los tiempos y ritmos de trabajo correspondientes a
los elementos de una tarea definida, efectuada en condiciones determinadas y para analizar
los datos a fin de averiguar el tiempo requerido para efectuar la tarea según una norma de
ejecución preestablecida.
3.4.2. Estudio de tiempos
El tiempo ciclo actual medio es la media aritmética de los tiempos para cada elemento
medido:
3.4.2. Estudio de tiempos
● Registrar los ritmos de actividad. Relación velocidad efectiva del operario con el ritmo
tipo (Va/Vt).
● Calcular el tiempo normal de cada elemento. Esta medida es una «valoración de la
actividad resultado» para el ritmo observado del trabajador concreto:
● Sumar los tiempos normales de cada elemento para obtener el tiempo normal total de la
tarea.
● Calcular el tiempo estándar. Este ajuste del tiempo total normal engloba algunos
suplementos, como las necesidades fisiológicas, demoras inevitables y fatiga del
trabajador:
3.4.2. Estudio de tiempos
Una vez que el trabajador tiene un valor asignado al ritmo de trabajo Va y un ritmo tipo Vt,
pasa a cronometrar y obtener así un tiempo observado To, que es el tiempo invertido por el
operario para llevar a cabo cada elemento de la operación. A partir de eso, se obtiene un
tiempo básico, que es el que tardaría en realizar un elemento o una tarea al ritmo tipo un
trabajador cualificado:
3.4.2. Estudio de tiempos
Una vez que el trabajador tiene un valor asignado al ritmo de trabajo Va y un ritmo tipo Vt,
pasa a cronometrar y obtener así un tiempo observado To, que es el tiempo invertido por el
operario para llevar a cabo cada elemento de la operación. A partir de eso, se obtiene un
tiempo básico, que es el que tardaría en realizar un elemento o una tarea al ritmo tipo un
trabajador cualificado:
El tiempo tipo es el tiempo total real de ejecución de una operación en las condiciones
existentes al ritmo tipo. Hay que tener en cuenta el tiempo total improductivo de contingentes
propios del trabajo y suplementos por descanso
3.4.2. Estudio de tiempos - Método de estimación
● n: tamaño muestra
● z: desviación estándar normal para el nivel deseado
de confianza (z=2 para 95,45%, z=3 para 99,7%)
● p: valor estimado del porcentaje muestreado
● h: nivel deseado de precisión
3.4.2. Estudio de tiempos - Método de estimación
● n: tamaño muestra
● z: desviación estándar normal para el nivel deseado
de confianza (z=2 para 95,45%, z=3 para 99,7%)
● p: valor estimado del porcentaje muestreado
● h: nivel deseado de precisión
3.4.2. Estudio de tiempos - Método de estimación
Datos normalizados