U N I V E R S I DAD P R I VA DA SAN J UAN BAU T I STA FA C U LTA D D E C I E N C IAS D E LA SALU D

E S C U E LA P R O F E S I O NAL D E M E D I C I NA H U MANA
“ D R . W I L F R E D O E R W I N GAR D I N I T U E S TA ”

AC R E D I TA DA P O R S I N EAC E
R E AC R E D I TA DA I N T E R NAC I O NALM E NT E P O R R I E V

ASIGNATURA :
APRENDIENDO A SER MEDICO
CICLO: I
SEMESTRE: 2023 – 1

DOCENTE RESPONSABLE DE LA ASIGNATURA

JUAN ALBERTO BORJAS LENGUA

SEDE: FILIAL ICA

 SEPTIMA CLASE
CONTENIDOS COGNITIVOS

Médicos que inspiran trabajo en equipo

DOCTOR
ALBERTO
BAFTON THOMPSON
Dr.Alberto Barton Thompson

Alberto L e o p o l d o B ar t o n Thompson,
tercer hijo del ma t r imo n io del
químico f a r m a c é u t i c o argentino, de
or igen inglés, R o d o l f o Ba r t o n Wilde
y la señora Anastasia Francisca
Augusta Thompson, ciudadana
argentina, de origen inglés.

Nac e en Buenos Aires, Argentina el 18

de julio de 1871 ; fue bautizado el primer
día de a g o s t o de 1872 , en la iglesia San
Andrés del Centro, Buenos Aires
En Argentina, Rodolfo Barton fue
una persona afortunada y
reconocida; pero, por motivos
políticos decidió emigrar hacia
Perú, donde tenía algunos
familiares, acompañado de su
esposa y de sus cinco hijos nacidos
en Argentina: Norma, Amalia,
Rafael, Arminda y Alberto, con tres
años de edad. el año de
Corría
1874 y los al Perú.
amenazaban vientos de gue rra
 Los es tudio s p r im a r io s los realiza
Una vez en Lima, R o d o l f o en el C olegio N u e s t r a S eñora de la
B arton padre inició ‘O’ de Lima, bajo la tutoría del
empresa de una p r o f e s o r Pedro Drinot. Es en esta
c a r b o n at a da s l lamada aguas é p oc a donde una lesión
Pureza’, ubicada en ‘La oc ula r seria estuvo a h a c e r le
Altos tras Barrios la p e r d e r punto de y un tío suyo,
la vista
y
chilena a Lima seinvasión
mudó hacia almirante inglés, lo l levó a o p e r a r
Las Chacritas, actual j i cy ons e guir su c u r a c i ón en
rón Tipuan. Inglaterr a, donde estudió desde
los diez hasta los t r e c e años
A su r e g r e s o al Perú continúa sus
estudios s ec un da r io s en el
Co n vi c t or io Peruano de Lima, bajo
la d i r e c c i ó n de don Pedro Manuel
Rodríguez, y los culmina en 1889 .
Su e x p e r i e n c i a inglesa lo ayudaría,
en un f u t u r o no muy lejano, no solo
a h a c e r s e ca r g o de la a t e n c i ó n de
p a c i e n t e s e x t r a n j e r o s en la Sala de
San J o r g e del Ho sp i t a l Guadalupe
sino también a p o d e r in t e r ca mb i ar
i n f o r ma c i ó n con científicos
ingleses y n o r t e a m e r i c a n o s , en una
é p o c a en la que el f r a n c é s era la
lengua ‘de culto’ en el mundo
científico.
 En 1893 , luego de mejorar la
Al f a l l e c e r su padre, el año
situación económica familiar,
1889
Alberto , de 18 años, al ser uno de los
dejó de modo parcial el trabajo
hermanos mayores, debió p r o c u r a r
de obrero en la fábrica.
el su sten to familiar trabajando postuló e ingresó a la
En
co mo o b r e r o en ‘La Pureza’, duran te 1894 , deMedicina de la
tres años, los cuales recordó Facultad
Universidad de San Marcos.
sie mp re con p o c o ca r iñ o como Entonces debió alternar sus
‘ruda labor industrial’. Esto es fácil obligaciones universitarias
de entender, pues estas con las de obrero en la fabrica
o b l i g aci o n e s lo a l e j a r o n por tres familiar.
largos años de su sueño; estudiar
medicina, vocación que según
recuerda “surgió de manera
espontánea, sin mo tivación externa.
Durante sus siete años de estudios, que los realizó
con mucho éxito, bajo la consigna de “mientras
estudiaba y más aprendía, sentía que menos sabía ”,
trabajó de o b r e r o y, a la vez, dedicó sus pocas
horas l ibres al microscopio.
Sus primeros estudios lo l levaron a in te re sarse en
el paludismo y los gérmenes hemáticos, para luego,
abocarse a un desafío mayor; es así que, desde
1898 , se dedicó a la observación m i c ro s có p i c a
de diversas muestras de pacientes con diagnóstico
de verruga peruana.
En 1899 fungió como interno t r ansi to r io del
Hospital Italiano, donde su principal objetivo
era buscar pacientes con diagnóstico
sospechoso de verruga peruana, para poder
obtener muestras de y seguir
investigando sobre sangre su de
e n co n t r a r el proyecto
germen p r o d u c t o r tesis:
de la
enf e r medad de Carrión.
Se graduó de bachiller con la tesis ti tulada
‘El germen pat óge no de la enf er m edad de
Carrión’. En ella esbozó sus primeros
intentos, de demost rar el agente infeccioso
de la enf ermedad de Carrión: mediante
observaciones directas, cultivos,
inoculaciones en por lo menos veinticin
animales ( perros, gatos, cuyes y palomas) co
El 21 de marzo de 1899 l legó a las
s i gui ent es conclusiones:

“1 ) Que he e n c o n t r a d o un germen 2 ) Que las inoculaciones

c o n s tan te p r o c e d e n t e del bazo de practicadas en
cinco enfer mos de los seis
animales con este germen,
ata ca dos de fiebre grave
Carrión. Estudiados desde de el punto reproducen
de vista b a c t e r i o l ó g i c o , solo en uno manifestaciones
de los casos aludidos el r es u l tad o eruptivas semejantes a las
fue negativo, p er o es neces ario que se observan en
r e c o r d a r que ese e n f e r m o no fue hombre el atacado
víctima de la i n f e c c i ó n verruc osa
verruga de
manifestaciones
sino de la t u b e r c u l o s a como lo
s,
eruptivas que son como
prueban las múltiples y
avanzadas muy lesiones de esta todos sabemos
afe c c i ón d em o s tr ad as en la patognomónicas de esta
autopsia. enfermedad”
También en esta tesis se esboza sus
pr i me r os i nte n tos para l og r ar un c aldo de
cultivo para el c r e c i m i e n t o del germen.
Así escribe: “Cultivos: es fácil en caldo y
gela tin a nutritiva. Su d e s a r r o l l o es rápido
en t e m p e r a t u r a ambiente, se a c e l e r a con
el e mp leo de calor artificial, en gelatina
p r o d u c e e n t u r b i a m i e n to c o m p l e t o en 24
horas a la t e m p e r a t u r a de 37 °C.
R eti r a d o del tubo de la estufa, la gelatina
se solidifica, el e nt u r b i a m i e n t o de su
masa no aumenta p er o d e s a r r o l l a en su
sup e r fic ie en pocos días, una capa
blanquizca, espesa, que
p r o l i f e r a c i ó n del germen. evidencia
Esta brillante sustentación, pionera para sus
tiempos; le valió ser exonerado de los
gastos de bac hillerato en la universidad.
Luego de obtener el internado por conc urso
y tras siete años de estudios concluyó la
c ar re r a de Medicina, en 1900 , junto con
17 estudiantes, en la l lamada ‘ p r o m o c i ó n
del siglo’. Aunque no lo mencionó en su
trabajo de tesis, pocos años después lo
logra r ep r od uc i r con más fidelidad las
aclararía,
erupciones patognomónicas de la
enfermedad. Es así que muchos de los
mulos y muletos de ‘La Pureza’ terminaron
sus días siendo inoculados y padeciendo la
enfermedad de en pro de la
medicina y, Carrión, por de la economía
familia. cierto, no
“ R e c i é n graduado, en 1901 , e j e r c e como A su r e g r e s o de Europa, en
j ef e de clínica del servicio de cirugía 1905 , se incorporó como
dirigi do por el Dr. Lino Alarco, p i on er o médico en el Ho sp ita l
de la cirugía peruana quien e nt re otras Guadalupe, ins titu ción
proezas realizó la p ri m era ovariotomía r e g e n t a d a por la B e n e f i c e n c i a
en el Perú, hacia el año 1878 . Pública del Callao. Es el único
mé d ic o y je f e del novel
Por su e xcele nte perfil fue becado por d e p a r t a m e n t o de Ba c t e r i o l o g í a
el Congreso de la República, para y jefe, en c a li d a d ad honorem,
continuar sus estudios en Europa y de la sala de San Jorge, en la
p e r f e c c i o n a r s e en bacteriologí a en la que se atendía p r i n c i p a l m e n t e
Escuela de Medicina Tropical de a los marinos de n a cio n a lid a d
Londres, entre 1902 y 1904 o habla inglesa que arribaban
al p r i me r p u e r t o del Perú
LOS CUERPOS ENDOGLOBULARES ‘X’

El d e s c u b r i m i e n t o de Alberto B a r t o n va p r e c e d i d o de una que ot ra búsqueda

mi c ro bi ológi ca, impulsada f u e r t e m e n t e luego de la m u e r t e de Daniel Alcides
Carrión.

Ya el Dr. Oswaldo He r c e l l e s en su t r a b a j o de tesis, p u b l ic a d o en 1900 , d e scr i b e

que el e nt o nc e s es t udia n t e Alberto Barton, en 1897 , les hacía ver en
muestra
c o l o r e a d a s con el azul de L ö f f l e r y con el ob jet ivo de inmersión se mostraban
e s t r u c t u r a s móviles, que según H e r c e l l e s eran cocos.

Tras sus pr imer os estudios, que culminaron en su tesis de 1899 , no logró

e n c o n t r a r al germen causante de la e n f e r m e d a d de Carrión sino a los
gé rmenes similtíficos, p r o d u c t o s de so b r e in f e c ci ó n . No obstante, este primer
traspiés
persistía en su teoría “sin d e s a l e n t a r n o s por esta falta de éxito, sentimos al
c o n t r a r i o que debíamos c o n t in u ar l a por amor propio, por p r e st i g io p r o f e s i o n a l
y para no dejar d e f r a u d a d a s las e xpec tat ivas de quienes g e n e r o s a m e n t e nos
Y es así que, al c o n m e m o r a r s e el vigésimo aniver sar io del f a l l e c i m i e n t o de Daniel Alcides
Carrión en sesión de gala en la Unión Fernandina, el 5 de o c t u b r e de 1905 , t o m a r o n la
palabra, e nt r e otros, los d o c t o r e s Alberto Bar t on y Manuel Tamayo.
El Dr. Ba r t o n da le c t u r a a los hallazgos o b t e n i d o s de dos p a c i e n t e s con f ie br e grave, que
a t e nd ió ese año el Hosp it al Guadalupe, en los que, luego de d i a g n o s t i c a r l o s como
e n f e r m e d a d de Carrión, en sus exámenes de sangre d e s c r i b e una b a c t e r ia i n t r a c e l u l a r en
los glób ulos rojos. Luego toma la pa la br a el Dr. Tamayo, quien da l e c t u r a a sus t ra b ajo s en
c o n j u n t o con los d o c t o r e s Biffi y Gastiaburú, sobre el ‘ b a c i lo Barton’, don de concluye que
este bacilo no es el p r o d u c t o r de la verr uga y que es distint a a la ca usan t e de la
e n f e r m e d a d de Carrión.

Es en el l a b o r a t o r i o de B a c t e r i o l o g í a del Hosp it al Guadalupe, tras más de una d é cad a de

estudios, c o n f i r m ó su de scubr imien t o. La Gaceta de los Hospitales, el 1 de en er o de 1909 ,
y La Crónica Médica, el 15 de en er o de 1909 , p u b l ic a r o n en sus p rime ras páginas:
‘ D e s c r i p c i ó n de e l e m e n t o s e n d o g l o b u l a r e s hallados en los e n f e r m o s de e n f e r m e d a d
ver ru cosa’ , en la que, tras hacer un breve r e c u e n t o de su d iscur so en la sesión que
c e l e b r ó la Sociedad M éd ica Unión Fernandina el 5 de o c t u b r e de 1905 , d e s c r i b i ó por
pr ime ra vez la p r es e n c ia de e l e m e n t o de f orma bacilar e n c o n t r a d o s en la sangre de dos
enfermos.
El silencio de c u a t r o años que siguió a este
hallazgo se explica solo en su p r o p ó s i t o de no
P o st e ri o r a esto, c o r r e l a c i o n a el número de los
deja r ya nada al azar. Luego de esta
bacilos con el cu a d ro clínico al ob ser va r que los
intro du cción , pasa a d e scr ib ir sus
casos de gran d ise mina ción del bacilo en los
o b se r v a ci o n e s de 1908 , d on de examinó la
glób u lo s se correlaciona con una
sangre de 14 individuos que sufrían la forma
mortalidad, también asocia su mayor
desaparición y
grave febril, comprobó la p r e se n ci a
cambios involutivos con me jor as en el cu a d ro
p e r s i s t e n t e de estos cuerpos, a los
clínico.
d e scr i b i ó así: “Se p r e se n t a n en que forma
b a s t o n c i t o s muy c o r t o s y delgados, de
ext r e m i d a d e s r e d o n d e a d a s y e s t r i ccon
t a m e nsus
te
l imitados al i n te r io r de los g lób ulos ro jos”.
Esta d e s c r i p c i ó n es muy similar a la a ctua l
sobre la B a r t o n e l l a bacilliformis: b a ct e r i a
aerobia, Gram negativa.
Luego pasa a d e s c r i b i r las t i n c i o n e s usadas y
con las que lo g ra m e j o r re su lta do , las que aún
se usan en la actualidad.
El Dr. Barton realizó un seguimient o p a c ie n t e de todos los enfermos, con tomas de
muestras diarias, de modo tal, que pudo d e t e r mi n a r el t iempo mínimo de p er ma n en c ia de
estos bacilos en siete días y el máximo en 23, sin c onsiderar los días e nt r e la incubación,
las man if e s t a c io ne s clínicas de la e n f e r me d a d y su hospitalización.

También observó en los bacilos su pleomorf ismo y los des cribió como cambios involutivos:
“así se observa que una part e de los bastoncillos sin sufrir mo di f ic a c io ne s de tamaño
pi er de n sus contornos, se hacen granulosos y desaparecen; mientras que otros antes de
di s gr eg ar s e aumentan n ot a bl eme nt e de volumen, a la vez que su entorno cambia, tomando
formas diversas, tales como la de pera, de esfera, de reloj de arena o de bastones
gruesos”. Asimismo, desc ribió su forma cocoide. “Se observan con alguna f r e c u e n c i a que
las ca denet as formadas por la reunión de un cort o número de bastoncillos p ar t ic i pa n en
ambas formas de involuc ión” . Des cribe este proces o d e g e n e r a t i v o y los observa durante
una a dos semanas.
Donde se inclinó por c o n s i d e r a r que era un
prot ozoario, c o n c e p t o que no fue m o dif ic ad o hasta
dos décadas despues.

Y al final dejó es t a ble c ido c o n t u n d e n t e m e n t e su

teoría donde los c ue r po s que observaban “ p a r e c e n
p rop ios tan solo a seres d ot a dos de vida”, más
adelante, incluso, r e c a l c ó su exclusividad para esta
patología; “Creemos, además, que sean los agentes
e specí f icos de la i nf ec ció n verrucosa, fundándonos
sobre todo en la con que
elementos f r ecu encia se dichos los
verrugas, en encuent
que ran noen se encuent ran enfermos
en de
e nf e rm edad y en la relación que existe entreotra el
número de dichos elementos y el estado de
pacientes. los
Tras esta publicación, al d ecir de los
h istoriad ore s, pocos cien tífico s de n ue stro
país h icie ron caso a su d escu brimie n to .
Sin embargo, el Dr. B a r t o n mostraba,
explicaba p a c i e n t e m e n t e y sostenía sus
d e scu brimien to s. Estos estu dio s fu e r o n
c o n f i r m a d o s por Gastiaburú y Rebagliati,
quienes en no viemb re de 1909 p u b li ca r o n
su memoria ‘S o b re la He ma to log ía
yE tiología de la e n f e r m e d a d de Carrión’,
Que por sus r e a c c i o n e s c o l o r a n t e s indican
luego de r e f u t a r la tesis de Tamayo de
ser de sustancia viva y a los que no se les
1905 , que aducía que los c u e r p o s
p ue de a trib uir c a r á c t e r b acte ria n o. Que
e n d o g l o b u l a r e s son d e g e n e r a c i o n e s de los
probablemente se tra ta de algún
g lób ulos rojos, y do nd e agregaban: “en el
p r o t o z o a r i o que g u a rd a íntima r e l a c i ó n con
último análisis te nd ríamo s que la sangre
la ve rru g a y de la que tal vez p od ría ser el
de la e n f e r m e d a d de Carrión p r e se n t a en
a g e n t e p r o d u c t o r ” . Estas o b s e r v a c i o n e s la
el i n t e r io r de los g lób ulos rojos, unos de
h i cie r o n en nueve casos de la e n f e r m e d a d
e le me n t o s f o r m a especial, que no
de Carrión, seis en p a c i e n t e s víctimas de la
p ue de n considerárseles como
fo r m a grave y tres de ellos de las fo rm as
d e g e n e r a c i o n e s de los hematíes.
leves. Para ese e nton ce s, el Dr. Manuel
Tamayo había f a l l e c i d o a p r i n c i p i o s de
1909 .
En su afán de c o m p a r t i r sus estudios, muchas muestras
o b t e n i d a s p or el Dr. B a r t o n f u e r o n enviadas al extranjero,
a c o m p a ñ a d a s de d e s c r i p c i o n e s muy de tallad as, p ara que
su d e s c u b r i m i e n t o sea co n f ir m a d o . M uch o s se a bstu vie ro n
de r e sp o n d e r, otros, co m o Basse t Smith, c i e n t í f i co inglés,
las co nfirma ro n.
Finalmente, en 1913 , en Lima, la com isió n de la
Un iv e r sid a d de Ha rv a r d p r e s i d i d a p or Rich ar d P. Strong, e
i n t e g r a d a p or Charles T. Brues, Erne st E. Tyzzer y A.
W. Sellards, d e m u e s t r a que B a r t o n tenía razón y que la
f i e b r e grave era p r o d u c i d o po r g é r m e n e s del g e n e r o
Bartonia, proponiendo el n o mb r e de Bartonella
ba cillifo rmis. Esta misma co m isió n c o m e t i ó el e r r o r de
c o n s i d e r a la f i e b r e de La Oroya y la ve rru g a e r u p ti va
co m o dos e n f e r m e d a d e s d if e r e n te s, cre ye n d o que la
seg un da era ca usa d a po r un virus d e s c o n o ci d o . En
1914 , H e r c e l l e s m o s t r ó su o p in ión a dve rsa a la i l u s t r a d a
co m isió n americana, encontrando unidad
a n a t o m o p a t o l ó g i c a e n t r e los dos pr oce sos.
 LA OBRA INCOMPLETA

Después de once años, el feliz y fructífero ritmo de trabajo del Dr. Barton, de manera abrupta, sufrió
una contrariedad; fue relevado del cargo de jefe ad honorem de la sala San Jorge, pretendiéndose
que se haga cargo solo del departamento de Bacteriología. Este acto provocó en él una carta
abierta de renuncia, publicada en La Prensa del Callao, con fecha 18 de mayo de 1916, en la que
tras esbozar lo que fue su accionar en ambas salas, San Jorge y Bacteriología, en el transcurso de
los años previos, en muchas ocasiones el Dr. Barton intento sin éxito el ser relevado de algunos de
sus dos cargos, en los que era indispensable; en el servicio de Bacteriología, por ser el único
especialista, y en la sala de San Jorge, por su ya demostrada capacidad y por su dominio del inglés.
La sala de San Jorge ofrecía rentas a la Beneficencia, producto de la atención a los marineros que
arribaban al Callao y que en su mayoría solo hablaba inglés, pero no solo atendía a estos marinos
sino también a empleados, obreros y gente de escasos recursos.
No obstante, estos antecedentes y sin tomar en
cuenta los deseos del Dr. Barton de continuar
siendo médico de San Jorge y ser relevado en el
de bacteriólogo, los directivos de la Beneficencia
Pública del Callao, tomaron carta sobre el asunto
y lo relevaron del cargo de médico de San Jorge,
dejándole en una situación insostenible para sus
principios, manifestando su intranqulidad : “la
Sociedad de Beneficencia al acordar la citada
división de servicios ha debido cuando menos
tener presente por lo menos mi aspiración
justificada de seguir ocupando el de San Jorge y
que al no hacerlo así, me ha inferido un desaire
inmotivado, que me impone por delicadeza el
deber de renunciar al puesto de Bacteriólogo que
en mi confiara.
Se ignora cuáles fueron las causas de fondo que provocaron esta
estratagema burocrática, hicieron posible que el Dr. Barton se alejara
definitivamente de su gran pasión a la cual dedicó los mejores años de su
vida y a la que aún tenía mucho que ofrecer.
Pues, en la década de los veinte ocurría una carrera por obtener un medio
de cultivo adecuado para el crecimiento y reproducción del germen, consta
que intentó ya desde los tiempos de su tesis de bachiller la obtención de
este medio.
Se ignora del contenido de sus trabajos sobre cultivos que había realizado a
partir de 1909, abandonados de por vida, en 1916, al respecto el propio
Barton dice: “con cuatro ideólogos en la Beneficencia, tiene usted ganado el
camino para hacer obra provechosa. Por lo demás, hay que tener en cuenta
que somos un pueblo demasiado joven para que puedan imperar principios
de elevada cultura”.
Luego de terminar sus labores de manera
tan abrupta en el Hospital Guadalupe, el
Dr. Barton se dedicó a la práctica de la
medicina privada, atendió principalmente
a ciudadanos de origen japonés, y ayudar
en la administración de la fabrica y ocupó
cargos honoríficos diversos. No nos
ocuparemos ahora del resto de su obra,
que comprendió múltiples temas de
infectología, ni de sus cargos y honores
institucionales, dejaremos así, incompleta,
como la dejamos todos, la historia de este
hombre y de su fruto mejor: su familia
Bartonellas.
Haremos simplemente coro a la palabra digna
del Dr. Fortunato Quesada, presidente de la
Academia Nacional de Medicina, en los
funerales del Dr. Barton, fallecido el 25 de
octubre del 1950: “Alberto Barton ha sido el
descubridor. Nadie lo ha podido igualar hasta
hoy en el Perú. Su monumento lo talló él en
persona y lo ha obsequiado a sus semejantes
sin reportar otro beneficio propio que un
triunfo rotundo de peruanidad científica, en
medio de un discreto himno espiritual que es
el mejor diálogo del bronce con el
granito.
GRACIA
S