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D e s a r ro l l o p s i c o m o t o r
del niño de 0 a 18 meses.

Claudia Vargas Ricardo.

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INTRODUCCIÓN:
Durante el primer trimestre de vida, el niño inicia su
integración con el mundo que le rodea. El desarrollo
del niño ocurre de forma secuencial, es decir al
adquirir una habilidad, ésta le lleva a otra. Y el control
motor llevará una dirección de cabeza a tronco .
Durante el primer año de vida el niño se desarrolla con
rapidez, sorprendente, tanto su capacidad perceptiva
como sus habilidades motrices , por lo tanto, el
desarrollo motor va paralelo al psicológico, el cual es
un factor muy importante para el desarrollo de la
efectividad y conocer con todo detalle aquello que lo
rodea.
 El recién nacido
Predomina hipotonía en cabeza y tronco.
Hipertonía en extremidades .
Reencuentra su posición fetal
Fija la mirada, visión confusa.
Reflejo arcaico de presión palmar.
Al principio, puede parecer que su bebé no
hace nada más que comer, dormir, llorar y
ensuciar sus pañales. Al final del primer mes,
estará mucho más alerta y receptivo.
Gradualmente empezará a mover su cuerpo
con más facilidad y con mucha más
coordinación; especialmente para llevar su
mano a la boca. Notará que escucha cuando
usted habla, la observa mientras lo carga y en
ocasiones mueve su cuerpo para responderle o
atraer su atención.
Durante el primer mes
de vida
Durante el primer mes de vida, tumbado boca
arriba, el recién nacido puede girar la cabecita
hacia un lado, y además es capaz de localizar
un ruido y diferenciar la voz humana. A partir
de la semana de vida, reconoce la voz de sus
padres.
Agita sus brazos de forma errática
Lleva sus manos al alcance de sus ojos y boca
Mueve la cabeza de lado a lado mientras está
acostado boca abajo
Deja caer su cabeza hacia atrás si no tiene
soporte
Mantiene sus manos fuertemente empuñadas
Movimientos de reflejo fuertes.
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En recién nacidos de 1 a 3 meses, el desarrollo psicomotor se
basa en la interacción continua con su madre y con el entorno
circundante. Desde el nacimiento hasta el tercer mes de vida,
los recién nacidos comienzan a adquirir sus primeras
habilidades motoras, cognitivas, relacionales y emocionales.
A partir de los 3 meses, al pequeño le gustará estar boca
abajo la mayor parte del tiempo, levantando la cabeza y el
tronco. Además, comenzará a apoyarse en los antebrazos y
empezará a coger fuerza. Sus movimientos serán más
intencionados, aunque no sincronizados totalmente.
 Desarrollo del bebé de
cuatro meses
Siga con la mirada objetos y personas en
movimiento cada vez más rápido. Observe las
caras con mucha atención, centrándose ya no
sólo en los ojos. Siga moviendo las piernas y
los brazos, cada vez con más fuerza, cuando
está tumbado. Mantenga estable la cabeza en
posición erecta.
Con cuatro meses, boca abajo, el bebé se eleva
apoyándose en las manos y levanta la cabeza
hasta los 90º. Mantiene las piernas extendidas.
Boca arriba, extiende los brazos para coger un
objeto y se lo lleva a la boca. Juega con el
sonajero y lo agita, pero no puede cogerlo si lo
tira.
 El desarrollo psicomotor
del bebé de 5 meses.
se caracteriza porque éste empieza a ser capaz
de voltearse, así como comienza a mostrar la
intención de desplazarse reptando. Ya puede
coger un objeto voluntariamente y cambiarlo
de una mano a otra, por lo tanto, cada vez
coordina mejor los movimientos.
Sus movimientos y reflejos (succionar, tragar,
agarrar) funcionan cada vez mejor y se
entrenan de forma intensa. Los rasgos faciales
del bebé continúan desarrollándose. La
coordinación del movimiento y la percepción
sensorial del bebé mejorarán durante el
quinto mes. Ya escucha y percibe estímulos
táctiles.
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Desarrollo del bebé de seis meses:
se sienta apoyándose en un respaldo
se pone de pie con ayuda y, cuando está de
pie, salta mientras está apoyado
se pasa un objeto de una mano a otra
desaparecen los reflejos primitivos propios
de los recién nacidos (como el de
prensión)
alcanza y agarra objetos rastrillando con
los dedos (recoge objetos juntando los
dedos)
se da la vuelta en ambos sentidos (de estar
boca a arriba a boca abajo y viceversa)
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logros del desarrollo: siete meses:
Se gira en ambos sentidos (de boca arriba a boca
abajo y al revés)
Se sienta, primero apoyándose en las manos y luego
sin apoyo
Sostiene todo su peso sobre las piernas
Intenta alcanzar objetos con una mano
Pasa objetos de una mano a otra
Utiliza un agarre de rastrillo (no tipo pinza.
Este es el período en el que aprenderá a coordinar
sus emergentes capacidades de percepción (el uso
de los sentidos como la visión, el tacto y la
audición) y sus habilidades motoras en aumento
para desarrollar destrezas como agarrar, darse
vuelta, sentarse y posiblemente hasta gatear.
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Desarrollo psicomotor del bebé de 8

meses
Podrá rodar y girar su cuerpo, incluso
podrá levantarse, en caso de que esté
tumbado de espaldas, y quedarse en
la posición de sentado. En esta etapa,
el bebé consigue más equilibrio y su
postura está cada vez más erguida,
aunque no del todo.
 El bebé de nueve
meses
Su motricidad fina le permite coger objetos,
tenderlos a sus padres, jugar a tirar los
objetos... El bebé de nueve meses tiene
mucha más fuerza en las piernas, brazos y
manos. Él empieza a juntar el dedo pulgar al
indicador para coger a objetos pequeños.
se sienta sin apoyarse en un respaldo, se
incorpora hasta ponerse de pie, y camina
apoyándose en los muebles.
empieza a agarrar trozos pequeños de
alimento (como trozos de cereales en forma
de "O")
pude sostener un objeto en cada mano al
mismo tiempo
 Bebé de diez meses
Gatear con las manos y las rodillas, siendo un
ejercicio muy beneficioso para su desarrollo
Comienza a ponerse en pie agarrado a los
muebles o a nuestras manos
Sacar las cosas de una caja, explorarlas y
volverlas a guardar, convirtiéndose en uno de
sus pasatiempos favoritos
La motricidad fina mejora, de manera que es
capaz de hacer la pinza con los dedos, agarrar
y utilizar con precisión objetos más pequeños
como el vaso de aprendizaje o el tenedor, y
controlar y suavizar ciertos gestos como las
caricias.
 El bebé de 11 meses
sigue gateando para desplazarse, pero ya
puede caminar apoyándose en los muebles o
agarrado de las manos del adulto. Su
motricidad fina está más desarrollada y puede
coger y manipular objetos cada vez más
pequeños.
Le gusta comer solo y puede hacerlo con los
dedos.
Se desplaza de lado, apoyándose sobre los
muebles. Se cae hacia atrás a menudo.
Gatear sigue siendo su método favorito de
locomoción.
Ya no se lleva todo a la boca aunque sigue
siendo una actividad que le gusta. Ahora,
utiliza mucho más la vista para conocer un
objeto.
 El bebe de 12 meses
Sentarse sin ayuda.
Arrastrarse hacia adelante apoyado en la
barriga, impulsándose con brazos y empujando
con las piernas
Ponerse en cuatro patas.
Gatear apoyado sobre las manos y las rodillas
sosteniendo el tronco.
Cambiar de posición, de estar sentado a
arrastrarse o acostarse boca abajo.
Impulsarse para ponerse de pie.
Caminar agarrándose de los muebles.
Pararse sin apoyo momentáneamente.
Podría dar dos o tres pasos sin apoyo.
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¿Cuál es el objetivo del desarrollo motriz?

El desarrollo psicomotor es un eje fundamental en el aprendizaje de

0 los niños durante la etapa preescolar, pues la mayoría de ellos utiliza
sus movimientos para planear, organizar y experimentar el mundo a
su manera.

1 El juego motor implica el desarrollo de todos los ámbitos de la

personalidad e interactúa en todo su conjunto, potenciando el
desarrollo del ser humano. Ahora bien, la importancia del juego existe
siempre que el alumnado lo traslade a su quehacer diario.
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El desarrollo psicomotor de los niños juega un papel muy relevante en el
progreso de las habilidades básicas de aprendizaje, desde la capacidad para
mantener la atención, la coordinación visomotora o la orientación espacial.
Siendo todos estos aspectos claves para el desarrollo de la lectura y la
escritura.
2 La coordinación entre la mano y el ojo (muy importante en la escritura)
El desarrollo del cuerpo calloso (parte del cerebro que facilita la
comunicación entre los dos hemisferios)
Aumentar el conocimiento del propio cuerpo (aspecto muy importante de cara
al desarrollo de la orientación en el espacio, el cual juega un papel
determinante en el aprendizaje de la lectura y la escritura)
3 Facilita el proceso de lateralización.
Estimula el ritmo y por tanto la orientación temporal.
Facilita el desarrollo de las habilidades visuales.
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