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LA PRUEBA ILÍCITA: LA REGLA

DE EXCLUSIÓN PROBATORIA Y JORGE TADEO GONZÁLEZ


ESTRADA
SUS EXCEPCIONES
PRUEBA ILÍCITA Y PRUEBA
IRREGULAR
PRUEBA ILÍCITA
Es la obtenida y/o practicada con violación a derechos
fundamentales.

PRUEBA IRREGULAR
Es aquella obtenida, propuesta o practicada con infracción de la
normativa procesal que regula el procedimiento probatorio pero
sin afectación nuclear de derechos fundamentales.
FUNDAMENTO DE LA REGLA
DE EXCLUSIÓN
MODELOS TEÓRICO
EXPLICATIVOS
NORTEAMERICANO EUROPEO CONTINENTAL
• La regla de exclusión probatoria tiene un
• Es desconstitucionalizado
componente constitucional
• Su verdadero y único fundamento era disuadir • Su fundamento es el reconocimiento del Estado
a la policía de llevar a cabo actividades de de Derecho, caracterizado por la
investigación ilícitas (deterrent effect) funcionalización de todos los poderes públicos al
• El TSFN ha descartado la regla de exclusión servicio de la garantía de los derechos
cuando las pruebas se obtengan por fundamentales y la consagración constitucional
particulares, cuando son recabadas por de estos últimos
• Bajo este anclaje debe resultar indiferente si la
autoridades extranjeras o cuando la policía
prueba fue obtenida por particulares o si la
hubiere actuado de buena fe autoridad actuó de buena fe.
EFECTOS DE LA PRUEBA
ILÍCITA
La prueba ilícita practicada con vulneración de
derechos fundamentales conlleva su inutilizabilidad
procesal, esto es, la prohibición de su admisión y su
valoración.
EFICACIA REFLEJA DE LA
PRUEBA ILÍCITA
Tiene su origen en la jurisprudencia norteamericana, mediante la doctrina de
los frutos del árbol envenenado. (Silverthorne Lumber Co. Vs U.S. 1920.
Aprehensión ilícita de documentos por parte de agentes federales cuyo
examen permitió el descubrimiento de nuevas pruebas de cargo).

La eficacia refleja de la prueba ilícita se formula de la siguiente manera:


“La exclusión abarca no sólo a la prueba originaria practicada ilícitamente,
sino también a aquellas pruebas (derivadas) que aunque han sido obtenidas
lícitamente, esto es, constitucionalmente, tienen su origen en informaciones o
datos obtenidos como consecuencia de la actuación ilícita inicial”
EXCEPCIONES A LA
APLICACIÓN DE LA REGLA DE
EXCLUSIÓN. LA EXCEPCIÓN
DE BUENA FE.
Dicha excepción tiene su origen en la jurisprudencia del Tribunal Supremo Federal norteamericano.
Así, se aplicó en el caso Leon vs. US (468 US 897, 1984), en un supuesto en que la policía efectuó un
allanamiento (registro domiciliario) basado en un mandamiento judicial que creía válido, pero que
posteriormente un Tribunal superior concluyó que se había violado la IV Enmienda pues había sido
emitido sin concurrir causa probable. A pesar de ello, la Corte Suprema permitió la presentación de
tales pruebas obtenidas con ocasión del registro por estimar que la policía había actuado de buena fe,
en la creencia de que su actuación estaba amparada en un mandamiento judicial legal, por lo que no
podía predicarse una finalidad disuasoria de su exclusión. Como se argumentó en dicha sentencia,
cuando la policía actúa de buena fe, en la creencia de que su comportamiento se ajusta al ordenamiento
jurídico y no viola derecho fundamental alguno, la exclusión de la prueba así obtenida carece de
justificación, pues con ello no se consigue el efecto de prevenir conductas policiales futuras de carácter
ilícito (deterrent effect).
La regla de exclusión carece, en estos casos, de eficacia disuasoria.
EXCEPCIONES AL EFECTO
REFLEJO. LA EXCEPCIÓN DE
LA FUENTE INDEPENDIENTE.
En realidad no nos encontramos ante una verdadera excepción, sino que su
reconocimiento es consecuencia de la propia delimitación del alcance de la regla
de exclusión. Obviamente si la prueba utilizada no guarda ningún tipo de conexión
con la prueba ilícita inicial, no se cumple el presupuesto esencial determinante del
reconocimiento de eficacia refleja. Para poder apreciar dicha excepción será necesario que
exista, por tanto, una verdadera desconexión causal entre la prueba ilícita original y la
prueba derivada.
El Tribunal Constitucional Español por ejemplo ha determinado como verdadera causa de
exclusión del efecto reflejo, cuando entre la prueba ilícita y la jurídicamente independiente
opera un largo periodo de tiempo.
LA EXCEPCIÓN DEL DESCUBRIMIENTO INEVITABLE

En su formulación norteamericana, según dicha excepción no cabría la exclusión de la prueba si la misma


hubiera sido descubierta inevitablemente por una actuación policial respetuosa con los derechos
fundamentales, independiente de la inicial ilicitud cometida. Dicha excepción se apreció, como
modalidad de la excepción de la fuente independiente, en el caso Nix vs. Williams (467 US 431,1984).
Resumidamente los hechos analizados eran los siguientes: durante un interrogatorio ilegal el acusado
confesó ser el culpable de un homicidio y llevo a la policía al lugar donde había enterrado a la víctima. El
Tribunal excluyó las declaraciones del acusado, sin embargo, no aceptó que el cuerpo de la víctima fuera
también excluido como resultado del interrogatorio ilegal ya que el mismo se habría descubierto en
cualquier caso durante la búsqueda que estaba teniendo lugar antes de la declaración por más de
doscientos voluntarios según un plan de rastreo que incluía la zona donde finalmente se encontró el
cadáver. El Tribunal Supremo Federal norteamericano admitió el resultado de la confesión
inconstitucional sobre la base de que, aunque ésta no se hubiera producido, el cuerpo de la víctima habría
sido inevitablemente encontrado con tan sólo una pocas horas de diferencia durante la batida policial que
estaba teniendo lugar en la zona.
LA EXCEPCIÓN DEL NEXO CAUSAL ATENUADO

Esta excepción es, en realidad, una variante de la excepción de la fuente independiente que ya hemos
expuesto. Se apreció, por primera vez, en el caso Wong Sun vs. US (371 US 471, 1963). Se trataba
de un supuesto en que se había producido una entrada ilegal en un domicilio que motivó la detención
de una persona (A); ésta en su declaración acusó a otra persona (B) de haberle vendido la droga
ocupada. Como consecuencia de esta declaración se procedió a la detención de B, incautándose una
determinada cantidad de droga, implicando en su declaración a un tercero (C), que también fue
detenido fruto de la ilegalidad inicial. Varios días después, tras haber sido puesto en libertad bajo
fianza, C se personó voluntariamente en las dependencias policiales efectuando una confesión
voluntaria y con previa información de sus derechos ante los agentes policiales que le interrogaron.

El Tribunal rechazó todas las pruebas menos esta última confesión, aun reconociendo que si no
hubiera existido la inicial entrada ilegal probablemente no se hubiera producido, pero destacó la
voluntariedad de dicha confesión y el que se le hubiera advertido previamente de sus derechos, lo
que a juicio del Tribunal Supremo norteamericano introducía un acto independiente sanador que
rompía la cadena causal con la vulneración inicial.
CONSTITUCIÓN FEDERAL
“Artículo 20. El proceso penal será acusatorio y oral. Se regirá
por los principios de publicidad, contradicción, concentración,
continuidad e inmediación.

A. De los principios generales:


IX. Cualquier prueba obtenida con violación de derechos


fundamentales será nula…”
CÓDIGO DE PROCEDIMIENTOS
PENALES CHIAPAS
(ACUSATORIO)
“Artículo 101.- Declaración de nulidad Cuando no sea posible sanear o convalidar
un acto, el juez deberá declarar su nulidad por auto fundado o señalar
expresamente la nulidad del acto en la resolución respectiva, de oficio o a petición
de parte.
Al declarar la nulidad, el juez establecerá, los actos nulos por su relación con el
acto anulado, salvo que se pueda demostrar la atenuación del vínculo, el
descubrimiento inevitable o la existencia de una fuente independiente que permita la
convalidación del acto mediante supresión hipotética.”
CÓDIGO NACIONAL DE
PROCEDIMIENTOS PENALES
“Artículo 264. Nulidad de la prueba

Se considera prueba ilícita cualquier dato o prueba obtenidos con violación de los
derechos fundamentales, lo que será motivo de exclusión o nulidad.

Las partes harán valer la nulidad del medio de prueba en cualquier etapa del
proceso y el juez o Tribunal deberá pronunciarse al respecto.”
PRUEBA ILÍCITA BAJO LA
PERSPECTIVA DE LA SCJN
Época: Novena Época, Registro: 161221, Instancia: Primera Sala, Tipo de Tesis: Aislada, Fuente: Semanario Judicial
de la Federación y su Gaceta, Tomo XXXIV, Agosto de 2011, Materia(s): Constitucional, Tesis: 1a. CLXII/2011,
Página: 226,

PRUEBA ILÍCITA. LAS PRUEBAS OBTENIDAS, DIRECTA O INDIRECTAMENTE, VIOLANDO DERECHOS


FUNDAMENTALES, NO SURTEN EFECTO ALGUNO.
La fuerza normativa de la Constitución y el carácter inviolable de los derechos fundamentales se proyectan sobre todos
los integrantes de la colectividad, de tal modo que todos los sujetos del ordenamiento, sin excepciones, están obligados
a respetar los derechos fundamentales de la persona en todas sus actuaciones, incluyendo la de búsqueda y ofrecimiento
de pruebas, es decir, de aquellos elementos o datos de la realidad con los cuales poder defender posteriormente sus
pretensiones ante los órganos jurisdiccionales. Así, a juicio de esta Primera Sala de la Suprema Corte de Justicia de la
Nación, las pruebas obtenidas, directa o indirectamente violando derechos fundamentales, no surtirán efecto alguno.
Esta afirmación afecta tanto a las pruebas obtenidas por los poderes públicos, como a aquellas obtenidas, por su cuenta
y riesgo, por un particular. Asimismo, la ineficacia de la prueba no sólo afecta a las pruebas obtenidas directamente en
el acto constitutivo de la violación de un derecho fundamental, sino también a las adquiridas a partir o a resultas de
aquéllas, aunque en su consecución se hayan cumplido todos los requisitos constitucionales. Tanto unas como otras han
sido conseguidas gracias a la violación de un derecho fundamental -las primeras de forma directa y las segundas de
modo indirecto-, por lo que, en pura lógica, de acuerdo con la regla de exclusión, no pueden ser utilizadas en un proceso
judicial.
EFECTO CORRUPTOR
Época: Décima Época, Registro: 2003564, Instancia: Primera Sala, Tipo de Tesis: Aislada, Fuente: Semanario Judicial de la
Federación y su Gaceta, Libro XX, Mayo de 2013, Tomo 1, Materia(s): Penal, Tesis: 1a. CLXVII/2013 (10a.), Página: 537-

EFECTO CORRUPTOR DEL PROCESO PENAL. SUS DIFERENCIAS CON LA REGLA DE EXCLUSIÓN DE LA
PRUEBA ILÍCITAMENTE OBTENIDA.
Esta Primera Sala de la Suprema Corte de Justicia de la Nación ha establecido en la tesis aislada 1a. CLXII/2011 de rubro:
"PRUEBA ILÍCITA. LAS PRUEBAS OBTENIDAS, DIRECTA O INDIRECTAMENTE, VIOLANDO DERECHOS
FUNDAMENTALES, NO SURTEN EFECTO ALGUNO.", que toda prueba obtenida, directa o indirectamente violando
derechos fundamentales, no surtirá efecto alguno. Asimismo, ha establecido que la ineficacia de la prueba no sólo afecta a
las pruebas obtenidas directamente en el acto constitutivo de la violación de un derecho fundamental, sino también a las
adquiridas a partir o a resultas de aquéllas, aunque en su consecución se hayan cumplido todos los requisitos
constitucionales. Tanto unas como otras han sido conseguidas gracias a la violación de un derecho fundamental -las
primeras de forma directa y las segundas de modo indirecto-, por lo que, en pura lógica, no pueden ser utilizadas en el
proceso penal. A esta cuestión se le conoce como la regla de exclusión de la prueba ilícitamente obtenida, la cual tiene
como objetivo eliminar del caudal probatorio aquellas pruebas que hayan sido obtenidas contraviniendo las normas
constitucionales, pero que, sin embargo, no afecta la validez del proceso, ya que el juez podrá valorar el resto de pruebas no
afectadas, ya sea en ese momento procesal o en una futura reposición del procedimiento. Por el contrario, cuando el juez
advierta la actualización de los supuestos que actualizan el efecto corruptor del proceso penal, de acuerdo a lo establecido
por esta Primera Sala, no podrá pronunciarse sobre la responsabilidad penal del acusado, ya que el actuar de la autoridad ha
provocado condiciones sugestivas en la evidencia incriminatoria que conllevan la falta de fiabilidad de todo el material
probatorio, viciando tanto el procedimiento en sí mismo como sus resultados, por lo que procede decretar la libertad del
acusado cuando la violación produce la afectación total del derecho de defensa.
Época: Décima Época, Registro: 160509 , Instancia: Primera Sala , Tipo de Tesis: Jurisprudencia , Fuente:
Semanario Judicial de la Federación y su Gaceta , Libro III, Diciembre de 2011, Tomo 3 , Materia(s):
Constitucional , Tesis: 1a./J. 139/2011 (9a.), Página: 2057 ,

PRUEBA ILÍCITA. EL DERECHO A UN DEBIDO PROCESO COMPRENDE EL DERECHO A NO SER


JUZGADO A PARTIR DE PRUEBAS OBTENIDAS AL MARGEN DE LAS EXIGENCIAS
CONSTITUCIONALES Y LEGALES.

Exigir la nulidad de la prueba ilícita es una garantía que le asiste al inculpado durante todo el proceso y cuya
protección puede hacer valer frente a los tribunales alegando como fundamento: (i) el artículo 14
constitucional, al establecer como condición de validez de una sentencia penal, el respeto a las formalidades
esenciales del procedimiento, (ii) el derecho de que los jueces se conduzcan con imparcialidad, en términos
del artículo 17 constitucional y (iii) el derecho a una defensa adecuada que asiste a todo inculpado de acuerdo
con el artículo 20, fracción IX de la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos. En este sentido, si
se pretende el respeto al derecho de ser juzgado por tribunales imparciales y el derecho a una defensa
adecuada, es claro que una prueba cuya obtención ha sido irregular (ya sea por contravenir el orden
constitucional o el legal), no puede sino ser considerada inválida. De otra forma, es claro que el inculpado
estaría en condición de desventaja para hacer valer su defensa. Por ello, la regla de exclusión de la prueba
ilícita se encuentra implícitamente prevista en nuestro orden constitucional. Asimismo, el artículo 206 del
Código Federal de Procedimientos Penales establece, a contrario sensu, que ninguna prueba que vaya contra el
derecho debe ser admitida. Esto deriva de la posición preferente de los derechos fundamentales en el
ordenamiento y de su afirmada condición de inviolables.
Época: Décima Época, Registro: 2009007, Instancia: Primera Sala, Tipo de Tesis: Jurisprudencia, Fuente: Gaceta del
Semanario Judicial de la Federación , Libro 18, Mayo de 2015, Tomo I, Materia(s): Constitucional, Penal, Tesis: 1a./J.
34/2015 (10a.), Página: 267

DEFENSA ADECUADA EN MATERIA PENAL. LA VIOLACIÓN AL CARÁCTER TÉCNICO DEL DERECHO


HUMANO GENERA LA ILICITUD DE LA DECLARACIÓN RENDIDA POR EL IMPUTADO SIN LA
ASISTENCIA JURÍDICA DE UN DEFENSOR PROFESIONAL EN DERECHO, POR LO QUE DEBE SER
OBJETO DE EXCLUSIÓN VALORATIVA.

Esta Primera Sala de la Suprema Corte de Justicia de la Nación ha establecido que de la interpretación armónica de
los artículos 14, 17 y 20, fracción IX, de la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos, en su texto
anterior a la reforma publicada en el Diario Oficial de la Federación el 18 de junio de 2008, deriva el reconocimiento
implícito del derecho fundamental a la exclusión de prueba ilícita en materia penal, tal como se refleja en el contenido
de la jurisprudencia 1a./J. 139/2011 (9a.), que tiene el rubro: "PRUEBA ILÍCITA. EL DERECHO A UN DEBIDO
PROCESO COMPRENDE EL DERECHO A NO SER JUZGADO A PARTIR DE PRUEBAS OBTENIDAS AL
MARGEN DE LAS EXIGENCIAS CONSTITUCIONALES Y LEGALES.". Lo anterior significa que la exclusión de
la prueba ilícita es una garantía del derecho a ser juzgado por tribunales imparciales, a contar con una defensa
adecuada y a que se respete el debido proceso, derivado de la posición preferente de los derechos humanos en el
ordenamiento jurídico y su condición de inviolabilidad. En consecuencia, toda prueba que haya sido obtenida con
violación al derecho del imputado (lato sensu) a contar con una defensa adecuada tendrá el carácter de ilícito, como
acontece cuando declara sin la asistencia jurídica de un defensor que tenga el carácter de profesional en derecho
(abogado particular o defensor público). Por lo que no puede tomarse en cuenta para efectos de valoración al dictar
cualquier resolución por la que se determine la situación jurídica de la persona sujeta a un procedimiento penal.
FUENTE INDEPENDIENTE
Época: Décima Época, Registro: 2009552 , Instancia: Tribunales Colegiados de Circuito, Tipo de Tesis: Jurisprudencia, Fuente: Gaceta
del Semanario Judicial de la Federación, Libro 20, julio de 2015, Tomo II , Materia(s): Constitucional, Penal, Tesis: I.9o.P. J/16 (10a.) ,
Página: 1583 . Noveno Tribunal Colegiado en Materia Penal del Primer Circuito.
PRUEBA ILÍCITA. EL HECHO DE QUE LA DECLARACIÓN MINISTERIAL DEL INCULPADO O SU RECONOCIMIENTO POR
LA VÍCTIMA A TRAVÉS DE LA CÁMARA DE GESELL, SE DECLAREN NULOS POR HABERSE OBTENIDO SIN LA
ASISTENCIA DE SU ABOGADO, NO IMPLICA QUE LAS PRUEBAS DESAHOGADAS EN EL PROCESO, INDEPENDIENTES
Y SIN NINGUNA CONEXIÓN CAUSAL CON AQUELLAS DILIGENCIAS, DEBAN EXCLUIRSE DEL ANÁLISIS
CORRESPONDIENTE, POR CONSIDERAR QUE DERIVAN DE LA VIOLACIÓN AL PRINCIPIO DE SU EXCLUSIÓN.
La exclusión de las pruebas obtenidas con violación a un derecho fundamental forma parte de una garantía procesal constitucional, que
impide la utilización de todo aquello que derive directa o indirectamente de dicha lesión; ello, porque como lo señaló la Suprema Corte
de Justicia de la Nación, la exclusión de la prueba ilícita -como garantía que le asiste al inculpado en todo proceso, íntimamente ligada
con el respeto irrestricto al debido proceso, a ser juzgado por un Juez imparcial, como complemento de una tutela judicial efectiva y por
virtud del cual se protege la defensa adecuada del inculpado-, tiene un efecto reflejo, ya que también son ilícitas las pruebas obtenidas
indirectamente a partir de la lesión a un derecho fundamental; sin embargo, el hecho de que la declaración ministerial del inculpado o
su reconocimiento por la víctima a través de la cámara de Gesell, se declaren nulos por haberse obtenido sin la asistencia de su
abogado, no implica que las pruebas desahogadas en el proceso, independientes y sin alguna conexión causal con aquellas diligencias
(como por ejemplo las testimoniales de descargo que ofrezca su defensa o los careos constitucionales), deban excluirse del análisis
correspondiente por considerarse que derivan de la violación al derecho mencionado; ello, porque si dichas probanzas no mantienen
una conexión causal con las pruebas decretadas como ilícitas, constituyen una fuente independiente de las declaraciones del imputado y
de la diligencia donde la víctima lo reconoció a través de la cámara de Gesell sin la presencia de su defensor, esto es, no hay conexión
entre la ilegalidad de éstas y la prueba cuya obtención pretende relacionarse con esa falta -testimoniales de descargo o careos-, máxime
si éstos se desahogaron en ejercicio del derecho de defensa adecuada que le asiste al inculpado, y observando las formalidades del
debido proceso; luego, es válido que el Tribunal Colegiado de Circuito confronte dichas testimoniales con el material probatorio de
cargo, a fin de tutelar el derecho del justiciable a que las probanzas de descargo se ponderen con las de cargo, bajo el principio de
contradicción.
VÍNCULO ATENUADO
Época: Décima Época, Registro: 2005726, Instancia: Tribunales Colegiados de Circuito, Tipo de Tesis: Jurisprudencia, Fuente: Gaceta del
Semanario Judicial de la Federación, Libro 3, Febrero de 2014, Tomo III, Materia(s): Constitucional, Penal, Tesis: I.9o.P. J/12 (10a.), Página: 2065

PRUEBA ILÍCITA. VALORACIÓN DEL PRINCIPIO DE SU PROHIBICIÓN O EXCLUSIÓN DEL PROCESO, BAJO LA ÓPTICA DE LA
TEORÍA DEL VÍNCULO O NEXO CAUSAL ATENUADO EN LA DECLARACIÓN DEL INCULPADO.
Un derecho fundamental que asiste al inculpado durante todo el proceso es la prohibición o exclusión de la prueba ilícita, alegando como
fundamento el derecho a un debido proceso (artículo 14 de la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos), a que los Jueces se
conduzcan con imparcialidad (artículo 17 constitucional) y a una defensa adecuada (artículo 20, apartado B, fracción VIII, constitucional); por
ende, bajo el criterio de esta prerrogativa, tanto su declaración ministerial asistido por persona de confianza y no por licenciado en derecho, carece
de valor probatorio alguno, así como sus posteriores declaraciones, ministeriales o judiciales, si sólo se constriñen a su ratificación, sin que se
estimen convalidadas, no obstante que sean rendidas en presencia de su defensor, licenciado en derecho y del Juez de la causa; lo anterior, según
este principio de prohibición o exclusión de la prueba ilícita, pues la nulidad de dichas actuaciones no se supedita a actos posteriores que puedan
interpretarse como su consentimiento o superación contraria a derecho, la cual dejó en estado de indefensión al inculpado. Sin embargo, bajo la
óptica de la teoría del vínculo o nexo causal atenuado, en el escenario del proceso propiamente dicho, observando los derechos constitucionales y
legales ante sede judicial, si en presencia del Juez, del Ministerio Público, del defensor, licenciado en derecho y del secretario fedatario de la
diligencia, el inculpado, de manera libre, voluntaria y espontánea, declara en relación con el hecho imputado, ya sea en el mismo contexto de su
declaración ministerial o en sentido diverso, admitiendo ciertos hechos, negando otros o haciendo valer causas de exclusión del delito, no obstante
que esas manifestaciones puedan estar relacionadas con la ilicitud de la declaración inicial, si se advierte que la conexión es tan tenue entre ambas,
que su exclusión se considere desproporcionada y carente de real utilidad, esa conexión causal puede darse por rota o inexistente jurídicamente, ya
que la admisión voluntaria de los hechos no puede considerarse como un aprovechamiento de la lesión inicial de su derecho fundamental de
prohibición o exclusión de la prueba ilícita. En consecuencia, es legal que el Juez de la causa o el tribunal de apelación, lleve a cabo una valoración
del principio de prohibición o exclusión de la prueba ilícita, bajo la teoría en cuestión, ponderando cada caso en particular, en tutela judicial efectiva
de los derechos de debido proceso, defensa adecuada, presunción de inocencia y sustancialmente del principio contradictorio (sustentado en los
argumentos de defensa del imputado) y, conforme a su libre convicción, a las reglas de la lógica, los conocimientos científicos y la máxima de la
experiencia, sometidos a la crítica racional, justiprecie lo tenue o débil del vínculo o nexo causal entre la prueba ilícita y la derivada, y determine
incluso, su inexistencia; sin que sea óbice a lo anterior que el juzgador, por el contrario, considere indivisible dicho vínculo y, por tanto, aplicable la
exclusión de la prueba ilícita y la derivada.
EL RECONOCIMIENTO DE LA
SCJN A LAS EXCEPCIONES
DEL EFECTO REFLEJO (2015)
Época: Décima Época , Registro: 2010354 , Instancia: Primera Sala, Tipo de Tesis: Aislada, Fuente: Gaceta del Semanario Judicial de la Federación, Libro 24, Noviembre de 2015, Tomo I, Materia(s):
Constitucional, Penal, Tesis: 1a. CCCXXVI/2015 (10a.), Página: 993:

PRUEBA ILÍCITA. LÍMITES DE SU EXCLUSIÓN. La exclusión de la prueba ilícita aplica tanto a la prueba obtenida como
resultado directo de una violación constitucional, como a la prueba indirectamente derivada de dicha violación; sin embargo,
existen límites sobre hasta cuándo se sigue la ilicitud de las pruebas de conformidad con la cadena de eventos de la violación
inicial que harían posible que no se excluyera la prueba. Dichos supuestos son, en principio, y de manera enunciativa y no
limitativa, los siguientes: a) si la contaminación de la prueba se atenúa; b) si hay una fuente independiente para la prueba; y c) si
la prueba hubiera sido descubierta inevitablemente. Sobre el primer supuesto, a saber, la atenuación de la contaminación de la
prueba, se podrían tomar, entre otros, los siguientes factores para determinar si el vicio surgido de una violación constitucional
ha sido difuminado: a) cuanto más deliberada y flagrante sea la violación constitucional, mayor razón para que el juzgador
suprima toda evidencia que pueda ser vinculada con la ilegalidad. Así, si la violación es no intencionada y menor, la necesidad de
disuadir futuras faltas es menos irresistible; b) entre más vínculos (o peculiaridades) existan en la cadena entre la ilegalidad
inicial y la prueba secundaria, más atenuada la conexión; y c) entre más distancia temporal exista entre la ilegalidad inicial y la
adquisición de una prueba secundaria, es decir, que entre más tiempo pase, es más probable la atenuación de la prueba. En
relación con el segundo supuesto es necesario determinar si hay una fuente independiente para la prueba. Finalmente, el tercer
punto para no excluir la prueba consistiría en determinar si ésta hubiera sido descubierta inevitablemente en el proceso. Dicho
supuesto se refiere, en general, a elementos que constituyan prueba del delito que hubieran sido encontrados independientemente
de la violación inicial. La aplicación del anterior estándar debe hacerse en cada caso concreto.
Amparo en revisión 338/2012. 28 de enero de 2015. Cinco votos de los Ministros Arturo Zaldívar Lelo de Larrea, José Ramón Cossío Díaz, Jorge Mario Pardo Rebolledo, quien formuló voto concurrente,
Olga Sánchez Cordero de García Villegas y Alfredo Gutiérrez Ortiz Mena. Ponente: Alfredo Gutiérrez Ortiz Mena. Secretaria: Karla I. Quintana Osuna.
Esta tesis se publicó el viernes 6 de noviembre de 2015 a las 10:30 horas en el Semanario Judicial de la Federación.

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