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ÉTICA

9.- ARISTÓTELES: JUSTICIA COMO VIRTUD (GONZALO GAMIO GEHRI)


ARISTÓTELES Y LA JUSTICIA: ANTECEDENTES

• Platón y Simónides. Justicia como “dar a cada cual lo suyo” (República 332c).
• Pueden plantearse tres “criterios” posibles de distribución “justa”: el mérito, la igualdad o las necesidades.
• Puedo distribuir un bien dando a cada uno de sus destinatarios igual cantidad de lo mismo.
• Puedo también optar por dar más a quien ha contribuido más con la comunidad, o concederle más a quien es
considerado un agente económico más competitivo en el mercado (probablemente en el mundo que vivimos,
esta sea la clase de mérito que aceptarían con mayor facilidad los agentes distributivos ordinarios, aunque no
sea ciertamente la única).
• Puedo repartir estos bienes concentrando mi atención en aquellos que los necesitan con mayor urgencia, por
hallarse – por ejemplo - en una situación de precariedad social y económica.
CLASES DE JUSTICIA

• Esta forma concreta de justicia se propone configurar la polis como una comunidad basada en la reciprocidad en el orden de las
conductas como en el de la distribución de los recursos y las ventajas de la vida política.
• Es preciso precisar los modos en los que hemos de “dar a cada uno lo suyo”.
• Justicia Universal = Virtud. Justicia particular es una virtud entre otras.
• Aristóteles distingue claramente entre la justicia correctiva y la justicia distributiva en virtud de aquello que pretende regularse en
vista al logro del bien común. Se trata de dos formas de observar y buscar el bien y la armonía en la vida comunitaria. La justicia
correctiva se ocupa de corregir los modos de trato en la comunidad, tanto si son voluntarios – Aristóteles se refiere a la regulación
de los contratos, y las diversas transacciones económicas – y sin son involuntarios, esto es, el castigo de los delitos (sean estos
actos de defraudación o violencia).
• La justicia distributiva, por su parte, centra su atención en el reparto de bienes entre los que forman parte del régimen político con
el fin de que se preserve en su interior la proporción correcta entre el dar y el recibir. Cualquier forma grave de desigualdad
destruiría la comunidad política y socavaría el sentido de pertenencia y amistad cívica que la sostiene.
JUSTICIA CORRECTIVA

• La justicia correctiva pretende regular los modos de trato observando rigurosamente el principio de igualdad.
Uno deber recibir lo mismo que uno hace.
• La idea posterior de la justicia como una divinidad que lleva una venda sobre sus ojos, para asegurar una
conducta imparcial tiene en más de un sentido su origen en esta especie de la justicia. Ninguna consideración
externa a la acción que es objeto de juicio en los tribunales es relevante para el ejercicio de la justicia: evalúa
sólo lo relativo a la acción, pero todo lo involucrado con ella.
• Juez --------- Establece conexión entre la ley (que es universal) y la situación (particular).
• “No importa, en efecto” – afirma Aristóteles – que un hombre bueno haya despojado a uno malo o al revés,
(….)la ley sólo mira la naturaleza del daño y trata a ambas partes como iguales, al que comete la injusticia y
al que la sufre, al que perjudica y al perjudicado”.
JUSTICIA DISTRIBUTIVA

• La justicia distributiva se ocupa del reparto proporcional – desarrollado por los miembros e instituciones de la
polis – de los llamados bienes exteriores, con el fin de promover el bienestar y la estabilidad de la comunidad.
Los bienes exteriores son aquellos recursos o modos de estimación social o disfrute cuya adquisición sólo en
parte depende del esfuerzo y de las acciones humanas, de modo que su presencia o ausencia escapan de nuestra
capacidad de control y previsión. Mientras que las virtudes – los bienes interiores – se incorporan a la vida a
través del ejercicio, la experiencia y la educación, la posesión de los bienes exteriores depende de las vicisitudes
de la fortuna (tyché).
• El placer, las riquezas, la salud, la seguridad, los honores y la amistad son bienes de esta especie. El individuo
puede esforzarse a lo largo por lograr estos bienes, no obstante – a diferencia del caso de la adquisición de las
virtudes – el grado de éxito o de fracaso dependerá, al menos en algún sentido importante, de ciertas
circunstancias externas a la acción del agente.
JUSTICIA DISTRIBUTIVA EN EJERCICIO

• En determinados contextos – la asignación de excedentes de producción, la concesión de


honores, la determinación del acceso de los ciudadanos a los servicios de salud o a los
períodos de ocio, etc. – la polis tendrá que tomar decisiones sobre su distribución entre
los miembros de la comunidad. Ello no significa, como es evidente, que las instituciones
políticas puedan sustraerse a la presencia o ausencia de la tyché. Ninguna persona o
entidad inserta en el movedizo mundo de los asuntos humanos es inmune a su influencia.
DISTRIBUCIÓN JUSTA

• En este contexto es pertinente recordar aquello que discutíamos en la introducción de nuestra


investigación respecto de la generalidad de la expresión “dar a cada cual lo suyo”, en materia de la
distribución de los bienes exteriores.
• Es claro que distribuir determinados ‘bienes’ – por ejemplo, honores o el acceso a la seguridad, o a la
atención médica – de acuerdo con los méritos o las necesidades va en contra de la igualdad simple,
pues estamos considerando como valiosas las diferencias, como significativas para el reparto justo.
• Si tenemos que distribuir una condecoración académica, por ejemplo, y otorgamos diplomas de
estudios no sólo a los estudiantes que cumplen con los requisitos de excelencia que prescribe la
academia, sino a todos los alumnos del aula, estaríamos actuando injustamente.
JUSTICIA Y PRUDENCIA

• El agente distributivo debe ser phronimós, debe estar en capacidad de reconocer qué
bienes están en juego, pero sobre todo examinar la especificidad de las circunstancias,
vale decir, sumergirse en lo particular: enlazar el “qué” buscamos repartir con el “para
quiénes”.
• Si en la justicia correctiva la imagen de la divinidad vendada describía muy bien el ideal
de absoluta imparcialidad que la guía, en el caso de la justicia distributiva esta imagen no
refleja su carácter ni sus fines. Para su ejercicio es preciso saber mirar.
• Justicia y philía.
JUSTICIA DISTRIBUTIVA Y CIUDADANÍA

• “No hemos formado una comunidad sólo para vivir bien”. Las diferentes poleis son
comunidades distributivas. La actividad que conduce a la determinación de los principios de
la justicia distributiva es una practica eminentemente pública, pues es la comunidad es la que
delibera y elige los principios relevantes en el reparto de la riqueza, los honores, el acceso a la
seguridad, la salud, etc. La polis tiene que estar en capacidad de ponerse de acuerdo sobre qué
principio aplicar – la igualdad, los méritos de diversa clase, las necesidades – según el caso.
• Philía politiké. Ejercicio de la philía en el ágora. Compromiso cívico. Homonóia.
• Homonóia ------- Comunidad de pensamiento.

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