REQUISITOS DE LO

S TÍTULOS DE CRÉ
DITO
 REQUISITOS DE LOS TÍTULOS DE CRÉDITO

Artículo 386. Requisitos.

Este artículo señala los requisitos de forma que un título de crédito debe contener; y, no
necesariamente se creará sobre un formulario previamente impreso, sino que puede hacerse
sobre una simple hoja de papel bond. Necesario es entonces, que se tengan en cuenta los
elementos de forma que la ley requiere en todo título en forma general, en el entendido que
deberán también incluirse los que son propios de cada título en particular.

Característica contenida en este artículo: Formulismo.

Dentro de los cinco requisitos generales, establecidos en este artículo, hay dos que la ley
permite que sean subsanados, que son aquellos casos en que por una omisión se hubieren
dejado de consignar. Esos requisitos son a los que se refiere el inciso segundo y el cuarto,
ambos en cuanto a lugar fecha, uno de creación y el otro de cumplimiento.

A diferencia de los que se señalan en los incisos primero, tercero y quinto que son
requisitos esenciales que la ley no presume y que de hacer falta, hace ineficaz o
inexistente el título.

También en cuanto a este punto, la misma ley señala que si en algún título se omitió un
requisito que la ley no subsana, eso no significa que el negocio o acto que dio origen al
título se vea afectado. Por ejemplo, si se vende un refrigerador al crédito y por la deuda se
emite una letra de cambio a favor del vendedor, si el creado olvidó firmar el título y después
se negare a hacerlo, por ese hecho el título no existe porque es un requisito que la ley no
subsana. Pero eso no afecta la compraventa del refrigerador, el comprador sigue siendo
deudor, pero ya no se podrá cobrar mediante la letra, sino que por otros procedimientos
ajenos al título de crédito.
Artículo 387. Facultades de llenar requisitos.

Lo que este artículo trata de normar son aquellos casos en que las partes hubieren acordado omitir
algún requisito o mención del título porque así conviene a los intereses de las partes. En una letra de
cambio, por ejemplo, se pudo haber dejado en blanco la forma de vencimiento, quedando facultado el
beneficiario para llenarlo posteriormente, pero sobre ciertas bases pactadas por las partes. Si el
facultado para llenar lo omitido, incumple, adquiere responsabilidad frente a la otra parte y ésta
puede interponer excepciones, dentro de las que se encuentra lo que los autores españoles llaman
Exceptio Doli, en otras palabras, haber actuado con dolo al incumplir el acuerdo de voluntades que
permitió la omisión. Pero en el entendido que dicha defensa tendría validez en cuanto a los sujetos
que convinieron en la omisión, no así frente a un tercero de buena fe que estaría amparado por el
principio de literalidad y de autonomía.
Artículo 388. Diferencias en lo escrito.

Característica contenida en este artículo: Literalidad

La razón por la que la obligación se rige por lo escrito en letras, es por la mayor dificultad de falsear una
cantidad escrita en letras que en número.

Villegas Lara, cita un hecho real, para ejemplificar este artículo: un sujeto extendió un cheque por quinientos
quetzales. Al hacer el cinco en número la gráfica daba la sensación visual que era un uno sobre el cual se
había repasado un cinco. El banco, no quería pagar, pero cuando se le argumentó con base en este artículo se
vio obligado a hacerlo efectivo. En cuanto al último supuesto, o sea el caso de variadas o diferentes
cantidades, se estará a la suma menor con base en el principio del favor debitoris del derecho civil, o sea que
cuando hay duda en los alcances de una obligación se interpreta en el sentido de lo que más favorezca al
deudor.
CIRCULACIÓN DE
LOS TÍTULOS DE
CRÉDITO
 CIRCULACIÓN DE LOS TÍTULOS DE CRÉDITO

Artículo 389. Exhibición del título.

En este artículo se encuentra plasmada una característica que algunos autores conocen con el nombre
de Necesariedad y otros como Legitimación. Es necesario que el título esté en poder de quien lo va a
cobrar y mostrarlo al deudor para que le cumpla la obligación, debiendo ser entregado al deudor contra
el pago del mismo; y, como el documento incorpora el derecho y la obligación, en ese momento se
extingue la relación cartular o sea la relación jurídica que deviene del título de crédito.

Ahora bien, si el título es pagado parcialmente o en lo accesorio (intereses por ejemplo) entonces el
deudor debe exigir que ese pago se anote en el título para que se cumpla con el principio de literalidad,
sin perjuicio de que también se le extienda el recibo por ese pago parcial. La omisión de la anotación
del pago parcial en el título podría dar problemas frente a un tenedor de mala fe. Aún cuando en un
caso de esta naturaleza, el juez debería exigir que se le pruebe la verdad material.
Artículo 390. Efectos de la transmisión.

Este artículo complementa lo establecido en el artículo 385 en cuanto al concepto de los títulos de crédito. Como el
derecho está incorporado, materializado en el documento, la transmisión de éste implica la del derecho principal y,
por añadidura, los accesorios, bajo el principio jurídico de que lo accesorio siempre sigue la suerte de lo principal.

Artículo 391. Reivindicación o gravamen.

Los títulos de crédito tienen la calidad de bien mueble, que es su naturaleza jurídica. Por este motivo, son objetos
que tienen realidad concreta dentro del patrimonio de una persona. Si el titular o propietario de un título de crédito
pierde la posesión del título y otra persona pretende que le pertenece, habiendo adquirido por procedimientos
diferentes a las formas de transmitir los títulos, entonces el legítimo propietario pue3de reivindicar, o sea reintegrar,
recuperarlo a su esfera patrimonial mediante el ejercicio de una acción reivindicatoria, cuyo concepto es conocido en
el ámbito del Derecho civil. Así un bien mueble también se puede gravar mediante una garantía prendaria, en este
caso, el título viene a ser el bien que garantiza una obligación diferente a la que el título contiene.
Artículo 392. Ley de Circulación.

Característica contenida en este artículo: Circulación

Los títulos de crédito por su forma de circulación se dividen en nominativos, a la orden y al

portador. Es la persona que crea el título quien determina su ley de circulación desde el
momento en que se le asigna cualquiera de las formas antes mencionadas.

El título de crédito nominativo circula mediante endoso, entrega del documento y cambio en
el registro del creador. El título a la orden circula mediante endoso y entrega del
documento, y el título al portador circula por la simple tradición o entrega material del título.