enseñanzas - El largo camino de la enseñanza Recuerdos de un profesor
¿Cual profesor que tuviste en
primaria o secundaria, te trae buenos recuerdos? ¿Qué rescatas de ese profesor? No se puede desconocer que, a El Maestro lo largo de la historia de la pedagogía, el maestro ha sido y es el sujeto que lleva a la práctica grandes premisas pedagógicas. Siempre ha jugado un papel esencial. Históricamente se ganó un lugar en el que ha sido facilitador de la construcción del conocimiento y mediador en la consolidación de relaciones. Nos encontramos frente a las exigencias de un mundo globalizado, El Maestro preocuparse por generar una actitud frente al aprender implica propiciar la estructuración de unas competencias esenciales para desenvolverse en el mundo de la vida práctica. Dichas competencias están referidas al dominio del saber científico: saber cómo piensa la ciencia y cómo se pueda crear a partir de ella. A la apropiación de unas El Maestro competencias laborales, para responder técnica y tecnológicamente a las nuevas exigencias de producción. Y a la construcción de unas competencias ciudadanas que nos permitan vivir juntos en medio del respeto y la alteridad. Hasta hace una década, el El Maestro profesor era quien seleccionaba y ordenaba la información y llegaba a sus estudiantes. El docente jugaba un papel fundamental en el conocimiento del alumnado y, ante cualquier duda, los estudiantes acudían a él para ampliar o aclarar esas lecciones. Ahora, resulta mucho más rápido El Maestro y práctico acudir directamente a Internet. El gran inconveniente de todo esto es que el alumno se sitúa ante una inmensa cantidad de información que muchas veces es incapaz de asimilar, y debe realizar una constante selección, para valorar y distinguir los contenidos de calidad, lo que le obliga a la consulta de un criterio formado, en este caso el docente. El maestro está en la obligación de actualizar sus conocimientos y El Maestro desarrollar constantemente habilidades y actitudes que le permitan responder efectivamente a los retos, para inculcar a los estudiantes cómo saber, saber hacer y ser. Así, la formación en competencias, es a la vez un incentivo para su desarrollo personal. El maestro que ama la ciencia, el placer estético de sus explicaciones y la manera cómo se confrontan las hipótesis y las ideas para su refutación, tiene la obligación de desarrollar el pensamiento científico en sus estudiantes. Para los estudiantes, el maestro es un Darling ejemplo de vida, imagen de autoridad y Hammond respeto. Es decir, es un referente en la consolidación de su propia identidad. En consecuencia, el docente, «debe tener disposición para entender sus estrategias, necesidades, valores y defectos, reflexionar sobre su propia enseñanza y los efectos en los estudiantes, desarrollar una filosofía propia frente a la educación, apreciar la responsabilidad de servir positivamente de modelo para los educandos, aceptar cambios, ambigüedades y desaciertos». Grandes de la historia universal destacamos a: Erasmo de Rotterdam, Michel pedagogos Montaigne, John Locke, Jean Jaques Rousseau, Juan Enrique Pestalozzi, Friedrich Fröbel, Paolo Freire, Iván Illich, Domingo Faustino Sarmiento y Simón Rodríguez En el ámbito boliviano se destacan: Franz Tamayo, Felipe Segundo Guzmán, Jaime Mendoza, Elizardo Pérez y Óscar Alfaro, entre otros. Jesucristo el Juan 13,13 «Ustedes me llaman Maestro y Señor; y tienen razón, maestro por porque lo soy». excelencia Salmo 32,8 «Yo te instruiré, yo te mostraré el camino que debes seguir, yo te daré consejos y velaré por ti». Juan 3,2: «Este vino a Jesús de noche y le dijo: Rabí, sabemos que has venido de Dios (como) maestro, porque nadie puede hacer las señales que tú haces si Dios no está con él». Jesucristo el Jesús educa en el respecto a la maestro por dignidad de la persona: Jesús hace excelencia un examen crítico de las tradiciones y prácticas de la religión Judaica, que son contrarias a la dignidad humana, en ese tiempo, impidiendo la libertad y creando discriminación y opresión. “El sábado es para el hombre y no el hombre para el sábado”; es decir, el ser humano en su dignidad es el criterio para discernir la validez de todas las leyes y prácticas humanas. Jesucristo el La enseñanza de Jesús es maestro por incluyente e integral: Todos son excelencia convocados a la vida en el amor. Todas las prácticas que discriminan, que marginan, que esclavizan y que crean divisiones, llama al perdón, a la reconciliación, a perdonar y amar al enemigo. Jesucristo llama a todos a vivir en comunidad, como verdaderos hermanos en Cristo. Jesucristo el Jesús enseña a través de maestro por parábolas, la higuera que da excelencia fruto, la oveja perdida, el hijo prodigo entre otras, usa el estilo sapiencial, que cuestiona, levanta interrogantes. Lleva a la persona a reflexionar y a profundizar el sentido de los acontecimientos y permite que sus oyentes lleguen a sus propias conclusiones, de manera especial sobre el perdón y la misericordia. Jesús usa una pedagogía que va al corazón Jesucristo el y transforma la vida: En su vida y maestro por enseñanza, Jesús se revela plenamente excelencia humano: paciente, compasivo, sensible, misericordioso, solidario, con capacidad de perdonar, con corazón agradecido, con fe y esperanza. Son sentimientos y actitudes que brotan de Jesús Maestro en su actuar y enseñar. Sus palabras y actitudes despiertan en los corazones una nueva forma de vivir y de actuar humano, imprime nuevos valores y comportamientos en las personas que transforma el mal en bien, el egoísmo en el servicio y se abren al entusiasmo del amor a Dios y al prójimo. Jesús enseña con la presencia, con la Jesucristo el convivencia amando sin medida: La presencia y la convivencia de Jesús con sus discípulos y maestro por con el pueblo fueron un proceso educativo de excelencia anuncio del mensaje de la Buena Nueva y de preparación de sus discípulos para la misión. Jesús, a través del dialogo, crea preguntas en el corazón de la comunidad y de los discípulos, haciéndoles sacar de dentro de si lo que está igualmente escondido. Crea comunidad autentica y vive actitudes nuevas que posibilitan a los discípulos una nueva manera de ver y vivir la vida. Desde la cruz Jesús enseña el valor del sufrimiento, el cual asumió con amor y fidelidad al plan de Dios y la venció con la resurrección. Jesucristo el Jesús enseña la importancia de la maestro por dimensión transcendental de la vida: “No solamente de pan vive el hombre, excelencia sino de toda palabra que sale de la boca de Dios”, “¿de qué le sirve al hombre ganar el mundo entero si se pierde a sí mismo?” Jesús enseña que el deseo de felicidad que existe en el corazón humano tiene su respuesta en Dios. Toda vida humana tiene una dimensión transcendente. Jesús enseña a relacionarse con Dios, a través de la oración y de la contemplación. Enseña a cultivar una autentica Jesucristo el espiritualidad, necesaria para vivir los maestro por verdaderos valores de la vida, para curar excelencia las heridas del mundo y despertar lo que hay de bueno en cada ser humano. Jesús enseña que él es camino, verdad y vida. La importancia de educar en principios cristianos para el ejercicio comprometido de evangelizar. Los valores entendidos como los principios generales que deben guiar la conducta humana para vivir en amor y armonía, requieren de la influencia profunda de Dios en la inspiración del actuar coherentemente con lo que enseña el Evangelio. Jesucristo el Jesús enseñó con autoridad, porque manejaba las verdades maestro por absolutas y fue autentico; Con excelencia libertad, porque amó y trasmitió su sabiduría sin reservas; Y con fidelidad, no acomodo las verdades al gusto de los oyentes ni menguó en la lucha por el saber. Dice Mateo 7:28,29 “Cuando Jesús terminó de hablar, toda la gente estaba admirada de cómo les enseñaba, porque lo hacía con plena autoridad y no como los maestros de la ley”. Jesucristo el Su amor pedagógico (a diferencia de maestro por los maestros de la época) conmueve porque está hecho de vida: “Tomad excelencia sobre vosotros mi yugo, y dejaos instruir por Mí, porque soy manso y humilde de corazón; y encontraréis reposo para vuestras vidas”. Sea cual sea el contenido de la educación, se notan las convicciones del maestro, si pone su alma ahí, o es un mercenario (es decir, nuestro modo de ser influye en los alumnos, tanto si hablamos de ética como si de matemáticas, aunque de modo menor).